Capítulo 14:

- ¡Aléjate de mí, Harry!

- Claro que no, este es un país libre y yo puedo ir por donde yo quiero...

- Pero me estás siguiendo ¬¬.

- ¿Y?

- ¡Déjame tranquila! – dijo por octava vez ya harta de esta situación.

- Lo haré cuando me respondas lo que te pregunté.

- Jamás lo haré¿entendiste? – preguntó volteándose su cabeza para ver como el chico la seguía con unos metros de distancia - ¡Jamás!

- Ok, pero no puedes huir por siempre...

El Gran Comedor estaba abarrotado de estudiantes cenando o más bien dicho, devorando los trozos de carne. Aunque eso no impedía que se escuchara el constante murmullo de las conversaciones entre ellos.

La mesa de Gryffindor estaba como siempre, a excepción que Seamus estaba arrojando espinacas a la cara de Neville mientras todo veían con cierto interés el espectáculo.

- Menos mal llegaste, creímos que nunca vendrías – dijo sonriendo Hermione al ver que Harry llegaba y se sentaba frente suyo.

- ¿Estás bien amigo? – le preguntó Ron después de ver que Harry observaba atentamente a Lavander.

- ¡Tierra llamando a Harry! – gritó Hermione y Harry casi se cae del asiento del susto.

- Menudo susto me has dado¿qué pasa? – preguntó más aliviado el muchacho.

- Te pregunté si estaba bien, ya que estabas como en la luna...¿Acaso te gusta Lavander para que la mires así? – preguntó en tono burlón el pelirrojo.

- No ¬¬...Ron nunca pienses eso de mí...

- Lo que pasa es que Harry sólo tiene ojos para Gin, Ron – explicó su novia – Así que hay otra razón para que esté mirando como un sapo a Lavander...

- Exacto – respondió Harry y volvió a su tarea de mirar a Lavander.

- Hablando de Gin¿dónde está?

- No lo sé, creo que está en su cuarto porque se sentía muy mal – respondió encogiéndose de hombros Hermione.

- ¡¡Maldita sea¡¿QUÉ QUIERES?! – gritó a todo pulmón Lavander después de quince minutos de que Harry sostuviera su mirada en ella.

- ¡Que me ayudes! Por favor... – Harry puso cara de cordero degollado – Hazlo por el bien de este pobre chico que está desesperado...

Todos los Gryffindors dejaron de mirar la pelea de espinacas entre Neville y Seamus y voltearon sus rostros para ver la interesante discusión de Lavander y Harry.

Parvati estaba de lo más confundida e intentaba usar sus pocas neuronas para saber de qué trataba, Hermione y Ron también andaban en las mismas, Seamus se limpió la montaña de espinacas de su cabello y apareció unas palomitas de maíz para comer mientras veía con sumo interés.

- ¡Te dije que no y es no, retardado mental!

- Lavander, por favor...¡Es el único favor que te he pedido en mi vida!

- ¬¬ Muérete, Potter...

- Simpática ¬¬... – dijo en tono sarcástico.

- Acosador...

- Antipática...

- Mandón...

- Incomprensible...

- ¡Cabeza hueca!

- ¡Insensible!

- ¡Argh! Está bien...¡Te voy a ayudar, pero me debes una, Potter! Una bien grande... – al fin se iba a librar de Harry.

- ¡Te amo, eres lo mejor del mundo, eres mi salvadora, eres increíble! – Harry se abalanzó a abrazarla.

- Ok, ok, ok...Mucho amor por el momento – dijo ella apartándolo de su lado – Vayamos a otro lado a charlar.

- Vale – y los dos se levantaron dejando a toda la casa de Gryffindor con ansías que siguieran discutiendo.

OoOoO

- Gin¿en serio no irás a cenar? – preguntó Britney con la puerta entreabierta.

- No, no tengo ganas de comer – respondió desde adentro la voz de la pelirroja que sonaba algo entrecortada, ya que había estado llorando.

- Está bien – respondió Britney suspirando y cerró definitivamente la puerta.

No podía dejar de pensar la razón por la cuál había llegado tan deprimida a la habitación en la tarde después de haberse ido a dar un paseo por el castillo. ¿Sería nuevamente lo de siempre? No, no podía serlo. Harry nunca podría haberle hecho algo tan malo como para que llorara de esa forma. Y peor aún: no se lo comentaba.

De repente chocó con alguien y cayo de espaldas al suelo quedándose media sentada, con los codos apoyados y las piernas abiertas.

- ¡Britney, disculpa! – dijo Harry ayudándola a levantarse.

- No te preocupes, Harry – dijo ella negando con la cabeza - ¡Harry¿Qué haces acá? No se puede estar en los dormitorios de chicas...

- Yo lo ayudé a subir – explicó Lavander.

- O sea que ustedes están...¿juntos¡Potter! Eres un desgraciado¿cómo te atreves hacerle eso a Ginny? Y te lo tenías bien guardado...

- ¡Shh! – Harry el tapó la boca con las manos – No estoy saliendo con Lavander y Ginny puede escuchar...

- ¿Entonces qué haces acá? ¬¬ - preguntó incrédula.

- Lo voy ayudar para que se declare a Ginny – contestó Lavander – Soy su consejera en asuntos amorosos...

- ¿Seguro que no es alguien disfrazado de Harry? ¬¬...

- No, eso lo pensé, pero descarté la idea.

- Se nota que me tienen confianza ¬¬ - dijo Harry cruzándose de brazos – No soy tan cobarde¿ok?

- Ajá...¡Qué emoción! Yo quiero ayudarlos¿puedo, no?

- Claro, Britney. Bien, necesito que traigas... el disfraz – dijo Lavander.

- ¿Cuál disfraz?

- ¡Ya sabes tú!...¡Cenicienta!

- ¡Ah! Voy ahora mismo y ustedes vayan a tu cuarto – ordenó mirando a Lavander – Allí nos juntamos en cinco minutos.

OoOoO

Britney entró sigilosamente a su habitación para no molestar a Gin – "¿Qué rayos...¡Esta también es mi habitación así que yo entro cuando quiero" – pensó ella caminando normalmente hasta llegar a la silla donde se encontraba el vestido que usó Ginny ayer en la noche.

- ¿Quién anda ahí? – preguntó Ginny saliendo de las sábanas de su cama.

- Yo – respondió Britney tomando el vestido cuidadosamente.

- ¿Qué estás haciendo con mi vestido? – dijo levantándose de la cama y tomando uno de los hombros de su amiga.

- Corrección: Mi vestido, yo te lo presté. Debo devolverlo a Lavander, porque sino va a matarme...

- Tienes razón, disculpa. Anda – se disculpó la pelirroja sonriendo débilmente y volvió a esconderse bajo las sábanas de su cama.

La muchacha de cabellos negros sólo suspiró y tomó el zapato de cristal entre sus manos. Avanzó hasta la puerta y se dio media vuelta para observar por última vez a la pelirroja que se encontraba sollozando aún bajo las sábanas de su cama.

Negó con la cabeza y se fue de la habitación.

OoOoO

Harry estaba sumamente nervioso moviendo sus pies sentado en la cama de Hermione que se encontraba frente a la de Lavander. Tarareaba la canción que había cantado el Sombrero Seleccionador a principios del año.

La puerta se abrió y entró Britney con un bulto entre sus brazos de color celeste claro.

- Ok, Harry ¿este es el vestido que usó tu Cenicienta? – preguntó Lavander estirando el vestido y enseñándoselo al nervioso chico.

- ¡Sí! – respondió emocionado.

- Tenías toda la razón, este disfraz lo usó Ginny para ir clandestinamente al baile.

- Es cierto, yo la ayudé a escaparse hasta la media noche junto con Hermione para ir al baile – dijo Britney – Y hay un problema, uno de los zapatos se le perdió a la muy tarada...

- Acá lo tengo, se le salió cuando corría para, seguramente, volver al castigo – Harry sacó desde uno de los bolsillos de su chaqueta la zapatilla de cristal.

- ¿Cómo te cabe un zapato ahí? ¬¬...

- Los bolsillos son grandes, Lavander.

- Bien y ¿cómo te declararás a Gin? – preguntó Lavander.

- Claro, será así...

OoOoO

Hermione caminaba en dirección a la sala común de Gryffindor. Después de haber pasado tiempo junto a Ron haciendo...bueno, haciendo sus cosas fue a la biblioteca para obtener algo de información para la tarea de Herbología.

Los pasillos estaban bastante tranquilos y sólo es cuchaba el crepitar de las llamas de las antorchas que alumbraban su camino.

De repente alguien la tomó por la cintura y la llevó detrás de una estatua de un Mago con una varita y su sombrero ardía en llamas.

- Mierda, Harry me asustaste – dijo ella algo más calmada - ¿Qué pasa que te ríes?

- Es que jamás imaginé escuchar decir ese tipo de palabras, prefecta perfecta – dijo entre risas el muchacho.

- Gracioso, me asustaste...No siempre alguien te toma por la cintura y te lleva detrás de una estatua¿pasa algo? – preguntó viendo que el semblante de Harry cambiaba a seriedad.

- Necesito tu ayuda en un asunto...

- Cuéntame.

- Me voy a declarar a Ginny y necesito que la convenzas de algo...

- ¡Oh, Dios mío! Esto es un milagro¿seguro que tú eres Harry? ¬¬ - preguntó tocándole la frente.

- ¡Deja eso! Britney también creyó eso cuando se lo conté y Lavander igual – replicó enfadado.

- Vale, vale. Pero es que es tan emocionante todo esto, por fin estarán los dos juntos...

- Claro, eso lo sé.

- ¿Y en qué quieres que te ayude? – preguntó curiosa.

- Necesito que...

OoOoO

Una hora más tarde en la sala común de Gryffindor...

- Pss, Harry – dijo alguien escondido debajo de la mesa donde se hacían los deberes.

- Lavander, Britney, Hermione ¿qué hacen acá abajo? – preguntó desconcertado Harry metiéndose bajo la mesa y acomodándose junto a Britney.

- Queríamos informarte que el plan "Soy un pobre idiota que nunca me había dado cuenta que me gustaba Ginny y ahora decido declarármele" está en marcha y mañana temprano empezará – le informó Lavander.

- Genial...¿A quién se le ha ocurrido el nombre del plan? ¬¬Xxx...

- ¡A todas! – respondió Hermione sonriendo.

- ¿Podrían cambiarlo?

- ¿Tienes uno mejor? – inquirió Britney arqueando una ceja.

- No ¬¬...No soy muy bueno inventando cosas – confesó Harry maldiciendo no tener una idea.

- Bien, queda como tal está.

- Ok, Harry. Eso era todo, mañana en la mañana da inicio el plan... – dijo Lavander.

- Si no funciona juramos que Merlín se revolcará en su tumba... – continuó Britney.

- Y si no ganas el partido de Quiddittch perderé 15 galeons que aposté con un chico de Hufflepuff, así que ¡gana! – finalizó muy entusiasta Hermione.

- Vale, lo haré. Y ahora salgamos de acá, todos están como sapos mirándonos por estar aquí abajo ¬¬...

- ¡A la orden, capitán! – contestaron las tres chicas saliendo debajo de la mesa junto a un Harry que estaba de lo más nervioso por el día de mañana.

Notas de la autora: Aloja! Bien, este es el penúltimo capítulo donde vemos que Harry andaba desesperado a tal punto que estaba persiguiendo a Lavander para que lo ayudase!!

Bien, espero que de verdad les haya gustado y se hayan reído algo, ya que quería poner humor a la historia esta vez.

También espero sus reviews ¬¬...Acepto que puede que muchos estén de vacaciones, pero lo digo en serio...da lo mismo si están registrados o no en la página, puedo recibir los reviews de aquellos no registrados!! Así q no tienen excusa ¬¬...

Puede que me tarde con el siguiente capítulo, ya que será el más largo...más de 10 páginas y para este fic eso es enorme! O.o

Besos a todos y espero sus reviews, adiós!