Disclaimer, ya sabéis...
Hola UPs, soy Mahe. Hoy voy rapidito contestando que parece que me entró jaqueca y no me viene bien estar mucho ante el PC, demasiadas horas paso ya en el trabajo.
Belen: Ahora vuestra intriga es cómo será la fiesta. Solo puedo decirte que tendréis prácticamente de todo... ; )
Sir James of Voldemort: cuanto tiempo! me alegro de verte de nuevo por aquí : ) Espero que te hayas leído ya esos cinco capis y te hayas puesto al día¿te han gustado? Por cierto, a mi me gusta más of Voldemort, impresiona más ; )
Laura P.E: Capi bocadillo? te refieres a un capi de relleno? bueno, la conversación entre Hermione y Mahe tenía que darse y cayó aquí. Daisdefiniciones curiosas de los capis: capi bocadillo,capis más cortos que un estornudo de gato,...jejeje.
Elementhp: Cierto, empieza la fiesta . ¿Sabes ya a quién sacarás a bailar? ; )
Celina: Vaya que si son guapos los magos que vendrán :D
Kata: No sabes tú lo picarón que puede ser este Mark :D Antes de la batalla, si les hubieran dicho a Hermione o Mahe que iban a ser amigas en algún momento, hubieran llamado a San Mungo para que se llevasen al loco que hubiese dicho eso pero fíjate, como han tenido que cambiar las cosas para se lleven bien : )
Marc: aquí está nuestro otro Marc dándonos ánimos cada día, jejee.
Abel: Me alegro que te gustara la conversación entre las chicas. Cómprate la Orden en inglés y vas practicando paracuando llegue Half Blood Prince ; )Nosotras somos españolas, sí : )
Bueno, vamos bajando hacia el Comedor, a ver qué nos encontramos...
CAPITULO 104:.¡Que comience la fiesta!
(Por Mahe)
Antes de llegar al hall, mientras bajaban por las escaleras aún yendo por la segunda planta, ya se podía escuchar el ruido y el ambiente de todas las personas que había a las puertas del Gran Comedor y de los invitados que estaban llegando. Un cosquilleo en el estómago y las manos frías delataban los nervios de tener que enfrentarse a tanta gente entre conocidos y extraños después de lo que había ocurrido porque si algo era seguro es que la gran mayoría de los invitados a la fiesta iban a querer saber lo ocurrido de boca de los propios protagonistas de la batalla: que había sentido Hermione en todo ese tiempo, como había derrotado Harry a Voldemort, como había dado Mahe su vida por él y luego había regresado, la pobre McGonagall aún convertida en felino... Pero a pesar de todo, era el baile de su graduación y debían tomarlo como tal y disfrutar... si podían y les dejaban.
Las chicas llegaron al último tramo de la escalera de mármol y efectivamente vieron el numeroso grupo de personas que se congregaban en el hall. Ginny y Nora bajaban delante y se encontraron en seguida con Derek y Mark que estaban a mitad de las escaleras esperándolas. Mahe pasó junto a ellos y sonrió al ver la carita de Nora sonrojada ante los comentarios que Mark le hacía. Ginny se acercó a Derek y éste le dio un tímido beso en la mejilla consiguiendo que al final ambos se ruborizaran.
Siguió bajando con Hermione a su lado y resopló con fuerza intentando tranquilizarse pues cuanto más cerca estaba de todo aquel grupo de gente que no conocía, más intranquila se sentía. Odiaba aquel tipo de reuniones abarrotadas de gente donde se sentía perdida. Hermione la miró de reojo y al notarla nerviosa, tomó un momento su mano apretándola para transmitirle confianza "Tranquila" susurró "olvídate de todos y mira a quien tienes en la puerta del Comedor" Mahe buscó con la mirada y vio a Harry y Ron que las miraban sonrientes. Con el corazón latiendo aceleradamente, continuaron bajando las escaleras y Mahe no pudo evitar sonreír más pronunciadamente al percibir que Hermione se había puesto más nerviosa de lo que aparentaba: Ron se había adelantado y había subido varios peldaños para ofrecer su mano a Hermione que sonrió ligeramente ruborizada ante la atención del chico. Mientras, Harry esperaba a Mahe al pie de la escalera sin apartar la vista de ella.
Un vestido de raso gris perla ceñido a su cuerpo dejaba ligera y sugerentemente a la vista sus hombros. A partir de sus caderas, el vestido tomaba un poco de vuelo haciendo que la chica tuviera que levantar ligeramente la tela para evitar pisar y tropezar al bajar. Su largo pelo recogido en un elegante peinado y un pequeño colgante a su cuello a juego con unos discretos pendientes terminaban su aspecto para la fiesta. Harry la miraba fijamente deseando que los metros que los separaban se redujeran a milímetros pero cuando se comenzó a acercar para recibirla, algo le hizo detenerse.
-¡MAHE!
Harry miró hacia donde había escuchado la voz y no pudo evitar resoplar contrariado por la interrupción pero más contrariado aún se sintió al ver la escena.
-Mich... ¡Michael! -trató de decir Mahe cuando el chico se acercó a ella abrazándola con fuerza. La chica miró apurada hacia Harry y vio como su expresión era tan decepcionada por la interrupción como la que debía tener ella en su cara mezclada con la sorpresa de la inesperada visita.
- ¿Cómo estás?.¿estás bien? -preguntó Michael separándose de ella, tomándola de las manos y mirándola de arriba a abajo- uf, sí que estás bien...-sonrió el muchacho- pero de verdad ¿cómo estás?
- Bien, Michael... -contestó ruborizada por el descaro del chico "Nunca se cortará con sus comentarios" - ¿qué haces aquí?
- ¡Es la fiesta de graduación! y porque no pude venir antes, si no aquí hubiera estado.
Harry les miraba sin saber si interrumpir tal y como había hecho él. Notó como una mano se posaba en su hombro y miró de reojo.
-He visto a Krum por ahí -dijo Ron mirando a Michael y Mahe que seguían charlando. Volvió la vista a su amigo y añadió- Deberíamos haber buscado algún hechizo para que Corner y Krum se pasaran la noche bailando juntos por si acaso ¿verdad?
Harry asintió con la cabeza y vio que Mahe le miraba. El chico le sonrió levemente, ella simplemente estaba hablando con su amigo y compañero de Ravenclaw, pero lo que le había molestado era que precisamente fuese Corner quien rompiese el primer encuentro que iba a tener con ella antes de la fiesta. Le hizo un gesto con la cabeza en señal de que entraba al Salón y ella asintió.
Michael miró hacia donde la chica fijaba su vista y vio como Harry entraba acompañado de Ron.
-¿Cómo está él? -preguntó el chico. Siguiendo con la vista a Harry en su camino hacia el interior del Salón, Mahe contestó.
- Muy bien... -y suspiró profundamente dibujándose una sonrisa en su rostro "Y bien guapo"
Fred y George pasaron junto a ellos de la mano de Alicia y Angelina y se detuvieron un momento.
-Corner ¿viniste solo? -preguntó George
- No, bueno... si te refieres a si vine con pareja... vine solo, sí -contestó un tanto incómodo- pero... con tanta belleza por aquí, espero poder bailar con alguna de ellas -dijo con picardía haciendo que las chicas rieran mientras los gemelos se lanzaban una mirada de complicidad.
- Creo que ya hemos encontrado con quien probar los caramelos ensoñadores... -susurró Fred a su hermano.
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El Gran Salón decorado para la ocasión resplandecía como nunca. Las paredes ornamentadas de forma elegante, recubiertas con largos estandartes de seda en tonos dorados y rojizos, las mesas dispuestas en los laterales preparadas con los aperitivos y bebidas, las velas encendidas iluminando a distintas alturas repartidas por el aire y el techo hechizado mostrando un cielo lleno de estrellas que en su resplandor parecían brillar en diferentes colores junto a la lluvia de leónidas propias de un mes del verano que aún estaba por llegar. Todos los invitados con sus mejores túnicas charlaban animadamente a la espera de que se diese por iniciada la fiesta. En el estrado donde habitualmente se situaba la mesa de profesores, se había dispuesto un escenario donde Las Brujas de Macbeth tocarían esa noche. De pronto, el profesor Dumbledore con una túnica azul oscuro salpicada de estrellas, subió al escenario y los invitados fueron guardando silencio al percatarse de que el director iba a comenzar a hablar.
-Bienvenidos a Hogwarts a todos los invitados -saludó alzando sus brazos, mirando hacia toda la sala y sonriendo- y bien hallados a los que ya estabais aquí. Me alegra enormemente que hayáis podido asistir a este baile de graduación del presente año. -se detuvo por un momento ante la mirada atenta de las brujas y magos que había en el Salón. Los chicos, Harry, Ron, Derek estaban hacia la mitad de la estancia junto a una de las mesas sirviéndose las bebidas y las chicas, Mahe, Hermione y Ginny, estaban un poco más alejadas de ellos. Entre tanta gente que había asistido y que querían saludarlos apenas habían podido estar juntos un rato. El director prosiguió.
-Quiero comentaros varias cosas importantes antes de poder disfrutar de esta fenomenal fiesta.-su expresión se volvió más seria pero siguió hablando- Como todos sabéis, desgraciadamente, muchos de nuestros queridos compañeros y amigos ya no están con nosotros. No lo están físicamente, pero sí en nuestros corazones, siempre podremos encontrarles aquí -dijo con voz triste señalándose el pecho- Esta batalla ha sido realmente dura, algunos han descubierto que se les presenta un nuevo destino que afrontar con el que tendrán que seguir luchando...-dijo acariciando a McGonagall que se había acercado a él y la había tomado en brazos mientras recorría la estancia con su mirada azul sobre sus gafas de media luna deteniéndose momentáneamente en Virginia- ...una dura lucha para conseguir lo que desean...-y posó su mirada en Snape- Otros han mantenido constante partes de su vida que les acompañaban hacía tiempo -dijo mirando a Ron- mientras otros las han descubierto ahora, han abierto los ojos a la realidad -y la mirada cayó sobre Hermione- ya que quizá no se dieron cuenta hasta que ha llegado este momento- y su ojos fueron a Ginny y Derek- y otros han confirmado que el destino que a veces parece que se nos ha impuesto no es como realmente lo creemos -miró detenidamente a Harry y una leve sonrisa se dibujó en su rostro- es mejor y más intenso -añadió mirando a Mahe-. Todos hemos aprendido de esta batalla pero podemos darnos por satisfechos, a pesar de las pérdidas que tenemos, de que todo ha acabado lo mejor posible. -Los asistentes comenzaron a comentar entre ellos y a asentir con la cabeza en señal de estar de acuerdo con las palabras del profesor. Este hizo un gesto con la mano que no sostenía a McGonagall para pedir de nuevo silencio y atención.
-Por favor, un momento de atención, debo haceros otro anuncio antes de que mi memoria de pez me juegue una mala pasada y me olvide -se escucharon risas y Dumbledore continuó- Dos de nuestros profesores han decidido, por motivos personales, abandonar nuestra escuela -los invitados se miraron sorprendidos preguntándose quienes eran y el director les sacó de la duda- la profesora Guilmain ha decidido dejar su enseñanza de Defensa Contra las Artes Oscuras en Hogwarts durante un tiempo ya que el querido Beauxbatons la reclama -explicó mirando a Virginia que sostuvo durante unos instante la mirada al profesor y asintió en agradecimiento por la excusa presentada- Saluda a Madam Maxime de mi parte, Virginia. -le dijo y ésta sonrió al hacer la excusa más creíble- Y por otro lado, después de 16 años con nosotros, el profesor Snape también decide dejarnos para enfocar su carrera como mentor de futuros Masters de Pociones. -La noticia fue acogida con tanta sorpresa por parte de todos que se levanto un murmullo por toda la sala- Por favor, por favor, un momento de silencio. Dado que estos dos magníficos profesores nos dejan, me veo en la necesaria obligación de buscar a nuevos sustitutos y... -se detuvo unos segundos meditando si debía o no seguir hablando. Los asistentes esperaban impacientes-...y hay dos personas que sé que pueden ser los perfectos candidatos para estas asignaturas, por sus capacidades y por sus conocimientos... -volvió a detenerse un instante y prosiguió- Es una proposición formal y oficial que les hago y por eso lo comunico aquí para evitar que surjan rumores que puedan distorsionar la realidad. Son libres de aceptar o no, ellos tendrán la última palabra -silencio por unos segundos aumentando la tensión- propongo como nuevos profesores de Defensa y Pociones al señor Harry Potter y a la srta. Mahe Guilmain respectivamente.
La sala se quedó en absoluto silencio y todas las miradas se dirigieron hacia ellos dos. Harry se quedó boquiabierto mirando al profesor Dumbledore que le sonreía abiertamente. Parpadeó intentando recobrar la consciencia de lo que había escuchado y buscó con la mirada a Mahe. La chica estaba totalmente ruborizada, no solo por sentir la mirada de tanta gente si no por el anuncio realizado. Sintió la mirada cálida de Harry y buscó sus ojos intentando encontrar un refugio en ellos ante tanta atención que sentía por parte de todos y al momento, se hizo consciente de los murmullos de la gente comentando sorprendida la noticia. Dumbledore siguió hablando.
-Es algo que quiero que os penséis y espero que el decirlo aquí públicamente y no a vosotros en privado, no os haga sentir comprometidos.
-¿Comprometidos? -susurró Ron a Hermione que se había acercado a ella ofreciéndole una copa- ¡Ha sido una encerrona en toda regla!
-Sabéis que los secretos en Hogwarts suelen conocerlos toda la escuela -continuó Dumbledore - y en este caso quería hacer partícipe a todos los presentes de esta idea. Pero en vosotros está la última palabra. -los murmullos continuaron aunque por lo que se podía entender la propuesta estaba siendo bien acogida por todos. El director levantó las manos para llamar de nuevo la atención y el silencio se fue haciendo- Para terminar, quisiera hacer alusión a alguien muy especial para todos: una persona que ha demostrado su valentía, su coraje y su amor por la vida y los suyos -los asistentes comenzaron a mirarse entre ellos preguntándose de quien estaría hablando- . Profecías, sueños, visiones... nada de ello ha impedido que consiguiera realizar cosas que nadie en todos los siglos de nuestra historia ha podido jamás porque es tanta la fuerza de su magia que solo él ha sido capaz -las miradas se fueron centrando en Harry que estaba clavado en el suelo sintiendo el rubor en sus mejillas al escuchar las palabras del director- Amigo de sus amigos, buen compañero aunque siempre le ha gustado saltarse las normas -añadió con una sonrisa - y mejor persona. -Los que le rodeaban le sonreían mirándole con admiración porque estaban totalmente de acuerdo con cada una de las palabras que el profesor Dumbledore decía. Mahe a varios metros de él, le miraba fijamente sintiendo como su corazón latía emocionado- Y es gracias a él que hoy nuestra comunidad mágica vive tranquila y feliz. Y aunque nunca hemos dejado que los días oscuros apagasen por completo la luz de nuestra magia, ahora brilla con más fuerza e intensidad que nunca gracias a él. Es por ello que en conformidad con las autoridades mágicas, tengo el gran honor de conceder la Orden de Merlín de Primera Clase al señor Harry Potter.
El Salón estalló en aplausos y vítores mientras Harry se quedaba atónito ante la situación al tiempo que Dumbledore le hacía una seña para que se acercara. Ron se aproximó a él y le empujó levemente en la espalda para hacerle andar pero estaba tan sorprendido que no era consciente de lo que tenía que hacer. Volvió de nuevo la mirada hacia Mahe viendo como una sonrisa emocionada iluminaba su rostro y entonces reaccionó. Titubeante comenzó a dirigirse al estrado donde Dumbledore le esperaba con los brazos abiertos. Los aplausos entusiastas de Mark se oían con fuerza junto a los silbidos de ánimo de los gemelos; Nora, Derek y Ginny jaleaban gritando su nombre; Ron y Hermione aplaudían con los brazos en alto mientras su mejor amigo llegaba al estrado; Mahe, con las lágrimas saltadas por la emoción, no podía dejar de sonreír orgullosa. Harry subió y Dumbledore le abrazó con fuerza "Gracias por todo, Harry" le susurró al oído. Se separó de él y le mostró un pequeño estuche cuadrado de color rojo oscuro que abrió y la insignia que había en su interior, resplandeció. Harry suspiró profundamente mirando el contenido del estuche y lo mostró al público allí congregado que aplaudió con más fuerza aún. Dumbledore volvió a pedir silencio levantando sus brazos y animó al chico, ante su expresión de asombro, a que dijera algunas palabras. El Salón enmudeció. Harry volvió a mirar la insignia y levantó sus ojos verdes hacia los invitados que le miraban expectantes. Sus amigos se habían juntado en el centro de la estancia y le saludaban sonrientes.
-¡Vamos, Harry!
Alzó las cejas pensando que poder decir y tras unos segundos comenzó a hablar.
-Bueno... esto no lo esperaba...-y bajó la voz en un susurro mirando a Dumbledore que le sonreía abiertamente- ... ni lo otro tampoco ... -carraspeó y siguió hablando en tono normal- pero gracias, de verdad. -se quedo callado unos instantes mientras las miradas de todos seguían fijas en él- Es que no sé que decir -sonrió un poco avergonzado por la situación.
- ¡Dedícalo! -se oyó al fondo
- Buen consejo –sonrió quedándose por un instante pensando cómo dirigir su dedicatoria hasta que comenzó a hablar- Quisiera dedicar este honor a muchas personas pero en especial... -buscó con la mirada y continuó hablando- a mi primo Mark porque encontré en él una familia cuando menos lo esperaba -Mark sonrió y le saludó con la mano- A todos aquellos pelirrojos -dijo señalando con una sonrisa- Fred, George y Ginny porque siempre han estado ahí animándome -los tres hermanos Weasley aplaudieron durante un momento y pararon a la señal de Harry para continuar hablando- A Sirius porque para mi es más que un padrino y su regreso fue el mejor regalo de Navidad que he tenido en la vida -Sirius, al fondo de la sala junto a Lupin, suspiró y asintió con la cabeza- y a Lupin por haberme enseñado tanto -Remus sonrió- Por supuesto, quiero dedicárselo a Ron y Hermione porque ellos han sido mis primeros y mejores amigos tanto en el mundo muggle en el que he tenido que vivir como en el mágico al que pertenezco -la pareja le miró sonriente. Ron levantó el pulgar mientras Hermione sonreía y alzaba su copa- y por último, quiero... -miró la insignia, suspiró y levantó de nuevo sus eternos ojos verdes- quiero dedicarlo y compartirlo con Mahe, igual que comparto el corazón con ella... -aún en los metros que los separaban, se miraron a los ojos tan fija e intensamente que se estremecieron mientras una sonrisa emocionada se dibujó en el rostro de ambos- ...gracias por todo.
El Salón volvió a prorrumpir en aplausos y después de unos minutos, Dumbledore volvió a llamar la atención.
-Bien, pues ya que todo lo que tenía que anunciaros esta hecho, solo me queda decir... ¡disfrutad de la fiesta!
¿A que parecía la entrega de los Oscars? jejeje. Bueno, ya voy viendo prepararse a las Brujas de Macbeth así que... que empiece la fiesta! Hasta mañana.
