Hola, a todos espero que les siga gustando la historia, estamos a escasos 3
capítulos de acabar, sigan dejando sus Review y muchas gracias por leerlo
^^
Capitulo XIII
Ataque al ministerio
Los siguientes días constataron el cambio en Harry Potter, en su cerebro lo único que se repetía constantemente era la idea de tomar venganza, aprendió rápidamente el uso de las maldiciones imperdonables, su primera victima fue Draco Malfoy, el chico rubio de ojos grises hijo de Lucius Malfoy; el joven no deseaba recibir ordenes de un sangre sucia, fue entonces que sintió las dolorosas consecuencias. Harry le aplico varias veces la maldición cruciatus, hasta que el chico comprendió que no debía oponerse al joven discípulo del señor tenebroso. Pronto los hijos de los mortifagos se reunieron para formar esta nueva fuerza. Después de la destrucción de Hogwarts y la liberación de los prisioneros de Azkaban, el mundo mágico estaba sumido en el terror y zozobra. A pesar de que el ministerio de magia había movilizado a sus aurores y todas sus fuerzas se enfocaron en buscar el escondite de Voldemort, ahora que el había violado los lugares que se creían más seguros. La orden del Fénix busco un nuevo lugar de reunión, un lugar más seguro. Black se recuperaba de sus heridas, aunque las más profundas estaban en su corazón. Los magos que estuvieron presentes el día en que Kira murió, estaban visiblemente afectados, sus actos habían tenido consecuencias que no imaginaron. Por su parte Dumbledore había mantenido un hermetismo total con respecto a ese tema,; oyó pacientemente lo que había pasado y no dio ningún comentario acerca de lo sucedido. El día que llegó Snape, Dumbledore hizo reunir a los miembros de la Orden; durante largo rato permanecieron en silencio, Sirius no soportando tanta tensión fue el primero en hablar
—¿Ya saben quien era ella?¿Cómo lograba hacerse pasar por Lilly?—
Hubo un prolongado silencio, Dumbledore los miró a través de sus gafas de media luna
—Su nombre real era Millie Evans, era la hermana gemela de Lilly, fue educada por magos oscuros, en este mundo siempre hay un equilibrio entre el bien y el mal y las hermanas Evans eran el mejor ejemplo. Millie fue raptada porque sintieron la maldad que emanaba de ella y pensaron que podían sacar provecho de eso, nunca podríamos haber sospechado que ella utilizaría su parecido con Lilly para apoderarse de Harry. Ahora que ella ha muerto, todo ha cambiado. Ya no podemos perder más tiempo intentando recuperar a Harry. Voldemort está tomando fuerza, no tardará mucho antes de que empiece a matar—
Sirius oyó las palabras, su corazón se oprimió al comprender lo que acababa de decir
—¿A que se refiere?—
Los ojos del animago intentaban encontrar en el rostro del anciano alguna duda o confusión, pero no encontró nada
—Debemos aceptar que hemos perdido a Harry, nuestra prioridad es detener a Voldemort y sus seguidores—
Sirius se levanto de golpe de su asiento, Lupin lo veía en silencio
—¡NO!, debemos rescatarlo, podemos ir por él, no podemos permitir que siga al lado de Voldemort, tenemos que...—
La voz de Dumbledore retumbó en la habitación, aunque en ningún momento había alzado la voz
—Lo hemos perdido Sirius, debes entenderlo, con la muerte de Millie la esperanza de traerlo a casa murió con ella—
Sirius miró con odio al profesor de Pociones, se lanzó hacía él y lo tomó de la túnica
—Tu siempre odiaste a James, por eso ahora quieres vengarte de su hijo—
Snape veía a Sirius con desprecio
—Yo no fui el que mató a la mujer que creía su madre enfrente de sus ojos, ese cadáver estará ahí para recordarle cada momento de su vida lo que pasó esa noche—
Sirius lo soltó, Severus habló de nuevo
—El chico construyo un mausoleo para esa mujer, parece que la sangre del vampiro preservará el cuerpo por años como recuerdo de lo que hiciste—
Sirius se sintió devastado, él era la causa de que su ahijado se alejara de ellos para siempre, a pesar del odio resentimiento que sentía Snape por él, no pudo más que comprender lo que pasaba
—Harry Potter ha cambiado, en su corazón sólo hay dolor y sed de Venganza. No descansará hasta matarte y matará a todo aquel que se interponga en su camino—
Sirius cayó nuevamente en su asiento, su voz sonaba debil y cansada
—No es verdad, Mientes—
Dumbledore se acercó a Sirius
—Severus me ha contado que Harry ha hecho un pacto con Voldemort y ha empezado a utilizar las maldiciones imperdonables para demostrar su poder. Si no los detenemos, ellos podrían convertirse en una fuerza imparable, haremos lo que podamos para detenerlos, de una forma u otra. No es tu culpa Sirius, pero debes acerptar que ya no tiene remedio y aunque sea doloroso para todos, debemos pensar que en algun momento nos enfrentaremos a él—
Por su parte, Cornelius Fudge nunca imagino enfrentarse a una situación así, durante años se aferró a creer que Voldemort estaba muerto. Pero ahora su credibilidad estaba en peligro, había negado con todas sus fuerzas que el señor tenebrosos estaba vivo y ahora él regresaba para arruinarlo todo. Los habitantes del mundo mágico le exigían que hiciera algo para protegerlos. Pedía frecuentemente ayuda a Dumbledore , lo que lo hacía sentirse más frustrado. Se dejó caer en el sillón detrás de su escritorio, era de noche y hacía horas que todos se había ido. Oyó ruidos pero no les prestó demasiada atención hasta uqe ya era demasiado tarde, vio una sombra moverse a su izquierda y tomar su varita dejándolo indefenso, un hombre encapuchado apareció entre las sombras.
—Es un placer verlo señor ministro—
El hombre se quito la capucha dejando al descubierto su rostro con apariencia de serpiente, sus ojos rojos se clavaron en Fudge
—Este lugar es muy importante, los secretos que guarda, poderes inimaginables, es una tentación conservar este lugar, pero si alguien me traicionara, podría utilizarlo para destruirme, así que es mejor deshacernos de esta peligrosa arma y tu me vas a ayudar—
Fudge pudo ver a varios vampiros moverse a través de los pasillos, moviendo pequeños tambos y recipientes. Un siseo empezó a oirse y un penetrante olor empezó a inundar el lugar, Voldemort comenzó a hablar de nuevo
—Sabes, mis nuevos aliados me dieron esta idea, siempre he despreciado a los muggles y sangre sucia, pero he de admitir que su poder de destrucción es impresionante, los magos no estamos familiarizados con estas cosas, es facil engañarnos con extraños aparatos y sustancias que producen fuego, los vemos tan primitivos—
Voldemort se acercó más, Kaylee apareció a su lado sosteniendo la varita de Fudge
—Este lugar se está llenando de un gas que lois muggles usan para cocinar, en este momento está inundando cada rincón del ministerio, no puedes detenerlo, a cada lugar donde el aire pueda entrar será llenado lentamente, en ocas horas, no habrá lugar libre de el, entonces, ahí es donde, querido amigo, necesitaré tu ayuda IMPERIUS— Arthur Weasley estaba en cama enfermo a causa de un resfriado, aunque responsable como siempre deseaba ir a trabajar, Molly se negaba a dejarlo salir de la cama hasta qe tomará su medicina. 20 minutos después estaba preparado para salir cuando una lechuza entró por la ventana llevando un sobre de pergamino que dejó caer sobre la mesa de la cocina. Arthur pudo reconocer la caligrafía de Dumbledore en el sobre, de inmediato abrió la carta, estaba escrita con rapidez
"El ministerio fue atacado, debemos reunirnos ahora, se cuidadoso
A. D."
Capitulo XIII
Ataque al ministerio
Los siguientes días constataron el cambio en Harry Potter, en su cerebro lo único que se repetía constantemente era la idea de tomar venganza, aprendió rápidamente el uso de las maldiciones imperdonables, su primera victima fue Draco Malfoy, el chico rubio de ojos grises hijo de Lucius Malfoy; el joven no deseaba recibir ordenes de un sangre sucia, fue entonces que sintió las dolorosas consecuencias. Harry le aplico varias veces la maldición cruciatus, hasta que el chico comprendió que no debía oponerse al joven discípulo del señor tenebroso. Pronto los hijos de los mortifagos se reunieron para formar esta nueva fuerza. Después de la destrucción de Hogwarts y la liberación de los prisioneros de Azkaban, el mundo mágico estaba sumido en el terror y zozobra. A pesar de que el ministerio de magia había movilizado a sus aurores y todas sus fuerzas se enfocaron en buscar el escondite de Voldemort, ahora que el había violado los lugares que se creían más seguros. La orden del Fénix busco un nuevo lugar de reunión, un lugar más seguro. Black se recuperaba de sus heridas, aunque las más profundas estaban en su corazón. Los magos que estuvieron presentes el día en que Kira murió, estaban visiblemente afectados, sus actos habían tenido consecuencias que no imaginaron. Por su parte Dumbledore había mantenido un hermetismo total con respecto a ese tema,; oyó pacientemente lo que había pasado y no dio ningún comentario acerca de lo sucedido. El día que llegó Snape, Dumbledore hizo reunir a los miembros de la Orden; durante largo rato permanecieron en silencio, Sirius no soportando tanta tensión fue el primero en hablar
—¿Ya saben quien era ella?¿Cómo lograba hacerse pasar por Lilly?—
Hubo un prolongado silencio, Dumbledore los miró a través de sus gafas de media luna
—Su nombre real era Millie Evans, era la hermana gemela de Lilly, fue educada por magos oscuros, en este mundo siempre hay un equilibrio entre el bien y el mal y las hermanas Evans eran el mejor ejemplo. Millie fue raptada porque sintieron la maldad que emanaba de ella y pensaron que podían sacar provecho de eso, nunca podríamos haber sospechado que ella utilizaría su parecido con Lilly para apoderarse de Harry. Ahora que ella ha muerto, todo ha cambiado. Ya no podemos perder más tiempo intentando recuperar a Harry. Voldemort está tomando fuerza, no tardará mucho antes de que empiece a matar—
Sirius oyó las palabras, su corazón se oprimió al comprender lo que acababa de decir
—¿A que se refiere?—
Los ojos del animago intentaban encontrar en el rostro del anciano alguna duda o confusión, pero no encontró nada
—Debemos aceptar que hemos perdido a Harry, nuestra prioridad es detener a Voldemort y sus seguidores—
Sirius se levanto de golpe de su asiento, Lupin lo veía en silencio
—¡NO!, debemos rescatarlo, podemos ir por él, no podemos permitir que siga al lado de Voldemort, tenemos que...—
La voz de Dumbledore retumbó en la habitación, aunque en ningún momento había alzado la voz
—Lo hemos perdido Sirius, debes entenderlo, con la muerte de Millie la esperanza de traerlo a casa murió con ella—
Sirius miró con odio al profesor de Pociones, se lanzó hacía él y lo tomó de la túnica
—Tu siempre odiaste a James, por eso ahora quieres vengarte de su hijo—
Snape veía a Sirius con desprecio
—Yo no fui el que mató a la mujer que creía su madre enfrente de sus ojos, ese cadáver estará ahí para recordarle cada momento de su vida lo que pasó esa noche—
Sirius lo soltó, Severus habló de nuevo
—El chico construyo un mausoleo para esa mujer, parece que la sangre del vampiro preservará el cuerpo por años como recuerdo de lo que hiciste—
Sirius se sintió devastado, él era la causa de que su ahijado se alejara de ellos para siempre, a pesar del odio resentimiento que sentía Snape por él, no pudo más que comprender lo que pasaba
—Harry Potter ha cambiado, en su corazón sólo hay dolor y sed de Venganza. No descansará hasta matarte y matará a todo aquel que se interponga en su camino—
Sirius cayó nuevamente en su asiento, su voz sonaba debil y cansada
—No es verdad, Mientes—
Dumbledore se acercó a Sirius
—Severus me ha contado que Harry ha hecho un pacto con Voldemort y ha empezado a utilizar las maldiciones imperdonables para demostrar su poder. Si no los detenemos, ellos podrían convertirse en una fuerza imparable, haremos lo que podamos para detenerlos, de una forma u otra. No es tu culpa Sirius, pero debes acerptar que ya no tiene remedio y aunque sea doloroso para todos, debemos pensar que en algun momento nos enfrentaremos a él—
Por su parte, Cornelius Fudge nunca imagino enfrentarse a una situación así, durante años se aferró a creer que Voldemort estaba muerto. Pero ahora su credibilidad estaba en peligro, había negado con todas sus fuerzas que el señor tenebrosos estaba vivo y ahora él regresaba para arruinarlo todo. Los habitantes del mundo mágico le exigían que hiciera algo para protegerlos. Pedía frecuentemente ayuda a Dumbledore , lo que lo hacía sentirse más frustrado. Se dejó caer en el sillón detrás de su escritorio, era de noche y hacía horas que todos se había ido. Oyó ruidos pero no les prestó demasiada atención hasta uqe ya era demasiado tarde, vio una sombra moverse a su izquierda y tomar su varita dejándolo indefenso, un hombre encapuchado apareció entre las sombras.
—Es un placer verlo señor ministro—
El hombre se quito la capucha dejando al descubierto su rostro con apariencia de serpiente, sus ojos rojos se clavaron en Fudge
—Este lugar es muy importante, los secretos que guarda, poderes inimaginables, es una tentación conservar este lugar, pero si alguien me traicionara, podría utilizarlo para destruirme, así que es mejor deshacernos de esta peligrosa arma y tu me vas a ayudar—
Fudge pudo ver a varios vampiros moverse a través de los pasillos, moviendo pequeños tambos y recipientes. Un siseo empezó a oirse y un penetrante olor empezó a inundar el lugar, Voldemort comenzó a hablar de nuevo
—Sabes, mis nuevos aliados me dieron esta idea, siempre he despreciado a los muggles y sangre sucia, pero he de admitir que su poder de destrucción es impresionante, los magos no estamos familiarizados con estas cosas, es facil engañarnos con extraños aparatos y sustancias que producen fuego, los vemos tan primitivos—
Voldemort se acercó más, Kaylee apareció a su lado sosteniendo la varita de Fudge
—Este lugar se está llenando de un gas que lois muggles usan para cocinar, en este momento está inundando cada rincón del ministerio, no puedes detenerlo, a cada lugar donde el aire pueda entrar será llenado lentamente, en ocas horas, no habrá lugar libre de el, entonces, ahí es donde, querido amigo, necesitaré tu ayuda IMPERIUS— Arthur Weasley estaba en cama enfermo a causa de un resfriado, aunque responsable como siempre deseaba ir a trabajar, Molly se negaba a dejarlo salir de la cama hasta qe tomará su medicina. 20 minutos después estaba preparado para salir cuando una lechuza entró por la ventana llevando un sobre de pergamino que dejó caer sobre la mesa de la cocina. Arthur pudo reconocer la caligrafía de Dumbledore en el sobre, de inmediato abrió la carta, estaba escrita con rapidez
"El ministerio fue atacado, debemos reunirnos ahora, se cuidadoso
A. D."
