DIARIO PARA TINO

CAPÍTULO DIEZ: La propuesta

-¡Mira Azumi que cosas tan finas! –grita Charlotte mientras jala a su amiga para ver vidrieras vuelta de la universidad. -¡Mira ese sombrero de gasa! ¡Y ese vestido rojo de allí, es tan chick! –agrega mientras señala una vidriera de "Channel".

-Charlotte, si te gusta tanto la moda. ¿Por qué elegiste el periodismo deportivo?

-¡Pues qué pregunta! ¡Por los muchachos, por supuesto! ¡La otra vez que fui al Paris Saint German había unos lomazos que ni te cuento! Claro, a mí me gusta más otro tipo deportista, como los tenistas ¿Viste lo guapo que es ese André Agassi? ¡Por Dios, si hubiera un Rolland Garros cada semana yo lo vería! Claro que hay otros deportes a destacar, como el básquet y me dirás: pero en la NBA son todos feos, y es cierto; pero si te aparece un Ginóbili...

-Y si te gustan tanto los deportistas, ¿por qué sales con un chef?

-Bueno... –se encoge de hombros -uno no manda en el corazón, él te manda a ti ¿no?

-Ah... supongo que en eso tienes razón. –responde Azumi ante el primer pensamiento coherente que dice su amiga en toda la tarde.

-¡Le voy a pedir, no, le voy a exigir a Jack que me compre uno así! ¡Ay, ese blanco no lo había visto! ¡Qué hermoso!

Azumi mira el vestido: es una especie de solero color blanco champagne, con el escote redondo y unas mangas como si fuera volados, la cintura ajustada y la pollera acampanada que llega hasta las rodillas. Realmente parece un vestido salido de Cenicienta o de algún cuento de hadas... y así es el precio también.

-Es.. muy bonito.. –dice ella. –Lástima que tan caro...

-Maman... –dice una vocecita infantil detrás de ella.

-¡Sorpresa! –exclama Misaki con Tino en brazos y apareciendo por detrás de las chicas.

-¡Ah Taro! Suerte que nos encontraste, recién salimos de clases...

-Sí, me imaginé. Pasé por el departamento pero no te encontré así que decidí venir a buscarte... suerte que nos cruzamos eh?

Azumi se ruboriza; ¡Taro y Tino buscándola y ella viendo vidrieras, es algo inadmisible! Súbitamente recuerda que la cita con el abogado que trata los papeles para que Taro figure como el padre de Tino en los documentos es esta tarde.

-Charlotte, yo te dejo acá. –dice mientras carga al bebé- Taro y yo debemos resolver unos trámites. Nos vemos mañana, y saludos a Jack...

-Está bien, au revoir...

Charlotte se despide de su amiga y sigue mirando la vidriera de Chanell, hasta que el ruido de una frenada seguido de un grito la distraen de sus pensamiento. Se voltea para ver que sucede y ve a Taro en medio de la vereda sentado (o más bien como si se hubiera caído) y al lado de él a Azumi y al bebé gritando.

-¿¡Oiga, por qué diablos no entra con más cuidado?! ¡¿No ve que está pasando un carrito de bebé?! –exclama Azumi totalmente enfurecida.

Misaki hace un esfuerzo para pararse y pese a estar un poco aturdido no duda en hacerle frente al descuidado conductor.

-¡Usted es que debería tener cuidado de ver por dónde va!–exclama con voz firme- ¡¿No sabe que los peatones tienen prioridad?!¡¿Por qué no toca bocina antes de entrar?!

-Usted es el que tiene que fijarse por dónde pasan los autos –reclama el conductor.

-¿¡Casi atropella a mi hijo y a su madre y pretende tener razón!?

-¡Pues dígale a su mujer que tenga más cuidado de no andar caminando distraída! –reclama el conductor de un Chevrolet que se vio detenido en su intento de entrar a un garage.

-¡¿Qué tiene que decir de mi mujer?! ¿Prefiere decírselo a la policía, eh?

-Taro, no le hagas caso, estamos bien por favor... –le pide Azumi que trata de agarrar a Taro que parece dispuesto a seguir peleando justo al momento que llega Charlotte. El conductor también siente el peligro.

-Si necesitan un testigo yo vi todo.. –miente la francesa.

-No.. así está bien. Disculpe señora...

-Taro, mejor deja que se vaya o no nos va a alcanzar el dinero para tantos abogados... –dice acercándose a Taro...

-Pero..

-Deja que se vaya. No nos pasó nada...

El conductor se va aprovechando que Azumi tranquiliza a Taro. Charlotte pregunta.

-¿Qué pasó? No vi nada, sólo escuché la frenada.

-Estábamos pasando cuando este tipo entró al garage sin tocar bocina, pero Taro me agarró del carrito y me empujo que si no... ¡ay, por poco nos mata!

-¡Qué irresponsable! ¡Ay, no sé si debería decirte esto pero estuviste genial! ¡La cara de susto del tipo cuando le dijiste que podían ir a la policía, parecía que te lo querías comer con los ojos! –exclama Charlotte entusiasmada.

-Como le dije una vez a Azumi... –la mira- ...puedo ser malo si se trata de mi familia...

-Azumi sonríe, aunque acababa de pasar un susto muy grande, algo dentro suyo la hace sentirse confortada, como si le dieran un abrazo en el corazón. Luego comenta...

-Taro, mejor dejemos lo del abogado y vamos al hospital para que te revisen...

-¿Eh? ¡Claro que no! Si se entera el médico del club me pueden dejar sin jugar y ya está por empezar la liga...

-Entonces vamos a casa. Llamamos al médico que es de confianza y luego te prepara un rico yakimeshi

-Pero...

-Anda, no seas caprichoso, que ya tengo bastante con un solo niño...

En el 7 de la avenue Kennedy, se encuentran las instalaciones de Paris Saint-German (PSG). Dicho lugar cuenta con una moderna infraestructura sobre los 22 000 m2 que ocupa el club dentro del "Parc des Princes". Una de ellas es el restaurante "70", llamado así por el año de fundación del PSG, dónde se puede disfrutar de mesas, sillas y decorado que rememoran la primera fachada del club mientras se almuerza o se desayuna; cómo están haciendo Taro, Azumi y el hijo de ambos.

-Te agradezco que vinieras, sé que no es demasiado cerca para ti.

-Descuida, quería traer a Tino de paseo. Además el abogado me pidió que te diera esta lista. Es todo lo que tenés que llevarle.

-Pero ya se lo envié por fax... ¿no lo recibió?

-Sí, pero dice que no se-que-cosa le falta. Ten paciencia, así es la burocracia...

-Sí, después lo llamo. Cambiemos de tema –dice terminando su café- Tengo una duda que me persigue, pero no sé si preguntarte... Es personal...

-Ya lo estás haciendo, dilo.

-¿Tienes pareja, Azumi?

-¿Eh? –pregunta ella, sin terminar de entender...

-O un compromiso... o alguien que te interese...

-¿Por qué me preguntas eso?

-Bueno, eres una mujer joven, bonita, inteligente... debe haber muchos hombres que se interesen en ti.

Azumi sonríe casi irónicamente "¡Claro! ¡Cómo si algún hombre se fuera a fijar en una mujer sola, con un niño y llena de problemas y deudas!" como es (o al menos hasta hace poco era) ella. Además ¡cómo para andar perdiendo en novios con un hijo pequeño por el cual luchar! ¡¿Qué clase de pregunta es esa?! Luego de respirar hondo unos instantes (y contar hasta diez, porque realmente era una pregunta bastante estúpida) contesta:

-No, no tengo. Y tampoco tuve demasiado interés en tenerla. Además, no es tan fácil que un hombre acepte el hijo de otro... no quiero ser brusca pero es así...

-Pero aún así... estás a tiempo. Quizás ahora puedas reorganizar tu vida y tal vez...

-El único hombre que me interesa es Tino. –sentencia, con un tono un tanto duro.

-Ya veo. Entonces espero que puedas responderme otra pregunta...

-¿Cuál?

-Azumi, ¿querés casarte conmigo?

-¿Qué? –repregunta, sin saber si lo que escuchó era lo que realmente Misaki dijo.

-Que si querés que nos casemos. Mira, yo no te digo que tenemos que empezar una relación ni nada, pero de esa manera...

-Ah, claro... –murmura; luego de que dentro de ella nacieran y murieran algunas ilusiones.

-...sería bueno para Tino y para ti, así cuando sea más grande te evitarías situaciones incómodas, como lo del señor Tanaka. Además, yo me sentiría más tranquilo. Si me pasa algo, todo lo mío les quedara ustedes sin ninguna demora... Ya viste lo que pasó el otro día; con esa fue la segunda vez que me salvo de morir atropellado, no sé si tendré la misma suerte una tercera...

-Taro, yo no sé que decir...

-Sólo di que aceptas, por favor...

Azumi reflexiona unos instantes: ¿Por qué no? Total , no necesita ser libre para casarse con nadie más, hacía tiempo que renunció a la idea de una pareja. Y después de todo, Taro es el padre de Tino. Si a ella la pasara algo (cosa a analizar también porque nadie tiene la vida comprada) Tino quedaría huérfano. Además si el dichoso trámite de la partida se sigue atrasando así estará listo para cuando Tino sea mayor de edad; en cambio así...

-Está bien Taro. Me casaré contigo.

yakimeshi: guiso de arroz con pollo y verduras.

7 de enero de 2005

¡He recibido todos sus cometarios sobre el fic y sólo puedo decirles I'm so happy!!! Nunca pensé que este fic los atrapara tanto así que debí dejar todos mis otros trabajos y dedicarme por entero a este. ¡Gracias a todos por sus mensajes en la lista de Wakabayashi's friends y !

El retrato de Josefina de Bonaparte se encuentra efectivamente en el Museo del Louvre, si desean verlo pueden hacerlo en www.louvre.fr en la sección pinturas de Francia

Hoy hay mucho para decir así que seré breve:

a) ¿Quién es Ginóbilli? Manuel Ginóbili es un basquetbolista argentino pero de nivel internacional, juega en EEUU para el San Antonio Spurs. Lo van a identificar más por ser el jugador estrella de los juegos olímpicos Atenas 2004, ya que el muchacho y su grupete vencieron a EEUU en semifinales y a Italia en la final llevándose la medalla de oro ( el mismo día que el equipo de Bielsa ganó la de oro pero en fútbol )

b) ¡Sigo leyendo y traduciendo en francés, idioma que yo ya creía olvidado de mi cerebro! Todos los datos sobre el Paris Saint-German los saqué del sitio oficial (www.psg.fr) y francamente espero no haberme mandado ninguna macana con las descripciones.

Una cosa más: ya que les gustan tanto cada capítulo ¿Podrían decirme que es lo que les gusta específicamente? Si quieren opinar o sugerir algo este es el momento porque una vez que el fic termina no hay cambios... En serio, yo valoro todas las opiniones y respondo todas las preguntas. Besos.