Capituló 2
El entrenamiento
Dos días después de que Dumbledore estuvo ahí empezó el arduo entrenamiento.
-Bueno, tengo entendido que ustedes ya saben, la mayoría de los hechizos básicos y también varios de los mas complicados, así que me iré directo a lo que vamos a trabajar, entonces como ustedes ya deben de saber, ahí varias clases de magos como son...- empezó Emma.
-Loa Alquimistas, los Druidas, los encantadores, los ilusionadores, los transformadores, los shamanes...- dijo rápidamente Hermione.
-Exacto, entre otros, pero hoy en día y es, por lo cual ustedes van a Hogwarts lo que se hace es mezclar la sabiduría de todas las clases para que sean mejores magos.-dijo Emma.
Los tres asintieron con la cabeza.
-Y ahí diferentes espacios mágicos en los que vamos a trabajar que son el laboratorio: que era el lugar predilecto de los alquimistas y los nigromantes...- continuó Emma.
-¿Ósea que Snape es un nigromante?- Interrumpió Ron haciendo reír a todos.
-Espero que no, por el bien de todos nosotros- respondió Emma y continuó –La biblioteca: Que, bueno, es por las enseñanzas y todo eso y el altar: que puede ser alto, pequeño, incluso grabado e el piso, simplemente es un lugar muy mágico. El lugar en donde estamos, como ustedes pueden ver tiene las tres cosas incluidas.
-Ahora, los elementos mágicos que vamos a llevar en el viaje, van a ser: Unas botas de silencio, con las cuales no haremos ruido al caminar, teníamos pensado llevar unos anillos de invisibilidad, pero han causado bastantes problemas en otros lados, así que vamos a llevar capas, son unas capas especiales, que son que te vuelven invisible cuando te cubres todo (lo cual no es nada especial), pero que aparte te protegen, de por ejemplo, flechas, también van a tener espadas y Hermione y yo, vamos a usar también flechas, aquí es bastante difícil encontrar metal mágico, así que les grabamos unas runas-dijo Emma y saco unas espadas.
La primera se la entrego a Ron, era de esas espadas medievales, tenia escrita tres runas y su empuñadura era color rojo, la segunda se la entrego a Hermione, tenia graduadas 4 runas y la empuñadura era color azul, la tercera era de Harry, tenia graduadas 5 runas y su empuñadura era verde y por ultimo para enseñárselas sacó la suya propia que tenía graduadas cuatro letras y la empuñadura era rosa. Después de un rato de admirar las espadas Emma prosiguió.
-También vamos a llevar unas mochilas especiales que pueden contener de todo y ser muy livianas- las saco, se las dio, eran de los mismos colores que las empuñaduras de cada quien y continuo -Llevaremos unos elixires y ungüentos que nos preparo Snape. Por ultimo llevaremos unos talismanes.-Emma suspiro. – me parece que eso es todo por hoy, ya hay que descansar.
Los días siguientes, se la pasaron entrenando, con la espada, con las flechas y hechizos con la varita, en eso se les fue todo el mes. Hasta que Emma digo un día.
-Me parece que esto ya lo dominan perfectamente, solo les faltan los caballos, el de Harry es un caballo macho negro, el de Ron es uno color café con la crin blanca, también un macho, el tuyo Herm, es una yegua, color café con la crin negra y la mía es una yegua blanca. Pero lo que hoy haremos será que mediante un hechizo y una poción un elemento de la naturaleza los elegirá.- Explico Emma.
Primero fue Harry que se tomo un repugnante brebaje, mientras Emma decía unas palabras y el se sintió volando, había mucha brisa y escucho una vocecita que le preguntaba "¿Quién eres?".
Y Harry respondió –Soy Harry Potter, ¿y tu?
-Yo no tengo nombre.- respondió la vocecita.
Harry sintió que se le estaba acabando el tiempo. –Entonces, ¿qué eres?- pregunto al fin.
-Soy una sílfide.- Le respondió la vocecita, pero ya Harry apenas la oía y en ese momento se despertó tirado en el suelo.
-Muy bien, entonces ¿cuál es tu elemento?- Le preguntó Emma.
- No estoy seguro.- respondió Harry.-Pero había una sílfide.
-Entonces tu elemento es el aire- dijo Hermione sonriendo.
-Si, ahora es tu turno Ron- dijo Emma.
Ron que estaba excesivamente pálido, se tomo su brebaje y apareció en un lugar café.
-¿Quién eres? le pregunto una voz rasposa.
-¿Quién eres tu?- respondió él.
-Tu primero.
-No, tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
-Tu.
Pero en ese momento Ron se despertó al igual que Harry.
-¿Y bien?- preguntó Harry.
-No tengo idea, solo se que todo era café y había una cosa parecida un duende.
Hermione puso los ojos en blanco exasperada. –Eres un TONTO- dijo.
-¿y ahora por que?- se quejo Ron.
Herm, volvió a poner los ojos en blanco mientras Emma decía –Yo creo que su elemento ha de ser la tierra. Tranquila Herm, es tu turno.
Hermione se bebió el brebaje de un trago y apareció en un lugar azul -¿agua?- preguntó.
-Si- le respondió una voz muy dulce.
-¿Y tu eres una ondina?
-Si
-Yo soy Hermione Granger, mucho gusto.
-Igualmente. ¿Si sabes sobre este elemento?
-Si, tiene poderes de curación y bueno, esta relacionado con muchas otras cosa.
-Exacto y...
-¿Sabes? Creo que ya me voy, espero que nos podamos ver de nuevo.
-Adiós.
Y Hermione, se levantó contenta del piso gritando. ¡Soy agua!.
-Yo también- le respondió Emma.
Dos días antes de la partida
-Bien chicos ya estamos listos, saben utilizar, espadas, arcos, tenemos todo lo necesario, saben montar, tienen sus elementos y pueden hacer un poco de magia sin varita.
Mañana Dumbledore, vendrá solo a hacer acto de presencia y partiremos ese mismo día a las 3 de la madrugada, nos iremos al Ministerio y directito al departamento de Misterios.
Y así nuestros héroes partieron a su aventura a través del arco (o velo, pero como yo ya le puse arco, pues así será).
Lamento mucho que todo esto haya sido tan lento, a partir de aquí habrá mucha mas acción y mucho mas romance.
