Disclaimer: Lo que es de J.K es de J.K y lo que es mío es mío (esta lógica aplastante XD)

Realmente no sé que es esto: si un minific de los Merodeadores o un prólogo o algo así de otro fic mayor. Quién sabe. Ya veré . Sólo que espero que os guste. Enjoy it!

- ¡Black! ¡Eres un pervertido! – bramó una chica alta, de delicados rasgos y de larga cabellera de color castaño que al acercarse al chico moreno que la miraba atónito e inmóvil, le propinó una sonora bofetada ante la mirada expectante de los curiosos que se arremolinaban alrededor de la pareja.

- Pero... – el chico intentó hablar, pero la chica le cortó de golpe sin darle más opción que el silencio forzado

- ¡Olvídame! – y dicho esto la chica, con gesto decidido, giró sobre sus talones y echó a andar por la largura del pasillo hasta perderse al girar la esquina.

El chico se quedó ahí sin más, plantado en medio del pasillo y con la zona de la bofetada aún irritada por el golpe y con los ojos muy abiertos. No sabía que le había dolido más, si el golpe o el hecho de que habían herido aun más su orgullo que su cara, porque ¡quién se atrevía a avergonzarle así delante de todo el colegio! ¡a él precisamente!.

Otros tres chicos miraban la escena con especial atención y con gestos en sus caras que no revelaban sino, una gran diversión ante lo ocurrido. Uno de ellos, que estaba de pie con los brazos sobre la cabeza y con sus manos entrelazadas por detrás de la nuca, tenía el pelo de color negro azabache, especialmente desordenado y llevaba unas gafas de montura redonda que no llegaban a esconder sus ojos color avellana. El segundo de los chicos, era un poco más alto que el anterior, llevaba el pelo, de color rubio ceniza, recogido en una coleta que le llegaba un poco por debajo de los hombros del que se destacaban sus ojos color color miel, casi dorados, que estaba apoyado en la pared con una pierna cruzada sobre la otra y con las manos en los bolsillos, mirando con aire distraído. El tercero de ellos era algo más bajito y rechoncho que los dos anteriores. Jugueteaba con la punta de su zapato con una pequeña piedra que había en el suelo, rubio con el pelo semi ondulado y unos ojos azules cetrinos que hacian que el chico tuviera la mirada más perdida aún de lo que ya la tenía.

El primero de los chicos echó a andar mientras se estiraba siguiendo con la mirada el camino que minutos antes había hecho la chica, no sin antes dedicarle una mirada burlona a su amigo, el abofeteado. El bajito, echó a andar tras el moreno jugando nerviosamente con su pelo y dándole tímidas patadas a la piedra. El rubio cenizo se acercó hacia el abofeteado dando grandes pero pausadas zancadas sobre sus talones y con las manos cruzadas tras la espalda. Cuando llegó ante su amigo, este desvió la mirada hacia un pájaro que se había posado en el suelo, cerca de ellos. El rubio, al ver que su amigo no le prestaba atención, le dio un golpecito en la frente con uno de sus esbeltos dedos a lo que el moreno reaccionó mirándole directamente a los ojos de forma inquisitiva. El rubio, ante la mirada en forma de amenaza de su amigo, explotó en una sonora carcajada ante la que el moreno alzó una ceja interrogativamente, el rubio simplemente, le pegó una palmadita en el hombro y se giró dedicándole un gesto con la mano a su amigo, que se podía interpretar como un "no te preocupes".

- Esta vez no, Paddie – dijo el chico mientras seguía el camino de sus dos amigos y sin dejar de mover la mano ritmicamente - ¿Vienes?

Es bien tonto esto eh? Pero bueno, nadie es perfecto x)

En fin, no more.

Ruby