Existen muchas cosas que nos diferencian a JK de nosotras, Nigriv y Mahe, pero sobre todo una que siempre os recordaremos: ella permite que escribamos sobre sus personajes pero nosotras no, nunca, jamás.
Hola UPs! soy Mahe y hoy os traigo un MIMADO mío a pesar de las alturas en las que estamos en la batalla y que casi no nos quedan personajes vivos (jeje, que mala, sí que quedan aún, a alguien tendremos que salvar, no? o quizá no...) Reviews:
Kata:.¿Que no le pase nada a Harry? ya veremos, con lo malas que somos... ; ) En cuanto a Snape, la verdad es que es toda una sorpresa que reviviera pero es que había que darle una oportunidad a este hombre después de ver que no era tan malo como parecía. Yo creo que ni Mahe se cree aún que lo haya llamado "padre", a ver lo que le dura el "sentimiento de hija". ; )
Laura P.E.: Me encanta ver que te hicimos pensar que Snape estaba totalmente muertecito porque así te llevas la sorpresa de que revive. Pero no creas que te vas a llevar muchas más sorpresas de este tipo, eh? Otras quizás... ; )
Wiggin: Bienvenido! que bien que sigáis apareciendo aunque ya estemos tan avanzados en la historia, gracias : ) Por Merlín y todos los brujos ¿te leíste MA y UP en dos días? si estuviera en el foro te pondría un careto de los que se les cae la mandibula boquiabierta porque así me dejaste :D me alegro mucho de que te hayan gustado los dos fics lo suficiente como para engancharte tanto. Muchas gracias por aparecer ; )
Celina: Que bien que te sientas mejor : ) Y si con nuestros patronus te animamos y nuestro fic te entretienes, mejor que mejor ; )
Marc: Hurra por Sev! hurra! jejeje, es raro que tú digas eso, te aseguro que más raro es que Mahe le llame "padre" :D
Luna bayo: Te confirmo que Nigriv sigue más o menos igual (a este paso, la llevaré yo a rastras al medimago para que le recete una poción) Me ha dicho que te comente que te escribirá después del examen así que ya estaréis en contacto. En cuanto al capi, es cierto que es un gran sacrificio el quehizo Snape pero tuvo suerte, no todos tienen por qué tener una recompensa...
Belén: A ver, te cuento: la parte correspondiente a Dumbledore y McGonagall ya acabó porque Albus se está encargando de los patronus que han quedado y Minerva se ha quedado junto a él como gata. De Hermione, pronto verás más de ella, y de Harry ahora verás también. Me hace gracia que pienses que solo Voldemort y sus mortífagos pueden morir¿estás segura?
Viktor Frankenstein... perdón... Eric Arturo ; ) No se han quedado de brazos cruzados por poquito porque Mahe ni reaccionaba pero anda que Virginia diciendole que la iba a repudiar si no le ayudaba... vaya tela! lo que no sé como no le lanzó la chica un lazo de fuego a su madre por ser tan "cariñosa" con ella, jeje.
Stiby: Todavía sonrio al recordar tu review de ayer con tu hipótesis de la profecía, me encanta que llegaras a ella : ) Ahora verás el motivo por el que Snape nombre a Harry. ¿Te has angustiado con la muerte de Severus? jeje, pobrecita, creo que deberías agarrarte a la silla porque vienen curvas (creo que el título del capi de hoy te pone sobre aviso ; ) Yo también he pensado en esa posibilidad oficial de que mueran Voldemort y Harry, están marcados como iguales así que todo puede pasar, como en UP ; ) ¿Te encanta llorar? uuumm... espero tu review mañana. ; )
John Black Potter: Vaya! Bienvenido también a ti! se agradece mucho que dejes el silencio y te muestres : )
Sirusianos: Seguís sin querer aparecer por nuestro fic para darnos vuestra opinión... no sé yo si eso le gustaría mucho a nuestro querido Sirius, él es mucho más arriesgado y se atrevería a dar la cara y mostrarse ante nosotras, como buenos sirusianos deberíais seguir su ejemplo, no creeis? (¿cuela? jeje)
Bueno, vamos con el "Orientame": Snape acaba de revivir, Voldemort ha muerto y Harry... ains ¿qué le estará pasando?
CAPITULO 94: Vida y muerte
(Por Mahe)
Mahe se sorprendió. ¿Por qué nombraba a Harry? En ese momento tomó conciencia de que a su alrededor ya no había movimiento de lucha, no sonaban hechizos, ni se veían los rayos, a lo lejos los mortífagos estaban desapareciendo. Asustada, miró hacia todos lados buscándole y de pronto le vio tendido en el suelo. El corazón le dio un vuelco e intentó levantarse y correr hacia donde él estaba pero su madre la cogió con fuerza del brazo y la detuvo:
-¡NO!.¡DEJAME!.¡DEJAME IR CON EL!.-gritó la chica tratando de soltarse.
-¡ESPERA!.¿qué ha sido eso?.-preguntó sin comprender la intensa luz que acababan de iluminar el cementerio ni la voz que le había parecido oír-.¡Era Voldemort!
No se veía al mago oscuro por ningún lado. Snape llamó su atención y levantó lentamente su brazo mostrándole la marca del Lord. Virginia se fijó y vio como se había desfigurado.
-¿Está... muerto?
Snape asintió y débilmente susurró:
-Pero ha conseguido vengarse...-trató de explicar débilmente- Harry... está marcado como a un igual.
Virginia abrió mucho los ojos y con esas palabras, lo entendió todo. Miró a su hija cuya expresión de terror mostraba haber entendido también las palabras de su padre y soltó su brazo.
-¡Mahe, ve con él!
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Sirius, que permanecía junto a Lupin el cual seguía profundamente inconsciente donde Virginia le había dejado, se quedó inmóvil intentando comprender lo que la voz de Voldemort había dicho pero solo bastó un segundo para que su corazón le confirmase las peores sospechas. Buscó con la mirada a su ahijado mientras veía como los mortífagos que quedaban en la lejanía se desaparecían y abandonaban la lucha tras la muerte de su señor. Observó que, a media distancia, alguien corría hacia un cuerpo tendido en el suelo, justo donde Harry había estado luchando y se le heló la sangre. Dejó a Lupin en el suelo y justo cuando iba a desaparecerse, notó como le agarraban del brazo impidiéndole avanzar.
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Mahe se levantó y corrió hacia Harry. El chico estaba en el suelo, casi inconsciente, apenas podía respirar. Se arrodilló junto a él y le llamó:
-Harry ¡Harry!
Pero no reaccionaba. El aire que a él no le llegaba a los pulmones le sobraba a ella por la aceleración de su respiración. Estaba aterrorizada, no podía creer lo que estaba pasando. Se acercó y posando su mano derecha sobre su cabeza, acariciándole el cabello, le susurró al oído.
-Escúchame, Harry, te vas a poner bien ¿de acuerdo? no me vas a dejar sola.
Harry intentó abrir los ojos pero no podía. Sentía como su cuerpo le pesaba, pesaba mucho, pero su alma se elevaba. Podía oír las palabras de Mahe y sentía como sus lágrimas habían comenzado a brotar de sus ojos. Quería decirle algo, quería despedirse pero no podía. Sus latidos eran cada vez más débiles y su respiración más lenta y pausada; el malestar estaba desapareciendo al igual que su vida. La chica se dio cuenta de que estaba llegando el final y que dejaba de respirar. Le cogió la mano, estaba fría, y la apretó con fuerza:
-No, Harry, respira ¡RESPIRA! por lo que más quieras, Harry ¡respira!
Pero no reaccionaba, se moría...
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Al grito angustioso de "¡RESPIRA!" Sirius intentó soltarse bruscamente de la mano que le sujetaba
-¡Suéltame!
Dumbledore se había aparecido a su lado y le miraba con tristeza pero su mano seguía firme aferrada a su brazo.
- Me dolió decírtelo cuando comenzamos a luchar pero más me duele ahora: No puedes hacer nada por él, Sirius.
-¿Qué... qué estás diciendo?.-preguntó casi sin voz. Dumbledore no contestó pero en su mirada azul se leía la respuesta que Sirius se negaba a aceptar a pesar de haber escuchado al Oscuro gritar su amenaza antes de morir-.¡Soy su padrino y quiero estar con él!.-contestó de pronto con rabia intentando soltarse sin conseguirlo.
- Y él es su amor... ahora es a ella a quien ayudarás más quedándote al margen. Déjale con él.
Sirius mantuvo la mirada del director durante unos segundos y lentamente cerró los ojos suspirando profundamente y asintió con la cabeza. Volvió a abrirlos, miró a Harry y Mahe que le hablaba al oído, y se dejó caer al suelo abatido por el dolor.
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Mahe se desesperaba más y más a cada segundo que pasaba. Tanteó en el suelo en busca de su varita pero no sabía donde estaba, la tenía que haber dejado junto a sus padres. "¡Lumos!" una pequeña luz se encendió cerca de la mano de Harry y la chica cogió la encantada con la que había luchado. La miró un instante y se sorprendió al ver que era la del chico pero sin perder más tiempo, le apuntó mientras seguía cogiendo su mano cada vez más fría.
-¡Enervate!.vamos¡ENERVATE!
Pero el efecto era nulo y tiró la varita con rabia al suelo. Angustia, desesperación... no sabía qué hacer. Se inclinó temblando sobre su pecho y escuchó los latidos débiles y forzados haciendo que los suyos propios aumentaran por el miedo de saber lo que estaba a punto de ocurrir. Puso su mano izquierda sobre el corazón de Harry y colocó la mano de él sobre el suyo, apretando con fuerza.
-Siéntelo, Harry, siente como late... siéntelo...
De pronto, Harry entreabrió los ojos mirando a un punto indeterminado frente a él como si estuviese viendo algo. Mahe vio la pequeña reacción y le llamó
- Harry...
Entre las lágrimas que inundaban sus ojos, le pareció ver como sus ojos verdes se desviaban hacia donde ella estaba, mirándola pero los volvió a cerrar haciendo que la chica se desesperase. "Te he vuelto a ver... aunque haya sido un segundo... un solo segundo... como deseé..." Mahe sintió ganas de gritar al ver que no había nada que hacer, a Harry se le iba la vida y a ella con él; sabía que en esos casos no era conveniente agobiar a la persona que estaba a punto de morir porque podía percibir lo que había a su alrededor y se podía marchar con tristeza. Pero no podía quedarse quieta, cerró los ojos, intentaría salvarle y estaba dispuesta a hacer lo que fuera. Se concentró y tras unos segundos en silencio, comenzó a recitar:
-Fuerzas de los elegidos por la magia antigua, conjurados sois. Atravesad las puertas de la muerte y que vuestro poder traiga a este lugar al que allí es llamado
Abrió los ojos y le miró pero Harry no reaccionaba, ni siquiera su pecho se elevaba ya en muestra de respiración por leve que fuese. No notaba los latidos en su mano y volvió a repetir desesperadamente entre lágrimas.
-Fuerzas de los elegidos por la magia antigua, conjurados sois. Atravesad las puertas de la muerte y que vuestro poder traiga a este lugar al que allí es llamado
No había forma, seguía igual. La angustia y la desesperación de la chica estaban al máximo. Nadie de los que estaban allí se atrevían a acercarse, ni siquiera su madre que seguía junto a Snape. Sentían el dolor de la chica tan profundo como el suyo propio: esta vez Voldemort había conseguido su objetivo.
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El cementerio estaba terroríficamente en silencio, solo escuchaba el murmullo constante de la voz de Mahe repitiendo un conjuro una y otra vez, y junto a lo que sus ojos le mostraban en la lejanía, hacía que no pudiese reaccionar. Hermione había escuchado claramente el grito de Voldemort y había comprendido lo que ello suponía pero su mente estaba tan aturdida que no podía aceptar esa posibilidad. Su rostro bañado en lágrimas, su corazón encogido por la angustia de lo que estaba ocurriendo y su mejor amigo, el que había considerado su amor, muriendo... El peor final para la pesadilla de la que acababa de despertar.
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Había perdido la cuenta de cuantas veces había repetido el conjuro, no entendía porqué no funcionaba pero no se daría por vencida. Miraba a Harry angustiada y apretaba su mano contra el pecho del chico y la de él contra el suyo "Siente mi corazón latiendo..." le rogó en su pensamiento mirando su rostro y de pronto, contuvo la respiración durante un momento: una idea, una posibilidad, un intento desesperado... Tragó saliva, respiró hondo y se decidió, lo haría.
-Que las palabras pronunciadas por mi alma sean escuchadas por los magos y brujas conjurados esta noche... –silencio, suspiro profundo- ...que los latidos de mi corazón habiten en el suyo, que la vida regrese a su sangre... aunque abandone la mía.
Silencio... silencio...
Una luz surgió de la zona del pecho que tocaba la mano de Harry, donde la chica tenía el corazón, y se extendió por su brazo, llegando a su cuerpo e iluminándolo por completo durante unos segundos. Todos miraban con expectación ante las palabras pronunciadas por la chica y la extraña luz. Entonces, Harry abrió los ojos despacio y comenzó a respirar lenta y pausadamente. Parpadeó aturdido intentando comprender lo que había pasado y al sentir que acariciaban su mejilla, giró la cabeza y vio a Mahe que, aunque pálida y respirando con dificultad, le sonreía entre lágrimas. Trató de incorporarse y se acercó a ella devolviéndole la sonrisa. La miró a los ojos durante unos segundos y como el día en que se besaron por primera vez, llevó su mano a su mejilla acariciándola suavemente. Ella sonrió levemente y llevó sus dedos a los labios de él y los recorrió con ternura.
Y sin esperarlo, cerró los ojos y su cuerpo cayó al suelo.
-Mahe ¡MAHE!
Harry intentó incorporarla pero ahora era ella la que no reaccionaba. Se acercó a su pecho para escuchar su corazón pero un escalofrío le recorrió: no lo oía, no le encontraba el pulso.
-¡Virginia!.-gritó desesperado. Guilmain corrió hacia donde estaban-. ¿Qué le pasa?.¿QUE LE PASA?
Guilmain puso las manos sobre su hija pero no sentía su energía. Se concentró y lo intentó de nuevo pero nada. No era un desmayo por el cansancio, por el esfuerzo o la debilidad tras la lucha. Las lágrimas comenzaron a caer por su rostro sin poder creer lo que estaba ocurriendo.
-Mahe, hija, por Merlín ¡reacciona!.-susurraba la mujer mientras concentraba toda su energía en transmitírsela a su hija. Sentía lo antiguo fluir hacia sus manos pero en cuanto tocaban el cuerpo de la chica, se desvanecía sin aceptar la energía que le intentaba hacer llegar. Una vez y otra y otra, y el resultado siempre era el mismo. Era imposible... Levantó la vista lentamente hacia Harry que la miraba asustado y con un hilo de voz le dijo:
-.Su corazón latía por ti, ahora late en ti
Harry negaba con la cabeza incapaz de creer lo que escuchaba. Era la segunda vez en su vida que alguien se sacrificaba por él: primero su madre y ahora ella. No podía creer que hubiera ocurrido algo similar de nuevo. Tomó a Mahe entre sus brazos y miró a Virginia. La voz apenas salía de su cuerpo pero hizo un esfuerzo y le suplicó:
- Por favor...
Virginia entendía lo que le pedía y aunque su deseo era el mismo, no podía hacer nada. Su hija había muerto y no podía hacerla revivir, su cuerpo ya no aceptaba la energía, había dejado escapar la vida desafiando a la muerte para que él viviera. No le contestó, simplemente bajó la cabeza y rompió a llorar en silencio. Harry miró a la chica: se la veía pálida, débil pero su expresión era serena. La abrazó con más fuerza acercándola a su pecho y apoyando su cabeza sobre la de ella comenzó a balancearse muy lentamente como si la estuviera acunando, como si simplemente estuviera dormida y estuviese velando su sueño. Nadie en el cementerio hablaba aunque todos estaban pendientes de ellos, sintiendo el dolor que el chico transmitía en cada breve movimiento.
Al cabo de un rato, Harry se quedó quieto y levantó la cabeza aún mirándola. No sabía si tenía a alguien a su alrededor o estaban solos a pesar de los sollozos que se dejaban escuchar en la noche. No era consciente de lo que le rodeaba ni era algo que en ese momento le importase, sólo quería echar el tiempo atrás y que ella volviese a vivir, que su corazón latiese de nuevo como estaba haciendo el suyo. El chico le acarició con suavidad el cabello y suspiró entrecortadamente: una leve sonrisa apareció en sus labios, un pensamiento en su mente. La besó en la cabeza, volvió a apoyar la suya y... desaparecieron.
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La noche se cerraba sobre los jardines. Solo la luna llena se atrevía a iluminar el paraje mientras sus reflejos en el lago hacían más bella la vista nocturna. Una brisa leve mecía las copas de los árboles y entre ellos, el haya, silencioso, solitario... triste. A sus pies, dos figuras aparecieron. Una de ellas se sentía como el propio árbol; la otra, inerte como sus hojas en otoño. Harry la dejó con cuidado en el césped y se arrodilló junto a Mahe bajo la luz que la luna le ofrecía. Su mente estaba en blanco, no pensaba, solo se limitaba a mirarla y recorrer suavemente con sus dedos su rostro: su frente, sus ojos... sus labios. Había dado su vida por él, su corazón latía en él, lo sabía, no solo porque podía sentir los latidos de forma diferente si no porque sentía el amor que ella había guardado en su interior. Suspiró profundamente y se acercó despacio, dándole un suave beso en los labios. Volvió a mirarla y con otro suspiro, sintió como las lágrimas volvían a aparecer en sus ojos haciendo que los cerrara durante unos segundos mientras sentía que comenzaba a temblar. Empezaba a ser consciente de que aquello no era una pesadilla, no era un mal sueño...era real. Levantó el cuerpo de la chica y la volvió a abrazar con fuerza, la tenía entre sus brazos sin vida y sentía un profundo dolor en su alma porque no había podido evitarlo, no había podido arrebatársela a la muerte para que se quedara con él porque ella había preferido morir para que él siguiese su camino. Cogió la mano de la chica y la llevó a sus labios sin separarla de ellos, cerró los ojos con fuerza y dejó salir todo el dolor que sentía. El tiempo dejó de existir...
La luna recorría el firmamento junto a las estrellas que brillaban tristemente. Cada destello se asemejaba a cada una de las lágrimas que se escapaban de sus ojos. Le dolía verle así pero al menos estaba vivo y no se arrepentía de lo que había hecho, lo volvería a hacer una y mil veces más si fuese necesario. Se acercó a Harry, que mantenía el que había sido su cuerpo abrazado al suyo, y le susurró al oído:
-.Siempre tuviste mi corazón... Es la única parte de mi cuerpo que nunca morirá porque siempre latirá por ti...
Harry abrió los ojos y suspiró profundamente. Miró el rostro de Mahe y acariciándolo suavemente, susurró "Lo sé... "
Pues ahí quedó, este es mi mimado a pesar de lo triste que pueda ser. Alguien más debía caer y no podía dejar que fuera Harry así que la nacida de sangre extraña, la que le hizo descubrir al poderoso el arma para vencer a su enemigo fue la que tenía que morir. Mañana veréis las reacciones de los demás personajes por lo ocurrido porque... todavía no hemos acabado ; ) Hasta mañana.
