Capítulo 4
Todo el camino de vuelta se lo pasaron riendo, Amy poniéndose modosita con Sonic y éste rehuyéndola en el pequeño espacio del asiento trasero, Nic por su parte contándoles anécdotas "divertidas" de Tete-chin cuando empezaba:
-Iba cargada de libros y carpetas, corriendo por los pasillos, como siempre, le patinaron las zapatillas y salió todo volando... ¡vaya morrón se dio!- Rió Nic.
-Ya ves... y vosotros, en vez de ayudarme, a descojonarse... os reíais tanto que os tuvieron que llamar la atención...- Le miró de reojo Tete-chin.
-Venga, que no te hiciste daño.- Sonrió Nic.
-¿Cómo que no? un mes estuve con los morados en las rodillas.- Escondió su risa Tete-chin, ella también rió en aquella ocasión desde el suelo.
-Uhhh qué peligro... ¿y os tenéis que quedar vosotros dos solitos?- Se acercó Sonic un poco entre los asientos delanteros.
-Puf... cuando te pones pesadito.- Tete-chin miró con algo de fastidio a la carretera. -¿Por qué no os quedáis en mi casa a dormir y así nos "vigiláis?
-Vale.- Dijo Sonic volviendo a sentarse en su sitio.
-¿Yo también?- Dijo Amy ya sin acosar a Sonic.
-Claro, va por los dos.- La erizo marrón continuó con su tono normal.
Después de un rato conduciendo, Amy ya descansaba apoyando su cabeza en el hombro de Sonic, y éste tímidamente la rodeaba con el brazo, mirando al frente, luchando por mantenerse despierto.
-Vaya par de tortolitos.- Intentó hacer la gracia Nic, pero se podía notar su voz quebrada.
Tete-chin paró el coche al llegar a la entrada de su casa, se quedó mirando un momento a Nic, sin decir nada le puso una mano en el hombro, luego bajó del coche para abrir la verja. Mientras entraba el coche, Sonic se iba desperazando, parecía tener algo en mente.
-Dilo ya.- Nic se giró hacia él. -Sé que estás deseando preguntarlo.
-Si te pones así...- Giró un poco la cara Sonic. -¿Y tu Amy? dijiste que tu dimensión había sido destruida.
-Nunca hay que perder la esperanza.- Le cortó Tete-chin saliendo del coche de nuevo para cerrar la verja.
-Ya ves,- Continuó Nic mirando a Tete-chin cerrando. -es lo que ella dice, que si yo me salvé a lo mejor Amy se pudo salvar también de alguna forma... un salto en el tiempo, algo así.
Sonic traqueteó un poco a Amy susurrándole al oído "ya hemos llegado, pequeña" y ella se empezó a desperezar también, acurrucándose un poco en Sonic al principio, separándose luego, miró a Nic y recordó dónde estaba, y la fobia de Sonic a que les viesen hacer "tonterías", se echó un poco para atrás viendo a Tete-chin abrir la puerta de Nic.
-Fin del trayecto.- Dijo de forma graciosa Tete-chin.
Nic intentó torpemente desabrocharser el cinturón de seguridad, con una mano le costaba, al meterse en el coche se lo había abrochado Sonic, pero ahora Sonic estaba más por la labor de mirar a Amy, de acariciarle el rostro delicadamente con una mano, con ojos tiernos, y ella sin moverse, ruborizada, así que Nic quiso hacerlo él solo. Tete-chin le vio forcejear y pelearse con el broche, dio un resoplido y se metió de cabeza, apoyó una mano en el hombro sano de Nic y con la otra se lo desabrochó:
-Se puede hacer con una mano solamente, estás algo torpón...- Se giró hacia él.
Nic estaba un poco ruborizado por la proximidad, Tete-chin se retiró medio sonriendo. Una vez en la casa se puso a repartir espacios.
-A ver... en esta habitación hay dos camas, y en mi habitación hay otras dos...- Comenzó a decir Tete-chin.
-¡Yo me pido dormir con Sonic!- Alzó la mano Amy.
-No,- La cortó Tete-chin en seguida. -Tú te vienes conmigo, y no grites que despertarás a Mama-sama y Papa-Goko, que mi papi el pobre ha de trabajar temprano.
-¿Pero por qué no puedo dormir con él? Para una vez que me puedo quedar en plan "íntimo" con Sonic.- Amy bajó el brazo desilusionada.
-De "intimar" nada, no entiendo a los jóvenes, tienes toda la vida por delante para ello, no tengas prisa, que sólo tienes 13 años.- Se puso a sermonearla Tete-chin.
-Eso, eso.- Sonic ya estaba escondido tras Nic. -Hazle caso, que ella entiende de estas cosas.
-Bah, no le importa hablar de sexo, de hacer de guía espiritual a los adolescentes super hormonados... pero luego es la primera en poner barreras...- Amy se dio la vuelta.
-Oh, venga ya, no pongo barreras de ningún tipo, tan sólo intento inculcar algo de conocimiento en esa cabecita loca que tienes.- Acabó Tete-chin.
-No empecemos de nuevo... que vamos a acabar mal... somos jóvenes, estamos la mar de buenos, y hay personal disponible.- Bromeó Nic.
-¿Disponible? jeje, Tete-chin tiene novio.- Le dio con el codo Sonic.
-¿Quién te ha dicho que esté hablando de ella?- Le devolvió los codazos Nic.
-Vale, vale, a la cama todos, ¡YA!- Intentó mantener su postura Tete-chin.
Todos dieron un saltito y se pusieron en marcha con los preparativos, y antes de separarse, los besitos de buenas noches, en las mejillas por supuesto, aunque Sonic no pudo evitar mantener cierto contacto con Amy hasta que ésta entró en la habitación, siendo sus dedos lo último que tocaron los dedos de Sonic.
Tete-chin intentaba no moverse demasiado, ella misma sabía que en la cama era un desastre y acababan siempre las sábanas en el suelo, tapada sólo con la colcha, aunque también era la única que se tapaba, Amy estaba en la cama de abajo, en ropa interior, sólo con una sabanita fina cubriéndola, ella sí que se movía, daba vueltas, de un lado a otro sin parar, todo el rato inquieta.
-¿Tete-chin?- Dijo en voz baja la erizo rosa. -¿Duermes?
-Aún no, ¿qué pasa?- Respondió girándose hacia ella.
-Es que lo de antes... iba en broma, ¿eh?- Amy también se giró hacia Tete-chin.
-¿A qué te refieres?- Tete-chin se incorporó un poco, apoyándose en sus brazos.
-Lo de "intimar" con Sonic, lo dije para hacer la gracia... pero no me siento preparada.
-Por eso no te preocupes, ya llegará el momento.- Se volvió a tumbar.
-Pero, es que si Sonic sí que está preparado...- Amy giró un poco la cara.
-Déjalo. Primero: él no te va a dejar sólo por eso. Segundo: no creo que él esté preparado tampoco.- Se puso de lado mirando a Amy.
-Yo creo que sí lo está... vamos, eso se nota... ya me entiendes.
-Sea lo que sea, ya te digo que no has de preocuparte, tómatelo con calma, estas cosas no se pueden forzar.- Tete-chin estiró su mano hacia Amy. -Ya le conoces, habla mucho, pero luego no es tanto como quiere aparentar, además, estaba cariñoso esta noche, ¿eh?- Le frotó el flequillo a Amy.
-Sí...- Rió bajito Amy.
-Venga, ahora a dormir, buenas noches.
-Buenas noches... y gracias, Tete.
-Es extraño.
-¿El qué?- Sonic miró hacia la cama de Nic.
-Tú.
-Yo no soy extraño.- Sonic desvió su mirada de él.
-Es por lo que he leído de ti, todas esas historias que escribió Tete-chin.
-¿Qué pasa con las historias? cuidado que muchas cosas se las inventa.- Sonic volvió a mirarle.
-Pero es la primera vez que te quieres quedar a dormir aquí.- Nic se incorporó, sentándose con las piernas cruzadas.
-Pues eso no es extraño.- Siguió manteniendo su postura Sonic. -Es algo muy simple...- Cerró sus ojos un momento, luego los abrió, mirando al techo. -No me fío de ti.
Fue su voz tan tranquila, tan normal, que Nic esperó un momento en silencio a que Sonic soltase alguna tontería, pero no lo hizo, sólo hubo vacío.
-¿No te fías? ¿Y de Tete-chin? ella es quien me ha traido.- Nic bajó su mirada.
-De ella sí, por eso estoy aquí, no he querido dejarla sola contigo.
-Oh, vamos, no la voy a violar ni nada por el estilo.- Le cortó Nic. -Ya nos conocemos, ya íbamos juntos de viaje antes de que te conociese a ti.
-Puede que sí, pero de todas formas, no me convences, las cosas que cuentas no tienen ni pies ni cabeza, no eres como Tete-chin, ella está acostumbrada a inventar historias, pero tú no lo haces nada bien.- Sonic imitó la pose de Nic, quizás preparado para cualquier cosa.
-¿Lo qué? Oye, te estás equivocando conmigo, yo soy de los buenos...- Nic notó la mirada desafiante de Sonic, él sin embargo la desvió. -¿Por qué lo dices?
-Por la laguna más grande en tu relato... cuando dijiste que tu dimensión fue destruida por "el" evil Sonic de tu dimensión... si tú existes en esa dimensión, no puede haber un evil Sonic ahí, sólo puede existir un Sonic...- Y Sonic se sentó al borde de la cama.
-Bueno, pues me equivoqué al explicarlo, tú mismo lo has dicho, yo no sé de historias como Tete-chin.
-De todas formas... te estaré vigilando.- Sonic se volvió a meter en la cama.
-¿Qué? ¡Soy yo el vigilante! ¡si estoy aquí es porque Tete-chin se empeñó en que viniese!
-Oh, calla ya, vas a despertar a las chicas.
-Yo ni siquiera quería venir... quería seguir trabajando...- Nic se agarró el brazo que ocultaba bajo el yeso.
-Pues si no querías no haber venido.- Sonic fijó su vista en aquel brazo.
-Tú no la conoces como yo... ha pasado tanto tiempo.- Pasó su mano por encima del yeso.
-Quizás si me cuentas algo empiece a creerte, pero desde el principio, nada de simples anécdotas.
Nic se abrazó a sí mismo, quería hablar, Tete-chin le había enseñado a sacar fuera las palabras, pero después de aquella desconfianza se sentía sin ganas, le había parecido muy hipócrita por su parte el darle la mano al conocerse de forma tan sincera para que luego por una laguna en una historia perdiese por completo la confianza, de todas formas empezó a hablar.
Continuará...
