Una casa muy cerca de un lago, dentro del bosque, es donde se internan criaturas de la noche.
Un "joven" solitario contemplando la luna y viendose al lago asi mismo, su cara palida, cabello negro intenso y los ojos azules brillantes, con una mirada tan fija hacia su reflejo... sumido en sus pensamientos, acompañado de un amigo.
-Vamos es hora de dormir- dijo un hombre, tomando del hombro derecho al joven.
-Quiero quedarme un rato mas aqui- contestó el joven.
-Pero se hacerca el día, la ultima vez de no ser por mi, estarias ya muerto- Dijo el hombre.
-No volverá a suceder, solo unos minutos mas- insistió.
-De acuerdo, solo unos minutos- dijo, asi mismo llamó al lobo que estaba al junto y entraron a aquella casa vieja.
Mas tarde el joven siguió el mismo camino acompañandolos a la casa, así bajando a aquel sotano, donde hay dos ataudes viejos, el lobo ya dormido al igual que el hombre que lo habia llamado, el joven solo entró a su ataud para dormir por todo el día.
A la noche siguiente para cazar, el joven prefirió ir solo al pueblo con su caballo negro y muy hermoso, y a su lado el lobo.
-No vayas al pueblo Aoshi- dijo el hombre.
-¿Por que no?- contestó- He ido varias veces-
-¡Ve tan solo la luna roja!, Hoy salen los hombres lobos y entre mas inmortales peligrosos- dijo.
-Pues que me tengan miedo, Jajaja!- Riendose a carcajadas -Verdad Loper?- Mirando a su lobo y el lobo asintio con la cabeza diciendo que si, y luego dando un tremendo aullido.
Y así partieron a aquel pueblo, Aoshi montado en el caballo, para verse de lo mas normal, y a su lado con gran velocidad corriendo el lobo, hasta por fin llegar a aquel pueblo que estaba a no mas de 15 kilometros de aquella vieja casa.
