Capitulo IX:

Una Verdad

-"¿Estás listo para irnos?" –le pregunto Tenshi a su primo.

-"Sí... sólo espera un poco"

El pequeño guardo una fotografía, en que estaban él y su antiguo protector Arvedui, en la maleta... hoy sería el día que volvería a su natal Japón, tenía un presentimiento de que todo sería diferente, viviria con su prima Tenshi... su familia.

-"¿Y adonde viviremos Tenshi?" –pregunto Hinode.

-"Pues en un lugar cercano al que antes vivian nuestras madres" –respondio la joven.

-"¿Cerca de ese templo?"

-"Bueno aunque ahora no está, me parecio buena idea estar cerca de nuestras raices" –dijo sonriendo.

Tenshi cerró la última maleta mientras buscaba los pasajes para Tokyo... por fin abandonaría una ciudad que no es la suya, pero eso sí, una que la trato muy bien.

-"Estoy listo" –dijo Hinode.

-"Muy bien... vamonos"

Doce personas estaban reunidas en una periferia circular, estaban esperando a su jefe, aunque todos ellos reunidos tenían la misma influencia de mando. Pero ahora sólo ellos estaban reunidos para una información que los ha tenido muy alterados.

En ese momento aparecio Robert De Bruce.

-"Las estrellas estan muy alteradas, ¿es que acaso la "profecia del último de los oraculos" se está cumpliendo?" –pregunto el italiano Enzo Donati.

-"No te podría engañar, si es que las estrellas dicen la verdad" –respondio Robert.

-"Los clanes de magos de Escocia se están alterando mucho... no sé hasta cuando pueda controlarlos" –dijo Ian McGrey.

-"La reunión general se llevara acabo en los proximos días" –dijo Helmut Kohl- "¿Ya tienes dispuesto lo que le diras a los demás?"

-"Sé que Robert tiene las palabras precisas para los demás miembros" –dijo Sofia Breyner respondiendo por De Bruce- "Aunque estamos pasando por unos de los peores momentos desde la desintegración de la Asambla de Artes Magicas hace siglos"

-"Está vez es diferente" –dijo Sean O´Casey- "No perderemos nuestra organización, si no perderemos nuestros poderes e incluso nuestros sentimientos"

-"Hay que hacer lo posible para ayudar al Hijo de la Luz" –acató Walter Scott.

-"Desgraciadamente no podemos intervenir directamente en la Batalla" –dijo pensativo Robert.

-"Tampoco podemos permitir que el Concilio de Oriente luche solo" –dijo Alonso Ercilla.

-"El Concilio de Oriente tampoco puede intervenir directamente" –volvio a decir Robert.

-"¿Y que haremos?" –pregunto Jean D´Gaulle- "Sentarnos a esperar que muera ese chiquillo, su protector acaba de morir, y Los Elegidos tienen otra misión"

-"El tiempo de Arvedui ya se había acabado... pero aún así... " –Robert hizo una lijera pausa- "Le podremos enviar otro protector"

-"Hablas del recolector de cards" –dijo Winston Reed- "Acaso ese niño es un Elegido"

-"Él es el unico que puede identificar de inmediato al Hijo de la Oscuridad, y es muy importante para..."

-"...la conección con todo el Occidente" –interrumpio Oliver O´Neill a Robert.

-"No sé como decirselo, pero sé que debo enviarlo" –dijo Robert- "Tiene una vida normal, y no quiero interrumpirlo"

-"Pero si no lo haces, podría perder sus sentimientos, y como todo el mundo, seria un ser sin alma" –dijo Sofia- "No crees que sería peor dejarlo aquí"

-"Aunque el hijo de Huhg O´Neill renuncio a mi clan, aún así tiene la misma sangre que mis antepasados, a ese chico yo considero que pertenece a mi cazta" –dijo O´Neill- "Como todo O´Neill, John Tolkien entenderá que su lucha es justa"

-"Sakura..." –dijo Kero moviendo al cuerpo de su amiga- "Ya es muy tarde, es hora de que te levantes"

-"No molestes Kero"

-"Sakura, es muy tarde"

-"Dejame dormir un minuto más" –dijo revolcandose entre las sabanas y cubriendo su cabeza con una almohada.

-"Sakura, hoy tu papá y tu hermano salieron, tienes que hacer los deberes de la casa" –seguia insistiendo el guardian.

La chica continuaba durmiendo, al parecer el aire de Tomoeda aumentaba el sueño, ya que en Inglaterra se levantaba muy temprano, hasta antes que él! Kero no tenía más remedio, debía despertarla a como de lugar o no haría los deberes y su hermano se enfadaría... tenía que aplicar su tecnica.

El pequeño guardian tomo todo el aire que sus pulmones pudieron resistir y se acerco al oido de Sakura.

-"¡¡¡¡SAKURA DESPIERTA!!!!" –grito con todas sus fuerzas.

-"¡¡Ahhhh!!" –grito la chica saltando al otro lado de la cama- "¡Kero!"

-"¿Que?"

-"¡¡Estás loco!! como se te puede ocurrir gritarme así" –dijo con una vena en su frente- "¡Casi me matas del susto!"

-"Vamos... te estoy haciendo un favor, o acaso quieres que tu hermano te reproche por no ordenar la casa"

-"¡Esa no es una escusa!" –dijo enfadada- "Podrías haber sido más sutil"

-"¡Trate de ser sutil durante quince minutos!" –le reprocho el guardian.

Sakura guardo silencio, no tenía forma de contrarrestar el ataque de su guardian.

-"Bueno..." –tosio un poco- "Tengo que ordenar la casa... hoy Tomoyo vendrá a visitarnos" –suspiro- "¿Me ayudas Kero?"

-"Pero es que hoy quería..."

-"Me ayudas o no comes" –le reprocho Sakura mientras buscaba ropa para cambiarse.

-"Está bien, te ayudare" –suspiro resignado el pobre guardian.

-"Voy al baño, regresaré pronto"

Así la chica fue a tomarse una buena ducha y Kero se diriguio a la cocina a tomar un "pequeño" refrigerio.

-"Creo que un poco de esto estara bien" –decia mientras orgeteaba en el refrigerador- "¡Oh! y tambien algo de esto... mmm.... ¿que más? a sí, tambien algo de esto"

Kero llevo una cantidad de alimentos que sólo él podía comer aunque por su tamaño, cualquiera pensaria de que no es verdad.

-"Mmm... eto heta ico" –se saboreaba Kero con su refrigerio aún en su boca.

-"Listo Kero..." –se aparecio Sakura en la cocina- "Es hora de comenzar el día"

Rato después...

-"Ufff... la lavadora ya está trabajando Sakura, y la ropa limpia está doblada" –dijo Kero un poco cansado- "¿Que vas a hacer para el almuerzo?"

-"Bueno vamos a ver"

Sakura comenzo a ver el refrigerador (disculpen por hablar tanto de eso, es que tengo hambre) las verduras y demás...

-"Creo que haremos okonomiaky" –dijo la chica.

-"¡Si!" –dijo Kero muy alegre- "Y al estilo sureño"

-"Claro, faltan algunas cosas... voy a tener que ir a comprar algunos ingredientes" –dijo Sakura mientras tomaba su mochila- "Vas a quedarte solo un momento, trata de no hacer nada malo"

-"No soy un chiquillo como para hacer eso" –dijo con sus brazos cruzados- "Recuerda que vendrá Tomoyo"

-"Nos vemos" –dijo Sakura cerrando la puerta.

Ya había terminado su compra y ya se dirigia a su casa, estaba feliz de estar de nuevo en la tranquila ciudad de Tomoeda, donde nada malo podía suceder...

Estaba caminando y llego junto al Templo Tsukimine, No sabía que sucedia, pero algo raro había, algo raro que no le gustaba.

-"¿Que habrá sucedido?" –se pregunto Sakura.

Ella entró al templo sintiendo un aire muy frio a su alrededor. No se detubo y continuo, camino directo hasta el Árbol de Cerezos, había algo extraño en ese árbol. Colco su mano con cuidado y...

-"Está frío" –dijo sorprendida Sakura sacando la mano de inmediato.

El Árbol de Cerezos estaba frio, era que algo malo le había sucedido al espiritu que vive adentro, el árbol no tenía la misma energía de antes, estaba más débil.

-"Tambien lo siente señorita Sakura" –dijo una voz.

-"Señorita Kaho, no sabía que estaba aquí" –dijo soprprendida.

-"Llegué hace varios días" –dijo Kaho Mizuki mirando el árbol- "El espiritu parece estar cansado"

-"Sabe que sucedio"

-"No lo sé... pero al parecer el espiritu lucho por algo, pero fue vencido"

-"¿Se mejorara?"

-"No te preocupes Sakura, se mejorará, lentamente pero lo hará"

-"Que bien" –sonrie.

-"Eso espero" –pensó Kaho preocupada.

Sakura siguio su camino, estaba un poco preocupada por la forma en que se veia la profesora Mizuki... ojalá la pudiera ayudar.

-"Tal vez si mañana le ayudo con las cosas del templo"

La joven seguia pensando caminaba sin fijarse que había adelante, estaba en el parque pinguino cuando... choco con un cuerpo, no cayó pero con la persona con quien había chocado le tomo con fuerza el brazo.

-"¿Está bien señorita?" –le pregunto el hombre con quien había chocado.

-"Si, no es nada" –dijo ella levantando la vista.

Se encontro con un hombre que tenía puesto un terno, y tenía unos lentes oscuros.

-"Disculpe señorita" –se diculpo el hombre.

-"No fue mi culpa... " –dijo Sakura- "No estaba mirando el camino"

-"Bueno..." –sonrio- "Soy Zh... Junichiro Koizumi" –dijo con respeto.

-"Yo soy Sakura Kinomoto" –saludo un poco extraña ante el nombre del sujeto.

-"Señorita Kinomoto, ¿me podría ayudar? no soy de aquí y estoy un tanto perdido... sabe donde puedo encontrar la calle Heisei"

-"Claro señor Koizumi... ve la calle que está en frente" –el aludido asistio- "Esa es la calle Showa, detrás de ella se encontra la calle Heisei"

-"Muchas gracias"

-"Por nada" –sonrie- "Fue un placer ayudarlo señor Koizumi"

-"Es una jovencita muy gentil y amable..." –sonrie- "Gracias nuevamente... adios señorita Kinomoto"

-"Adios señor Koizumi" –se despidio ella continuando su camino.

-"Nos veremos Sakura" –murmuro para sus adentros Junichiro Koizumi, que en realidad era Zhao Lushan- "Casi tengo todo listo, amable jovencita" –dijo regresando la vista hacía Sakura mistras la veia alejarse.

-"¡¡Ya llegue Kero!!" –dijo Sakura mientras dejaba las compras de ese día en la mesa- "¿Kero?"

La muchacha comenzo a buscar, era extraño... ¿donde se metio Kero? subio al piso asuperior y continuo buscanolo hasta que llego a su habitación.

-"¿Kero?" –dijo ella al ver a su guardian en su forma original cerca de la ventana.

-"Sakura..." –dijo volviendo a su forma de peluche- "¿Estás bien?"

-"Claro que estoy bien... si tan sólo fui a comprar"

-"No encontraste nada raro" –pregunto Kero.

-"Sólo que el Árbol de Cerezos del Templo Tsukimine está algo extraño" –respondio la chica- "Y nada más... aparte de ayudar a un amable señor a encontrar una calle"

-"Esta bien" –suspiro.

-"¿Que ocurre?" –pregunto ella confundida.

-"Es que me parecio haber sentido algo extraño..." –murmuro Kero- "Pero eso ya no importa... tengo hambre"

-"Vaya es lo único en que piensas, en comer" –suspira- "Será mejor que prepare las cosas"

Sakura baja a la cocina para preparar el okonomiaky –al estilo sureño- sin haber prestado mucha atención a lo que Kero le había dicho, tambien tenía que esperar a Tomoyo... pero su guardian del Sol seguía mirando la ventana de la habitación de Sakura.

-"Esa presencia... es la misma que sentí antes de que todo comenzara"

Ciertamente esa presencia era de alguien poderoso, la había sentido ya antes, si ya lo recordaba semanas antes de que llegara la reencarnación de Oz la había sentido, fue el mismo día en que los fenomenos naturales causaron tantos lios y tantos desastres, el día en que toda la naturaleza se volvio loca.

-"Tal vez haya sido un hechizo" –se dijo para si Kero.

-"¡¡Kero necesito que me ayudes!!" –grito Sakura desde la cocina.

Tenshi Sora e Hinode Akari ya habían pisado las tierras de donde venian sus madres. Las tierras de Japón, ya estaban en Tokyo.

Tenshi por su parte estaba muy feliz de estar en este país... además que un amigo que había conocido en Londres le vino a ayudar con la mudanza.

-"Y bien Touya... ¿cuando llegara Yukito?" –pregunto la joven de ojos dorados.

-"Él está en un templo cercano a la Torre de Tokyo... ya vendrá" –respondio Touya.

-"¿Y Nakuru y Mike?"

-"Bueno, Nakuru está con "su primo" al igual que Mike... están terminando sus mudanzas"

-"Te agradesco mucho que nos estes ayudando" –dijo Tenshi con un gran sonrisa.

-"Para eso están los amigos Tenshi" –¿sonrio?

-"En verdad te lo agradesco... me imagino que deberias estar haciendo otras cosas en estos momentos en tu casa"

-"No te preocupes, tengo a algunos ayudantes en la casa" –dijo Touya refiriendose a Sakura y a Kero.

-"Está listo el jugo" –dijo Hinode apareciendo en la sala con unos vasos y una gran botella.

-"¿Quieres un poco?" –le pregunto Tenshi a Touya.

Los dos se sentaron y el niño llenó tres vasos para darle uno a su prima, al amigo de su prima y para él.

-"Mmm... haces un jugo exquisito pequeño" –dijo Touya saboreandolo.

-"Hinode tiene muchas habilidades" –asistio Tenshi- "Tambien sabe cocinar muy bien"

-"Si así es" –dijo Hinode sonriendo.

-"Bueno, mi hermana tambien cocina muy bien" –murmuro Touya.

-"Hablando de eso... ¿Comó está Sakura?" –pregunto el pe queño de 10 años.

-"¡¡Kero cuantas veces te debo decir que no hagas eso!!" –grito muy enogada Sakura.

-"¡Es que no me podía resistir!" –dijo sufrido el guardian- "Se veia muy rico"

-"Podrías haber esperado a que terminaramos" –le dijo enfadada.

Mientras Sakura reprochaba a Kero por haberse DEBORADO la torta que se encontraban haciendo ella y Tomoyo –que había llegado para hacer está torta- para la pequeño picnic que habían planeado para encontrarse con sus amigas Chiharu, Naoko y Rika.

Tomoyo tenía una inmenza gota en la cabeza viendo discutir a Sakura y a la "gran bestia del sello", tenía que hacer algo como para calmar las tensiones.

-"No te preocupes Sakura" –dijo Tomoyo calmando a su amiga- "Aún tenemos mucho tiempo para hacer otra torta"

-"Esta bien" –suspiro- "Kero, te quedaras sin tu porción"

-"¡¡¿QUE?!!" –grito el guardian muy asustado.

-"Kero..." –le susurrro Tomoyo- "Si quieres te guardo una porción"

-"¡Gracias Tomoyo! por eso te quiero" –dijo el guardian muy alegre mientras la aludida sonreia.

El jovencito llegó un tanto extrañado por el paisaje a su alrededor, ya antes había estado en esté país, o no sabría hablar en japonés, pero aún así se confundia... era un lugar muy extraño, muy diferente a la cultura a la que estaba acostumbrado y a la cuál pertenecia... porque tenía que estar aquí!!

-"¡Diablos!" –dijo enojado- "Por que tengo que estar en este país, no tengo nada que ver con esas locas profecias"

Su antiguo maestro le insistio tanto, le había casí implorado, pero él... él quería estar en su país natal! Quería estar en su Inglaterra! Por que un chico de tan sólo 12 años tenía que estar en un país así!

Estaba verdaderamente enfadado, por que... por que...

Suspira.

Más que enfado, tenía pena... se sentía triste, la había pasado de maravillas con ella, pero ahora que se reencontraron se tubo que separar de ella.

-"Por que no te quedas un poco más" –había dicho la jovencita entre lagrimas.

-"Tengo que hacer algo allá, te juro que me gustaría estar contigo... por favor, no llores" –dijo el tocandole con la mano su mejilla.

-"Es que... es que..." –dijo ella poniendo su mano en la de él- "No lo sé, pero tengo el presentiminto de que algo malo va a suceder"

-"Te juró que me cuidaré" –le sonrio mientras le sacaba una lagrima.

-"Ahora que todo está tan claro, ahora que sé que te amo... quiero estar más tiempo contigo, estube por mucho tiempo alejada"

-"Joanne, cuando se me presente la oportunidad de regresar, lo haré" –sonrie- "Tú eres la persona más especial en mi vida, y esto que haré, es por tí"

Sacudio con fuerza su cabeza, no quería recordar ese momento... no quería ver como ella lloraba después de haberse despedido, Harry estaba ahí tambien despidiendose de él, tampoco había compartido el tiempo suficiente con su mejor amigo de la infancia. Esperaba que Harry supiera que hacer con ella, como ayudarla a entender algo sin explicación para él.

Tenía que olvidar ese momento, debía hacerlo... ahora tiene que encontrar a otras personas, y la primera de ellas era Sakura Kinomoto.

-"Muy bien John" –se dijo a si mismo suspirando- "A comenzar el trabajo"

La ciudad de Tokyo estaba más tranquila, los enviados del Concilio de Hechiceros de Oriente ya se habian retirado, ahora podría tener todo totalmente listo, y sin distracciones ya que Yasha Jigoku se había retirado a la región de Osaka... aunque sabía que volvería.

-"Necesito un lugar para empezar" –dijo Zhao Lushan poniendo su vista en toda la ciudad.

Estaba mirando la ciudad desde su lugar favorito por elección, la Torre de Tokyo. Quería un lugar capaz de soportar una pelea sin que las personas de la ciudad se dieran cuanta de lo sucedido... miraba hacía abajo, nada, no había ningún lugar para su gusto.

-"Es lo único que me hace falta" –dijo sentandose en una banca cercana.

Se sintío un poco exausto, desde que salio de Los Himalaya –causado por apariciones de enviados del Concilio- ha tenido que estar en movimiento constante, oculatandose tanto en Tomoeda como en Tokyo... aunque tenía que aceptarlo, Tomoeda era un lugar muy tranquilo para un buen y relajado descanzo. Y los más gracioso era que se había topado con Sakura Kinomoto ese mismo día.

Pero haberla visto hizo que sintiera algo raro... conocido, pero por que por ella.

-"Es alguien muy amable como para matarla" –suspiro- "Sólo le quitare las cards, no quiero matarla... es alguien muy fragil como para hacerle algun daño, pero aún así se siente que tiene magía muy poderosa"

Empezo a mirar de nuevo el paisaje de la Torre de Tokyo, aún tratando de encontrar el lugar que soportara una expulsión de poderes, y que despistara a las personas de la ciudad... un lugar alto que no puede subir nadie, un lugar como... como en donde se encontraba en ese momento.

-"En la Torre de Tokyo" –dijo sonriendo- "Es el lugar perfecto"

El día en Tomoeda estaba precioso, el clima estab un poco frio pero eso no importaba... todas estaban reunidas como siempre y eso era lo que importaba. Unas muy buenas amigas disfrutando un pequeño picnic en el Parque Pinguino, a los pies de los árboles.

-"No sabes que gusto nos da de que ustedes hayan regresado" –dijo la joven Rika Sasaki a sus amigas.

-"A mí tambien me da gusto" –dijo Sakura muy animosa tomando una rebenada de pastel.

-"¿Y cuanto fue lo que vieron allá en Occidente?" –pregunto muy animada Naoko- "No supieron nada de algún fantasma o algo parecido"

-"Sólo personas muy extrañas" –respondio Meiling.

-"Tal vez hayan sido extraterrestres" –dijo Naoko con estrellas en los ojos.

-"Pues... yo no creo que hayan sido extraterrestres" –dijo Tomoyo con una gota de sudor en la cabeza al igual que las demás.

-"Pero aún así hubieron cosas extrañas ¿o no?" –volvio a preguntar Naoko.

-"Una que otra" –dijo Sakura tratando de disimular.

-"Bueno..." –suspiro Chiharu- "No tienen otra cosa que contar que no sean "fenomenos sobrenaturales""

-"Pues claro que si" –dijo Tomoyo- "Vimos cosas muy hermosas en Inglaterra"

Muy animosas las chicas que habían viajado al lado occidental del Mundo, un lugar de Inglaterra, Londres la capital inglesa.

Les hablaron de las hermosas experiencias, lo lugares digno de reyes, sitios como el Big Ben en los Edificios del Parlamento Britanico, los amplios parques como el Regent´s Park, los cruzes del río Támesis como el Puente de Londres, la fortaleza conocida como la Torre de Londres y el gran Palacio de Buckingham, lugares casi misticos como la Abadía de Westminster, el hermoso centro comercial de la capital y sus pequeñas aventuras en la ciudad... claro que omitiendo "esas" partes.

-"Esa es toda la historia" –termino de contar Tomoyo.

-"Vaya, en serio entraron al palacio de la reina" –pregunto Chiharu.

-"Sólo pasamos un rato dentro del Palacio de Buckingham..." –dijo Sakura con una gota en la cabeza recordando ciertos momentos- "Nada que haya causado mucha importancia, pasamos desapercibidas"

-"Tú crees" –le murmuro Meiling a Sakura sin llamar la atención de las demás- "Recuerda lo que sucedio con el principe"

-"Bueno... je je" –dijo Sakura mientras su gota crecia, y ella se llenaba de verguenza.

La joven maestra de cartas recordo con mucha verguenza lo sucedido en el palacio... no fue su intención que el florero le cayera encima al principe Guillermo, y su traje se arruinara por completo!! Si no hubiera sido por la actuación de Eriol, la Guardia Real le hubiera caido encima a Sakura sin ninguna concideración. La madre de Eriol –que estaba junto al principe Carlos- le ayudo a su hijo a contener a los guardias para que estos se retiraran.

-"Gracias a Dios que no estaba la Reina" –se dijo la chica para sus adentros.

-"Sakura, reacciona" –le dijo Rika llamandole la atención- "¿En que piensas?"

-"Nada..." –dijo la aludida.

-"Las vacaciones ya se nos estan terminando... que mala suerte que tengamos que regresar a la secundaria" –dijo Chiharu suspirando.

-"Bueno... será como los demás años" –dijo Tomoyo tomando un poco de jugo.

-"Aún así ha sido un magnifico tiempo"

Fujitaka Kinomoto esta lavando tranquilamente los platos que había ocupado para su almuerzo. Se sentía relajado de que su única familia estubiera con él, estaba muy contento de que su hija Sakura y su hijo Touya lo estubieran acompañando, aunque en ese momento no se encontraban en la casa, pero aún así estaba sumamente feliz.

Se sentía un poco incomodo cuando tenía que cenar sólo durante el viaje de sus hijos, pero había una presencia que lo relajaba, aunque no la veia, la sentía y eso lo llenaba de alegría.

Aunque ahora sus hijos estan en Japón, de nuevo tubo que cenar solo, claro que tubo que sacar a Sakura para que se reuniera con sus amigas.

-"¿Estás seguro que estaras bien?"

-"Si, no te preocupes" –le había dicho a su hija- "Ve con tus amigas que te deben estar esperando"

-"Pero es que no te sentiras solo... me gustaria acompañarte"

-"Descuida" –sonrio.

-"Esta bien..." –dijo Sakura sonriendole a su padre- "Pero me vas a prometer que vamos a tener todo un día juntos"

-"Te lo prometo"

-"Adios papá"

-"Adios" –dijo Tomoyo que estaba junto a Sakura.

-"Adios pequeñas"

Fujitaka ahora se secaba las manos y se diriguia al refrigerador para comer un postre que había guardado.

¿Que extraño? El postre había desaparecido. Estaba seguro que había hecho cuatro, uno para Sakura, Touya, él y uno más ya que casi siempre desaparecia alguno. Seguramente Sakura le había convidado a Tomoyo, pero aún así dería haber quedado uno.

-"Vaya desde ahora tendre que empezar a hacer cinco" –se dijo sonriendo.

Mientras en la habitación de su hija Sakura, Kero se había quedado dormido con una cuchara entre sus manos al lado del oso gris de Sakura que tan cariñosamente llamaba "Shaoran-kun".

Kero comenzo a despertarse y comenzo a resfregarse sus ojitos aún tenía algo de sueño pero debía despertarse.

Comenzo a agitar sus alas y se movio a la ventana, miro un momento el Sol y después miro el patio de la residencia Kinomoto. Se dio cuenta de que había un sujeto vestido de terno y con lentes oscuros que estaba dejando una carta en el cajón del buzón y se hiba tranquilamente por la calle.

-"¿Pero quien es ese?"

Tomoyo, Meiling y Sakura se diriguian camino al hogar de está última... había sobrado algo de pastel y otras cosas y Sakura había decidido llevarselas a su padre y obviamente a Kero. Estaban las dos muy felices por ver a sus amigas y difrutar un momento con ellas.

Ahora la joven maestra de cartas queria pasar un rato con su padre y con su querido hermano, que aunque la molestaba mucho, sabía muy en el fondo que la amaba. Tambien su guardian que jamás la abandonaba, esa era su familia, la mejor de todas para ella. Incluso habeses sentía la presencia de Nadeshiko, su madre.

-"¿Crees que Kero espere hasta que lleguemos?" –pregunto Tomoyo poniendose el dedo en su mentón.

-"Ese muñeco de felpa es un glotón" –dijo Meiling sonriendo- "Aunque que su forma verdadera es soprendente"

-"Vaya has aceptado que Kero es un gran tipo" –dijo riendo Tomoyo.

-"Vamos lo conozco y puedo decir que habeses es útil y otras una pesadilla" –sonrio Meiling.

En ese momento una pequeña ave parecida a un halcón pero de color totalmente blanco y de ojos azules llego donde las chicas, y empezo a mover sus alas llamandoles la atención, aterrizo lentamente y comenzo a piar.

-"Que bonita ave" –dijo Meiling tratando de acercarsele para examinarla.

-"¡No te le acerques!" –le grito Sakura.

-"¿Que sucede?" –pregunto Tomoyo.

-"Esa no es una ave común" –dijo Sakura mirandola- "Pero aún así..."

De repente el ave alzo el vuelo y comenzo a diriguirse hacía el Parque Pinguino... Sakura de inmediato la comenzo a seguir y detrás de ella un poco confundidas estaban Tomoyo y Meiling siguiendola.

-"¡Sakura espera!" –le gritaba Tomoyo.

-"No puede ser" –seguia corriendo sin escuchar a su amiga- "Es imposible, no puede estar aquí, no puede ser, pero aún así..."

La chica se abrio paso entre las ramas hasta que encontro al ave en las manos de un chico.

-"Que bueno que no volvamos a ver" –dijo John Tolkien sonriendo.

-"Pero que..." –dijo Meiling al ver al chico.

-"¿John?" –pregunto Sakura sorprendida- "¿Que haces aquí?"

-"Bueno..." –dijo el chico acarisiando al ave mientras está se transformaba en una card- "Es una larga historia... pero resumamos que te estaba buscando"

-"¿Estás seguro que quieres quedarte un tiempo más aquí?" –le pregunto Jasón.

-"Tengo que ayudar en algunas cosas a Kaho" –respondio Eriol- "No me ire hasta más tarde, aún hay "

-"Muy bien adios Eriol, nos veremos" –se despidio Jasón de su amigo.

-"Esta bien adios" –se despidio el joven inglés.

Cada uno de los dos tomo sus respectivos caminos, más relajados al ver que Kaho Mizuki estaba en perfectas condiciones. Ya habían ayudado los dos lo suficiente en el Templo.

Para Jasón el día ya había terminado e iria a su hogar para relagarse un poco... pero Eriol se había quedado en el Templo Tsukimine no sólo por seguir acompañando a Kaho, si no para tambien para investigar lo sucedido en con el Árbol Sagrado de Cerezos.

El joven inglés se acerco lentamente al Cerezo y lo tocó con su mano, aún estaba un poco frío pero se estaba recuperando, lentamente claro pero se estaba recuperando.

-"Que bueno que no le sucedio nada malo" –dijo sonriendo.

Lentamente recordo un día de su vida como mago Clow, en donde ocupo la card "Flor" para que un árbol de cerezos le aparecieran sus aromaticos retoños. Recordo a Kerberos que le había preguntado por que lo había hecho... un árbol que no daba flores en primavera, era por que estaba muriendo, no le agradaba esa idea y muy decidido le pidio a su card que el cerezo floreciera. Fue ese mismo día en que la pequeña Sakura lo había visitado, su verdadera sucesora y la única que debía tener las Cartas Clow.

Era fantastico recordar algunos pasajes pasados, ese lo había recordado el día que decidio que ya era hora de que Kaho regresara a Tomoeda para ayudar a Sakura en el Juicio Final... y lo gracioso es que el Árbol de Cerezos del Templo, era el mismo que había hecho florecer.

-"Bonito árbol" –había dicho Oz Wallace un tanto serio tocando el cerezo.

-"Es uno de mis favoritos" –dijo sonriendo Clow.

Una pequeña flor de cerezo empezo a caer al suelo, Oz alcanzo a tomarla con cuidado con sus manos y la acerco a su nariz para oler su aroma.

Había sonreido, sin que Clow entendiera, hace unos momentos estaba muy serio pero ahora sonreia.

-"Es increible lo que algo tan pequeño puede ser tan hermoso" –dijo Oz- "Las flores de cerezo son muy hermosas" –dejo la flor clavada en su vestimenta- "Recuerda siempre que ella va a cambiar muchas cosas tanto para tí como para mi, y para muchos otros... no nos va a dejar de sorprender"

-"Hablando de sopresas" –interrumpio Clow- "¿Aún estás seguro de crear guardianes?"

-"Si estoy totalmente seguro" –respondio poniendose serio.

-"Es un gran riesgo... ¿por que quieres hacerlo? ¿alguna razón especial?"

-"Si estoy seguro" –respondio serio- "Es una razón poderosa... sé que es peligrosa y que ningún hechicero lo ha podido lograr con vida, pero digamos que es un reto" –dijo Oz volviendo a sonreir- "Oh acaso ya olvidaste una de las razones de la creación de Kerberos y Yue... yo sé lo que sucedio antes de mi llegada"

-"Bueno eso fue hace tiempo, prefiero olvidarlo" –sonrio un poco melancolico- "Pero fue interesante ver la cara de él y la de los demás cuando cree a Yue y Kerberos... pero tambien lo decidi hacer por custodiar al Libro de Clow y las Cartas Clow, la apuesta surguio después"

-"Es muy dificil crear guardianes" –dijo Oz- "Pero estoy decidido a hacerlo"

-"Vamos, no es tan dificil" –sonrio- "Hasta un niño de once años podría hacer unos guardianes, claro que con el debido poder y con la debida dirección"

-"Deja de bromear, esto es algo serio" –le reprocho- "Es peligroso incluso para mí, auqnue soy el mago más poderoso de occidente, no te supero... por eso he dicidido que la naturaleza me preste un poco de su ayuda, por eso voy a hacerlo en un lugar con magía ancestral concentrada"

-"¿En los dólmenes?" –pregunto Clow- "Sé que poseen magia ancestral concentrada causada por acción de los druidas... pero aún así las cosas saldrán bien, vamos si no son guardianes de protección"

-"Aunque no voy a ocupar ese tipo de magia... esos guardianes los necesito para..." –aquí el occidental vacilo un poco- "Digamos que la muerte no es lo mejor para algunas personas"

-"Pero alguna vez la primavera no permanecera por más poderosos que seamos, siempre llegará el invierno para opacarnos" –suspiro mirando el árbol- "Aún así es bueno dejar a los seres que queremos a cargo de otras personas"

-"Hablando de las Cartas Clow y de Kerberos y Yue... ¿Acaso te vas a quedar siempre con ellos?" –pregunto Oz oliendo la flor de cerezo.

-"Claro que no" –sonrio muy divertido al ver que Oz estaba oliendo su respuesta.

Eriol se tocó la cabeza, no lo sabía pero había algo en Oz que nunca le queiso decir a Clow, y que aún ahora Jasón se estaba guardando para él, a pesar de ya haber conocido lo referente a la profecias y la Batalla.

-"¿Que me estara ocultando?"

-"Achisss" –estornudo Jasón mientras abria la puerta de su hogar- "Lo que me faltaba, ¡un resfriado!"

El joven norteamericano entro fatigado, y camino lentamente hasta los sillones y se lanzo en uno de ellos, se llevo un brazo hacia la cabeza y cerró los ojos dando un gran suspiro.

-"¿Quieres un poco de jugo?" –pregunto Kan, su pequeño guardian.

-"No, no te preocupes" –dijo dando otro suspiro- "Sólo quiero un rato de privacidad"

-"Como quieras... si me necesitas estaré en arriba ordenando algunas cosas"

-"¿Y donde está Mike?" –pregunto mirando a Kan.

-"Fue a ayudar a su amiga, la señorita Sora con la mudanza, dijo que hiba a volver pronto"

El guardian se diriguio a las escaleras y subio al segundo piso... mientras su amo se quedo en el salón tirado en el sillón reflexionando sus cosas.

Jasón tomo con cuidado el libro que tenía en la mesa de centro, el mismo libro que su anterior vida había escrito, pera advertirle a él.

Movio las páginas con cuidado y después volvio a dejar el libro en la mesa. Cerró los ojos por un momento y volvio a dar un gran suspiro.

-"Aunque Oz haya creado guardianes para mi protección personal durante la Batalla, no creo que resulte, está escrito" –se llevo las manos a la cara- "No importa lo que suceda, voy a morir"

Touya estaba tratando de sostener las bolsas de las compras y además tratando de mantener su propio equilibrio, estaba para él en una sitiación sumamente vergonzosa.

-"Dejame ayudarte" –le dijo Tenshi tomando algunas bolsas.

-"Gracias, te lo agradesco"

-"No deberias hacer tanto esfuerzo" –sonrio Tenshi.

-"No es un gran problema para mí"

Tenshi comenzo a reir de su amigo Touya, era muy gracioso cuando trataba de aparentar que nada le importaba, pero a él muchas cosas y personas le importaban claro que nunca es capaz de expresar sus sentimientos.

Tendría que averiguar como hacer que Touya Kinomoto, un tipo que aparentaba ser frío, mostrara su verdadera identidad como un tipo que le importaban mucho las personas que quería.

-"Touya" –le llamó la atención la chica- "Alguna vez has dejado algo para que una persona permanezca a tu lado"

El aludido siguio caminando sin emitir palabra alguna, Tenshi se dio cuenta de que tal vez no era buena idea preguntarle ciertas cosas, sobretodo cosas así.

-"Disculpa, no pensé que te molestara" –dijo arrepentida.

-"No, no te preocupes" –dijo Touya volviendose para sonreirle- "Si una vez tube que dejar algo mío para que alguien especial no se fuera de mi lado ni el de mi hermana, si vuelve a pasar lo mismo, no dudare en hacerlo otra vez"

-"A bueno..." –dijo sonrojada- "Gracias"

La chica no entendio por que le había pasado eso y aparto de inmediato la vista, se tapo la cara un poco y siguio caminando... debian apresurase para ayudar a Hinode con la cocina, si era eso, debian apresurarse.

-"Tenshi" –dijo esta vez Touya- "Tengo una pregunta"

-"Si cuál es" –dijo un poco nerviosa.

-"Sabes, pensé que si la mayor parte de tu vida la pasaste en el extranjero... ¿como es que conoces las calles de Tokyo?"

-"Je je, bueno..." –suspiro aliviada- "En un momento te respondere"

Los dos siguieron caminando, claro que Touya estaba un poco extrañado, mientras Tenshi lo miraba de reojo.

-"Que me está pasando, es sólo mi amigo" –pensó sacudiendose la cabeza- "Aún así no lo sé, es tan... tan... guapo"

Sin darse cuenta se volvio a sonrojar... ¡que era lo que le sucedia! ese chico es sólo su amigo, su mejor amigo, tal vez el mejor que haya tenido, pero no podía pensar de esa forma de él. Aunque era en el fondo una persona calida, costaba que desmostrase algo de sentimientos, pero según Yukito, con ella era la persona que Touya desmostraba más calidez en tan corto plazo.

Se volvio a sacudir la cabeza, como podía pensar en tener algo con Touya, era una tonta... tal vez se debía estar confundiendo.

Miro al frente y recordo que debía darle una respuesta, se dio cuenta que ya estaba en el lugar preciso.

-"Aquí es" –dijo ella deteniendose- "Aquí te puedo dar la respuesta de por que conozca tan bien estás calles"

Touya comenzo a mirar el lugar, habían muchos árboles algunos descuidados, era un gran terreno que al parecer no tenía ningún dueño. Se fijo que en lo que parecia ser una entrada había un portal que era tipico de los templos japoneses y que en ese portal había un cartel que decia...

-"Proximamente se contruira un centro comercial" –dijo Tenshi leyendo el cartel.

-"No entiendo, como es que me trajiste acá"

-"Pues te dire que hace mucho tiempo aquí vivia una familia... era una familia muy respetada por los otros templos ya que aquí había una gran biblioteca, la más importante de Japón, que guardaba muchos libros variados y que contenía la más importante información sobre oriente y además tenía unos libros occidentales... claro que uno fue robado por un inglés durante la época de la ocupación"

Suspiro la chica deteniensose un poco y mirando los restos de un antiguo templo casi en ruinas... Touya la miro un poco preocupado y miro el templo, había algo en esto que le hacía sentir un poco de ¿calidez?.

-"La familia que residia en esté templo era mi familia"

-"¿Pero por que está sí?" –pregunto Touya sorprendido.

-"Hace ya muchos años aquí vivian sólo cuatro personas, mi madre, mi tía, un tío y su abuelo" –suspiro- "La continuidad de la familia estaba asegura por mi tío... pero un desastre acabo con el templo"

-"No comprendo"

-"Poco después de que mi mamá se caso con mi padre... ocurrio un gran incendio que acabo con la gran biblioteca, algunos libros fueron rescatados, sobretodo una importante sección de Osaka, que se decía que tenía un libro de un mago muy poderoso, mi mamá me dijo que ese libro se salvo ya que era tan poderoso que el fuego no lo podía consumir"

-"¿Que?" –dijo Touya aún más soprendido.

-"Pero la biblioteca no fue lo único que destruyo el incendio, tambien durante ese desastre desaparecio mi tío... se presumio que había muerto. Mi madre y mi tía fueron muy afectadas por el desastre, y el abuelo enfermo dias después" –aquí volvio a hacer una pausa- "Mi familia estaba casi en la ruina y mis padres tubieron que irse del país, mi tía viajo a Osaka durante mucho tiempo donde conocio a su esposo... el abuelo se quedo en Tokyo pero ya no podía seguir manteniedo el templo, estaba muy viejo y además que no había nada que hacer ya por el templo... él se fue a vivir a una pequeña ciudad tranquila y pacifica" –continuo- "Pues, no se supo nada más del abuelo, sólo que se había llevado gran parte de los libros que se habían salvado" –miro el templo con lagrimas en los ojos- "Los libros que él tenía desaparecieron a su muerte, incluso aquel que era de ese poderoso hechicero"

-"Tenshi..."

-"Mi madre siempre dijo que quería volver algún día pero no podia, después de la muerte de mi padre se quedo atrapada en el extranjero" –dijo sollozando- "Aún así era tan feliz siempre sonreia y decia que mi tío aún estaba vivo y era él quien cuidaba del abuelo... mi madre siempre sonreia, era tan feliz y alegre"

La chica acerco sus manos a su pecho y para por los sollozos, Touya se le acerco un poco y la abrazo.

-"El más feliz recuerdo que tengo es de mi padre antes de morir, estabamos los tres juntos en el parque, yo me había caido al lago y los dos me fueron a auxiliar, me secaron con mucho cuidado, yo tenía miedo y entonces él me abrazo y empezo a acariciarme el cabello mientras mi mamá sonreia, tambien se acerco y me abrazó... me sentía tan protegida y feliz, no sé por que ellos tubieron que morir"

-"Calma, no te preocupes, ellos dos están muy felices, y mientras ellos te vean contenta y alegre, ellos estaran felices por ti" –dijo Touya abranzandola con más fuerza- "Te ves mejor y más bonita cuando sonries"

La chica sonrio misntras estaba apoyada del pecho de Touya, con los ojos aún humedos y las mejillas un tanto sonrojadas –por lo que él le había dicho- lo miro directo a los ojos, sentía que Touya era quien la entendia, el único que lograba comprenderla.

Touya miro el sonrojo de Tenshi mientras seguia abrazandola, la miro a sus ojos sollozos y sintío como un escalofrío le recorria la espalda, por alguna extraña razón acerco su cara a la de ella con mucho cuidado cerrando los ojos... cuando Tenshi lo vio sólo levanto la cara dejandose llevar.

Hinode se había quedado durmiendo en el sillón mientras una gota de saliba se exponía en su boca. Estaba muy cansado y roncaba como tronco.

Un pequeño olor llamó la atención de su nariz, era un olor a...era como si...

-"¡¡¡SE ESTA QUEMANDO EL GUISADO!!!" –grito mientras de un salto se ponía de pie.

Corrio directo a la cocina y apago el circuito del gas, se apresuro a levantar la tapa de la cacerola del guisado, un gran humo negro salío y cuando se disipo se dio cuenta de la magnitud del daño.

-"Vaya... está vez Tenshi me va a matar"

Un poco desepcionado camino hasta el sillón y se lanzo... fue un gran error haber cerrado los ojos mientras el guisado terminaba de cocinarse. Ahora que comerian. Entonces sintio ruidos en la puerta y se volvio a levantar de inmediato.

-"Oh no debe ser Tenshi... ahora si que estoy en graves problemas" –dijo muy aterrado.

En ese momento entro Tenshi muy feliz junto a Touya, el chico se extraño un poco ya que su prima estaba más feliz de lo normal. Tenshi miro a Hinode y comenzo a hablarle con una gran sonrisa.

-"Ya está listo el guisado Hinode"

-"Bueno..." –trató de vasilar- "Digamos que el guisado esta caliente"

-"Muy bien, adios Li" –se despidio Takashi Yamazaki de Shaoran.

-"No veremos Yamazaki" –se despido Shaoran.

Shaoran continuo su camino pensando en ir a visitar un momento a Sakura, no la veia desde hacía ya dos días y se estaba impacientando. Quería verla, necesitaba verla, desde que se despidieron en el aeropuerto cuando regresaron de Londres que no la había visto, y no había hablado con ella desde... desde la mañana, pero aún así necesitaba escucharla de nuevo y necesitaba verla y tocarla.

El joven cruzo la calle y unas preguntas le surguieron en la cabeza...

-"Habrá tenido razon Yamazaki con lo de los perros clonados" –pensó Shaoran.

Bueno no eran preguntas muy inteligentes pero haber estado casi una tarde con Yamazaki, sin que Chiharu, ni Jasón estubieran cerca era todo un problema para él... las únicas personas que siempre caian en cualquier circustancia en las mentras de Yamazaki, eran él mismo y... Sakura.

-"Será mejor que me apresure..." –se dijo para si mismo mientras aumentaba la velocidad.

Cuando doblo por una esquina que lo llevaría a la residencia Kinomoto, sin darse cuenta se tropieza con con un hombre de treno y lentes oscuros, ambos se equilibran antes de caer al suelo y cuando ambos se miran...

-"Lo siento" –dijo Shaoran- "No estaba viendo el camino"

-"No te preocupes" –dijo el sujeto sorprendiendose al ver al chico- "Vaya que suerte tengo, primero Sakura Kinomoto y ahora Shaoran Li"

-"No le sucedio nada malo señor..." –Shaoran se detubo y comenzo a mirar al sujeto con más detenimiento, lo conocia.

-"Junichiro Koizumi" –se presento el sujeto creyendo que Li se había pedido por su nombre.

-"¿Nos conocemos?" –pregunto Li mirandolo muy extrañado.

-"No, no nos hemos conocemos" –dijo el sujeto un poco asustado, ¿acaso lo descrubrio?

-"¿No nos hemos visto antes, en alguna otra ocasión?" –volvio a preguntar Shaoran más intrigado.

-"No no lo creo" –respondio Koizumi.

-"A usted lo he visto en alguna parte, y no es por ser Junichiro Koizumi, ya que usted no se parece nada a él" –dijo Shaoran al recordar que ese nombre es del primer ministro japones.

-"Bueno, hay más de una persona que tiene el mismo nombre" –dijo Koizumi tratando de evadir el tema- "Creo que ya me tengo que ir" –dijo dando por finalizada la conversación.

El sujeto que había resultado ser Lushan Zhao (o Zhao Lushan como prefieran), sin que Shaoran se haya dado cuenta de su verdadera identidad, se apresuro para cruzar la calle y desaparecer, mientras Shaoran estaba un poco extrañado.

-"Estoy seguro que lo había visto antes... ¿pero donde?" –se preguntaba Shaoran sin poder encontrar una respuesta.

Donde, donde era que había visto esa cara, no lo podía recordar, si no fuera por esos lentes, podría haberse dado una idea más, pero estaba seguro que...

Shaoran miro su reloj y se dio cuanta que se estaba haciendo un poco tarde, debía apresurarse para encontrar a Sakura.

-"Será mejor que me apresure antes de que se aparezca el hermano de Sakura"

Mientras Shaoran continuaba su camino hacía la residencia Kinomoto, Zhao se apresuraba para desapareserse de ahí, necesitaba llegar a la Torre de Tokyo y tener las cosas listas para poder tener poseción de las Cartas Sakura.

-"Demonios..." –dijo tratando de relajarse- "Si me hubiera descubierto todo lo que he planeado hubiera ido al rotundo desastre... espero que no me haya descubierto del todo"

Fujitaka recibio muy feliz a su hija y a sus amigas Tomoyo y Meiling. Las saludo una por una pero... aparecio alguien que no conocia.

-"Hola soy Fujitaka Kinomoto el padre de Sakura"

-"Yo soy John Edward Tolkien, señor, es un gusto conocerlo" –dijo extendiendole la mano.

El chico era de acento inglés y con costumbres muy inglesas. Le extendio la mano y se saludaron con gusto.

Después del saludo el chico paso el portal de la puerta y siguio caminando... de repente él chico se dio cuenta de que todos lo estaban mirando, todos los demás se habian quitado las zapatillas y el casi entraba con ellos puestos.

-"Ji ji" –sonrio muy avergonzado- "Creo que no se debe entrar con zapatillas"

-"Bueno..." –dijo Fujitaka.

-"Por favor diculpeme" –dijo John aún más avergonzado mientras hacia una reverencia- "No fue mi intención, es que no estoy acostumbrado a esto"

-"Bueno... será mejor que te lo quites ya" –dijo sonriendo Fujitaka divertido por las reacciones del niño.

John rapidamente se sacó las zapatillas y una vez colocadas las pantuflas continuo caminando... Sakura casi no se aguantaba de la risa al igual que Tomoyo y Meiling por las reacciones tan asustadas del chico inglés, era obvio que no se hacia estó en su país pero había que notar que hacia mucho esfuerzo.

-"¿De donde sacaste a este chico?" –le pregunto su padre.

-"Es una larga historia..." –dijo Sakura.

La joven se coloco sus pantuflas y se dio cuenta de que había un par de zapatillas más... seguramente había llegado alguna visita.

-"Sakura, hay alguien que te está esperando" –le dijo su padre como si le estubiera leyendo la mente.

-"¿Quien será?" –se preguntaba Sakura.

La joven maestra de cartas camino hasta el salón encontrando a...

-"Hola Sakura"

-"¡Shaoran que sorpresa!"

Fujitaka sirvio a sus invitados un pedaso de torta que habian hecho Sakura y Tomoyo, y una taza de té, todos estaban en el salón disfrutando.

-"Mmm, esté té japones es exquisito" –dijo saboreando John- "Y además esta torta es la mejor que he probado" –dijo mirando a Tomoyo.

-"Gracias" –agradecio Tomoyo.

-"En veradad que ustedes saben cocinar muy bien, nunca había probado tan buena mano para la cocina" –volvio a decir mientras se hechaba a la boca una gran porción.

-"Parece que te gusto mucho" –dijo Sakura- "Pensé que había quedado algo mala"

-"No te preocupes, tú y Daidouji cuando se deciden a hacer una torta, les queda muy bien" –dijo Shaoran tambien comiendo una porción.

-"Ojalá que a mi me quedaran como a ustedes" –dijo Meiling mirando la torta- "Nunca me quedan bien"

-"No te preocupes, si quieres te podemos ayudar" –le dijo Tomoyo.

Meiling se alegro por las palabras de Tomoyo mientras Sakura asistia, ahora podría hacer una buena torta... no como antes cuando le quedaban duros como roca.

-"Y cuando la haga, el primero en probarla será Xiao Lang (Shaoran)" –dijo muy alegre.

A Shaoran se le helo la sangre y miro con terror a Meiling mientras ella sonreia, aceptaba que ella hacia ricas comidas, pero cuando se decía de experimentar algo nuevo, como hacer tortas que eran reberendos desastres, aunque Wein decía que sólo estaba practicando y que le entendiera sus esfuerzos.

-"¿Y desde cuando que estás en Japón?" –pregunto Sakura a John inganorando los pensamientos de Shaoran.

-"Llegue hoy" –dijo John un poco serio dejando la taza de té en la mesa.

-"¿Cuanto tiempo te quedarás?" –pregunto sonriendo.

-"Bueno yo..."

En ese momento tocan la puerta y Fujitaka se apresura a ver quien es... para su sorpresa eran Yukito y Touya.

-"Buenas tardes señor Fujitaka" –saludo Yukito.

-"Buenas tardes Yukito"

-"Hola papá" –le dijo su hijo- "Sabes te tengo que presentar a alguien"

-"Si, ¿quien es?"

Touya se aparto un poco dejando ver a dos personas, una chica muy bella y un pequeño.

-"Ellos son Hinode Akari y Tenshi Sora" –les presento Touya a su padre.

-"Sora"

En el momento en que Tenshi y Fujitaka cruzaron miradas, se quedaron congelados... esa cara, para Tenshi esa cara le era conocida, no podía ser posible, ¡era imposible que fuera él!... con cierto temor ambos se saludaron.

-"Yo... yo soy Fujitaka Kinomoto"

Ahora ya recordaba Tenshi de donde había escuchado ese apellido... ¡era imposible!

Yukito se dio cuenta de las reacciones de ambos, que era lo que les sucedia, nunca antes había visto al señor Kinomoto en tal posición, ni a Tenshi tan asustada.

Yukito estaba disfrutando muchos los ricos postres que le estaban dando en el hogar de los Kinomoto, un lugar que era como su segundo hogar. Siempre lo trataron bien y le gustaba la calidez de la familia, sobretodo el cariño que le tenian Sakura y Touya a él, y él a ellos.

Pero algo sucedia con uno de ellos... cuando miro a Touya, él muy pensativo miraba a Tenshi que hablaba con Tomoyo, después veía a su padre. Mientras Tenshi miraba de reojo a Touya. Era algo extraño... Touya casi no se percataba de la presencia de Shaoran Li.

Esté –Shaoran- tambien estaba extrañado de que el hermano de Sakura sólo le diriguiera una... ¡una! mirada con malas intenciones, siendo que durante todo esté tiempo ya deberian tener una batalla campal.

-"¿Que extraño está Touya últimamente?" –se preguntaba Yukito- "¿Que le habra sucedido?, nunca actua así"

-"Bueno creo que ire a mi habitación un momento" –dijo Sakura levantandose del lado de Li mientras tomaba un poco de pastel a escondidas.

La chica disimuladamente se llevo otra cantidad de galletas y subio a su habitación. Shaoran la miro y segundos después se levanto disimuladamente siguiendo a Sakura pero...

-"¿A donde crees que vas mocoso?" –le pregunto Touya mirandolo de mala manera.

-"Bueno yo... necesito ir un momento al..."

-"Será mejor que te sientes, no dejare que la sigas, nada de escusas" –dijo Touya mientras las chispas de miradas entre él y Li se hacian visibles.

Shaoran se sentó sin oponer más resistencia, volvio a miara las escaleras y suspiro, con lo bien que le iba sin que Touya le tomasé en cuenta, debía de conformarse, por lo menos había estado sentado junto a Sakura sin que le molestase... debía ser seguramente por la chica, esa tal Tenshi Sora, ya que lo único que hacía era mirala.

-"Hay un asunto en la cocina que debo arreglar" –dijo Fujitaka levantandose.

El dueño de casa se diriguio muy tranquilo hacía la cicina, mientras detrás de él le estaba siguiendo Tenshi, tratando de que no notase su presencia.

-"Deseas ayudarme en algo" –dijo Fujitaka al notar a la joven.

-"No, es que yo... yo sólo quiero..." –dijo poniendose nerviosa.

-"¿Quieres preguntame algo?" –la aludida acepto en silencio- "¿Que es lo que deseas?"

-"Es que usted se parece mucho a una persona, además que tiene un nombre parecido a esa persona"

-"¿Crees que sé donde está esa persona?"

-"Usted sabe muy bien donde está... ¿digame cuál es su familia?"

-"Cuál otra, mi hijos Touya y Sakura"

-"No hablo de esa familia, la familia a la que pertenece"

-"Pues ante solamente vivia con mi abuelo que ya murio hace muchos años"

-"No vacile por favor" –dijo juntando sus manos- "Esa no era la única persona de su familia, tenía hermanas no es así"

-"¿Que es lo que incinuas?" –dijo Fujitaka sorprendido.

-"No conocio a un hombre llamado Hiro Sora" –Fujitaka estaba helado- "El fue mi padre, y usted..."

-"Soy el hermano de la esposa de Hiro Sora" –interrumpio Fujitaka a la joven- "Nunca pense ver a mis sobrinos" –dijo acercandose lentamente a Tenshi- "Cuando se incendio el Templo decidi darme por muerto por razones superiores a mi, tu madre era la única junto al abuelo que sabian que yo aún estaba con vida, y que tenía otro nombre y otro apellido que era el de mi madre" –tomo de los hombros a la chica- "Lo único que supe de tu madre fue de que había muerto, fue dificil para mi, ya que ese mismo año había muerto mi querida Nadeshiko, mi esposa... lo pude superar ya que debía de cuidar de mis hijos, me preocupe mucho cuando supe que mi hermana tubo una hija, pero mediante una buena amiga me entere que alguien más la estaba cuidando, y esa era mi pequeña hermana. Deje de preocuparme y empeze a tener mi nueva vida"

-"¿Por que dejaste la anterior?"

-"Como te dije, algo que era superior a mi me obligo a cambiar mi vida, por la protección de Sakura, Touya y la esposa que tendría, Nadeshiko" –sonrio- "Tenía miedo de que les pasara algo malo a las personas que más quería, y para eso debía renunciar a mi antigua vida, a nuestra familia" –abrazo lentamente a la chica- "He sido muy feliz debido a eso, tube la mejor esposa que un hombre podría tener y además tengo dos hijos a los cuales amo mucho... sin tener las preocupaciones del terrible futuro que les esperaba, ya que tube que sacrificarme por ellos y una vida sin tener que caer en la oscuridad"

La chica de pronto entendio la razón de que ese hombre sa haya alejado de esa familia, por protección de lo que más amaba, esa era su propia familia, la que él había hecho bajo el nombre de Fujitaka Kinomoto, una familia alegre, tal vez mucho más de la cuál hubiera tenido él si no hubiera hecho lo que tenía que hacer. El amor que le tenía Fujitaka a sus hijos lo pudo sentir Tenshi, no había sentido tal calidez desde ese día en el lago.

-"Tío" –murmuro Tenshi apretandose furtemente de Fujitaka mientras esté sonreia al escuchar esa palabra- "Lo siento Touya"

-"Papá"

-"Sakura" –dijo Fujitaka al ver a su hija parada en medio de la cocina con los ojos llorozos- "¿Que haces aquí? ¿escuchaste algo?"

-"Lo escuche todo papá" –dijo tratando de sonreir- "Ahora entiendo muchas cosas"

Fujitaka soltó a Tesnhi y está se seco las lagrimas, para después el padre de la familia Kinomoto recibiera de golpe a su hija que lo abrazaba con fuerza.

-"¡Te quiero mucho!" –dijo Sakura apretandose de su padre.

Tenshi miro a Fujitaka y a Sakura, se veian tan felices y alegres... pero y Touya, miro hacía la puerta que se dirigia al salón notó que alguien estaba apoyado en ella.

-"Touya"

Detrás de la puerta estaba Touya, con los ojos cerrados, estaba muy pensativo por todo lo que había escuchado, se sentía demasiado confundido, no entendia nada. Camino lentamente y se diriguio a la puerta principal.

Yukito se había dado cuenta del repentino cambio de animo de su amigo y se levanto dispuesto a seguirlo, pero en otro brusco cambio se diriguio a la cocina, en donde se quedo un rato mirando y entró decididamente. Yukito había quedado muy confundido, se pregunto si debía entrar a la cocina, se armo de valor y tambien entro viendo una de las imagenes que nunca se había imaginado.

-"Zzzz -.- Zzzz -o- Zzzz; Zzzz -.- Zzzz -o- Zzzz"

-"¡MERLIN DESPIERTA!"

-"¿¡¡Que!!? ¿Quien se murio? ¿Hay guerra? ¿Se quema la casa? ¿Que pasa?"

-"Se te olvidan tus NOTAS"

-"Si si claro, aquí voy... ¡estás son LAS...!"

NOTAS DE MERLIN:

Zzzz, ¡a si claro!, bueno, este cap. a mi gusto personal quedo muy complicado y latero, no me gusto como los anteriores, pero les aseguro que haré mi mejor esfuerzo. Juró que después de esto haré algo más simpatico.

Es un cap. que se supone como impactante, pero es más impactante que un pato nadando en agua con cloro.

Jasón Newstead tiene un gran problema, pero este se agrabara más.

Los problemas familiares son peligrosos, Touya y Tenshi, la relación entre Fujitaka y Tenshi e Hinode, ojala que les haya tomado por sopresa.

¿Lushan Zhao lograra sus cometidos? eso será hasta el proximo cap. en donde conoceremos otra faceta de este personaje.

Hasta el proximo y violento capitulo... Me faltan solo tres.

Aplausos, comentarios y tomatazos a se los agradeceré. Espero con ansias sus comentarios. ENVIENLOS POR FAVOR!!!!