Capítulo 6: Comienzo difícil
"¡Pristelle!" gritó Myami, mientras se acercaba a Hitomi.
Pristelle entendió la orden no dicha por su líder y rápidamente empezó a cantar. Corriendo, Van observó que la mujer que había llamado Myami comenzaba a brillar rodeándose de una aura blanca. Él forzó sus piernas para que se movieran mas rápido mientras el haz de energía acortaba rápidamente la distancia entre el punto de inicio y Hitomi. Tenia que salvarla. Si él perdía a Hitomi ahora después de todo lo que había pasado entre ellos nunca podría vivir con si mismo.
Justo como pasaba con Van, Myami veía todo movimiento en cámara lenta. Myami vio la velocidad con la que el haz de luz viajaba y sabía que ni ella ni el hombre que corría hacia su hermana podrían alcanzar a Hitomi a tiempo. Rezó para que Pristelle pudiese completar el hechizo. Ella empujó su cuerpo hasta sus límites. Sabiendo que no podría ir mas rápido si no revelaba sus alas, Myami hizo la única cosa que podía hacer en ese momento. Llamó por ayuda.
Tardus escuchó el llamado telepático de Myami y dirigiéndose a Ryley y Yil. "Hay problemas".
Los dos hombres cabecearon y el trío comenzó a correr.
Hitomi sabia que debía moverse. También sabía que moverse era imposible. Algo la había congelado en ese punto. Ella estaba de pie aterrorizada mientras el láser como haz se acercaba. Entonces lo vio. Detrás de la luz estaban dos hombres. Ellos debían ser la razón por la cual no podía moverse y estaba apunto de ser golpeada. Hitomi apenas podía ver sus características. La única cosa que se dejaba ver era un pequeño escudo con un dragón torcido.
No sabiendo como ella iba a sobrevivir, Hitomi cerró sus ojos. Usando sus poderes para susurrar a Van, "Aishiteru, Van".
Van casi no escuchó las palabras que Hitomi le había enviado, pero una vez que las había registrado lo sabía ella le estaba diciendo de alguna manera adiós, "¡Hitomi! ¡NOOOOOO!".
El haz de luz estaba a centímetros del cuerpo de Hitomi cuando repentinamente chocó con una pared invisible. La fuerza de los dos poderes lazaron con fuerza a Hitomi hacia atrás. Callo algunos metros lejos, inconsciente por el golpe. Van llegó hasta Hitomi primero y se arrodilló a su lado. Casi temeroso de tocarla, Van la colocó sobre sus rodillas. "¿Hitomi?" Van susurró.
Myami alcanzó a su inconsciente hermana y sacó su espada. Ella había visto registrar algo en los ojos de Hitomi cuando había quedado mirando fijamente en la dirección de origen del haz. Myami dio vuelta para ver el punto que había mirado Hitomi. No la sorprendería que los perpetradores no estuvieran muy lejos de allí. Alcanzó su arma y se concentró. Una barrera psíquica había sido puesta y ella no podría rastrear a los atacantes de Hitomi. Pristelle la había alcanzado y ella le había rápidamente explicado que había llamado al resto del grupo. Entonces Myami había guardado su espada y arrodillado enseguida un temblante Van y de una inconsciente Hitomi.
"¿Cómo esta?" Myami quitó un filamento de cabello.
Van no podía quitar sus ojos del rostro de Hitomi, "No lo se. Ella esta respirando pero no se si algo esta roto".
Myami podía sentir el miedo y la incertidumbre de Van. También pudo sentir el amor irradiando de él. Ese hombre estaba enamorado de su hermana. Eso tocó a Myami y se apresuró a tranquilizar al joven hombre, "soy Myami, esta joven es mi hermana". Myami indicó a Pristelle se acercara, "Ellas es Pristelle. Ella es experta en magia blanca. ¿Quizás deba atender a Hitomi?"
"Se quien eres". Van levantó la vista lentamente hacia la hermana de Hitomi. "Hitomi y yo somos amigos. Mi nombre es Van". Entonces se dirigió a Pristelle, "Por favor ayúdala en lo que puedas".
"Ah, ahora se por que me parecías familiar. Tu eres el Rey de Fanelia". Pristelle se arrodilló a un lado de Myami y colocó sus manos levemente sobre su figura. "Su majestad, solo siga sosteniéndola y yo veré si al algo que necesite reparar".
Myami sonrió, "Por lo que veo, mi hermana hizo amigos en altas posiciones."
Justo en ese momento Tardus, Yil y Ryley aparecieron, espadas en mano.
"Myami" Tardus se paró enseguida de su amiga. "¿Qué esta sucediendo?"
Ryley ya había guardado su espada y viendo que Pristelle estaba ocupada, se paró detrás de ella. Yil había visto que la conmoción había pasado y pero aun tenia que cerciorarse de que el área fuera segura. Tardus pudo ver que comenzaban aparecer una muchedumbre y llamó a Myami. "¿Mya-chan?"
"Alguien le disparó un haz de energía a Hitomi. Afortunadamente, Pristelle pudo usar un hechizo protector para desviarlo. Estamos aquí por que el escudo no se manifestó por completo y las energías chocaron lanzado a Hitomi dejándola inconsciente". Myami rápidamente explicó.
"¿Ella esta bien?" Tardus miró hacia la joven mujer que se parecía mucho a Myami.
Myami se dio vuelta hacia Pristelle, "Pristelle sigue haciendo lo suyo".
El grupo siguió en silencio mientras Pristelle comenzaba el proceso de curar a Hitomi. No habían pasado unos minutos cuando Pristelle lentamente quitó sus manos. "Ella va a estar bien".
Ante las palabras de Pristelle, un respiro que le grupo no sabía que habían estado sosteniendo, se soltó.
"¿Qué sucedió?" Van preguntó mientras que colocó a Hitomi mas cerca de él.
Pristelle indicó para que cada uno se pusiera de pie. Una vez que todos se habían levantado y Van hubiera acomodado a Hitomi confortablemente en sus brazos, Pristelle explicó. "El choque de las dos energías circulo brevemente por su propio campo psionic". Todos excepto Myami dieron a Pristelle una mirada sin expresión. Pristelle suspiró, "En otras palabras además de unos moretones y músculos adoloridos, ella va a estar bien".
"Ahora creo que sería prudente llevarla a un lugar donde pueda descansar". Ryley sugirió.
Van sacudió su cabeza, "Todavía no. Hitomi había tenido una visión acerca de Myami antes de que todo esto ocurriera y mando un llamado a todos nuestros amigos. Debemos esperar antes de dirigirnos de nuevo a palacio".
Afortunadamente no tuvieron que esperar mucho tiempo por sus compañeros. Allen y Merle venia corriendo desde el lado oeste de la ciudad. Inmediatamente después de que parecieran aparecieron Millerna, Dryden y Serena acercándose desde el lado este.
"Estamos aquí" Merle dijo. Fue entonces que notó a Van sosteniendo a Hitomi y los cuatro nuevos rostros rodeándolos. "¡Oh por dios! ¿Qué sucedió aquí?" Merle corrió rápido a lado de Van, "¿Y quienes son estas personas?".
Millerna y Serena se acercaron a Merle seguidas de cerca por Dryden y Allen. Allen echó un vistazo a la inconsciente figura entonces miró ardidamente a los forasteros. Sacando conclusiones, Allen sin saber a quien culpar, "¿Por qué dejaron que le sucediera esto a Hitomi?"
Van no podía creer la audacia de Allen. Estaba apunto de darle a Allen una dosis de su propia medicina cuando Myami pasó una mano sobre su hombro. Ya enojado por no haber podido capturar a las personas responsables de las heridas de su hermana, Myami comenzaba a enfurecerse por ser acusada de lastimar a su hermana, "¿Quién demonios crees que eres?" Myami caminó por un lado de Van para pararse enfrente de Allen. Midiendo 1.70 Myami nunca se sintió intimidada por nadie, hombre o mujer. Pero la molesto en extremo el tener que levantar su cara para ver a Allen, "Yo NUNCA lastimaría a Hitomi. Ella es la única familia que tengo ahora. Y, quien quiera que seas, no tienes derecho de acusarme de algo, si no sabes lo que sucedió".
Los ojos de Allen se ensancharon. No solo había perdido su temperamento, había perdido los estribos con la hermana de Hitomi. Allen estudió cuidadosamente a la mujer frente a él. En su rostro la semejanza con Hitomi era inequívoca. ¿Cómo pudo no haber notado esos verdes ojos antes? Allen, puesto en su lugar, se encontró sin habla.
Serena sabía que su hermano había sobrepasado sus límites e intento suprimir cualquier otro conflicto, "Lo que mi hermano, Allen, dijo no tiene excusa, pero por favor acepten nuestras disculpas". Serena se paró por un lado de Allen, "Estoy segura que fue solo por que estaba preocupado por Hitomi que él exageró".
Allen podía sentirse avergonzado hasta la venas. No solo había sacado conclusiones apresuradas y erróneas, estaba siendo salvado por su hermana menor. Allen aclaró su garganta y encontrando su voz, "Como Serena dice, me disculpo por la confusión". Allen continuó para mantener oculto su vergüenza, "Somos amigos de Hitomi y Van-sama".
"Soy el rey Dryden de Asturia y esta es mi esposa, la reina Millerna"
Myami se inclinó en respeto, "Es un honor conocer a los reyes de Asturia. Mi nombre es Myami" Myami se puso de pie otra vez y presentó a sus amigos, "Ellos son Tardus, Yil, Pristelle y Ryley".
"Por favor no te sientas como si necesitaras homenajearnos". Millerna intervino rápidamente, "Hitomi es nuestra amiga y cualquier amigo de Hitomi es nuestro amigo".
"Mi nombre es Serena", Serena se presentó a si misma.
Merle no se iba quedar fuera, "Soy Merle".
"Es un placer conocerlos a todos", Ryley sonrió tibiamente a todos.
Myami sonrió con ternura. A ella ciertamente le agradaban todos bastante bien, especialmente Van. La intensidad detrás de los ojos del joven hombre le recordaba tanto a los suyos. El único que no le agradaba mucho era el hombre rubio, Allen. Por alguna razón la había irritado y no pudo más que tener una sensación de inquietud. Pero por su hermana ella sería amiga del jabalí de un hombre.
"¿Qué sucedió aquí?" la pregunta de Dryden detuvo las presentaciones.
Yil quien había estado en silencio todo el tiempo decidió explicar, "Al parecer Hitomi fue atacada. Pristelle la atendió, se repondrá. No pudimos encontrar a los perpetradores. Íbamos a llevarla a un lugar para que descanse, pero Van nos informó que Hitomi los había llamado. Así que hemos estado esperando por todos ustedes".
"Me parece que una explicación mas detallada seria mas razonable en el palacio, por que no miran por encima de sus hombros al parecer hemos llamado la atención de una multitud", Serena ladeo su cabeza viendo a la multitud que los rodeaba.
Desde una cierta distancia, parados en un tejado, Dorser y Nigel miraban su obra. Aunque Nigel no consiguió dañar a la mujer, al menos tenia la satisfacción de saber que él era parte de la razón del por que ella actualmente estaba inconsciente. Nigel sonrió, "Míralos. Tenías razón. Ahora todos van a estar en el palacio. Incluso Myami"
"Todo va de acuerdo al plan". Dorser tocó el hombro de Nigel, "Ahora vamos a esperar hasta mañana y ver que encontramos".
Nigel asistió y cantó un pequeño hechizo y el dúo desapareció de su ventajosa posición.
~ Palacio real ~
Una vez que Van y los otros regresaran al palacio, Millerna rápidamente vio las necesidades de cada uno. Myami, Tardus, Ryley, Pristelle y Yil fueron barridos por un torbellino de criadas y mayordomos. Merle y Serena miraban con la boca abierta la habilidad de Millerna de recorrer el palacio. Antes de que lo supieran, Millerna los había llevado a todos a sus propias habitaciones y a Hitomi acomodada segura dentro de su habitación.
Millerna cabeceo en apreciación. Había colocado a sus amigos y había enviado órdenes estrictas de que todos debían asistir a una tranquila e informal cena mas tarde. Tanto había pasado este día y todas necesitaban explicaciones. Millerna se dirigió a su propia habitación para alistarse y encontrar a su esposo sonriéndole calidamente.
"Nunca dejas de asombrarme". Dryden puso un brazo alrededor de su esposa y comenzó a caminarla hacia su habitación, "Algún día tendrás que decirme tu secreto de cómo puedes organizar todo tan rápidamente".
"Algún día", Millerna dijo, entonces deteniendo a Dryden, Millerna preguntó, "¿Qué va a pasar ahora? Las hermanas están reunidas. ¿Qué sobre Hitomi? ¿Estará bien?".
Dryden la apretó confortablemente y comenzaron a caminar de nuevo, "Paciencia. En cuanto a Hitomi, ella es fuerte. Lo ha probado tantas veces en el pasado. Cuando despierte, ella estará tan bien como nueva. Ahora, por que no ambos nos alistamos para nuestros nuevos invitados y para las nuevas preguntas y respuestas que serán proporcionadas esta noche".
~ Habitación de Myami ~
Myami se detuvo pie petrificada en la habitación en la que la Reina la había puesto. Ya había visto alrededor de la cómoda habitación para encontrar varios vestidos de Asturia, asientos confortables y almohadas, una gran cama, y una puerta que conectaba directamente a la habitación de Hitomi. "¿Cómo demonios hizo ella esto?" Myami se refería a la adaptación de Millerna ante la situación tan apresurada.
No segura de lo que se suponía tenía que hacer antes de la cena, Myami se refrescó rápidamente en la baño adjunto entonces se aventuró a sentarse con su hermana. Ella silenciosamente abrió la puerta que conectaba sus habitaciones y encontró un visitante ocupando ya una silla a un lado de la cama.
Van estaba sosteniendo la mano de Hitomi en completo silencio, casi como si estuviese eligiendo cuidadosamente que decirle. Myami no quería interrumpir la escena y se dio vuelta para cerrar la puerta. Ella pasaría tiempo con su hermana después. Parecía que este joven hombre necesitaba más a Hitomi en este momento que ella.
Van escuchó un ligereó sonido y levantando los ojos de la cama. Vio a Myami dando vuelta para dejar la habitación, "Espera". Soltando la mano de Hitomi, Van se puso de pie y camino algunos pasos hacia Myami, "¿Quieres sentarte con ella?".
Myami cabeceo, "Esta bien. Puedo verla después de la cena". Entonces Myami dio vuelta de nuevo para salir.
Van no quería que Myami se fuera aun, "No te vallas. Por favor siéntate y cuídala conmigo".
Myami no podría decir que no a la oferta de Van. Rápidamente, no deseando disturbar el descanso de Hitomi, Myami puso una silla en la cama enfrente de Van. Van la miraba y parecía mirarla fijamente por un momento antes de hablar, "Te pareces tanto a ella".
"Lo se". Myami sonrió, "Siempre fuimos casi tan parecidas como dos gotas de agua. Era el color de nuestros pelo lo que nos diferenciaba".
"¿Cómo nos encontraste?" Van encontró que quería que se quedara Myami no solo para tener alguien con quien hablar, sino para conseguir respuestas. Necesitaba este tiempo a solas con Myami.
Myami saco el pendiente fuera por debajo de su ropa, "Use mi pendiente para encontrarla". Myami sintió que la piedra zumbaba. La gema comenzaba a rodearse de una intensa luz rosada y la misma luz comenzaba a parecer debajo de la ropa de ambos Van y Hitomi. "Y al parecer tu y Hitomi tienen una también". Van había quedado con la boca abierta, "Veo que mi madre y mi abuela se han separado de sus piedras y de laguna manera han pasado a ustedes dos".
Van finalmente había encontrado su voz de nuevo, "La abuela de Hitomi le dio el colgante a Hitomi después de que desapareciste y antes de que visitara Gaea la primera vez", Van recordó a Hitomi diciéndole acerca del incidente, "Entonces ella me dio el colgante y…"
"¿Qué quieres decir con primera vez?" Ahora era el turno de Myami de estar sorprendida, "¿Ella ha estado en Gaea antes?".
Van asistió, "Justo antes del comienzo de la Gran Guerra". Cuando Myami no habló, Van continuó su explicación, "Durante ese tiempo yo realizaba el ritual para reclamar el trono de Fanelia, de alguna manera fui transportando a la Luna Fantasma. El dragón con el que había estado peleando fue transportado conmigo. El lugar en donde aparecí resulto ser el mismo lugar donde Hitomi estaba en ese momento".
"¿Y bien entonces que sucedió?" Myami dejo fuera el estupor.
"Una vez que había vencido al dragón y obtenido el energist, Hitomi fue transportada de vuelta a Gaea conmigo", Van cortó un poco. "Mientras Hitomi estuvo aquí la Gran Guerra empezó y terminó. Ella fue determinante en la derrota de Zaibach".
Myami se sentó en silencio mientras procesaba toda la información que Van acaba de proporcionarle. No lo podía creer. Su hermana era una heroína de la guerra. "¿Cómo que fue determinante?". Myami estaba muy interesada en saber más de la vida de Hitomi. "¿Estabas tu a su lado?"
Van asistió en respuesta. "Si. Muchas personas estuvieron al lado de Hitomi. Sus poderes ayudaron mucho durante las batallas. Al final fue el poder de su corazón y su compasión lo que derrotó a Zaibach". Él examinó la reacción de Myami. Sus ojos mostraban admiración, amor y temor por Hitomi. Cuando Myami no respondió asumió que ella esperaba que continuara. "Fue entonces que me enamore de ella". Van sentía como si necesitara la aprobación de Myami, "Pero nunca tuve la oportunidad de decírselo. Ella regresó a la Luna Fantasma. La extrañe grandemente y cuando descubrimos que podíamos comunicarnos a través de nuestras mentes aun que estuviésemos en mundos separados, nos mantuvimos en contacto por los últimos cinco años".
"Pude sentir el amor que tienes por Hitomi. Tu aura lo irradia brillantemente". Myami busco las palabras apropiadas, "Pero en ese amor aun aparecer cierta incertidumbre. ¿Por qué me lo dijiste a mi antes de decírselo a ella?"
"¿Cómo sabias que no se lo había dicho a Hitomi?"
"Por la manera que estas ahora. Se que sientes que necesitas mi aprobación, pero en realidad no necesitas la aprobación de nadie, menos la mía. Es la aprobación de Hitomi la que tu buscas y la única manera que las vas a conseguir es diciéndole como te sientes".
Van miró fijamente con cansancio a Myami, "Ella me dijo que me amaba justo antes de que pensara que iba a morir hoy", tomando una profunda respiración, "El pensamiento de perderla ahora casi me mató también. No puedo vivir sin ella".
La silenciosa confesión de Van tocó a Myami. Ella se puso de pie y caminó alrededor de la cama para colocar una mano sobre le hombro de Van, "Díselo. Es mi único consejo. Pero por ahora," Myami gentilmente alejo a Van de Hitomi y fue a besar su frente antes de cubrirlas con las mantas, "tenemos una cena que atender". Myami ligó su brazo con el de Van y procedió a guiarlo fuera de la habitación; "Mientras tu me escoltas al lugar donde tendremos la cena, por que no me hablas un poco acerca de ti y de Hitomi. Después puedes preguntar acerca de mí. ¿Hecho?"
"Hecho". El corazón de Van estaba contento ante la aceptación de Myami. Aunque sabía que las cosas se volverían más difíciles antes de volverse fáciles, al menos algunas cosas estaban en su lugar.
Los dos compañeros caminaban hablando de ellos y de Hitomi. Un nuevo lazo se formó, uno entre, que Myami esperaba fuera, lo que se convertiría en un cuñado y su cuñada.
~ Pasillo ~
Minutos más tarde, después de un rápido vistazo a Hitomi, Merle caminó hacia la habitación de Serena. Antes de que hubiesen sido enviados a sus habitaciones, Serena le había pedido a Merle que pasara por ella y su hermano para ir a cenar. Merle tarareaba una canción mientras pensaba en los eventos sucedidos durante el día. Nuevas personas, que eran ellos amigos o el enemigo que no podía ser visto, lo que fueran ahora eran parte de su grupo.
Ella casi había llegado a la habitación de Serena cuando sus pensamientos se desviaron a cierto hombre-gato que al parecer era compañero de Myami. Ella había visto otros de su raza antes, pero por alguna razón es hombre-gato la intrigaba. Merle alejo ese pensamiento en particular y tocó la puerta de Serena suavemente, "Soy Merle".
Dentro de la habitación Serena sonrió, "¡Adelante Merle!" Serena se levantó de su tocador y abrió la puerta.
"¿Y bien estas lista?" Merle asomó su cabeza dentro de la habitación, "¿Dónde esta Allen?"
"No lo se. Deberíamos revisar su habitación". Serena aguardó algunas cosas y después dejó la habitación.
Merle siguió a Serena y las dos amigas hablaban, "¿Y bien que piensas acerca de Myami y sus amigos?" Serena tenia curiosidad sobre lo que Merle pensaba.
"Son bastante decentes", Merle dijo. "Para no mencionar a ese Tardus es increíblemente apuesto". Merle pensó el último cometario para si.
Serena cabeceo de acuerdo, "Todos son ciertamente leales a Myami. Admiro eso. Lastima que Allen haya empezado las cosas con el pie equivocado".
"Si, pero los comienzos son siempre difíciles. Y mas cuando hay usualmente mas señales de problemas en el horizonte".
"Espero que Allen se comporte esta vez". Serena se dirigió a Merle antes de tocar la puerta de Allen, "Sabes últimamente siento como si los papeles de Allen y míos se hubieran intercambiado. Me siento como la hermana mayor".
"No bromees", Merle rió entre dientes.
"¿Y sabes que?"
"¿Qué?"
"Me gusta".
Ambas mujeres rieron mientras estaban paradas frente a la puerta de Allen. Las risas llamaron la atención del ocupante de la habitación y Allen abrió la puerta. La vista de Serena y Merle riendo histéricamente, hicieron en él sacar su curiosidad, "¿Y de que se trata todo esto?".
Esa pregunta solo obtuvo por respuesta más risas por parte del par. Sacudiendo su cabeza cerró la puerta de su habitación y dio a ambas mujeres un ligero empujón, "Esta bien, lo que sea adivino que no es algo que quiera escuchar, pero tenemos que irnos".
Merle y Serena finalmente se había calmado. Serena guiño un ojo a Merle y se dirigió a Allen, "Lo que tú digas, hermano mayor"
Eso trajo a las chicas otro ataque de risas. Y continuaron de esa manera mientras caminaban dentro del comedor informal.
Allen suspiró, "¿Qué hice para merecer esto?" Allen vio a las dos mujeres y encontró que ambas reían entre dientes ante lo que había dicho.
Cerca de su destino, Tardus, Yil, Ryley y Pristelle estaban caminando juntos hacia donde el mayordomo había llamado "El comedor informal". La mayor parte, habían sido aterrorizados ante lo lujoso de sus habitaciones. Habían sido tratados con amabilidad y ahora todos se sentían un poco fuera de lugar.
"¿Qué crees que sucederá ahora?" Pristelle sostuvo firmemente el brazo de Ryley.
Tardus se encogió y continuaron caminando. Sabiendo que Myami no tenía intención de regresar al Asilo, se preguntaba como les daría esa noticia a sus tres amigos. Hasta donde sabían, todo lo que estaba involucrado en la búsqueda era encontrar a Hitomi. Pero ahora que la habían encontrado, estaba seguro que estaban pensando en volver a casa. También estaba seguro que en cuanto supieran que Myami no iba a regresar, ellos insistirían en quedarse también. Él necesitaba consultar con Myami sobre lo que iban hacer.
"Creo que llegamos". Yil apuntó a las dos grandes puertas de pie a su izquierda.
Ryley sofocó un grito, "Y a esto le llaman comedor 'informal', que clase de puertas tendrá el comedor principal".
Con ese último comentario un grupo inseguro de personas tocó y entró en el salón.
~ Comedor ~
Dryden y Millerna miraban sentados desde la cabeza de la mesa. Dryden se paró, "Bienvenidos, amigos". Dryden le indicó los cómodos asientos, "Por favor tomen asiento".
El grupo cabeceo y todos se dirigieron a tomar asiento del lado opuesto de la reina. Sentándose todos uno al lado del otro, Pristelle, Ryley, Yil y Tardus murmuraron sus agradecimientos.
Tardus habló por todos, "Si me permiten preguntar, ¿Dónde están todos?"
Dryden, quien ya había reclamado su silla, sonrió, "Probablemente lleguen tarde".
"Por favor no se sientan incómodos con nosotros", Millerna pronunció para confortar a sus invitados, "Ustedes son amigos de la única hermana de Hitomi. Los hace amigos de Hitomi y sus amigos son nuestros amigos también".
"Me disculpo si dimos esa impresión", Pristelle jugueteo con su servilleta, "Pero no les mentiremos, estamos cohibidos, mayormente por que nunca habíamos estado en tal ambiente antes. Todo es tan lujoso aquí. Todos hemos llevado vidas simples hasta ahora".
"Estamos realmente agradecidos por su hospitalidad", Tardus terminó.
Dryden cabeceo en apreciación, "No es nada en verdad. Es lo menos que podemos hacer".
Millerna indico las dos mesas al final del salón, "Por favor no vacilen en comer ahora. Ha sido un largo día y además no han llegados los otros todavía, no veo el por que debamos esperar. Ellos entenderán que teníamos hambre", Millerna se paro y se dirigió hacia las mesas con comida.
"Mi esposa esta en lo correcto. Es su culpa el que lleguen tarde". Dryden también se paró y se unió a Millerna.
Pristelle se puso de pie y se encogió ante la mirada que recibió de lo otros, "Hey, tengo hambre". Con eso se les unió al rey y a la reina.
Ryley observó a Pristelle tomar un plato. Él casi se ahoga con su bebida cuando escuchó a Pristelle preguntar a Millerna como mantenía ese maravilloso brillo en su rostro.
"Creo que mejor me les uno si quiero mantener a Pristelle fuera de cavar mas profundo", Ryley se puso de pie para tomar un plato.
Tardus y Yil sentados se miraron el uno al otro. Finalmente mientras sus compañeros comenzaban a regresar a la mesa Tardus y Yil se pararon y fueron por sus cenas. Mientras se dirigían a la mesa de la comida, Myami, Van, Merle, Serena y Allen entraron a la habitación.
Myami se inclinó, "Me disculpo por llegar tarde. Estábamos entretenidos en nuestra conversación", Myami indicó a Van.
Millerna se dirigió a Serena, "¿Qué sucedió con ustedes chicos?".
"Solo un caso agudo de risa", Allen explicó y fue directo a los alimentos. Serena y Merle empezaron a reír de nuevo, "Ves a lo que me refiero".
Millerna sacudió su cabeza, "¿Qué es tan divertido?"
"Uh, nada…" Merle dijo entre risas.
"Lo siento" Serena se detuvo y escondiendo su sonrisa mientras fue por un plato con alimentos.
Merle hizo lo mismo y una vez que todos estuvieron sentados, el grupo que cenaba comenzó una conversación cortés.
~ Mesón Trundle ~
"¡Nigel!" Dorser golpeó la puerta de la habitación de Nigel. Se estaba haciendo tarde y Nigel había estado durmiendo desde que regresaran al mesón. "¡Nigel!"
Dentro de la habitación, Nigel puso una almohada sobre su cabeza y maldijo su existencia, "Vete, Dorser. Tratare contigo en la mañana".
Dorser, sobre la respuesta de Nigel, debatía entre si entrar o n. Decidiendo por entrar, Dorser uso su hombro para empujar la puerta y entrar a la habitación.
Nigel lo miró desde debajo de la almohada, "¡Por amor a Gaea! ¿No tienes nada de decencia? Estoy tratando de recuperar todo el sueño que perdí los últimos días. Tu dijiste que eso estaba bien, ¿Qué quieres ahora?"
"Las cosas están bien". Dorser encontró una silla y se dejo caer en ella, "He estado intentando conseguir que abras la puerta por la última media hora".
"Lo se", Nigel se sentó de un tirón, "He estado intentando ignorarte por la última media hora. ¡Entonces dime que demonios quieres para que entonces pueda volver a dormir!"
Dorser miró fijamente a su irritado socio, "Iba a salir y observar nuestra presa. Solo me preguntaba si te gustaría acompañarme".
Nigel miró fijamente el techo. La idea de Dorser era prometedora. "¿Qué tan tarde es?"
"Tarde".
"Por que exactamente vamos al palacio, ¿Si no vamos a robar el centro o a la hermana?"
"Creo que le debemos a Myami y sus amigos una prueba de lo que viene. Además, nos dará una oportunidad de echar un vistazo a la seguridad del palacio". Dorser racionalizó para Nigel.
Nigel lo pensó por un momento. Sabía que la razón principal para este pequeño escape era Myami. Después de haberla visto hoy, Dorser probablemente no la había podido sacar de su mente. Claro había habido otras mujeres después de Myami, pero ninguna lo había cautivado como ella. Nigel estaba mas interesado en recuperar las páginas perdidas que en Myami, pero también sabia que el podría causar cierto daño antes de que la noche terminara.
Dorser y él ya habían discutido que no podían esperan a que el centro fuera sacado para tener la oportunidad de tomar los documentos. Especialmente con el corto tiempo con el que contaban, una recuperación rápida sería lo más pertinente. Tendría sentido probar las defensas del palacio. "¿A que horas quieres atacar mañana?".
"Tarde por la noche. Como siempre la noche es lo mejor".
"Así que dime de nuevo ¿Por qué vamos a hacer esto?".
"Por algo de diversión. El amo Kirok nunca dijo que no podíamos disfrutar".
Nigel pensó por un momento más antes de lanzar las mantas y comenzar a vestirse, "Dame cinco minutos".
Dorser sonrió victorioso mientras sus pensamientos comenzaban a vagar. Él haría una visita a Myami y satisfaría su curiosidad sobre ella. Parándose y dejando la habitación, Dorser bajo y se dirigió a los establos para preparar a los caballos.
~ Habitación de Hitomi ~
Myami se sentó calmadamente en el asiento de la ventana observando los jardines de palacio. Había ido directamente a la habitación de Hitomi una vez que ella y los otros hubiesen terminado su conversación. Había hablado a lo largo de la cena y una ves que todos hubieran comido, se movieron hacia el salón colindante para continuar su discusión. Myami dejó el asiento de la ventana para sentarse el la silla a un lado de la cama de Hitomi.
Se había hecho toda clase de preguntas. Myami y Tardus eventualmente explicaron acerca de sus orígenes. Después de su reveladora conversación con Van, había descubierto que todos estaban enterados de cómo Myami había desaparecido en primer lugar. La conversación continuó hasta describir algunos eventos de la Gran Guerra y cómo ellos, como grupo, se convirtieron en una amistada.
La mayor parte del tiempo Yil se mantuvo en silencio mientras la mayoría hablaba. Ryley y Pristelle había explicado la relación entre su pequeño grupo de amigos y la dinámica de su hogar, el Asilo. Alternativamente Myami había hecho algunas preguntas propias. Sabía que su madre había muerto, pero no sabía como. Van le había proporcionado la respuesta, como Hitomi no estaba disponible para responder esas preguntas para ella. Tardus, Yil y Pristelle cada uno preguntó por diferentes temas así como lo hicieron Millerna, Dryden, Serena, Merle, Allen y Van.
La mezcla de personas continuó con su sección de preguntas y respuestas hasta entrada la noche. Al final de todo, cada lado estaba más informado. La única pregunta que se dejó sin respuesta aun rezagada en la mente de todos, "¿Qué va a suceder ahora?"
Myami suspiró, "Tantas personas cuidan de ti Tom-Tom". Myami coloco su cabeza debajo de la mano de su hermana. Ella había aprendido algo esta noche; Hitomi estaba bien cuidada. "¿Dónde encajó yo en tu intrincado rompecabezas?".
Van se paró fuera de la puerta de Hitomi debatiendo si debería o no entrar. Sabia que Myami estaba allí sentada con su hermana. Él puso su oído en la puerta y escuchó por cualquier sonido. Cuando no escuchó nada, Van abrió a puerta calmadamente. Lo que vio le hizo sonreír. Van se acercó y besó la mejilla de Hitomi, acomodando las mantas alrededor de sus hombros. Sabiendo que Myami querría estar cerca de Hitomi la acomodo en un sillón a los pies de la cama. Van dio una última mirada sobre las hermanas y tan calladamente como había entrado dejó la habitación sabiendo que las cosas iban en la dirección correcta.
Myami abrió un ojo y observó a Van dejar la habitación. Sonrió brillantemente en la oscura habitación. Significaba mucho para ella que él se tomara el tiempo para ayudar a que amabas ella y Hitomi estén cómodas. Ese hombre era ciertamente una bendición para su hermana.
Mientras que Myami empezaba a quedarse dormida, ella también se preguntaba que iban a hacer ahora. Una fuerza estaba atrayendo su mente, pero a donde ella no lo sabía. Esperaba que Hitomi despertara pronto. Sabía cuanto una carga de psionic podía mantenerte fuera de lazo. Lo que Hitomi estaba experimentando no era nada semejante a una sobrecarga de recuerdos como lo que ella había recibido hacia casi un mes. Pronto su mente estaba muy cansada para permanecer despierta. Había sido un largo día, y si no conseguía algo de descanso pronto, ella estaría de mal humor por la mañana.
Myami cerró sus ojos y pesó en su madre. "Madre, Hitomi me encontró. Guíanos para saber lo que necesitamos hacer".
Lejos en la distancia, más allá de los mares, una isla aparecía desde las aguas, las olas que reventaban en su orillas, interrumpiendo muchos ciclos de vida en el área.
~ Fin del Capítulo 6 ~