Capitulo 8: Planes.

Caminaba de regresó a casa, estaba cansado física y moralmente, tenía un enorme vació en el alma, su madre le había arrebatado a sus dos mejores amigos: Ares y Azami. Sus ojitos negros carecían de expresión y le parecía que el mundo era demasiado injusto, ya había tenido bastante con la partida de su padre y se sentía más solo que nunca. Dio vuelta a la esquina y pateo una lata de refresco para descargar la furia y la impotencia que sentía. Elevó su vista al cielo en busca de consuelo y vio pequeños copos de nieve caer sobre la calle.

Frunció el ceño, aún no era época para las ventiscas y percibía una gran cantidad de poder espiritual cerca de él, golpeo con su pie el suelo enfadado, justo ahora, que no tenía a su espíritu acompañante, venía aparecérsele un shaman.

Lo divisó a la mitad de la calle, era un hombre no mayor que su padre, llevaba una playera gastada en color azul y unos jeans negros, se hallaba recargado contra el muro de una casa y sus ojos negros lo miraban con curiosidad. Hana se quedó inmóvil en su lugar y tembló ligeramente al ver como el hombre se acercaba a él lentamente.

-No tengo espíritu acompañante-dijo determinante, si ese hombre era buen shaman no se atrevería atacarlo estando desprotegido.

-¿Eres tu Asakura Hana?-pregunto el hombre estando a escasos centímetros del niño.

-Sí-contesto frío.

El hombre levanto su rostro y sonrió con alegría y entusiasmo, cosa que le sorprendió al pequeño.

-Hola, soy Horokeu Usui-se presentó y le extendió su mano-puedes llamarme Horo Horo.

Hana dudó por algunos instantes, ¿Y si le daba la mano y lo atacaba?, Parecía agradable, pero a veces las apariencias engañan, se dejó llevar por una repentina sensación de confianza, extendió su manita y la estrecho contra la del ainu.

-¿Me puede decir que quiere de mí?-pregunto el niño soltando la mano de Horo y mirándolo inquisidoramente.

El ainu sonrió, tenía esa parte fuerte e imponente de la personalidad de Anna pero a su vez también tenía ese corazón puro y noble de Yoh, sin duda sería un gran shaman al crecer.

-Sólo deseo ayudar-contestó llanamente y guiñándole un ojo.

-¿Ayudar?-interrogo desconcertado.

-Así es, verás hoy por casualidad presencie lo que sucedió entre tú, Azami y tu madre-explicó.

Hana abrió los ojos enormemente.

-¿Es usted un ángel o un espíritu guardián?-preguntó el niño un tanto asombrado y comenzando a dudar que ese hombre fuera un shaman.

-No, claro que no-respondió Horo riendo divertido-Técnicamente soy como un hada madrina-dijo sin dejar de reír.

El niño arqueo una ceja extrañado.

-Pero ¿las hadas madrinas no son para las niñas?-cuestiono un poco asqueado ante la idea de tener un hada madrina.

Horo Horo rió aún más.

-Sí así es, pero no te preocupes que yo no soy tu hada madrina-Hana respiró aliviado-Lo soy de Azami y he venido contigo para ayudarlos a que se vean.

-¿De verdad?-pregunto entusiasmado, pero pronto su rostro se entristeció-No creo que pueda ayudarnos señor-dijo melancólico-Mi madre me tiene bien vigilado con un demonio cuando salgo de casa y sin Ares no tengo el poder para burlarlo.

-Pero yo sí-apuntó con una sonrisa el ainu y lo invitó a que mirara detrás de él.

Hana ahogo un grito de asombro, Goki se hallaba totalmente congelado e inanimado, sin lugar a dudas ese tal Horo Horo era un shaman bastante poderoso como para poder controlar al demonio. El niño lo miró.

-¿Cuál es el plan?-pregunto sonriendo enormemente.

----

-Ese escalón esta apolillado, debemos arreglarlo Doña Anna-explicaba Tamao en tanto ayudaba a la rubia a subir a su habitación.

-¿Podrías dejarme?-pidió exasperada la itako-No estoy invalida como para no poder subir sola a mi habitación.

-Lo sé, pero El joven Yoh dejó claro que...

-No me importa lo que el joven Yoh haya dejado dicho-la interrumpió con violencia-Sé cuidarme sola y él lo sabe perfectamente, no sé porque tuvo que enviar al estrafalario de Ryu-la miró con desprecio-y a su eterna enamorada a cuidarme, con Fausto hubiera sido más que suficiente-suspiró-lo lamento, no debí hablarte así.

-No se preocupe Doña Anna, yo entiendo que esto sea difícil para usted, su esposo lejos y un hijo rebelde-abrió la puerta de la habitación-si usted quisiera yo podría meter en cintura a ese niño.

-¡No!-dijo potente-es mi hijo y yo sé como criarlo.

-Como usted guste-dijo tranquilamente.

Anna miró a la joven con una ceja levantada.

-Ya puedes irte-dijo irritada-te juro que aquí nada malo va a sucederme, por favor, si llega Hana no le des de cenar y mándalo inmediatamente a su habitación-soltó un poco de aire-su padre fue estricto y especifico en su castigo, aunque él no tuvo del todo la culpa.

-¿A que se refiere?-cuestiono curiosa la joven.

Anna la invitó a sentarse a su lado antes de proseguir.

-Fue culpa de la niña de a lado-explicó con desprecio-Hana utilizó su poder espiritual para ayudarla. Seguramente estaba jugando con esos tres chicos bastante pesado y cuando los niños quisieron jugar con ella de la misma manera no se aguanto y se puso a llorar-meneo su cabeza de un lado a otro-Y mi hijo que sacó esa parte tan noble de su padre quiso ayudarla sin medir consecuencias, además es una insolente.

Tamao la miró interrogante.

-Me llamó mala madre y bruja-dijo un tanto alterada-Y por si fuera poco se atrevió a darle un beso en la mejilla a Hana.

-¡Pero que niña tan precoz!-exclamó horrorizada Tamao.

-Eso mismo pienso yo, conjuntamente hay algo en esa niña que no me agrada-apretó sus labios-por eso le he prohibido a Hana juntarse con ella, puede ser una mala influencia.

-Totalmente de acuerdo Doña Anna, no sabe de que familia proviene esa niña, es mejor separarla del joven Hana antes de que los lazos sean demasiados fuertes y el niño se vuelva incontrolable.

-Sabía que me entenderías-le sonrió débilmente a la muchacha-De verdad lamento haberte hablado de esa forma.

-No se preocupe-repuso con sinceridad-Esta usted embarazada y esos cambios de humor suelen ser muy bruscos a veces, sino a acuérdese de cómo se ponía cuando estuvo encinta del joven Hana.

-Gracias Tamao por haber accedido a cuidarme.

-Es un honor poder honrar a los Asakura de esta forma-se incorporó de su lugar-Yo me retiró, debe descansar y no se preocupe por Hana, yo cumpliré al pie de la letra sus indicaciones-Se acercó a la puerta y después de dar un "Buenas noches" salió de la habitación.

Anna se recostó en el futón y pensó que era hora de averiguar todo el misterio de sus vecinas de a lado.

CONTINUARA...

Notas: Lamento la demora, ya sé que no tengo perdón, pero la presión escolar era excesiva, además estuve un tanto enferma debido al estrés y en definitiva la inspiración me abandonó por un considerable periodo de tiempo. Lamento también que el capitulo este corto, prometo solemnemente volver a escribir capítulos más largos la próxima vez.

Espero hayan disfrutado el capitulo, ando corta de tiempo por lo que les pido disculpas por no contestar los reviews, el próximo capitulo lo haré con mucho gusto como siempre, Agradezco sin embargo a todos los lectores que dejaron reviews en "Tres deseos para año nuevo". Cuídense mucho, y espero que los reyes magos les hayan traído los obsequios que pidieron. ¡Feliz Día de Reyes!