6. AV Y SIRIUS
(Primera discusión)
El día en que los Weasley y Harry llegaron a la casa de Sirius (en las vacaciones de Navidad) da la casualidad que segundos mas tarde alguien tocó el timbre, la madre mejor dicho el retrato de la madre de Sirius se puso a gritar.
-¿Quién es el sucio invasor, amigo de muggles que llega a mi casa?- gritaba y gritaba la Señora Black.
Sirius fue a abrir la puerta…
-Pensé que me recibirían para navidad, eso también fue lo que le pareció a Dumbledore cuando se lo comenté.- dijo AV sonriendo.
Quizás fue la imaginación de Harry pero AV parecía mas hermosa que nunca, a juzgar por la cara de Sirius, el pensaba lo mismo. Por unos segundos Harry sintió rabia de que la viera, de que la viera como la estaba viendo. Harry sabia que en su juventud Sirius había estado enamorado de AV pero eso fue antes (N/A donde hubo fuego…) Ella ahora era muy joven para él. No podía soportar que Sirius tuviera alguna relación con ella.
Mientras tanto la señora Black continuaba chillando y diciendo sandeces. Los gritos se escuchaban hasta el estar.
-¿Me vas a dejar entrar si o no?- preguntó AV sin dejar de sonreír.
Sirius la dejo entrar. Justo en ese momento Harry se sintió sucio y peligroso (ya saben lo de Voldemort y todo eso) así que se fue a su habitación.
-No me imaginé que vendrías.
-Con eso quieres decir que no quieres que este aquí?- AV puso cara de Tristeza fingida por supuesto.
-No quise decir eso. Me agrada que estés aquí, estoy feliz de que estés aquí.
La muchacha le entregó la maleta a Sirius que en su interior iba pensando "¿me vio cara de botones o que?" y luego empezó a subir las escaleras.
-Señora Black. No es otra abominación amigo de muggles el que ha llegado. Soy yo Ashley Vethyesalle.
-OH! Ashley discúlpame lo que pasa es que esta casa permanece inundada de traidores de sangre.
-Me lo imagino.
En eso aparece Sirius en escena.
-Si tan solo te hubieses casado con Sirius no se fuera convertido en la basura inmunda que es ahora.- dijo la madre digo el retrato de la madre de Sirius.
-Señora Black…-empezó a decir AV sonrojada (Sirius también se había sonrojado)
-Hace tanto tiempo que no te veo ¿A dónde estuviste tanto tiempo?
AV y Sirius se dirigieron miradas tensas
-Bueno eso no importa. Sigues teniendo la misma apariencia que cuando tenías 17 años. Todavía puedes reformar a este inútil.- dijo La Sra. Black.- me encantaría tener mas nietos, no tengo muchos (N/A bueno la verdad no tiene ninguno)
-No me temo que revindicar a su hijo es imposible, estoy poco cansada me va a tener que disculpar Sra. Black
-Siéntate como en tu casa.
-Gracias dijo yéndose, Sirius la siguió.
-Sirius por favor no necesito que me acompañes.-dijo AV
-Quiero hablar contigo-dijo Sirius- las cosas entre nosotros no han quedado claras.
-Habla- dijo AV
-Aquí no- dijo Sirius observando que todos los estaban viendo desde abajo.
AV se dio cuenta y bajo para saludar
-Mucho gusto supongo que usted debe ser la madre de Ron, la señora Weasley.
-Discúlpame Molly. Nosotros tenemos que hablar.-dijo Sirius jalándola por el brazo.
Sirius la llevó al cuarto de dibujo y cerró la puerta.
-buenos entonces habla.- dijo AV un poco acalorada.
-Yo quería decirte que no tuve la culpa…
-Sirius ahórrate palabra, yo se que tu no tuviste la culpa, yo solo dije eso por que estaba muy confundida. Y siendo ese el único problema, entonces no tenemos nada de que…
-No- Sirius se sonrojo un poco- yo he estado pensando…
-Eso es nuevo en ti- interrumpió AV
-Yo estaba pensando en lo que tuvimos.- dijo cuando AV lo miró con los ojos muy abiertos preguntándose "¿que demonios tuvimos?"
-¿Qué hubiésemos tenido?- preguntó AV frunciendo el ceño.
-Acéptalo, que en lo mas hondo de ti, tu quisiste haber sido mi novia, te morías por mi igual que todas. Te tenía a mis pies.
-Por favor Sirius, me gustabas cuando te convertías en perro, no en condiciones normales. No te creas tanto. No me gustabas, eras tu quien me buscaba.
-Lo veo en tus ojos todavía te mueres por mi.- dijo Sirius
-JA, eres muy vanidoso.-dijo AV- una relación entre tu y yo es imposible.
-si no te morías por mi, mejor dicho si no te mueres por mi por qué me enviaste una lechuza en cuanto apareciste, por que no a otra persona? Además si no fuera imposible ¿lo harías?
AV se quedó completamente callada. No sabia que responder. Su cara paso de blanco a rojo intenso.
-Ese era el problema, quizás si tu no te fueras ocupado tanto en presumir podríamos haber tenido algo.
-Si, tienes razón.- dijo Sirius mirando al suelo.
-Lo se. Ni siquiera me dijiste que yo te gustaba o que si quería salir contigo o que si quería ser tu novia. NADA. Solo me decías algo así: "QUIEREME Y SE LA ENVIDIA DE TODAS".- dijo AV agitada.
-¿AV?
-¿Qué?
-Me gustas desde que te conocí y nunca quise a alguien como a ti. Después de tu desaparición mi corazón quedó vació. Si pudiera te invitaría a salir pero ya vez no puedo.
Sirius se quedó callado un rato. AV se le quedó mirando.
-Quizás fue algo que debí hacer hace mucho pero mejor tarde que nunca ¿tu quieres ser mi…
-Si quiero- dijo sonriendo.- ¿o por que crees que vine a quedarme para vacaciones?
Sirius se acercó a ella sonriendo, feliz como no había estado en muchos años, la tomó por la nuca con sus manos e hizo algo que había deseado hacer hace 15 años: besarla.
Ambos estaban tan felices que no cabían en ellos.
-Eh, es apresurado, pero de paso no quieres se la madre de mis hijos de todas formas ya tienes lo más importante: la aprobación de mi madre.
-Sirius, hablando de aprobación. Antes de que te vean como un pervertido. Deberías contarles a tus amigos lo de la maldición del limbo. –sugirió AV.
-Si, todo lo que sea necesario. –dijo Sirius, brillante del entusiasmo -. Se lo contare a mi madre, se pondrá feliz. Que te parece si nos casamos en marzo fue el mes en que Lily y James se casaron.
-Debió ser una bonita fiesta. –dijo AV amargamente.
-Lo fue. Yo fui el padrino de bodas de James. –dijo Sirius y en un momento mas serio, siguió-. James iba a ser mi padrino de bodas.
-¿Sirius? –llamó AV.
-¿Qué?
-Tengo sueño… y hambre.. Me duelen hasta los huesos.
Aquella noche Sirius no pudo dormir de la felicidad. Mientras a Harry le sucedía todo lo contrario, se sentía tan mal.
Al día siguiente llegó Hermione, entre ella, Ron y Ginny hicieron entrar en razón a Harry y hacerle ver que no era un psicópata matagente.
Sirius estaba tan feliz que andaba cantando villancicos.
