Para aquellos que no dieron con el capitulo 21... solo deben leer el profile de mi página personal. Besos.

Disclaimer: Harry Potter y todos sus personajes son propiedad de J.K.Rowling.

Advertencias:  Slash.

Veintidós: ¿Dónde quedó el amor?

Remus se mostró en absoluto desacuerdo ante la idea. No había escuchado ni la mitad de la explicación cuando comenzó con reproches en donde tenía toda la razón.

Él lo sabía. Y ella lo sabía también.

No estaba de acuerdo con su proceder y hacía los reclamos que Sirius también haría, de saber la situación.

Y quizá Remus hubiera seguido con sus reproches a no ser por el momento en que enmudeció con los ojos puestos en una mano que Deborah había levantado para cubrirle los labios. Justo donde Sirius había colocado su anillo.

Después de eso Remus murmuró una mala excusa y se fue.

La verdad es que Deborah se sintió mal por él, pero aun tenía que ejecutar esa idea a la que el hombre lobo se había negado.

Por eso estaba ahí, en lo que quedaba de Azkaban.

El lugar no había cambiado mucho, salvo por la esperada disminución de dementores y... presos.

La guerra no arrojaba prisioneros, no con Harry al mando. Y Deborah comprendía la razón que se le hubiese informado la captura de Peter antes que a su sobrino.

La presencia de los pocos dementores que se habían mantenido de su lado se sentía con una horrorosa fuerza que le erizó la piel a Deborah desde que penetró por el pasillo que llevaba a los calabozos más profundos.

Era cierto que jamás habían tenido un efecto importante en la Sirena, pero la parte humana se angustiaba de forma exasperante. Así que Deborah había expandido su magia natural para protegerse... como lo hizo la primera vez que estuvo ahí.

Siempre había funcionado. Una sirena implicaba más poder que un dementor, así que siempre había funcionado.

A pesar de ello Deborah sintió su presencia como ninguna otra criatura mientras era guiada hacia el fondo del pasillo. Donde se escuchaba un chillido ahogado, murmurando palabras inaudibles.

"James, Lily, perdónenme"

Deborah detuvo su andar. A la vez se detuvieron las dos criaturas que hacían una celosa guardia como si sospecharan que ella podría liberar al prisionero.

Estaba bien que dudaran de Deborah Potter. Después de todo ella también estuvo prisionera ahí.

-Necesito hablar con él, a solas –murmuró la híbrida usando ese timbre especial en su voz y adentrar el significado de sus palabras en ambas criaturas.

Un macabro sonido emanó de ambos y ella frunció el ceño.

-Salid ahora y os daré alimento –ofreció ella.

Los dementores no solían acceder a esa clase de capricho... no con otros magos, al menos. En el caso de Debbie siempre había una excepción. Un interesante acuerdo mutuo al que ellos no podían negarse.

No por que ella tuviese demasiadas alegrías. La mayoría de sus acciones las lamentaba y llegaba a sufrir por ellas; pero había algo que debía admitir y comprendió una vez que pudo hablar con su otro "yo": La Sirena fue feliz mientras estuvo bajo el influjo de Allan Glader... La asesina fue feliz.

La sirena se sintió feliz al tener todas esas vidas a sus pies... era su naturaleza, después de todo.

Los dementores dieron la vuelta y desaparecieron por el oscuro pasillo.

Deborah exhaló aire y acortó la distancia hacia la celda para apoyar una mano en los barrotes y mirar el interior.

-Peter...

Peter tampoco había cambiado mucho desde la ultima vez que lo vio. Probablemente estaba más flaco y calvo, pero nada de lo demás mostraba diferencia.

Quizá solo su expresión.

Había miedo en esos ojos opacos. Miedo, arrepentimiento... ¿esperanza?

Deborah no había terminado de analizar esas emociones cuando lo sintió acercarse de manera temblorosa y cerrar sus anchos brazos alrededor de ella haciendo una presión suave que pretendía ser confortable. Sin embargo no lo era. Bastaba sentir el frío metálico que se traspasaba hasta su piel para comprenderlo.

-Deborah –susurró él con palabras atascadas –Tu lo prometiste... Dijiste que hablaríamos...

-Si –musitó ella apoyando la mejilla en la calva sucia –Te lo prometí, Peter.

-No me dejes aquí...

-No puedo sacarte... Ya no puedo engañarte, Peter.

-¿Engañarme? –preguntó él como si fuera incapaz de comprender esa palabra –He venido hasta aquí para verte, sabía que acudirías aquí... ¿Sabes cuantos vendrán a matarme? ¡¡No puedes dejarme aquí!!

-Conmigo también corres peligro –respondió ella dejando que los labios mugrosos tocaran su barbilla y movió la cabeza sin que pareciera que rechazaba ese gesto –Sirius no ha olvidado tu acción... Y Harry...

-¡¡¡Pero si lo hice por ti!!! –estalló el mago regordete en un arrebato de furia y se separó de la bruja -¡¡Tu me dijiste que solo querías verlos!!... ¡Solo querías conocer a Harry!... ¡¡TU ME ENGAÑASTE!!

Ella apretó los labios.

-¿Piensas que debo compartir tu prisión, Peter? –preguntó viendo el horrible lugar -¿Debo volver a Azkaban contigo?

-Ya lo hiciste –gruñó él  -Yo supe que tu estancia no significó nada.

-¿Qué debo hacer entonces, Peter? Tu pasado no cambiará con lo que haga... Es cierto que te engañé, pero también es cierto que te dejaste engañar.

-Yo te amaba... –protestó él con debilidad.

-Si...

-No dejes que me maten.

-Todos moriremos tarde o temprano.

-Fuiste tu quien mató a James... Yo no debo pagar por ello.

-Tu me lo entregaste, Peter –susurró ella con tristeza –Con engaño o no... No puedes cambiar esa realidad.

Peter pareció recibir un desgarrador golpe con esas palabras y se dejó caer en una esquina sin dejar de lloriquear.

Deborah vio cómo se tocaba el hombro donde lucía dibujada la marca oscura y apretó  los labios al momento que buscaba entre su túnica una filosa daga que besó con respeto.

-Dame la marca oscura –dijo a Peter.

-No digas estupideces –rió él como loco –Nada puede borrarla.

-Salvaré tu espíritu y te daré paz con mi propio poder... Solo pido eso a cambio.

-Mi marca esclaviza...  –dijo Peter –Somete, humilla... gobierna. ¿Para que querrías eso tu, que eres una criatura libre?

Deborah suspiró. Precisamente para esclavizar a la criatura... Debía detener a la Sirena, aun sin saber sus planes.

-Te lo suplico... –musitó desesperada.

Peter dio tumbos hacia ella y la miró con sus ojos cansados y hundidos.

En esa mirada había... ¿amor?...

¿Aun a pesar de lo que le hizo aun se atrevía a amarla?

-Tómala –dijo con seguridad –Toma lo que quieras de mi...  Es tuyo... Te pertenezco, como lo dijiste aquella vez, antes de asesinar a James... Tómame.

Sentirse conmovida no le correspondía ahora, ¿cierto?

Deborah se acercó y ayudó a Peter a levantarse.

Una oración brotó de sus labios y transmitió energía a la daga que tenía en las manos .

Con un movimiento descubrió el brazo de Peter viendo esa marca. La marca que ella jamás tuvo, a pesar de ser la asesina favorita de Lord Voldemort.

Sin avisar, clavó la daga en el brazo de Peter y ahogó su grito de dolor cubriendo los labios sucios con los de ella.

Mantuvo quieto su brazo  y con la daga rodeó la marca por completo hasta atreverse a romper el beso.

-No me duele –susurró Peter sorprendido.

-Lo sé –musitó ella y concentró su mirada en la herida circular –Te he sedado.

Deborah acomodó su filoso artefacto y tocó la herida con las yemas de los dedos rodeándola hasta esparcir la sangre.

De repente metió los dedos levantando la piel

La mujer escuchó el jadeo de Peter y comprendió que la marca se resistía a ser arrancada, aun con métodos avanzados de magia.

-Esto te va a doler, Peter... –se disculpó ella y forzó la piel para desprenderla del brazo.

Se resistía. La marca se resistía. No importaba que tan profundo metiera sus dedos por encima de los músculos... la piel seguía adhiriéndose con fuerza asombrosa. Una fuerza que no tardó en atacarla también a ella justo en el instante en que logró desprender casi toda la piel.

Una energía electrizante y definitivamente oscura le golpeó arrancándole un gemido de dolor, pero pudo terminar con la tarea y encerró la carne en una esfera creada por su energía, haciéndola flotar en el aire.

-He aquí... –jadeó mirando su mano cubierta del vital líquido -.. la sangre del traidor... – con la punta del dedo índice  tocó su frente –Esto detendrá al asesino, ya que ata su mente... –se trazó otra línea de sangre en el pecho -.. y su corazón...

Inmediatamente rasgo su propio hombro. Justo en la misma distancia que había herido en Peter y la misma proporción.

Con menos dolor, quizá, pero con el mismo resultado que encerró una porción de piel en otra esfera, que se mantenía flotando junto a la anterior.

-He aquí... –musitó tocando la frente de Peter con su sangre -... la sangre del asesino...  Con ella... Libero la mente del traidor... y –hizo una marca sobre su corazón -... y su... alma.

Con eso debía bastar. De esa manera podría dar paz a la atormentada alma de Peter y quitar un poso de peso.

-Deborah –musitó el hombrecito con voz estrangulada, sin dejar de presionar la herida punzante.

Ella suspiró y se arrodilló frente a él. Tocó la herida con la punta de la varita y cicatrizó cuidadosamente. A continuación hizo lo mismo con su brazo y volvió a incorporarse.

Su mirada se posó en las dos esferas  con la piel ensangrentada y suspiró.

¿Todo eso funcionaría contra la sirena?

Quizá habría sido más fácil si ella hubiese sido marcada como todos los mortífagos; de esa manera podría usar ambas marcas... Ambas ataduras.

-Debo irme –anunció ella guardando ambas esferas en algún lugar de su túnica –ahora que  tienes mi protección, los dementores no te afectarán.

-¿Vas a dejarme aquí?

-Lo siento...

          º                        º           

-No te iras jamás, ¿verdad?

Harry percibió sorpresa en esos preciosos ojos azules y se sintió absolutamente idiota por dejar escapar esas palabras justo cuando Draco se entretenía en apartar la tela de (como él lo había llamado) el molesto uniforme escolar.

-No tengo intenciones de irme –susurró haciendo una caricia en la mejilla de Harry y logrando teñir de ese rojo la tersa piel -¿Vas a irte tu?

El moreno parpadeó confundido por el repentino cambio de situación.

Antes de poder responder, unos labios finos callaron su boca y se abrió a la erótica exploración que esa lengua inició en su interior en busca de un enlace con la lengua de Harry.

También sintió ese ágil movimiento que se escurrió entre sus piernas para despertar el deseo aun más y arrancar ese gemido ahogado en su garganta.

El beso fue roto. Al instante Harry sintió una secuela de besos en su cuello que se deslizaron hasta su pecho concentrándose después en una tetilla con la que jugó haciendo círculos usando su lengua.

-No sé qué hacer –jadeó Harry justo al momento en que la mano de su amante se cerraba sobre su miembro palpitante.

-Las desventajas de ser virgen –Draco se permitió bromear.

-¿Tu... –el moreno se mordió al labio inferior notando un movimiento constante -... no lo eres?

-No tanto como tu. –el rubio metió la lengua en el recién descubierto ombligo sin dejar de ascender.

-¿Qué clase de respuesta es esa? –protestó Harry.

Draco descubrió el miembro erecto y tocó la punta con la lengua.

-He soñado con esto muchas veces –explicó levantando la mirada hacia el rostro  ruborizado –En cada una de ellas te hacía el amor...Experimentando con cada reacción... cada jadeo –sonrió -¿Qué puedo decir? No es la primera vez que te "toco". Aunque debo admitir que esto supera el mejor de mis sueños.

Harry dejó escapar todo el aire que estaba reteniendo, sin dejar de ver esa preciosa sonrisa.

¿Cómo era posible que unas palabras le excitaran tanto?

-Yo... –desvió la mirada -... quisiera ayudarte.

-Dejar de interrumpir sería de mucha ayuda –bromeó Draco terminando de quitar los pantalones para acomodarse entre las piernas, justo después de besar la piel de las rodillas y deslizar los labios hacia las caderas, evitando el centro de placer que se evidenciaba con mayor fuerza.

-Yo... –Harry jadeó levantando las caderas en busca de contacto –... no voy a irme...

-¿Qué?

-Jamás voy a irme –repitió Harry y mordió su labio ante una intromisión en su interior –Voy a quedarme a tu lado siempre... Lo prometo.

-Nunca lo olvides...

Recordar esos momentos podía llegar a ser doloroso.

Muy especialmente la parte en que esa violenta presión detuvo ambos cuerpos en el sitio escondido donde habían ido a refugiarse.

Una presión que no habían sentido jamás, pero que ambos conocía. La señal de que un numeroso grupo de magos había usado bastante energía y el destino estaba absolutamente cercano.

Después de eso... el estruendo; los gritos, el terror.

Harry tardó un poco más en vestirse que Draco y comenzó a correr escuchando sus pasos cercanos.

Jamás se percató que lo había dejado atrás, como tampoco supo el momento en que se separaron.

Fueron 6 horas después, tras presenciar la muerte de su primer amor que comprendió que había roto su promesa.

Lo había dejado...

Sin embargo tuvo una impresión muy fuerte al momento de ver morir a Snape. Y decidió que no quería eso.

Haría lo necesario para evitarlo.

Aun si eso "necesario" era abandonar a Draco.

Harry dejó escapar el humo de su cigarro sin despegar la vista de la sucia pared.

No había tenido intención de recodar todo eso, pero...

-Maldito Malfoy –masculló con molestia.

En realidad fue justo el momento en que despertó lo que le llevó a ese recuerdo. Justo cuando hizo esa promesa.

El delicioso cansancio de su cuerpo se vio arruinado cuando estiró la mano por el colchón.

¿Por qué lo había hecho, para empezar?

Al sentir el vacío al lado suyo se sintió igual. Sintió el peso de su promesa rota y de nuevo recordó la ternura que Draco  procuró a ese primer encuentro inconcluso.

Extrañó esa ternura.

Por que lo ocurrido por la noche no tuvo palabras dulces, ni besos apasionados... No tuvo esa mirada gentil y hasta sorprendida.

... no tuvo nada...

¿Era todo lo que  Draco estaba dispuesto a dar a cambio de lo que Harry había ofrecido?

¿Eso era justo?

... "no"...

-Si –contradijo Harry a esa ridícula vocecilla en su cabeza.

Por que no podía darse el lujo de olvidar la razón de todo eso. No podía volver a ser vulnerable.

¡No!

Y sin embargo se sentía tan solo... Tan abandonado.

¿Se habría sentido así Draco hace 4 años?

"Fuiste injusto... Él esta siéndolo también"

-¿Dónde quedó el amor que decía tenerme?

"¿Dónde quedó el tuyo, Harry?"

El moreno bufó. No podía perder el tiempo ahora.

No por eso.

-Te ves horrible –fue el saludo de Ron en cuanto entró a la oficina para instalarse en un sofá y apoyar los pies en la mesa –No te preocupes por Ginny. Estoy seguro que no tiene nada.

Si Ron supiera... Hasta ese momento no se había acordado de Ginny y su problema.

-No tendrías esa cara si no fuera así –aceptó Harry.

-Solo estamos esperando una prueba más. Bill tiene más experiencia con magia poco convencional.

Harry arrugó la nariz.

-Draco podría...

-¿"Draco"? –aulló Ron -¿Desde cuando lo llamas por su asqueroso nombre?

Ron era tan orgulloso, pero debía reorganizar sus prioridades.

-Malfoy tiene el olfato educado –evadió Harry –Deberías llevarlo...

-Mi hermano Bill es absolutamente capaz de detectar cualquier irregularidad.

Tan necio.

Bueno, de cualquier manera Draco tampoco aceptaría ayudar a Ron. Además Ron tenía razón. Si había algo mal, Bill lo encontraría.

-Esperaremos entonces –dijo Harry levantándose –Informa a la división de una reunión que se llevará a cabo en cinco días.

-Avisaré también a Ginny –dijo Ron con energía.

-¿Cuándo llegará el resultado de Bill? –preguntó Harry desde la puerta.

-Pasado mañana. Pero no tienes que preocuparte, mi hermana no tiene nada.

-Eso espero –murmuró el moreno y caminó por el horrible pasillo.

Ron parecía optimista, pero Harry sentía que el tema no debía tomarse a la ligera. Sin embargo no pensaba ser él quien le hiciera notar ese detalle, así que se alejó de la oficina.

¿Y si Ginny resultaba no tener nada?

-Sería lo mejor –murmuró sin dejar de caminar -, no podemos darnos el lujo de perder al segundo más fuerte de la división.

De repente el moreno sintió un tirón que lo golpeó contra una esquina; antes de lograr reaccionar sintió unos húmedos labios contra su barbilla y una mano sujetando su cabello con firmeza.

-¿No te han dicho que hablar solo es el primer signo de locura, Potter?

-¿Ah, si?  -preguntó el moreno ladeando la cabeza para exponer más su cuello y sintió una descarada caricia apretándole la nalga -¿Ahora te has vuelto obseso sexual?

-Siempre lo he sido –rió Draco apretándose más contra Harry –Es solo que no tuve... "tiempo" de demostrártelo.

-Pues ahora no te dedicaré mucho "tiempo" .

Draco soltó una burlona carcajada.

-¿Es que aun no te das cuenta? Por más que te esfuerces jamás llegarás a ser como yo.

Harry frunció el ceño. El comentario le lastimó a pesar de estar gozando de sensaciones abrasadoras.

-Yo no...

-Si –interrumpió Draco y lo miró a los ojos –Pero nadie que no sea Malfoy puede comportarse como tal.

-Esto es estúpido –protestó Harry estirando el cuello para besarlo, peor el rubio se alejó con una sonrisita.

-No querrás que alguien se entere, ¿no?... Podría convertirme en el próximo blanco de Lord Voldemort solo por jugar contigo...

-Seamus esta muerto.

-¿Seamus? -Draco enarcó una ceja –No es que lo halla creído muy inteligente, pero si yo estuviera en su lugar (suponiendo solamente), jamás habría pronunciado el nombre de Audiel Malfoy.

-¿Qué quieres decir?

-Nuestro traidor no sabía lo nuestro –el rubio perdió su sonrisa –Señaló lo evidente y no lo real.

Harry sintió de nuevo ese pinchazo de preocupación y apretó los labios.

-Pero no te preocupes, Potter –Draco se acomodó el cabello –Mientras estemos bajo la confiable protección de tu casa, puedo ser tu... –sonrió -.. amante.

-Nuestra relación no te da privilegios –advirtió Harry.

-No los busco  -el rubio miró las paredes de forma significativa –No contigo, Potter... Yo tengo privilegios suficientes  para no desear nada de ti... Y si piensas que ibas a tratarme como a mi primo, estás muy equivocado... Yo soy quien decide cuándo, cómo y donde.

-¿Qué tal si te mando al demonio?

Draco soltó una carcajada.

-¿No se sintió bien que te poseyera algo vivo? –preguntó de repente.

-¿Qué?

-Bueno –cruzó los brazos –Estoy seguro que prefieres tener sexo con  algo particularmente vivo y caliente.

Harry apretó los labios.

-Podría cambiar de opinión.

-No después de probarlo –dijo Draco con seguridad –Pronto te olvidarás de cada estupidez que has estado inventando desde hace cuatro años... Yo soy paciente, Potter.

Y se dio la vuelta para caminar esquivando a un confundido Ron que acababa de acercarse lo suficiente para escuchar lo ultimo.

-¿De qué diablos habla ese imbecil? –preguntó el pelirrojo.

-Solo esta molestando –murmuró Harry con el ceño fruncido.

-Solo eso sabe hacer –declaró Ron –Arrogante, idiota.

La verdad es que Harry  tenia otros calificativos. Muchos relacionados con esa frialdad que volvía a ver en Draci y, pensaba, habían superado cuando se hicieron amigos.

Por un momento eso lo hizo sentir mal ya que le dio a entender que hace 4 años no fue más que un capricho más.

En ese tiempo le pareció sincero.

... pero ahora...

-Maldito Malfoy...

Ron vio caminar a su amigo hacia el campo de entrenamiento si entender por qué le daba tanta importancia. Una mano se posó en su hombro y volteó para ver la preocupada expresión de Hermione.

-¿Tu crees que Harry no nos ha dicho algo? –preguntó ella con un hilo de voz, con... ¿culpabilidad?

-¿Cómo que? –preguntó Ron –Hasta ahora solo lo noto más... irritante.

La chica no pareció satisfecha por ello. Si Ron lo hubiese visto...

-A ti no te gustaba Audiel –recordó ella.

-Es por que un asqueroso Malfoy no merece a Harry –gruñó  Ron.

-Oh –ella suspiró –Entonces tampoco te gustará esto...

-¿Uh?

-¿Me invitas a cenar? –preguntó ella poniendo una preciosa sonrisa en sus labios que ganó el rubor en las mejillas de Ron.

-Claro, cariño... Cenemos.

Notas: Un capitulo sencillo, lo sé, pero necesitaba avanzar de alguna manera.

Murtuilla: Sip, ese cazador es más de lo que aparenta. A Draco no le pasará nada, no te preocupes, es más, creo que se va a divertir a partir de ahora. Y pronto sabrás lo que pasó con Lucius, kiza cinco capitulos más XDDD. Respecto a un regalo acertado y Reconciliación, Temo que no hay plan de continuarlos... aunque siempre puede haber una excusa para ponerles más. Mil besos.

Nynia: Espero que hallas resuelto el problema XD.

Amy-Lee-Malfoy: Muchas gracias... me sonrojo. Harry se dara cuenta... solo espero que no sea muy tarde. Besos.

Gala Snape: Sip, Ginny es una loba XD.  Debbie va contra... Debbie.... pero lo logrará, hay algo que la Sirena no tiene y que vence todo problema. ¿adivinas ke es?

Aniston: Mil gracias, espero que tu tarea no halla salido con una nota fuera de "tema" XDDD.  Y no matare a Remus!!!! No me acuses con nadie, por favor!!!! Akiko temerosa

Amaly Malfoy:  A Shizuka le ha gustado las felicitaciones, creo que ella lo merece más, me ayuda bastante con esto. El lado humano de Harry se definirá mucho más adelante, te ruego paciencia. De la misma manera eso de "ambos". Narcisa es un genio por aca... temo que un participante definitivo, así que la veremos muy en acción pronto. Mil besos.

Angel: Ya esta actualizado. No muy pronto, pero ya esta xD. Y sobre los lemons, la verdad es ke he visto mas explícitos, pero me kiero evitar problemas de nuevo.

Cerdo Volador: Bienvenid de nuevo. Harry seguirá negando muchas cosas., pero la bomba esta por llegar a su limite, no te preocupes. La promesa.... aquí esta la promesa!!!!!... no la escribi en los tres capitulos de flash a propósito, por ke iba aki, pero ya esta.

Isobo: Ambas escritoras te agradecemos, La promesa esta aquí, asi que dejare eso de lado n.n. no te preocupes, no olvidaste nada, solo que no se había puesto.

Moryn: Bueno, cielo... aquí si se dieron casos extremistas, pero Harry y Draco no estaban teniendo sexo por sexo aunque ellos lo quieran creer así...  En lo personal respeto mucho tu opinión, y deseo que tengas en mi un apoyo... Claro, solo su lo necesitas.. besos...

Argot: Lee "La Trampa" ahí se explica la relación que Harry tiene con Snape.

Asosa76:  Na, prima, ya habra encuentros más "calientes".... hum, aunque este se me hizo muy caliente ya XDDDD.  Deborah viajó al pasado... y se vio a sí misma... Andam charló con ella misma, de eso se trata. Besos....

Kendra Duvoa:  Tu sigueme, yo te prometo que no te arrepentiras... y si te arrepientes no me mates por ello XDD. La sirena si ke se pasara de mala, solo espera a verla... snif, la adoro. Mil besos.

Little My: Si, tu fuente fue muy confiable, según sé... A ver si me regalas un dibujo de este lemon, eh?  Ya esta actualizado!! Y respecto a Draco.... Crees  ke le incomode saber que lo desea la persona que ama?