Un colegio llamado Hogwarts
Antes de la tormenta (Intermedio)
Se que es corto, pero les dejo esta pequeña parte, he estado metido con puro God of War Ragnarok, creo que no me falta mucho para acabarlo, así que más pronto que tarde estaré escribiendo como antes.
El tío y Sumika habían estado unos minutos haciendo algún trabajo, para luego conversar.
Sumika: ¿…los espíritus te dijeron algo sobre el lugar para entrenar?
Yousuke: Apenas sacar a la serpiente me dijeron dónde está y qué hacer para entrar a la sala, dicen que es un lugar que puede crear lo que necesitas, así que estaba pensando para ver si podemos encontrar algún libro.
Sumika: Así que dejaremos de seguir buscando en la biblioteca.
Yousuke: Bueno, creo que estamos perdiendo el tiempo por acá.
Sumika: Si, mejor vamos ahora, no es como si tuviéramos más tiempo luego. más con mi castigo ("realmente pensaba que estar en una escuela mágica sería emocionante, pero aun si he encontrado personas que podrían llegar a ser amigas, la verdad es que me estoy hartando")
Yousuke: Claro, de esa manera podrás saber también dónde está, pero antes, estaba pensando, no crees que sería bueno darle un nombre a la serpiente, no creo que sus antiguos dueños le hayan dado, y es una manera de ser más cercanos.
Sumika: …no es mala idea, …¿es macho o hembra?, …podría ser fido o laica.
Yousuke: Esos son nombres de mascota, dijimos que seríamos sus amigos.
Sumika: ("no quiero ser su amiga, pero bueno") Es verdad, que tal… Luisa o Eduard.
Yosuke: No suenan mal, habrá que preguntarle.
Sumika y el Tío recogieron sus cosas y salieron de la biblioteca donde encontraron justo llegando al Basilisco, el cual había regresado después de perseguir un rato a dos sinvergüenzas.
Sumika: ¿De dónde vienesss?
Basilisco: Essstaba explorandosss.
Sumika: …no hagasss cosssas rarasss.
Basilisco: Jamasss.
Sumika: ("como si me fuera a creer algo de ti") Buenosss, quería preguntarte algo.
Basilisco: Sssi, amigosss.
Yousuke: Creo que esss mejor que nosss llamemossss por nuessstros nombresss.
Sumika: Exssactamente, por essso quería preguntarte si tienessss nombre.
Basilisco: (les vio un momento con sus ojos sin expresión) Yo no necesssito nombresss, no hay utilidadsss.
Sumika: Eresss nuessstro amigo, asssi que necesssitas un nombre, losss amigossss se llaman con sus nombresss.
Basilisco: …si asi lo deseasss Ami—-
Sumiko: No, desssde ahora sssomos Jesssia y Ssseverus.
Basilico: … … sssi Jesssia y Ssseverusss.
Sumika: Exsscelente, ya que no tienesss nombre, ¿Cual esss tu sexsso?
Basilisco: ¿Sexssso? …yo nosss nacersss con sexsso.
Sumika: ("extraño, pero es un ser magico, capaz no necesita tener sexo para reproducirse") …no hay problema, entoncesss que nombre prefieresss, Luisssa o Eduard.
Basilisco: … … … Luisssa, me gusssta cómo ssse pronunciasss.
Yousuke: Luisssa sssera entoncesss.
Yosuke, Sumika y Luisa, fueron hacia la sala de los menesteres, al llegar el Tío le hizo un ejemplo de cómo entrar, ya que a simple vista parecía un muro normal, por lo que siguiendo las indicaciones de los espíritus y el pensamiento de buscar un libro o información sobre almas y viajes dimensionales, apareciendo de la nada una gran puerta doble. Al entrar encontraron torres y torres de varias cosas, candelabros, libros, notas, sillones, estatuas, etc. Como parecía interminable y laberíntica, Sumika tomó la decisión que sería mejor separarse para abarcar más espacio en el poco tiempo que tenían, por lo cual los tres (contando a la serpiente), siguieron diferentes caminos.
Sumika busco y busco entre juegos de mesa, papeles de tareas, informes de proyectos y libros viejos, pero nada encontraba. Siguió caminando sin problemas a perderse, después de todo el Tío sabría encontrarla, pero ya estaba más de una hora y no encontraba nada, "probablemente mi Tío tampoco encontró nada" "realmente vamos a encontrar algo en esta escuela" "seguimos atrapados, espero que Takafumi este bien", mientras Sumika se encontraba sumergida en pensamientos poco alentadores escucho algo tintinear constantemente, lo que le llamó la curiosidad y fue a ver.
Ella siguió por unos minutos los casi insonoros sonidos que solo se escuchaban por el silencio absoluto que había, caminando con el oído atento llegó así hasta un manojo de cosas metálicas, observando cómo algo se movía debajo de un candelabro. Al sacar con algo de esfuerzo el candelabro, encontró una diadema muy hermosa con una gran joya azul en el centro, esto le cambió el humor, "que cosa mas bonita, algo interesante en esta montaña de basura" "no creo que nadie me diga nada si me la llevo, parece estar olvidada" "pero porque vibra", al mirarla bien se dio cuenta que la diadema vibraba de cuando en cuando.
Sumika quedó tan interesada en querer tocarla, le llamaba la atención tener un objeto mágico que parecía sintiente, mas cuando vibraba más fuerte cuando se agachó y extendió su mano hacia la diadema, pero antes de agarrarla escucho unos pasos rápido en su dirección, viendo que llegaba el Tío con una cara seria.
Yousuke: No toques eso.
Sumika: (se quedó sorprendida por la mirada seria y el tono de voz del Tío, pocas veces le había hablado así) ¿qué sucede? (dijo mientras se ponía de pie)
Yousuke: Ese objeto es peligroso (dijo apuntando a la diadema, la cual seguía vibrando con fuerza)
Sumika: …¿cómo lo sabes?
Yousuke: Los espíritus me dieron una advertencia, me dijeron que estabas acercando a algo repugnante y peligroso, por lo cual decidí venir lo más rápido posible.
Sumika: ("me tiene constantemente vigilada" "entiendo" "en un mundo tan desconocido, con fuerzas tan extrañas") Gracias Tío, no debería intentar tocar cosas que no conozco.
Yousuke: Siempre hay que dudar, voy a destruir esto, es demasiado peligroso que este aca (el hizo un movimiento con la mano derecha y su brazo se convirtió en un equivalente a uno de los del dragón divino de las flamas).
Sumika: Whoa (ella se sorprendió, algo normal, era diferente verlo en persona que verlo en la proyección) (dio unos paso atrás para darle espacio al Tío)
A pesar de que el brazo del dragón estaba en llamas, no se sentía calor alguno. El Tío extendió su brazo hacia la diadema, la cual vibraba con tal fuerza que daba pequeños saltos, pero justo cuando con uno de sus dedos la iba a tocar, escucho un leve susurro el cual le indicaba algo.
Sumika vio como justo cuando Yosuke iba a tocar la diadema, se quedó quieto y luego se apartó, volvió su brazo derecho a la normalidad y luego sacó un anillo de su bolsillo espacial, el cual comenzó a iluminar con luz oscura, y de pronto una voz profunda escuchó, aunque ella no entendía nada, parecía hablar en una lengua extinta.
Espíritu desconocido: (todas las otras voces de los otros espíritus se callaron) Por fin te encuentro, por fin me escuchas, por fin podemos hablar.
Yousuke: (con un rostro algo nervioso, ya que un espíritu que le hable con tanta claridad significa que no es cualquiera) ¿Quién eres?
Espíritu desconocido: El que espera al final de toda aventura, el que termina con el dolor, el que da paz, el único justo, la muerte.
Yousuke: (sus ojos se abrieron de golpe, pero rápidamente volvieron a su normalidad, al fin al cabo, él había hablado con los espíritus de la luz y la oscuridad, no sería raro que la muerte les hable) Ya veo, ¿a qué debo su presencia?
Muerte: Algunas cosas, primero quería conocer al hombre que puede hablar en lengua universal, algo que se ha perdido hace milenios, así como también al que sin querer está haciendo que todo vuelva al carril correcto.
Yousuke: … ¿Qué quieres decir con eso?
Muerte: Esa diadema, el lago, el anillo y otros más. Herramientas inútiles que un mortal utiliza para escapar de mí, contaminan el mundo natural realizando pecados.
Yousuke: Ya veo, por eso me pedían que los destruyera, pero has venido para hablar de algo mas.
Muerte: Acertada conjetura, primero mis felicitaciones, a pesar que me interesaba que estas cosas sean destruidas, te me adelantaste, por lo cual en agradecimiento te daré un consejo. Cambia el mundo de los magos de una vez, mis hermanos se están cansando de esperar tu decisión por lo cual en cualquier momento te darán un ultimátum, el cual no te gustara. Sabes lo que pensamos de los magos, así que no dudaran en obligarte a ser un destructor, así que mejor actúa ahora que tienes libre albedrío.
Yousuke: Yo, no sé, …no soy alguien que pueda hacer algo así.
Muerte: Ya lo has hecho, y varias veces. No quiero obligarte, pero no es algo a qué discutir. Como vas a destruir esta diadema corrupta, te dire algunas cosas, el velo de la muerte puede ser el único camino para irse, pero necesita algo más, capaz los tontos que quisieron huir de mi completen tu conocimiento. Uno creó una piedra que protege la vida, otro creó una magia para resucitar a los muertos y el último es el que más ha destruido su alma. Suerte en tu aventura pequeño amado y desventurado.
El Tío quedó un momento reflexionando sobre lo que había pasado, mientras que Sumika sólo le observaba, sabía por su expresión que lo que sea que había estado hablando con la voz, era algo muy serio. Cuando el Tío tomó una decisión simplemente convirtió su brazo otra vez y destruyó la diadema con un solo toque, luego le dijo Sumika que llamara a la serpiente Luisa, y por último le contó a Sumika lo que había pasado.
Sumika: Entonces ataquemos, de una vez, veremos luego que hacer. Tu más que yo, sabes que no podemos dudar ante ellos.
Yousuke: Yo, no quiero lastimar a las personas.
Sumika: (ella lo abrazó con fuerza y le dijo), yo tampoco, pero no es nuestra decisión. Pase lo que pase…
Yosuke: Estaremos juntos.
