Sé que estoy mejor sin ti.
No hace falta que Ron me lo repita hasta la saciedad, ni que Hermione me sonría desde el otro lado de la mesa para darme cuenta de que hice lo correcto.
Pensé que aguantaría sin ellos, creí que tú eras lo más importante. Caí en la trampa de pensar que tú podrías suplir todas mis necesidades. Pero no fue así. Y no me arrepiento de haber vuelto.
Ahora todo es como antes, todos vuelven a sonreír. Mi madre preparó ayer una gran comida como las de antes de la guerra y Harry fue invitado. Me agradó mucho el verlo, y pasamos buenos ratos. Incluso mi madre dejó que los gemelos hiciesen una muestra de sus habilidades en cuanto a las bromas. Hasta mi padre volvió a reír con aquella despreocupación que antes tanto lo caracterizaba.
Todo fue alegría y jolgorio aquella noche en la que todo se acabó. Mi madre me besó y agradeció a Merlín que te hubiese dejado al fin, tras meses de sufrimiento. Ron y los gemelos aplaudieron, e incluso Bill, cuando vino a consolarme porque las lágrimas habían invadido mis ojos, me instó a que no me arrepintiese de mi decisión.
Pero ahora, tumbada en la cama y mirando al techo, siento un vacío en el estómago que no es producto de no haber comido en todo el día. Me voy al lado derecho y veo que no estás, tu cuerpo cálido ya no calentará mis sábanas una vez más. Ya no hay una segunda oportunidad. No se puede dar marcha atrás.
Y sé que estoy mejor sin ti.
Porque ¿Quién me va a pagar todas esas noches en vela, esperando a que volvieses de alguna fiesta con tus amigos? ¿Cómo podrás recompensar tus traiciones, tus mentiras, todo el daño que me has hecho? Las peleas minaron nuestra relación, y tú nunca te esforzaste en comprenderme. Y si tú no enjugaste mis lágrimas… ¿Quién lo hará?
No, ya no hay momento para el arrepentimiento.
Te extraño, es cierto, y quisiera que estuvieras aquí, aunque sólo fuese para que me besaras como hacías cada vez que querías que te perdonara. Que me abrazases y me dijeses que todo iba a estar bien, porque no me quieres y yo a ti. Querría haber sido más tonta y habérmelo creído, o más fuerte y no haber extrañado tanto a mi familia.
Ya no habrá más amaneceres junto a ti, más siestas recostada en tu pecho, la cabeza escondida en el hueco de tu cuello, tus manos en mi cintura, tus piernas enredadas en las mías. Ya no volveré a verte despertar ni a sentir tu aliento cálido en mi cuello. Ya no habrá más bailes, ni más cenas importantes. Ya no sabré más de ti.
Y sin embargo, y aunque la pena me asole, sé que estoy mejor sin ti.
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¿Qué os ha parecido? Se me ocurrió tras escuchar una canción de Ella Baila Sola que lleva el mismo título, y enseguida me imaginé a la pareja.
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