En otra parte del universo, un joven de cabello negro observaba la luna de su planeta, que después de 3 ciclos, habían podido reconstruir su querido planeta. Aunque su cuerpo estaba en aquel lugar, su alma, su ser, su esencia se encontraba en otro, el planeta Tierra.

— Bombón—dijo en susurros— no sabes cuanto te extraño

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Capitulo 4

Una despedida amarga

En el castillo

La princesa Kakyuu miraba por la ventana su basto reino, lleno de flores y de seres felices, bueno casi todos, ya que tres estrellas fugaces tenían sus mentes ocupadas. Ella sabía cual era la solución, pero se encariñó tanto con ellos que le era imposible apartarlos de su lado.

— Seiya, Taiki, Yaten, mis queridos guardianes, ya es hora de que partan; son unas estrellas fugaces que no pueden quedarse mucho tiempo aquí, pues su corazón esta con ellas— dijo para si misma

— Princesa— dijo un emisario haciendo una pequeña reverencia— ¿quería verme?

— Si, quiero que vayas a la Tierra y me informes como están las cosas allá.

— disculpe alteza, pero no le entiendo, ¿a que cosas se refiere?

— No nos hagamos—esboza una sonrisa— me refiero a tres Sailor's en particular, Mercury, Venus y en especial a Sailor Moon.

— ya comprendo, haré lo que me pide, ¿Cuándo quiere que parta?

— Hoy, y también que regreses hoy

— Pero eso es imposible

— No, te daré una ayuda especial

— Como usted ordene alteza

Volvió a hacer una reverencia para salir del salón, dejando a la princesa sumida en sus pensamientos.

— necesito hablar con ellos, solo que antes debo… buscarlas.

En el jardín

Dos jóvenes platicaban sin mucho ánimo, mirando a su hermano con cierta melancolía

— aun no la olvida— dijo el joven de cabello blanco

— lo se, es difícil de olvidar algo que quieres tanto

— hablas por experiencia o por…

— ¿de que estas hablando? ¬¬´, YO NO HABLO POR EXPERIENCIA, YO NO LA EXTRAÑO TANTO COMO EL, ADEMÁS YA ME ACOSTUMBRE— sin darse cuenta había dicho lo que mantuvo en "secreto" durante tanto tiempo

— así que lo admites

— Pero tu no te quedas atrás, o me vas a decir que no extrañas a cierta diosa del amor.

— ¡¡¡¡Claro que lo niego Taiki!!!! Yo no siento nada por ella, así que no la extraño, crees que extrañaría traerla colgada del cuello y siguiéndome todo el día, ver su hermoso rostro y su mirada amorosa que solo es para mi...— hizo una pausa y suspiró— a quien engaño, si no hago más que pensar en ella. Hermano creo que los tres estamos igual

— Te equivocas Yaten, él es el más afectado

— Si tan solo pudiéramos verlas o hablar con ellas, creo que todo sería diferente

Las palabras cesaron, dejando un silencio incomodo. Sus miradas estaban fijas en su hermano, quien seguía estático viendo la luna.

— Jóvenes, su alteza desea verlos— dijo haciendo una pequeña reverencia un emisario

— En un momento vamos, gracias— contestó cortésmente Taiki

El emisario se retiro, y se dirigió hacia donde Seiya para darle el mensaje

En el castillo

— Alteza, los jóvenes Kou se encuentran aquí, ¿los hago pasar?

— si, y también llámalas a ellas— dijo sin mucho ánimo

Su dama de compañía se retiro para cumplir las instrucciones, dejando a la princesa sola sentada en su trono. Tendría que ser fuerte, despedirse de ellos no sería fácil y menos decirles la verdad.

La puerta se abrió de par en par, dejando ver a tres siluetas masculinas caminando hasta ella y poniendo una rodilla en el piso en señal de respeto

— Alteza, estamos a sus órdenes— dijo Seiya con la vista clavada en el suelo

— Si, de pie— ellos se sorprendieron era la primera vez que los trataba tan fríamente— ya han pasado tres ciclos, en los cuales el planeta ha sido reconstruido, con su ayuda. Les agradezco al igual que todo el pueblo pero… ya es tiempo de acabar con esto.

— ¿a que refiere? — replicó Taiki

— a que es tiempo de decirles la verdad acerca de quienes son en realidad

— Princesa, sabemos quienes somos, somos sus Sailor's que están para protegerla.

— te equivocas, ustedes no son Sailor's

La mirada de los jóvenes cambio, no se esperaban algo así de parte de la princesa y menos tan drástico.

— Alteza, ¿me podría explicar eso? — dijo Yaten

— Si no me interrumpieran podría seguir— Yaten se apeno ante tal respuesta de su "soberana" — en ninguna época los hombres han tenido ese titulo, pero con ustedes se hizo una excepción. Se les concedieron los poderes por la amenaza que representaba Sailor Galaxia, hasta que las verdaderas Sailor Star Fighter, Maker, Healer aparecieran.

En el rostro de Seiya se reflejaba la incertidumbre, si todo lo que el había sido, por todo lo que había luchado era solo "mientras" las verdaderas guerreras aparecían.

— Princesa Kakyuu— irrumpió Seiya enojado— si esto es una broma, me parece de muy mal gusto. ¿Me quiere decir que todo lo que hemos hechos en todo esto tiempo, arriesgar nuestra vida y la vida de las personas que amamos, QUE YO AMO, y que todo por lo que luche era solo momentáneo?

— Modula tu voz, seas o seas mi guardiana sigo siendo superior a ti, por lo menos hasta que tengas tu emblema. Y si tienes razón, todo era momentáneo

— ¿a que de refiere con emblema su "alteza"? — dijo con cierto sarcasmo Seiya

— Si no interrumpieras podría acabar. Hace poco, encontramos a las verdaderas guardianas, por lo que sus servicios ya no son requeridos.

— Entonces no hay motivo para permanecer aquí, fue un placer princesa Kakyuu— dijo Taiki haciendo una reverencia

— nada de eso Taiki, yo no me voy hasta que me diga quien soy y de que emblema esta hablando— Seiya se encontraba más que enojado

— Seiya, en agradecimiento a sus servicios prestados, les diré quienes son. Hubo un tiempo, en el Sistema solar llamado Milenio de Plata, donde la Reina Serenity era la soberana de la luna y el rey Erde de la Tierra. El reinado de la tierra tenía dos herederos al trono, uno de ellos eras tu Seiya y el otro era tu primo Endemyon. Él era hijo de un hermano de tu padre; el próximo rey de la Tierra serías tú, claro cuando fueras grande. Pero un enemigo ataco a la tierra, y como esta no tenía buenas relaciones con el reino lunar, el Rey Erde falleció, pero como último acto, me dio a su hijo de 3 años, junto con sus guardianes personales. Cuando pasaron a mi tutela, cada uno tenía un emblema, Yaten y Taiki en un medallón y tú en la frente. Al paso del tiempo ninguno de los tres recordaba nada de la Tierra y Seiya perdió su emblema, así que guarde los de Taiki y Yaten en el tesoro real, hasta el momento en que marcharan de aquí, lo cual ha llegado.

Los toques en la puerta principal, sacaron de sus pensamientos a los terrestres, que aun no creían en lo contado por su "princesa".

— Alteza— dijo una de las tres jóvenes que habían entrado al recinto del trono— aquí estamos, ¿en que podemos servirles?

— pasen, por favor. Seiya, Taiki, Yaten, les presento a las verdaderas Sailor Stars. Naid, Yemi y Tei.

Tres bellas jóvenes se pararon frente a ellos, Naid tenía el cabello corto de color rojizo y ojos verdes; Yemi el cabello a los hombros, rubio y ojos negros; y Tei usaba lentes, lo que resaltaba más sus ojos azules, su cabello verde oscuro contrastaba con su piel blanca. Todas iban vestidas de igual forma, falda larga negra con una blusa negra con detalles en blanco y el emblema real en el lado izquierdo.

— Ahora, Yaten, por favor entrega tu transformador a Naid y Naid entrega el emblema

Yaten se acerco a ella, metió su mano en el bolsillo, sacando su estrella que lo transformaba en Sailor Star Healer, después se la dio a Naid y ella a su vez le entregó un disco de plata, con tres círculos entrelazados y donde se unían, un diamante resaltaba.

— Taiki, haz lo mismo con Yemi.

Taiki se acerco hasta la joven, dándole una sonrisa al tiempo que le daba su estrella y la joven se acerco a él, haciendo una leve reverencia con al cabeza, y le entregaba un disco de plata, con tres triángulos unidos, donde se unían un rubí brillaba, atrayendo la vista de Taiki

— Y por ultimo tu….

— si ya se, se lo daré a Tei, solo que antes quiero saber una cosa, ¿yo tenía alguna relación con el reino lunar?

— No, tu jamás conociste a la princesa Serenity de ese tiempo

Seiya se acercó desilusionado y con cara de pocos amigos hasta Tei, dándole la estrella.

— Bueno, si no hay nada más, me voy— Seiya camino hasta la puerta, pero una voz lo detuvo

— Hay algo más, partirán a la Tierra, a prestarles servicios al príncipe y princesa, me refiero a Darien Chiba y Serena Tsukino. Antes de hablar con ustedes, mande un emisario a la Tierra para saber como estaban las cosas ahí, hace poco que regreso y sus noticias fueron: Darien se encuentra en Estados Unidos estudiando, y Serena esta en Tokio, y al parecer un enemigo ha atacado. Por lo que les recomiendo que marchen enseguida

— Así lo haremos, fue un honor servirle, con su permiso alteza— dijo Taiki con respeto y una inclinación

Los tres jóvenes salieron del salón. Uno de ellos no asimilaba lo último

— Servir a mi Bombón y a su noviecito, que una vez más la abandono— eran las palabras que recorrían su mente.

— Vamos Seiya, por fin la veras— Yaten abrazaba a su hermano para que caminara, pues se detuvo en seco al salir del recinto.

— Tienes razón— esboza una sonrisa— mejor vámonos.

Así, tres ex-estrellas fugaces surcan el cielo y desaparecen en la lejanía, dirigiéndose hacia su nuevo hogar, el planeta Tierra.

En la sala del trono, una princesa lloraba amargamente.

— yo… no que… quería tratarlos… así, pero de otra manera no se irían.

— Alteza, la comprendemos, a nosotras también nos duele verlos partir— dijo Naid

— Aunque no sean de aquí, ellos siempre estarán en nuestros corazones— Tei dibujo una gran sonrisa en sus labios, lo cual animó a su princesa.

— Solo espero que se estén bien y que encuentren el amor verdadero— la princesa levanto su vista y vio para tres estrellas fugaces— cuídense, mis queridos Star Light.

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Hola:

Espero que les haya gustado, tenía que encontrar una buena excusa para que Seiya regresara.

En el próximo capitulo, Seiya llegará a la Tierra y conocerá a alguien muy especial, mientras que otra persona se muere de celos.

Gracias por los reviews, son de gran apoyo y si tienes sugerencias, pueden enviarlas a

Atte: Saku Kou

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