Capítulo 11: A tu lado
Nerea sintió su corazón latir a toda velocidad en el momento en el que se sentó junto a Saga sobre la cama, sonrió en forma instintiva, en el momento en que el chico pronunció su nombre con dulzura, para su desconcierto la expresión del santo de géminis cambió de inmediato, parecía frustrado, y preocupado a la vez
"Quedate aquí"- le anunció con seriedad antes de salir de la habitación y dirigirse escaleras abajo luego de haber llamado su armadura, la chica lo miró angustiada, algo en su interior le decía que las cosas no saldrían bien, salió de la habitación intentando hacer el menor ruido posible y recorrió las escaleras que minutos antes había recorrido su amigo Saga bajaba las escaleras furioso, más valía que lo que le esperara afuera sea importante, porque sino, Mu conocería varias dimensiones.
No podía creer su mala suerte, en el momento en el que finalmente había tomado el coraje de confesarle su amor a Nerea el santo de Aries lo llamaba urgente, que alguien lo esperaba en la entrada, y para mal de males le aconsejo que usara su armadura. Estaba cabreado, y de una forma en la que nunca lo había estado antes, el idiota al que se le había ocurrido molestarlo la pagaría caro, al fin y al cabo, no estaba seguro de poder tomar coraje otra vez para declararle a la chica que lo tenía loco
Entrada del Santuario, minutos antes...
Mu descansaba tranquilo observando el atardecer en las escaleras que llevaban a su casa, el aire era cálido y una suave brisa jugaba con sus cabellos, suspiró, al parecer la tranquilidad no duraría mucho, se puso de pie, para recibir a los hombres que ya habían noqueado a los guardias de la entrada
"Quienes son y que quieren?"- preguntó con voz calma pero firme, podía percibir los débiles cosmos de aquellos tipos y no tenían ningún tipo de poder en especial, pero eso no quitaba que fueran intrusos y que no parecían los chicos más buenos del mundo
"Estamos buscando a Saga"- murmuró en tono bravucón el más alto de los cinco- "nos cuesta creer que el muy cobarde se haya refugiado en el santuario de Athena"
"Lo más sorprendente es que Athena haya consentido que un soldaducho como él se refugie aquí y escondiera lo que me robo"- murmuró otro
¿soldaducho, ladrón? No podían estar hablando del mismo Saga, fue entonces cuando recordó la historia de Nerea y comprendió a que se referían, sintió un enorme deseo de darles el mismo una paliza, pero sabía que Saga se había reservado hace tiempo ese derecho, lo llamó a través de su cosmo y se sentó en las gradas a esperar a su compañero, contempló a los hombres en silencio, los cinco iban vestidos de negro, y tenían toda la apariencia de los matones mafiosos que probablemente eran, el más alto de todos tenía una altura similar a la de Aldebarán, pero a simple vista se notaba que las neuronas se habían perdido en alguna parte de aquel gigantesco cuerpo, otros dos más bajos y de contextura robusta, parecían estar molestándolo, aparte de ellos otros dos los contemplaban con frialdad.
Mu concentró su atención en el que llevaba traje, era un poco más bajo que él y en su aceitunado rostro se expresaban un profundo odio y arrogancia, estaba seguro de cual era su objetivo, y no se lo permitiría a ningún costo
"No veo la hora de ponerle las manos encima a ese maldito"- murmuró el sujeto del traje- "hay que ver que tan valiente es ahora que no tiene a sus amiguitos"- continuo mirando al santo de Aries con recelo- "ustedes no pueden intrometerse en esto"
"No, como santo de Athena no puedo intervenir ni luchar contra nadie, a no ser que quiera hacerle algún daño a la princesa"
"Eso esta bien, no queremos tener problema con la gran diosa Athena y sus valerosos santos"- aceptó el de traje haciendo una reverencia,- "no es nuestra intención causar ningún tipo de problema, salvo buscar lo que me pertenece, y un sucio mendigo se atrevió a robarme"- en ese mismo instante el "sucio mendigo" apareció en las escaleras de Aries vistiendo la armadura de Géminis, Zlochy lo miró incrédulo, mientras una fría sonrisa aparecía en los labios de Saga
"Qué es lo que quieren aquí"- preguntó con frialdad
"Buscamos a Saga"- murmuró el grandulón sin neuronas frente al caballero dorado
"Y con quien crees que estas hablando?"- preguntó el chico con sarcasmo- "Soy Saga, caballero dorado de Géminis"- una sonrisa cínica marcó su rostro, mientras los demás lo miraban incrédulos, pudo ver en los ojos de aquellos seres un temor que crecía lentamente
"Pues por muy santo que seas la chica va a volver conmigo"- bufó Zlochy, en posición defensiva
"Según lo que tengo entendido no está dispuesta a hacerlo"- murmuró el caballero con tranquilidad mientras en un movimiento detenía los golpes de dos de los matones arrojándolos en el piso- "váyanse si no quieren conocer la muerte"- les advirtió mientras su cosmo comenzaba a arder Mu contempló en silencio, listo a asistir a su compañero en cuanto fuera necesario, aunque sabía que no tendría mayores problemas
"Ella me pertenece"- bufó Zlochy colérico, impotente ante la idea de tener que enfrentarse a uno de los santos de Athena- "mi padre la ganó para mí, ella es mía, por derecho"
"Solamente un cobarde y poco hombre se vale de esas artimañas para tener una mujer a su lado, ella es libre, no le pertenece a nadie"- anunció Saga con seriedad en el instante en el que Zlochy y los demás se abalanzaron sobre él. En un instante se encontraron en el suelo, al parecer una locomotora había pasado por encima de ellos.
"Váyanse de aquí cuanto antes, si no quieren que realmente me enoje"- advirtió el santo dorado- "y agradezcan que están en el santuario de Athena, que sino ya estarían muertos hace mucho"- anunció con frialdad, Zlochy sacó su arma apuntándole a la cabeza "Por muy santo dorado que seas dudo que sobrevivas a una bala"- murmuró antes de disparar El Cristal wall de Mu los sorprendió a todos por igual, la bala rebotó contra la pared, dirigiéndose directo a la pierna del más grande de los matones, Saga le sonrió agradecido en el momento en el que el chico de Aries llegó a su lado.
"Dijiste que como santo de Athena no podías intervenir"- escupió Zlochy a Mu con odio
"Por supuesto que no- le explico el carnero con tranquilidad- "intervengo como amigo de Saga, y creo que ellos también están de acuerdo"- aseguró señalando a los otros once caballeros dorados que los rodeaban
" Así que este es el bastardo que está molestando a Nerea"- murmuró Saori entrando al círculo de caballeros con armadura y todo
"Esa no es forma de expresarse princesa"- le espetó Shion quien llegaba tras ella
"Sabes cual es el castigo por intentar infiltrarse al santuario de una diosa?"- le preguntó Luinil con una sonrisa traviesa, el rostro de Zlochy se había paralizado, un extraño nudo parecía subir y bajar continuamente de su garganta a su estómago
"llévenlos a Cabo Sunion"- ordenó Saori- "mi padre quiere hacerse cargo de estos patanes, enviará a su custodia por ellos"- unas cuantas manos se abalanzaron sobre los invasores y a la rastra los llevaron hasta la terrible prisión
"Estoy segura que Temis y Némesis sabrán hacerse cargo de ellos"- murmuró Luinil con una sonrisa, luego dirigiéndose a Saga- "no creías que te permitiríamos matarlos o si?"- el santo de géminis bajó la vista apenado, recordaba perfectamente lo que se había hablado en la tercer casa del zodiaco
"Esto es lo mejor"- anunció Saori tratando de reconfortarlo- "recibirán un castigo divino, y vos ya sabes como son las cosas en mi familia"- Saga no pudo evitar reír ante aquel comentario, él sabía perfectamente que aquella era familia por demás de extraña, por lo que no dudaba que aquellos tipos iban a sufrir mucho
Un mes después.
"Este lugar es hermoso"- murmuró Nerea con una gran sonrisa mientras contemplaba el hermoso jardín del templo de Artemisa en Éfeso – "Luinil tiene suerte en vivir en un lugar así"
"Sí en verdad es un lugar muy hermoso, ahora entiendo porque Camus prefiere estar aquí"- sonrió Saga recordando que a partir de ahora el santo de Acuario y la diosa de la caza vivirían seis meses en cada templo
"En realidad este es un lugar genial"- susurró la joven mientras se acostaba en la hierba- "parece increíble que todo esto haya terminado"- Saga permanecía de pie a su lado, contemplándola, con su hermoso vestido blanco parecía recortada sobre la fragante hierba, su dorada piel parecía aun más dorada a causa de los cálidos rayos del sol, parecía una hermosa ninfa de los bosques.
"Supongo que al fin y al cabo las chicas tuvieron razón"- aceptó Saga sentándose a su lado, sintiendo su corazón latir agitadamente, Nerea se sentó entre risas "debe haber sido genial verle la cara a Zlochy y a los demás cuando se enteraron cual sería su castigo"
"Supongo, por mi propia experiencia, que no debe ser muy agradable tener que aguantar a la charlatana de Polimnia de por vida"- rió Saga al recordar el castigo que le habían impuesto a aquellos criminales- "aunque no termino de entender porque deben hacer eso"
"Debe ser la más inaguantable de las diosas"- Arriesgó Nerea con razón, entre risas; aquel sonido era música en sus oídos, Saga tomo aire, llevaba un mes sin decidirse, pero algo en su interior le dijo que era el momento correcto, sus ojos se clavaron en los de la chica mientras acariciaba su mejilla, Nerea dejó de sonreír, para contemplarlo con tranquilidad con aquellos hermosos deslumbrantes ojos cobrizos
"Te amo sabes?"- susurró Saga de forma casi inaudible, perdido en sus ojos, Nerea apoyo su cabeza en las piernas de él y sonrió
"Yo te amo más"- lo abrazó con fuerza, y él pudo percibir el ligero sonrojo que cubría su rostro, con suavidad comenzó a besar su mejilla, acercándose lentamente a sus labios, una vez que estos se encontraron ambos sintieron algo totalmente nuevo, estaban tocando el cielo, pero totalmente afianzados en la tierra, solo eran ellos dos en el mundo, y ya nadie más los separaría
"eh ejem...- los interrumpió Saori un poco sonrojada- perdón que los interrumpa, pero Nerea debe cambiarse para el cortejo" Saga miro a la chica con tristeza, y esta se encogió de hombros, le dio un ligero beso en la comisura de los labios antes de ponerse de pie y alejarse con Saori; mujeres, tanto lió por un vestido, pensó, se puso de pie tranquilo recordando aun el sabor de aquellos labios sobre los suyos, se dirigió hacia el patio central donde se encontraban sus compañeros, el altar estaba listo, y Camus parecía un manojo de nervios, mientras Edith intentaba calmarlo
"Todo va a estar bien, no es cierto Milito?"- le preguntaba a un reformado caballero de escorpio que era su novio
"Seguro, al fin y al cabo, la vida en pareja no es tan mala"- aseguró el ex casanova del santuario
"Y si a último momento se arrepiente y no quiere casarse conmigo?"- preguntó el chico nervioso, la pareja lo miro incrédula, en el instante en el que Marin llegaba junto a ellos para avisarles que estaba todo listo Edith y Camus se acomodaron en el altar, luego de ver pasar el interminable cortejo de ninfas, amazonas y diosas el chico de acuario pudo ver a su lucecita, aquella hermosa chica que se había adueñado de su corazón, primero en un sueño, y después día a día, parecía un hermoso ángel, la contempló embobado, hasta que llegó a su lado, y Cronos comenzó con la ceremonia
"Todo esto es muy romántico"- le comentó Saori a Seiya, quien estaba sentado a su lado
"Este... yo... Saori, me gustaría saber si..."- tartamudeo el caballito alado nervioso- "bueno quería saber si vos"- en ese mismo instante Saori lo tomó del cuello y le dio un gran beso en los labios
"Si Seiya,- respondió luego con tranquilidad, mientras el chico la miraba sorprendido- me encantaría ser tu novia"- el Pegaso la abrazó con ternura y una sonrisa en los labios
Para ser sincera, este no es el final que tenía pensado, el fic sería mucho más largo y las cosas apenas habían comenzado a complicarse, pero tuve un problema personal, y este fic esta asociado y me trae demasiados recuerdos que no quiero tener, espero puedan comprender la situacion, por ello en cuanto conseguí un poquito de fuerza escrib´este final para no dejar el fic inconcluso, capaz algún día lo retome y escriba todo lo que tenía pensado, pero tengo que dejar que unas cuantas heridas sicatricen. Espero que puedan perdonarme, me siento mal por que esta historia no sea tan buena como debería, pero no tengo fuerzas para más, por lo pronto voy a concentrarme en otras historias que tengo en mente, y probablemente vuelva a escribir sobre el señor de los anillos, (ya saben tengo que cortar con todo por un tiempo), espero logren disculparme, pero fue lo mejor que pude hacer, gracias a todos los que leyeron este fic y me apoyaron con sus reviews, como veran sigo media depre...
Hada: hola amiguis! estoy ansiosa esperando tu nuevo capi, me tenes con el alma en vilo despues de tanto tiempo, me alegra que te haya gustado el capi anterior, espero puedas comprender el repentino final de este fic, aunque ya sabes que me gustan las cosas mas complicadas, no tuve fuerzas para mucho más, espero que actualices rápido, Namarië
Misao CG: me alegra que te haya gustado, y espero que puedas comprender este final, y disfrutes del mediocre capi, en fin, este fic trae demasiados recuerdos dolorosos, y debía terminarlo o me volvería loca, espero lo comprendas, saludos y felicitaciones por tu ultimo fic, es genial
Shadir: espero disfrutes el capi final, y logres comprender todo este cambio, mil perdones por no darle a esta historia el final que se merecer
