La sacerdotisa de los cuatro dioses
Capítulo 10: Cuando conocí la auténtica belleza del amor, tengo que partir hacia un viaje sin retorno...
¿Gemelas?
-Correcto.
-¿¿Y que tengo que hacer?
-Abandonar este mundo cuanto antes mejor. –dijo esto Taitsukun y los dejo solos, yendo hacia una habitación-
-Tengo que volver a mi mundo... Pero yo... –se levantó y salió de la sala donde estaban, se fue a una habitación y se encerró- No he podido invocar Suzaku... –se sentó en la cama pensando en lo que haría, ¿¿tendría que abandonar este mundo? Pero... Tendría que dejar a Tasuki aquí, nunca lo volvería a ver. Tenía que pensarlo bien-
Unos pasos que se acercaban la quitaron de sus pensamientos, alguien se acercaba a su habitación y probablemente a hablar con ella. Lo tenía decidido, volvería a su mundo, así no habría ninguna guerra, ni muertes y Tasuki se olvidaría de ella... Pero eso no lo quería...
-¡¡¡Chikara! –dijo Tasuki picando a la puerta y gritando-
-Tasuki... (Tengo que ser fuerte. Le diré que nos tenemos que separar y que nos olvidemos de todo... Pero no quiero...)
-¿¿Puedo pasar?
-Sí. –lo dijo fríamente, era lo mejor, separarse-
-¿¿Cómo estás?
-¿¿Lo quieres saber? –preguntó con ironía-
-Pues claro.
-Estoy perfectamente, ahora por fin podré regresar a mi mundo y no os volveré a ver.
-Me alegro que te encuentres bien. –le sonrió-
-¡¡¡No seas amable!
-Soy amable porque te quiero.
-Yo... ¡¡¡Yo no puedo corresponderte! ¡¡¡No puedo amarte! Y de alguna forma... Siempre sonrío y finjo que todo está bien. Y así hago que estés a mi lado, que me protejas. ¡¡¡Me aprovecho de tu amabilidad! Te estoy utilizando. ¿¿No te das cuenta? ¡¡Me estoy aprovechando de tus sentimientos! ¡¡¡Soy una mala persona! No puedes amarme. ¡¡Así que ódiame! ¡¡Déjame sola!
-Chikara. –se acercó a ella para abrazarla, pero Chikara no se dejó- ¡¡Tranquilízate! Yo...
-¡¡No te acerques! ¡¡No me toques! ¡¡Te od... –no continuó porque Tasuki le había sellado los labios con un beso, después se separaron y Tasuki la pudo abrazar- Yo...
-Está bien.
-¿¿Eh?
-Cuando te rechacé de un modo cruel, sin importar tus sentimientos... Pensaba que tenías todo el derecho de odiarme el resto de tu vida. Pero aún así me sonreíste y me perdonaste, lo suficiente como para dejar que estuviera a tu lado. No te pediré nada. Aunque me utilices, aunque te aproveches de mí, no me importará, en verdad me sentiría feliz...
-Tasuki... Pero... –Tasuki le puso el dedo en los labios para que no continuara-
-Déjame acabar. Te doy las gracias, porque me sonreíste, me aceptaste, me ayudabas y me dabas ánimos. Y cuando necesites amabilidad cuenta conmigo, te protegeré siempre.
-Era mentira... –unas lágrimas empezaron a caer por su rostro- Lo siento... Pero es que... Lo siento mucho... Mentía, no quiero que me dejes sola... –se abrazó más fuerte a él- Tengo miedo... No puedo pensar en otra cosa. Que alguien a quien amas más que a nada, que te haya correspondido, y que ahora te tengas que separar y que quizás se olvidé de mí, es eso... ¡¡¡Tengo miedo de que te olvides de mí! ¡¡¡Tengo mucho miedo! Que si nos volvemos a ver ya no me quieras, no volverte a ver... ¡¡¡No quiero!
-Tranquila. No tienes que preocuparte, todo se arreglará. Yo nunca te odiaré, nunca me olvidaré de ti, siempre te querré.
-Tasuki...
Una persona llamó a la puerta.
-¿¿Tasuki estás ahí? –preguntaba Miaka-
-Sí.
-Tienes que venir, solo será un momento.
-Es que... –miró a Chikara y vio que ya no lloraba, Chikara le dedicó una sonrisa-
-Ve. Yo ya estoy bien. –se separaron y Tasuki fue a salir-
-Bueno, me voy. Vuelvo enseguida.
-Vale, te prometo que te esperaré. –y le volvió a sonreír, Tasuki salió de la habitación- Tasuki... –se levantó y se puso delante del espejo- Que cara más patética... Tengo que irme, no puedo permanecer más a su lado, no sería justo... –se quitó la camiseta de Tasuki y se puso el uniforme- Nunca más... Es posible que no pueda hacer nada más por él. Será mejor que olvide. –miró una libreta y un lápiz que había- Pero se merece una explicación... –empezó a escribir una carta-
-Vaya, así que has decidido irte... –dijo Taitsukun-
-¡¡¡Taitsu!
-Ni que hubieras visto un fantasma.
-¿Qué quieres?
-Decirte la manera de volver a tu mundo. Solo tendrás que encontrar el sitio donde todo comenzó y volverás si lo deseas. –le puso un dedo en la frente- Ahora abandona esta montaña –de su mano salió una luz que la envió fuera de la montaña y se encontró en la entrada de Konan-
-Donde todo empezó... –miró a su alrededor- Donde todo empezó... ¡¡Pues claro! –miró la montaña donde estaban los amigos de Tasuki- Ahí, fue en esa montaña donde todo empezó. –comenzó a correr hacia ella- Adiós.
Por otro lado tasuki había llegado donde le había indicado Miaka, allí estaban todas las estrellas, más Miaka y Amiboshi.
-¿¿Por qué estamos todos reunidos? –preguntó intrigado Tasuki, lo que quería hacer era volver con Chikara-
-Es mejor así... –dijo Miaka en voz baja-
-¿¿El que?
-Tasuki. –dijo Taitsukun- Esto es para ti. –le alargó una carta- Me lo ha dado Chikara y estas palabras "No me sigas, es mucho mejor así. Adiós", tiene razón es mejor así.
-Pero... –cogió la carta y la abrió- ¡¡¡Miaka!
-¿¿Qué pasa?
-Léemelo. No se leer vuestra lengua.
-Ah, bueno... –cogió la carta y empezó a leerla- "No puedo depender más de vosotros. Os doy las gracias por todo lo que habéis hecho por mí, pero tengo que irme... Es un adiós para siempre. Sobretodo te pido disculpas a ti Tasuki, será mejor que me olvides cuanto antes y que te busques a otra. Adiós para siempre"
-No es posible... ¡¡¡Chikara! –intentó salir pero había una barrera- ¿¿¡¡¡Que es esto!
-¿¿Una barrera? –grito Chichiri- Podría ser que esto...
-Exacto, habéis caído en mi trampa. –dijo Taitsukun, al mismo tiempo que se transformaba en Tomo-
-¡¡¡No puede ser, Chikara te derrotó! –gritó Amiboshi muy confundido-
-Gracias a Nakago vuelvo a vivir. Y ahora moriréis todos. –unas espinas les rodearon a todos- Moriréis en mis ilusiones.
Chikara por fin había llegado a la cima de la montaña.
-Es aquí, aquí fue donde encontré a Tasuki. He de rezar para volver.
-No será necesario. –dijo Nakago de detrás suyo-
-¡¡Nakago!
-Correcto, ahora ven conmigo sin oponerte o sino los tuyos morirán.
-¿¿eh? (¿¿Qué ha querido decir?) –salió corriendo antes de preguntarle nada- (¡¡Tengo que volver! Seguro que era una trampa, me he dejado engañar...)
-Como quieras, si quieres jugar, jugaremos. –empezó a seguirla-
-¿¿Qué hago? –se detuvo en seco al ver que había un precipicio- Ah... No puedo huir...
-Se acabó. –se puso delante suyo para que no escapara-
-No te acerques... No... ¡¡¡No te acerques a mí! –una luz verde la rodeó y atacó a Nakago, pero como la fuerza era muy grande el precipicio se rompió y Chikara cayó hacia abajo- ¡¡¡¡Kyaaaaaaaaaaaaaaaa! ¡¡¡Tasuki! No quiero... ¡¡¡Quiero volver! –unas luces de color: amarilla, roja, azul y verde. La rodearon y poco después se apagaron, pero Chikara ya no estaba-
Por otra parte (Como mareo a la gente :P) Taka estaba siendo envolvido por las mismas luces y al desaparecer Chikara estaba encima de la cama y Taka había desaparecido.
-¿¿Chikara?
-He vuelto... Keisuke.
-Estás viva... ¿¿Y Taka?
-No lo sé... Pero yo... Estoy en el mundo real... ¿¿¡¡Y Tasuki!
-Pues... Les han tendido una trampa, Tomo les ha transportado al mundo de sus ilusiones. Ahora no se como seguir la historia.
-Ah... –se sacó del bolsillo un manuscrito- ¿¿Y esto?
-Umm. –lo cogió- ¡¡Perfecto! Es el libro, bueno la continuación...
-¿¿Qué pasa?
-Taka está con Miaka... Y los otros están aún atrapados en las ilusiones.
-¡¡¡He de volver!
-Quizás sea lo mejor... –le dio el manuscrito- Desea volver.
-Quiero volver... –unas luces la rodearon pero no fue transportada- No puedo... ¿¿Por qué?
-Porque no nos queda más poder. –un chico de ropas rojizas y de cabellos del mismo color estaba en la habitación-
-¡¡¡Suzaku!
-Correcto, no puedes volver a este mundo. Lo sentimos.
-¿¿Y que tengo que hacer?
-Intentar invocarnos de alguna manera, no puedo seguir hablando. Haz lo posible. –desapareció-
-No puedo volver nunca más...
-Quizás tu no, pero seguro... ¡¡¡Seguro que les llega tu voz!
-Mi voz... –cerró los ojos- ¡¡¡Tasuki! ¡¡¡Tasuki!
En el otro mundo.
-Ugh... Siento la voz de Chikara...
-¿¿Puedes oírme?
-Sí...
-No puedo volver... Pero puedo invocar a Suzaku desde mi mundo, le pediré volver contigo.
-Pero...
-¡¡¡Tienes que aguantar hasta que encuentre la forma!
-Esta bien, no pienso perder... –cogió su abanico muy fuerte- ¡¡¡Llamas divinas! –todas las espinas se rompieron- Ufff, por un pelo.
-Estamos libres ¿¿sí? Gracias Tasuki.
-Tenemos que ir con Chikara... Ella tiene que invocar Suzaku.
-¿¿Pero como vamos? –preguntó Nuriko-
-De la misma forma que fuimos para combatir contra Nakago. ¿¿Os acordáis?
-Sí pero necesitamos un conector...
-Un conector... Ah. –puso la mano en su bolsillo- La pulsera de Chikara. ¿¿Esto servirá?
-No para todos. –dijo la verdadera Taitsukun- Con eso por lo menos iréis tres o cuatro.
-Suficiente. –dijo Miaka- Vamos Tasuki, Yui, Taka y yo, cuatro. Y cuando podamos haremos que los otros vayan. ¿¿OK?
-¡¡¡Sí! –gritaron todos a la vez-
En el otro mundo, Chikara se había ido del hospital y se encontraba en el parque mirando un libro antiguo, cuando de repente unas luces rojizas aparecieron delante suyo.
-¿¿Pero que es esto? –cuando las luces se apagaron estaban Taka, Miaka, Yui y Tasuki- Pero si sois... No puede ser... –se acercó a ellos- ¿¿De verdad sois vosotros?
-Nos ves con cara de fantasmas. –se quejó Tasuki-
-¡¡¡Tasuki! –se tiró a abrazarlo- Estás bien.
-Pues claro. ¡¡¡Yo soy invencible!
-Fantasma... –dijeron Miaka y Taka a la vez-
Pero no solo una luz roja había llegado al mundo, sino que una luz azul empezó a aparecer delante de ellos, cuando se apagó vieron a Nakago.
-Cuanto tiempo, sacerdotisas.
-Nakago...
CONTINUARÁ
Konichiwaaaaaaa
Pues creo que más o menos, el próximo capítulo será el último o el penúltimo. Que penaaaaaaaaaaaaa, pero creo que volveré ha escribir otro fic de Fushigi Yugi, cuando acabe este .
Rewiews:
EluChiS: ¡¡¡Muchas gracias por tu rewiew! Wow, ojalá pudiera ver el dibujo, a mi tmb me encanta dibujar (aunque se me da mal dibujar a Tasuki -.-) Pues hasta la próxima.
Sayo!
