Umi: Hola, chamacos y chamacas, ¿Como tan? Espero que bien, aquí va el sexto capi de mi fic, espero que lo disfruten, y antes que nada, voy a estrenar mi bello Disclaimer: ¿NO SON MIOS, OK? SON DE SUS RESPECTIVOS AUTORES, SI FUERAN MIOS, HARIA QUE EL INTRO FUERA SOLO SHUN O MU, PERO COMO NO PUEDO, ENTONCES SOLO ME LIMITO A HACER FICS ¿OK WEEE? Ay, que bien se siente sacar todo eso de mi pecho, jejeje, ahora si, a los reviews.

Ahora si, dejemos de andar "del tingo al tango" y vamos al fic.

Capitulo 6: A ver, a ver, si capea.

Umi subió a toda velocidad a la casa de Escorpio, se quitó los zapatos (La costumbre es mas fuerte que el amor, por eso Umi se quita los zapatos), y sin previo aviso, se adentró corriendo a la cocina, donde estaba Milo haciendo la comida de la tarde (Este par come bastante: Desayuno, segundo desayuno, comida de media tarde, comida de la tarde, merienda y cena ¡Que atracón!), y se abalanzó sobre su maestro, haciendo que cayeran ambos al piso.

-¿¡Pero que diablos te pasa, escuincla enfadosa, casi me matas!?-

-¡Ahí vienen los caballeros de bronce, Milo, ahí vienen, son muchos!-

-Con razón se morían los caballeros de plata...- Dijo Milo, quitándose a su alumna de encima.-Los atacaban en bola...-

-¡Si, debe ser por eso!-

Milo se tocó el oído izquierdo, tapándolo. Umi hizo lo mismo.

-Milo, me zumban los oídos...-

-No, Umi, es otra cosa...- Dijo Milo, tapando su oído. -Alguien levantó una pared.-

-¿Una pared?-

-Creo que puedes entender...- Dijo Milo, sentado en el piso. -Solo los que tienen el poder de ver el futuro en sus sueños pueden poner barreras mentales en su cabeza, como una especie de protección, para que nadie lea sus mentes ni sepa sus miedos.-

-Oh, entonces es por eso, pero ¿de quien es?-

-No se, no es de nadie conocido... Pero... Esta cerca, en esta área...-

-¿De quien será?-

-No lo se, pero esta en la casa de Aries.-

-Entonces, es uno de los caballeros de bronce que acaban de llegar...-

-De seguro, si, tal vez sea eso...-

-Entonces no es nada de lo que tengamos que preocuparnos ¿Verdad?-

-No... Vamos a comer...-

-Siiiiiiii...-

Se sentaron a comer, después Umi se volvió a poner los zapatos para entrenar con Milo, entrenaron largo rato, pero en un momento dado, Umi se detuvo, y se sentó en el suelo.

-¿Que pasa, Umi?-

-Ya no siento el cosmos de M&M... Creo que ha muerto...-

-Tienes razón, y aun me zumban los oídos... Creo que la persona que levantó esa pared es alguien muy tímido o no le gusta mostrar lo que en realidad siente...-

-¿Uh?-

-Si, hay personas que se guardan todo lo malo que les pasa, que se guardan todo lo que les hace sentir mal, y por eso nadie sabe lo que sienten... Son personas muy cerradas, que no externan sus sentimientos...-

-¿Como Aioria?-

-Si, más o menos, pero Aioria es una persona muy positiva, siempre que le pasan cosas, busca la manera de solucionarlas...-

-Sigamos entrenando, creo que no quisiera llorar por un amigo, cuando estoy en plena consciencia de que el no lloraría si yo muriera...-

-Bien.-

Durante otro rato siguieron entrenando, por lo que fueron casi cuatro horas, hasta que Umi sintió como sus oídos zumbaban cada vez mas, sin embargo, el cosmos de la persona que había levantado esa pared mental estaba bastante débil, casi moría, y si moría, entonces uno tenía la capacidad de ver lo que estaba pensando.

-Los caballeritos de bronce se acercan cada vez más a este templo...- Susurró Milo.

-¿Dijiste algo?-

-Que sigas haciendo la Aguja Escarlata...-

-¡Ay Milo ya hice la Aguja Escarlata como 100 000 veces, ya me cansé!-

-No me importa, vuélvela a hacer y ya...-

Milo sintió como esos caballeros de bronce se acercaban a la casa de Escorpio, vio a Umi hacer berrinche, y practicar solo una vez mas la Aguja Escarlata, y la vio unos minutos, recordando lo que le había prometido a ella y lo que le había prometido a Camus.

-¡Umi, vete a tu habitación y no salgas hasta que yo te lo ordene!-

-¡Aleluya! ¡Hasta que voy a descansar!-

-Aunque con este bendito zumbido en los oídos dudo que descanses ni un poquito.-

-Ja ja, que gracioso... Jo jo, como me río...-

-Ya vete, y no salgas...-

-Ya me voy y no voy a salir...- Umi se fue, y justo en el momento en que se cerró la puerta, entraron los caballeros de bronce, pero solo eran Shiryu y Seiya, Umi solo había abierto y cerrado la puerta para dar la impresión de que se había encerrado en su cuarto, pero no fue así, ella estaba escondida detrás de uno de los pilares del templo, y pudo ver cuando llegaron Seiya y Shiryu.

-Ese es Seiya, claro que es Seiya...- Sonrió Umi. -¡Finalmente Seiya ha vuelto al Santuario!-

Seiya y Shiryu fueron atacados sin piedad, y Umi estaba complacida, no tenía idea de quien había matado a Argol, pero tampoco quería saberlo, ambos se merecían eso y hasta más por haberle arrebatado la vida a su pandilla.

El dilema apareció siete segundos después: Justo cuando Milo iba a eliminar a esos dos, apareció otro caballero, llevaba a un chico en brazos.

Era Hyoga, y al que cargaba era a Shun, Umi no podía despegar la vista de ese hermoso jovencito de cabellos verdes, y cuando Seiya se lo llevó, ella lo siguió con la mirada hasta que se fue, después fijó su atención en la batalla de Milo e Hyoga, y se notaba a las claras que Milo ganaría, sin embargo y en contra de lo que le había pedido Camus, Milo dejó pasar a Hyoga, y cuando este se fue, Umi salio de su escondite y se aproximó a Milo.

-¿Quienes eran ellos, Milo?-

-Ellos...- Milo revolvió el cabello largo de Umi, riendo. -Ellos son los que van a proteger la tierra...-

-¿Caballeros de bronce?-

-Sip.-

-Pensé que eran enemigos del Patriarca.-

-Yo... Ya no estoy seguro de que esté bien que el Patriarca siga donde está.-

-¿Por que?-

-¿Acaso no lo has visto? Nadie lo respeta... Bueno, nadie nunca lo ha hecho, pero esto es muy diferente, los aprendices aseguran que al Patriarca se le botó la canica y que se le botaron Athena sabrá cuantos tornillos, esto ya no es sano, Umi, el Gran Patriarca ya no es de fiar, además ya no somos de fiar para el tampoco.-

-Nunca pensé que el Patriarca llegara a desconfiar de nosotros... Es decir... Si, siempre ha sido algo especial, pero eso no significa que debamos desconfiar de el ¿O si?-

Milo dejó de acariciar el cabello lacio de su alumna y desvió la mirada.

-Ya todo es diferente Umi... Ya no se ni que pensar ni en que creer... Tu misma lo viste, hasta Camus esta seguro de que va a morirse pronto...-

-Siempre estuvo preparado, el mismo te lo ha dicho: "Siempre estoy listo para viajar durante mucho tiempo y estar alejado de los que conozco...."-

-Pues si, pero esta vez Camus no hará maletas, este viaje será tan largo que no va a volver a casa... Y eso nos preocupa a todos...-

-Shaka me dijo que había notado... Aunque Shaka siempre nota todo, no es nuevo que lo note... Algo en la mirada de Camus... Como si estuviera consciente de que ya no va a vernos nunca mas...-

-El siempre ha sido así, el, al igual que ese chico de cabello verde, puede ver el futuro en sus sueños...-

-Y supongo que vio su propio futuro...-

-¿Sabes? El nunca ha fallado en decir el futuro, sus sueños son perfectos, y ocurre todo lo que el soñó, por eso es que te tengo aquí...-

-¿Es que Camus soñó que yo llegaría y decidiste cumplirlo?-

-Si, pero el me lo dijo después de que tu llegaras al Santuario, me dijo que había soñado flamas...-

-¿Flamas?- Umi vio la palma de su mano.

-Si, flamas azules, y vio la luna, una cabellera azul y lacia, y un piso inundado de sangre, unos ojos llenos de furia, y el símbolo de un clan del Japón, una media luna bordada en la espalda de una persona, que curiosamente lo vio, que pudo verlo dentro de su sueño, y su rostro era el de una estudiante de primaria.-

-¿En serio? Nunca pensé que el destino estuviese regido por los sueños que tiene la gente...-

Milo se levantó del piso, se había sentado mientras le contaba el sueño de Camus a Umi.

-Pero ese chico...- Milo hizo una figura mental de Shun, con los ojos cerrados, que se iba formando por pedazos de cristal. -No es como Camus, que desea ver el futuro...-

-¿Como?-

-Si, el solo ve la vasta incertidumbre del futuro a través de sus sueños...- La figura desapareció, y minutos después se apagaba la vida de Shura de Capricornio.

-Se acercan cada vez más a la casa de Camus...-

-Si, recuerdo un sueño que me contó Camus, su sueño se había cruzado con el de ese chico, y era tan fuerte que lo arrastró a el a su interior...-

Ambos cerraron los ojos, trozos de cristal surgieron entre la oscuridad.

-¿Este es el sueño de ese chico?-

-Si, Camus me dijo que ese chico tuvo este sueño durante su estancia en la isla de Andrómeda.-

-¿Que significa?-

-Tú solo observa...-

Shun estaba parado sobre agua, del interior del agua surgieron doce sombras, las sombras estaban encapuchadas.

-¿Ahora me dirás que significa?-

-Los Doce Caballeros Dorados, las doce constelaciones celestes y los doce signos de nuestro zodiaco.-

Una de las figuras se empezaba a quitar la capucha, Umi y Milo observaron con interés para saber quien era.

Cuando la figura se descubrió, Umi se dio cuenta de que se trataba de Afrodita, con una rosa en mano, las otras 11 sombras desaparecieron y detrás de Shun apareció el maestro del mismo, el caballero de plata de Cefeo.

Afrodita lanzó la rosa, que se acercaba cada vez más al pecho de Shun.

-¡No! ¡No lo ataques!- Umi se interpuso, pero fue traspasada por la rosa, al igual que Shun, como si ninguno de los dos estuviera ahí, y se fue a incrustar en el pecho del maestro Daidaros (Así se llama en el manga) de Cefeo, quien cayó en el agua, Shun se dio la vuelta, llorando, hacia su maestro.

-¡Maestro! ¡Maestro! ¿Por que lo mataste?-

Afrodita comenzó a desaparecer y a convertirse en plumas blancas. Umi observaba preocupada a Shun, mientras este lloraba, Milo hizo un movimiento de mano, detuvo el sueño y todo se quedó quieto, menos ellos.

-Ese chico...- Señaló Milo. -Sabía que existían los doce caballeros dorados...- Volvió a mover la mano y el sueño siguió su curso, Shun se vio a si mismo frente a el, pero era distinto, su cabello era mas oscuro y sus ojos despedían maldad.

-¿Que quiere decir eso?-

-No lo se, y Camus tampoco, pero sabemos que algo así pasará o ya pasó.-

Shun fue jalado por unos hilos que lo llevaron hacia una especie de habitación oscura, dentro de ella había una cama, y en esa cama, una mujer de cabello negro.

-¿Quien es ella?-

-No lo se, ni quiero saberlo, sospecho que sea alguien que desea eliminar a Athena usando a este chico como una especie de carnada.-

-¿Tu me salvaste?- Shun comenzó a llorar -Gracias...-

-No llores, o caerás en el mar de lágrimas.-

-¿Mar de lágrimas?-

-Las lágrimas que tu corazón derramó fueron las que casi te ahogan cuando tú te encontrabas en tu sueño.-

-¿Por que estas en la cama? ¿Estas enferma?-

-Soy alguien como tu, puedo ver el futuro en mis sueños, he estado dormida durante mucho tiempo. Hasta el día en que Hades vuelva a la tierra.-

-¿Hades?-

-Si, Hades volverá a la tierra.-

Umi y Milo salieron del sueño, habían visto lo que necesitaban saber.

-¿Es que Hades volverá?-

-Si, Hades era enemigo de Athena en la era del mito, por eso es que debemos ser fuertes, para que podamos protegerla.-

-Pero no entiendo, si esa mujer estaba consciente de que el chico era un aspirante a caballero, entonces ¿por que le dijo sobre Hades?-

-No lo se, pero debemos vigilar los sueños de este chico.-

Momentos mas tarde, tanto la flama de Acuario, como la vida del santo del mismo signo, se extinguieron.

-¡Camus ha muerto!-

-Ya lo veía venir...-

-¿Milo? Estas llorando...-

-Estoy feliz por Camus...-

-¿Que dices? ¿Como puedes estar feliz de que esté muerto?-

-Estoy feliz de que por fin dormirá lo suficiente para ver todos los sueños que ha tenido en toda su vida, completos.-

-Ay, Milo...-

Después de una hora que pareció un día, la vida de Afrodita se extinguió, y Umi pudo sentir como el cosmos del hermoso niño de cabello verde se extinguía lentamente junto con el de Afrodita.-

-Sugoi-

-¿Que?-

-Se va a morir, ese chico morirá, y ni siquiera sabré su nombre...-

-Umi, en este negocio siempre hay que estar preparado para perder a las personas, para verlas morir o sentir que se han muerto... Y por eso hay que ser fuertes y hay que sobrevivir sin importar lo que suceda...-

-Milo ¿Alguna vez has amado a alguien?-

-Umi, jamás he amado a nadie, y no considero que el amor sea un sentimiento que sea necesario o indispensable, porque al final, veré morir a las personas que llegue a amar en la vida...-

-Entonces no me digas que me tengo que preparar para perder a las personas, ya que tu nunca has amado a nadie y nunca has perdido a alguien a quien amabas en verdad, pero en ese caso ¿no hay nadie a quien quieras volver a ver?-

-... La persona a la que quiero ver... Ya no existe en este mundo desde hace mucho tiempo... No existe en ningún mundo... En ninguno...-

-¿Está muerta?-

-Puedes decir eso...-

Umi lloró, y se abrazó a su maestro, Milo estaba sorprendido, era la primera vez que Umi lo abrazaba de ese modo.

-Es una pena...- Dijo Umi, llorando. -¡Tu amabas a esa persona! ¡En verdad era importante para ti!-

Milo estaba sorprendido, no solo por la actitud de Umi, sino también por lo que estaba diciendo.

-Siento que tu corazón llora... Siento que se rompe... Lo siento...-

El cosmos de Umi se volvió enorme, y mientras Shaka e Ikki regresaban pudieron sentirlo, Shaka se dio la vuelta y vio una esfera enorme, de color negro, de la cual salió Shun, con alas: Una de ángel y la otra de demonio.

-¿Ese es mi hermano?-

-Umi... Umi esta enamorada de este chico... Esta enamorada del Shun...-

-¿Estas hablando de Shun, mi hermano menor?-

-Así es como tú ves al Shun...- Shaka le mostró una ilusión de Shun, justo como la que había hecho Milo.

-¿Como? ¿Tu no lo ves igual que yo?-

-Yo ve al Shun...- Shaka apretó la mano, y de ella surgió una pequeña flor de loto que se abrió lentamente dejando salir una estrella de cristal. -Así... Así es como yo lo veo.-

-Debo marcharme... Seiya y los otros me ocupan...-

Shaka le devolvió su armadura a Ikki, y este partió de la casa de Virgo, Shaka se quedó parado, reflexionando sobre lo que había sentido hace un momento ¿Era en verdad el cosmos de Umi? ¿Acaso ella estaba enamorada del Shun? Era algo que debía averiguar, antes de que fuera tarde.

Continúa

Genial

Umi: Los he dejado confundido, ¿verdad? Para los que se pregunten por que Shaka se refiere a Shun como "El Shun" pues es porque Shun es la reencarnación de Hades, y su nombre significa dos cosas: "El que es como el brillo de las estrellas" o también "El que es como el brillo de la estrella de la muerte", y depende de Shun el significado que tenga. Espero que sigan leyendo y que dejen harto review.

Y como ya me están viendo muy feo allá, mejor me despido, porque si no luego me meto en broncas con Shaka y Afrodita por andar escribiendo donde no debo, y creanme, no es divertido.

Hasta luego comadritas y compadritos, nos vemos en el próximo capitulo.

Me restiro, no sin antes pedirles que tengan la bondad de ser felices.

Atte.

Umi Yagami Sagara Khon Kido Shirou Arisugawa.