The Magic Cutting Edge
Capitulo 1: El sabor amargo de la derrota
La luz comenzó a entrar por la ventana, filtrandose de a poco. Eran las 7:00 de la mañana y un muchacho de aspecto cansado yacia acostado mientras una muchacha a su lado se acomodaba para dormir mejor. La noche los habia dejado exhaustos; 7:01 de la mañana. Casi 6 horas más tarde él despertó sobresaltado...
- Ya es la 1! Es la una de la tarde y tengo un juego! ¿Que diablos pasó con mi lechuza que no me despertó? Ya tendria que estar en el campo de Quidditch!!!- de inmediato empezó a vestirse y buscar sus cosas.
- ¿No dijiste a las nueve?- dijo la muchacha moviendose a su lado
- Si, solo tengo cuatro horas de retraso Rita- agarro su escoba, su tunica, su sweeter, su credencial y seguia buscando...
- ¿Rita?- la chica estaba confundida ¿Que ese chico no recordaba ni como se llamaba ella?
- No puedo creerlo... maldicion
- ¿Rita?- repitió ella en voz alta
- Mmm... ¿Lita?- la miró intentando recordar su nombre pero no recordaba nada
- ¿¡Lita!?- la chica se cubrió con la manta y lo miró disgustada
Sin embargo, el siguió recojiendo sus cosas y agarrando su bolso se dirigio a la puerta. Justo antes de salir por ella, se dió vuelta, miró a la chica e hizo el ultimo intento por recordar...
- Anita- dijo tirando un nombre como última opcion, pero evidentemente no fue lo mejor para decir en ese momento porque ella empezó a arrojarle almohadas, y demás cosas que habia a su alcance mientras gritaba: "Lolita! Me llamo Lolita!"
oooooooooooooooooooooooooooooooooo
Hogwarts. El lago estaba completamente congelado y las parejas practicaban sobre él. Dentro de dos días serían las finales del Tercer Campeonato Intercolegial, esta vez con sede en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechiceria. Una chica a lo lejos, lleva un vestido rojo y patina como si fuera la mejor. A su lado, su pareja intenta seguirle el paso. Todos los medios de prensa están alli, incluso Rita Skeeter. Un par de piruetas en el aire, musica producida por la varita del director, palcos de honor y todas las miradas puestas en ellos. Hacen una excelente pareja, al margen de ser los mejores patinadores. El puede levantarla con gracia en el aire, pero ella no logra sostenerse y cae golpeandose el trasero y levantandose enseguida...
- ¡Son los intercolegiales Granger! Por lo menos intenta fingir que no eres una completa incompetente- y la chica profirio un bufido de disgusto- ¿En donde crees que estás? ¿En un antiguo campeonato juvenil?
- No, según recuerdo en esa época, tu seguias humillandome en privado
- Tal vez era porque seguias escuchandome- dijo su entrenador y se acercó ondeando la túnica
- Pues si me volví sorda es porque te he tenido nueve años gritandome en el oído- dijo gritando euforica mientras se acomodaba el enmarañado cabello- Él no me está dando ningun apoyo- de a poco todos los periodistas se fueron acercando hacia ellos.
- En verdad quiero ganar Severus pero... así no es posible- dijo la pareja de la chica, disgustado. No soportaba su mal humor y sus caprichos.
- Quiero ver tu desgraciado trasero en el aire, Granger- gruñó Severus a la chica y el clima de tension seguia creciendo
- Hasta que el "Gran" Severus Snape logre sostener su ego, solo te daré esto- y se alejó patinando levantandose la pollera del vestido y mostrando su trasero cubierto....
Todos comenzaron a reir por la demostracion de la chica y por la cara de piel cetrina enfuerecida de Severus Snape. Las fotografias inundaron el hielo tomando ambos panoramas.
Mientras tanto alguien corria sin cesar. Encima de estar llegando tarde, una escalera le habia jugado una mala pasada dejandolo a la mitad de un pasillo. El campo estaba mojado y la hierba impregnaba el olor en su nariz profundamente. Pasó a los guardias que custodiaban las puertas del castillo durante el Torneo y siguio corriendo.
- Esto tiene que acabar ahora Hermione. Snape sabe lo que te conviene, él te trajo aqui y lo he soportado este tiempo solo para...- dijo el hombre frente a ella. Sabia demasiado bien que se referia a sus caprichos.
- Que tierno, nos deja luchar.
- Volverás alla, te disculparás con él e irás a trabajar
- Yo no apostaria eso "papá"- dijo y salio enardecida
- ¿A donde crees que vas?
- Estaré en mi celda si me necesitas, como la prisionera que soy- se fue corriendo hacia sus habitaciones en el castillo. Faltaban dos dias para las finales y necesitaba estar en sus cabales.
El Himno del torneo empezó a sonar mientras dos personas corren en sentidos opuestos para llegar a sus destinos. De repente, en el medio de la sinfonia, chocan entre si al doblar una esquina y sienten la hierba fresca.
- ¿Que rayos crees que haces?
- ¿Por aqui llego al campo de Quidditch?
- ¿Que?- estaba confundida y mojada por la hierba
- ¿Que si por aqui llego al campo de Quidditch?
- Es lo unico que piensas decir... ¿vienes de un establo?- se notaba enojada y lo miraba con rabia, tal vez no era solo ese muchacho
- Linda, de donde yo vengo, nos ponemos de pie al escuchar el himno- y se fue en direccion opuesta esperando que el campo de Quidditch se encontrara por alli.
Hermione estaba atónita ¿Quien demonios era ese chico tan grosero? Estaba tan furiosa que salio bufando disgustada en la direccion opuesta a la del chico.
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Los Franceses estaban demostrando que podian darle pelea al equipo de Hogwarts. El rubio estaba confundido buscando en la niebla del dia ¿Donde estaba la snitch? Dirigio su escoba hacia arriba intentando divisar la diminuta bolita antes de que Rui Napoleon, el buscador de Beauxbottom la encontrara primero. Dio muchas vueltas y observó como su equipo perdia por 10 puntos. Necesitaba la snitch pasara lo que pasara para ganar y él no podia permitirse perder, era un jugardor estrella. El numero 9 brillaba en su espalda y junto al escudo de Hogwarts estaba su nombre en letras doradas. Proviniente de una region oscura de Francia (Raims para ser más exactos) poco sabia de Gran Bretaña pero Hogwarts era su segundo hogar. Su padre estaba orgulloso de él por ser lo que era. Muchos gritos y victoreos de abajo, Hogwarts empataba el juego. Necesitaba esa snitch y justo cuando le parecio verla, supo que Rui Napoleon le pisaba los talones. Ambos jugadores volaron cerca de los arcos del colegio ingles y de pronto todo parecio en camara lenta. El frio en la nuca, la niebla rozando cada centimetro de su cuerpo y el sabor de la hierba. Una Bludger impusada por Cid Pierre, un golpedor lo dejó fuera de combate cayendo veinte metros hacia el suelo.
Veia todo borroso y solo cuando Rui Napoleon se paró a su lado, Draco Malfoy supo que ya no estaría conciente mucho más.
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La musica era perfecta. Miles de velas iluminaban el lugar en la noche. Los trajes especialmente elaborados para esa noche eran sensacionales. Patinaban con gracia y de seguro ganarian el certamen. Todos tenian la mirada puestas en ellos. Excelente estilo, una pareja sensacional: Hermione Granger y Harry Potter. Todos los periodistas y Severus Snape observando en la tribuna...
Y de pronto, Harry alzó a Hermione invocando toda su fuerza, un par de giros en el aire y el frio del hielo. Hermione sintió sus mejillas chocar contra el hielo y deslizarse lejos del cuerpo de Potter. Miles de flashes provenientes de las cámaras magicas la cegaron por completo y solo pudo ver la expresion sorprendida de Harry quien no la ayudaba a levantarse. La cara de furia de Severus, la cara de decepcion de "su padre" y todos riendose de ellos, el sonido de las cámaras sacando fotos y las risas estruendosas. Habian sido la vergüenza del torneo a solo 45 segundo de la medalla dorada del torneo... "Por favor que todo sea un mal sueño..." rezaba la chica a Merlín pero no.... todo era una debil realidad...
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- Tengo que ser sincero contigo Draco... haz perdido 18 grados de vision periferica en tu ojo derecho. En la mayoria de los casos solo es un inconveniente menor pero en tu caso...
- ¿Cuanto tardará en curar?- dijo el rubio con desesperacion al medimago que lo atendia unas semanas despues en la enfermeria de Hogwarts.
- Sufriste un trauma severo en el lóbulo oxipital, Draco- el doctor intentaba mantener el control
- ¿Cuanto tardará?
- ¡Tienes un lado ciego Draco! Entiendelo....
- Pero se puede curar ¿o no? Existen miles de pociones curativas, hierbas, animales, hechizos, algo...- intentaba buscar una esperanza...
- Será permanente. He trabajado en esto durante 22 años asi que temo que no hay nada que se pueda hacer...
- Bueno, tal vez usted no pueda hacer nada, pero en Francia, en algun otro lugar lo hacen. Tal vez en Bucarest, hay muy buenos medimagos que te inyectan algo en la nariz y te revuelven el ojo y...
- Draco.... lo siento. No veo el quidditch profesional en tu futuro- y en ese momento se sintio morir.
El quidditch lo habia mantenido vivo en muchos aspecto. ¿Que queria decir ese doctor? ¿Ya no podria jugar más quidditch? ¿Por que? ¿Por qué a él?
Todo era tan perfecto y de un momento a otro todo estaba arruinado, su carrera, su vida... su condenada vida.
Salió de alli con una sensacion amarga. No quiso ir a la ceremonia de despedida y estuvo todo el tiempo encerrado en su habitacion, tirado en su cama, con los doseles cerrados y en posicion fetal, tapandose los oidos, intentando evitar una realidad que no queria aceptar... ya no podría jugar Quidditch.
¿Que haria ahora con su vida?
Notas de la autora: Despues de tanto, una historia me inspira a escribirla. Me gusta muchisimo que esté escribiendo de nuevo. Lamento muchisimo que haya sido un capitulo tan corto pero es una especie de introduccion a la verdadera historia.
Besos, sigan leyendo un poco.
Battousai Tomoe
Every thing I do, I do it for you... Padfoot
