TITULO: "Promesas" Autora: SAM E-mail: Pairings: Legolas/Aragorn ,Aragorn/Arwen (Mencionado)
DISCLAIMER: Todos los personajes creados por Tolkien pertenecen a él y solo a él. La historia solo existe en mi enferma cabecita .
Rating: R Advertencias: m/m Slash (A/L). Character death, Very Angst, mpregn.
Summary: Aragorn olvida su promesa.
Note: Please review!!! Here we go!!!

CAPITULO 1

- ¡Por fin!, después de dos largas semanas de viaje, había arribado a Rivendel-, pensó Legolas desmontando con su gracia habitual del caballo, mirando ávida y placenteramente a su alrededor-nunca se cansaría de tan espléndida vista, su hogar era hermoso, pero solo en Rivendel podía disfrutar esa paz, de esa tranquilidad, de no vivir con la constante preocupación de ataques de arañas, orcos y otros males que últimamente - y tristemente- afectaban el Gran Bosque Verde, ahora llamado Bosque Negro, por tal sombra que ahora apagaba su belleza, Sombra que provenía de Dol Guldur.
Una figura saliendo a su encuentro desvió su mirada.

- ¡Mae Govannen Legolas Thrandulion-
- ¡Bienvenido a Rivendel!-

-¡Mae Govannen Lord Elrond!

- No hace mucho que gozamos de tu visita, Legolas, dime, ¿ha ocurrido algo malo?-

- ¡No Lord Elrond!, Perdone si no he tenido tiempo de avisar de mi visita, pero solo se trata de un aviso para usted de mi padre.

- si se trata solo de un mensaje-¿por que exponerte a ti?, ¿porque no envió un mensajero?- son tiempos peligrosos Legolas.

-Perdone mi atrevimiento Lord Elrond, pero fui yo quien insistió a mi Rey de enviarme a cumplir esta tarea, quería disfrutar una vez mas su hospitalidad.

-¡Tonterías ¡, esta es tu casa y eres bienvenido las veces que quieras, ¡vamos! Pasa, ¿Qué clase de anfitrión soy?-tus habitaciones están listas, como siempre, descansa y te veré mas tarde ¿de acuerdo?-

Legolas asintió con una leve reverencia y fue conducido a las habitaciones que siempre ocupaba cuando visitaba Rivendel. Una vez ahí se aseo, cambio de ropa y se encontró con Lord Elrond, entregando el mensaje de su padre – que advertía a la Casa de Elrond del aumento de la sombra en el Bosque Negro-

- Muy bien Legolas, contestare a tu padre su misiva en cuanto me sea posible, mientras tanto disfruta nuestra hospitalidad.
- Gracias mi Lord- se aprestaba a salir, cuando una pregunta vino a sus labios,
- ¿Mi Lord-
- ¿Si Legolas-
- Me preguntaba, si,… Estel, ¿se encuentra en Rivendel-
- Mmmm, ¿no las has visto desde tu llegada?, si, debe de andar por los jardines junto al lago-
- Gracias mi Lord-

Legolas casi corrió rumbo a los jardines, tenia que ver a Estel, tenia que contarle.
Lo encontró sentado en la suave hierba verde, frente al Lago, tirando piedritas aquí y allá, como buen elfo, Legolas no dejo saber su presencia hasta casi estar detrás de el.
" No ha sentido mi presencia, ¿ que le preocupa tanto que no pueda sentirme?" -¡Feliz encuentro Estel-

-¡Legolas!- buen susto me has dado- sobresaltado contesto Estel, incorporándose de su sitio y sacudiéndose la hierbita de sus ropas, quedando frente al elfo.
-Pero ¿que haces en Rivendel-
"ah, esos hermosos ojos, nunca me cansare de verlos; hey, un momento, ¿se supone esta sea la bienvenida de tu ser amado?" -¡Necesitaba verte mí querido Estel, tengo algo muy importante que decirte-
-Yo también necesitaba verte Legolas, aunque no creí verte tan pronto-
"¿Pronto? algo anda mal aquí, ¿pero que es?, ¿Por qué no me abraza y besa como siempre que nos volvemos a encontrar?" - Bueno, te he ahorrado el viaje, ya estoy aquí, y ahora podemos platicar y… - Legolas, debo decirte algo, algo que sucedió estas tres últimas semanas-interrumpió Estel apresuradamente.
- Yo también quiero decirte algo lirimaer, de suma importancia para ambos, no pude esperar mas tiempo, yo..., bueno nosotros… estoy… - He conocido a alguien-
- ¡¿?! -
- He conocido a alguien "mas".
- … - Y yo quiero, bueno, yo quiero estar a su lado…, siempre.

Legolas sintió un frió recorrer su cuerpo, un dolor que empezaba a clavársele en medio del pecho, el corazón latiendo tan deprisa que cualquiera hubiera pensado que llego corriendo desde El Bosque Negro, la boca reseca y una sensación de perdida, una sensación de vacío, una angustia, la angustia era lo peor.
-"No, no, por Elbereth, no lo permitas, no ahora, que no sea verdad lo que me esta diciendo, que no diga lo que temo escuchar"-

- ¿Que quieres decir con alguien "mas" y con "siempre"?, no entiendo…

- Como respuesta Estel mostró la mano a Legolas, para que pudiera apreciar el anillo que adornaba su dedo.

- Mi Ada me dio esto, dice que me pertenece por derecho, que debo cumplir con mi destino.

-"recuerda , este anillo. ¿Donde lo he visto antes?, mmm. Dos serpientes con ojos de esmeraldas, coronadas por flores doradas, ¡si, en los libros de Historia de mi Padre!, ¡es el Anillo de Barahir ¡, pero eso significa que…"

- ¡Eres el heredero de Isildur!-¡ El Rey perdido que reclamara el Trono de Gondor-

Suspirando tristemente , Estel volvió su mirada al tranquilo lago, empezaba a atardecer, solo escuchaban las aves que acuden a sus nidos para resguardase de la fría noche, y el suave viento meciendo las ramas de los árboles del pequeño jardín.

- No quiero ser rey Legolas,no quiero asumir esa responsabilidad, pero me debo a mi pueblo y con la corona vienen ciertas responsabilidades que un soberano debe cumplir, yo...estoy muy confundido, yo..

- ¿ Quien es?- pregunto como voz suave Legolas- ¿ quien me ha robado tu corazón-

Estel miro nerviosamente al Elfo que había amado toda su vida, sus hermosos ojos azules ahora opacados por la tristeza y angustia, su fina cara, su sedoso cabello de color de oro, y esos labios, esos labios carmesí que había besado tantas veces, su cuello elegante y blanco, su cuerpo esbelto, pero masculino, ese cuerpo que había poseído tantas veces –" no, deja de pensar en eso, enfócate en lo que vas a decir, respira profundo, enfócate, eso es, tienes que alejarlo sin lastimarlo, respira…"

- Oh! Legolas, nadie te ha robado nada, yo mismo se lo he dado, su nombre es Arwen, Arwen Undómiel ,hija de Lord Elrond.
- ….
- La conocí hace tres semanas, nunca la había visto, sabia que mi padre tenia una hija, pero nunca imagine que seria Arwen,parecer ser que todo este tiempo se encontraba en Lórien.
- ¿Legolas?
- ….
- Me dio su inmortalidad Legolas- enseñando ahora el dije que colgara de una fina cadena en su cuello.

Rompiendo abruptamente el silencio que hasta ahora sellaban sus labios, Legolas exclamo entre indignado y furioso, entre triste y culpable:
- Es una medio elfo, ¡ puede tomar ese camino!, pero sabes que tu tienes mi vida si la pidieses, te pertenece igual que mi corazón-
"y ese dolor, ese dolor que aumentaba cada vez mas en su pecho impidiéndole respirar, pensar…"

- Lo siento Legolas, mi decisión esta hecha, debemos separarnos, debes irte, es lo mejor…

- ¿Irme?- ¿ que hay de lo nuestro?, ¿Qué hay de "nosotros"?, prometiste estar siempre a mi lado, lo prometiste.
- Lo siento, yo.. debo irme.
- ¿La amas?
Ahora fue el turno del mortal de quedar en silencio.

- Estel, sabes bien que los elfos solo entregan su corazón una vez en la vida, al crecer en Rivendel, sabias esto, sabias que…-

- Lo siento, debo irme-volvió a insistir Estel al momento que daba la espalda al elfo y empezaba a alejarse-" vamos, camina, camina o nunca lo harás, así es mejor".

- ¡Estel, espera!- debo decirte que…

- ¡No insistas Legolas, todo acabo, no puedo ayudarte!- grito Estel volteando una ves mas hacia el elfo.
- Esto se acabo- exclamo casi en un suspiro, pero suficiente para los agudos sentidos del elfo.
- "Maldito seas Estel, maldito seas por que te amo con toda mi alma"-Aragorn- respondió Legolas, su mirada ahora llena de ira y orgullo, -te devuelvo tu corazón para que lo entregues a quien tu elijas, mi corazón entregado fue y entregado esta para siempre, solo una cosa puedes pedir Aragorn hijo de Arathon, que nuestros caminos no se vuelvan a cruzar nunca mas, espero encuentres la felicidad, Námarië-. Y con esto dando media vuelta fue Legolas quien se alejo apresuradamente del lugar, dejando atrás un cabizbajo Aragorn.

-" Tienes que irte de aquí, Y entre mas rápido, mejor, vamos Legolas, sigue caminando"

Un dolor agudo lo hizo detenerse en seco, sus rodillas se doblaron, haciéndolo hincarse en la hierba, sus manos temblaban cuando las acerco a su pecho, jadeando aire, las apretujo más, como si quisiera arrancarse ese dolor.
-¡Ughhh!- este dolor, en mi pecho, no puedo soportarlo, es como una daga en el corazón, como si, como si me partiera el corazón.
" ¡ No, no puede ser!, no puedo morir ahora, no ahora, no, no lo permitiré, tengo que lograrlo, al menos hasta que.." ¡Ughhh!, respira, respira…tienes que llegar a los establos, vamos, vamos, levántate", ahora sus manos acariciando su firme vientre, "vamos, tranquilo, levántate".
Incorporándose una vez mas, Legolas se dirigió a sus habitaciones, "tengo que recoger mis cosas y armas primero".

Los corredores de Imladris estaban oscuros, ya había caído la noche, y los sirvientes empezaban a encender los candelabros que iluminaban los pasillos.

"Casi estoy ahí, un par de metros mas y …"

-¿Me odias Legolas?-

Antes de conocer la cara de la suave voz que provenía de una oscura esquina, Legolas ya sabia a quien pertenecía.

-No Arwen, no te odio., no podría aunque quisiera.

-No pude evitarlo Legolas, solo paso.

-Lo se- fue todo lo que dijo Legolas, - ahora tengo que irme-, empezaba de nuevo su caminar cuando la angustiada voz volvió a llenar los solitarios pasillos.

-¿Te lo llevaras de mi lado? , ¡Por favor, no lo alejes de mi!-

Legolas no se molesto en girar nuevamente-No puedo llevarme algo que no es mió Arwen-, pero tu sabias de lo "nuestro" desde el principio, era un secreto a voces, ¿no es así-
-….-

- Námarië Arwen-.

Cuando ya se disponía a girar la pequeña llave para entrar a sus habitaciones, un par de manos, una a cada lado de la gran puerta de madera se lo impidió.
Dos figuras idénticas se plantaran a cada lado del Elfo, como dos imágenes de un espejo.
-Elladan, Elrohir, ¿a que debo el placer de su "visita"-
-¿así que….
- ya lo sabes?- iniciando un gemelo la frase y terminándolo el otro.

-…

-Piénsalo Legolas, es mejor así para los dos.
-¿Para los dos o para los tres?- contesto furioso Legolas al momento que entro hecho una avalancha a su cuarto.
-Para las dos… -Estel y Arwen…-
-¿Les importaría meterse en sus propios asuntos?, no necesito consejos-
Legolas empezaba a meter a su morral de viaje las pocas pertenencias que esa misma mañana había desempacado, apresuradamente coloco su carjal en su espalda, sus cuchillos y tomando su arco se dirigió nuevamente a la puerta.
-Legolas, no queremos verte lastimado, pero tampoco.
- a nuestra pequeña hermana-
"Así que es cierto que la sangre es mas pesada que el agua" pensó Legolas al momento de querer cruzar el umbral de la puerta.
-Piénsalo Legolas, es mejor así para Estel, como heredero al Trono.
-tiene responsabilidades que cumplir-

-No tengo que pensar nada, la decisión fue ya tomada y no fue mía, además este asunto solo atañe a Estel y a mi-, y dirigiendo sus brillantes ojos a los dos pares de ojos que lo observaban dijo- no tengo mas a quien llamar amigo en este lugar, Námarië -.

-¡!-

"vamos Legolas, a los establos, vamos, sigue caminando." Al llegar a los establos se acerco dulcemente a su montura, -¡oh Anarión, discúlpame por no dejarte descansar de nuestro ultimo viaje, pero necesito tu ayuda!, por favor, ¿me llevaras a casa ya mismo-
El caballo de amarillo pelaje dio un ligero relincho e inclino su largo cuello, -¡oh, gracias Anarión, sabia que tú no me abandonarías!- Montando rápidamente, y con ligero trote se encamino a la salida de Rivendel.

-¡Legolas, ¿ que pasa?, ¿porque te vas en medio de la noche?, pero si acabas de llegar esta mañana, no he podido ni saludarte apropiadamente- ¿ Legolas, estas bien?, te veo un poco pálido.

-¡Lord Glorfindel!, por favor discúlpeme con Lord Elrond, pero hay un asunto de suma urgencia que debo atender y no puede esperar, mil disculpas, pero debo partir y gracias por todo mi Lord-
- Námarië Legolas , que tu viaje sea seguro y nos volvamos a encontrar-
- Námarië Glorfindel-