N.A: Este más que un capítulo es una transición entre la 1º y la 2º parte de la historia. Por eso es bastante corto. Gracias por seguir leyendo!

Capítulo 4: Tratando con el Guardián

Ambos pronto descubrieron que un noviazgo secreto no era precisamente fácil en Hogwarts. Sólo durante el almuerzo se sentaban juntos, mejor dicho enfrentados, y en las restantes comidas se conformaban con saludos rápidos. Al principio se veían todas las medianoches, pero después temieron que el cansancio de las mañanas y sus marcadas ojeras los delataran. Así que redujeron los encuentros nocturnos a dos semanales, algo que Harry consideraba horriblemente escaso. En el siguiente viaje a Hogsmeade fueron con Ron, Hermione y Neville . Esto último idea de Ginny que a Harry no convenció mucho, porque había empezado a sospechar que el autor de aquel poema anónimo había sido Neville. Ron no coincidía con Harry en este punto, pues él estaba seguro de que el culpable era Dean Thomas.

"Después de todo, ella lo dejó el segundo día de clases", decía Ron justificando su teoría. "Pero ¿por qué te importa eso a ti?"

Harry apenas atinó a mirar a otro lado y encogerse de hombros, tratando de verse inocente.

Si Ron y Hermione no le contaban lo que fuera que pasaban entre ellos, él tampoco les diría palabra sobre su relación con Ginny.

La llegada de las vacaciones de Navidad fue un gran alivio, aunque Harry hubiera preferido pasarla en la Madriguera que en el nº 12 de Grimmauld. La tarde en que llegaron la Sra Weasley mandó a Harry y a Ginny a limpiar el ático, y ambos subieron tratando de quejarse de forma que sonara convincente.

Ginny cerró con llave la puerta, y cuando varias horas después Hermione subió a buscarlos para la cena, no habían limpiado ni un cajón. Cuando abrieron la puerta Hermione los miró inquisitivamente:

"¿Por qué estaba puesto el cerrojo?"

Ginny mintió con soltura:

"Temíamos que algo surgiera de los baúles y se escapara a otra habitación".

Hermione observó el desorden intacto de la habitación, luego miró el pelo más despeinado que lo habitual de Harry y las orejas coloradas de Ginny, y sonriendo con malicia dijo:

"Ahh... ahora entiendo. Uds. estaban... ¡Lo sabía!...Cuando se lo diga a Ron..."

"Hermione, es importante que nadie lo sepa".

Y le contaron sobre Dumbledore y McGonagall.

"Pero Ron..." musitó Hermione.

"¿Por qué tendrías que decírselo?" preguntó Ginny alzando una ceja. En seguida Harry entendió su estrategia.

"Es verdad, no veo por qué no puedas ocultarle algo a Ron".

Esta vez fue el turno de Hermione de ponerse colorada. Suspiró resignada y asintió.

Sin embargo Ron no tardó mucho más en enterarse. Cuatro días después abrió la puerta del armario en el cual Harry y Ginny se habían escondido, y soltó un grito de asombro.

"Lo sabía! Cuando se lo cuente a Hermione...".

"Oh no" dijo Ginny "Es importante que nadie lo sepa".

Y soltó la misma historia que le habían contado a Hermione. Ron parecía sumamente incómodo ante la idea de mentirle a Hermione, pero no dijo nada.

Cuando estuvieron solos Harry le dijo a Ginny:

"Fred y George estarían muy orgullosos de lo que acabas de hacer".

La diversión les duró hasta el anteúltimo día de vacaciones. Harry y Ginny se habían escabullido una medianoche al armario en que los habían encontrado Ron, y al abrirlo se encontraron con que ya estaba ocupado.

"¡Ron!", gritó Ginny

"¡Hermione!", exclamó Harry.

Ron y Hermione se pusieron incandescentemente colorados, y les dirigieron una mirada de picardía. Entonces Harry y Ginny comprendieron que ellos aún estaban tomados de la mano.

"Entonces, Uds dos...", empezó Ron sonando muy poco sorprendido.

Hermione lo miró con atención.

"¡Lo sabías!", le dijo.

"¿Yo¡No!... Espera ¿ Tú lo sabías?", preguntó Ron bastante ofendido.

Una vez aclarada la confusión, Ginny preguntó:

"¿Uds. dos... desde cuándo están...mm..¿Desde la primera salida a Hogsmeade?"

Ron codeó a Hermione, quien mirando al piso contestó:

"Más o menos".

"�¿Desde antes!", se sorprendió Harry.

"No mucho antes" balbuceó Ron. "Cuando nos dejaron solos aquella tarde... pensamos que era un plan para descubrirnos."

"¿Y por qué no querían ser descubiertos?", preguntó Ginny.

"Nosotros no sabíamos qué hacer... pensamos que sería mejor aclarar primero las cosas entre nosotros... y no queríamos que...", Hermione dirigió una mirada culpable a Harry.

"No sabíamos cómo ibas a reaccionar... no queríamos lastimarte" ,continuó Ron también mirando a Harry.

"Temíamos que si te lo decíamos... pensaras que te estábamos dejando solo" , agregó Hermione.

Harry sintió una vergüenza creciente al pensar que su mal carácter asustara a sus amigos.

Pero después se pusieron hablar sobre cómo Ron y Hermione habían logrado engañarlos, y Harry y Ginny aprendieron algunos trucos que después les resultaron muy útiles.