CAPITULO XII: BAILE Y CONFESIONES

El sábado por la mañana en la sala común de Gryffindor todo el mundo estaba revolucionado por la próxima fiesta, excepto un pelirrojo que estaba en un sillón con cara de circunstancias.

- Venga Ron, no es para tanto - le decía su amigo de ojos verdes.

- ¿Cómo que no? - le contestaba el pelirrojo - ¿Ahora tengo que invitar a alguna chica? ¿Pero a quien?

- Yo tengo una idea - dijo Harry sonriéndose.

- Dime, quien - inquirió Ron.

- Her...mio...ne - dijo Harry lentamente para ver la reacción de su amigo.

- ¿Cómo? ¿Acaso te has vuelto loco? - dijo Ron sobresaltado por la propuesta de su amigo.

- Venga, no esta nada mal - decía Harry - Acuérdate como la miraste cuando fue al baile con Krum.

- Arrggg, no me lo recuerdes - dijo Ron - ¿Oye ahora que lo pienso quizás tengas razón? - razono Ron sonrojándose.

- Claro que tengo razón - aseguro Harry.

- Ya que lo mio esta mas o menos solucionado - dijo Ron mirando ahora inquisitivamente a Harry - ¿A quien vas a invitar tu? - le pregunta a Harry.

- Yo ya lo he hecho - aseguro Harry con una sonrisa.

- Ya, pero si Dumbledore lo anuncio ayer - dijo Ron sorprendido por la inusual decisión de su amigo - Y se puede saber quien es la pobre, que va a ir contigo - le dijo Ron a modo de cachondeo.

- Ahhh, ya te enteraras el día del baile - dijo Harry divertido, y sabiendo que una conversación parecida a la que ellos estaban teniendo, se daba lugar en la habitación de las chicas.

AL MISMO TIEMPO EN LA HABITACION DE LAS CHICAS

- Hermione, ¿Ya te ha pedido algún pelirrojo que vayas con él al baile? - preguntaba Ginny a su amiga de pelo enmarañado.

- ¡¡¡Que!!! - decía Hermione agarrando una almohada y amenazando a Ginny - Como te atreves, enana - decía mientras la perseguía por la habitación.

- Eh, que solo he preguntado, si mi hermano ya te ha invitado - decía Ginny muerta de risa.

- Pues no, y no creo que lo haga jamás - decía Hermione con la respiración entrecortada, sin dejar de perseguir a la pequeña Weasley.

- ¿Pero y si lo hiciese? ¿Aceptarías? - dijo Ginny parándose y poniendo las manos a modo de rendición.

- Pues...no lo se - dijo Hermione sentándose en la cama - Tal vez - admitió Hermione con una leve sonrisa.

- Lo sabia - dijo Ginny.

- ¿Y que pasa contigo? - interrogo a la pelirroja.

- Bueno, ayer un chico de Hufflepuff me invito al baile - dijo Ginny sonriéndose al acordarse de la cara que había puesto Harry - Era bastante mono pero le dije que no.

- ¡Como! Como que le dijiste que no - exclamo su amiga - ¿Y por que motivo? Si se puede saber.

- Por que ya tengo pareja - afirmo Ginny muy alegre, al ver la cara de sorpresa de su compañera.

- Me vas a decir quien es o lo voy a tener que adivinar - dijo Hermione mirando a su amiga curiosa.

- Amiga, creo que tendrás que adivinarlo o en su defecto esperar hasta el baile - dijo Ginny con una gran sonrisa.

- Si serás... - dijo Hermione volviendo a agarrar la almohada y retomando persecución de su amiga.

El fin de semana antes de baile, estaba programada una salida a Hogsmeade. El grupo decidió ir a comprase las cosas que les faltaban para el baile, en su mayor parte complementos. Ya que todos tenían sus túnicas de gala y demás, aun así tenían que comprar otro tipo de cosas.

Iban de camino hacia Hogsmeade charlando tranquilamente, por delante Ron y Harry. Un poco mas retrasadas Ginny y Hermione, hablando de los complemente que se iban a comprar.

- Bueno, me vas a contar como se lo pediste o que - reclamaba Harry a Ron.

- Es... que me da vergüenza - decía Ron sonrojado.

- Venga dímelo - insistía Harry.

- Vale te lo cuento pero como te rías, no respondo de mí - amenazo el pelirrojo.

FLASH BACK

Un día antes de la salida a Hogsmeade, un nervioso Ron estaba en la sala común de Gryffindor esperando a que el objeto de sus deseos bajase de la habitación. Cuando la vio bajar elegantemente por la escalera, se le corto la respiración, ella se dirigía hacia el con paso decidido.

- Vale, aquí estoy ¿Qué querías? - cuestiono Hermione.

- Yo... eh... esto... ¿Te queria hablar de un asunto? - dijo Ron algo cortado y no sabiendo por donde salir de esa situación - Mejor nos vamos a otro lado - sugirió Ron.

- Vale, ¿Que tal si me lo cuentas mientras damos la ronda de prefectos? - dijo Hermione con una de las sonrisas que hacían a Ron derretirse.

- Aja - fue lo más que alcanzo a decir, a la vez que movía la cabeza afirmativamente.

Hermione salio con paso decidido de la sala común dispuesta a hacer su ronda, la seguía a unos pocos pasos Ron. Este último intentaba decidir como abordar a su amiga, cada vez se retrasaba más hasta que cerca de un aula vacía Hermione lo apremio.

- Ya voy, ¿Tienes prisa o que? - dijo Ron.

- No, ninguna - respondió Hermione. Cuando Ron llego a su altura se fijo en la susodicha aula, tomo una bocanada de aire y tomando todo su valor.

- ¡¡VEN!! - dijo mientras la agarraba la mano y la arrastraba tras de si hasta dentro del aula vacía.

- ¿Pero que demonios estas haciendo es que has vuelto loc...? - decía Hermione hasta que Ron le puso un dedo en la boca para que se callase.

- ¿Quieres venir conmigo al baile? - dijo Ron con todo el valor que fue capaz de sacar, mientras retiraba el dedo de la boca de Hermione.

- Si - atino a decir Hermione mientras se ponía muy colorada. Acto seguido Hermione se colgó del cuello de Ron abrazándolo tan fuerte que no se hubiese podido escapar, ni aun habiendo querido.

- Genial - dijo Ron mientras le devolvía el abrazo. Poco después ambos se dieron cuenta de la situación en la que se encontraban y optaron por separarse, no sin antes ponerse más rojos que el pelo de Ron.

FIN DEL FLASH BACK

- Así es como paso - decía Ron para terminar su relato.

- Increíble - dijo Harry con una gran sonrisa.

- ¿El que es tan increíble? - preguntaba Ron algo enfadado.

- Pues todo - decía Harry empezando a reírse - El que tú te atrevieras y el que Hermione esperase a que tu se lo pidieras.

- Eh... - dijo Ron a modo de protesta, hasta que se dio cuenta - ¿Cómo que espero? ¿A que te refieres? - pregunto Ron intrigado.

- Pues a que me voy a referir - decía Harry cada vez más divertido viendo la cara de Ron - Pues, me refiero a que rechazo varias invitaciones antes de que tú la invitaras - confirmo Harry a Ron.

- ¡¡Como que rechazo invitaciones!! - repitió Ron sorprendido.

- Eh, no tan alto - dijo Harry - Que te va a escuchar, y se supone que tú no lo sabes.

- ¿Por qué no me lo dijo? - dice Ron.

- Porque estaba esperando a que tú se lo pidieses - confirmo Harry - Creo que deberías alegarte.

- Tienes razón - dijo Ron esbozando una gran sonrisa, tan amplia que parecía que la cara se le iba a rajar.

Cuando llegaron a Hogsmeade, pasaron por varias tiendas en las que las chicas querían comprar complementos para el baile, también realizaron su habitual ruta por las diferentes tiendas del pueblo. Acabaron en Las Tres Escobas, como era costumbre en casi todos los estudiantes de Hogwarts. Escogieron una de las mesas situada en una esquina para no ser interrumpidos, debido sobre todo a la fama de Harry. Desde que había empezado como Profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, era más popular que nunca. Todos los estudiantes de los cursos inferiores solían saludarle, Harry ya se había acostumbrado pero los demás todavía sufrían por que tardaban mucho en llegar a los sitios.

Mas tarde se les unieron a la mesa Neville Longbotton y Luna Lovegood, los cuales se habían echo muy amigos desde lo sucedido en el Ministerio.

- ¿Ya tienen pareja? - pregunto Hermione a Neville y Luna.

- Eh... si - respondió Luna en tono soñador.

- Si, como no sabíamos a quien invitar hemos decidió ir juntos - dijo Neville.

- Mira que apañados - se sonrió Ginny.

- Vale, nosotros muy apañados, pero ¿Y tu? - pregunto Luna a su amiga.

- Eh... yo... esto... - decía Ginny, intentando salir del paso.

- Yo creo que se con quien va - dijo Hermione. Cosa que sorprendió a todos en la mesa, sobre todo a Harry y Ginny que se miraron con temor.

- Ahhh, si ¿Y con quien va? - pregunto Ron con ardua curiosidad.

- Pues, con quien va a ser, con... - se cayo para ver la cara de Ginny y crear un poco de emoción en el momento - Harry.

- ¡¡¡Que!!! - salto Ron - ¿No será verdad? - pregunto Ron a su hermana con sorpresa. Ginny bajo la mirada y permaneció en silencio.

- Venga chicos admítanlo - dijo Hermione - Todas las pruebas les señalas.

- ¿Cuáles pruebas? - inquirió Harry.

- Primero, esta el echo de que pasan mucho tiempo juntos - puntualizo Hermione.

- ¿Y que? Somos amigos - dijo Ginny volviendo a levantar la cabeza.

- Segundo, los dos tienen pareja y no nos lo quieren decir - continuo Hermione sin hacer caso de lo que le decía su amiga. Ron miraba atento la situación mientras pasaba su mirada de Hermione a Ginny y de Ginny a Harry. Lo mismo hacían Neville y Luna que observaban la situación con interés.

- Eso no... - intento decir Harry.

- Tercero - corto Hermione a Harry - He observado como se miran cuando creen que nadie les tiene en cuenta.

- Eso no... - volvió a intentar explicarse Harry.

- Cuarto y ultimo punto - dijo Hermione ignorando por completo a su amigo - Llegan un mes y pico actuando muy raro, sin tener en cuenta de que desaparecen siempre al mismo tiempo.

- Ahora que lo dices, tiene sentido - razono Ron.

- Venga confiesen, les hemos pillado - dijo Hermione esbozando una sonrisa. Hermione, Ron, Neville y Luna los miraban con intensa curiosidad. Harry miro a Ginny con gesto interrogativo, cuando sus miradas se encontraron supieron que era inevitable negarlo.

- Si - dijo Harry alzándose de hombros.

- ¿Y? - dijo Ron.

- Pues que si vamos juntos al baile - confirmo Harry.

- ¿Desde cuando están juntos? - pregunto Ron empezando a enfadarse.

- Pues desde principios de Noviembre más o menos - dijo Harry temeroso de la reacción de su amigo al enterarse, de que estaba saliendo con su hermana pequeña.

- ¡¡Y no les da vergüenza habérnoslo contado!! - dijo Ron.

- Pues... no sabíamos como contarlo - se intento explicar Ginny agarrando de la mano a Harry.

- Bueno... - dijo Ron levantándose de golpe, haciendo que Harry se echase hacia atrás en la silla - ¡¡¡ENHORABUENA!!! - grito Ron abrazando a Harry y a Ginny a la vez. Sorprendiendo a toda la mesa y a algunas mesas que estaban cerca.

- Eh... gracias - alcanzo a decir Harry.

- ¿No te molesta? - pregunto Ginny sorprendida por la reacción de su hermano.

- Noooo, ¿Por qué iba a molestarme? - dijo Ron sin entender a que se refería su hermana pequeña.

- Pues por que Harry sea mi novio - dijo Ginny poniéndose colorada - A mis anteriores novios no los podías ni ver - dijo Ginny.

- Pero... Harry es... Harry - dijo simplemente el pelirrojo.

- Enhorabuena - dijo Hermione sonriendo. Neville y Luna imitaron el gesto de la chica y felicitaron a la pareja.

- ¿Pero bueno es que no nos van a contar como paso? - pregunto Ron al parecer muy divertido por la situación.

- NO - dijeron los dos a la vez, muy colorados.

- Vale, vale no hace falta que se pongan así - dijo Ron poniendo las manos como defensa.

El resto del día lo pasaron conversando animadamente, sobre el baile y con frecuentes intentos de sonsacar a Harry y Ginny sobre su relación. Al acercarse el anochecer el grupo de amigos decidió volver a Hogwarts, ya que el hambre empezaba ha hacer mella en ellos.

El amanecer llegaba a los terrenos de Hogwarts, la mayoría de sus habitantes todavía dormían confortablemente en sus cómodas camas. Sin embargo un grupo de profesores ya estaban comenzando con los preparativos de la fiesta que se llevaría a cabo esa misma noche. Al mando de estos se encontraba el mas grande de todos los Magos, Albus Dumbledore, se divertía como un niño pequeño con zapatos nuevos. No paraba de aconsejar a los demás lo que tenían que hacer para que todo fuese perfecto y divertido, el que más sentía este cambio era el Profesor de Pociones, el cual parecía más infeliz que de costumbre.

Al mismo tiempo que esto sucedía entre los maestros de la escuela, en las habitaciones de los alumnos. Estos empezaban a despertarse dispuestos a pasarlo en grande antes de volver a casa para sus vacaciones de navidad, entre ellos se encontraba Harry Potter. Aunque pareciese mentira nuestro joven amigo tenía más responsabilidades que el resto de sus compañeros, porque gracias a su habilidad en Defensa Contra las Artes Oscuras y al un poco loco Director (pero genial), tambien era Profesor en Hogwarts. Harry tambien empezaba a despertarse, a la vez que su mejor amigo Ron Weasley.

- AHHHHH, Buenos dias Harry - dijo Ron tras bostezar y estirarse en la cama.

- Buenos dias Ron - contesto Harry.

- Ya tengo ganas de que llegue la noche - dijo Ron con una gran sonrisa en la cara.

- Tu lo que tienes ganas es de bailar con Hermione - dijo Harry picaramente.

- Pues claro - dijo Ron sin darse cuenta de lo que había dicho.

- Ya sabia yo - confirmo Harry.

- Eh... yo - intento rectificar Ron sin conseguir nada.

- Tranquilo Ron que yo tambien tengo muchas ganas de que llegue esta noche - afirmo Harry.

- Claro para bailar con mi hermana - dijo Ron.

- Pues no, ya sabes que yo no bailo - dijo Harry de forma tozuda - Yo tenia otra cosa en mente - dijo Harry sonriéndose.

- EH, EH, EH, a ver lo que vas hacer con mi hermanita pequeña - dijo Ron poniéndose de pies sobre la cama.

- Yo, nada - dijo Harry poniendo las manos en posición defensiva - Que ella no quiera - dijo Harry en un susurro que Ron no alcanzo a escuchar.

- Te lo advierto Potter, será mejor que no hagas sufrir a mi hermana - dijo Ron en tono bromista pero a la vez sonando algo serio.

- Ya lo se - confirmo Harry.

Por la mañana pasaron un buen rato jugando al Quidditch, mientras Harry, Ron y Ginny se divertían en los aires. Hermione, Neville y Luna conversaban animadamente en las gradas. Para los tres que se encontraban en las alturas el tiempo pasaba tan rápidamente que cuando Hermione les llamo para ir a comer, no pudieron dar crédito a que ya era la hora.

Tras la comida los chicos se quedaron en la sala común para descansar un poco del ajetreo matutino, y así poder echar una buena partida de Ajedrez Mágico, el juego favorito de Ron (aparte del Quidditch) por que siempre ganaba. La chicas conversaban mientras Ron iba ganado partida tras partida, después de ganar a la mitad de la sala común decidió retirarse ante la falta de competitividad de sus adversarios. Ya mediada la tarde las chicas empezaron a ir desapareciendo de escena, sobre todo debido a que ellas necesitaban más tiempo para prepararse. Harry decidió ir al despacho para terminar de calificar algunos trabajos que le quedaban, cuando termino de corregir los trabajos ya eran las 6:30 de la tarde y quedaba una hora y media para que diese comienzo el baile. Se dirigió a su habitación para poder cambiarse y arreglarse lo más que pudiese para Ginny. Una vez llego a la sala común de Gryffindor muchos de los chicos ya se habían marchado a prepararse, llamo a Ron y ambos subieron a la habitación. Harry saco su nueva túnica de gala, era color azul marino y tenia bordados en color oro y carmesí en las mangas y cuello. Al remover el baúl en busca de los zapatos a juego que había comprado algo cayó al suelo.

- Caray - dijo Harry sorprendido de la carta que acababa de caer.

- ¿Qué es eso? - pregunto Ron.

- Es la carta que Sirius me dejo en su testamento - respondió Harry incomodo por haberse olvidado de la carta - Como me he podido olvidar de esto - se recrimino Harry.

- Guárdala, ahora no es el momento ni el lugar para leerla - dijo Ron mirando disimuladamente a sus compañeros de cuarto.

- Tienes razón - asintió Harry, guardo la carta dentro del libro "Misterios de la Magia Antigua". De esta manera nadie excepto el tendría acceso a dicha carta, y de paso no se le volvería a olvidar.

Faltaba media hora escasa cuando los chicos ya estaban esperando a sus acompañantes en la sala común, el nerviosismo se dejaba ver en la gran mayoría de las caras allí presentes. Harry se encontraba muy tranquilo esperando a Ginny, sin embargo Ron era el reverso de la misma moneda, estaba tan nervioso que no podía para de moverse. Poco tiempo después apareció por la escalera una joven esbelta con cabello castaño ondeando tras de si, Ron se quedo boquiabierto al igual que gran parte de la sala. Hermione llevaba una túnica de gala azul celeste, con unos pequeños pendientes y colgante a juegos. Haciendo que su rostro se iluminase gracias al ligero maquillaje que se había puesto, su peso estaba alisado y suelto tras de ella.

- Bueno ya estoy aquí - dijo Hermione - ¿Cómo me veo? - le pregunto a Ron que la miraba con cara de embobado, Harry tubo que darle un codazo para que despertara de su trance.

- OH, Ah, increíble - dijo Ron sin encontrar las palabras adecuadas - Esto, estas preciosa - dijo al fin haciendo que la chica se sonrojase.

- Estas muy guapa Hermione - dijo Harry.

- Gracias - respondió Hermione ante los comentarios de los chicos.

Unos minutos mas tarde mientras Ron seguía recreándose en la visión de Hermione, cuando Ginny izo su aparición en la sala común. Llevaba una túnica de gala color verde claro, acompañada de una diadema de plata con incrustaciones de esmeralda. A juego con la diadema llevaba los pendientes y un colgante, el pelo suelto tras la diadema. Harry la recibió al pie de la escalera con una enorme sonrisa en el rostro, Ron se quedo asombrado mirando a su hermanita.

- Estas preciosa - dijo Harry dándole un suave beso en la mejilla.

- Gracias - asintió Ginny devolviéndole a Harry el beso, pero en vez de dárselo en la mejilla fue directa a los labios.

La sala común quedo asombrada ante esta demostración de la "nueva" pareja, ya que todos creían que ellos solo iban como amigos. Harry, Ginny, Hermione, Ron y Neville se fueron de la sala común hasta el gran comedor donde Luna estaba esperando ha Neville.

El gran comedor estaba dispuesto en mesas de seis personas, los muchachos eligieron una de las mesas del lado derecho del salón. En el centro del salón estaba situada una pista de baile, Harry miro hacia la pista con pánico. Todavía recordaba el agónico baile de cuarto curso junto a Parvati Patíl, ah Harry se la había olvidado por completo el tema del baile.

- ¡¡¡OH, no!!! - exclamo Harry mirando hacia la pista.

- ¿Qué sucede cariño? - dijo Ginny.

- Se me había olvidado que hay que bailar - dijo Harry apesadumbrado.

- Ja ja ja ja - se rió Ginny discretamente - No, te preocupes yo te enseño - le dijo Ginny en un susurro.

- Gracias - le susurro el al oído.

Cada uno escogió el plato que mas le apetecía para cenar, mientras cenaban una música suave les acompañaba en el ambiente. El alboroto de cientos de conversaciones diferente se extendía por el gran comedor, en la mesa de Harry y compañía la conversación giraba en torno a lo genial que seria el mundo mágico sin la interferencia de El-Que-No-Debe-Ser-Nombrado. Tras la larga y agradable cena, todos los comensales estaban saciados. Llego el momento menos deseado por los chicos de la mesa, la hora de bailar. Ron y Hermione tenían una pequeña discusión en la que Ron insistía en que el no bailaba, y en la que Hermione le decía que si lo iba a hacer.

- Vamos Harry - dijo Ginny agarrando la mano del muchacho que mostraba cara de no muy convencido.

- Vale, pero... - no termino de decir cuando ya se encontraban en la pista. Ginny agarro la mano de Harry y se la puso en su cintura, luego coloco la suya en el hombro de Harry. Agarro la mano libre de Harry y empezó a bailar suavemente indicándole a Harry lo que tenia que hacer. Harry noto una sensación muy diferente a la que había sentido dos años antes en esa misma situación, esta vez no le desagradaba bailar incluso se encontraba muy a gusto agarrando a la pelirroja. Dejo la tensión de un primer momento a un lado y comenzó a dejarse llevar por la agradable música que sonaba.

- Eso es Harry - dijo Ginny en un susurro sobre su oído - Déjate llevar por la música.

- Me dejo llevar por ti - dijo Harry de forma melosa.

Tras largo rato bailando Harry decidió dar un vistazo alrededor suyo para contemplar al resto de las parejas, hasta ese momento no se había dado cuenta de la cantidad de parejas que tenían alrededor. El había estado en su propio mundo donde solo importaban él y Ginny, con un rápido vistazo pudo alcanzar a ver a sus dos mejores amigos muy acaramelados bailando el uno apoyado en el otro. También pudo observar a Neville bailar con Luna, ambos parecían un poco torpes pero se lo estaban pasando en grande ya que no paraban de reír.

Al cabo de varias horas de música, el salón empezó a vaciarse. Generalmente eran parejas que se perdían por los pasillos del castillo, por esa noche los profesores decidieron no molestar a los alumnos y que disfrutasen. Harry seguía bailando muy cerca y bien agarrado a su compañera, no le importaba la música que sonaba en ese momento. Lo mágico estaba en estar con ella, no en bailar. Cuando volvió a levantar la vista para mirar a su alrededor se pudo fijar en que ya muy poca gente estaba en la pista, intento localizar a sus amigos, pero le fue imposible Ron y Hermione habían desaparecido.

- Ron y Hermione no están - le dijo Harry a Ginny, esta rió por lo bajo.

- Lo se les vi marcharse agarrados de la mano hace como una hora - se rió Ginny - Y no creo que fuesen hacia la sala común - dijo la pelirroja divertida.

- Por fin se han decidido - dijo Harry contento.

- Ummm, Harry - dijo Ginny mirando a sus ojos esmeralda - ¿Qué tal si les imitamos? - pregunto la pelirroja sonrojada.

- Seria estupendo - respondió Harry - ¿A dónde quieres ir? - pregunto Harry meloso.

- Pues yo estaba pensando en cierta habitación - dijo Ginny haciéndose la distraída.

- Bien - dijo Harry dejando de bailar y agarrando la mano de Ginny para dirigirse rápidamente hacia la habitación del Profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. Tardaron muy poco en llegar hasta la entrada, a continuación pasaron al interior.

Nada mas entrar al interior Harry jalo a Ginny hacia si para darle un calido beso en los labios, Ginny le correspondió plenamente mientras se acercaban al sillón que se encontraba en frente de la chimenea. Se dejaron caer al sillón sin interrumpir el ahora apasionado beso, Harry se encontraba sentado en el sillón mientras Ginny estaba sentada sobre su regazo. Media hora más tarde se detuvieron, y se miraron a los ojos.

- Harry, creo que deberíamos irnos a dormir - dijo Ginny en tono meloso.

- Quizás tengas razón - dijo Harry - Pero es que estoy también así.

- Yo también estoy bien así - dijo Ginny - Pero tenemos que dormir, yo tengo mucho sueño - dijo la pelirroja frotándose los ojos.

- Esta bien, vamos - dijo Harry desesperanzado.

- No - dijo Ginny deteniendo a Harry que se dirigía a la salida.

- Yo quiero dormir aquí - dijo Ginny mirando a Harry muy sonrojada - Contigo.

- Pero... - Harry no salía de su asombro, Ginny quería que pasasen la noche juntos. Estaba empezando a ponerse muy, muy nervioso, la situación le estaba empezando a asustar y eso se reflejaba en la cara.

- Tranquilo Harry tan solo dormir - dijo la chica con una sonrisa, interpretando el pánico de la cara de su chico.

- Esta bien - dijo Harry esbozando una grata sonrisa ante la idea de dormir con la persona más especial para el del mundo entero.

Harry se acerco a Ginny y agarrándola se dirigieron hasta la habitación, se quitaron las túnicas y los zapatos. Se acostaron en la cama, se abrazaron y estuvieron un rato besándose y acariciándose antes de caer profundamente dormidos.

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Hola de nuevo, espero que les gustase el capitulo. Me costo mucho escribirlo, las descripciones de ropa no es lo mio . Pero por fin lo termine, creo que no me quedo mal del todo.

Saludos a todos los amigos que me dejan Reviews, gracias. Espero que en unos pocos días suba el siguiente capitulo.