CAPITULO XV: SORPRESAS DE ENERO

Las vacaciones de Navidad llegaron a su fin antes de lo que esperaban, el tiempo había pasado como un suspiro en el viento. Todos se encontraban ya en el vagón del Expreso a Hogwarts, conversaban sobre el esfuerzo que habían tenido que hacer para clasificar los papeles de Harry. Era increíble todas las posesiones que ahora tenia, Hermione estaba de los nervios con tanto papeleo. Harry nunca se imagino que Hermione llegase a ofuscarse con algo, pero sin duda todos los papeles legales eran buena manera de desquiciarle a alguien los nervios.

- Harry, yo creo que deberías contratar a un abogado o algo por el estilo - dijo Hermione revisando una pequeña lista que habían confeccionado.

- Si creo que será lo mejor, hay tantas cosas que no se que hacer con todo eso - reflexiono Harry - Yo no necesito nada de eso - dijo encogiéndose de hombros.

- No te preocupes Harry - dijo Ginny - Cuando salgas de Hogwarts ya decidirás lo que haces, ¿Además no me dirás que no te apetece vivir por tu cuenta y solo? - pregunto Ginny con voz picarona.

- Por mi cuenta si, pero no solo - respondió Harry mirando a Ginny con una sonrisa.

- Oye si te sobra alguna casa, a mi no me importa si me regalas una - dijo Ron de broma.

- ¿Qué quieres que te regale, una mansión o un castillo? - dijo Harry de forma jocosa.

- Uff, si que me lo pones difícil - pensó Ron - ¿No tendrás alguna fortaleza, no?

- Espera a ver - respondió Harry sacando un libro imaginario, y haciendo como si pasase hojas - Ummm, no. Creo que no me quedan, la última se la regale a Hermione. Pero podéis compartirla, total que mas os da lo acabareis haciendo - dijo Harry riéndose. Lo que provoco que Hermione se sonrojase y Ron le mirase con cara asesina.

- Muy gracioso - dijo Ron sarcásticamente.

- Eh que no es para ponerse así - se defendió Harry.

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Ya en Hogwarts todo volvió a la rutina, las clases, los entrenamientos, las tareas, etc. El mes de Enero extinguía sus últimas bocanadas de vida, cuando durante el desayuno el correo les llevo una sorprendente noticia.

CORNELIUS FUDGE DIMITE

Cornelius Fudge, presento ayer su dimisión como ministro de magia ante el Winzegamont, el consejo de magos acepto su dimisión.

Por otra parte Fudge, quiso nombrar un nuevo candidato. Ante la sorpresa de la gran mayoría del Winzegamont, propuso como candidato a Albus Dumbledore, el Director del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, Caballero de 1ª de la Orden de Merlín, Gran Hechicero del Winzegamont y Supremo Hechicero de la Unión Intencional de Magos. Anteriormente Fudge declaro que Dumbledore, chocheaba y que pretendía desestabilizar su puesto para así conseguir ser el ministro de Magia. Sin embargo esto solo fue una treta de Fudge, que no deseaba admitir el echo de que el Señor Tenebroso habia regresado. Tras la dimisión de Fudge y la nominación de Dumbledore, este se pronuncio diciendo "No me interesa el puesto de Ministro, estoy feliz como Director de Hogwarts", tras esta declaración a propuesto a Arthur Weasley, funcionario del Ministerio desde hace más de 40 años. Actualmente Weasly dirige el Departamento Contra el Uso Incorrecto de Objetos Muggles, Arthur Weasley promovió hace unos años la ley de protección de los Muggles. Lamentablemente Arthur Weasley ha declinado la invitación de este periódico para una entrevista...

- Woow - alcanzo a decir Ron.

- Si, woow - dijo Harry con una sonrisa.

- Imagínatelo Ron, si tu padre fuese Ministro de Magia - dijo Hermione - Nada de Mortífagos en el Ministerio.

- Es increíble - dijo Ginny - Pero no creo que nuestro padre se presente para el puesto, ha el jamás le ha interesado ascender. Le gusta más su trabajo actual que cualquier otro - reflexiono la pelirroja.

- Mira Ron - dijo Hermione señalando a una lechuza que volaba con dificultad - No es Errol.

- Si - dijo Ron bajando la cabeza. La lechuza fue a estrellarse contra el tazón de Harry, este la rescato antes de que se ahogase en el cacao que tenia.

- Mira trae una carta para vosotros - dijo Harry desatando la carta y dándosela a Ron y Ginny.

Queridos Ron y Ginny:

Como supongo que ya os habréis enterado puesto que Hermione recibe el profeta, el Ministro de Magia Cornelius Fudge ha dimitido. Tras su dimisión, Fudge propuso a Dumbledore para el puesto, pero como a Dumbledore no le interesa en absoluto el puesto ha propuesto a vuestro padre. El no queria que lo propusiera pero Dumbledore le ha convencido de que seria lo mejor que le podría pasar al mundo mágico, y por descontado tambien para los intereses de ya-saben-ustedes-que. Como vuestro padre es abierto y realista aunque un poco loco a veces, ha decidido aceptar la proposición de Dumbledore.

Bueno solo queria deciros que a nosotros tambien nos ha pillado por sorpresa, vuestro padre no cree que le escojan pero aun así va a seguir adelante con el asunto y se va a presentar oficialmente para el puesto. Mañana por la mañana tiene la entrevista con el Alto Consejo de Magos, ya os contare que ha pasado.

Con cariño,

Vuestra madre.

- Jamás creí que esto llegase a suceder - dijo Ron anonadado tras leer la carta de su madre.

- Si yo también creí que esto era la posibilidad más remota que existía - confirmo Ginny.

- Es estupendo - dijo Harry con una increíble sonrisa.

- ¿Qué te parece tan gracioso? - pregunto Hermione.

- Me estaba imaginando la cara de Malfoy cuando se entere - dijo Harry antes de comenzar a reír a carcajadas.

- Seria estupendo ver ahora su cara - confirmo Ron uniéndose a su amigo.

- Lo que tengo miedo es de cómo va a llevar esto adelante mi padre - dijo Ginny - El es muy descuidado y algo despistado - reflexiono Ginny.

- Puede ser que sea algo despistado, pero es un buen hombre y justo - expuso Harry - Estoy seguro de que será un gran Ministro de Magia, por ese motivo creo que Dumbledore le propuso.

- Harry tiene mucha razón - dijo Hermione.

La noticia de la dimisión del Ministro de Magia y la posterior nominación del padre de Ron y Ginny, se extendió por la escuela como la pólvora. Cuando iban por los pasillos mucha gente se giraba para felicitarles, algunas chicas miraban y sonreían a Ron. Algunas incluso le daban notas y le susurraban cosas al oído, esto provoco el consabido enfurecimiento de Hermione que las miraba con cara asesina.

Al día siguiente de la noticia, "El Profeta" informo que la elección del nuevo Ministro de Magia se llevaría a cabo a mediados de la siguiente semana.

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Harry volvía a encontrarse en la cámara oscura y subterránea, como en la anterior ocasión Harry se acercaba lentamente hasta la pared situada al fondo de la estancia. En la pared podía distinguir los escudos de Gryffindor, Ravenclaw y Hufflepuff, colocados formando un triangulo. En el centro veía el escudo que debía de ser el Sello que los Fundadores de Hogwarts crearon para proteger la escuela, cada vez se encontraba mas cerca, hasta llegar a situarse a escasos dos pasos de los escudos. Temeroso de lo que pudiese suceder, aunque irremediablemente impulsado por su curiosidad. Extendió su mano hasta llegar a tocar el sello central, instantáneamente al momento de hacer contacto con la superficie del sello un gran resplandor inundo la estancia.

Harry se despertó sudoroso y fatigado, como si hubiese estado corriendo una maratón. Le costo reconocer el lugar en el que se encontraba, cuando se situó tomo sus gafas de la mesita de noche. Mirando la hora en el reloj de su padre supo que estaba a punto de amanecer, así que decidió vestirse y bajar a la sala común. Allí estuvo esperando hasta que fue la hora apropiada para ir a desayunar, en el gran comedor se encontraba prácticamente solo.

- Buenos dias, Harry - dijo una voz a su espalda, Harry se giro para ver quien le saludaba y para devolverle el saludo.

- Buenos dias, Profesor - respondió Harry a Dumbledore.

- ¿No has dormido bien? - pregunto Dumbledore mirando la cara de somnolencia que portaba Harry.

- La verdad es que no mucho - respondió Harry - He vuelto a tener ese sueño sobre la cámara en la que se encuentra el sello - expuso Harry, esperando cualquier reacción por parte de Dumbledore.

- Me esperaba algo así - confirmo Dumbledore, poniendo cara de circunstancias.

- ¿Ya se lo esperaba? - pregunto Harry atonito.

- Si, creo que deberías venir a mi despacho para hablar calmadamente sobre este asunto - dijo Dumbledore - Si quieres pueden venir su amigos - concluyo Dumbledore antes de marcharse, dejando a Harry muy sorprendido.

Harry espero a los demás en el comedor, cuando todos llegaron les contó todo lo sucedido. Decidieron ir después de las clases a ver al Director, tenían mucha curiosidad por conocer lo que esté tenia que hablar con ellos.

Tras las clases se dirigieron hasta el despacho del anciano Director, en el camino hacia su destino se encontraron con el Profesor Snape que los miro con gesto amenazante. Una vez frente a la gárgola pronunciaron la contraseña y pasaron por el orificio dejando por está, llamaron a la puerta que conducía al despacho del Director.

- Adelante - dijo una voz conocida pero que no era la del Director. Los cuatro jóvenes entraron para encontrarse frente a frente con Arthur Weasley, lo que izo que Ron y Ginny corriesen para abrazar a su progenitor.

- ¿Qué haces aquí papa? - pregunto Ginny.

- Tenia que hablar con Dumbledore sobre mi candidatura a Ministro - explico el Sr. Weasley.

- Enhorabuena por la nominación - dijo Harry.

- Gracias, pero la verdad es que a mi no me interesa el puesto de Ministro, pero se han puesto todos tan pesados que no he tenido otro remedio que claudicar - dijo el Sr. Weasley.

- Aun así yo creo que es algo estupendo - dijo Hermione.

- Si, yo estoy seguro que el miércoles serás el nuevo Ministro de Magia - afirmo Ron.

- No estoy muy seguro los otros candidatos son grandes magos y mas importantes - dijo Arthur.

- Pero de seguro no son tan honrados como usted - dijo Hermione.

- De seguro - apoyo Harry a Hermione.

- Veo que ya han visto a nuestro invitado - dijo la voz de Dumbledore a espaldas de los muchachos.

- Hola Profesor Dumbledore - saludaron los chicos a la vez, mientras el Director se dirigía hasta su silla.

- ¿Muchachos, se preguntaran por que queria hablar con ustedes? - dijo el Director.

- La verdad es que si - dijo Harry.

- Bien, como ya te dije esta mañana, tenia el presentimiento de que algo así podía suceder - dijo Dumbledore sin rodeos - Oh pero por favor sentaros - dijo mientras con un ligero giro varita hacia aparecer cinco cómodas sillas.

- ¿Y que tiene ahora de especial, ya me sucedió antes? - cuestiono Harry.

- Ahora las resonancias de la Magia del colegio son más fuertes - explico Dumbledore - Yo tambien las he sentido, no tan fuerte como tu claro esta.

- ¿Qué podemos hacer nosotros? - pregunto Hermione.

- Bien a eso iba - dijo Dumbledore - Yo no dispongo de tiempo para revisar todos los documentos y manuscritos de los anteriores directores, por eso dado que vosotros ya habéis llevado a cabo muchas investigaciones...

- ¿No querrá decir que nos va a dar acceso a esos documentos? - pregunto Hermione con chispas de alegría en los ojos.

- Pues, si - respondió Dumbledore a la vez que los ojos de Hermione se abrían de par en par - Eso era lo que les queria proponer, que ustedes llevasen acabo dicha investigación.

- ¿Profesor, no se supone que esos documentos y papeles son tan importantes que solo el Director de Hogwarts tiene acceso a ellos? - pregunto Ginny.

- Así es - respondió Dumbledore con una sonrisa - Por eso esta aquí tu padre, para dar fe de que yo os autorizo personalmente a revisar los documentos y manuscritos. Como candidato a Ministro tiene facultad de dar testimonio, y como además va a ser Ministro de Magia - concluyo Dumbledore con una sonrisa.

- Yo no se si podré ayudar mucho - dijo Harry que había permanecido callado hasta el momento - Tengo mucho trabajo con las tareas de EXTASIS, organizando las clases, los entrenamientos de Quidditch y estudiando Magia Antigua - reflexiono el joven enumerando todos sus quehaceres, dejando caer sus hombros en gesto de derrota.

- No te preocupes nosotros tres nos ocupamos - aseguro Ron, provocando que Ginny y Hermione le mirasen extrañadas.

- Esta bien, así quizás averigüemos donde esta la Cámara de los Fundadores y solucionamos lo de los sueños - dijo Harry.

Dumbledore les llevo hasta los Archivos de Hogwarts, la entrada estaba oculta tras un cuadro de un campo de batalla en el que los guerreros medievales se perseguían de un lado para el otro. Dumbledore formulo una contraseña y realizo un pequeño hechizo sobre los jóvenes para permitirles acceder al Archivo, cuando entraron se encontraron con una habitación cubierta de estanterías llenas de libros. "Esto será el paraíso para Hermione" pensó Harry, se giro para ver a su amiga y descubrió que por la cara de está no estaba muy desencaminado.

- Bueno muchachos - dijo Dumbledore tomando asiento en una de las sillas que rodeaban la única mesa de la estancia - Los Archivos de Hogwarts datan de la época de los Fundadores y los sucesivos directores han ido haciendo sus aportaciones, tal vez sea la biblioteca mejor surtida de todo el mundo. Aunque muy pocas personas conocen su existencia y muchas menos tienes acceso a ella. Deberían estar orgullosos de estar en el interior del Archivos de Hogwarts, aunque supongo que la Señorita Granger ya lo esta - dijo Dumbledore mirando a Hermione que esta muy alterada por la presencia de tantos libros.

- En eso tiene razón, esta como en el paraíso - le comento Harry a Ron en voz baja.

- Tienes toda la razón - dijo Ron sonriendo abiertamente.

- ¿He chicos que murmuran? - pregunto Ginny.

- ¿Nosotros? Nada - dijo Harry excusándose.

- Bueno, esos libros de ahí - dijo Dumbledore señalando un estante - Son índices sobre los libros del Archivo de Hogwarts, yo empezaría a buscar por ahí - sonrió abiertamente.

- OH... gracias - dijo Hermione abalanzándose hacia la estantería.

Esa misma tarde comenzaron a investigar sobre la Cámara de los Fundadores, pasaron varias horas consultando los índices y creando una pauta de investigación. Según avanzaba la tarde fueron descubriendo más y más pasillos, el Archivo de Hogwarts parecía no tener fin.

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- Buenos días chicos - saludo Hermione sentándose en la mesa de Gryffindor - Hoy es el gran día, sabremos si vuestro padre es elegido Ministro de Magia.

- Buenos días Hermione - devolvieron el saludo los demás.

- Yo estoy algo nervioso - dijo Ron.

- Yo no, estoy segura de que saldrá elegido - afirmo Ginny.

- Así se piensa preciosa - dijo Harry acercándose a Ginny.

- ¿Es que siempre tienen que estar igual? - pregunto Ron.

- Lo siento, es que no puedo evitarlo - respondió Harry - A ti te pasara lo mismo cuando tengas novia - afirmo Harry mirando a Hermione, la cual tomo un leve color escarlata al igual que Ron.

- Eh... a... esto... - intentaba decir Ron.

- Ya, ya estas en ello - dijo Harry levantando los hombros. En ese momento entraban las lechuzas matutinas con el correo, una lechuza parda se dirigió hasta Hermione para entregarle el periódico. Al mismo tiempo que Pig llevaba una carta hasta su dueño, Ron tubo que hacer tremendos esfuerzos para atrapar a la rebelde lechuza.

- ¿Por qué me mandara mama una carta ahora? Si todavía no ha sido la elección y le envié a Pig para que nos informase de lo que sucedió en el Ministerio - cuestiono Ron en voz alta.

- El otro día yo tuve la misma idea, le pedí a Harry a Hedwig para que mama nos contase - explico Ginny - Si lees la carta igual nos explica - Ron saco la carta del sobre y la leyó detenidamente.

- Bueno ¿Qué dice? - pregunto Harry curioso.

- Dice que iban estar toda la mañana en el consejo para elegir al nuevo Ministro de Magia y que como tenia a Pig y a Hedwig para contarnos lo que pasa. Envió a Pig y se quedo con Hedwig que es mas formal - contó Ron - Esta maldita lechuza no sabe comportarse - dijo Ron mirando a la pequeña lechuza que forcejeaba alegre en su mano.

- Ron, ella solo esta feliz de hacer lo que le mandan - recrimino Hermione la actitud de Ron.

- Ya, ya pero es que esta loca - inquirió Ron.

- Se acerca tormenta, ¿Nos vamos? - dijo Harry al oído de Ginny.

- Será lo mejor - respondió Ginny. Dicho esto salieron del comedor con destino a sus respectivas clases.

La mañana paso lentamente, los chicos tenían sus mentes situadas a cientos de kilómetros. En concreto en la sala en la que se celebraba el consejo, Dumbledore estaba allí y apoyaría la candidatura del padre de los pelirrojos. Las clases dieron paso a la hora de la comida, todo el comedor estaba impaciente esperando noticias sobre la decisión del consejo.

- Ya no aguanto mas - dijo Ron desesperándose - Acaso es tan difícil decidirse por uno - dijo agarrando el articulo donde estaban los tres candidatos.

- Ron tienen que exponer sus puntos de vista y después discutirlos - explico Hermione - Y después de eso el Wizengamot vota para ver quien será el próximo Ministro de Magia.

- Eso ya lo se - replico Ron - Pero se tardan demasiado - se quejo mirando hacia el hueco por el que llegaban habitualmente las lechuzas.

- Solo tranquilízate un poco - pidió Harry - Me estas poniendo nervioso a mi, ¿Por cierto como va la investigación?

- Va - dijo Hermione - De momento no hemos encontrado nada sobre la localización de la Cámara, sin embargo hemos encontrado algunos datos sobre los hechizos que pudieron utilizar.

- ¿Y eso nos servirá de algo? - pregunto Harry.

- Espero que si, descubriendo el hechizo que utilizaron para proteger el castillo, tal vez podríamos modificarlo para que tu lo utilizases - expuso Hermione.

- Es buena idea, de esa forma el castillo permanecerá fuera del alcance de Voldemort durante unos cuantos años más - dijo Ginny.

- En vuestra teoría solo hay un pequeño fallo - dijo Harry.

- ¿Cuál? - preguntaron las chicas al unísono.

- Los Fundadores debieron utilizar un hechizo de Magia Antigua Avanzada, yo tan solo estoy comenzando con la Magia Antigua Básica - expuso Harry - Además ellos eran tres poderosos magos y yo solo soy un Aprendiz de Mago, creo que hay una leve diferencia - dijo alzándose de hombros.

- Tienes razón en lo que dices, pero te subestimas - dijo Hermione.

- Todos te hemos visto hacer cosas que normalmente están fuera del alcance de magos adultos y poderosos - dijo Ron volviendo a la tierra - Y tu las haces como si tal cosa, o es que siempre hay que estar recordándote todo lo que has hecho.

- No, no ya te entiendo. Pero sigo pensando que es demasiado para un solo mago, poderoso o no - se trato de explicar Harry.

- ¿Quizás podríamos contar con Dumbledore? - cuestiono la pelirroja.

- Puede - dijo Hermione en tono pensativo.

- ¡Eh, miren ahí viene Hedwig! - grito Ron poniéndose en pie. Hedwig voló atravesando el salón ante la mirada atenta de la gran mayoría de los allí presentes, posándose suavemente sobre la mesa frente a Harry y extendiendo la pata para que este lo despojase de la carta.

- Venga Harry léela rápido - lo apremio Ron. Harry leyó rápidamente en voz alta pata que todos escuchasen lo que la carta decía.

Queridos muchachos:

Arthur Weasley ha sido elegido por el Wizengamot como nuevo Ministro de Magia. Ya os contaremos mas adelante.

Con afecto,

Remus Lupin

- Si, si, si - grito Ron dando salto de alegría.

- Enhorabuena - dijeron los chicos que estaban alrededor que habían escuchado a Harry leer la carta.

- Es genial - decía Ginny agarrada firmemente al cuello de su novio.

- Genial - gritaba Ron cuando una chica le abrazo fuertemente, rápidamente dejo de gritar para fijarse en la dueña de la melena enmarañada que lo tenia preso.

- Her...mio...ne - dijo Ron torpemente. Cuando Hermione levanto la cabeza quedándose a escasos centímetros de su cara, se puso roja e intento separarse. Sin embargo Ron la retuvo y como si un imán lo atrajese beso a Hermione en los labios, dejando a los que los rodeaban atónitos.

Digna: No te preocupes ya me había imaginado que se te había colado, por cierto no me digas chica que soy chico. ;-)

Sacralo: Gracias por tus comentarios, pensé que seria bueno que Harry hiciese una pequeña demostración del poder que posee.

Nelly Esp: Menos mal que no esperabas nada específico de la caja, creo que tienes razón en esperar "algo" de la llave y del reloj, pero lamento decirte que para lo de la profecía todavía falta.

Marc: Gracias por tus comentarios.

Bikutoru-KunMe alegra que el fic te guste, cuando se me paso por la cabeza escribirlo estaba leyendo otros fics y yo empeze a imaginar formas distintas de la historia. Mas o menos lo que estoy escribiendo. Lo de las bromas a mi tambien me hace gracia al escribirlo, cuando me imagine la escena en la que Ron dice DE TODA INGLATERRA alzando los brazos me parti de risa.

KIKA: Soy escritor (aficionado, ¡no, ni eso!), se hace lo que se puede. A mi tambien me gustaria que los capitulos fuesen un poquito mas extensos, pero para este fic he preparado un esquema de 5 paginas de Word por capitulo. Tal vez en la continuación los haga mas largos.

Espero que os halla gustado este nuevo capitulo, el proximo capitulo no lo podre poner hasta el viernes mas o menos. Dependiendo de la cantidad de tiempo libre que tenga, por que hoy que es domingo yo estoy trabajando.