Disclaimer: Lo de siempre!
Hola a todas, este capítulo es mio, de Nigriv, pero os lo va a subir Mahe y es ella la que os responde a los rr de ayer! lo cual me alegra pues era un capítulo suyo y bueno! Así que os dejo con ella que yo estoy disfrutando unos diitas en Madrid. Espero que os guste mucho por que es un MIMADO en mayusculas!
Hola! aquí Mahe ahora, jeje. Ya habéis visto el aviso de Nigriv aclarando que el capi de hoy es suyo pero ya os lo comenté ayer, que hoy subía un mimado de ella aunque no esté porque así no tenemos que interrumpir ahora que se está poniendo el fic candente ; ) Paso a los reviews pero la despedida del capi de hoy es también de Nigriv (que lío os vamos a hacer, jeje)
Kata: ya vi tus dos reviews a los capis anteriores. Espero que leyeses las respuestas a los reviews y ya sepas también por qué Hermione sabía quien era el padre de Mahe.Me hice un lío con eso de que querías ver si Harry alcanza a Mahe y que todavía no se sabe si es eso lo que piensa Mahe, que Harry le dijo. ¿Has entendido lo que he puesto? porque yo no, jejejeje, pero es lo que pusiste tú en el rr ; ) Que fuera al despacho de su madre es porque la pobre no sabe ni a donde ir con el agobio que tiene en lo alto, así que acude a ella. Por cierto, un pin es una insignia, como un broche pequeñito de los que se ponen en la solapa de las chaquetas (en este caso, en la túnica ; ) ) No sé cómo lo llamaréis de donde tú seas, ya me dices cómo, oki? ; )
Kamesita: No hay por qué dar las gracias por la explicación, es normal que se os pasen cosillas así porque son demasiados capítulos y muchas cosas escondidas. Me alegro que te gustara la idea del pin: ) A ver si funciona, a ver, pero primero tendrá que dárselo ; )
Barby-Black: bienvenida de nuevo : ) Que bueno que te esté gustando el fic. Por aquí estamos bien y creo que Nigriv por Madrid también estará bien porque no ha dado señales de vida así que debe estar entretenida ; )
Parótida: Genial que te gustara el capi : ) ¿Volvías en dos semanas, no? pues calcula a capi por día ( o algo más porque por en breve habrá un día de ración extra, jeje) Que te lo pases muy bien en la playa (descansa por mi!)Y que te arreglen prontito el PC!
Eric Arturo¿Qué tal las clases? me alegro de que te hayas pasado por aquí un ratito a leernos ; ) 60 capítulos ya, sí, uff!A los 30 te dijimos que había para rato? pues ahora te digo... aún queda para rato: D
Marc: graciascomo siemprepor tu review aunque sean mini ; )
Seika: Con la cantidad de capis que tenemos, da tiempo a que haya emocionantes, angustiantes, divertidos, románticos... un poco de todo ; )
Y vamos con el capi mimado de Nigriv. ¿Cómo podría definirlo? Creo que intenso se queda corto, a ver qué opináis ; ) Os recuerdo que la despedida del final del capítulo es de ella también. Por mi parte, os cito para mañana : )
CAPITULO 60: Una tarde en el haya
(Por Nigriv)
Por un momento se incorporó, se dio la vuelta y se echó boca abajo sobre el césped, muy cerca de ella, apoyando su cara en los brazos, ocultándosela. Lo que le acababa de pasar con Hermione le había resultado bastante duro y a pesar de sentir su corazón aliviado al poder compartirlo, también lo sentía acelerado porque se trataba de él. Y sobre todo si recordaba lo que la chica había insinuado respecto a 'su objetivo'. Ya no le hacía falta tenerla cerca para percibir esa sensación maligna, el solo recordarla se lo hacía sentir.
Llevaban un rato callados, cada uno presumiblemente ausente, perdido en su pensar, cuando al mirarlo allí tumbado observó algunas briznas de hierba en su pelo. Dudó en quitárselas creyéndolo dormido, sabía que llevaba días que no podía pegar ojo en toda la noche y no quería despertarlo, pero en un impulso incontrolado le puso la mano en su pelo, antes incluso de que pudiera evitarlo conscientemente. Tomó la brizna situada más arriba y la apartó. Al contacto con su pelo los sentimientos reprimidos se desbordaron y supo que empezaba a perder el control. Separó la ramita del pelo y fue a por otra, pero ésta vez, al tomarla, no separó los dedos; localizó otra algo más allá y deslizó las yemas hacia allí con tanta delicadeza y ternura como pudo. Así quitó un par de ellas más, disfrutando del contacto con su pelo. Entonces buscó y rebuscó pero no encontró más briznas, ya no tenía excusa para prolongar ese contacto. Iba a retirar la mano cuando vio la última, no ya sobre su pelo, sino en el cuello, casi enganchada al borde la túnica. No se pudo resistir y una vez más deslizó sus dedos por el pelo, siguiendo por la piel del cuello, su mano ardiéndole al contacto con él. Cuando tomó esa última brizna una respiración profunda escapó del pecho del chico y, a pesar de estar tumbado boca abajo, se la notó. Inmediatamente retiró la mano azorada y recriminándose mentalmente su osadía. "Lo había despertado, seguro¿y si le recriminaba su actitud?"
-.¿Por qué paraste Mahe?.- oyó sorprendida su voz adormilada. No esperaba esa reacción.
-Yo… Sólo apartaba hierbas de tu pelo, Harry.- Dijo tan avergonzada de sentirse descubierta que casi ni le salía la voz, y sin embargo el corazón le latía tan fuerte que le parecía oírlo y todo.
-Se sentía bien…- Le dijo girando la cabeza hacia ella, sus ojos cerrados aún, pero su rostro le mostró tal expresión de paz y relajación que la hubiera pensado imposible momentos antes.
-Sí- dejó escapar de sus labios casi en un suspiro. Sus emociones estaban descontrolándose por momentos, a cada palabra que le oía pronunciar.
-Casi me dejas dormido, y hace días que no logró dormir.- Su voz era cálida, pero cansada, muy cansada. Se conmovió. Entonces, él abrió los ojos y la miró directamente a los suyos; ella se perdió en esas profundidades verdes y vio en ellos brillar la luz. Se sintió derretir por dentro cuando sus labios le mostraron una tierna sonrisa-.¿Te… importa seguir?.- Le preguntó casi con la certeza del que sabe que su deseo está concedido.
No pudo reprimir un suspiro y cerró los ojos un instante. Sabía que aquello avivaría el sentimiento y que luego lo pasaría mal, pero ahora disfrutaba de un momento tan único que no se paró a pensar en el después, sino en cómo disfrutar ese instante. Abrió los ojos y alargó de nuevo la mano, pero antes de llegar a rozarlo dudó y la retiró. En sus ojos vio claramente reflejada la decepción pensando que había estado a punto de decirle que no.
-Por favor.- Le sonó casi a una súplica su voz.
-Está bien Harry, pero si vas a dormir será mejor que ambos estemos más cómodos.- No supo ni de dónde sacó la fuerza para hacerle aquella proposición.
-.¿Qué?.- le preguntó él sorprendido.
-Ven aquí.- Le dijo mientras ella misma cambiaba de postura, acomodando su túnica y afianzando mejor la espalda sobre el tronco del árbol. Él se había incorporado, de rodillas a su lado, y la miraba interesado, con una leve sonrisa mezcla de incertidumbre y ¿ansiedad?
-.¿Pero cómo?.- volvió a preguntarle aún con sorpresa, mirándola. Ella le sonrió ante sus muestras de vergüenza y decoro.
-Siéntate aquí- le indicó separando un poco las piernas y señalando el hueco dejado con su mano. Harry alzó las cejas y no se movió.- De espaldas a mí, Harry.- Pero él seguía sin moverse, mirándola y se puso colorado-.Venga! Somos amigos ¿no?.- lo alentó ella.
Muy tímidamente reaccionó y se colocó como le había pedido, de espaldas a ella, pero muy rígidamente sentado. No podía evitarlo parecía haberse puesto nervioso, aunque no sabía bien cual de los dos podía estar peor.
-Ahora…- dijo tomándole de los hombros y atrayéndolo hacia sí hasta reclinarlo en su pecho- … estira las piernas y acomódate.
Le habló con voz leve y dulce, lo que unido a su gesto hizo que Harry se sintiera estremecer. El nudo que sentía en el estómago desde que momentos antes comenzara a acariciarle el pelo, se estrechó aún más, el corazón le dio un vuelco y fue a apretarse allí junto al estómago. Pensó que no debería de haberle pedido aquello. Ella sintió como él hacía ademán de retirarse, pero no lo dejó hacerlo.
- Se supone que vas a dormir ¿no Harry?.- le dijo sonriendo pícaramente. "¿De dónde estoy sacando tanto arrojo?" se preguntó así misma.- Relájate- le dijo, con un susurro, acercando sus labios a su oído mientras su mano derecha comenzaba a entremezclarse con su pelo.
Durante un momento aún lo notó tenso, pero luego suspiró y al fin consiguió relajarse. Mahe lo vio cerrar los ojos y en cuestión de segundos su rostro volvió a mostrar aquella expresión de paz y relajación que tenía antes y sólo volver a verla ya le mereció la pena todos los nervios que estaba sintiendo por esa situación. Se obligó a sí misma a aplacar su corazón, Harry estaba echado muy cerca de él y si no se serenaba sería tan evidente lo que esa situación le estaba provocando que el chico podría cortarse y decidir marcharse. Perdida en este pensamiento no advirtió que su otra mano se había desplazado también a su pelo y ahora, mientras la izquierda jugueteaba con su flequillo y rozaba levemente su frente, la derecha , más osada, se había desplazado un poco hacía su cuello y lo recorría suavemente, de la nuca a base y vuelta.
Una respiración profunda y entrecortada llenó su pecho y se escapó de sus labios. Harry se movió un poquito y, como si lo hiciese a posta, ladeó algo la cabeza dejando su cuello plenamente expuesto a ella. No hablaban, pero Mahe sentía a través de cada caricia como él, aún sin palabras, le reclamaba más. Ni siquiera supo cuando pasó pero de pronto se dio cuenta de que sus caricias se habían hecho más profundas y atrevidas, al igual que su corazón latía ya totalmente descontrolado. El contacto de su piel parecía un horno que alentara en ella su propio calor y, sin embargo, sus manos parecían estar heladas, lo que sabía era producto de su nerviosismo.
Una especie de gruñido procedente de Harry la sacó de sus pensamientos, no podía saber si debía entenderlo como una molestia o había sido una exclamación de placer. Deseando intensamente que fuera eso último se obligó a controlarse a sí misma y a sus caricias. Se estaba dejando llevar y sintió que su mano había avanzado hasta casi su garganta, donde jugueteaba entretenida con su nuez, mientras su dedo índice recorría curioso su barbilla, muy próximo al borde de sus labios. Retiró la mano algo brusca y volvió a posarla en su pelo. "Contrólate Mahe¡contrólate!"
-.¿Es esto común entre amigos en Beauxbatons?.- le preguntó de pronto con voz temerosa.
-.¡No!.- contestó ella simplemente, pillada por sorpresa al oír su voz y aún más por su pregunta-..¿Y aquí?.- añadió recelosa, tal vez porque le dijera que él sí lo hacía con Hermione.
-Tampoco.- Contestó aún con los ojos cerrados. Ella sabía que en cierto modo él también se sentía algo avergonzado por aquel atrevimiento, pero le estaba sonriendo como nunca le vio hacerlo.
-.¿No te ibas a dormir?.- le preguntó casi divertida.
-Es que… no puedo- le tembló la voz- Pero la sensación es mil veces mejor, más reparadora.- Se hizo un momento el silencio y con voz apenada le oyó añadir- Pero si te molesto me quito.
-.¡No! Quédate- respondió deseosa de que no se apartara aún de ella.
Y volvió a hacerse el silencio. Pero alentada por sus palabras lo siguió acariciando; sabía que él estaba notando sus sentimientos pero no le importó, sus manos podían percibir cada una de las sensaciones que Harry transmitía y, aunque casi no podía creerlo, se sentía sinceramente correspondida en ese momento.
Sus manos temblorosas le desanudaron la corbata, algo torpe sí, pues se moría del deseo de acariciarlo, de ver aunque fuera en un asomo un trozo de su torso que sabía bien formado y musculoso. Retiró la corbata y desabrochó un botón, y otro, y un tercero… Introdujo sus dedos en la abertura de la camisa y escuchó su propio suspiro. Se paró, estaba totalmente descontrolada y creyó que se había excedido demasiado. Notó como Harry contenía la respiración y lentamente comenzó a retirar la mano azorada. "Menos mal que permanece con los ojos cerrados" - pensó- "no creo poder soportar ahora su mirada."
Apunto estaba de sacar la mano de su camisa cuando advirtió como él la tomaba en la suya y se la situaba sobre el corazón; sus latidos acelerados la sobresaltaron y supo que Harry estaba tan descontrolado como ella misma. Se quedó paralizada por la sensación, no se la esperaba. Harry apartó su mano dejando la de ella allí posada y justo en ese momento un deseo procedente de él explotó en su mente insistiéndole a continuar, a prolongar aún más la caricia. Sabía que no era tan sólo su propio deseo sino también el de Harry el que en ese momento pugnaba en su mente y eso, la excitó sin poder evitarlo. Pero no pudo acariciarlo. Su mano se quedó ahí, estática, unida a su corazón como a un imán, y entonces recordó algo que una vez le comentó su madre.
"En el centro del pecho, casi al lado del corazón, hay uno de los siete puntos energéticos que los muggles llaman chacras. De ese punto precisamente es de donde brota toda emoción, cada sentimiento que te es revelado durante la evaluación. Si concentras la energía posando tu mano cerca de dicho punto aún lo sentirás más profundamente."
Perdida en el pensamiento no advirtió que, inconscientemente había invocado lo antiguo. De pronto su mano se calentó y la magia brotó en ella intensamente. Notó el corazón de Harry en su mano, pero no como antes, ahora era como si su propia mano le hubiera atravesado el cuerpo y la piel y sus dedos pudieran rodearle físicamente el corazón:sintió la energía extenderse desde la punta de sus dedos por todo el brazo y continuó hasta alcanzar a su propio corazón, percibió una especie de perturbación energética y de pronto se encontró con dos latidos cardiacos resonando en su propio cuerpo; el suyo, débil pero excitado, y el de Harry, fuerte y seguro… La sensación le conmovió hasta el punto que casi se asusta, pero no veía prudente retirar su mano ahora, no tenía experiencia con lo antiguo en ésta forma, pero intuía que la energía volvería sola a la normalidad. Mientras pensaba sintió como ambos corazones se acompasaban y, a pesar de tanta excitación, comenzaban a latir a un solo ritmo dentro de sí misma. Desapareció el tiempo y el espacio y se abandonó a la sensación, sabía que Harry también la estaba compartiendo pues ahora ambos respiraban lenta y profundamente.
Cuando abrió los ojos tenía el mentón apoyado en el pelo del chico, sintió un cosquilleo desagradable avanzar por su mano y supo que había llegado el momento de retirarla, aquel cosquilleo solo podía ser retorno energético. Apenada porque la sensación acabara retiró lentamente su mano mientras lo acariciaba con sus dedos. Al separar totalmente la mano del chacra sintió una especie de 'plim' interno y durante un segundo le pareció quedarse sin corazón, la conexión entre ellos se había roto y el suyo propio volvía a latir por sí solo. Tuvo que respirar y tratar de expulsar de sí toda esa energía que había acumulado, sabía que no podía retenerla aunque lo deseara y mientras lo hacía no podía reprimir los sentimientos, se moría de ganas de besarlo, aunque hubiese sido en la frente, inocentemente. Tratando de que lo antiguo retornara a la normalidad y enfrascada en contener sus impulsos, no se dio cuenta de que Harry había abierto los ojos y, girando un poco la cabeza la estaba mirando fijamente, aún apoyado sobre su pecho. Al ver sus ojos cual luceros relucientes se perdió un momento en su mirada y con una sonrisa estrechó su cuerpo entre sus brazos. Pero desvió la mirada porque sentía ese verde penetrarla de tal manera que invadía todo su ser, despertando tal sentimiento en ella que le era imposible controlarlo. No podía soportar más su mirada y sabía que se arriesgaba a hacer algo que rompiera ese momento tan mágico; esos ojos tan hermosos, clavados así en ella, diciéndole tantas cosas que le gustaría creer y no se atrevía…
Cuánto duró todo aquello, no lo sabía, tal vez una hora, tal vez solo minutos… Ni lo sabía ni le importaba. El tiempo era un concepto tan ajeno a todo en ese instante que ni siquiera existía; lo único que le importaba era el sentimiento y la intensidad con que se había mostrado. "Ambos estamos en un momento muy delicado de nuestras vidas y nuestras respectivas confesiones nos han acercado demasiado. ¿Habrá sido eso?"
-Mahe…
Al oírlo llamarla se giró un poco para poder verlo mejor, sabía que su cuerpo aún mostraba signos de la excitación y profundidad del momento vivido pero también sabía que Harry se sentía igual y no se preocupó.
-.¿Si Harry?.- Su voz sonó débil, no tenía fuerzas ni para hablar.
-Tú también lo sentiste¿verdad?
Sus ojos irradiaban luz al formular la pregunta, Mahe tan solo pudo asentirle con un gesto de su cabeza, mientras cerraba los ojos perdida un segundo más en la sensación. Aún lo tenía estrechado entre sus brazos y no quería soltarlo, se negaba a hacerlo. Entonces sintió como él tomaba sus manos entre las suyas antes de volver a preguntarle.
-.¿Qué fue eso Mahe?
No había miedo en sus palabras pero sí sonaron impresionadas, llenas de la misma emoción que aún la embargaba a ella. Se quedó un momento callada, no sabía cómo definir aquello a pesar de saber que había sido la energía que ella invocó lo que lo había propiciado. Pero entonces, sin saber de dónde, le llegó el conocimiento, las palabras se formaron en su mente y sin apenas darse cuenta sus labios las proclamaron en alto.
-Eso fue dos antiguos compartiendo el corazón.
Ay que bonito, no puedo evitar que se me ericen los pelos de la nuca porque advierto, si alguno de vosotros creeís en la magia de la energía que mueve este mundo os digo de todo corazón que estas cosas pueden pasar... Tal vez no como aquí se cuenta por que hay que adaptarlas al mundo HP pero estas cosas pasan! Una vez en la vida y generalmente no la "oportuna" (en mi caso) pero uff que gozada cuando en realidad se sienten. Espero que os gustara. Nigriv.
