Los 3 Sellos

Por: Princess Lalaith

Nota Inicial: No soy dueña de Magic Knight Rayearth(Guerreras Mágicas) ni de sus personajes. Los personajes que no conozcan si me pertenecen, así como la trama de ésta historia. Las dos canciones usadas a lo largo de éste Fanfic tampoco me pertenecen a mí sino a sus respectivos autores e intérpretes así que por favor no me demanden, yo hice esto por entretenimiento propio y para intentar darles algo bueno que leer a ustedes. Eso es todo, disfruten el Fanfic.

Capítulo 15.- La Nueva Historia de Céfiro.

Al día siguiente las cuatro parejas se casaron. La fiesta se hizo privada, sólo entre amigos, pues el 'gran show', sería en la coronación, una semana después.

Dos días después de la boda Sora cumplió los siete años. La fiesta se hizo en casa de Prisma, también entre amigos.

Después de unas horas Sora decidió salir un momento, y se quedó sentada sobre la barda, pensando en todo lo que le había ocurrido en las últimas semanas.

¿Estás bien? –preguntó Lira sentándose junto a ella.

-Si. –respondió Sora con una sonrisa melancólica. –Sólo pensaba, en todo lo que me ha pasado en las últimas semanas, es simplemente increíble. Como un cuento de hadas.

-En verdad que sí resulto ser un cuento de hadas. –dijo Lira. –Dentro de unos días serás presentada oficialmente como la princesa de Céfiro.

-Todo estará bien si sigo teniendo cerca de mis amigos-dijo Sora mientras veía a Lira. –Como tú.

-Precisamente de eso te iba a hablar. –dijo Lira. –El Rey habló conmigo y me preguntó si querría ser algo así como tu 'dama de compañía'. Estaría en el castillo, y podríamos salir a pasear de vez en cuando.

¿En serio? –preguntó Sora, emocionada con la idea.

Aunque Lira fuera diez años mayor que ella, ambas se llevaban muy bien, casi como hermanas.

Lira asintió, satisfecha de que a Sora le hubiera agradado la idea.

¡Perfecto! –exclamó Sora con una amplia sonrisa.

Ambas rieron.

-

Y mientras esto sucedía. Una pareja las observaba desde la puerta de la casa.

-Es agradable verla reír. –dijo Anaís.

-Si, he de admitir que es raro verla tan feliz. –dijo Paris.

-Sora siempre ha sido muy madura para su edad. –dijo Anaís con melancolía. –Y creo que en parte tiene que ver conmigo, porque nunca le di una figura paterna, la dejé crecer sin un padre. Y además el haber llegado a un Céfiro en guerra, ella me vio a mí luchar, y de inmediato quiso imitarme.

-Pero ya no tiene por qué luchar. –dijo Paris abrazando a su esposa. –Ahora finalmente la paz ha regresado a nuestro mundo.

-Así es, pero ¿Cuánto durarÿ

-Eso no importa. Mientras estemos juntos podremos enfrentar cualquier cosa.

-Supongo que tienes razón.

-Claro que sí. Además, por el momento deberíamos disfrutar ésta paz. Ya después si hay problemas nos preocuparemos.

Anaís asintió a la vez que se recargaba en el hombro de él. Sintiendo ese calor y protección que tanta falta le había hecho durante ocho años, y que ahora finalmente volvía a sentir y, ella esperaba, nunca más se separaría de ella.


Una semana después de la boda, todo el pueblo de Céfiro estaba reunido afuera del castillo. Esperando la presentación del Rey y su familia.

-Atención, damas y caballeros, hermanos cefirianos. –llamó Ráfaga. –Ante ustedes: La Corte Real de Céfiro.

De la puerta que daba a la terraza salieron Guru Clef y Marina tomados de la mano. Él llevaba su tradicional túnica con diversos tonos de morado y azul. Ella por otro lado llevaba un vestido azul turquesa hasta arriba de las rodillas, de manga larga, cuello ovalado, con zapatos negros de tacón alto.

-El hechicero supremo de éste mundo: Guru Clef, y su esposa: Marina, Dama del Espíritu del Mar. –los presentó Caldina, de pie junto a Ráfaga.

La multitud les aplaudió.

Los siguientes en salir fueron Lucy y Latis. Él con su típico estilo todo de negro, además de la armadura y la espada a un costado, lo mismo que la capa. Ella con un vestido rojo vino, largo hasta los tobillos con una abertura de un lado, el cuello del vestido era en 'V', y era de doble tirante cruzado en la espalda, zapatillas rojas de cintas hasta media pantorrilla eran el complemento perfecto para su atuendo.

-El espadachín-mágico Latis Shields, y su esposa: Lady Lucy, Dama del Espíritu de Fuego y Primera Dama de Céfiro. –la presentó Tristán, de pie junto a su madre.

Nuevamente la multitud ovacionó. Aunque de inmediato guardaron silencio, esperando la presentación de sus gobernantes.

Salió primero Paris, e inmediatamente detrás de él salió Anaís. Él llevaba un traje blanco con adornos verdes y dorados, además de una larga capa, y una elegante corona de oro y adornada con diamantes sobre su cabeza. Anaís estaba ataviada con un elegante vestido verdemar, ajustado hasta la cadera y de ahí con un poco de vuelo, llegando hasta el suelo y arrastrándose un poco, de hombros descubiertos, zapatillas blancas sencillas, y sobre su cabeza una fina y delicada corona de oro con esmeraldas.

-Ante ustedes, su Alteza Real: el Rey Paris. –lo presentó Lira. –Y su Majestad, Dama del Viento y desde hoy Reina de Céfiro: la Reina Anaís.

Paris y Anaís hicieron una inclinación al presentarse ante los cefirianos.

Todos los presentes les aplaudieron. Muy contentos estaban de tener nuevamente a su rey, y que a su vez éste tuviera una reina.

-Atención, pueblo de Céfiro. –llamó Paris.

Todos callaron para escucharlo.

-Me es muy grato para mi presentar ante todos ustedes a mi hija: la Princesa Sora. –dijo Paris.

En ese momento Sora salió a la terraza, con un lindo vestido de cuello redondo y manga corta en diferentes tonos de amarillo y crema que le llegaba hasta las rodillas y zapatos beige, además de una tiara dorada surcando su frente, se veía como una linda pequeña-dama.

Sora fue a pararse entre sus padres y le sonrió a los Cefirianos.

Todos los presentes aplaudieron(especialmente aquellos que la habían visto en la batalla contra Golbar unas semanas atrás).

Sora se sentía un poco apenada por tanta atención, pero la presencia de sus padres la mantenía ahí, considerablemente tranquila.

Lentamente Lucy, Latis, Marina y Guru Clef se acercaron hasta quedar una pareja a cada lado de los reyes.

-Y así es como comienza, la nueva historia de Céfiro. –declaró Lucy con voz suave.

Todos asintieron y sonrieron.

Mientras que a lo lejos el sol se iba elevando. En verdad una nueva historia estaba comenzando ese día, una que, con un poco de suerte y ayuda de todos, sería mejor que la anterior.

Aunque en la mente de uno de los presentes quedaba una sombra: las palabras que habían pronunciado Golbar y Windom, un día habrían de cumplirse...

Fin

Notas finales de la Autora:

Bua¡Voy a llorar¡Ya se acabó! Después más de un año de haberlo iniciado ya terminé, no lo puedo creer. La verdad estoy muy satisfecha de él aunque sé que algunos detalles no quedaron muy bien. La mayoría de los cabos sueltos se solucionarán en la secuela que estoy planeando. Se va a llamar: "Princesa de los Sueños" y no les prometo tenerla pronto(ya con lo que me tarde en hacer ésta).

Les agradecería mucho si me escriben, mi mail es: y me dan su opinión de éste nuevo Fanfic mío, en serio sus opiniones me importan mucho.

Un agradecimiento especial a mi mamá que siempre me está soportando todas las ideas locas que tengo y me ayuda a inspirarme cuando me atoro con algo.

Espero hayan disfrutado leyendo el Fanfic tanto como yo disfruté escribiéndolo.

Nos vemos pronto.