Mi linda Nicole

Por: Andy Yogima

Capítulo 6. Entre la vida y la muerte

El sol en el horizonte se pierde en medio de la desesperación que recorría el cuerpo de James Potter, hacia tiempo que Voldemort había hecho su aparición y desde entonces el joven no podía evitar sentirse… mal. Peter había sido llevado a la enfermería permaneciendo bajo el cuidado de Madame Pomfrey debido a su condición, algo entre estar despierto y dormido a la vez.

Por supuesto aquel era el inconveniente menos perturbante de momento. El resto de los Merodeadores caminaban rumbo al despacho del director, siguiendo al dueño de éste y a la subdirectora. Nicole iba a su lado transitando casi contra su voluntad, callada, triste y con la mirada perdida. Respingo dejando escapar una lágrima. Todo se había salido de control.

James la observo sintiendo un nudo en la garganta. Era seguro que estaba molesto por el secuestro de Lily, pero no podía culpar a la niña por ello. No era su culpa. No era de nadie. Discretamente miro a sus amigos, ambos preocupados e inmersos en sus propios pensamientos.

Llegaron al despacho de Dumbledore, rápidamente informaron a los directivos sobre la situación omitiendo el asunto de aquella curiosa caja que había sido entregada a Nicole por parte del Lord.

-Tenemos que hacer algo –susurro James sin apartar la vista del suelo, de manera casi automática y para si.

-Eso es seguro, señor Potter –dijo el director poniendo una mano sobre el hombro del chico recordándole donde estaba y que todo era real- pero debemos pensarlo muy bien. Voldemort es muy astuto y debe estar preparado para todo tipo de ataque o similar –rodeo a los chicos volviendo tras su escritorio- por ahora les sugiero que coman algo. Supongo que no han ni desayunado –sonrió débilmente tratando de transmitir un poco de esperanza, hizo un ademán con la mano indicando que salieran.

Los Merodeadores abandonaron el despacho cansinamente, Nicole permaneció en su lugar sin apartar la vista del suelo espero unos segundos a que el trío saliera. Dumbledore la miro esperando que hablara.

-¿Informó a mi mamá? –pidió quedamente levantando la mirada sin enfrentar al hombre.

-Me temo que no he podido localizarla.

La pequeña dio un leve suspiro girando cansada. Se mantuvo de espaldas a los adultos un par de segundos antes de seguir a los chicos fuera del cuarto. Cerró la puerta de manera inconciente dando un nuevo respingo. "No puedo llorar" se dijo cerrando los ojos con fuerza, apretando los puños "No hasta que pueda solucionar lo que ocasione" Respiro siguiendo a los Merodeadores manteniéndose algo distante.

-Está situación se está complicando –comento Remus, caminando a la izquierda de James rumbo al gran comedor.

-Me dio la impresión que Dumbledore no piensa hacer nada –musito James con seriedad y un ligero tono de reproche en su voz.

-Es cierto, el tiempo se acaba y él tan tranquilo –corroboro Sirius a la derecha de James mirando de reojo una de las ventanas. El sol casi se ponía.

-Chicos… -murmuro Remus deteniendo el paso- ¡Oigan!

-¿Qué ocurre? –chillo Sirius girando bruscamente. James lo imito.

Al final del pasillo, Nicole esperaba sin intenciones de acercarse pero denotando nerviosismo. A paso lento, James se fue acercando a la pequeña sabiendo que algo planeaba. Por su estado nervioso, nada bueno.

-Nicole… -murmuro.

-Esto no termino como esperábamos –susurro con ligeras lágrimas corriendo por sus mejillas. Abrió la mano revelando la caja transportadora.

Cuidadosamente la colocó en el suelo cerca de una pared. Al segundo siguiente y acorde con el último rayo emitido por el sol antes de perderse en el horizonte, la caja emitió una pequeña luz que de a poco creció hasta formar un agujero en la pared, lleno de luces y colores.

-El portal… - musito Remus mirando anonadado el espectáculo.

-¿Qué pretendes? –exigió Sirius acercándose.

-Solucionar el problema –dijo la pequeña. Respiro girando sobre sus talones para en seguida ingresar al agujero, que al recibirla lanzo un trueno y poco a poco fue cerrándose.

Alarmado, James recorrió el corto tramo que lo separaba del portal arrojándose dentro de el. Sirius rápidamente lo alcanzo internándose en la oscuridad del agujero. Remus los siguió, pero no llegó a tiempo para entrar. El túnel se cerró dejando solo la pared. Nervioso, el licántropo golpeo el muro y respiro tratando de calmarse. Giro de vuelta al despacho de Dumbledore. "Creo que esto no puede complicarse más" pensó tocando suavemente la puerta del despacho.

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-¡¡¡Voldemort!!! –se escucho un intenso grito por toda la zona, sonido que ayudado por la soledad del mismo se intensifico provocando eco.

Nicole junto sus pequeñas manos cerrando los ojos. Poco a poco una pequeña luz se formo en el centro de sus palmas, las cuales separo lentamente para revelar una diminuta flama flotando en su mano. Abrió los ojos caminando decidida.

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-Sirius, ¿dónde estás? –James caminaba cuidadosamente entre la oscuridad con la pequeña luz en la punta de su varita iluminando su camino- ¡Sirius!

-James… -escucho la voz de su amigo, como un quejido. Debía estar herido.

-¡¡Sirius!!

-James… -se escuchaba cada vez más distante, parecía perder fuerzas- James… por… por favor…

-¿Qué?

-Por… favor… ¡bájate de encima de mí!

James se quedo frío y por primera vez miro el suelo bajo sus pies iluminando con su varita, lejos de ser el piso era el cuerpo magullado del anímago. De un salto se quito ayudándolo a reincorporarse.

-Lo siento, es que no se ve nada. Creí que...

-Ah, ya olvídalo –interrumpió irritado- pero la próxima vez que sientas "algo" bajo tus pies, fíjate que es. Eres capaz de aplastar a mi ahijada –James miro el suelo, apenado- por cierto, ¿dónde estamos? –pidió más tranquilo tratando de ver a su alrededor.

-No lo sé, pero será mejor movernos –sugirió. Sirius asintió sacando su varita para iluminar su propio camino.

Ambos se adentraban cada vez más en la oscuridad semejando luces y formas inexistentes. Pero era seguro que podían percibir sonidos… gritos y lamentos salidos de todas partes haciendo que perdieran el sentido de donde estaban y a donde iban. Claro que en realidad no tenían idea de si iban o venían.

-Rayos, no veo nada.

-¡Nicole! –gritaba James constantemente en busca de la pequeña, tratando de iluminar un poco más allá de su sombra.

-Esto es tan frustrante –se quejo cruzando los brazos, en actitud cansada.

James siguió caminando inmerso en su labor sin notar la ausencia de Sirius quien se detuvo varios pasos atrás mirando a su alrededor buscando algo que no fuera oscuridad. Algo de luz, quizá, que les indicará el camino correcto, o en el mejor de los casos a su ahijada. Volvió un par de pasos vislumbrando un cuerpo tendido en el suelo. Avanzó lentamente extendiendo la varita al frente para iluminar el cuerpo. Su amplia y elegante sonrisa se borró dando lugar a una expresión de horror latente.

-Ja… James… -susurro asustado. James se encontraba inconciente lleno de heridas y sangre, su varita a un costado de él, rota. Retrocedió con miedo chocando contra algo. Giro rápidamente encontrando el cuerpo inerte de Lily, con el rostro golpeado y sangre saliendo del vientre. Miro a su derecha, ahí estaba Remus y a su izquierda Peter- ¡NOOO! –grito sujetando su cabeza cayendo sobre sus rodillas.

-¡Sirius! –James llegó a su lado mirando los cadáveres- Sirius, levántate. Esto… no sé que es, pero…

-¡Shattergic! –una luz azul-plateada inundo el lugar, cegando a ambos chicos. Luego de nos segundos James parpadeo varias veces recuperando la visión. Los cuerpos habían desaparecido- no debieron seguirme.

-Nicole… -James miro hacia atrás, aún nervioso, encontrándose con la pequeña niña quien mostraba una flama en la palma de su mano- Sirius…

-¿Qué… qué paso? –se quejo poniéndose de pie y frotando su cabeza.

-Estamos en la "Zona de las Pesadillas" –explico la pequeña a una pregunta no formulada pero obvia, acercándose a Sirius y James.

-¿"Pesadillas"? –repitió Sirius pidiendo una explicación más clara, con la mirada.

-Este lugar reproduce las mayores pesadillas de quien entra.

-Por eso vi los cadáveres de…

-Ya olvídalo, Sirius –interrumpió James sintiendo un sabor amargo en la boca- Nicole, ¿sabes como salir de aquí?

-Por supuesto -musito seriamente- pero no los llevare conmigo, es muy peligroso y…

-Y tiene a Lily – intervino James, bruscamente- no permitiré que ese loco la lastime.

-Entre más vayamos, más posibilidades tenemos de volver… –dijo Sirius con ternura- ahijada.

Con la sola palabra, Nicole cambio su semblante dulcificándolo rápidamente. Miro alternadamente a los chicos, sabía que no importaba el argumento que utilizará ellos irían tras ella, y en el fondo le agradaba la idea de no ir sola. Tenía miedo, nunca lo admitiría, y definitivamente la compañía de Sirius y James aligeraba un poco la carga que ahora llevaba a cuestas. Podía sonreír con sinceridad sintiendo nuevas esperanzas surgiendo dentro de si. Asintió con la cabeza re-emprendiendo el camino bajo las instrucciones de la pequeña.

Sumergida en sus pensamientos, recordó vagamente la primera vez que había estado en la "Zona de las Pesadillas" hacia poco más de un año, cuando su padre aún vivía… Nunca supo como llegó a aquel lugar, solo recordaba todas las voces que llenaban la zona de un frío fúnebre y doloroso. Tampoco creyó que podría salir, pero gracias a las muchas conversaciones que había sostenido con John, su padre, supo como enfrentarse a la situación. El problema: su padre murió en cuanto ella pudo salir.

-Por la manera en que hablas no parece que tengas cuatro años –comento James sacándola bruscamente de sus pensamientos, caminaba a la derecha de la niña quien sonrío tristemente.

-Se me obligo a madurar –dijo casi en un susurro mirando con melancolía la pequeña flama que aún sostenía en sus manos- he sido perseguida por Voldemort desde que tengo memoria y… si no aprendía a defenderme hace mucho tiempo él hubiera ganado…

--------------------------Flash Back---------------------------

-¿Por qué tenemos que huir? –preguntó una Nicole de poco más de dos años, siendo arropada cálidamente en su cama, por una bella mujer, alta, esbelta de cabello pelirrojo.

-Linda –murmuro dulcemente inclinándose más sobre la niña, ya recostada- si hay algo que tienes que entender, es que quien nos persigue no le importa tener una razón, solo lo hace por diversión.

-¿Le hicimos algo malo?

-No, pero él cree que nuestra sola existencia es mala.

-Nosotros no somos malas personas, ¿o si, mami?

-Claro que no, linda –sonrío depositando un suave beso sobre la frente de la niña.

-¿'Él' es muy poderoso?

-Inimaginablemente –dijo terminante levantándose de la cama.

-¿Y hay alguien más fuerte que él, que le pueda hacer frente?

-Aún no, pero las estrellas dicen que llegará… -Nicole sonrío feliz- pero sabes muy bien que hasta las estrellas se pueden equivocar…

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Lo último que había sabido sobre aquel dictamen de las estrellas, era que la madre de aquel que derrotaría a Voldemort estaba bajo la protección de Dumbledore, en Hogwarts. De nuevo se vio forzada a interrumpir sus pensamientos mirando al frente.

-Ya llegamos –dijo de cara a una enorme puerta de madera, se veía desgastada y algo manchada de sangre y tierra, con unas cuantas telarañas.

-¿Dónde estamos? –pidió James mirando con desconfianza la 'entrada'.

-Está puerta conduce a un pequeño cuarto vacío en la parte trasera del castillo de Voldemort- explico la pequeña poniendo una mano sobre la puerta.

-Creí que entraríamos por la puerta principal –hablo Sirius. Suponía que el transportador los llevaría al salón principal del castillo o algo así- ¿por qué Voldemort nos envío a está zona?

-La "Zona de las Pesadillas" conecta todas las formas de acceso al castillo. Escogí la parte menos llamativa- miro a sus acompañantes- no quiero que se entere que estamos aquí, ¿no están de acuerdo? –ambos asintieron.

-¿Cómo es que conoces tanto este lugar? –preguntó James, junto con Sirius y Nicole empezaron a empujar la puerta.

-No es la primera vez que estoy aquí –confeso una vez abierta la entrada- procuren no hacer ruido –recomendó en susurros.

Entraron sigilosamente caminando entre pasillos débilmente iluminados por antorchas. Un frío silencio inundaba cada corredor, se podían percibir gritos de dolor y llanto. La poca luz presente dibujaba sombras de figuras inexistentes en cada esquina. James miro de reojo a Nicole, notando silenciosas lágrimas corriendo por sus mejillas. Sirius, en cambio, permanecía a la defensiva.

Internamente todos esperaban un ataque en cualquier momento. Y James mantenía alerta su oído, con la ferviente idea que Lily estaría siendo torturada, sacudió la cabeza bruscamente borrando aquel pensamiento. Debía mostrarse optimista, y si estaban ahí era porque mantenían la esperanza latente.

Sirius trataba de imaginarse todo como una especie de juego, procuraba quitarle peso a la gravedad del asunto. Normalmente así era como enfrentaba las situaciones más difíciles. Sonrío con ironía, claro que en ninguna ocasión anterior se había visto envuelto en un enfrentamiento contra Voldemort.

Nicole seguía inmersa en sus pensamientos, repentinamente no podía evitar que todos sus recuerdos en compañía de sus padres fluyeran en su cabeza robando la poca atención que procuraba mantener. La sola idea que algo malo le ocurriera a Lily, por su culpa, la carcomía en sobremanera. Recordaba que el primer consejo de su padre, cuando tuvo uso de su razón, fue: "Siempre mantén la cabeza, con todo lo que tiene dentro, sobre tus hombros. Especialmente en las situaciones difíciles" A pesar de que John siempre se había mostrado como un esposo y padre sumamente afectuoso, Nicole recordó con melancolía que el siguiente consejo que obtuvo del hombre fue: "Procura mantener los sentimientos lejos de los problemas, ya que normalmente hacen que pierdas la capacidad de razonar"

Luego de varios minutos corriendo de un pasillo a otro, ocultándose tras grandes estatuas y sumergiéndose largos tiempos en las penumbras para no ser vistos, llegaron a la habitación principal. Curiosamente las puertas estaban abiertas. Un amplio comedor, débilmente iluminado, era el interior. Al fondo Lord Voldemort se encontraba sentado en una silla negra con forro rojo oscuro. A cada lado había un par de mortífagos cubiertos de pies a cabeza por una túnica en negro y una mascara blanca cubría sus rostros.

-Bienvenidos –saludo elegantemente- aunque solo esperaba a la pequeña Nicole –el trío se mantuvo unido. Sirius y James a cada lado de Nicole- y naturalmente deben entender que solo garantizo la seguridad de la dama.

Con un golpe seco, las puertas a sus espaldas se cerraron, varios mortífagos se colocaron en las cuatro paredes de la habitación. Sirius y James se pusieron en guardia instintivamente, Nicole dio un leve respingo pero no aparto su atención del Lord.

-Si ellos no están seguros, aún puedo irme –amenazo dando un pequeño paso al frente.

-Me temo que ya olvidaste el motivo de tu visita a mi castillo –sentenció Voldemort caminando lentamente hacia el trío, ondeando gracilmente su túnica. Con una indicación de su mano, dos de sus sirvientes quitaron la silla donde estaba sentado el Lord, revelando una pequeña cama donde reposaba Lily, inconsciente. Traía puesto un sencillo vestido blanco de tirantes.

-Lily… -susurro James bajando la varita.

-¿Qué le hiciste? –exigió Sirius alarmado al notar manchas de sangre en la ropa de la pelirroja.

-La señorita Evans se puso algo inquieta… me obligo a utilizar medidas más drásticas –explico burlonamente, encendiendo la ira de los chicos, sobre todo de James quien estuvo a punto de ir a su encuentro pero el cuerpo de Nicole frente a él lo detuvo de cometer una locura.

-¡Dijiste que no la lastimarías…! –chillo Nicole dando un par de pasos más al frente.

-Y no lo hice –mofo- de haberlo hecho, ahora estaría muerta.

Tratando de encontrar una solución sensata al problema que bajo aquella situación se ponía cada vez más denso, James miro a su alrededor analizando la habitación. Cerca de 50 mortífagos se encontraban de pie vigilando cada uno de sus movimientos, las puertas estaban cerradas siendo la única forma de acceso al lugar. Detrás de Lily había una gran chimenea y varios candelabros alrededor. Había varios ventanales, cerrados y custodiados por dos o tres mortífagos, cada uno.

-Muy bien, pequeña Nicole. Es hora de hacer un trueque –Voldemort extendió la mano invitando a la pequeña a seguirlo.

La pequeña pelirroja miro a espaldas del Lord, el cuerpo casi inerte de Lily. De nuevo sentía deseos de llorar, por su culpa Lily se estaba debatiendo entre la vida y la muerte como alguna vez había hecho su padre, pero él… no sobrevivi

---------------------------Flash Back--------------------------

La sala estaba impregnada por un fuerte olor a muerte, pero 'el momento' aún no llegaba para John Devencrow. En el previo duelo que había sostenido contra Voldemort, éste lanzo su último hechizo: el Avada Kedavra. Por "suerte", el padre de Nicole había podido salvarse del rayo directo pero resultó herido en el brazo izquierdo. El problema era que aquella maldición actuaba como una especie de virus, y aunque solo lo hubiese herido le quedaban minutos antes que el hechizo alcanzará su corazón.

Tendido en una de las camas de la amplia mansión Devencrow, John reposaba lo más tranquilo que pudiese con su esposa sentada en una silla a su izquierda y su pequeña hija al otro lado de la cama hecha un mar de lágrimas.

-No llores –musito el hombre acariciando su cabello pelirrojo- sabes que no debes hacerlo.

-Esto es por mi culpa –gimoteo sin levantar la cabeza de las cobijas.

-No moriré en paz con esa idea –aquello fue suficiente para capturar la atención de Nicole- esto no es tu culpa –poso una mano sobre la pequeña y sonrojada mejilla- ahora lo que debes hacer, es ser fuerte, muy fuerte, más fuerte de lo que es Voldemort

-Pero yo no puedo…

-Claro que puedes, tú llegarás a ser más fuerte que él. Y debes luchar por detenerlo.

-Papá… -respingo al verlo cerrar sus ojos cansadamente.

-Prométeme que no te darás por vencida –la mirada fuerte que deposito sobre ella le hizo responder afirmativamente.

Con una especie de golpe, el cuerpo de John se sacudió bruscamente confirmando su muerte. Aferrándose a las sábanas, Nicole ahogo un grito derramando las últimas lágrimas que sus ojos, su orgullo y la promesa a su padre le permitieron. Su madre se levanto de su lugar posándose tras Nicole, coloco una mano sobre el hombro de la pequeña llamando su atención…

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Volvió a la realidad al sentir la mano de James sobre su hombro, en aquel gesto tan familiar que su madre había tenido con ella. Miro al chico descubriendo en sus ojos una sola frase: "no vayas", giro hacia Sirius mirándolo con pesadumbre. Él tenía el mismo semblante. Resignada dio un paso al frente pero fue detenida nuevamente por James quien se hinco a su altura acercando su rostro al de ella para susurrarle al oído.

-Incendia las puertas –fueron sus únicas palabras, miro a Sirius indicándole su plan.

-¿Y bien? –pidió Voldemort algo exasperado.

Nicole sonrío traviesamente formando una esfera roja entre sus manos que rápidamente arrojo contra la puerta incinerándola en cuestión de segundos, con algunas llamas saltando hacia los enmascarados más cercanos al marco. Con el grito de James, salieron corriendo siendo seguidos por los mortífagos bajo el mandato del Lord.

-¿Cuál es el plan? –interrogó Sirius corriendo al lado de James.

-Rescatar a Lily y salir de aquí –sonrío, Nicole lo miro extrañada. Doblaron en una esquina y al cerciorarse que nadie los seguía se ocultaron tras una estatua.

-Brillante –mofo el anímago- ¿cómo?

-Me deslizaré por alguna chimenea del castillo hasta llegar al comedor –resumió- no sé si lo notaron, pero detrás de Lily había una chimenea. Debo suponer que todas las chimeneas de este lugar están conectadas entre si.

-Buen plan, pero no irás solo…

-Claro que si –interrumpió bruscamente- tú y Nicole saldrán de aquí, así Voldemort no podrá condicionarnos –ordeno mirando por un segundo a su amigo y luego a Nicole- ahora veo que fue mala idea traerte.

-No pienso irme sin Lily –chillo cruzando los brazos a manera de puchero.

-Deja de hacerte el héroe –mofo Sirius imitando la actitud de la niña- iremos todos o nadie –James guardo todo comentario evaluando la situación. Sabía que no lo dejarían ir solo y tampoco podían quedarse a discutir, estaban perdiendo tiempo.

-Nicole, ¿dónde queda la chimenea más cercana?

La pequeña sonrió mostrando el camino hasta una habitación a poco distancia de su escondite. Entraron por el canal que conectaba las chimeneas. James iba a la cabeza, con Nicole detrás y Sirius en la retaguardia. Pasaron por varias habitaciones vacías teniendo sumo cuidado de no hacer ruido, los mortífagos aún los buscaban y cualquier sonido que hicieran podía significar un maleficio seguro.

---------------------------Flash Back---------------------------

-Te encuentras en una habitación pequeña, una bodega –explico paseando por la habitación, Nicole sentada en una pequeña mesa al centro del cuarto escuchaba con atención a su madre- con cuatro ventanas y una pequeña rendija como únicas salidas, todas custodiadas. La sala está llena de cajas, papeles y demás distracciones para ocultarse, pero ello no elimina la posibilidad de que te atrapen. Un ser muy querido para ti se haya capturado. ¿Qué haces?

Nicole analizo la situación con cuidado, descartando por supuesto las ideas de llorar, correr, gritar o algún similar. Nada de eso solucionaría el problema. Miro a su madre, los últimos días los habían dedicado en gran parte a resolver acertijos de ese tipo. ¿Para qué? Eran como una especie de aprendizaje, algo para agilizar la mente en situaciones peligrosas.

-Crearía una distracción para escapar y me dejaría ver fuera del lugar para que descuidarán la vigilancia hacia el rehén. Así podría volver por el.

-¿Y qué harías si amenazarán con matar al rehén? –intervino el señor Devencrow, ingresando a la habitación.

-Volvería…

Error. Aquella no era la respuesta correcta.

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Llegaron a la chimenea correcta, agudizaron el oído llegando a una sola conclusión: no había nadie en la sala. Seguramente Voldemort había salido junto con los mortífagos. Apoyándose con su varita, James apagó el fuego descendiendo cuidadosamente, bajo a Nicole y Sirius cayó tras ellos. Lily seguía en la cama, inmóvil y la puerta principal estaba abierta. Por lo demás, seguía igual.

-Tal vez podamos salir por el mismo lugar –opino Sirius cerca de la chimenea junto a Nicole. James caminaba sigilosamente hasta Lily.

-El único problema será la "Zona de las Pesadillas" –dijo Nicole mirando al frente.

-¿Por qué? –indago James deteniéndose en seco frente a Lily ante la afirmación de la niña.

-Todas las salidas conducen a un bosque, bastante extenso que rodea el castillo, pero estamos en una isla y…no se como volver a Hogwarts –explico nerviosamente. Sirius y James intercambiaron miradas.

-Pensaremos en eso después –dijo James terminante.

-¿Qué paso con la caja que nos trajo aquí? –preguntó Sirius en un intento por encontrar la solución.

-Se desintegro.

James coloco los brazos bajo el cuerpo de Lily, listo para levantarla. Pero con el solo contacto el cuerpo de la chica desapareció. La puerta principal se cerró de golpe mostrando a un Voldemort que se ocultaba tras ella.

-Buen intento –siseo sonriendo con arrogancia. Sirius giro sobre sus talones descubriendo a dos mortífagos cubriendo la chimenea, y sobre ésta Lily colgaba de manos- bien, niños. Dejémonos de juegos –dio un par de pasos hacia el trío- pequeña Nicole no tomas muy en serio la vida de tu amiga. Ahora, es la última oportunidad que tienes para venir conmigo o… tendré que solucionar este contratiempo a mi manera.

Sirius coloco a la pequeña tras él. James se reagrupo con ellos lentamente. Ambos anímagos al pendiente de los movimientos tanto del Lord como de los mortífagos, por suerte, estos últimos no tenían muchas intenciones de atacar. Pero nada era seguro, con un solo movimiento de Voldemort ellos atacarían sin pensar.

-Suficiente –murmuro el mago levantando la varita, dispuesto a terminar el asunto.

Nicole cerró fuertemente los ojos aferrándose al brazo de Sirius quien junto a James levantaron las varitas en defensa. Voldemort sonrío confiado, de la punta de su varita surgió una luz verde que crecía alarmantemente. Aquello solo significaba una cosa: el Avada Kedavra. Las respiraciones del trío se volvieron más rápidas sabiendo que nada detendría el ataque, excepto esquivarlo pero siendo Voldemort un mago experimentado y ellos solo estudiantes no había muchas posibilidades de esquivar diez ataques seguidos, si lograban burlar uno sería demasiado.

De pronto, la habitación se cimbro destruyendo todas las ventanas dando paso a una ráfaga de viento que cerró la puerta con un golpe seco. Un individuo encapuchado entró por un marco de las inexistentes ventanas. Los presentes lo miraron intrigados, incluso Voldemort contuvo su maleficio por la curiosidad de conocer la identidad del intruso. Nicole se separo un poco de los anímagos mirando fijamente al recién llegado, que, quitándose la capucha reveló su condición de mujer. La pequeña sonrío ampliamente al reconocerla.

-¡Nicole! –exclamo arrojando una pequeña caja en dirección de la niña.

Ambas conectaron miradas asintiendo con la cabeza en señal de acuerdo. James y Sirius miraron la escena sin entender pero manteniendo la guardia. Voldemort levantó su varita, de nuevo, apuntando hacia James, emanando furia al reconocer0 a la mujer.

-Avada…

-¡Ahora! –gritó la mujer sacando una especie de flauta pequeña y plateada con un extraño grabado. La acercó a sus labios tocando una bella melodía.

Nicole abrió la caja que le había sido entregada, igualmente plateada y con el mismo grabado de la flauta. Comenzó a cantar en un idioma extraño al compás de la música. La varita de Voldemort cayó al suelo con un golpe seco soltando un rayo rojo que dio en el brazo izquierdo de James. La caja emitió una brillante luz que dio de lleno al Lord, al contacto con su cuerpo, su piel comenzó a palidecer debilitándolo notoriamente. En cuestión de segundos, el mago tenía la apariencia de un cadáver viviente, con un último esfuerzo volvió a levantar la varita de nuevo hacia James pero no logro ni enfocar bien antes de ser absorbido por la luz hacia el interior de la caja, Nicole la cerró rápidamente. En cuanto la melodía y el canto cesaron, el castillo comenzó a cimbrarse con fuerza.

-¡De prisa, hay que salir! –gritó la mujer señalando la ventana por donde había entrado.

-No podemos irnos sin Lily –intervino James sosteniendo su brazo herido en un intento por detener la hemorragia.

La mujer asintió formando una especie de daga con sus manos a base de fuego. La lanzó a la soga que ataba las manos de la chica, con un movimiento suave sostuvo a la pelirroja en el aire. Sirius se acercó tomándola en brazos.

-Está helada –informo asustado- debemos irnos.

-¿Cómo saldremos de aquí? –preguntó James mirando a sus espaldas la desintegración del lugar.

-Por la ventana –los chicos la miraron como si hubiera perdido la cabeza. Se hallaban, en el cuarto piso del castillo- vengan, no hay tiempo.

Se acercaron al ventanal, debajo de éste fluía una superficie circular muy similar al agua. La mujer los apuró con las manos. James se acercó, dudoso. Ante la indicación de que saltará, miro de reojo a Lily, finalmente se aventuró apretando con fuerza su brazo izquierdo. Al contacto con la superficie, su cuerpo desapareció. Sirius, sujetando con fuerza a Lily y Nicole sosteniendo la caja entraron en seguida. Finalmente la mujer abandono el castillo que en cuestión de segundos quedó reducido a polvo y escombros. Un silencio fúnebre rodeo la isla mientras la noche caía pesadamente.

Continuar

Notas de la autora: Ok, antes que nada: una disculpa. Sé que dije que no me tardaría con el siguiente capítulo, pero hubo situaciones fuera de mi alcance que me obligaron a detener no solo está sino todas mis historias -- En fin, entre que mi computadora se me rebelaba, mi trabajo como niñera y otras situaciones con mi "jefe" pues todo se me complico. Ahora la parte buena, ¡volví! D ja, para quienes creyeron que no lo lograría.

Y como dice en el summary: "Actualización general y un fic nuevo" Pues es eso, he puesto un nuevo capítulo en cada una de mis historias y he subido un nuevo fic, ese sobre la boda de James y Lily. Y sobre eso, les cuento mi drama, snif, snif, como ya dije antes mi pc se revelo y con ello se perdieron todas las direcciones de msn que tenía, así que el favor que les pido ahora es que quienes ya estaban anotadas si no es mucho pedir me den de nuevo su msn, y las que no, bueno también me agradaría tener más amigas con quienes conversar. Me pueden dejar las direcciones en los reviews, así ya no hay pretexto para no dejar uno -

Sobre este cap, pensaba hacer más largo el asunto con Voldemort, pero como ya los hice sufrir mucho pues mejor lo recorté. Y como a muchos no les agrado lo que hice en el capítulo 5, ji, ji, pues ya tuve que arreglarlo. Ahora la pregunta del millón: ¿Lily despertará? Ja, soy mala, tal vez la mate. Ehm, como iba diciendo, espero sus comentarios, sugerencias, amenazas, etc., etc. Y recuerden, dentro de 2 o 3 capítulos llegaremos al final.

Respondo reviews:

Ely-Barchu: Lamento mucho haberme tardado, de nuevo -- te juro que no fue intencional. Espero que te haya gustado este capítulo, ya sabes cualquier duda házmela saber. Muchas gracias por tus comentarios, siempre son de ayuda y aunque la historia no está muy centrada a romances y eso, habrá algo de diversión ya que nos deshicimos de Voldemort. Por cierto, una duda, ¿la dirección que me diste de tu email, es solo para el correo o también la usas para el msn? Digo porque si tienes msn me daría mucho gusto conversar contigo, y si pudieras darme la dirección completa porque se quedo en y no sé de que cuenta. Besos y cuídate )

LILY-EVANS: O.O ehm, solo tengo una cosa que decir en mi defensa: lo siento -- es que Voldy se me salió de control y ya ves lo que paso. Lo importante es que ya lo arregle, creo que se quedará quietecito por un buen rato ) Ojala con esto me libre del castigo y ya no quieras matarme, espero tus comentarios sobre el capítulo. Besos y gracias P

Laurana-malfoy-rin: Espero que puedas volver a perdonarme por mi retraso -- ya explique mi situación y creo que es comprensible, ¿no? Y bueno no mataré a Nicole, pero por Lily, je, je, je soy mala ¿verdad? Ya veremos que pasa después, depende de los reviews que reciba veré que es lo más conveniente. Muchas gracias por tu apoyo. Besos )

Cristie: Gracias por tus comentarios espero que este cap, igualmente haya sido de tu agrado ) Ya veremos que pasa, Voldy se ha ido pero ha dejado huella y sobre ello nadie sabe… Besos y cuídate )

Zzz: No te preocupes por los reviews, lo que cuenta es que ya andas con nosotrs. Sobre el largo del capítulo, creo que está más o menos ¿no? algo así como 'aceptable'.Nicole ya libro el problema pero por Lily aún no lo sabemos. Gracias por tu observación hacia el nuevo J&L. Ya está publicado, así que si quieres darte una vuelta haya te espero. Besos y cuídate P

Gabi-Granger: Muchas gracias por tus comentarios, sobre tu fic prometo seguirme dando vueltas para verlo y siempre que pueda te dejare un review. Besos y suerte )

Sandra: Espero que este capítulo también haya sido de tu agrado, sobre lo de 'tocaya' se refiere a que te llamas igual que yo - Hice todo lo posible por publicar a la brevedad, pero entre una cosa y otra… solo espero continuar con mi ritmo habitual. Besos )

Mune-potter: ¡Mujer, contigo me confundo mucho! ¿Podrías especificarme cuantos nicks tienes? Tengo entendido, que son Amy Black, mune-potter, ¿y cuál otro? Lamento la demora fue algo muy lejos de mi alcance y no te preocupes por tardarte en leer, yo entiendo que escribiendo historias el tiempo se reduce un poco. Espero que este cap te haya gustado y supongo que deje más dudas ¿no? En fin, ya veremos que pasa. Y si no es mucho pedir, ¿me podrías volver a dar la dirección de tu msn? es que ya comprendes mi asunto y quiero seguir platicando contigo. Besos y suerte P

Es todo por ahora, ya saben: los reviews son fuente importante para la próxima actualización D

Se despide,

Su amiga

Andy Yogima.