El Copyright y la Marca Registrada del nombre y del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como todos los símbolos y elementos relacionados, son propiedad de Warner Bros., 2000

Respuesta a los reviews:

Vale: Review aporte el tuyo xD jajajaja y de nada ;)

biank radcliffe potter: Que bueno que te hayas dejado un tiempo para dejar review! Me gusta saber la opinión de los lectores y qué mejor que los reviews para saberlo. Gracias por tantos halagos xD Es tu pareja favorita? También la mía, jeje, no se nota?

Lalwen de Black: Sí, bueno, ya es hora de que vaya actualizando xD Dos semanas es suficiente tiempo! Gracias, y... ¿qué nombre se te fue? ¿Cupido? xD Y qué más, así que no encontraste relación? Es por dos razones:

a) soy súper poco creativa para poner títulos

b) no existe relación. Los títulos de "podría contarte" son todos parte de un poema que tenía escrito en un cuaderno, y los quise usar de títulos, porque la verdad no se me ocurría nada, jeje, además, me calzaba con la cantidad de capítulos del fic.

Luna-Jane-Lupin: No vuelvas a hacer eso ¬.¬ jajaja, a mi me gusta escribir capítulos cortos, ¿cuál es el problema? El punto es que guste (y espero haberlo logrado) no el largo de los capítulos, pero bueno xD Harry y Ginny juntos? Oh, dios, sé que lo tengo pendiente, pero no sé, ahora me dio más con escribir Draco-Gins que Harry-Gins, pero algún día... siempre existe la esperanza

sarah-keyko: Actualiza pronto chica, ya me tienes media desesperada para ver un capítulo nuevo tuyo, jeje. La verdad, no sé, algún día escribiré uno que no te guste :P

Sirenita: Hey! Sí había puesto algo de Herms, en el capítulo dos creí haberlo dejado más que claro... pero en fin, si no lo entendiste, en este puede que encuentres la respuesta. Y respondiendo, sí, soy chilena, pero no sabía que otra palabra usar allí, jeje :P

leweline-hechicera: Bueno no importa, mientras sigas dejando reviews xD Este fic es bien suave, eso sí, no tiene demasiada acción, pero ya vendrá más adelante xD.

SaraMeliss: Jajaja ojalá ahora no se te olvide dejarme review xD! Otra vez con lo de que está corto, jaja ya te dije, el día que encuentres un fanfic mío de gran longitud será el fin del mundo xD.

camiloOOoOoO: Al final nunca se supo quien ganó las alianzas xD pero bueno, todos decían que el rojo, yo no sé... La temática del fic? Bueno es la misma de siempre xD pero es lo que hay xD

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Te encontré colada en mi corazón

5. Aclaremos las cosas

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Una vez allí, buscó a Ron con la mirada, pero no estaba ni había rastro de él. Se sentó sobre su cama y al sentir el sonido del agua corriendo, supuso que su amigo se estaba duchando, así que no molestó más. Se cambió al pijama y se acostó a dormir, mientras muchas ideas locas invadían su cerebro.

Minutos después, Ron salía con el pijama puesto del baño. Miró hacia la cama de Harry, y notó que este había olvidado correr las cortinas al quedarse dormido. Pensaba en qué podrían haberse quedado hablando Harry y su hermana a la entrada del colegio, porque si Harry creyó que él no lo había notado, se equivocaba. ¿Y qué si le hubiera dicho lo de... Hermione? No, Ginny no solía ser bocona, no podía haberle dicho... ¿o sí? Bueno, y en el caso de que Harry ya lo supiera... ¿qué tenía? Total, era su mejor amigo, tan amigo de él e incluso más que de Herms, entonces podía confiar en él... pero, ¿por qué no le había dicho él mismo a su amigo antes?

Se metió a su cama, corrió los doseles y se quedó dormido mirando el techo.

Abajo, en la sala común, Hermione terminaba con su tarea. Guardó todo dentro de su mochila, se puso de pie y se dirigió a las habitaciones, pero fue interrumpida en el camino por Ginny, quien iba en sentido contrario a la castaña.

-¡Hermione, espera!

-¿Qué quieres ahora?

-Nada... algo. ¿Te vas a acostar? -Hermione asintió. -¿Estás muy cansada? -Hermione alzó los hombros y negó con la cabeza. -Entonces... ven.

La tomó de la mano y la arrastró hasta un sillón cerca de la entrada a la sala común. A su lado pasaban y pasaban alumnos; algunos entrando, algunos saliendo, o sea en definitiva no había un ambiente muy tranquilo.

-Quiero que hablemos de la charla de esta mañana.

-Ginny -abrió mucho los ojos-, no hay nada que hablar de esa charla.

-Sí -pestañeó-. Llegaste y te fuiste...

Hermione recordó lo de la tarde.

-Y tu después fuiste a hablar con Ron...

-Sí. Pero supongo que Harry ya te habrá -enfatizó estas palabra- comentado que no hablábamos de ti.

-Bueno... -miró el techo-. Ajá... Aún así me parece algo raro.

Ginny miró sus uñas.

-¿Y cuando vas a hablar con mi hermano? -murmuró casi sin querer.

-¿Cómo? -se sobresaltó-. ¿Y de qué? Yo no tengo nada que ocultar...

-No sé... -seguía murmurando y viendo sus uñas-, para aclarar las cosas...

-¿Qué co...

-Sabrás que ni Harry ni yo somos palomas mensajeras -la interrumpió-. Comprendo que Harry prefiera reservarse, pero yo no lo haré. Sí, estábamos hablando de ti con Ron -lanzó sin más. No tenía sentido seguir ocultando las cosas. Hermione no entendía las indirectas, y había que hacer que de alguna manera que se diera cuenta.

-¿Pero de qué hablaron de mí? -dijo Hermione, sonrojada.

-Ese ya es otro problema, si quieres saber, habla con Ron.

-No voy a hacer eso -musitó más para si misma que para Ginny.

-Sí que lo harás.

-No, Ginny.

-¿No dices que no tienes nada que ocultar?

-Y por eso mismo no tengo nada que decirle...

-¡Hermione!

-¡Ginny!

-¿Podrían dejar de hacer ruido por favor? -preguntó por sobre sus voces un compañero de Ginny que estaba estudiando dos sillones más allá. Ellas se miraron, se pusieron de pie y fueron hacia los dormitorios. Salvo, que Ginny iba hacia el de los chicos.

Subió saltando las escaleras de dos en dos y entró a la habitación de sexto, que estaba completamente a oscuras, excepto por los ronquidos que no pudo evitar reconocer como los de su hermano. Se acercó a su cama silenciosamente, corrió el dosel del lado derecho y se sentó sobre el colchón, en un minúsculo espacio que no estaba ocupado por la anatomía extendida de Ron. Comenzó a remecerlo suavemente.

-Ron... -susurró-. Ron...!

Y él, sin abrir los ojos, respondió con un tono adormecido:

-¿Qué quieres mami, no ves que estoy ocupado con mi novia Hermione?

Ginny se aguantó la risa con aquella expresión, que tuvo que morderse hasta la lengua para que no se le escapara una gran carcajada.

-Ron... despierta! Soy Ginny -siguió susurrando.

Ron se sentó sobre la cama, por lo que Ginny se acomodó. Abrió los ojos lentamente y se encontró con los castaños de su hermana.

-¿Qué estás haciendo aquí?

-Intentaba que despertaras...

Él se extrañó.

-¿Para qué?

-¿Para hablar contigo? -respondió alzando los hombros.

-¿No podías esperar a mañana?

-No.

-¿Por qué?

-¿Es necesario que te de esas explicaciones? Mira, lo único que sé, es que Hermione va a intentar hablar contigo mañana , y vas a tener que escucharla, claro, sin darle demasiada atención, pero escúchala igual, porque te va a convenir. En caso de que ella no hiciera eso antes de las 9 de la mañana, ve tú y pregúntale si va a hablar contigo...

Y se fue de allí, dejando a Ron confundido otra vez, y pensando que había sido un sueño, se volvió a acostar y a quedarse dormido como si nada hubiera pasado.

A la mañana siguiente, los cuatro se encontraron desayunando en el gran comedor bien separados unos de otros. Necesitaban pensar.

Ginny se echó el pelo hacia atrás y pasó su vista de Hermione a Ron, y luego a Harry. Ya había terminado su leche con chocolate, así que se puso de pie y fue a sentarse junto a su amiga.

-Hola...

Hermione quedó a punto de tomar su vaso de jugo de calabaza.

-¿Tan temprano me vienes a molestar?

-Calma... -susurró mirando alrededor suyo-. No te quiero molestar, lo sabes, quiero ayudarte... ¿Vas a hablar con Ron?

¿Tú que crees? -le preguntó entrecerrando los ojos.

-Que sí -respondió la pelirroja, secamente.

-Ginny, para. Ni siquiera sé lo que se supone que le tenga que decir.

-Sí, lo sabes. Vas a preguntarle por qué se comporta así contigo.

-¿No puedes hacer eso tú?

-No, porque a mi me da lo mismo. Es contigo con quien tiene un problema.

Hermione bufó y se tomó el resto de su jugo.

Ginny se paró y salió del gran comedor, no sin antes hacerle una señal con el pulgar y sonreír a su hermano, quien se sonrojó al ver a su hermana hacer aquellos gestos.

Ron suspiró y miró su reloj. Eran ya las 9:15 y a las 10 comenzaba el partido de Quidditch Slytherin-Hufflepuff. El tiempo estaba de su parte. Se puso de pie, rodeo la larga mesa a propósito demorándose, hasta llegar junto a Hermione. Casi no respiraba. No podía ponerse rojo, ¡pero le costaba demasiado! De hecho, creyó que si dejaba de respirar, al menos en vez de sonrojarse se pondría morado. ¿por qué iba a hablar él con ella, antes que nada? Porque no quería ser ella quién lo intimidara, necesitaba sentirse preparado.

Le puso una mano en el hombro, haciendo que ella se sobresaltara y se volteara a verlo, pensando que odiaba a Ginny por tener la razón. ¿Y no se supone que iba a ser ella la que fuera hablar con él, no al revés?

-¿Qué pa...?

-Ginny me dijo que querías hablar conmigo -dijo apresuradamente-. La verdad es que no quiero perderme el partido, por eso te pido que si vas a hacerlo dime ahora lo que me tengas que decir.

Maldición. Muy poco tiempo para pensar. No sabía de qué manera afrontar las cosas, hacer salir de su boca la pregunta, ¿y viene Ron y la presiona para hacerlo rápido porque no quiere perderse el estúpido partido? ¡Qué insensato! Pero no se podía enojar con él, no ahora, tenía que aprender a contenerse y no escupirle en la cara todos los defectos que hace tiempo acumulaba en su interior para recordarle lo mala persona que era.

-Ahora no puedo, estoy terminando mi desayuno.

Ron tomó aire. ¿Qué tan difícil podía ser?

-¿Pero cuando lo termines?

Hermione meditó unos segundos, pero ya sabía la respuesta.

-Bueno.

-¿Dónde?

-Junto a la escalera, en el cuarto piso. En diez minutos.

Ron asintió y se fue del Gran Comedor. Pasando por la puerta, ya no pudo aguantar más y botó todo el aire contenido, estiró los brazos, y siguió hacia la salida.

Ginny estaba conversando con una amiga cuando vio que Ron salía del Gran Comedor, así que le dio las disculpas a la chica y corrió hacia él para alcanzarlo antes de que saliera al patio. Se atravesó en su camino.

-Cuéntame...

Notó que Ron seguía avanzando hacia fuera sin inmutarse así que caminó de espaldas delante de él.

-¿Qué?

-¿Qué? -lo imitó-. ¿Habló contigo, hablaste con ella? -preguntó sonriendo exageradamente.

-Sí...

-¿Y qué te dijo?

-Digo... no. En realidad digo iba a hablar conmigo después, cuando terminara su desayuno...

-¿Estás seguro?

-Sí.

-Ok. Recuerda, más te vale que lo hagas bien. Escúchala, Ron, te lo pido.

Ginny paró de caminar y se regresó al castillo. No le entusiasmaba tener que bajar las escaleras al revés.

Ron también paró de caminar y miró que todos los de Hufflepuff ya estaban en el estadio practicando. Luego miró hacia el lago y decidió dirigirse hacia allá. Sentía en ese momento dos cosas que se oponían completamente. Una, quería que esos diez minutos pasaran lo más rápido posible. El otro, que se alargaran muchísimo.

Se fue a sentar junto a un rosal. El sol ya salía muy fuerte, así que se acostó sobre la hierba, puso los brazos detrás de su cabeza y cerró los ojos.

Dentro del castillo Hermione terminaba su café y a la vez su desayuno, eso que apenas habían pasado cuatro minutos. Pero sabía que iba a necesitar mucho más para pensar qué diablos y cómo le iba a decir a Ron lo que le tuviera que decir.

Se levantó, y salió al hall. Subió de a poco las escaleras de mármol hasta que llegó al cuarto nivel. Se sentó bajo un cuadro mientras veía como los de Ravenclaw pasaban a su lado para bajar a tomar desayuno.

¿Qué tenía que decirle? Que porqué la ignoraba, qué le había hecho ella, que problema tenía, qué necesitaba para ser feliz, si la quería, si quería casarse con ella, si quería... ya se iba por las ramas. Con la primera pregunta sería más que necesario, pero ¿porqué tanto problema para preguntar eso? ¿Es que acaso no quería escuchar la respuesta? Podía ser cualquier cosa, podía ser que sólo no la soportaba, y que por eso no le quería volver a dirigir la palabra en la vida, pero eso no podía ser. Tenía que usar la sicología. Algo tenía que haber hecho ella que a Ron le haya molestado. ¿Qué otra cosa podía ser? Ella lo había tratado mal todo el año, en un intento por hacerle entender que las cosas no siempre las tendría fácil, para quizás, hacerlo madurar, y sobretodo, hacer que él se interesara más en ella. Eso ya lo sabía, pero era la razón más posible.

Sacó un libro de su mochila y comenzó a leer.

Diez minutos después, Ron se desperezaba. Miró su reloj, y se paralizó. Habían pasado algo más de quince minutos desde que había hablado con Hermione. Y esos pequeños errores eran los que ella no toleraba. Se puso de pié, se desprendió el pasto que quedo colgando en su túnica, y corrió hacia el castillo. Subió las escaleras como pudo y casi pasa de largo al llegar al cuarto piso. Miró hacia todos lados y encontró a Hermione sentada en el piso apoyada en la pared leyendo muy interesada un libro. Se agachó hasta quedar a su altura y con cuidado bajó el libro para verle la cara.

-¿Hermione?

Ella lo miró con los ojos muy abiertos, cerró el libro y lo guardó en la mochila. Se puso de pie y miró el reloj.

-¿Estás hace mucho aquí? -preguntó sin mirarlo a los ojos.

Ron suspiró, tenía mucha suerte.

-N... Sí, pero no parecías responder.

-Mmm..., lo siento -ahora si lo miró, y esbozó una pequeña sonrisa.

-¿Ahora me vas a decir que...?

-Sí, sí, deja ver... Bien... Ron, yo... quería saber... -tomó aire-, ¿por qué... -miró el suelo-, me ignoraste todo el día de ayer?

Ron frunció el entrecejo.

-Pues... -suspiró-, parecía que cada cosa que hacía te molestaba, Herms. Por eso. Quizás si no hacía nada...

Hermione se tapó la boca.

-Ay, Ron, lo siento, pero... ya sabes, he estado muy estresada y...

-Pero es que no era así con nadie, ¡sólo conmigo! -dijo sin tratar de parecer grosero.

-Es que... -miró el techo-, de verdad lo siento. No me di cuenta... -mintió y lo volvió a mirar-. Te juro... que no voy a seguir con esto... o que voy a intentar...

-Sí, entiendo. Olvídalo. Perdóname a mí... ¿amigos de nuevo? -le tendió una mano.

Hermione sonrió y le respondió. Luego se soltaron y bajaron al hall, donde Harry conversaba con Jack Sloper, hasta que los vio y los saludó con la mano.

-Hey, ¿dónde estaban?

Ninguno de los dos respondió. Cuando llegaron al pie de la escalera Harry les dijo a todos que deberían ir bajando ya al estadio para tener buenos asientos, así que salieron juntos del castillo hasta el campo de Quidditch, donde subieron hasta lo más alto de las gradas junto a una pequeña multitud que ya estaba allí y tomaron asiento.

Continuará...

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Ojalá les haya gustado! Y dejen review! Y visiten mi blog! xD