N/A: Disculpen mi demora! estaba de
vacaciones! ^^ pero ahora supongo que me tendré que poner mis pilas..... =P
Muchas gracias a caliope102 y a Karoru Metallium! los reviews me animan mucho!
^^
- Caliope102: gracias por comentar! sip, los voy hacer sufrir.... pero
sólo un poquito! yo creo que me va a doler más a mi que a Omi.... ;_; y por lo
del final feliz.... yo igual espero hacer un feliz! ^^U de nuevo, muchas
gracias!
- Karoru Metallium: que bueno que te gusto la historia! a mi igual me
vuelven loca estos chicos! ^o^ a mi me encanta Omi! es adorable! muchas gracias
por tu review! ^^ me pones muy feliz!
Capitulo dos:
¿esos son celos?
Al otro día en la florería....
Todo parecía como un día normal. Los jóvenes asesinos estaban trabajando, y
había tanta gente como siempre.
- Maldición! por que estoy tan nervioso? es una simple misión... soy un
profesional, y debo estar apto para todo tipo de trabajo, incluyendo este
último...- pensaba un joven
- Vamos, no pasará nada, ninguno de nosotros permitirá que pase nada, acuerdate
que eres sólo un señuelo!- le animó un rubio pasando su mano por la cabeza de
menor, como adivinando los pensamientos de este
- Eso espero... - murmuró como respuesta Omi - Sólo quiero terminar pronto
esto...
Llegó la noche, ya no habían clientes y todo se había calmado repentinamente
- Omi, ¿estás listo?
- Espera un poco Yohji! no sabes lo difícil que es esto!
- Ya, ok, te espero - murmuró fastidiado el mayor
Después de casi 10 minutos de espera por parte del rubio, un joven nervioso
salia lentamente del baño.
- Ummm, por fin te dignaste a aparecer... yo ya me iba a fumar el quinto
cigarrillo - dijo un poco más calmado
- Ya, nos podemos ir, emm..., Yohji, de casualidad ¿no tienes algún abrigo
largo que me prestes? - preguntó el menor, esperando una afirmativa
- No sé... debo tener algo... anda a mi dormitorio y busca en mi armario, haber
si encuentras algo, mientras yo voy a esperarte en mi auto
- Está bien - respondio inseguro, dirigiendose al dormitorio del mayor
Entró, todo estaba oscuro, prendió la luces, toda la habitación estaba regada
con ropa, trató de no pisar nada. Vió su objetivo. Claro que habían unos
cuantos obstáculos antes de poder llegar, además de toda la ropa, habían cosas
varias, revistas, cassettes de música, cajetillas vacías y una montaña de
peluches, auspicio de sus miles de novias, pensó Omi.
Cuando llegó, abrió lentamente el armario, esperando cualquier cosa. Se llevó
una sorpresa. Parecía un armario normal y ordenado.
- Mmmm, que raro... - introdució sus pequeñas manos hasta el fondo, y si, ahí
estaba. Encontró, detrás de una tabla suelta, sus armas, ya sea de seducción
(entiendase perfumes entre otros) y de combate (claro está sus hilos de acero)
- No estoy aquí para eso - rió el menor y buscó lo que necesitaba - aquí
está... este es muy grande y llamativo - dijo cogiendo un abrigo rojo de cuero
- que raros gustos los de Yohji... - buscó más y encontró un pequeño abrigo
negro, como de su tamaño, quizás de cuando era menor pensó el castaño, ya que
no era tan llamativo como los demás
- Beep Beep! - sonó la bocina del auto, seguido de unas cuantas cosas
inentendibles
- Ya bajo! - reclamó el menor, dando saltos por toda la pieza, para no pisar la
ropa del dueño de la habitación
El Playboy ya estaba perdiendo paciencia, definitivamente, si se trataba de
esperar algo, no era el mejor, para eso podían estar Ken, Aya e incluso Omi,
que ponía sus grandes zafiros azules a brillar cuando hablaban de esperar algo.
Claro, a pesar de ser el menor en el grupo, era uno de los más responsables y
esforzados, y verlo sonreír alegraba a cualquiera, hasta estaba seguro de que
el frío Aya que conocían le encantaba ver la sonrisa y la energía de Bombay
adornando y alegrando la florería.
- Listo, vamos - confirmó más que seguro el joven que entraba al auto, Yohji
pensaba que hasta se le había quitado la verguenza de vestirse así, ya que no
mostraba nerviosidad ni tampoco inseguridad
El tiempo dentro de el vehículo fue mínimo, y durante todo el viaje nadie dijo
nada. Cuando llegaron al club, se notaba que era uno de los mejores, ya que
todos peleaban por entrar. Los dos jóvenes bajaron del vehículo y se metieron
entre la multitud, dirigiendose a la entrada.
- Yohji! ¿tienes pases?
- Claro que si! - respondio guiñando el ojo y tomando del brazo a su
acompañante para que este no sea llevado por la multitud
El rubio vió que Omi, como era de baja estatura y de contextura no tan gruesa,
podía ser llevado fácilmente por otra persona, por lo que recurrió a atraer al
menor hacia si mismo, abrazándolo con el brazo derecho y tratando de avanzar
con el brazo izquierdo, como si estuviera nadando. Sintió un poco de calor en
sus mejillas. Creyó que era el calor. No quería admitir lo que ya había
reconocido hace tiempo.
El menor sólo reaccionó ruborizándose totalmente. Era la primera vez que
alguien lo hacia sentirse protegido. Debido al incidente de pequeño, nunca
recordó ser abrazado, y sentirse tan tranquilo en los brazos de alguien. Sentía
tan cálido, como si los demás no existieran, y todas las voces se apagaran,
para dar paso a una paz incontenible.
Balinés entró con Bombay abrazado, sientiendo algo de verguenza al principio,
pero al ver al jóven se calmó. Nada podía pasar, así nadie lo podía molestar,
además de que Omi realmente parecía mujer, y una muy atractiva pensó.
Omi sintió que estaban adentro, tendió a romper el abrazo con el rubio, y se
dedicó a mirar alrededor, para ocultar su coloración.
- ¿estás bien? - prenguntó Yohji desviando la mirada
- Claro.... - respondió Omi, tratando de no hacer contacto visual con nadie
- Bueno, entonces vamos a la barra, quiero pedir algo
Los dos jóvenes se acercaron a la barra, encontrando unos asientos libres un
poco alejados de los demás. Se acercó un joven con un uniforme extraño al lugar.
- ¿quieren tomar algo? -preguntó el jóven centrando su mirada en el menor
- Yohji... -murmuró Omi, mandandole un puntapié a su acompañante que estaba
siendo distraído por unas chicas sentadas en unas mesas más lejos - oi!
- ¿ahh? -preguntó un poco despistado el mayor, mirando al jóven que atendia,
que estaba asechando a su presa
- ¿vienes con alguien, preciosa? yo me llamo Kazuki ¿cuál es tu nombre?
- Emm.... yo soy Om... emmm....Osako.... si - decía el menor, tratando de
safarse de las manos de su receptor que estaban sobre las suyas, con una
sonrisa nerviosa
- ¡ohh! que pena, la señorita viene conmigo - interrumpió Yohji más que celoso,
con un tono de sarcasmo y separando las manos de los dos - mejor traeme un
trago - agregó, haciendo que el otro hombre se alejara del lugar - estos chicos
que contratan no sirven para nada.... -concluyó mirando al nombrado con una
mirada vaga.
El castaño quizás era jóven pero no tonto ¿eran celos? ¿Yohji estaba
celoso? no podía creer lo sucedido... entonces en realidad había una
oportunidad...
N/A: Dejen sus reviews! quiero saber sus opiniones!! y no se
impacienten, ya va llegar la misión algún día.... ^^U
Perdonen por el capítulo que esta un poco corto a mi parecer! =P
