.:: Amigos de Infancia ::.
Han pasado algunos días, dieron otros pocos de descanso en la universidad de la peliazul, por lo que Lyserg y ella han tenido suficiente tiempo para pasar juntos y salir de un lado a otro.
Ya les han llegado varios comentarios por parte de conocidos de que forman una linda pareja, por lo que Pilika se ha tratado de acostumbrar a la idea. Siguiendo el consejo de Tamao, ha intentado llamar la atención del peliverde, aunque ya tiene demasiada, pero hace tanto tiempo que ella le ha insinuado que son sólo amigos que la joven no sabe como explicarle que deberían darse una oportunidad como algo más.
Como en una ocasión, la joven intentó robarle un beso, pero el despistado de Lyserg pensó que ella se había confundido, así que la abrazó, pensando que esa era su verdadera intención.
Al igual que la ocasión en la que la chica comenzó a tomarle la mano, el simplemente no se la rechazó, pensó que ella quería estar así por un rato.
-Pero si el no se da cuenta! – alega la chica al reflejo de su mejor amiga que esta en el tocador.
-Como esperas que se de cuenta!? – Contesta Tamao que se arregla el lápiz labial – lo has dejado sin ninguna esperanza al pobre hace más de un año... es normal que sea tan ingenuo... no desea ilusionarse.
-Genial! Ahora que tiene que hacerlo... no lo hace! – Pilika camina en círculos, mientras que la pelirroja la mira divertida.
-Usa tu encanto...
-Se me olvidó como se usa...
-Róbale un beso...
-Ya lo intenté...
-Tómale la mano...
-Ya lo hice...
-Por que no vas a su habitación?
Pilika queda sorprendida mirando el reflejo de su amiga – Cómo se te ocurre! – sube y baja los brazos rápidamente mientras el rojo predomina en su rostro.
Tamao ríe y voltea para verla – tómalo como una última opción.
-No planeo acostarme con él!
-Planeas sólo besitos?- sube una ceja - Pilika... no te conformarás tan sólo con eso...
La joven evade la mirada, no se imagina en ese tipo de relaciones con su amigo de infancia.
La pelirroja comienza a reír, le encanta ver como su amiga toma el color de un tomate cuando le saca ese tipo de temas.
-Ya vamos!! – La joven se adelanta a salir – Los chicos nos están esperando.
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Para su propia sorpresa, Horo se encuentra hablando animadamente con Lyserg en una de las mesitas del pub.
Las chicas se excusaron para ir al baño, con ese raro ritual femenino de que siempre van de a dos. El quedarse sólo con el peliverde no le agradaba en lo más mínimo, incluso en un principio no tenía la intención de intercambiar palabra alguna con ese sujeto. Pero en vista de que las chicas no llegaban, no le quedó más que hablarle, pues el aburrimiento lo estaba consumiendo de a poco y se dio cuenta que a su acompañante también.
-Por qué demonios las chicas van de a dos al baño?? – comenzó él como un comentario al aire.
Con ese simple comienzo, ahora terminan hablando de asuntos más importantes, Tanto de política, música, amor y un montón de asuntos que no imaginó compartir con él y que además tuvieran uno que otro en común.
Después de que comenzaron a conversar se le hizo muy corto el tiempo que estuvieron solos, por decir que hasta chistes se contaron y que entre risas no se dio cuenta en que momento las muchachas volvieron a tomar sus lugares nuevamente.
Se quedan conversando por un buen rato los 4 jóvenes, a ratos la pareja de Horo y Tamao se tomaban de las manos y se daban uno que otro beso en los labios, incomodando un poco a los otros dos chicos de la mesa.
Cerca de las 1 de la mañana, comienza a oírse música bailable, sin dudar siquiera, Tamao guió, por no decir que lanzó a Horo a la pista de baile siendo unos de los primero en inaugurarla, justo a otras 2 o 3 parejas.
No faltó mucho para que Lyserg y Pilika se unieran a los demás y juntos los cuatro comenzaron a pasarla muy bien.
Bailaron hasta que los pies simplemente no les dieron más, ya a las 5 de la mañana se iban a sentar pero tocaron una canción lenta y romántica. Horo y Tamao no dudaron en pasar a la pista a disfrutar el bailar abrazados.
En cuanto a los otros 2, se quedaron mirando algo avergonzados, no les haría mal abrazarse y bailar, pero ninguno se decidía a dar la iniciativa, estaban parados frente a frente en medio de la pista de baile, inmóviles, viéndose de vez en cuando.
Luego de unos momentos Pilika queda sorprendida por el sorpresivo acercamiento del joven, que casi hace que ambos terminaran en el suelo.
Ya juntos, ambos voltean a ver la pareja de Horo y Tamao, el muchacho peliazul miraba hacia el cielo como dándoselas de inocentes mientras que la pelirroja miraba a su amiga riendo abiertamente.
-Esa Tamao... - dice entre dientes la peliazul en los brazos de Lyserg, quien la sorprende posando sus manos alrededor de su cintura y apoyando su cabeza en uno de sus hombros.
La joven queda paralizada por algunos segundos antes de que sus manos se posaran en la espalda del chico y su cabeza en su pecho.
La pareja se deja guiar por la música, es lo suficientemente lenta para relajarse mientras van pasando su peso de un pie al otro.
El momento es muy agradable para los 2, Pilika logra sentir el calor del pecho del Lyserg y el lograr sentir el suave palpitar de su corazón le hace cerrar los ojos por la tranquilidad que esta experimentando.
En cuanto al chico, hace que la peliazul se acerque más a él, cruzando las manos por detrás de la estrecha cintura, le agrada sentir ese delicado cuerpo tan cerca del suyo y ese tibio contacto hace que él también comenzara a cerrar los ojos y esconder su rostro en el cuello de la muchacha.
Casi sin darse cuenta de lo que sucedía, ambos jóvenes alejan un poco el rostro, los ojos verdes se quedan atrapados en esos color azul claro.
No se percatan en que momento, ni tampoco les interesa, la distancia entre sus rostros comienza a disminuir. Hay un instante en que ambos no aguantan más esa pequeña lejanía. Así que se dan la oportunidad de terminar de cerrar los ojos y buscar la unión de sus bocas.
Finalmente llega, esos labios que por primera vez se unen, se quedan unidos por un rato, para luego separarse y volverse a unir en cortos y tranquilos besos que se vuelven reinantes del ambiente por algunos minutos mientras los participantes de este suave juego continúan pasando su peso de un pie a otro al mismo ritmo.
Lyserg abre los ojos sorprendido, el baile de los pies queda detenido sin separarse ni del abrazo ni de los labios del otro. La peliazul abre camino por los labios del chico para intensificar el beso.
El peliverde queda viendo los ojos cerrados de la muchacha justo frente a los suyos. Se queda por algunos segundos sintiendo la suave caricia de la lengua de la chica en el interior de su boca, sin contestarle pero permitiéndole la entrada fácilmente. Sus ojos comienzan a cerrarse para que comenzara a concentrar en unirse a ese delicado juego al cual esta siendo invitado.
Se quedan sumidos en ese momento, quedando atrapados por el suave y dulce sabor de ese beso, hace tanto tiempo que ninguno de ellos lo practicaba que lo hace más delicioso aún, devolviendo a la vida emociones que creyeron muertas hasta ahora.
Es un beso delicado, que ambos disfrutan del saborear, Pilika afirma la cabeza del Lyserg desde la nuca para que no se separe aún, le agrada tanto el aroma del joven, su delicadeza al besar, la manera en que comienza a acariciar su espalda.
En cuanto a Lyserg no es tan diferente, siempre le ha gustado permanecer cerca de la chica, y estarlo como ahora, le fascina. Se acostumbró tanto a que lo viera tan solo como uno de sus mejores amigos que nunca espero tener la oportunidad de tenerla de esa manera, envolviéndola con sus brazos, especialmente que ella sea la que le impidiera desistir de ese beso... de ese delicioso beso.
Lyserg abre los ojos al notar que algo andaba mal, se separa de los labios de la joven que se resiste en un principio, pero luego lo libera.
Pilika se extraña al ver que el joven comienza a mirar a su alrededor para luego mirarla a ella, le agrada ver el suave sonrojo en ese rostro, y el intenso brillo que hay en esos hermosos ojos verdes. Lo puede ver tan bien desde esa corta distancia, lo ve tan bien... demasiado bien... como si hubiese...
-Luz? O.o – dice siguiendo sus pensamientos.
La joven imita a su acompañante, ve como la gente comenzaba a encaminarse hacia la puerta y que tenían uno que otro espectador, entre los cuales estaban Tamao y Horo-Horo.
El sonrojo de ambos chicos se hace más notorio, pero se mantienen abrazados.
Pilika se separa del joven y lo toma de la mano para acercarse a sus amigos.
-No me digas...
-Te lo dije? – se adelanta la pelirroja sonriendo ampliamente, haciendo que el entrecejo de su amiga se arrugara, lanzara un ligero rugido y acelerara el paso, tironeando a Lyserg, para salir del Pub.
Ya afuera, los 4 chicos se despiden y se dividen en parejas para encaminarse a casa.
Pilika va manejando sin intercambiar palabra con su copiloto, no es un silencio incómodo, van jugando entrelazando sus dedos de vez en cuando e intercambiando miradas sonrientes cada vez que pueden.
Al llegar al departamento ambos se sientan en el sofá a conversar un poco.
La joven siente que el chico no muestra mayor interés en volver a besarla y le hace sentir más atracción hacia él. A tal extremo de que no logra controlarlo más, toma la nuca del muchacho atrayéndolo hacia ella y callándolo de golpe cerrando sus labios con los propios.
Los ojos verdes se abren por la sorpresa, se queda petrificado por algunos momentos mirando a los ojos cerrados de la muchacha justo frente a ellos, luego se un momento comienza a cerrarlos para unírsele en ese beso.
La joven se acomoda pasando ambos brazos por el cuello del muchacho, obteniendo así un mejor contacto, está fascinada basándolo, hace tanto tiempo que no daba un beso que eso lo hace más delicioso aún.
Un beso suave, que en un principio fue algo forzado por parte de la peliazul, pues Lyserg, por la sorpresa, atinó a separarse pequeños milímetros antes de que sus labios quedaran prisioneros por completo. Deja que reine un agradable ambiente. Lyserg pasa sus manos por la estrecha cintura acariciando la espalda de su compañera.
Pilika siente como el beso comienza a despertar en ella algo que permanecía dormido hace un poco más de 2 años. Su cuerpo no ha sido ofrecido a otro hombre que no sea Len, pero ahora siente que no es mala idea el ofrecérselo a éste joven que le ha entregado tanto sin esperar nada a cambio.
Una de las manos que se encontraban tras la cabeza del muchacho comienza a descender por su pecho, acariciándolo por arriba de sus ropas.
La joven comienza a abrir el cierre del pantalón, al no notar resistencia ni negación, se atreve a continuar, ahora introduciendo su mano por la entrepierna del chico.
El joven deja escapar un par de suspiros al sentirse estimulado de esa manera. Reacciona presionando un poco más a la chica contra sí.
Abre los ojos, algo sorprendida. Se queda viendo los ojos verdes entreabiertos que la miran directamente. Un quejido por parte del muchacho hace que ese beso se rompa y que los ojos de él volvieran a cerrarse.
Pilika desciende la mirada hacia su mano que aun permanece en el interior del pantalón junto con el sexo del muchacho, esta impresionada, se preocupó tanto de ver a este joven como un simple amigo que nunca imaginó cuan grande podía ser su "hombría"
Lyserg posa una mano sobre la que se encontraba en su entrepierna y la aleja – Vamos demasiado rápido...- con la voz entrecortada por uno que otro gemido.
La peliazul lo mira con extrañeza, es cierto, van algo rápido, pero a ella no le importa, realmente eso no le molesta.
Se queda viendo como el chico se le acerca para darle un corto beso en los labios – Será mejor esperar un poco.
-Esperar?? –no puede ocultar la inconformidad que le causa ese comentario. Lyserg resulto ser mucho mejor de lo que ella jamás imaginó, besa como un ángel y las caricias le han hecho sentir como su cuerpo comienza a hervir "¿esperar?" que no venga con eso justo ahora.
El chico mira con extrañeza en un comienzo, para luego sonreír algo divertido.
-Es raro que te comportes así....- explica el joven – sabes que siempre me has gustado y no quier...
-Eso ya lo sé! – Interrumpe – pues aquí estoy... disfruta el momento.
Lyserg vuelve a mostrar ligeramente su rostro de sorpresa, pero luego relaja la mirada – no... así no... - se levanta, dándole un sutil beso en la frente – te veo mañana... - se dirige a su habitación.
-Mañana? – Pilika se queda sentada y lo sigue con la mirada. Al ver como la puerta se cierra tras él arruga el entrecejo – baka!
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A la mañana siguiente, cerca del mediodía, Lyserg se levanta para darse una ducha, conociendo el genio de la peliazul, sabe que su mejor ánimo no será dedicado especialmente para él.
Al ir al baño, se encuentra con que la chica esta en la cocina preparando algo de comer – Buenos días... - consigue la atención de la muchacha que tan solo se limita a mirarlo para luego volver a lo que hacía
"como pensé...nñU" piensa justo antes de entrar al baño.
"Baka! Baka, baka, baka, baka.......... Baka!!!" es lo único que se logra leer en la mente de la muchacha. Es la primera vez que se sintió rechazada en cuanto a ese tema, y lo peor de todo, es que nuevamente su mejor amiga tenía toda la razón y eso es algo que odia admitir.
Luego de algunos minutos, la chica se encuentra haciendo algo de aseo para distraerse, no ha dejado de pensar en lo de anoche, obviamente esta con algo de rencor hacia el chico.
Al oír la puerta del baño nuevamente, voltea con el entrecejo arrugado pero luego cambia esa expresión por una de sonrojada sorpresa.
El joven salió del baño con tan solo una toalla que rodea su cintura, dejando ver su fuerte torso de musculatura definida. El llevar el cabello mojado y con algunas gotas que escurren por su pecho y espalda le da un toque más llamativo aún
Se queda mirándolo algo pasmada, realmente se acostumbró tanto a verlo como un amigo que jamás había notado lo atractivo que podía ser.
La tarde pasa sin muchas novedades, Pilika ha estado enojada con Lyserg desde la noche anterior y con lo orgullosa que es, el joven no se ha atrevido a acercársele. Cerca de las 7, la pareja se sienta a la mesa a tomar algo de té, al notar un silencio algo tenso a causa de lo callada que se encuentra la muchacha, Lyserg es quien se encarga de romper el grueso hielo que comenzaba a formarse.
-No crees que ya es suficiente? – lleva su taza hasta su boca después de la pregunta.
Pilika lo mira, lo ha estado evitando todo el día, se encuentra con los ojos color esmeralda del muchacho mirándola fijamente, desvía la mirada mordisqueando una tostada, dando a entender que no va a contestar.
-Es algo inmaduro que te enfades por un rechazo... - la joven lo mira poniéndole atención – me has rechazado muchas veces desde que nos conocemos y no me he puesto así contigo – el chico desvía la mirada.
El comentario hace que la chica abra los ojos con algo de sorpresa, el darse cuenta que él tiene razón, le hace sentir bastante avergonzada, se ha comportado como una niña caprichosa.
-Es.... – El joven vuelve a mirarla – Es cierto.... –una pequeña pausa - Lo siento... - tímidamente lo mira a los ojos.
El joven sonríe volviendo a llevar la taza a su boca.
Luego de algunos minutos en silencio, no incómodo, pero tampoco muy agradable. Pilika mira a Lyserg durante algunos instantes.
-Que? – el chico enfrenta a los ojos azules.
-Anoche.... – esa introducción hace que la atención de él se centrara aún más en la ella – me rechazaste como una venganza?
Lyserg la mira algo sorprendido en un principio, luego sube su mirada hacia el techo sosteniendo su barbilla – Ahora que lo dices... - comienza, después mira a la chica – puede ser que sí – sonríe.
En la nuca de la chica se forma una gotita de sudor pero luego sonríe pícaramente – entonces no me querías rechazar desde un principio.
El sonrojo en el blanco rostro del muchacho deja en evidencia la respuesta.
Pilika ríe por unos momentos, luego mira seductoramente a Lyserg - Pues... - se levanta y se aproxima al muchacho que se deja notar algo nervioso – Ya recibí mi castigo.... Ahora me falta la compensación... - Le besa en los labios y luego se aleja inocentemente sonriéndole – tomaré un baño... luego te veo n.n
-n.ñU claro...
Ya en la noche, el joven de ojos verdes se encuentra leyendo unos apuntes en su habitación recostado en su cama, la lectura le resulta totalmente en vano, no consigue concentrarse por más que lo intenta, la picardía en los ojos de su antigua mejor amiga le han dejado algo perplejo, tan inalcanzable encontraba ese momento que estar sumido en ese nerviosismo le tiene confundido.
Siente el sonido de manilla de la puerta y luego el ligero rechinar de ésta abriéndose. Con falsa indiferencia no se quita las hojas del frente de su rostro.
-Que buscas? – rompe el silencio.
No hay respuesta. Siente como unos delicados pasos de pies descalzos se van aproximando a él.
-Pilika... - vuelve a llamar.
Nuevamente no hay respuesta, siente como el colchón se hunde por el peso de otra persona. Por fin se decide a mirar a la muchacha, para luego quedar mirándola.
El joven la examina, lleva un pijama de 2 piezas, una polera a tiras y un short muy corto. El que tenga el cabello mojado le da un toque bastante llamativo, en especial si lo deja caer por uno de sus hombros hasta su pecho.
Sin decir palabra, la chica toma los apuntes y los deja en una mesilla cercana, luego mira al muchacho y se acerca para besarlo. Cosa que el chico no duda en corresponder de inmediato.
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Lo se!! Soy mala!! Casi siempre dejo a mis queriditos lectores en partes como esta... nn
Quería disculparme por la "pequeña" demora que he tenido con este capitulo, bueno... aquí lo tienen, espero que les guste y lo disfruten.
Lamento dejar de lado la parejita LXP, pero encontré que era muy justo que ella también se diera sus gustos ya que él no la ha pasado tan mal en EEUU.
UN BESO A TODOS!!
HASTA EL PROXIMO CAPITULO, MISMA HORA ( por lo menos se intenta), MISMO CANAL.