Hola! chicos FELIZ NAVIDAD A TODOS!

Tengo que deciros que este capítulo que leeréis hoy es uno de mis favoritos! Algo que me quedé con muchas ganas de contar en Ma y que no podía faltar! Bien es una visión de hechos ocurridos en aquel fic y que se que a muchos os gustará. Espero que lo disfrutéis tanto como yo cuando lo escribí. Paso a los reviews que os deje leer tranquilos.

Buenas! Perdón porque anoche no os subí capítulo. Me tocaba a mí hacerlo y aunque estaba aquí el champam hacía demasiadas burbujas en mi cabeza. Lo siento, pero en cuanto he podido he entrado a dejaros un capítulo más, si esta noche me da tiempo tal vez tengáis el siguiente que os lo debo de ayer. Reviews que es la tercera vez que me tira el PC:

Kamesita no se si será árbitro de algo pero... que está en medio sin venir a cuento pues lo está En fin creo que hoy leerás algo que no esperas. Respecto a Mark pues ya llegara el momento de ese niño que me encanta (y Mahe también como no) Y buena observación, creo que nadie más ha dicho nada al respecto como tú, cuando comiencen a pasar cosas más de uno va a querer volver a atrás a leer! A proposito ¿te trajeron los Reyes Magos no? Que buen regalo a tu familia...

Sir James of Voldemort Se que la mayoría no es capaz de ver a Hermione así tal vez tengas razón en tus palabras. Hay que seguir leyendo porque es evidente que si pasa algo solo te enteraras leyendo. Aquí en este capítulo tienes algo de lo que pedías en tu reviews, espero que te guste.

Erick Arturo: uhmmm no te llegó el mail? Bueno te respondo aquí. Subimos capítulo todos los días (ayer falle lo siento) Si quieres tener una alerta inmediata a cuando publicamos haste usuario de ffnet, haciendote un profile aunque no publiques tienes opción a usar las alertas de los autores, tener un lugar para acceder directamente a tus historias favoritas y muchas cosas más. De todos modos si no decides hacerte usuario pues que sepas que a no ser por fuerza mayor todos los días antes o después tienes un capitulo. Para verlo puesto que ffnet tarda en subirlo 24 horas usa este truco, te pones en el último capítulo que te salga publicado y una vez cargado pues cambia el número en la barra del buscador de la pagina (ej; ahora mismo estás viendo el que ffnet dice que es el c´pítulo 13 si quieres saber si ya está el cargado usa /13/ ---> y cambialo a /14/ puede que ya hasta lo puedas leer si lo cargamos! Eso funciona con todos los fic, si el capítulo aun no está te dirá que la pagina no existe)

Me alegro que te animes a dejarnos reviews y ojala que si lees a más gente también lo hagas. Y si quieres ser el primero lo tienes dificil cuando Kamesita vuelva a casa porque.... es muy rápida, tal vez por la diferencia horaria no lo se. En esta historia no solo seré yo la que te deje impresionada ya verás cuando llegue la parte fuerte escrita por Mahe como logra hacerte sentir incluso mucho más que yo! Gracias por animarte con los reviews y espero que ahora sí que leas el truco.

Kata Higurashi Evans Uy uy uy... no voy a decirte nada esta vez! Jajajaja es que en solo dos palabras sueltas una bomba! Que explote o no... tendrás que seguir leyendo. Pero me encanta1 al menos me dejas ver a donde es que tiran tus ideas. Ojo con Mione en este capítulo!

Ithae Una de las cosas que más me agrada es saber que puedo hacer que una lectora que quiere mucho a un personaje se vuelva contra él. Por ahora apoyas a Hermione y muy bien que haces pero... no abandones la lectura si es que dices que te hacemos pensar! Además creo que el de hoy te va a gustar bastante y te perderías cosas como esta.... Jejejeje No se para que trato de convencerte pero en fin :) YA tenemos a Kata a favor de Mahe y a tí a favor de Hermione, uno a uno porque los demás no afirman la parte que toman! ¿a donde queremos llegar...? Uhmmmm lo irás descubriendo, espero sorprenderte tanto como tu a mí con JdD.

Eva Vidal gracias por seguir ahí, a partir de ahora todo es más interesante cada vez, espero que no se te acumulen demasiados capítulos. Serás bienvenida cuando conectes, como todos!

Bueno ya os dejo que además voy con prisa que la conxión hoy no es muy fina! Disfrutad lo que queda del día de Navidad y espero que lo hayais pasado muy bien con la familia, los amigos o la gente querida.


CAPITULO 12: Malos recuerdos

(Por Nigriv)

Aquella tarde había comenzado a sentirse mal. Pensando que en apenas dos días sería adulto, se dejó llevar por sensaciones que casi no sentía desde que abandonara Hogwarts. Éste año su llegada a Grimmauld Place había estado marcada por el hecho de saber que al verano siguiente nadie podría obligarle a volver a Little Whining y, la presencia de su primo, sumada a la alegría de haber encontrado una familia, había conseguido que casi olvidara la pena que le suponía estar en la mansión Black sin él. Pero esa tarde la tristeza había vuelto. Pensar que era su primer cumpleaños alejado de los Dursley, justamente aquí en Grimmauld Place, y saber que a pesar de sentirlo vivo no podía compartir este momento con él…. Hizo que Harry añorara tanto la presencia de su padrino como el año anterior, cuando llegó a la casa.

Llevaba toda la tarde en su cuarto, con la persiana bajada, oculto en las penumbras, como sentía su corazón. Ni siquiera había bajado a cenar, sabía que los adultos habían salido de misión y que solo Guilmain había quedado al cargo de ellos, así que no tenía que preocuparse de la opinión de Molly. Había dedicado toda la tarde a recordar cada uno de los sueños en los que supuestamente iba a salvar a Sirius y aquel en el que finalmente consiguió derribar el escudo y acercarse al arco. Aquel día sintió su voz y supo así que aún seguía permaneciendo con vida. Al traducir las runas del arco supo que tras el velo había felicidad en lugar de muerte y, sabiendo esto, lo había animado a quedarse allí, por lo menos hasta que lograra sanar sus heridas junto a sus padres. Pero también lo había exhortado a volver junto a él y su voz se lo había prometido; "Para todo hay un tiempo. Esperame". Bien, hacía más de un año que Sirius había caído tras el velo, y casi dos meses que él había liberado el escudo que protegía la sala y el arco. No sabía a cuanto equivalía el tiempo real en aquel universo paralelo, pero tenía la certeza de que el cómputo sería distinto y la espera ya comenzaba a hacérsele demasiado larga.

La noche había caído sin que se diera cuenta y cuando oyó llamar a su puerta pensó que debía ser tarde ya.

-Harry, ¿puedo pasar?- Era la voz de Hermione.
-Sí- dejó escapar casi en un suspiro.

Hermione abrió la puerta y se encontró con una habitación totalmente a oscuras, tan solo iluminada por los pequeños puntitos de luz que las rendijas de la persiana permitía dejar pasar procedente del exterior. Cuando sus ojos se acostumbraron a la penumbra vio que Harry estaba sobre la cama, rodeado de casi todos sus tesoros; la caja que guardaba la snitch de su madre, el espejo de su padre y su álbum de fotos. Hermione no sabía como empezar a hablarle pero creía saber porqué estaba su amigo así y no quería dejarlo volver al estado del año anterior. Avanzó un poco y se quedó parada cerca de la cama.

-Iba a acostarme ya pero…- se calló un momento- No quise hacerlo sin ver como estabas- le dijo casi tímidamente.
-¡Ya ves!- le contestó algo irónico, pero sin mala intención.
-Estás pensando en él ¿verdad?
-Soy tan evidente…- le respondió apenado.
-Sólo para mí- Hermione intentó sonreírle pero la preocupación le pudo.

La respuesta de su amiga le hizo recordar que fue ella quien logró alejarlo una vez más del peligro, el corazón se le enterneció y se sintió embargado por una oleada de calor que lo hizo suspirar cerrando los ojos.

-Ven aquí Hermione, siéntate a mi lado.

Vio como se amiga se acercaba a la cama y se sentaba junto a él apoyando ella también la espalda en la cabecera. Harry se ladeó un poco y suavemente dejó reposar la cabeza sobre su pecho. Hermione le miró sorprendida pero ante la cara de tristeza de su amigo reaccionó pasándole los brazos alrededor de su torso.

-Recuerdame esa noche Hermione- oyó que le pedía.
-No creo que eso te haga bien, Harry.
-Estoy mal Hermione, pero solo me quedan los recuerdos. Y esta noche necesito recordar; necesito saber que su promesa es cierta, que no fue todo un sueño y… solo tú compartiste conmigo aquel momento.

Su voz sonaba apenada, perdida en una distancia tan lejana que hacía estremecer. Cerró los ojos y evocó sus recuerdos para él.

-Aquella noche desperté sobresaltada y lo primero que supe es que estabas en peligro, un peligro mortal. El miedo invadió mi cuerpo pero reaccioné y logré llegara a ti- Era tan vivo el recuerdo que aún le dolía- Cuando aparecí en tu cuarto me estremecí. Dormías… ¿Cómo podías estar en peligro? Traté de despertarte por todos los medios Harry, pero no respondías. Sabía que el mal te acechaba, que estaba en tus sueños pero… Eres más peligroso dormido que despierto – No pudo evitar que una sonrisa amarga se le perfilara en su cara- "No dejes que un sueño te venza, Harry"- recuerdo haberte dicho- "No te puedes ir así, no sin mí, no entre mis brazos…"- Las palabras volvían a quemar sus labios como en aquel momento- "No sin que pueda evitarlo".

Calló un momento. Muchas noches, en la soledad de su cuarto, ella misma revivía esos momentos y aún las lágrimas brotaban de sus ojos; sabía que tenía que controlarse o también ahora brotarían. Se esforzó por continuar, sabía que el recuerdo que el deseaba evocar aún no había llegado.

-Nada me contaste de lo que pasó durante esos primeros momentos Harry. Supongo que correspondían a cuando descifraste las runas del arco y el velo comenzó a atraerte hipnotizado, pero eso lo supe después… En aquel momento sólo un nombre venía a mi cabeza, Voldemort, y pensé que estabas batallando contra él. Como siempre. Estaba desesperada, había llegado hasta ti, pero no podía alcanzar tus sueños. "Vuelve Harry, vuelve" susurré a tu oído- Suspiró.

-Y fue lo primero que escuché de ti Hermione- dijo posándole una mano sobre la suya- Tan claro como ahora mismo.

Apretó los ojos intentando reprimir sus sentimientos pues la melancolía en la voz de Harry, unido a la intensidad del recuerdo los estaban haciendo renacer.

-Dijiste que recordaste el día de la batalla, cómo entonces te había apartado del arco, y deseaste que estuviera allí para volver a hacerlo. Creo que fue ese deseo el que logró el milagro Harry. Pero yo no lo sabía, no sabía que me habías escuchado y habías vencido el hipnotismo que el velo ejercía sobre ti.

Se hizo el silencio por un momento. Llegados a este punto del relato Hermione sabía que era lo que más daño le hacía recordarse así misma.

-Cuando me explicaste lo ocurrido tocaste tu mejilla aún bañada por mis lágrimas y me dijiste… "Fue tu llanto que logró alcanzar mi alma cuando más perdida estaba" Nunca olvidaré tus palabras Harry, ¡nunca!- Sentía que su corazón quería salírsele del pecho sin control, y aún así se esforzó en continuar sus recuerdo- Desesperada te exhorté a que volvieras a la realidad. "Es un sueño Harry, la realidad está al otro lado, a nuestro lado, con Ron, conmigo…"

No pudo aguantar más la presión y, con la respiración dificultada, dejó que una lágrima descontrolada se deslizara por su mejilla. Tenía que controlarse, Harry no debía darse cuenta que aún el recuerdo de esos momentos la hacía llorar.

-Cuando escuché tus palabras deseé aún más fuerte tenerte a mi lado, refugiarme entre tus brazos… De nuevo eras tú quien me salvaba Hermione, aún cuando no supieras cómo lo estabas haciendo, lo lograste.
-Dijiste que fue el recuerdo de la profecía y tu destino, lo que te hizo regresar- dijo muy apenada mientras su cuerpo se estremecía tan fuertemente que Harry lo notó.

Se retiró de ella y lo vio mirarla enternecido. Sus ojos ya no le mostraban su propio dolor, sino el que ella misma reflejaba. Alargó la mano hasta su cara y secó delicadamente la lágrima que en ese momento le brotaba.

-Déjame consolarte ahora ti- le dijo atrayéndola hacia él entre sus brazos e intentando sonreírle.

Necesitada del contacto cálido de su cuerpo se dejó abrazar y escuchar el ritmo acelerado del corazón del chico la hizo suspirar. Perdida en su abrazo escondió la cara junto a su cuello. No quería que la viera llorar. Trató de controlarse reconfortada por el abrazo del ser amado. De nuevo se hizo el silencio. Algo más recuperada continuó hablándole.

-Cuando busqué el pulso en tu cuello y no lo encontré, me creí morir contigo- Eso no se lo había dicho nunca y, a pesar de haberse prometido una y mil veces callar, las palabras salieron de su boca incontroladas.- Pensé que te había perdido Harry, definitivamente, y que no te había dicho tantas cosas que siempre deseé decirte…

-Pero estoy aquí Hermione, y aún hay tiempo para decirlas.

El corazón de la chica se paralizó, dejó escapar dos latidos que nunca existieron y el miedo la embargó. "¿Le estaba pidiendo que le dijera aquello que pensó?" Respiró entrecortadamente y reprimió el llanto; ella sola había llevado la conversación ahí, sabía que ahora no podía dejarlo así. Apretó fuerte su abrazo y sintió como la correspondía. De nuevo todo su cuerpo tembló. Suavizaría sus palabras todo lo que le fuera posible.

-Son cosas que piensas en momentos tales de angustia Harry-Su voz apenas se oía, sus labios ocultos junto al cuello del chico. Pero todo era silencio a su alrededor y el susurro era audible- Cosas que nunca dices a aquellos que aprecias, como cuanto significan para ti, cuanto los amas en realidad.- sintió que la voz le moría ahogada en la garganta.
-Lo sé, Hermione- le dijo acariciándole tiernamente el pelo- Lo he sentido tantas veces…
-Pero nunca se dicen. Nunca de palabra aunque los hechos lo demuestren aún más. Nunca dices "te quiero"…- Lo había dicho, desesperada por la emoción, sí, pero al fin, tras tanto años callada, la frase había salido de sus labios. Contuvo el aliento.
-Yo también te quiero Hermione- le contestó depositando un suave beso entre su pelo.

Aquello fue más de lo que su corazón podía soportar, y de nuevo sintió que el llanto la invadía, pero esta vez llegó desesperado y sin control.

-¿Lloras?- oyó susurrarle.
-No Harry, no son lágrimas lo que emanan mis ojos, sino puro sentimiento incontrolado.

Al hacerle la pregunta Harry había estrechado aún más su abrazo, yendo a colocar su mejilla junto a la de ella. Casi lo agradeció. A pesar de todos sus nervios aquel gesto le permitía seguir escondida en su hombro, pues temía el momento de mirarlo a la cara, de que él leyera en sus ojos que aquellas palabras significaban para ella algo más que amistad.

-Y no es la primera vez…

Se quedó callada, sorprendida ante la afirmación, esperando a que le explicara a qué se refería. Aún mantenían la postura y sentía sus mejillas arder al contacto con la de él.

-Cuando desperté, de lo primero que tuve conciencia fue de sentirte sollozar sobre mi pecho Hermione- Escuchaba como le hablaba en susurros emocionados, también él estaba reviviendo esos momentos al límite, y eso la hacía vibrar aún más.- Pero a pesar de la angustia que transmitías en ese momento, para mí fue peor luego.
-¿Luego?- su voz reflejó su extrañeza.
-Después de revelarte la profecía… Te lanzaste a mis brazos llorando, igual que ahora- Lo oyó suspirar y sintió el aire que escapó de sus labios, "no lo había imaginado". -Y entonces, como ahora, supe que el motivo de tu llanto era yo y…

Sintió como lentamente la obligaba a retirarse de él. Sabía que quería mirarla y ella, con los ojos enrojecidos por las lágrimas trataba de evitarlo, pero no lo logró. Cuando sus ojos se encontraron sus caras estaban muy cerca, demasiado.

-… Y no puedo permitir que sigas derramando lágrimas por mí.- terminó.

Sentía el corazón acelerado y notaba la respiración entrecortada, hizo un esfuerzo y consiguió dejar de llorar, estaba impresionada por sus palabras. Había tanta sinceridad y ternura en su mirada que no la soportó más y dejó que sus ojos se cerraran. Sin esperarlo, sintió como sus labios le rozaban los párpados, primero a un lado y luego al otro. Acto seguido se sintió invadida por una sensación mezcla de miedo y deseo, el tipo de sensación que precede a un beso deseado. Sintió que él también respiraba aceleradamente mientras su aliento bajaba de sus ojos a sus labios. En el último momento encontró fuerzas donde no había y, ladeando un poco la cabeza, logró evitarlo. Sus labios se encontraron rozando la comisura de los otros labios y, a la vez que una descarga recorría su cuerpo, sintió también a Harry vibrar. Quedaron un instante así. Luego ella le besó dulcemente en la mejilla y se separó. Había deseado un beso suyo durante años, pero no así, no envueltos por la ternura de un momento que podía dar lugar a confusión. Lo miró y sus ojos le mostraron decepción.

-Harry yo…
-Lo siento- dijeron al unísono, ambos invadidos por la tensión y el sentimiento.
-No sé que pasó Hermione- le decía intentando disculparse, aunque sus ojos no parecían reflejar ese sentimiento- No pienses que trataba de aprovecharme de ti.

Sólo aquí pareció recuperar su aplomo, Hermione sabía que estaba siendo sincero y por eso lo miró toda llena de amor y suspiró.

-Lo sé, simplemente …
-Me nació- la interrumpió casi apagándosele la voz.

De nuevo el corazón se le paró pero, era mejor que diera por acabada aquella situación, al menos por el momento.

-Tengo que irme Harry- dijo levantándose de la cama pero al poner los pies en el suelo se mareó y tuvo que esperar un momento a recuperar el equilibrio. Cuando reaccionó él había tomado su mano y la miraba suplicante.
-Quédate conmigo Hermione, pasa aquí la noche, como aquel día.

No esperaba esa petición. Se giró intentando no ver sus ojos suplicarle, pero sus manos, aún unidas, transmitían demasiado entre ellos.

-No creo que sea oportuno Harry- dijo resistiendo sus propios deseos- Esta noche no…- Apenas podía controlar su corazón, pero sabía lo que debía de hacer- Tenemos una conversación pendiente… - le dijo volviéndose de nuevo hacia él e intentando sonreírle- Aunque tal vez mañana lo veamos todo de otro color.

Retiró su mano lentamente y comenzó a andar hacia la puerta. Tenía que llegar hasta ella, debía alcanzarla a pesar de verla tan lejana. Cuando ya tomaba el pomo para abrir le oyó llamarla.

-Mione…

Se paró en seco, pero no se volvió. Siempre que la llamaba así un maremoto arrasaba su alma y de nuevo tuvo que luchar para no volver corriendo a sus brazos. Sabía que aquel no era el momento.

-Gracias- fue su última palabra.

Abrió la puerta y salió. Las lágrimas volvieron a sus ojos automáticamente nada más cerrar tras de sí.