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No os animéis demasiado, este capitulo ya estaba escrito. Los demás tardaran un poco para ser publicado

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CAPITULO 2

Unos golpes en la puerta de entrada hicieron separarse rápidamente a los dos enemigos.

Harry carraspeo antes de poder pronunciar con voz ronca.

- adelante –

La cercanía de Malfoy lo había perturbado, despertando ciertas partes de su cuerpo como nadie por el momento había conseguido. Oler su suave fragancia, el tacto sedoso de su pelo y esa piel tan suave y tersa era una bendición para sus sentidos. 

Dumbledore seguido de un profesor de pociones algo huraño entraron en la sala.

- buenas tardes Sr Malfoy... Harry –

Ambos chicos saludaron con una ligera inclinación de sus cabezas.

- Por lo que veo han tenido tiempo suficiente para aclimatarse y limar sus diferencias – dijo el anciano con alegría al ver como ninguno de los dos chicos tenían rastro de violencia física.

Draco no pudo evitar soltar un resoplido que hizo sonreír a su jefe de casa.

- lo que yo quiero saber es porque me han secuestrado literalmente de la biblioteca para traerme aquí – replico el Slytherin enfadado.

Dumbledore lo miro fijamente antes de contestar con suavidad.

- esperaba que usted me lo dijera Sr Malfoy –

Draco alzo una ceja con elegancia pensando que aquel hombre era un estúpido o definitivamente se había vuelto loco.

- yo... ¿por qué tendría yo que saberlo? –

- su padrino acaba de tener una reunión muy interesante con Voldemort y el tema principal ha sido sobre usted –

El anciano hizo una pausa mientras se dirigía a un sofá y se sentaba instando con una mano a que los demás hiciesen lo mismo. Snape se acomodo en un butacón cerca del director mientras  Draco elegía sentarse  frente a ellos.

Harry   pudo observar como su profesor de pociones estaba algo irritado, hacia un par de años que estudiaba bajo su supervisión y la de Dumbledore como para poder  decir sin miedo a equivocarse de que el hombre estaba preocupado. Con paso decidido se acerco a la chimenea y con un ligero movimiento de su varita encendió un fuego para caldear la sala. No es que hiciese demasiado frió, pero la llegada del invierno se aproximaba y cuando empezaba a oscurecer las temperaturas bajaban considerablemente.

La conversación había empezado y el chico de ojos verde prefirió quedarse de pie detrás del sofá donde se encontraba sentado Draco. 

- vera Sr Malfoy según su padrino aquí presente, Voldemort tiene un interés muy especial por usted –

- que un interés especial – musito el rubio cuya palidez se hacia mas notoria a cada momento que pasaba.

- Voldemort le ha pedido a Severus que lo lleve cuanto ante a su lado –

Dumbledore no cesaba de mirar al chico con fijeza intentando averiguar si aquello no era mas que una puesta en escena del chico o si realmente no sabía de que iba todo aquello.

- ¿pero porque?, tu sabes padrino que yo jamás me uniría a el, no quiero ser como padre – gimió el chico asustado.

Harry frunció el ceño al ver al chico tan asustado, no podía entender que motivaba al señor tenebroso a dar este paso, pero lo que estaba claro es que de ninguna manera iba a dejar al chico en sus garras.

- tiene que haber una explicación lógica a todo esto profesor – soltó Harry con preocupación – Voldemort no necesita de Malfoy  para seguir con sus planes  –

- gracias Potter, es un alivio comprobar lo importante que soy  a tus ojos – contesto el Slytherin ofendido al ver como el otro chico pensaba que era insignificante y que no merecía ni siquiera la atención del Lord.

Harry esbozo una ligera sonrisa ante de contestarle con malicia.

- pero mi pequeño dragón, tu sabes perfectamente que eres la niña de mis ojos –

Draco bufo con fuerza mientras Dumbledore escuchaba divertido el intercambio de palabras.

- no estamos aquí para escuchar tonterías – interrumpió el profesor de pociones visiblemente irritado.

Sus ojos negros se clavaron en las pupilas de su ahijado y pregunto con seriedad.

- dime Draco, ¿tu padre te dejo algo... no sé algún objeto para que tu se lo guardase? –

El Slytherin negó con la cabeza.

- ¿estas seguro?... piénsalo bien. Aunque sea algo insignificante para ti –

- no padrino, estoy completamente seguro – contesto el chico con determinación.

Dumbledore se quedo pensativo, estaba claro que algo importante tenia que tener ese chico para que el Voldemort tuviese ese súbito interés por él. Tal vez el Lord no buscase un objeto, sino algo relacionado con su familia.

- Sr Malfoy, supongamos que dejamos de lado los objetos, ¿cabria la  posibilidad de que Voldemort estuviese interesado por algo referente a su familia? – el hombre hizo una pausa para que el chico se centrara en lo comentado –tal vez alguien que pudiese ser importante a sus ojos o algo que su familia poseyese y los demás no –

El chico se quedo pensativo durante unos minutos. Su familia era de sangre pura, pero eso no era algo extraño en el mundo mágico, además solo quedaban tres Malfoy en vida, su tía abuela que estaba muy  mayor y que residía en Francia, su padre que se encontraba en Azkaban y él. No definitivamente no veía que era lo que el Lord podría necesitar de el. Su familia no tenia nada de especial, era igual que cualquier otra excepto por...

Draco levanto bruscamente la cabeza, sus ojos automáticamente se clavaron en Snape, que por lo que se podía apreciar había llegado a la misma conclusión que el rubio.

- dime que no es lo que estoy pensando padrino – gimió el chico horrorizado – dime que EL no esta pensando en eso -

Snape estaba pálido y sus palabras fueron difíciles de entender.

- - me temo que no hay otra explicación posible Draco...¿supongo que todavía eres... eres...? –

El chico asintió mientras se ruborizaba violentamente.

-  Te prometo que jamás te pondrá una mano encima mientras yo viva – dijo con seriedad el hombre mientras sus ojos intentaban transmitirle algo de consuelo.

- bien Severus, ahora que ambos sabéis de que se trata, tendrías la amabilidad de alumbrar nuestras mentes – dijo Dumbledore mirándolos a los dos por encima de sus gafas.

- esto no es fácil Albus, creemos que el Lord quiere un heredero – contesto Snape sin apartar la vista del chico que se había acurrucado en el sofá en busca de protección.

Harry alzo una ceja intrigado.

- ¿y se puede saber  porque habéis llegado hasta esta conclusión? – pregunto el anciano con suavidad.

- veras Albus, como ya sabes el señor tenebroso tiene... digamos cierta predilección por los miembros de su mismo sexo, pero de todos es sabido que un hombre no puede gestar... sin embargo el señor Malfoy aquí presente si puede. Los Malfoy tienen esa particularidad genética debido al cruce de su sangre hace varios siglos con varias especies, entre ellas algunas hermafroditas. – soltó un profundo suspiro - Creo que Voldemort aspira convertir a Draco en su pareja oficial, tiene todo lo que el puede desear, es un hombre, un sangre limpia, de una familia de alto abolengo y su padre ha sido uno de sus lugarteniente mas apreciado, sin contar por supuesto lo más importante que es que puede proporcionarle un heredero. Yo diría que  Draco es el perfecto candidato .

Tanto Harry como Dumbledore estaban asombrados por las palabras del profesor de pociones.

El chico de oro no podía apartar sus ojos de aquella hermosa criatura acurrucada en el sofá que intentaba protegerse con un cojín fuertemente abrazado contra su pecho. "Quien demonios se creía que era Voldemort, para hacerle tal cosa a su pequeño dragón". Pensaba el Gryffindor sintiendo como la furia crecía en su interior mientras Snape seguía con sus explicaciones.

- si es genético, ¿por qué Lucius no lo engendro? – pregunto Harry de pronto sabiendo que el mortifago habría hecho cualquier cosa por su amo.

- muy simple Potter porque para que esto se cumpla se deben guardar unos requisitos imprescindibles. Primero, que el mago encargado de... bueno ya sabe... sea extremadamente poderoso, solo alguien lo suficiente poderoso mágicamente es capaz de conseguir ese milagro... no sirve cualquiera, de hecho según lo que Lucius me contó, solo dos Malfoy lo han conseguido  –

- no creo que eso sea un inconveniente para Voldemort – susurro  Harry  pensativo.

Snape le mando una mirada furiosa.

- así es Potter, no creo que nadie pueda discutir que el señor tenebroso no sea lo suficientemente poderoso como para poder llevar a buen termino este preñamiento –

Draco gimió como un niño al escuchar a su padrino, solo con pensar en las manos de voldemort sobre su cuerpo, en su cara de serpiente rozando la suya y sobre todo en una parte de su anatomía dentro de el lo enfermaba.

El Slytherin se levanto bruscamente y musito con dificultad.

- el baño, por favor –

Harry corrió a su encuentro al ver la palidez del chico y lo acompaño hasta el cuarto de baño sosteniéndolo por la cintura hasta que termino de vomitar, luego con infinita dulzura lo acompaño de nuevo al sofá y le proporciono un vaso de agua fresca que el rubio agradeció con una ligera sonrisa.    

 El segundo requisito es que evidentemente – prosiguió el profesor de pociones algo arrepentido por el efecto que habían causado sus palabras en su ahijado –,  tendría que ser un hombre.  

- me lo imaginaba, sé de muchos que darían su vida por poder engendrar, pero ni que decir que mientras yo este aquí  Voldemort no le tocara ni un solo pelo– replico Harry con desprecio –

La sorpresa se hizo visible en la cara de Draco cuando levanto sus ojos y los poso sobre el chico que estaba detrás del sofá mirándolo con ternura. Nunca se había imaginado que el Gryffindor aceptase aquello de forma tan natural.

- de tercero el gestante, en este caso el señor Malfoy, tendría que ser completamente puro ya que esto solo funciona si en la primera relación se cumple los anteriores requisitos- Snape hizo una pausa para echarse el pelo hacia atrás con una mano – como sabéis, cuando un mago mantiene relaciones con alguien teniendo el papel de dominante en la relación,  algo de su huella mágica queda impregnada en el otro por lo que seria imposible que un feto se desarrollase habiendo mas de una huella.–

- entonces Voldemort no tiene ninguna posibilidad, la fama de Draco lo precede –

Snape lo miro con desdén.

- ¿no me dirá que se cree todo esos rumores Sr Potter? -

Harry no salía de su asombro, jamás hubiese pensado que el gran Malfoy, el príncipe de Slytherin fuese virgen. No sabia si gritar de alegría o abrazarlo para protegerlo con su vida de aquel sádico que solo pensaba en coger lo que era suyo.

Draco volvió a bajar la mirada completamente abochornado, se sentía como una atracción de feria haciéndolo removerse con nerviosismo sobre el sofá.

- si Sr Potter, ¿tanto le extraña que el Sr Malfoy no haya mantenido nunca una relación?, le extrañaría ver cuanta inocencia se puede encontrar en mi casa. Pero ese no es el problema, si Voldemort  esta dispuesto a unirse con Draco aun sabiendo que posiblemente  este no sea virgen, solo puede significar que ha encontrado la manera de eliminar esa huella -  

- eso significaría que aunque tuviese relaciones con otros magos no serviría de nada, Voldemort  podría anular las huellas y empezar desde cero – dijo Harry algo preocupado.

- así es  Potter, mucho me temo que Draco estará siempre en un constante peligro – gruño el profesor de pociones.

- creo que no habéis tomado en cuenta otras posibilidades – dijo Dumbledore después de escuchar los razonamientos por parte de los dos contertulios – cierto es que Voldemort habrá previsto que el Sr Malfoy haya mantenido relaciones y no dudo que habrá encontrado la manera de eliminar las huellas, pero hay una cosa con la que estoy seguro, no ha contado y es que el Sr Malfoy se quede en estado de otra persona –

Un silencio sepulcral atravesó la sala.

Dumbledore miro al  Gryffindor fijamente.

- de todos es sabido  Harry , que tu poder es igualable o superior al de Voldemort, piénsalo Harry, tu eres la mejor opción que tenemos ante esta situación algo inusual, si el Sr Malfoy se quedara en estado de ti, esa huella no se podría eliminar ya que la huella de una nueva vida es irrompible, es el vinculo que lo une a sus progenitores... Nada ni nadie podría nada contra esto. Sé que siempre has deseado tener una familia Harry, esta seria una buena manera de conseguirlo y a la vez protegerías al Sr Malfoy  de Voldemort... todo depende de ti Harry – dijo Dumbledore sabiendo que el chico no se negaría a dar su protección a una persona indefensa - Además conoces a Draco desde hace varios años y se perfectamente que podríais llevaros bien con un poco de voluntad por ambas partes. No te pido que lo tomes, solo en el caso que Voldemort fuese capaz de atravesar las protecciones del colegio – el anciano hizo una pausa antes de proseguir -  sé que esto no entraba en tus planes Harry, pero por favor piénsatelo, Draco te necesita mas que nunca –

Harry estaba estupefacto, no se podía creer que le diesen carta blanca para seducir a  Malfoy y en caso necesario embarazarlo. Sus ojos fueron recorriendo los rostros de los dos adultos ante de  posarse sobre la silueta temblorosa que se encontraba acurrucada en el sofá.

Sabia perfectamente que no podía negarse, no porque se sintiese amenazado o en deuda con Dumbledore, sino porque preferiría estar muerto antes de que Voldemort tocase algún cabello de aquel chico. Por algún extraño motivo que no llegaba a entender, se sentía extremadamente posesivo con todo lo relacionado con su pequeño dragón y el saber que Voldemort iba tras el lo irritaba hasta limites insospechados.

Solo una cosa lo hacia dudar. ¿Qué pensaba Malfoy de todo aquello?. Nadie le había pedido su opinión y no estaba muy seguro de que el rubio lo aceptase como amante. Sabia que esta situación era realmente embarazosa para el rubio y el hecho de que hubiesen sido enemigos durante tanto tiempo no ayudaba. Tal vez el chico no desease mantener una relación con el y el jamás seria capaz de tomarlo sin su consentimiento. Necesitaba escuchar su aprobación de sus propios labios por lo que dijo en voz baja.      

- por mi no hay problema profesor, pero me gustaría saber lo que piensa Malfoy sobre todo esto –

El rubio se ruborizo violentamente, sin atreverse a mirar a nadie a la cara.

- ya ha escuchado Sr Malfoy, el Sr Potter pide su consentimiento. ¿Puedo dar por hecho de que lo tiene? – pregunto Dumbledore con suavidad y con una sonrisa en los labios al ver al chico completamente ruborizado y algo asustado.

Draco solo pudo asentir con la cabeza ya que se sentía demasiado turbado por aquella situación, no creía que fuese capaz de articular ni una sola palabra.

- bien Sr Malfoy, entonces no hay nada mas que hablar – murmuro divertido - estoy seguro que el Sr Potter se comportara con usted como un perfecto caballero de la Edad Media protegiendo su virtud a capa y espada, tomándolo bajo su protección y cortejándolo con todo el respeto que se merece. Pero quiero que sea usted consciente de que si Voldemort llegase algún día a traspasar las barreras del colegio el Sr Potter tendrá que actuar en consecuencia y tomarlo para impedir que Voldemort lo haga  –

- si señor – murmuro muy bajito el  chico

Draco no había levantado la cabeza ni un solo segundo, por lo que no pudo ver las caras sonrientes y llenas de ternuras de las tres personas que se encontraban allí.

- espero que cumpla su promesa Potter, hay mucho en juego... y sobre todo sea prudente, no dudo que el Lord tenga infiltrados en la escuela dispuesto a arrebatarle a Malfoy en un descuido  – dijo Snape con severidad antes de levantarse.

- puede estar tranquilo profesor, protegeré a Draco con mi vida si es preciso y cumpliré con lo estipulado si fuese necesario. No pienso separarme de el a mas de dos metros – replico el chico de ojos verde con tal seriedad que Draco sintió como su cuerpo se relajaba ante aquellas palabras.

- no lo dudo hijo – musito el anciano orgulloso de su pupilo – haré algunos cambios para que ustedes dos puedan proseguir sus cursos juntos y dejaremos expandir  el rumor de que Malfoy esta en peligro,  por lo que forzosamente tiene que quedarse a tu lado  – dijo Dumbledore levantándose y  dando por concluida la conversación.   

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