Kentaru: ahora no tengo ningún review que contestar, así que partiré, alguna objeción? –mira a una esquina donde tengo a Sonic y a Knuckles amarrados y amordazados, tratando de liberarse- parece que no? Ok aquí voy.
Capitulo 6: La Calma después de la tormenta
- No, pero no puede ser! –grito Rouge, quien se acerco al Dr. y lo sujeto de cuello de la camisa- Dr. Alfred debe haber un error, haga los análisis otra vez -
- Muy bien, muy bien –el Dr. coloco la muestra de Knuckles y la del bebe… salio positivo.
- No, debe haber algún error, Knuckles es el padre de mi hijo –mira a Knuckles- Knuckles debe haber algo malo con la maquina, tu eres el padre de mi hijo –
Knuckles estaba callado, con los ojos abiertos, aunque de pronto los cerró.
Rouge se quedo hay, pensando, era imposible, Knuckles era el padre de su hijo, jamás había estado con otra persona que no fuera el (aunque usted, no lo crea).
- No, no puedes ser –Rouge se puso a llorar y salio corriendo.
- Rouge espera! –grito Knuckles, quien luego se acerco al Doctor.
- Escucha, la maquina debe de tener algo mal, veamos –tomo una muestra de la sangre de Rouge, que tomo para su revisión, y la coloco, junto con la del bebe. Cuando el papel salio, el Doctor lo leyó, con gran alivio.
- Positivo –dijo- sabia que esta maquina salio mala –
- Entonces si es mi hijo? –pregunto el echidna.
- Por supuesto, ahora si quieres asemos un examen común de ADN, claro que ese, toma más tiempo -
- No lo se –
- En vista a que fue mi culpa, por haberles insistido en probar la maquina, lo haré gratuitamente –
- Esta bien, pero mejor busco a Rouge –
- No, es mejor que te quedes, para llevarte el resultado de inmediato -
Rouge ya había corrido mucho y se había cansado.
- El sueño… -murmuro- debió ser como un aviso, o una premonición –se sentó en una banca- así que ahora Knuckles debe odiarme –coloco ambas manos tapando su cara, y comenzó a llorar.
- Rouge? –dijo una voz, frente a ella, Rouge levanto la vista y dejo de cubrir su cara, era Cream.
- Snif, Cream, que haces aquí? –
- Yo, estaba paseando con Cheese –y de su espalda salio el pequeño Chao.
- Chao, chao! –dijo.
- Que bien –Rouge se puso a llorar otra vez, y Cream se sentó a su lado.
- Que te ocurre? Tu nunca lloras –decia con voz preocupada.
- Es que… es que… -y Rouge le dijo toda la historia- y creo que el sueño se volverá realidad –
- Bueno… esto, yo no lo diría axial, estoy segura de que el Señor Knuckles, sabe que tu dices la verdad –
- Pero y si no es así, y si me odia y no vuelve a confiar en mi –Rouge se puso a llorar y Cream la abrazo, la pobrecita no sabia que hacer para animar a Rouge.
- Vamos, te llevare a tu casa –se levantaron y se dirigieron al departamento de Rouge, cuando entraron Knuckles estaba sentado en un sillón, mirándolas.
- No… no –decia Rouge, al recordar su sueño.
Knuckles se paro y se dirigió a donde estaba Rouge.
- Knuckles, escucha, es tu hijo te lo prometo, por favor créeme, no me odies, te lo suplico –Rouge fue y apoyo ambas manos sobre el pecho de Knuckles, al igual que la cabeza y comenzó a llorar.
- Rouge, porque –Rouge comenzó a pensar en lo que el le diría, aterrorizada- crees que no creo en ti? –dijo con voz de tristeza el echidna.
- Knuckles… -
- Jamás, desconfiaría de ti –Rouge sintió como los brazos del echidna, cubrían su cuerpo.
- Knuckles… -Rouge se puso a llorar pero no de tristeza, si no de alegría.
- Que lindos –dijo Cream, al verlos.
- Chao, chao! –dijo Cheese.
- Ten –el echidna le paso a Rouge un papel.
- Negativo? –leyó la murciélago, algo confundida.
- Mi prueba normal de ADN, con la del bebe, la maquina que uso el Doctor estaba averiada, te manda sus disculpas –
- Knuckles –lo abraza.
Y paso otro mes, con el que ya llevan cuatro, Rouge ya no tenía ningún problema serio, seguía algo irritable y sensible, pero el mayor seria…
- Nada de mi ropa me queda! –grito Rouge, enfadada.
- Vamos Rouge, cálmate, en unos meses mas, volverás a la normalidad –decia Amy, tratando de calmarla.
- Pero mírame, pronto seré una ballena –Amy miro a Rouge, que ya había comenzado a crecer su vientre.
- Pero… pero… ya se vamos de compras! –
- Ve tú, yo no pienso salir ahora, me veo horrible y no tengo que usar, que me quede bien –
- Huf… este bien, yo te traeré algo de ropa –
- Haré comida de bebe contigo, si se te ocurre traerme algo de color rosado! –se adelanto Rouge.
- Huf… lo que tu digas –pensando- rayos, con lo molesta que era, cuando se enojaba, sin estar embarazada y ahora esta peor –
- Me voy –se fue al sillón a ver televisión- y pobre de ti, si traes algo rosa-
Amy salio y volvió al rato con algunas cosas para Rouge, y claro nada rosa.
- Veamos, pero mas te vale que no haya nada rosa –Rouge comenzó a mirar lo que Amy le trajo- no, muy feo… no, muy poco original… no, esta horrible… no, carece de originalidad –decia mientras arrojaba la ropa asía tras.
- Huf… ya no puedo mas –dijo Amy.
Rouge continuo hasta que llego a una prenda rosa, que a Amy había comprado por error.
- Rayos olvide sacarla –pensó.
- Esta me gusto, gracias Amy –
Plonk!
- Amy? –pregunto Rouge que se paro y vio que Amy se había caído de espaldas. Rouge se coloco el vestido rosa- como me veo? –
- Si, muy linda –decia con la gotita, que le ponen a los personajes en los animes, cuando se dan situaciones como estas.
Y paso otro mes más.
- Cinco meses y… -dijo Rouge- me veo horrible! –el vientre de Rouge creció mas durante las semanas.
- No digas eso, te ves hermosa y radiante –dijo Knuckles.
- En serio crees eso, mi amor –dijo Rouge, con estrellitas en los ojos y un fondo de color rosa, con muchas flores, adornado con lucecitas.
- Claro –dijo el echidna.
- Se ve gorda, y pronto se pondrá peor –dijo Shadow desde la cocina. Y el fondo de Rouge se rompió como un vidrio, para dejar ver que estaban en la sala.
- Me veo gorda y fea! –grito, con lagrimas.
- Claro que no –decia el echidna que trataba de animarla.
- Huf, estoy harta –dijo- me veo fea, gorda y ya no encuentro un sostén que me quede –dijo Rouge mirando sus pechos, que al igual que su vientre, también habían crecido (aunque usted, no lo crea).
- No digas eso –
- Parezco una vaca, solo me faltan los cuernos y las manchas –dijo algo triste.
- Para mi tu siempre serás hermosa –
- En serio –dijo Rouge, con estrellitas en los ojos.
- Si –el echidna no resistió más y beso apasionadamente a Rouge.
- Oh que lindo, me voy al baño a vomitar –dijo Shadow, quien salio de la casa, en vez de ir al baño.
Y después de eso, la tarde fue tranquila.
Fin del capitulo.