¿Ellos¿Ellas¿Quiénes?

By: Amaranta Riddle

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DISCLAIMER: todos los personajes conocidos son propiedad de la WB y J. K. Rowling y son utilizados sin fines de lucro

N/A: Este Fanfic contiene Flash, contenido homosexual tanto de hombres como de mujeres, no me hago responsable de los daños mentales que pueda causar en el lector. Contenido no apto para menores de 16 años.

RESUMEN: Una locura de la autora, contiene personajes tomados de una serie de TV. Que espero reconozcan ustedes, dedicado con mucho cariño a FAY HUBBLE (snitch, sis') y a BELLATRIX LESTRANGE (bloody, má') ‚?Disfruten y no olviden el comentario!

AGRADECIMIENTOS: A quienes leen mi fic sin dejar comentarios y sobre todo a aquellas dos personitas lindas que lo han dejado, muchas gracias... espero que les guste lo que a continuación, prometo hacerlos más largos.

CAPÍTULO 3:

La Madriguera: De Vuelta Al Hogar

Dos días pasaron como granos de arena en un reloj gigante, Harry contaba los minutos para escuchar la llegada de quienes lo llevarían de vuelta al hogar.

¡POTTER!- la voz enfadada de Tío Vernon lo sacaba de sus pensamientos en ese momento -¡Ven aquí ahora mismo!

Al bajar pudo ver a tres personas vestidas de riguroso traje negro con un fénix bordado en la solapa del abrigo, gafas oscuras y sombreros de ala.

Estos hombres te buscan- comentó Vernon enfadado -¡Espero que no estés metido en un lío!

Por un momento Harry no los reconoció, aunque al observar que uno de ellos era una chica por el corto de la falda se tranquilizó un poco. Ella bajó un poco los anteojos y le hizo un guió a Harry que se encontraba confundido en las escaleras.

¡No lo creo!- exclamó Harry –"Tunks es toda una mujer"- pensó

Trae tus cosas, Harry- dijo Alastor sin moverse de su posición; manos a la espalda, semblante serio y mirada al frente.

Con permiso Sr. Dursley- dijo de pronto Tunks quitándose el sombrero para dejar ver cómo su cabello pasaba del castaño al rosa con facilidad. Vernon miró nervioso hacia la calle, no había querido hacer pasar a los extraños.

Por un momento no los reconocí- dijo Harry a Tunks mientras subían el resto de la escalera

Dumbledore creyó que sería buena idea ahora que el ministerio sabe sobre la Orden- explicó la chica.

La Sra. Weasley me comentó que América envió refuerzos ¿crees que sirvan de algo?- preguntó curioso el chico

En realidad pasa algo curioso, la mayoría de ellos tienen el empuje y la capacidad necesaria, pero carecen de preparación adecuada; los de la Orden estamos preparando a aquellos que pudieran ser más útiles… ¡Hasta Snape tiene un pupilo!

Y… ¿Qué tal les va?

No muy bien, las técnicas que ellos emplean son demasiado diferentes a las nuestras¡Son unos salvajes!

Eso no se oye bien

Locomotor Tuck- exclamó Tunks apuntando al baúl con la varita, haciendo que levitara –además hay muchos de ellos que ya pueden hacer magia sin la varita

No sabía que eso pudiese hacerse- comentó Harry asombrado

Se necesita mucho autocontrol, en realidad la varita es solo un instrumento conductor de la magia, por ello siempre apuntamos a dónde queremos, pero se puede hacer magia sin usar la varita. Academias como Cacle y Salem son expertas para enseñar a usar la magia sin la varita– Tunks conducía el baúl escaleras abajo, posándolo a los pies de Vernon quien estalló en ese momento

¡Cómo se atreven a hacer eso en mi casa¡Son unos anormales inútiles al igual que este…!

¡Cuide su boca Sr. Dursley!- advirtió Moody aún sin moverse pero con voz decidida

Solo hacemos nuestro trabajo- añadió Artur tomando a Hedwig

¡Despídete del señor, Harry!- dijo Moody –no lo verás hasta el próximo Verano

Hasta luego- dijo Harry sin respuesta, tampoco era que la esperara

Ojoloco le dirigió una mirada significativa y salieron, Tunks hizo un cambio más de color al salir y se puso el sombrero dejando a los Dursley al borde de la histeria.

Bien, Harry- llamó Alastor -¿Qué tal tus vacaciones?

No me puedo quejar- respondió alegre

¡Supe que tuviste visitas!- comentó la chica pícara

Luna fue a visitarme el día de mi cumpleaños, me pareció un bonito detalle- comentó

Bienvenidos al Autobús Noctámbulo, el sistema de transporte para magos y brujas desvalidos ¿A dónde los llevo?

Al Caldero Chorreante- dijo Artur

Bien… cuatro al Caldero Chorreante… cuatro Sickles por favor

Moody pagó, se acomodaron en la parte trasera del autobús y Tunks decidió que sería agradable conversar con Harry y éste accedió.

¿Por qué iremos al caldero chorreante?- preguntó Harry curioso

Hay algunas cosas que arreglar- contestó Tunks –Además debes tener hambre y necesitarás algunas cosas en el Callejón Diagon

¿Algunas cosas¿Cómo cuáles?- preguntó

Un par de Túnicas de Gala para empezar, además no sería mala idea comprar las cosas para la escuela de una vez- respondió Artur

Hermione llegó ayer de su viaje- comentó Tunks entusiasmada –tal vez mañana pueda estar con nosotros

Tal vez quiera estar con su familia- dijo Harry

Ha viajado con ellos– Explicó la chica –además debe estar ansiosa por contarnos sobre su viaje y sobre Krum

Yo sé de alguien que no lo estará- sonrió Harry –Hermione me envió una foto, se veía muy feliz al lado de Krum

Es un buen chico, creo que la pasaron bien- comentó Tunks

Eso lo sé- dijo Harry –pero no creo que sea lo que ella esté buscando

¡No¡Harry¡Por Merlín¡No me digas que estás celoso!

¡NO¡Yo no!- saltó el chico -¡Lo decía por otra persona!

¡Creo saber a qué pecas te refieres!- rió la chica antes de ser interrumpida bruscamente por Stan

¡El Caldero Chorreante!- gritó el chico.

Varias personas bajaron allí, Tunks bajó detrás de Harry que le extendió la mano cortésmente. Entraron en el establecimiento Moody los dirigió a un lugar apartado, allí se encontraron a los demás miembros de La Orden del Fénix, perfectamente uniformados con excepción de Severus Snape, quien vestía su habitual túnica negra.

¡Bienvenido, Harry!- lo recibió Dumbledore con voz gallarda –les ruego tomen asiento, entre más rápido comencemos, más rápido nos iremos a hacer nuestros deberes.

Junto al anciano, tomaron asiento Tunks y Severus, uno a cada lado. Ambos tenían grandes trozos de pergamino y sendas plumas que alistaron al momento en que se sentaron.

Comencemos con los asuntos de Hogwarts- dijo el anciano –Severus, por favor

Los puntos son…- comenzó el hombre –No. 1: el ingreso de estudiantes extranjeros y de escuelas ajenas a Hogwarts

Minerva- dijo Albus -¿Acaso han llegado más solicitudes para Hogwarts?- preguntó el anciano

Me temo que si, Albus- contestó la profesora con gesto alarmado –aún no sé que hacer con todas las que llegan, la escuela no tiene lugar para tantos estudiantes

Supongo que habrá que rechazar a muchos- dijo Dumbledore más para sí mismo que para los demás

No podemos cerrarle las puertas a quienes vienen buscando ayuda, Albus- dijo Remus que no había hablado en mucho tiempo –Ellos cuentan con un lugar seguro para terminar la escuela y tal vez sobrevivir otro año

Se pueden abrir cursos especiales para esos alumnos en Hogwarts- dijo Tunks

Eso sería como discriminarlos- comentó el licántropo

Entonces ¿Qué sugieres?- preguntó hostil el profesor de Pociones

Desgraciadamente no todas las escuelas son afines al programa de estudios de Hogwarts- contestó el castaño –lo primero es conseguir información con respecto a los programas de estudio de las escuelas solicitantes, posteriormente complementar nuestra tira de materias conforme a las escuelas aceptadas, lo que implica…

Abrir nuevas plazas para nuevos profesores- completó Albus jugueteando con su barba en forma pensativa, pareciera que algo en su cabeza comenzaba a trabajar a gran velocidad –Minerva¿puedes hacer un listado de los profesores mejor capacitados? Además tendrás a tu cargo investigar todo lo que puedas y ver qué estudiantes son los más aptos para Hogwarts…

¿Qué pasará con el resto?- preguntó la mujer

Pueden ser enviados a Beauxbatons- dijo Hagrid con entusiasmo –Es una escuela muy buena y está muy bien protegida, supongo que Madame Maxim estará encantada con la idea

Esa es una muy buena idea, Hagrid- comentó Albus –Tú te encargarás personalmente de hablar con Madame Maxim y serás el encargado de reportarme cualquier inconveniente, te encargarás de hacer un reporte semanal de actividades

Entendido Profesor Dumbledore- dijo Hagrid –No le fallaré.

Toda la junta transcurrió entre algunas discusiones comenzadas extrañamente por Molly Weasley, que hacía comentarios irónicos y sarcásticos a cada cosa que Tunks decía y no perdía oportunidad para atacarle.

Desafortunadamente para ellas, Dumbledore nombró a Tunks la guardiana oficial de Harry en casa de los Weasley por lo que Molly dio un suspiro de resignación y se limitó a ignorar a la chica. Dumbledore ofreció allí mismo el puesto de profesor de Cuidado de Criaturas Mágicas a Charlie Weasley, quien aceptó entusiasmado la oferta; se volvió a abrir el club de Duelo pero esta vez como una clase obligatoria, el profesor sería sin lugar a dudas Remus, quien también aceptó la invitación. El puesto de profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras ya estaba dado para sorpresa de todos los presentes.

¡Señor Snape!- llamó un muchachito alarmado, con la cara pálida -¡Hay problemas¡Está en peligro!

Severus salió corriendo y Dumbledore dio por terminada la junta, cada quien tenía una labor especial encomendada y la de Harry sería ayudar a que ese año todas las casas cooperaran para mantener la paz y la tranquilidad.

Harry se reunió con Ron y Ginny en el bar, comieron algo y procedieron a hacer las compras escolares entre relatos del verano y comentarios sobre Quidditch que omitían intencionalmente la participación de Krum en algún partido importante.

¡tengo una idea!- exclamó Ron -¿Por qué no visitamos a los gemelos?

¡Ni lo piensen!- exclamó Molly que había estado reacia a visitar el lugar durante el verano a pesar de las invitaciones y ruegos que los gemelos y todos sus hijos hacían –Harry debe estar cansado por el viaje

En realidad- dijo Harry –me gustaría visitarlos, me han dicho que son todo un éxito.

Molly suspiró resignada y los llevó dónde los gemelos, la tienda estaba a reventar de chiquillos que tomaban las muestras gratis y leían las etiquetas de cada una de las diferentes bromas que había en el lugar. Fred se encontraba en caja y George empaquetando y haciendo cuentas.

¡Harry!- exclamó George al verlo entrar frente a Molly -¡Veo que lograste convencerla!

¡Creímos que nunca te veríamos por aquí!- exclamó Fred -¡Ahora vemos a quien acudir cuando queremos convencerte de algo!

No puedo decir que es un placer para mí estar en este lugar- dijo Molly

¡Vamos mamá- exclamó Ginny -¡Dales un poco de crédito¡Por lo menos les está yendo bien!

Además- añadió Ron –Disfrutan lo que hacen, papá dice que eso es lo importante

Veo que les está yendo de maravilla- dijo Harry recorriendo la tienda con la mirada –y que han inventado nuevas cosas

¡Siempre innovando!- dijo Fred

No podemos aflojar el paso si queremos seguir como hasta ahora- comentó George con seriedad

¿Cómo es que les da tiempo para algo así?- preguntó entusiasmado

Ron y Ginny nos ayudan de vez en cuando, mamá supo que venías y…

Decidió que sería mejor que se quedaran a recibirte- completó Fred

¡No es agradable tener a este par como jefes!- exclamó Ron divertido -¡Te lo digo en serio!

Bueno, Ron- comentó sarcástico Fred –Tampoco eres el empleado del año

Harry compró algunas cosas a escondidas de Molly, se despidieron de los gemelos después de ayudar un poco y de que Harry repartiera algunos autógrafos por petición de ambos y se marcharon a casa. Tunks se instaló en el cuarto de Percy por petición de Artur.

Hermione llegó al siguiente día tal como lo había dicho la chica en el autobús; habló entusiasmada de su viaje y de su visita a Krum, de todo lo que el chico le había mostrado y todo lo que había aprendido de sus costumbres y su cultura. Se había ganado los suspiros y miradas ilusionadas de Ginny y Tunks y los gestos y resoplidos indignados y burlones de Ron.

¡Ya me tienen harto!- profirió a solas con Harry mientras se preparaban para dormir

¿Qué¿Quiénes?- preguntó el moreno despistado

¡Ellas!- exclamó -¡Krum esto¡Krum aquello!...

¿Por qué no lo aceptas, Ron?- preguntó Harry divertido -¡Estás celoso!

¡Por qué habría de estarlo!- exclamó Ron más rojo que su cabello y tropezando con un intento de Bludger que había dejado allí después del partido casero con Bill y Charlie

Espero que lo aceptes antes de que sea tarde y alguien más se te adelante- comentó tapándose y volteándose.

Aquellos días en La Madriguera fueron días de ensueño para Harry, cada mañana ayudaban a la Sra. Weasley con los quehaceres, por las tardes después de comer ayudaban a Fred y George con la tienda. Las comidas eran lo que más le agradaba a Harry, las conversaciones cada día eran más interesantes, además de que Charlie y Tunks parecían haber hecho buenas migas, en ocasiones entablaban charlas tan largas que terminaban hartando a los demás habitantes y se convertía en una conversación entre dos. Los fines de semana los chicos armaban partidos de Quidditch casero que las chicas veían entre cuchicheos y risillas.