Epona: diosa de la tierra

Capitulo 2: Albus Dumbledore.

-es… es de Dumbledore- Remus se le quedo viendo anonado, Harry no entendía la actitud de sus dos tutores – ¿Quién es Dumbledore- preguntó Harry al fin, Sirius miro a Remus y este le hizo un gesto afirmativo –Veras Harry… el fue nuestro maestro, si Harry el maestro de James, de Lily, de Remus y mió- Sirius hizo una pausa, Remus ahora fue el que habló –el nos enseño todos lo que sabemos de magia y de combate de espadas, en ese tiempo fue donde James conoció a Lily- dijo con una media sonrisa, Harry miro a sus dos tutores atónito, por una parte estaba fascinado con lo del profesor y por otra estaba molesto con ellos dos por haber guardado el secreto. –Y bien… ¿Qué dice la carta- Sirius miro el pergamino y se lo entrego a Harry.

Para: Sirius y Remus.

Primero que todo hola, les envío esta carta por primera vez en tantos años que no nos hemos visto por la siguiente razón: tienen que venir aquí a Londres, necesito informales algo de suma importancia y traigan al niño que si no mal recuerdo creo que nombre es Harry es urgente que vengan inmediato espero que estén bien se despide.

Albus Dumbledore.

Harry termino de leer la carta, y miro a Sirius mas sorprendido que antes –Y… y ¿vamos a ir- pregunto con un hilo de voz –nunca había leído una carta de Dumbledore así- dijo Sirius meditando –Debe ser urgente, pues si iremos- Harry no sabia por que pero se le dibujo una gran sonrisa –Bien Harry busca tus cosas iremos ya, si tenemos suerte podemos conseguir tres caballos que nos lleven- Harry fue rápido donde el árbol y cogió su varita y a su pequeña espada, Sirius y Remus lo estaban esperando en la entrada de la aldea.

-¿Qué estamos haciendo aquí- preguntó Harry –Tranquilo, solo necesitamos tres caballos, ¿Remus todavía tienes las chapas de metal- pregunto Sirius –Si claro aquí están- Remus le entrego una bolsita abultada que hacia ruidos metálicos –Bien esperen aquí elijan su caballo, y cuando yo salga ustedes se montan en los caballos y nos vamos, de acuerdo- los dos asintieron, Sirius se paro enfrente de lo que parecía un establo, y entro una cabaña que tenia de letrero "Venta de Caballos el Viejo Will".

Sirius tardo no más de un cuarto de hora de salir de la cabaña, y en un susurro dijo "ahora", Harry y Remus se montaban en sus respectivos caballos, mientras que Sirius se montaba en un caballo tan negro como su pelo. Mientras el trío salía del establo escucharon un grito a lo lejos "Me engallaron, deténgalos", Harry, Lupin y Sirius echaron marcha con su caballos para no ser atrapados.

-¿Qué fue lo que hiciste Sirius- preguntó Harry riendo –Bueno le dije que necesitábamos tres caballos y le mostré la bolsa pero sin abrirla y el muy ingenuo me la acepto sin antes revisar la bolsa… ¡rama- los tres bajaron la cabeza para evitar ser golpeados. Así siguieron su viaje, solo paraban para comer algo o hacer sus "necesidades", así llego la noche donde tuvieron que parar en un bosque cercano oscuro, hicieron una fogata y se quedaron sentados viendo la fogata arder.

-Ummmm… cuanto crees que falta para que lleguemos- Lupin preguntó, Sirius se recostó sobre un árbol –creo que para mañana al mediodía deberíamos estar ya en Londres-. –Ya veo… y si seguimos viajando con los caballos esta madrugada- ahora fue Harry el que habló –bueno creo que llegaríamos ya en la mañana- respondió Sirius sin mucha importancia y acurrucándose en el árbol –bueno basta de preguntas que tengo sueño y quiero dormir… ¡buenas noches- Sirius no tardo mucho en quedarse dormido, Harry también iba dispuesto a quedarse dormido, pero recordó algo que había sucedido esta mañana y un extraño brillo en los ojos le salieron, se iba a vengar de Sirius pero iba a ser una venganza peor, miró a Lupin y se aseguro de que estuviera durmiendo para así hacer funcionar el plan.

-Como es que era el hechizo que me dijo Sirius para crear pesadillas- Harry trataba de acordarse -¡ya lo tengo- recordó emocionado, con un movimiento de la varita apunto hacia Remus y lo puso al lado donde está Sirius –Alpträume- murmuro y el rayo cayo encima en donde están Sirius y Lupin, cerro los ojos concentrándose si algo salía mal seria muy peligroso, así paso los próximos diez minutos, abrió los ojos con satisfacción y esbozo una sonrisa se dejo caer sobre el árbol y se acurruco poco a poco fue quedándose dormido.

Sirius y Remus despertaron sobresaltados, se miraron el uno al otro y empezaron a gritar. Harry se despertó por los gritos – ¡Que les sucede- Grito Harry adormilado -¿Qué?… ¿que hace él durmiendo conmigo- dijeron los dos al unísono, Harry pareció despertar y trataba de retener una sonrisa – ¿Hey que cosa hicieron en la noche- Pregunto Harry disimulando la risa con tos, Sirius y Remus palidecieron ellos soñaron que terminaron en la misma cama de una borrachera y ahora despertaron y se fijaron que estaban durmiendo en el mismo árbol. Harry empezó a reír como loco durante media hora, cuando pudo recuperarse les dijo –Aquí tiene mi venganza- (Hey quiero aclarar (NOTA DEL AUTOR: una cosa que debo aclarar, esto no es Slahs es solo la venganza de Harry hacia sus tutores, los tres son más machos que la palabra) Sirius y Remus lo miraron con enfado pero admitieron que fue una buena broma aunque no le dirigieron la palabra durante todo el viaje.

-Sirius, Remus… creo que ya llegamos- dijo