¿Ellos¿Ellas¿Quiénes?

By: Amaranta Riddle

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DISCLAIMER: todos los personajes conocidos son propiedad de la WB y J. K. Rowling y son utilizados sin fines de lucro

N/A: Este Fanfic contiene Slash, contenido homosexual tanto de hombres como de mujeres, no me hago responsable de los daños mentales que pueda causar en el lector. Contenido no apto para menores de 16 años.

RESUMEN: Una locura de la autora, contiene personajes tomados de una serie de TV. Que espero reconozcan ustedes, dedicado con mucho cariño a FAY HUBBLE (snitch, sis') y a BELLATRIX LESTRANGE (bloody, má') �¡Disfruten y no olviden el comentario!


CAPÍTULO 6:

Comienzo De Clases… Empiezan Los Problemas.

-Nos preocupaste anoche- dijo Ron desde su lugar en el comedor durante el desayuno –tardaste demasiado¿qué sucedió?

-El profesor Snape nos descubrió y nos ha dado detención- dijo tranquilamente sirviéndose un poco de zumo de calabaza y un par de tostadas

-¡No aprendes!- dijo Hermione -¡Te metes en problemas desde antes de comenzar las clases¡Es el colmo!

-No fue su culpa, Hermione- dijo Mildred –después de todo fue Malfoy quien pidió hablar con él

-No dudo que haya sido una trampa- dijo Ron con enfado

-No fue una trampa- repuso Harry tratando de no gritar –y aunque fue Malfoy quien pidió hablar conmigo, yo no me negué y fui descubierto rompiendo las reglas… eso es lo justo

-Como digas- dijo Mildred concentrándose en su desayuno, mientras los otros dos se quedaban de piedra ante el comentario.

Harry volteó a la mesa de profesores, en dónde la profesora Lovegood y McGonagall sostenían una acalorada discusión a juzgar por los rostros de cada una, mientras Snape y Ogrum permanecían como si nada pasara a pesar de estar uno a cada lado del singular dueto. La profesora Lovegood se levantó y se retiró, mientras Ogrum y McGonagall comenzaban una amena charla. Snape terminó poco después y salió justamente por dónde la chica había salido con actitud indiferente.

Draco y Harry voltearon a verse, pero alguien se plantó frente a Harry, evitando el contacto visual entre ambos.

-Hola, Harry- dijo la chica con voz ansiosa

-Cho…- saludó el chico indiferente

-Solo quería decirte que fue algo muy lindo lo que hiciste ayer, eso de olvidar tus diferencias con Malfoy y darse la mano justo frente a todo Hogwarts…

-¿Si?- preguntó Harry nervioso –Gracias…

-Y… bueno- dijo más nerviosa aún –solo quería darte esto… - completó dando a Harry un apasionado beso en los labios.

Harry se quedó pasmado, definitivamente eso era algo que no se esperaba, cuando pudo reaccionar, separó a la chica delicadamente al no poder responder el beso.

-¿Qué sucede?- preguntó ella -¿Acaso no te ha gustado?

-Yo… Cho…- balbuceó el chico mirando nervioso a la mesa de Slytherin, pero no vio lo que esperaba ver, así que miró nervioso a otro lado –yo…

-Comprendo- dijo la chica cayendo en cuenta –Hay alguien mas…- dijo tristemente

-No es eso- dijo Harry –Es solo que no me lo esperaba y… no creo que sea el mejor momento- dijo

La chica se retiró y cuchicheó algo con sus amigas, Harry volvió a su búsqueda pero no encontró nada… mejor dicho a nadie….

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Se hallaba allí, sentado en su silla contemplando el esplendor del lago, sería un buen día, ni demasiado nublado ni demasiado soleado… pero no comprendía ese sentimiento…

-No lo comprendo- se decía a sí mismo -¿Por qué me provoca esto¿Por qué no puedo dejar de desear ser yo quien bese esa boca¿Por qué quiero lanzarme sobre ella y destrozarla dolorosamente…¿Por qué soy yo quien tiene que mendigar su amistad mientras ella lo tiene a sus pies¿Por qué no puedo dejar de sentirme celoso y miserable?

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-¡Rayos!- exclamó Harry en voz alta ante la atónita mirada de sus amigos.

-¡Harry!- exclamaba Ron escandalizado -¡Acabas de rechazar a tu gran amor!

-No digas tonterías, Ron- espetó el chico –lo que no fue ya no será jamás, no soy un chico fácil y ella perdió su oportunidad….

-¿Te vas a quedar aquí discutiendo o vas a ir por lo que te acongoja?- preguntó Luna Lovegood detrás del chico. –Si no corres no alcanzas

-¡Gracias Luna!- dijo Harry levantándose y saliendo del lugar a toda prisa.

Encontró al rubio frente al lago aunque él mismo le había dicho que tendría que estar en los invernaderos, sin embargo, aún faltaban diez minutos para las clases.

-¡Malfoy!- exclamó el chico –Te he estado buscando

-¿En serio?- contestó escéptico –creí que estarías ocupado con tu novia de Hafflepuff

-Cho no es mi novia- dijo Harry sereno –alguna vez me causó curiosidad, pero en realidad… no hubo algo que me hiciera desear seguir con ella.

Aún no lo comprendían, el moreno sentía una gran necesidad de explicarse con el rubio, y a éste último le causaba un gran placer escucharle decir esas cosas al moreno.

-¿Por qué me lo dices, Potter?

-No lo sé- dijo con un ligero sonrojo –supongo que si vamos a ser amigos deberá haber confianza entre nosotros ¿no?

-Supongo que tienes razón- contestó el rubio -¿viste lo que pasó en la mesa de profesores?

-No alcancé a escuchar lo que hablaban

-Sobre algo de la Profesora Lovegood, al parecer a McGonagall no le agrada mucho, no creo que sea de su entera confianza…

-¿Crees que tu padrino tenga algo que ver con esto? Parece agradarle

-Extraño tratándose de un Profesor de DCAO

-Corrección- dijo Harry levantando un dedo Profesora de DCAO…

-¿Profesora?- repitió Draco con picardía –Sería algo interesante que ver

-Yo me iría con cuidado, Draco, el profesor Snape es muy especial respecto a su intimidad, además… ¡no querrás verlo enfadado!

-Aún así- dijo el rubio serio –tengo curiosidad

-¿de verle enfadado?- bromeó Harry

-¡No!- rió el rubio –de saber qué está pasando

-Te ves muy bien cuando sonríes- dijo Harry con un ligero sonrojo en las mejillas, mirando hacia el lago –deberías hacerlo más seguido

-Había olvidado que podía hacerlo- dijo con nostalgia el rubio sonrojándose ante el comentario

-¡Draco!- llamaba una voz a lo lejos

-¡Es Zabini!- exclamó el rubio

-Debo irme- dijo Harry dando media vuelta

-¡Te ver�!- dijo Draco deteniéndolo

-¡Draco!- la voz se escuchaba más cercana

-Merlín… perdóname por favor- dijo Harry cambiando por completo su expresión a una de enfado -¡Maldito Malfoy¿Crees que soy tan tonto como para caer en tu juego?

-No tengo por qué jugar con nadie, Potter- dijo el rubio captándola y cambiando su expresión al ver al chico que llegaba –después de todo no soy ninguna celebridad- añadió en tono burlón y despectivo

-Yo tampoco lo soy, Malfoy; pero tampoco soy ningún tirano frívolo y caprichoso que se creé merecer todo por ser un "sangre limpia"

-¡No permitiré que le hables de ese modo a Malfoy, Potter!- interrumpió Zabini –No eres nadie para…

-¡No Zabini!- dijo Draco indiferente –No gastes saliva en un perdedor Gryffindor como él

-Como digas- dijo el chico –La profesora Sprout te busca, llegas tarde a clase… ¡No deberías meterte en problemas, Potter!- Añadió de modo amenazante

Harry lo miró fríamente, su mirada gélida le reprochaba la interrupción más que las palabras que le dirigía. Un escalofrío recorrió al Slytherin que empujaba la silla de Draco, no pudo evitar sonreír con malicia.

Por otro lado, en las mazmorras, un par de oscuras figuras caminaban en silencio una al lado de la otra.

-¿Qué sucedió?- preguntó el hombre sereno y casi indiferente

-Ella me odia, lo sé, desacredita todo lo que digo o hago- dijo la chica apretando con fuerza los puños –No comprendo que pude hacer o decir para que tuviera esa actitud conmigo desde un principio, en verdad logra sacarme de mis cabales

-¿Qué te ha dicho, Amaranta? No sueles ser tan explosiva

-¡Por Merlín, Severus!- exclamó golpeando la pared de piedra sólida con el puño, logrando desmoronar unos cuantos pedazos –supongo que no soy la mejor Auror, pero me estoy esforzando para lograrlo, tampoco soy la mejor persona pero respeto a los demás y no me meto con nadie… ¡Pero se atrevió a nombrar a mi padre y a insultar a mi madre…! No fueron los mejores padres, pero ellos ya no están aquí para defenderse…

-Amaranta- dijo el hombre tomando la mano con la que la chica había golpeado la pared, se hallaba lastimada y sangraba –será mejor que te tranquilices, Minerva no tenía una buena relación con tus padres, no es justificación, pero sin duda tiene sus motivos, no suele comportarse así.

-No comprendo Severus- dijo siguiendo al profesor tras la puerta de su despacho -¿Qué pude hacer yo para merecer el trato que ella me está dando¿Por qué la persona que más admiro de pronto olvida la cordura conmigo?

-No lo sé- dijo el hombre sereno curando la mano de la chica –Esto no se ve bien, Amaranta…

-¡Auch!- exclamó al sentir el líquido que Snape vertía sobre su mano –ya sanará… gracias

-No hay por qué darlas, pero sería mejor que olvidaras esa costumbre de golpear las paredes o harás que Hogwarts se venga abajo

-Tengo mucho que agradecerte y no sé como hacerlo… me has aguantado tanto tiempo… sacas fuerza y paciencia para enseñarme cosas en las que creo estar negada…

-No digas eso- dijo el hombre sereno revisando si la chica tenía algún dedo roto –Eres muy fuerte y perfectamente capaz de hacer lo que te propongas.

-Gracias, Severus, es lo que más aprecio de ti, eres el único que cree en mí lo suficiente como para ofrecerse a ser mi institutor…

-Ahora- dijo el hombre tomando un viejo guante que cubría hasta la muñeca y carecía de las puntas de los dedos, lo colocó cubriendo la venda que había puesto sobre las heridas –tendrás que llevarla por un tiempo

La chica rió, la presencia del hombre la hacía sentir segura y tranquila, además le gustaba saber que él confiaba en ella y que aunque con el resto del mundo se portaba hostil y reservado, con ella podía ser diferente, dejando todo eso de lado.

-Eres mejor medimago que Poppy, pero no le digas nada

-No lo haré- dijo el hombre –aunque debo confesar que solo sé curar esas heridas, yo mismo me he roto un par de huesos por hacer eso anteriormente…

-Eres un gran hombre, Severus- le dijo la chica tiernamente mientras salían del despacho

-No se lo digas a mis alumnos, no volverán a tomarme en serio… y deberás prometerme que no volverás a tomar en cuenta los comentarios de Minerva

-Te lo prometo.

Ambos pusieron nuevamente un semblante indiferente y se dirigieron a la sala de maestros con esa actitud desenfadada que los caracterizaba.

-¡Harry!- llamó Mildred -¿por qué no entraste a la clase del Profesor Bins? Estuvo preguntando por ti

-No me sentía bien- dijo Harry –fui a la enfermería- mintió

-¿Ha sido la cicatriz?- preguntó Hermione alarmada -¡Harry, si ha sido la cicatriz lo mejor sería que fueses con…

-¡Déjalo respirar, Hermione!- exclamó Ron –Tal vez solo fue un dolor de cabeza ¿cierto, Harry?

-En realidad fue el estómago- dijo Harry

-Tal vez los efectos secundarios de ese "apasionado beso"- rió Mildred

-¡Qué simpática!- exclamó el chico sarcástico –será mejor que lleguemos a Herbología

-¿Me puedes decir por qué saliste corriendo del comedor esta mañana?- preguntó Hermione –y ¿a qué se refería Luna con su comentario?

-¡Luna!- exclamó el chico –Debo agradecerle y… preguntarle algo….

-¡Harry!- exclamó Hermione enfadada –no me has contestado mis preguntas

-No has pensado que quizá no quiera hacerlo, Hermione?- preguntó Mildred enfadada

-No te metas, Hubble- dijo la castaña enfadada –Harry "tiene que contestarme"

-En realidad no tengo que hacerlo, Hermione- dijo el moreno –y Mildred tiene razón, además… no me agrada el tono que usas para hablarle

-¡Vaya!- exclamó una voz familiar frente a ellos -¡El trío dorado tiene problemas!

-¡No molestes, Zabini!- dijo Ron poniéndose a la defensiva

-¡Ron!- llamó Harry –será mejor que lo ignores, no podemos empezar mal…

-¡Un acierto para Potter!- exclamó una voz melosa detrás de Zabini –nunca me imaginé que te escucharía decir algo coherente, Potter

-Tal vez sea algo que pocos logramos hacer, Malfoy- dijo respondiendo a su agresión

-No veo por qué perder tiempo con estos… perdedores- dijo petulante una voz de chica, muy diferente a la de Pansy Parkinson –En especial cuando son ellos los que se meten en problemas sin necesidad de provocarlo… ¿Cierto, Mildred?

-Déjame tranquila, Ethel- dijo la chica fastidiada

-Malfoy… creo que ambas casas tenemos clases- dijo Harry comenzando a hartarse de la situación, notando que el rubio comenzaba a sentir lo mismo –No podemos estar perdiendo tiempo en discusiones estúpidas

-Tienes razón, Potter- dijo Malfoy comenzando a moverse.

El día avanzó sin más, hasta la clase de pociones fue más tolerable, Harry había logrado concentrarse en su poción a pesar de que le habían sentado junto a Draco Malfoy, inclusive habían trabajado en perfecta sincronía sin siquiera dirigirse una palabra. El profesor los miraba atentamente, al parecer Harry no se había equivocado con respecto a Malfoy, la compañía de Potter le hacía muy bien a su ahijado.

-Potter, Malfoy- llamó el profesor mientras entregaban las pociones enfrascadas al final de la clase, la que ellos habían hecho bien –quédense un momento

Los amigos de Harry le miraron, parecía que fuera cualquier profesor en una situación completamente normal, inclusive compartía la máscara de indiferencia de Malfoy. Harry les hizo una seña para que se fueran y ayudó… ¡un momento¡Ayudó a Malfoy a guardar sus cosas!

Todos los estudiantes habían salido ya, la puerta se cerró al salir el último alumno, dejando solos a los tres personajes. El mayor tenía la botellita de la poción de ambos chicos entre sus dedos y la observaba con curiosidad.

-No lo entiendo- decía más para sí mismo que para ambos chicos –Hasta hace poco, Sr. Potter, usted era una calamidad… siempre distraído, ausente, inclusive…

-No creo que nos haya hecho esperar para hablar de mi desempeño en clase ¿cierto, profesor?

-Bien, Potter, debo aceptar que su conducta desde hace unos días ha cambiado… y me intriga…

-no veo el motivo de su intriga- dijo el chico –además… no creo que siendo como era pueda llegar muy lejos…

-Lo que más me extraña, señor Potter, es su extraña confianza tan repentina en mi persona… creí que me detestaba…

-Hasta hace un tiempo así era- dijo –hasta que comprendí algo… como le dije el día de la lectura del testamento de mi padrino, el estar tanto tiempo aislado en casa de mis tíos me ayudó a pensar y recapacitar sobre muchas cosas

-incluyendo a su profesor de pociones- dijo el hombre intrigado

-incluyendo a mi profesor de pociones… creo, profesor, que usted y yo hemos sido influenciados tremendamente por nuestros prejuicios y una estúpida primera impresión ¿cierto? A partir de allí, hemos basado un trato mutuo de hostilidad y cierto rechazo… me gustaría cambiar mi opinión con respecto a usted… después de todo…- dudó el chico

-…después de todo, Sr. Potter- cuestionó el hombre intrigado

-después de todo usted ha sido el único que no me ha ocultado nada… ni siquiera su desagrado hacia mi persona…

-No lo comprendo Sr. Potter, creí que le agradaba…

-¿ser tratado con conmiseración?- preguntó triste –A nadie le agrada eso, lo único que quiero es poder prepararme para enfrentar lo que me espera, profesor, me ocultan tantas cosas que no puedo llegar realmente preparado a la batalla, Malfoy y usted tienen razón en cuanto al hecho de que he estado venciendo a Voldemort por casualidades, además de que cansa el hecho de enterarte que la persona más honesta contigo ha sido aquella que trata de destruirte… dígame, profesor… ¿dudaría usted de alguien que ha sido completamente sincero con usted desde el principio?

-No- dijo Malfoy con determinación –más dudaría de aquellos que me ocultan las cosas, creería que no quieren darme armas para la batalla

-Nunca ha sido esa la intención de Dumbledore- sentenció el hombre asombrado –su intención es evitarle el…

-¿el sufrimiento¿Las preocupaciones?- preguntó exasperado el muchacho -¿creé que quitándome las armas pueda yo solo con mi varita derrotar al mago más peligroso del mundo?

-Tal vez puedas intentarlo

-¡Lo intento!- exclamó –lo he intentado durante cinco años, he visto morir gente que nada tenía que ver en esta guerra, gente que ni siquiera sabe de la existencia de este mundo… y gente que he apreciado, admirado y amado…

-Pero… eres "el-niño-que-vivió"- dijo el hombre –"el niño de oro de Hogwarts"…

-¡Por Merlín!- dijo frotándose el rostro con fuerza entre las manos -¡Solo soy Harry Potter¡Harry Potter el amigo de Ronald Weasley¡El amigo de Hermione Granger¡El jugador de Quidditch¡Buscador del equipo de Gryffindor y su capitán¡El que no pone atención a las clases¡Debería estar pensando en mis tareas, no en cuando voy a tener la próxima batalla con Voldemort¡NO PEDÍ SER SU NÉMESIS!

-Creí que te agradaba ser famoso- dijo Snape

-No me agrada, no me gusta, no lo pedí, solo quiero ser un niño, liberarme de mis tíos, aprender magia y jugar al Quidditch… solo eso quiero

-Harry- dijo Malfoy poniendo su mano en el hombro del chico

-Lo lamento- dijo Harry mientras Snape se ponía en pié

-Comprendo…- dijo el hombre –Por otro lado, creo que usted y yo tenemos un asunto pendiente… ¿puede mostrarme su horario?

Horario de Clases Casa Gryffindor Sexto Curso –Aurología-

Lunes

Historia De La Magia

Dominio De La Magia

CCM

Apariciones

Herbología

Transformaciones

Martes

CCM

DCAO

Vuelo

Pociones

Adivinación

Encantamientos

Miercoles

Herbología

Transformaciones

Dominio De La Magia

Pociones

DCAO

Duelo

Jueves

Encantamientos

DCAO

Apariciones

Pociones

Idiomas

Historia De La Magia

Viernes

Astronomía

Idiomas

Duelo

Apariciones

Herbología

Astronomía

Harry asintió mostrando al hombre el pedazo de pergamino que contenía su horario, estaba ya un poco maltratado, lo había traído en la bolsa y lo había revisado una y otra vez.

El hombre lo revisó una y otra vez, de pronto hacía muecas casi incomprensibles, además de que intentaba no mirar a Harry, se frotaba la barbilla, pensativo sin apartar la vista del papel mientras caminaba en círculos detrás de su escritorio.

-¿Sabes, Potter?- dijo por fin –tienes un horario muy pesado, al parecer Dumbledore se ha esmerado para mantenerte vigilado… ¿Estás seguro que quieres hacerlo?

-Seguro- dijo Harry asintiendo con la cabeza –prometo hacer mi mejor esfuerzo para cumplir con todo

-Las dos asignaturas de la profesora Ogrum son en verdad pesadas, dudo que puedas librarte de las tareas y deberes extra…

-Por eso no hay problema- dijo Draco –Yo puedo… si es necesario, yo puedo ayudar

-¿En eso estás de acuerdo, Potter?- preguntó el hombre

-Lo estoy…- dijo sin chistar mirando al rubio

-Bien- dijo el hombre –prepárate los martes y jueves tenemos nuestras clases de Oclumancy, los viernes tienes entrenamiento de Quidditch, por lo que los lunes y miércoles puedes ayudar a Malfoy en lo que puedas, tienen permisos especiales para los fines de semana, el uso de el aula de pociones y… algún aula que consideres adecuada para entrenar, además, gracias al profesor Lupin el aula de Duelo está a su disposición durante dos horas como máximo los fines de semana- dijo recuperando el aliento -¿algo más?

-Profesor Snape- dijo Draco algo tímido –Me gustaría… digo, si no fuera mucha molestia… ¿podemos revisar la sección prohibida para saber si algún texto de los que hay allí pueden servirnos?

-No lo sé, Malfoy- dijo dubitativo –esa sección tiene libros muy poderosos, no sé si…

-¡Por favor!- dijo el rubio mirando al hombre de manera dulce y suplicante, a Harry le pareció ver a un hermoso gatito reflejado en su rostro -¿si?

-¡Por Salazar Slytherin, Draco!- exclamó el hombre tratando de suprimir un ligero estremecimiento y dando la espalda a los dos chicos –Está bien, pero deben prometerme que los usarán con discreción y moderadamente, además...- sacó una pequeña llave de su escritorio, era dorada y tenía dos "S" entrelazadas como si fuesen dos serpientes –Esta es la llave de mi cubículo secreto en la biblioteca- dijo entregándoles la llave –estudiarán allí, supongo que será más cómodo, no tendrán que estarse cuidando de las miradas curiosas y se evitarán problemas con los de su casa. Si algún problema surge no duden en venir a avisarme, así como por cualquier duda que tengan…

-Gracias, Profesor- dijo Harry con una sonrisa tomando el pergamino y la copia con sus clases extra ya anotadas, los días en los que ayudaría a Draco estaban marcados con una "D" sin más explicación.

-Por cierto, Potter- dijo el profesor –olvidé decirle que al director le gustaría que continuara con el proyecto del año pasado, y que incluyera a compañeros de todas las casas…

-¿Las reuniones que ayudábamos a sabotear?- dijo el rubio sonriente

-Esas- dijo el profesor de igual forma

-No lo sé…- dijo Harry –ya mostré lo que debía de aprender, ahora me gustaría prepararme mejor y hacer lo que debo hacer… tomar solo las responsabilidades que necesito…

-Bien, le expondré tu punto al director, tal vez te mande llamar en la semana…

-Gracias, profesor- dijo Harry y salió con Malfoy hacia el aula de Dominio de la Magia que tenían juntos.


Gracias a todos los que me han dejado Revews, y a todos los que leyeron el producto de mi ocio, sé que no les quedó claro... por lo menos el final, espero poder aclararlopronto... por cierto ¡No olviden Rw¡Por fis! no le hace que sean men... titas...