Gracias por los mensajes y aquí les va el siguiente capitulo, ojála les guste y mándenme un RR!!!!!!!!!!!!!

Capitulo 18

El Misterio del Reloj de Arena

- ¡Lily despierta! – decía Katie mientras le halaba la sabana – luego dices que no eres dormilona.

- ¿qué?… ¿qué hora es?

- Hay, es tarde Lily – dijo Tina saliendo del baño ya vestida con un vestido azul.

- Pero es sábado – dijo Mary, quien estaba vestida con una falda azul oscuro y una camisa negra – así que no es gran cosa que te quedes dormida, lo que pasa es que Katie esta preocupada.

- No estoy preocupada… bueno algo – dijo Katie, quien estaba vestida con un short negro y una camisa verde.

- Es igual, levántate y arréglate Lily – dijo Tina.

- No quiero levantarme… - dijo Lily.

- Vamos, Bella durmiente el día esta espectacular – dijo Carol saliendo del baño con unos Jeans negros y una camisa roja – Arriba – le quito la sabana.

- ¡Déjame! – dijo una muy despeinada Lily.

- Uh… dejare de decirte bella durmiente jajajaja… anda a peinarte, tu cabello se parece al de Jaime – dijo Carol entre risas.

- Hay no exageres – dijo Lily levantándose.

- ¡No exagero! ¿verdad que tengo razón, chicas? – dijo Carol.

- Si… - dijeron ellas riendo.

- Claro, claro, y volvemos a la política de todas contra Lily – dijo Lily entrando al baño.

- Como no, siempre se sigue la tradición – dijo Katie. Se rieron un rato mas de esto y luego recordaron el día que habían tenido ayer.

- Es cierto, Lily ayer estabas muy rara… ¿Qué te pasaba? – pregunto Mary.

Desde el baño se escucharon caer algunas cosas.

- ¡Lily! ¿estas bien? – pregunto Katie al oír esto.

- No fue un sueño… de verdad paso… - dijo Lily tirada en el suelo con cosas a su alrededor – dios… ¿ahora que hago? – se paso las manos por el cabello.

- ¡Lily! – llamo Katie una vez mas.

- Te dije que ella no esta bien – dijo Carol.

- ¿qué hacemos? ¡no responde! – dijo Katie.

- ¡Lily! – dijo Mary tocando la puerta.

- Ábrenos Lily – dijo Tina llegando junto con las demás a la puerta también.

- Lily ¿nos escuchas? – pregunto Carol.

- ¿te paso algo, amiga? ¿estas bien? ¡por lo que mas quieras contesta! – dijo Katie.

Lily se quedo allí tirada, escuchando los golpeteos en la puerta y los llamados de sus amigas… ella no sabia que hacer, se sentía muy extraña, se quedo allí por unos minutos hasta que un fuerte golpe la saco de sus pensamientos, las chicas habían aporreado la puerta tan fuerte que habían logrado abrirla. Katie se arrodillo junto a ella mientras las demás la miraban con curiosidad.

- Lily… ¿te encuentras bien? – pregunto Katie.

- No… - decidiéndose finalmente a hablar, ya que creía que si no lo hacia estallaría.

- ¡Sirius¡ ¡Ya despierta! – decía James quitándole la almohada.

- ¿Cómo soporta esto Remus a diario? – preguntaba Peter.

- Con paciencia – dijo Remus levantándose al otro lado.

- Hay… ¿te despertamos? Lo siento Remus… - dijo James.

- ¿porque no habrían de despertarme? No soy Sirius, odio quedarme dormido – dijo Remus.

- Bueno… pensé que querías dormir… - dijo James mirándolo significativamente.

- No, no quiero, pero gracias – dijo Remus entrando a cambiarse.

- ¡¡James!! – grito Peter exaltado – auxilio.

- ¿qué pasa? JAJAJAJAJAJAJA… - soltó James al ver que Peter estaba atrapado debajo de Sirius, había intentado moverlo y este le cayo encima.

- ¡ahys James ayúdame! – dijo Peter tratando de quitarse a Sirius de encima – vale, esta flaco pero como pesa el condenado.

- Claro, con todo lo que como no – dijo James halando a Sirius por la pijama y tirandolo en la cama de nuevo.

- Hay… creí que me asfixiaba – dijo Peter.

- No exageres – dijo James riendo.

- ¿y ahora que hacemos?

- Tengo una idea – dijo James corriendo a su baúl y trayendo su varita – te levantaras por las buenas o por las malas Sirius.

- ¿qué harás? – pregunto Peter.

- Ya veras… "Waterfall" – dijo James, y la sabana de Sirius se transformo en agua que lo baño de pies a cabeza.

- ¡¡SE HUNDE EL BARCO!! ¡PRIMERO LAS MUJERES Y SIRIUS! – grito Sirius levantándose de golpe tan sobresaltado como mojado.

- Jajajajajajajajajaja… esto es el colmo – dijeron los dos arrastrándose de la risa al ver la reacción de Sirius.

- ¿pero que…? ¿ustedes me mojaron? ¿por qué? – dijo Sirius molesto cayendo en cuenta de lo que pasaba.

- ¿cómo que porque? Porque andabas allí dormidote – dijo James.

- Hay si dormidote, ya veras James, me vengare – dijo Sirius.

Mientras Sirius paliaba con los chicos, Lily contó a las chicas lo que paso la noche anterior con Remus, para su sorpresa ellas no lo tomaron como Lily, quien lo había tomado como algo aterrador y confuso, mas bien se sorprendieron y se conmovieron por la dulzura de Remus, y la suerte que tenia Lily en haber hecho que el chico mas dulce de todos se hubiera enamorado de ella, le dijeron a Lily que no fuera tonta y que buscara a Remus y aceptara ser su novia.

- Si… - dijeron ellas riendo.

- pero… es que no estoy segura de si yo lo amo – dijo Lily.

- ¡No seas tonta! Si ustedes dos son la pareja perfecta – dijo Carol.

- Es cierto, dale una oportunidad al chico Lily – dijo Mary.

- Si no te hace feliz lo cortas y ya, no es un contrato de matrimonio – dijo Katie.

- Hay si, lo hacen parecer tan fácil… y no es así, como se nota que no están en mis zapatos – dijo Lily.

- No es que no estemos en tus zapatos, si no que tu tiendes a darle a las cosas mas importancia de la debida – dijo Carol.

- ¿estas diciéndome que esto no es importante? – pregunto Lily.

- No, estamos diciéndote que esto no es razón para que casi te desmayaras en el baño – dijo Katie.

- Nadie te esta poniendo una pistola en la cabeza para que aceptes a Remus, si no estas segura solo dile que no – dijo Mary.

- Recuerda que es tu decisión, nadie puede decidir por ti – dijo Tina.

La dejaron sola ella se vistió y cuando salió nadie estaba en el cuarto, tanto las chicas como los chicos desayunaban animadamente en el comedor, solo dos personas estaban en sus habitaciones aun: Lily y Remus. Cuando ambos bajaron se encontraron frente a frente, y cuando estuvieron frente al retrato de la dama gorda fue sencillamente imposible eludir mas una confrontación… tenían que hablar.

- Eh… eh… buenos días, Remus – dijo Lily tartamudeando y roja como un tomate.

- Buenos días, Lily… - dijo Remus. Hubo una pausa muy larga e incomoda.

- Sobre lo que paso ayer… yo quería decirte que… yo… - empezó Lily.

- No tienes que responderme si no lo deseas – dijo Remus con una mirada triste y perdida – no lo hice con esa intención… yo solo quería que supieras lo que sentía, es todo.

- Se que no tengo que hacerlo… pero, Remus… yo quiero hacerlo – dijo Lily sonriéndole y roja.

- ¿de verdad? – dijo Remus levantando la mirada esperanzado.

- ¡¡James!! – decía Carol riendo en el gran comedor, ya que James no paraba de hacerle cosquillas – suéltame.

- No quiero – dijo James riendo también – hasta que no me perdones no te dejare de hacer cosquillas.

- ¡SUÉLTAME! – grito Carol tratando de estar molesta pero seguía riendo.

- Hay pero que lindos se ven los dos – dijo Katie.

- Si… me dan ganas de vomitar – dijo Sirius.

- Hay no seas insensible, Sirius – dijo Katie.

- Yo no soy insensible, si soy un ángel ¿qué no me ves las alas? - dijo Sirius, los demás rieron con ganas, era una escena muy graciosa, tanto James y Carol como Katie y Sirius.

- ¡¡Auxilio!! Bien, bien tu ganas – dijo Carol por fin cuando se cayo en el suelo con James aun haciéndole cosquillas - ¡¡te perdono, te perdono, te perdono!!

- Así me gusta – dijo James al fin soltándola y riendo.

- Eres… un… te voy a… vas a ver… me vengare… - dijo Carol jadeando por la falta de aire y con la mano sobre el estomago.

- Con gusto esperare tu revancha, Cary – dijo James comenzando a comer.

- Eres un malvado tramposo – dijo Carol apenas recupero el aliento – mira que atacarme con cosquillas ¿se podría caer mas bajo?

- Si… si se puede – dijo Sirius.

- Hay Sirius, no te metas en eso – dijo Katie.

- ¿por qué no?

- Discusión de pareja, dos es compañía tres son multitud – dijo Katie.

- Uh… es cierto – dijo Sirius.

- Remus… e estado pensando esto toda la noche – dijo Lily muy lejos del comedor, sentada cómodamente en un sillón con Remus.

- ¿a si? – dijo Remus recuperando el brillo en sus ojos.

- Si, y bueno después de mucho pensarlo… pues llegue a la conclusión de que si tengo sentimientos por ti… sentimientos mas allá de una simple amistad – dijo Lily.

- ¿qué clase de sentimientos? – quiso saber Remus.

-  Eso es lo que no se… oh, es que no estoy segura, lo siento – dijo Lily – perro si puedo decirte que nunca había sentido esto por un chico antes.

Lily lo miro… lo miro con esos ojos verde brillante que parecían capaces de traspasar el alma con su dulzura, Remus respondió a esto con su tierna y dulce mirada característica, Lily le sonrió y el hizo lo mismo. Remus se armo de valor y se movió del sillón para estar mas cerca de ella, sus manos estaban temblorosas, pero aun así logro tomar las de Lily, lo cual Lily encontró muy dulce y lindo. Ella se sentía bien, se sentía segura cuando estaba con Remus, eso era lo importante, que podía confiar en el. Remus la miro fijamente y dijo… 

- Tal vez esto sea tentar mi suerte, pero… debo intentarlo – dijo Remus, sin soltar sus manos.

- ¿intentar que? – quiso saber Lily. Remus guardo silencio por mucho tiempo, Lily ya empezaba a preocuparse cuando…

- ¿Quieresserminovia? – dijo Remus muy rápido e incomprensible al oído humano.

- ¿¡que?! – soltó Lily.

- No me hagas repetirlo – dijo Remus con la cara tan roja como la de Lily.

- Juro que no escuche, si no jamás te haría repetirlo – dijo Lily.

- Bien… - dijo Remus tomando aliento - ¿quieres… ser… mi… novia?

- Oh… Remus yo… - dijo Lily.

- ¿no quieres verdad? Lo sabia, sabia que tentaba mi suerte – se adelanto Remus – lo siento, lo siento mucho Lily.

- Espera – dijo Lily rápidamente, había decidido que haría y no pensaba flaquear – si.

- ¿si que?

- Hay… no te hagas, tu ya sabes que – dijo Lily roja.

- No… - dijo Remus con una sonrisa picara.

- Tramposo… bien… si quiero ser tu novia – dijo Lily roja como un tomate.

- ¿en serio? – dijo Remus emocionado.

- Si… en serio – dijo Lily roja.

- ¡GENIAL! – dijo Remus.

- ¡si! – dijo Lily.

Se quedaron allí, rojos como tomates por mucho rato sin saber que hacer. Después de aproximadamente 20 incómodos minutos decidieron bajar a desayunar con los demás, cuando bajaron el gran comedor era el lugar ruidoso y alegre de siempre, lo que hizo que ambos se relajaran y soltaran unas tímidas sonrisas, en la mesa de Gryffindor, sus amigos hablaban animadamente sobre algo que nunca se enteraron pues tanto las chicas como James abrieron los ojos como platos al verlos juntos a los dos, afortunadamente todos tuvieron la delicadeza de no hacer preguntas embarazosas y el desayuno transcurrió sin mas ni mas. Después de terminar de desayunar los amigos se separaron por un rato en el que Remus contó a los chicos y Lily a las chicas que ya eran novios, lo cual arranco sorpresa en los chicos y emoción en las chicas. Luego se reunieron todos de nuevo frente al lago, bajo su habitual árbol a conversar.

La tarde paso muy rápido y en un abrir y cerrar de ojos los amigos estaban cenando en el gran comedor, el cielo del gran comedor era nublado y tormentoso aquella noche, lo cual sugería que aquella no seria una noche muy tranquila, en mas de una forma, los chicos cuchichiaban algo extraño lo cual puso en alarma a las chicas, después de comer subieron a la sala común y se sentaron en unos sillones frente al fuego, las chicas estaban algo suspicaces y los chicos haciéndose los "inocentes", Remus y Lily estaban tomados de manos, lo que no podía pasar desapercibido y acarreo burlas.

- Lily y Remus sentados en un árbol "B – E –S – A – N – D – O – S – E" – cantaban a cada momento, lo cual hacia que los chicos tuvieran constantes a taques de vergüenza y que todo Gryffindor se enterara de que eran novios.

Las chicas fueron a dormir muy temprano aquella noche para poder conversar y cuando tuvieron una sorpresita esperando en sus camas. Los chicos se quedaron bajo las escaleras que iban a su cuarto esperando la reacción que acarrearía su pequeña broma en las chicas. Al cambiarse, las chicas hacían su habitual charla antes de acotarse, donde los temas eran variados, pero aquella noche solo había un tema: Remus y su noviazgo con Lily, comentaban y reían alegres sobre este tema cuando…

- Totalmente de acuerdo chicas, Remus es uno de los mas lindos del curso, y obviamente el mas dulce de todos… especialmente si los comparamos con los… - dijo Mary mientras se metía en la cama, pero al entrar se puso pálida y dejo de hablar de golpe.

- ¿pasa algo Mary? – pregunto Katie mientras se metía también – ¡¡¡AH!!! – grito saliéndose de la cama.

- ¿qué pasa? – preguntaron las otras tres que aun no habían entrado a sus camas.

- Algo se mueve – dijo Katie algo histérica – debajo de la sabana, algo muy asqueroso – dijo halándose su pijama azul con asco.

- ¿se mueve? – dijo Carol – oh… oh no – dijo corriendo a su cama y quitando la sabana de golpe.

- ¡¡Ratas!! – exclamo Tina montándose en el pequeño gabinete que estaba junto al baño.

- ¿ratas? ¿pero que hacen aquí ra…? – empezó a decir Lily.

- ¡¡JAMES, SIRIUS, REMUS, PETER!! – dijeron Lily, Carol y Katie a coro - ¡¡ESTAN MUERTOS!!

- Primero tienen que atraparnos – gritaron los chicos al tiempo que salían por el retrato.

- Vamos por ellos – dijo Carol furiosa mientras se ponía la bata.

- Hecho – dijo Lily haciendo lo mismo – Mary ya levántate – Mary se había quedado paralizada como en shock, Lily le quito la sabana y las ratas salieron.

- ¡¡ASCO, ASCO, ASCO, ASCO!! Jamás volveré a estar limpia de nuevo por el resto de mi vida – dijo Mary con una sensación de asco, frotándose y halándose su pijama rosa como si pensara que esto la limpiaría.

- "Desvanesium" – dijo Tina con cara de asco lo que hacia que las ratas fueran desapareciendo.

- ¿qué esperan? Andando que se escapan – dijo Carol al tiempo que corría hacia la puerta seguida por las otras (Lily, Mary y Katie, Tina no se movió) muy molestas chicas.

Los chicos corrían por los corredores oscuros de Hogwarts muy divertidos por el resultado que su broma había tenido, mientras unas muy molestas chicas corrían (mas fuerte de lo normal, pues al parecer ira aumenta la adrenalina del cuerpo) pisándole los talones a los chicos, ellos si que se habían pasado esta vez, y ellas sabían que se vengarían aun no sabían como pero lo harían. Los chicos disminuyeron un poco el paso, querían que las chicas se acercaran a ellos, eso lo haría mas divertido, en pocos minutos estaban a escasos metros de distancia.

- ¡¡deténganse bola de delincuentes juveniles!! – grito Carol mas que molesta.

- Sin insultos lindas, además tendrán que atraparnos – dijo Sirius riendo.

- No lo dudes ni por un segundo – dijo Lily furiosa también.

- Mucha charla y poca acción – dijo James.

- Si, no vemos que hagan nada – dijo Remus.

-  Cierra la boca Remus Lupin – dijo Lily jadeando.

- Ya verán en cuanto los atrapemos – dijo Mary.

- Vamos a matarlos, en serio se pasaron con las ratas – dijo Katie.

Las cuatro estaban mas que furiosas, los chicos debían estar preparados.
Estuvieron persiguiendo a los chicos por mucho rato, pasaron por la mitad de corredores alrededor del castillo hasta que llegaron a uno que ninguno de ellos conocía, no prestaron mucha atención hasta que notaron que no tenia salida, las chicas sonrieron y los palidecieron… estaban atrapados. Se detuvieron y segundos mas tarde llegaron las chicas.

- Vaya, vaya, pero si están atrapados – dijo Carol con una mirada malvada.

- ¿a dónde escaparan ahora? ¿ya no son tan valientes? – pregunto Lily con la misma mirada, los chicos no respondieron.

- Pero miren si están atrapados – dijo Mary de la misma manera.

- Atrapados como ratas – dijo Katie igual. Los chicos tragaron y contuvieron el aliento.

- No hay porque ponerse agresivo chicas… - dijo James.

- Fue solo una… pequeña bromita – dijo Sirius.

- No sean exageradas – dijo Remus.

- Cierto… tengan piedad – dijo Peter. Las chicas intercambiaron unas miradas macabras que hicieron a los chicos preocuparse aun mas, caminaron hacia ellos.

En ese momento algo paso… el piso de donde se encontraban tembló con fuerza y una especie de explosión se escucho a lo lejos, en las afueras del castillo, los chicos se olvidaron de su disputa y corrieron a las ventanas mas cercanas, por allí vieron que algo brillaba… parecía que estaba incendiándose algo en el bosque oscuro… ¿qué estaría pasando?

- ¿son esas… llamas? – pregunto Lily.

- Eso parece… - dijo Katie.

- ¿el bosque se incendia? ¿acaso es eso posible? – dijo Mary.

- Por lo que se ve… si – dijo Carol.

- Esto es muy extraño… - dijo Peter.

- ¿creen que deberíamos avisar a alguien? – pregunto Remus.

- Si es importante ya deberían saberlo, ¿no crees? – pregunto Sirius.

- Y lo saben ¡Miren allá van! – dijo James apoyándose en la ventana – esos son… McGonagall, Black… Donaldsoon y…

- ¿Dumbledore? – dijo Sirius impactado.

- Wow, si que debe de ser serio si Dumbledore va – dijo Katie.

- Es cierto… - dijo Remus.

- ¿qué hacemos? – pregunto Carol.

- ¿cómo qué que hacemos? Ir a la sala común, aquí puede ser peligroso eso por no mencionar el castigo que nos caería y los puntos que nos bajarían si nos encuentran fuera de la cama a esta hora – dijo Lily.

- Yo no pienso ir a la sala común – dijo Sirius.

- ¿cómo que no piensas ir? – pregunto Lily.

- Así es, iremos a ver que pasa – dijo James.

- Es su decisión seguirnos o no – dijo Sirius comenzando a alejarse con James, hubo un momento de silencio en el que todos pensaron lo que harían.

- Yo voy – dijo Carol – espérenme chicos.

- También yo – dijo Remus.

- ¿tu también? – dijo Lily incrédula.

- Es mejor saber que pasa a quedarnos esperando en la sala – dijo Katie comenzando a caminar también.

- ¡No me dejen aquí! – dijo Peter corriendo tras ellos.

- Bueno… no importa, somos solo tu y yo, Mary – dijo Lily – ya se arrepentirán cuando…

- Debes estar bromeando – la interrumpió Mary – yo voy.

- Rayos… bien ustedes ganan iré… pero si nos expulsan… - dijo Lily corriendo junto con los demás.

Corrieron por los oscuros corredores hasta llegar a las afueras del castillo, donde tuvieron que volver a esconderse, pues casi fueron vistos por los profesores de Herbología, Encantamientos y Astrología, que conversaban misteriosamente en una esquina, aquello que pasaba debía de ser algo muy serio, los chicos trataron de escuchar lo que decían mientras se escondían tras una de las paredes de la esquina en la que ellos se encontraban, alcanzaron a oír parte de la conversación…

- Dumbledore dijo que intentan encontrar lo que escondieron en el castillo en el pasado – dijo una voz de mujer. 

- ¿lo que escondieron en el pasado? ¿qué quieres decir? – dijo otra voz, esta vez masculina,

- no estoy segura… creo que ni el mismo Dumbledore los sabe con certeza – dijo la primera voz.

- Aunque los rumores no se han hecho esperar… sobretodo desde el ataque que hubo recientemente en el instituto de Salen – dijo una tercera voz, también de mujer.

- ¿en Salen? – dijo Carol con una voz fina y entrecortada, James le tapo la boca para que no los fueran a oír.

- Es cierto, ese ataque alarmo mucho a la comunidad – dijo la segunda voz – a pesar de que se a ocultado el suceso a la luz publica.

- Se sabrá, así como también se llegara a saber este, no podrán ocultarlo por mucho tiempo, solo me gustaría saber ¿qué buscan en los castillos? – dijo la primera voz.

- Eso es algo que tal vez nunca sepamos, pero mejor vamos con Dumbledore y los demás – dijo la segunda voz.

Se escucharon pasos y se alejaron, hubo un momento de silencio.

- ¿atacaron Salen? – dijo Carol casi sin voz.

- Pero… ¿para que? – dijo Lily.

- Ni ellos lo saben… - dijo Katie.

- ¿y ahora que hacemos? – dijo Mary.

- Volvamos – dijo Lily.

- De ningún modo – dijo James.

- Ahora mas que nunca tenemos que saber que pasa – dijo Sirius.

- ¿qué? – dijo Lily.

- Claro, imagina lo grande que es que lo ocultan a la luz publica – dijo James.

- Yo no creo que sea una buena idea que entremos al bosque y menos si es algo peligroso lo que hay allí – dijo Lily.

- Ella tiene razón… hay hombres lobos, arañas y cosas allí – dijo Peter temblando.

- Pero tenemos que saber que pasa – dijo Katie – esta vez atacaron el bosque pero que pasa si a la próxima van por el castillo.

- No oyeron que lo que sea que creo la explosión y el incendio buscaba algo – dijo Lily.

- Y no oíste tu que ya ataco un colegio, que mas le da atacar el nuestro – dijo Carol.

- Esa no es razón para…

- Escucha Lily – dijo James volteándose hacia ella – nadie te esta obligando a que vayas al bosque es mas nadie te dijo siquiera que n7os siguieras aquí, ya estas grandecita para tomar tus decisiones y tu decisión fue venir, así que si sigues o no realmente me tiene sin cuidado, pero yo voy a ir.

- También yo, tu has lo que quieras – dijo Sirius.

- Yo… - Lily cerro el puño y guardo silencio.

A pesar de esto todos se aventuraron a entrar al bosque, allí todo estaba muy oscuro y frío, había neblina por todos lados como si estuvieran en lo alto de una gran montaña, se escuchaban muchos ruidos extraños y a la vez el silencio era insoportable, a Lily esto le recordó mucho la noche en que se había quedado sola en el pueblo bajo el valle de Godric, al recordar lo que había pasado esa noche un escalofrió de nerviosismo y temor recorrió su cuerpo, comenzó a caminar mas lento y tropezó con alguien.

- ¿Pasa algo, Lily? – pregunto Remus mirándola de manera preocupada.

- No es solo que… - dijo Lily.

- ¿solo que, que? – pregunto Remus.

- Esto me recuerda mucho a… no tiene importancia, solo que no me gusta – dijo Lily.

- ¿quieres que volvamos? Puedo hacerlo contigo si quieres – dijo Remus dulcemente, aunque Lily pudo notar un tono suplicante para que ella no aceptara.

- No, se nota que quieres ver que pasa, así que vamos – dijo Lily tomando su brazo y caminando mas rápido.

- Bien – acepto Remus.

- Silencio – dijo James desde el frente – escucho algo.

Todos guardaron silencio, y se colocaron tras James quien se encontraba tras un árbol tratando de ver algo que ellos aun no sabían que era, James tenia la vista perdida entre la oscuridad, pero el parecía ver algo mas que oscuridad pues se encontraba muy interesado en lo que sea que veía, luego de unos minutos susurro un leve: "abajo, escóndanse", los chicos obedecieron y fracciones de segundo mas tarde se escucharon unos pasos y unas voces que hablaban en susurro. Los chicos no supieron quien era hasta que estuvieron a centímetros de ellos, eran Black, McGonagall, Donaldsoon y Dumbledore.

- Yo creo que lo que planeas hacer es definitivamente un error, Albus – dijo Donaldsoon.

- Estoy de acuerdo, esto no debe abandonar Hogwarts – dijo Black.

- Les recuerdo profesores, que la única persona capacitada para decidir eso es el profesor Dumbledore – dijo McGonagall.

- Gracias Minerva, así es profesores – dijo Dumbledore - si él esta buscando el Reloj de Arena…

- No sabemos si el esta buscando el Reloj de Arena – interrumpió Black.

- Es lo único que tiene sentido, Joe, ¿o acaso es que se te ocurre otra cosa? – pregunto Dumbledore.

- No pero…

- Entonces te agradezco que guardes silencio, gracias – dijo Dumbledore – vayamos a mi oficina aun hay muchas cosas por discutir.

- Así es Albus – dijo McGonagall, comenzando a caminar junto con el.

Black y Donaldsoon intercambiaron misteriosas señas el uno con el otro en cuanto Dumbledore les dio la espalda, y apenas se alejo lo suficiente, tuvieron una corta conversación en susurro.

- ¿crees que busque el Reloj de Arena? – pregunto Donaldsoon.

- No lo se… no lo creo al menos – dijo Black.

- ¿entonces? ¿debemos ayudar a Dumbledore?

- ¿tenemos alternativa?

- Bueno…

- Camina antes de que sospeche – y diciendo esto tanto Black como Donaldsoon, caminaron hasta alcanzar a Dumbledore y McGonagall.

Los chicos guardaron silencio hasta que estuvieron completamente seguros de que los profesores se habían alejado y entrado en el castillo, en ese momento todos respiraron hondo y las preguntas sin respuesta estallaron en sus cabezas, preguntas como: ¿Qué era el Reloj de Arena?, ¿quién lo buscaba? ¿dónde estaba escondido? ¿por qué Black y Donaldsoon parecían llevarle la contraria al director?, entre otras. Los chicos ni siquiera sabían que decir, por tanto el viaje fue en silencio indescriptible e incomodo. Entraron a la sala común y con la misma cada quien fue a su habitación. Tina ya estaba dormida así que las chicas se fueron directo a la cama, al igual que los chicos.