AVISO: este fic contiene SLASH (relaciones hombre/hombre, mujer/mujer). No es subido de tono (este capítulo) pero la tendencia es homosexual, así que si te ofende en algún punto no lo leas...
DISCLAIMER: Los personajes y escenarios son creación inigualable de J. K. Rowling y aclaro que mi fanfiction no está hecho con fines de lucro. Siempre trato de tener ideas lo más originales posibles, si llega a haber coincidencia con alguna otra creación pido mis debidas disculpas a su autor...
cordialmente,
La Dama Norris.
¡MIERDA! SIII TARDE MUCHOO! LO SIENTO! x(
REVIEWS:
NieA-Chan: Hace poco me leí un fic tuyo que si no me equivoco es el primero q c llama "Clases de Verano", y cuando leí lo del "impostorus", me pregunté si habrías entendido mi capítulo donde aparece el boggart, jaja! Pero, como a esas alturas la tercera película de HP ya se había estrenado allá, te habrías enterado de la traducción al español. A propósito, ¿ese nombre tendrá algo que ver con la palabra "impostor", porque se disfraza de tus temores? ¡Guau, que deducción! ¬¬ Espero que mi repentina luminosidad sea acertada XD.
Laia: Ya cada vez falta menos para que Blaise y Ronny Rabbit, y Harry y Draco concluyan... yayaya! Espero q lo disfrutes!! X)
Anny Pervert Snape: Idola!! Muchas gracias, de verdad me hiciste llorar con tu review! (como siempre! TT). Me dices cosas muy lindas como "con este fic me conquistaste" (sñif!) No pongas esas cosas q soy una maricona!!! TT (La Dama llora a moco tendido). Sabes, tienes razón, cuando alguien esta enamorado o caliente ve todos los cuerpos perfectos y no hay que hacerse mas drama. Eso, con lo de las pijas sigo firme ¡NO MAS DE 15 CM! ... No voy a dar medidas igual! ¬¬. Ya vienen las mejores escenas, t juro! pero hay que tener algo de paciencia porque, aunque uno esté ansioso, las cosas se van desenvolviendo como se pueden (y muchos kieren matarme por eso uù)... Es una suerte que ya te hallas leído los libros, ahora puedo escribir sin carga de conciencia! nn ... Bueno, amiga, muchísimas gracias por darme siempre ánimos para seguir escribiendo todos los días! Besitos y no m abandones! TT
ophelia dakker: Gracias, q suerte que mi esfuerzo valió la pena y q el capi te halla gustado! Espero que este también te guste y no me mates por ser tan vueltera!
Cerdo Volador: La li ho!! Creo q de mas esta decir que MUCHAS GRACIAS POR ACTUALIZAR (y terminar) THE RANGE BEAT!! Estuvo muuuy lindo, sñif!! Ey, me intereso mucho tu mención sobre un fic de Gravitation! Para cuando amiga?? Por favor no me dejes afuera TT!! Y los otros fics también me interesaron mucho... Sirius y Harry me prenden mucho de veras.. (y Gary Oldmal y Daniel Radcliff también, jeje... no digas q Gary está ancianito q a mi me gusta musho!! ). Bueno, lo mio va concluyendo también.. es q las cosas no son nada fáciles!! ah, q suerte q la pagina se arreglo, jeje, ya estaba empezando a asustarme! Besitos!!
--La apuesta—
Cap 8: "Fase 7: Planteo y Resolución"Andaba sin prisa recorriendo los pasillos del colegio. ¡Qué cosa! ¿Quién hubiera dicho que ese estúpido traje le hiciera perder tal valioso tiempo?
Ahora el castillo parecía tan tranquilo. Él mismo estaba sumamente tranquilo y no entendía por qué. Es decir, sabía que por el momento no podía hacer nada, que debía esperar a que el encantamiento del maldito traje cesase. Pero ¿acaso no le inquietaba no estar vigilando a su presa? ¿Y si a Potter se le daba por llevarlo a descansar al cuarto? No, confiaba plenamente en que Draco no dejaría marchar tan fácil al niñito de oro.
Draco, ¿dónde se habría metido? Blase recordó entonces lo que habían hablado antes de separarse.
------------FLASH BACK----------------------
—¡Esto me está desesperando!
—Tranquilo, Drac, ya va a caer.
—¡Pero es que no puedo creerlo! La técnica de los vasos no funciona, tendré que ir y hacérsela tomar por la fuerza... —el rubio se levantó decidido.
—Ya, vuelve aquí —Blaise tomó a Draco firme por la cintura —. Calma los humos —le sacó un poco de pelo plateado que le caía sobre el rostro y le tapaba sus lindos ojos grises. Draco giró para mirarlo y Blaise continuó —. Ya te va a llegar... y si no sucede, pues, tomaremos medidas drásticas.
—¿Eso no sería hacer trampa? —comentó el rubio con falso tono inocente, sonriendo.
—Pero una trampita muy pequeña... después de todo, nosotros ideamos esto ¿no? —Blaise apoyó su rostro sobre el hombro de su amigo.
Draco sonrió.
—Claro, cariño...
0.0
—¿Desde cuando me llamo cariño? —Blaise tomaba un aire divertido.
—Desde que a mi se me ocurrió —miradas. Sonrisas tontas —. Déjame meditar un rato, ¿si? Luego nos vemos y te cuento si tengo algo pensado.
—¿A dónde te vas?
—No sé..., supongo que al cuarto piso, allí a ésta hora no hay nadie que moleste.
---FIN DEL FLASH BACK---
Blaise subió las escaleras un par de pisos más. Ahora se encontraba en una planta cubierta en gran parte por una alfombra carmín. Las paredes estaban cubiertas de relojes viejos, y los ventanales no eran tan grandes como los de los pisos inferiores. No recordaba haber estado allí, pero estaba seguro de reconocer un par de cosas. A lo lejos, una galería de cuadros con dos puertas laterales; una de ellas daba a un pasillo con varias aulas y recintos viejos y en desuso. Pero un aula fue la que llamó la atención del chico. Cuando pasó por su puerta, supo enseguida que allí dentro había alguien. Se asomó. En un rincón, una figura se acurrucaba frenética y no se animaba a levantar la cabeza.
—¿Draco? ¿Eres tú? ¿Qué demonios estás...?
La cara demacrada y pálida del rubio se dejó ver. En sus ojos tempestuosos se reflejaba la purísima tristeza, la brecha que deja el borde de la locura. Una furia contenida, una resignación a la vez. Un total dejo del ser.
Blase se acercó a su amigo sin terminar de creer lo que veía. Ese Draco, que siempre había sido tan altanero, tan cínico y confiado, tan directo, ahora parecía un gatito indefenso al borde del llanto. Es que ni siquiera daba signos de querer llorar, estaba como en estado de shock.
—¡Mira esos ojos rojos que tienes! ¿Qué te pasa por Dios Santo?
Draco tardó en contestar...
—Me duele el alma... por primera vez me duele realmente estar vivo...
—¿Qué mierdas dices? Ya te fumaste algo.
—Cierra la boca, que te hablo enserio... —esto había sido dicho con tanta melancolía, que a Blaise se le cayeron los pocos ánimos que le quedaban. Pasó su brazo por la espalda de su amigo.
—Cuéntame.
—Quiero que me mates...
—Hablemos enserio...
—¡Mátame!
—¡Ya basta, Draco!
—¡Hazlo! ¡Sé útil en algo! ¡MATAME!
Blaise dio una cachetada en la mejilla de su amigo tan fuerte, que pareció que a éste se le acomodaron un poco las neuronas.
—Cálmate. Ahora, ¿puedes decirme que te ha ocurrido?
—Antes tú dime algo... —ahora la voz de Draco tenía un poco más de color, pero seguía moribunda —¿Qué andabas haciendo aquí? Creí que ya habías...
—No, aún estoy haciendo tiempo. Oye, ¡te has perdido de todo! Me olvidé de decirte. Hemos puesto en la sala común de Gryffindor un boggart...
—¿Un boggart? —algo dentro del rubio se iluminó débilmente.
—Sí, sí. Pero Mc Millan lo capturó. Lo oí mientras me encontraba paseando por el tercer piso. Estaba al pié de la escalera con Harry Potter... pero creo que no me vieron.
—Ha-Harry Potter estaba aquí... —murmuró en tono lastimero.
—Sí, yo me creí que lo capturaría él. Pero no llegó ni a subir a éste piso porque Mc Millan llegó antes.
Los ojos de Malfoy resplandecieron de repente. Se puso de pie.
—¿Potter no llegó a subir hasta éste piso? —repitió conmocionado.
—¿Estás sordo o qué? —Blaise se puso de pie también.
—A ver... ¿por dónde estuvo merodeando ese boggart?
—No sé exactamente. Sólo sé que fue atrapado en éste piso, ¿realmente no lo has visto?
El repentino alivio de Draco fue automáticamente reemplazado por otro sentimiento. ¿Era vergüenza? Su boggart..., si lo que vio era un boggart, significaba que Potter no había dicho realmente esas cosas tan horribles. Además, aquellas palabras involucraban cosas muy personales de Draco Malfoy que su Némesis no conocía. Pero..., no podía creerlo ¿¿De verdad ese era su mayor miedo?? ¡Maricón! ¡Eres patético!
—Estás rojo como un tomate, ¿puedes decirme que diablos te ocurre?
—Blaise —Draco acercó el rostro al de su amigo —, no sé que hubiera sido de mí si hubieses llegado más tarde.
Antes de que Blaise pudiese decir nada, ¡su compañero lo estaba besando! Con las manos en sus mejillas, así como comenzó, acabó rápido. Luego sonrió ante el desconcierto del morocho.
—Nos vemos después —le dijo. Y se alejó tras la puerta dando saltitos.
Blaise tardó en volver en sí. Estaba algo colorado. También sonrió.
Algún día se daría..., pero no en éste fic.
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------------Criterio Absurdo —Loca? Yo no estoy loca? —replicaba Alicia al Gato de Cheshire. —Aquí todos estamos locos —dijo él —. Si no estás loca ¿qué es lo que haces aquí?------------------
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Y ahí estaba Harry Potter, pobre, riendo al lado de su amigo conejo, creyendo que éste aún lo oía. Pero ¿con quién hablaría sino? Parecía algo desconcertado por la repentina desaparición de gente. Ernie Mc Millan se le acercó y comenzaron a hablar de valla uno a saber que cosas. Luego, el Hufflepuff preguntó:
—¿Dónde está Hermione?
—Yo también me pregunto lo mismo, estaba aquí antes de que me fuera.
—Quizás se halla ido a dormir.
—Quizás.
—Aunque, ¿sabes que? Creo que aquí hay algo que huele mal.
—¿Qué quieres decir?
—No lo sé, Harry, tengo mala espina. Zacharias Smith me ha dicho que vio a un Slytherin arrastrando del brazo a Colin Creevey.
Harry hizo una mueca de extrañeza. Preguntó:
—¿Para qué querría un chico de Slytherin llevarse a Colin Creevey?
—No lo sé.
—¿No podría Zacharias haberlo seguido para cerciorase de que no le hicieran daño?
—Sabes como es él, da gracias que me lo ha contado. Pero te aseguro que no es el único.
—¿Cómo?
El tono misterioso que adoptó la voz de Ernie no le gustó a Harry en lo más mínimo.
—Cuando me encaminaba con Hanna al encuentro con el boggart, me pareció haber visto a Dean Thomas en brazos de alguien. Si me lo preguntas, creo que ese alguien era Warrington.
—¿¿QUÉ??
—Al principio creí que era puro delirio mío. Pero Harry ¿acaso no te has preguntado por qué faltan tantos Gryffindor y tantos Slytherin?
—No querrás decir que... —tragó en seco.
—Para mí aquí hay gato encerrado. ¿No recuerdas lo que me contaste que te dijo Parvati unos días antes de la fiesta? Los Slytherin tienen algo entre manos, y creo que ya lo están poniendo en práctica. Yo que tú me cuidaría el pellejo.
Y diciendo esto se levantó y se fue, dejando a Harry completamente desconcertado.
"Pues ojalá, Neville y Lavender se hallan ido a dormir juntos"...
Miró a su amigo Ron. Debía estar muy calentito dentro de su enorme traje. Estaba un poco sonrojado, quizá a causa del calor. Realmente no entendía como podía haberse dormido de aquella forma. ¿Y si lo que dijo Ernie fuera cierto? ¿Y si la ausencia de Hermione se debiera a alguna jugarreta de los Slytherin? Quizás debería ir al cuarto de las chicas de Gryffindor y asegurarse que su amiga se encontraba allí. ¡No, no podía abandonar a Ron! Pero, hasta el momento a él no le había pasado nada. Había permanecido toda la noche allí dormido, completamente indefenso, y allí se encontraba todavía. Aunque el miedo le ganó a Harry, quien no se movió de donde estaba. Miró a su alrededor alterado, como esperando ver a alguien a punto de tirársele encima. Estaba poniéndose paranoico.
(N/Norris: ¡Por el amor de Dios, Harry! ¡Como estorbas! A ver... ¿y ahora qué? ¿Qué puede hacer que te APARTES de al lado de Ron? No es tan estúpido como parece... UN MOMENTO! Esa calabaza que cuelga del techo parece algo floja... ¡Y qué tamaño tiene! ¿y si le damos un empujoncito? 0 ).
................. PUM!!!
Lo último que Harry supo fue que la cabeza le palpitaba dolorosamente. Luego, cayó inconsciente.
Muchos alumnos se acercaron al desfallecido.
—¿Creen que deberíamos llevarlo a la enfermería? —dijo uno.
—¡Pero Madame Pomfrey no está, recuérdalo, ningún profesor está! Habrá que esperar hasta mañana.
—Pues, entonces llevémoslo a su cama.
—Yo me encargo de él.... —dijo de repente un individuo que se acercó al tumulto de estudiantes.
—¿Q--- quién se supone que es ese vestido de negro?
—No sé, pero no confío en él —Ernie Mc Millan se acercó al recién llegado con ímpetu —¿Quién eres?
—Un compañero de Gryffindor.
—Entonces dime como te llamas, conozco a todos los Gryffindor.
—Pero no a todos los de cuarto año, o sí? Yo te he visto pocas veces.
—Pues —Ernie se rascó el mentón —, muéstrame al menos tu cara.
Los ojos grises bajo la máscara negra se encogieron.
—No puedo hacerlo o él....
—Caballero Negro! —dijo una tercera voz —. Estaba buscándote, pequeño.
—¡Diablos! ¡Ya déjame en paz, Zabbini! —exclamó el caballero con su voz aguda y enseguida se ocultó detrás de Ernie.
—¿Acaso estás triste por lo que ocurrió esta tarde? Sabes, yo en realidad adoro a los pequeños Gryffindors como tú. Sólo que hoy... bueno, estaba algo alterado —Blaise fulminó a Ernie con la mirada —¿Y tú quien eres? ¿Su hermano o algo?
Ernie volteó al Caballero Negro y le susurró: —Tu no te preocupes. Vete y llévate a Harry a la torre, yo me encargo de él.
—Gracias —susurró el "Caballero Negro" sin aliento. Tomó a Harry y al mirarlo sus ojos centellaron lúbricamente.
"Al fin..."
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—Muy bien, Zabbini. ¿Qué te traes con los Gryffindors?
Ese McMillan estaba comenzando a fastidiar a Blaise. Era demasiado entrometido para su gusto. Bueno, habría que ver como se lo podía calmar un poco.
—¿De qué hablas?
—No te hagas el tonto. Ustedes los Slytherin tienen algo con los Gryffindors. ¿No te da vergüenza hacer sufrir de esa forma a una criatura?
—¿Hablas del "Caballero Negro"? —Blaise se tragó una carcajada —¡Vamos, McMillan! ¡Que ese chico es tan inútil como parece!
—Pero no deja de ser un inocente. Dime que te ha hecho.
Blaise fingió un ruidoso bostezo.
—Me estás aburriendo. Si no te molesta, en vista de que ya me arrebataste la presa, prefiero ir a tomar unos tragos. ¿Por qué ya que estamos no nos sentamos los dos? Bueno, sólo si deseas hablar tranquilamente.
Ernie lo pensó un momento. ¿Cuál era el problema? Él que tanto hablaba de la igualdad entre las casas, no iba a negar una invitación así o quedaría mal parado.
—Claro. Vamos.
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"¡Por fin! ¡Por fin!"
El Caballero Negro surcaba los pasillos velozmente. Llevaba el tesoro más preciado del universo entero, llevaba la belleza en flor.
"Este traje me pone muy romántico, ¿de dónde he sacado esas frases tan cursis?"
Ahora si esos ojos grises se veían radiantes. Ahora si podía decirse que todo estaba hecho, que no había vuelta atrás.
"¡Qué actuación la de Blaise! ¡Toda una puesta en escena!"
Sus pasos ya se volvían torpes al alcanzar el pie de las escaleras del segundo piso. ¡Todavía le faltaban cinco pisos más! Pero el cansancio no vencía esa fervorosa pasión, mezclada con fuertes ganas de terminar de una vez con todo eso.
¡Alerta! Ahora se escuchaban algunos inteligibles murmullos por parte de Potter.
En el tercer piso, el caballero desvió su rumbo para dirigirse al baño de hombres. Acostó a Harry en el suelo y, con ayuda de algo de agua, logró suministrarle la famosa pastillita turquesa. Esperó unos segundos y lo levantó con cuidado. Volvió por el oscuro pasillo, desprendió su máscara. Sus cabellos platinos brillaron bajo la sensible luz de la luna que entraba por el ventanal del descanso de la escalera.
"Cada vez falta menos, Harry. Cada vez falta menos"...
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Después de hablar un rato en la mesa de Hufflepuff, Blaise propuso una partida de ajedrez mágico. Como ya muchos estaban cansados de bailar y tomar, se sentaron entre los sillones mostaza para presenciar la partida. Poco después, varios empezaron a jugar también, y en la mesa de Ravenclaw se comenzó otra ronda de ajedrez y de Snap explosivo. Pronto, los alumnos de los cursos menores se cansaron por que "de ser un baile eso pasó a ser una kermés", con la mesa de Ravenclaw y de Hufflepuff llena de alumnos borrachos que apostaban hasta lo que no tenían, y jugaban frivolidades.
—Parecen ancianos frustrados!
Uno a uno, los más pequeños se fueron yendo a acostar, y al rato el salón quedó muy vacío, con unos cuantos cursos menos. Si a eso le sumamos las parejas de novios que también habían ido a "adorarse" por ahí, el resultado eran unos pocos alumnos jugando y hablando en mesas separadas. Un ambiente tan calmo, tan tranquilo. El ambiente que Blaise Zabbini había querido lograr.
"Dios mio! Eres un genio!".
Él ahora se encontraba tranquilamente sentado en un sillón verde, justo enfrente de los sillones rojos, que ahora estaban vacíos. Bueno, vacíos si obviamos la indiscreta figura blanca y felpuda que se encontraba echando enormes ZZZ. Blaise se había encargado de tirarle un hechizo para hacerlo más pesado al tacto, por lo que sus compañeros no pudieron levantarlo cuando quisieron llevarlo como a Harry a su cama. Pues bien, ahora nadie le prestaba atención, cierto? Pero, realmente, ¡hay que ser un inglesito aburrido para ponerse a jugar al ajedrez en plena fiesta de Halloween! ¬¬
Se puso de pie lentamente. Desesperado estaba por su conejo, al igual que Alicia en los relatos de Lewis Carroll. Desesperado pero discreto. Ni lento ni perezoso, se acercó a aquella felpa impecable. Bajo las gordas orejas, un rostro relajado y tibiamente pintado de carmesí, dormía en paz extrema. Blaise se arrodilló a su lado y mordió suave la mejilla ardiente salpicada de pecas rojas.
—¡Oh, por el amor de Dios...! —el susurro apasionado del Slytherin se escurrió por los oídos del bermejo, quien emitió un sonidito apenas audible —Mi rabby-chan.
Una vez que salió del Gran Salón nada más importaba. La escuela podía derrumbarse si quería, que bajo los escombros Blaise Zabbini se encontraría abrazado a su Ronny Rabbit... ¡Qué romántico!
Blaise podía ser todo lo perverso y malo que quisiese, pero jamás podía negar que una de sus mayores características era su exquisita pasión y su calidad romántica. "Cuando Blaise se enamora el mundo se vuelve rosa y violeta", bromeaba Draco a veces.
Pero ahora algo era seguro. Ese pelirrojo a Blaise le gustaba desde la primera vez que lo había visto. Y por fin yacía en sus brazos. Las pupilas se le dilataron de deseo al contemplar nuevamente ese rostro sonrojado. El ambiente olía a candidez pasional y él ya no quería darle más vueltas al asunto.
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NO ME MATEN!!! Aquí los dejo, pero la historia se escribe sola! Les aseguro q el otro no tarda!! Ya sé, la vez pasada dije lo mismo y tarde un siglo, pero es que realmente no se m ocurría como hacer para que Blaise y Draco se llevasen a sus respectivas parejas. Esto fue lo más difícil y ya pasó, así que lo demás, como dije antes, se escribe solo!
Saludos! La Dama (desde el culo del mundo!).
Despertó de golpe, o al menos eso creía.
