Bueno sigue siendo la pelma de Nigriv las que os habla aunque después de lo que os acabo de decir creo que había poca sorpresa! Os aseguro que yo tengo más ganas de volver a ver a Mahe subiendo que vosotros, y ella tiene muchas más ganas que todos nosotros juntos, fijo. Bien como os dije el capítulo anterior era demasiado corto y aunque me estoy cayendo de sueño pues no me voy sin dejaros este! Please! aunque sea dejad un reviews conjunto para los dos! Se puede decir que se podían haber juntado pero el fic, como pasaba en MA, está hecho y publicado con anterioridad en el foro de 7 ALMAS así que tanto Mahe como yo preferimos subir el fic tal y como se publicó allí, con el mismo número de capítulos aunque queden cortos. Yo junté algunos en Ma por satisfacer las peticiones de quién decía que eran demasiados corto y bueno que en definitiva, luego me arrepentí. Prefiero poneros dos capítulos seguidos cuando alguno sea más corto y así os tenemos contento (espero) Bien que lo disfruteis, este es uno de mis preferidos.

Pensaba que en unos minutos no tendría reviews que contestar pero me han entrado dos al correo así que ahí vamos:

Lord of the dark Gracias y bueno respecto a que actualizamos rapido es porque dijimos que subiriamos minimo un capítulo al día (al no ser que las conexiones o el servidor y la vida muggle digan lo contrario) El fic está terminado, no me gusta subir antes aunque Mahe si era de las que publicaba así, pobrecita a cuantas cosas y caprichos de mi musa tuvo que amoldarse! Y respecto que quieres mantener la intriga lo voy a tener en cuenta ;) a ver cuanto aguantas! jejeje Se que cuando preguntes será que no agunatas más! Te diría a partir de que numero de capítulo será que pienso que comenzarás a preguntar pero... ni siquiera quiero estropearos la sorpresa de saber cuantos tiene. Así que ya veremos. Gracias por seguir ahí y disfruta de las vacaciones!

Kamesita! COMO LO HACES????? Vives pegada al Pc ? tienes un aviso al móvil? Como es que apenas lance el capítulo y ya te lo has leído?. Eres una fiera! :)) un vólido lo dicho! que bueno! Bien espero que no te hayas ido y siento si esperabas ya dije que se me complico la cosa, sabes que suelo subir antes de las doce odoce treinta como mucho, pero mira las horas a las que hoy estoy aqui aun (3:42 am) en fin te dejo uno más. Uhmmm interesante tu apreciasion pero... ¿cual de ellas? Analiza bien la profecia y no te pierdas! y si, guilmain tiene una hija! Ya mismo la concereis pero por ahora Ojoloco (que tambien anda de vez en cuando por la casa) te manda un consejo "ALERTA PERMANETE" aunque parece que tu la tienes... (No te estás volviendo paranoica) Gracias por leer como ya te dije si tu ansia es proporcional a la velocidad de lectura es todo un orgullo y gracias por los deseos.

Disfrutad leyendo.


CAPITULO4: Preocupaciones y recuerdos.

(Por Nigriv)

Estaba nerviosa, no podía evitarlo. Todo esto era una locura, después de dieciseis años alejada de aquí ahora volvía. Todo un curso en Hogwarts le había hecho recordar demasiado y, poco satisfecha con eso, había cedido ante la presión de Lupín para unirse a la Orden. Es verdad que necesitaban gente, sobre todo el mayor número posible de aurores, y también es verdad que Hogwarts la necesitaba como profesora pero… Estaba ella. La hacía salir de su hogar, venir a otro país y a otro colegio, y justo en el año de su graduación; y, sobre todo, la obligaba a abandonar a sus amistades, conociéndola sería un problema.

Tomó un sorbo de chocolate caliente y aún medio perdida en sus pensamientos sintió abrirse la puerta de la cocina. "Es más de media noche, ¿quién estará levantado?" pensaba cuando vio que era Harry.

-Hola- dijo al verla.

-Hola Harry. No podía dormir y he hecho chocolate caliente, ¿quieres un poco?- le dijo mientras se volvía hacia los fogones.

-Gracias- contestó sentándose a la mesa.Virginia le entregó una taza humeante y se sentó frente a él.

-¿Y por qué se desveló?- preguntó Harry, aunque inmediatamente pensó si no se vería impertinente su pregunta. Ella lo miró callada, ausente.

- Pensaba en mi hija, Harry. Llega mañana.

-Claro- asintió con la cabeza- Ya tengo ganas de conocerla, espero que nos llevemos bien.

-Eso es lo que me preocupa, Harry- dijo casi tímida.

-¿Porqué?

-Bueno, ella es algo 'especial' a la hora de hacer amistades. A pesar de ser muy intuitiva respecto a las personas, no se abre a ellas fácilmente y le cuesta mucho comenzar cualquier tipo de relación con gente desconocida. Simplemente no se fía. En eso no me salió a mí- dijo dejando escapar un suspiro. Harry la escuchaba atento- Además, al principio su actitud suele ser fría, distante y, aunque sea mi hija, tengo que decir que algo borde. No que ella sea así Harry, luego es dulce y cariñosa, pero solo cuando ya te conoce, cuando ha dejado caer ese escudo defensivo que siempre lleva puesto. Entonces se entrega totalmente y con tal dedicación que puedes contar con tener una amiga del alma.

-¿Entonces por qué se preocupa?

-Porque la he hecho abandonar todo su mundo solo para seguirme y…

-Nosotros la ayudaremos en todo lo que podamos, Virginia.

-La verdad, llevaba días queriendo pedirte un favor respecto a ella pero no encontraba el momento.

-Dígame lo que quiera.

-Vosotros cinco sois una piña Harry, incluso Mark en tan poco tiempo ha conectado con los demás. Ella necesitará tiempo y temo que al principio no os caiga demasiado bien. Quisiera pedirte que le tengas paciencia Harry, sobre todo tú.

-¿Porqué yo?- exclamó extrañado.

-Por que tú eres la única razón positiva que encontró para venir a Hogwarts.

Harry alzó los ojos sorprendido.

-¿Yo?- preguntó temeroso.

-Se ha criado conociendo tu historia, yo misma se la contaba. Sé que para ella será algo especial conocerte Harry, aunque tal vez nunca lo reconozca. Por eso quiero que la ayudes a adaptarse, veras como cuando la conozcas no te arrepentirás.

-No se preocupe Virginia, nos llevaremos bien.

-Eso espero Harry- suspiró- Eso espero- dijo pensativa.

Se tomó un sorbo de chocolate y también él se quedó callado, pensando si tan fría sería la chica para que su propia madre le estuviera advirtiendo así de su carácter.

-¿Y tú Harry? ¿Porqué te desvelaste?- oyó que le preguntaba.

-Desde que Voldemort comenzó a poseer mis sueños duermo poco.- Al ver su cara de preocupación supo lo que iba a preguntarle así que le adelantó la respuesta.- Ya no tengo sueños raros, ni de él, ni de Sirius, ni del arco, pero… Casi nunca consigo dormir la noche de un tirón.

-Comprendo. ¿Ese es el motivo por el que cada noche sales de merodeo?

-Sí, no… Bueno, usted ya lo sabe, para qué negarlo.

Esto le hizo recordar el día que se enteró de que ella también conoció a sus padres, aquella noche en que la vio durante uno de sus merodeos nocturnos. Durante el curso no se había atrevido a preguntarle a pesar de que ella si le contó algunas cosas sobre su madre. Tal vez ahora fuera el momento de hacerlo. Apretó las manos a ambos lados de la taza y se lanzó.

-¿Puedo preguntarle algo Virginia?... Sobre mis padres.

Sintió su mirada clavada en él y alzó la cabeza. En sus ojos encontró calidez y una sonrisa en sus labios.

-Claro, Harry, hace tiempo que lo esperaba,

-Es evidente que usted los conoció, al menos a mí madre pero… ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Qué recuerda de ellos?- lo soltó todo como una exhalación que mostraba toda su inquietud.

-Esas son muchas preguntas, pero mejor si empezamos por el principio ¿no?.... Conocí a Lily antes que a James. Yo comenzaba mi segundo año académico como aurora cuando ellos fueron aceptados. Las pruebas de nivel son muy exigentes Harry, muchos son rechazados, pero tu madre era muy poderosa y rompió todas las marcas hasta entonces. Gracias a su conocimiento de la magia antigua, superó el primer nivel de algunas clases y, en su primer año, cursó algunas materias con los de segundo. Ahí fue donde la conocí. Solíamos practicar juntas cuando advertimos que éramos las dos únicas antiguas de la academia; eso nos hizo ser más poderosas, avanzar más rápidamente, pero también hizo que nos sintiéramos amigas, muy buenas amigas.

Harry la miraba entusiasmado, siempre tan receptivo a todo lo que se le contara sobre sus padres.

-Ese mismo año se casaron. Estaban tan enamorados… Al volver de las vacaciones de Navidad las dos estábamos deseosas de contar algo "¡Tu primero!", "¡No tú!" nos decíamos- sonrió- y, al final, las dos hablamos a un tiempo. "Estoy embarazada" -dijimos.

Él también sonrió al imaginarse la escena, pensó que en ese momento el ya estaba en el vientre de su madre "¿Cómo se sentiría?".

-Evidentemente Lily se quedó perpleja, lo de ella era lógico, lo mío, tan inesperado… Pero allí estábamos ambas, mirándonos con cara boba de felicidad. Entonces tu madre tuvo un gesto muy común entre mujeres, posó su mano sobre mi vientre y me sonrió. Yo puse mis manos también sobre las suyas y supe que se alegraba por mí. Pero…

No se dio cuenta que se había quedado callada, divagando en sus pensamientos hasta que la voz de un Harry excitado la despertó de su letargo.

-¿Pero qué Virginia?

-Perdón, me perdí en el recuerdo, es algo que no puedo evitar siempre que lo evoco. Al juntar nuestras manos algo debió pasar entre la magia antigua y nosotras, porque sentí a mi hija saltar en el vientre y, de pronto, hice algo que nunca antes había hecho, ni he vuelto a hacer aún.

-¿El qué?- le preguntó Harry ansioso.

-Profeticé algo a tu madre.

-¿Fue usted quién le advirtió del nacimiento de Mark?

-Si Harry, fui yo. Creo que para entonces mi hija, aún sin nacer, ya era capaz de transmitir lo antiguo.

-¿Su hija?- le dijo extrañado.

-Si Harry, ella también es una antigua, como tú, como lo era Lily y como lo soy yo. Creo que tu madre al posar sus manos en mi vientre hizo que su poder se activara por primera vez y, el resultado fue una profecía real como comprobaste el año pasado. Por eso sabía de vuestra relación incluso antes que Dumbledore.

Harry ni siquiera podía hablar por la sorpresa.

-Ya te dije que ella es muy intuitiva, es su forma de manifestar lo antiguo, desde muy pequeña. Esta historia tan bella para mí, se la habré contado a ella mil y una vez y es por eso que se, que el conocerte será especial para ella. Y a mí, a mí me gustaría que llegarais a ser tan amigos como yo lo fui de tu madre Harry.

Tenía lágrimas en los ojos, no se atrevía a mirarla temeroso de que se riera de ver su emoción, pero cuando consiguió alzar la vista y se encontró con su mirada, observó que a la profesora también se le habían humedecido los ojos. Se quedaron los dos en silencio y un rato después se levantó para marcharse a dormir, sorprendentemente se sentía agotado.

-No se preocupe profesora- le dijo pareciendo querer ser más formal al usar su título- Seguro que ella y yo nos llevaremos bien, parece que ya desde el vientre conectamos.

Salió de la cocina y se dirigió a su cuarto, calló profundamente dormido nada más llegar a la cama. Lo último que pensó fue que aún no sabía ni su nombre.