Pero no llegó a golpearle, con su velocidad restaurada le había detenido Sonic, le dio un fuerte golpe que no se esperaba y logró separarle de Matt, que cayó de rodillas al suelo sin fuerza, estuvo unos segundos con la mano en el ojo herido hasta que se dio cuenta de que el propio Sonic le hablaba.
-¿Estás bien?- Repitió el erizo azul sin mirarle.
Aunque se lo había repetido y Matt lo había oído no le respondió, estaba atontado, no lograba abrir el ojo y notaba que le sangraba mucho. Sonic se giró hacia él, aparentemente no parecía impresionarle aquella visión, pero por dentro se asustó un poco.
-¿Quién te crees que eres tú para meterte en un asunto privado como éste?- La voz de Xeratos llamó la atención de Sonic otra vez hacia él.
Sonic sonrió de forma pícara, como siempre había hecho ante sus enemigos.
-Je, no me iba a quedar a un lado viendo cómo os divertís vosotros...- Hizo una pose "chula".
Amy suspiró con corazoncitos en los ojos al verle en ese plan, ese era el Sonic que ella amaba.
Matt se quedó mirando, Sonic comenzó a luchar con el demonio como si no hubiese luchado en todo el día, su fuerza, su velocidad, su espíritu, parecía estar restaurado completamente¿por qué¿cuándo? Hace un momento estaba luchando a puñetazo limpio con él y según Matt estaba perdiendo. Miró hacia Amy que seguía con la vista a Sonic, su expresión era tan dulce que pensó que él también quería algo de eso, ser alguien por el que Amy sonriese de aquella manera. Andrew se puso al lado de Matt ayudado por Mimi, ésta retiró la mano de Matt de su ojo que aún estaba en un estado que parecía tener la mano pegada a ese lugar, como si no quisiese quitarla, reaccionó con un gesto de dolor, salió de su estado al mirar a Mimi.
-Tiene cara de doler...- Pensó en voz alta Mimi.
-No te diré que no...- Respondió de forma graciosa Matt.
Sonrieron, luego miraron la batalla, Sonic se estaba haciendo el duro, el interesante, acertaba en algunos golpes pero era obvio que no afectaba en nada al demonio, se estaba cansando más rápido, ahora se le empezaba a notar la batalla anterior. De un fuerte golpe Sonic se estrelló contra el suelo.
-No sé qué pretendes, pero no vas a lograr nada.- Declaró Xeratos. –Ahora, Matt, tenemos una cuenta pendiente.
-Esto aún no ha terminado...- Le cortó Sonic.
Sonic se puso en pie, medio tambaleante hasta que recobró la posición. Matt se le quedó mirando asombrado¿de dónde sacaba esa fuerza?
-¿Cómo puede mantenerse en pie¿por qué sigue luchando?- Preguntó al aire Matt.
-Porque es un héroe.- Dijo Amy acercándose. –Ya te lo dije, no importan los motivos, un héroe ayuda al que lo necesita.
Aunque para Matt llegaba la ayuda bastantes años tarde, y por otro lado más vale tarde que nunca, porque ahora viendo a Sonic cómo daba lo mejor de sí para proteger a otros se dio cuenta de la fuerza que a él le faltaba, siempre luchando por aquel hecho del pasado, después de tanto tiempo se podía decir que había perdido completamente el norte ¿qué estaba haciendo? Ahí sentado en el suelo como un idiota viendo luchar al erizo azul lleno de magulladuras, miró a su alrededor con el ojo sano y se dio cuenta de que él mismo podría tener esa fuerza que mantenía a Sonic en pie, al fin y al cabo había estado luchando por proteger a los suyos.
-Si tanta prisa tienes en morir...- El youko se convenció de que Sonic iba a ser ahora su único oponente.
Sonic simplemente sonrió, no es que fuese muy hablador en una batalla ni le gustase enrollarse, pero eso de que el demonio hablase por los codos le iba bien para recuperarse por un momento, así que cuando volvió a atacarle pudo esquivarle y devolverle el golpe, que aunque Xeratos puso el brazo en medio notó la fuerza de éste, extrañamente sonrió, incluso por unas décimas de segundo olvidó por qué estaba peleándose con aquel "insignificante mortal", pensó que el erizo era fuerte, que era divertido, hacía tanto tiempo que no se sentía así, demasiadas luchas en el inframundo para su conquista, había olvidado lo que sintió aquella vez que fue derrotado en el plano mortal. Manteniendo la sonrisa, tornándose cada vez más siniestra, lanzó un puñetazo que Sonic se vio obligado a parar con ambas manos, a detenerlo con todas sus fuerzas, empujando cada uno hacia el lado contrario, temblando los brazos de Sonic mientras Xeratos iba ganando terreno, cediendo un poco el suelo bajo Sonic, no era tan fuerte, no estaba en las mejores condiciones, y cedió. Cayó cerca de Amy, ella sólo tuvo que ponerse de rodillas a su lado para ayudarle a incorporarse, con él cerca parecía menguar el daño, una vez más en pie, Sonic puso su brazo delante de Amy, ocultándola ante Xeratos, que con una mirada triunfante levantó una mano ante ellos.
-A ver si puedes parar esto...- Sonó algo baja la voz del youko.
Lanzó uno de sus ataques de fuego, uno bien grande, como si pensase que el juego ya tocaba llegar a su fin, eso hizo pensar muy deprisa a Sonic, qué tenía que hacer, no podía reaccionar lo suficiente como para hacer su sierra y partir en dos el ataque y si lo esquivaba tenía detrás a Amy, si la sacaba del medio sólo a ella sabía que le daría a los Falling Stars y Amy se enfadaría igual... y por último pensó que estaba pensando demasiado y le iba a dar dolor de cabeza, simplemente se quedó ahí con las manos delante, como si intentase para el ataque, quizá usando un poco su elemento del viento lograse por lo menos un pequeño escudo, otras veces el probar cosas nuevas en momentos críticos le había ido bien. Había cerrado un ojo esperando que llegase el fuego, pero un rápido movimiento que cortaba el aire cortó a la vez el ataque, la espada partió en dos el fuego como si fuese mantequilla desparramándose a los lados desapareciendo al tocar el suelo. Sonic lo había visto, una voltereta y la espada hacia arriba y abajo, esa figura que él desconocía, amarillo claro, era como si por un momento se viese a sí mismo en Super, pero llevaba armadura y una espada, eso es algo que Sonic nunca llevaría por motivos personales.
-¡Takeshi!- Gritó Amy.
Sonic supuso que era el amigo misterioso que se ocultaba tras un árbol.
-¿Takeshi?- El youko se cruzó de brazos pensando. –Ya te reconozco ¿realmente ha pasado tanto tiempo?
-¡Me halagas!- Rió Takeshi apoyando la espada en su hombro, se giró un poco hacia Sonic. –Puedo distraerle un poco, tú recupérate y transfórmate en Super, sin un elemental de agua no podemos hacer mucho contra él.
-¿Transformarme? Pero si no pue...- Comenzó a decir Sonic.
-¿Cómo que no puedes¡tú nunca dices que no puedes!- Le cortó Amy.
-Pues pregúntale a tu "protegido" qué ha hecho para que no funcione.- Sonic señaló a Matt algo molesto.
-Sí, claro, culpa a la "víctima"- Se hizo el tonto Matt.
-¿Víctima¡y una ...!- Sonic apretó el puño delante de él.
Amy le cogió del brazo.
-¡No es el momento¿Qué pasa con las esmeraldas¿Qué es eso de que no funcionan?
-Pues eso mismo, lo intenté pero noté una energía extraña y tuve que parar.- Sonic giró la cara.
Xeratos lanzó otro ataque que Takeshi volvió a partir por la mitad.
-"Caos es poder...- Se oyó una voz acercándose a ellos. -...poder enriquecido por el corazón..." ¿Lo recuerdas?- Knuckles se acercó.
Claws ya podía caminar, saltó de él y se abrazó a Matt preguntándole qué le había pasado, ya se imaginaba que no iba a ser fácil su combate, pero aquello era demasiado.
-Eres un controlador del caos, no eres consciente de la fuerza del corazón en todo esto...- Knuckles se puso algo chulo.
-Knuckles...- Dijo Sonic mirándole. –Estás hecho un asco, no me digas que una chica te ha dado esa paliza.
Knuckles estalló irritado diciendo que no había pasado así, que él había vencido y que Sonic también estaba hecho un desastre.
-Y aquí tenemos al verdadero Knuckles,- Dijo de forma graciosa Sonic. –un cabeza de chorlito que se cree muy importante porque le ha robado el sombrero a una chica.
-¡Que te calles, que no ha sido así!- Knuckles agitó los brazos, sacó algo que había recogido por el camino. -¡Toma! Haz tu trabajo.
Sonic lo cogió al aire, era una esmeralda, se le quedó mirando, se sorprendió cuando vio que Claws tenía otra, Matt se había guardado dos que Amy le hizo sacar a regañadientes.
-¿Se la tengo que dar? Yo no quiero...- Pero no era la voz de Matt, era Rouge acercándose con Shadow.
Llevaban cada uno una esmeralda.
-Ese tipo es el que se cargó a tu amiga¿no? Pues dale la esmeralda a Sonic para que se lo cargue.- Shadow la empujó un poco.
Sonic ahora se sentía mucho más tranquilo, respaldado, escuchó tras él a Takeshi:
-¿Cuántos corazones te hacen falta aún para transformarte?- Dijo sin girarse.
Eso le hizo pensar, como si su mente fugaz le diese un paseo por donde estaba lo que de verdad importaba, aquello que debía proteger.
Tails se sentó en la camilla, ya estaba aburrido de esperar.
-¿Cuándo volverá Sonic¿Estará bien?- Preguntaba al aire el pequeño.
-Seguro que vuelve, siempre lo hace.- Respondió un zorro anaranjado de pelo negro.
Estaba dando vueltas con una cucharilla a algo en una taza, le había preparado un cacao, se lo dio.
-Gracias, Reit, me alegro de que hayas venido, me cuidas mucho.- Sonrió Tails.
Reit se quedó un ratito mirándole diciendo lo guay que era hasta que Noa le sacó de su estado agarrándose a su cuello y traqueteándolo un poco.
-Ah, menos mal que está aquí la lobita para sacarme a flote.- Sonrió Reit al verla.
-Eh, Tails, no tendrías que estar haciendo tanto esfuerzo, aunque reconozco que te recuperas muy rápido...- Dijo la loba con cara de querer investigar más a fondo aquel proceso de curación.
-Bueno... es porque soy un kitsune...- Se ocultó un poco de ella. –Estoy preocupado por Sonic...- Bajó la mirada. –Es que si necesita ayuda... me gustaría que pensase en mí.
-Yo estoy seguro de que ahora mismo está pensando en ti.- Sonrió tiernamente Reit al kitsune.
-¡Pues yo también voy a pensar en él!- Se animó Tails.
A la vez, Reit y Noa también pensaron en Sonic, dándole ánimos a Tails.
Sólo se escuchó "plof" cuando Tete-chin cayó desparramada en la mesa.
-¡Ohhh Sonikkito mío¿por qué te has ido?
Miró a un lado, a su móvil, siempre en cualquier lado, a veces en modo "curro" o "silencio" por lo que a veces le daban toques y ni se enteraba, se lo quedó mirando fijamente un momento, lo cogió y comenzó a mirar en la carpeta "imágenes.
-Y aquí tengo mi móvil multimedia de pantalla grandota a color con sonido polifónico y cámara de fotos...- Imitó un anuncio de móviles. -aunque el de Lizar tiene más megas... bah, para lo que lo uso.
Una de las imágenes era una foto, una que había tomado hace algún tiempo de su novio.
-¿Le habrá ido bien el trabajo hoy?- Dejó a un lado el móvil y sonrió. -Ya nos veremos cuando podamos ¡ahora a por el erizo azul!- Rió.
continuará...
