Capitulo 8
Las vacaciones pasaban rápidamente, pero Harry y el resto de los que habitaban Grimmauld place ya se habían acostumbrado a la rutina. Luego de la reunión en la cual Harry y Hermione participaron, ciertas cosas habían acontecido. Primero que todo, Moody había traído a Neville y Luna a los cuarteles hace menos de una semana. Fue casi por suerte que no se hubieran atrasado un día más, ya que a la noche siguiente de su llegada al cuartel los mortífagos produjeron un ataque doble a la casa de Luna y Neville, pero no encontraron más que unas casas deshabitadas, por lo cual no hubo mucho que lamentar. Ellos ya se habían acoplado de maravilla a la vida en el número 12.
La abuela de Neville también se había mudado al cuartel por protección y se llevaba de maravilla con la señora Weasley, ya que ambas tenían mucho en común en lo que tenía que ver con sus actividades y también la señora Longbottom trataba de persuadir a Molly que fuera un poco menos aprehensiva con sus hijos. Ella ya había aprendido la lección en el primer periodo del terror de Voldemort. En cambio, el padre de Luna no había querido refugiarse con su hija, prefería mantener su vida cotidiana, ya que decía que la vida había que vivirla como siempre a pesar de las tragedias que podían acontecer. Por lo cual, al final se decidió que viviera en una de las oficinas de su revista y que esta fuera vigilada por agentes de seguridad mágica para su protección, igual como lo hacían con los padres de Hermione, los cuales tenían agentes encubiertos protegiéndoles en su hogar y en su trabajo.
La vida en Gimmauld place, no era tan terrible para Harry como él pensaba que iba a ser. Tenía poco tiempo para recordar a Sirius, por lo cual no andaba por los pasillos como alma en pena. Tres veces por semana ayudaban a limpiar un ala de la mansión por la mañana. Era una forma entretenida y práctica de utilizar los conocimientos que habían aprendido en defensa contra las artes oscuras. Por la tarde Hermione, para no perder el tiempo, había diseñado un plan de estudios para cada uno, y como con Hermione era imposible decir que no, estaban obligados a hacer sus deberes. El lado positivo era que para Agosto no tendrían ninguna tarea pendiente para el colegio y podrían descansar. Por las tardes se tomaban alguna cerveza de mantequilla o iban a jugar Quidditch gracias a la invención que Bill y Charlie habían llevado a cabo. Gracias a las locas ideas de Charlie y los hechizos que Bill sabía realizar, lograron crear una pequeño estadio de Quidditch en la planta más alta de la casa, en la cual podían practicar y hacer pequeños encuentros amistosos entre ellos. A Harry le encantaba ir a jugar, cuando volaba se sentía en otro lugar del mundo, un lugar sin preocupaciones.
Pero cuando tocaba tierra, había dos situaciones que no paraban de darle vueltas en su cabeza, fuera de todas las que tenían, aunque ya a algunas le había logrado dar unas soluciones bien prácticas. Como por ejemplo su situación con Dumblendore. Ahora cada vez que había una reunión se mantenía lo más alejado de él y sus amigas le ayudaban a no dejar oportunidad para que este se le acercara a hablar. Harry se sentía muy agradecido de ellas, ya que aunque ellas aún no sabían él por qué de su comportamiento le ayudaban. Les agradecería eso eternamente. Pero ese ya no era un problema para Harry. Todos eran secretos y situaciones que tenían que ver con una persona en particular. Su mejor amigo Ron. Desde que había escuchado a Hermione hablarle la noche de la primera reunión, no podía quitarse de la mente ciertas cosas que había escuchado. Primero era lo de que Hermione quería a Ron más que como un amigo, situación que encontraba entretenida y a al vez genial, ya que Hermione era a parecer la única que no se daba cuenta que Ron también sentía cosas por ella que eran más que una simple amistad. Pero, por otra parte, estaba el hecho de que Ron necesitaba pociones para no soñar. Harry ya había tenido oportunidad de probarla cuando sucedió lo de Cedric, pero también sabía que solo se utilizaban en situaciones extremadamente necesarias, ya que podía traer ciertos efectos secundarios. Harry comprendía que mientras Ron estuviera inconsciente era mejor darle, o sea, Madame Pomfrey lo había requerido así, pero no entendía por qué su amigo las utilizaba antes del ataque, era muy extraño. Y lo peor de todo es que no podía preguntarle a Ron porque él seguía inconsciente.
Ya se iba a cumplir el plazo que Madame Pomfrey había dicho para que Ron se pudiera recuperar bien del todo, quedaban solo tres días para que el mes se acabara.
La misma noche en que Neville y Luna habían llegado, a todos los presentes se les citó en la cocina y se notifico públicamente el estado de Ron. Si este no despertaba para finales del presente mes, lo trasladarían a San Mungo para que fuera instalado en la misma sección donde los papás de Neville eran atendidos. Desde entonces sé hacia todo lo posible para subirle los ánimos a los Weasley, en especial a su madre y a Bill ya que este último se seguía sintiendo culpable por el estado de su hermano pequeño.
Harry. Harry. ¡Harry!.- Harry sentía que lo llamaban
- ¿Ah?.- respondió saliendo de sus pensamientos
- Te estabamos preguntando que cuándo creías que nos irían a entregar los resultados de los T.I.M.O.S.- Hermione un poco irritada le decía
- Lo siento, estaba pensando en otra cosa
- Nos dimos cuenta.- le respondió Neville
- No te preocupes Harry, a mí me pasa todo el tiempo.- le dijo Luna relajada como siempre
- Ni que me lo digas Luna.- Ginny le respondió, mientras que Harry sonreía. Luna era especial, había algo en ella que le llamaba su atención.
Estaban los cinco en la pieza de las chicas, la cual había sido reorganizada por la llegada de Luna, al igual que la de Harry y Ron, ya que ahora Neville también dormía ahí.
¿ Cómo estas para tu cumpleaños Harry?.- Luna le preguntó
- Sin muchas ganas de celebrarlo debo decir.- respondió sin muchas ganas
- Escuche a mis hermanos que estaban planeando algo muy especial para este miércoles.- le dijo Ginny.- creo que estaba en los cierto cuando te dije que no te ibas a quedar sin fiesta de cumpleaños este año
- ¿ Nunca has tenido una fiesta de cumpleaños? .- preguntó un sorprendido Neville
- Con mis tíos era difícil que me hicieran una fiesta, quizás cuando vivía con mis padres...
- Puede ser, mi madre también hacia unas entretenidas fiestas, pero cuando ella murió mi padre trató de continuarlas, pero no eran muy alegres que digamos. Creo que la muerte de mi mamá era muy reciente. En todo caso luego entre a la escuela y ya no se podían realizar.
- ¿Cuándo estas de cumpleaños?.- preguntó Hermione
- En noviembre, el primero de noviembre.
- Vaya... extraña fecha.- dijo Hermione
- Si, algunos piensan eso. En cambio, yo creo que es un día normal como todos, uno no elige el día en que uno nace.- dijo mirando al vacío
- Eso es verdad.- Harry la apoyo.- Mi cumpleaños tampoco es el mejor. En tiempo de vacaciones casi nunca puedes reunir a todos tus amigos, a menos que estén amenazados por un grupo de mortífagos como ahora.- Harry Bromeo
- Tienes razón, a mí me pasa igual.- dijo Ginny mientras se reía
- Tú estas de cumpleaños el 11 de agosto, sino me equivoco.- Dijo Hermione
- Así es. Tienes buena memoria.- le dijo Ginny
- Gracias, siempre he sido buena con las fechas. Ahora tampoco olvidare el tuyo Luna, la fecha no es muy común. El de Harry lo sabía antes de entrar a la escuela ya que como te dije sales nombrado en varios libros que leí para no llegar tan perdida al mundo mágico. Y bueno el de Ron es fácil.- dijo un poco sonrojada, pero al parecer solo Harry se dio cuenta.- es el primero de marzo. El que no se es el tuyo Neville
- Yo tampoco¿cuándo es Neville?.- Ginny le preguntó
- Ah. Bueno el mío es el 30 de julio
Harry quedo de piedra, se acordó de la profecía. Se acordó que el otro posible candidato para derrotar a Voldemort era Neville. Sintió que estaba siendo observado, se giró disimuladamente. Era Luna con su mirada dormida, en un momento pensó que había escuchado lo que él había pensado. Pero rápidamente desecho la idea.
¿Enserio? Esta cerca del de Harry. Por qué no nos habías dicho.- Ginny le dijo
- No tiene importancia.- dijo Neville un poco apenado
- Claro que sí... ahora mis hermanos van a realizar una fiesta doble. Ahora mismo les voy a avisar.
- Yo te acompaño.- Luna le dijo y ambas salieron de la habitación dejando solo a Harry, Hermione y Neville
- Este... yo iré a ver a Ron, la señora Weasley me dijo que hoy vendría Madame Pomfrey para hacerle el último chequeo, ya que como sigue su estado lo más probable es que lo trasladen al hospital
- Hermione, no pierdas las esperanzas... verás que Ron va a despertar.- dijo Neville
- Gracias Nev .- le dijo Hermione y se fue. Dejando a Harry y Neville solos
Y qué haces para tu cumpleaños.- Harry le preguntó
- Siempre hacen una cena en casa, pero la verdad que no me gusta mucho. Mi familia es bien especial y bueno vamos a visitar con mi abuela a mis padres. Este año me libraré de la cena, pero espero que me dejen salir para ver a mis padres.
- Vaya.- dijo Harry.- Estoy seguro que la Orden encontrará una forma de que los veas. Neville... no te complicaba cuando pequeño la situación de tus padres. Es decir, mis padres están muertos y sé que no hay vuelta atrás, pero tu caso es diferente
- En un principio no lo entendía mucho. La verdad es que casi no me acuerdo de mi vida con mis padres sanos, cuando ellos los atacaron yo solo tenía una año y medio por lo que mi abuela me dijo. Pero cuando crecí me di cuenta por mí mismo de toda la situación. Pero sabes, quizás peque de ingenuo, pero mantengo las esperanzas de que mis padres se van a mejorar
- Eso es bueno.- dijo Harry. Realmente se sentía cómodo hablando de esas cosas con Neville, en cierta forma ellos habían vivido ciertas cosas en común, como el no crecer con sus padres gracias a Voldemort.- No debes perder las esperanzas
- Y tú tampoco las debes perder por lo de Ron, él va a despertar. Lo presiento
- No lo sé Neville... en mi vida todas las personas que quiero se van, por eso ya no trato de hacerme falsas expectativas
- Yo no sé exactamente por lo que has pasado, pero déjame decirte algo. He aprendido que en la vida, si bien uno no comprende lo malo que nos pasa, siempre hay una situación que quizás por estar tan cegados por nuestro dolor no la queremos ver, pero esta ahí
Harry se sintió confortado, quizás Neville tenía razón. El también había pasado por situaciones trágicas en su vida y tampoco era muy brillante en el colegio, pero aún así mantenía las esperanzas. En ese momento pensó en decirle la profecía.
Gracias Neville, enserio.- Harry hizo una pequeña pausa.- Neville... hay algo que te tengo que decir.
- Dime Harry.- dijo tan normal como siempre
- Neville... verás... la noche del...
- Hey chicos... la cena esta servida. Mi mamá los esta llamando y les recomiendo ir porque al decirle que Neville también esta de cumpleaños, ahora si que están planeando un gran evento. Así que si quieren que su opinión sea escuchada les recomiendo que bajen.- Ginny les dijo y desapareció tan rápidamente como entró.
Harry decidió mejor no continuar... el momento algún día llegaría. Así que cambió el tema inmediatamente
Mejor bajemos... no deseo que nos traigan a Peeves para nuestro cumpleaños.- bromeo Harry
- Tienes razón, pero ¿Qué me ibas a decir?.- dijo Neville mientras se dirigían a la puerta
- Nada de mucha importancia.- Harry mintió.- te lo digo después, no hay apuro
- Ok. Entonces bajemos, me muero del hambre.
Y ambos chicos bajaron a la cocina.
La cena había estado deliciosa como siempre, la señora Weasley ayudada por la abuela de Neville eran todo un suceso.
Ahora estaban descansando, mientras que en una esquina Fred y George hablaban en susurros. Ginny platicaba con Tonks, mientras que Luna lo hacía con Neville. Harry quería hablar con Bill o Charlie para saber cuando llegaban los T.I.M.O.S ya que iba a comenzar el último mes de vacaciones y no habían llegado. Mientras los trataba de ubicar, vio a Hermione en un rincón revolviendo su plato, ya que todavía no lo terminaba. Harry estaba preocupado por ella, sabía porque esta así, pero ella no le decía nada. Cómo quería entonces que él le ayudara. Cuando ella se disculpo para retirarse porque estaba cansada, Harry la siguió hasta el ático (donde se encontraba el campo de Quidditch de Bill y Charlie). Al entrar la encontró mirando los postes.
¿Qué pasa Hermione?.- le preguntó
- Nada Harry, solo estoy un poco cansada.- le respondió muy bajito
- ¿Enserio? Entonces por qué no estas en tu pieza acostada
- ¿Por qué tantas preguntas Harry?.- le dijo Hermione sin mirarlo aún
- Porque me preocupas, andas cada vez más triste... es por Ron cierto.- le dijo Harry
- Harry, déjame sola... por favor.- le pidió en susurro a Harry Hermione
- Esta bien, pero no debes encerrarte en tus problemas, no esta bien
- Entonces por qué tú lo haces Harry.- le dijo Hermione mirándolo a los ojos
- ¿De qué me hablas?.- le dijo Harry medio nervioso
- Tú también andabas en un comienzo extraño, ahora lo disimulas más, pero sé que tienes problemas que no quieres decir.
- No lo entenderían, tú no lo entenderías.- le dijo Harry
- No he querido presionarte y no lo voy a hacer. Pero si tu crees que no puedo entender tus problemas, entonces yo tampoco creo que tu puedas comprender los míos.
- Mejor me voy.- Harry le dijo. Sabía que ella tenia razón, pero no lo iba a admitir
- Antes que te vayas. Madame Pomfrey dijo que el primero de agosto en la mañana vendrá unos medimagos para darnos él diagnostico final sobre Ron y probablemente se lo van a llevar inmediatamente a San Mungo
- Ok.
Ya Harry se fue a su alcoba. Agradeció que Neville no estuviera. Quería dormir pero sabía que alguna pesadilla no lo dejaría tranquilo. Ya no eran con Voldemort con quién soñaba, su habilidad en la oclumencia había mejorado notoriamente. Eran sueños de angustia por todo lo que pasaba, Se acostó y trato de dormir, sus ojos le pesaban, pero su mente no se podía relajar. Daba cientos de vueltas en la pero nada. Decidió ir en busca de Lupin, él podía y tenía que ayudarlo.
Se puso una camiseta, y salió de su alcoba. Para su buena suerte justo Lupin se dirigía su propia habitación. Harry le llamo la atención
¡Remus!
- Harry, que sorpresa. No te había visto el día de hoy.- le dijo Remus
- Necesito pedirte un favor.- le dijo mirando hacia todos lados para ver si no llegaba alguien
- ¿Qué sucede?.- le dijo el licántropo preocupado
- No puedo dormir. No es por Voldemort no te preocupes.- le dijo Harry inmediatamente al ver su cara.- Es por todos los problemas; necesito dormir, descansar. Pero no puedo
- Te entiendo. Tengo una pócima para dormir que te puede servir. No eres el único que sufre de falta de sueño y exceso de cansancio
- Gracias Remus
- Te la llevo a tu habitación, espérame allá
- Ok.
Harry lo quedó esperando sentado en su cama, mirando el portarretratos en el cual había una foto de él junto a sus dos amigos riendo.
Harry aquí está.- le dijo Lupin entrando a la pieza
- Gracias Remus.- le dijo Harry muy agradecido
- Pero debes prometerme que no te volverás dependiente a esta pócima, es solo una ayuda. Me entiendes
- Te entiendo y te lo prometo.- le dijo Harry. Tomo el frasco y lo bebió
- Bueno Harry, descansa. Mañana hablamos... además es el cumpleaños de Neville
- ¿ Tú cómo lo sabes?
- Era miembro de la antigua Orden también. Descansa, buenas noches
- Buenas noches.- dijo Harry y Lupin se retiró.
Observando la cama continua donde estaba su mejor amigo, se quedó dormido.
Harry estaba descansando en uno de los sillones del primer piso de la casona. Ayer había sido el cumpleaños de Neville y hoy le tocaba a él. Estaba cansado, la pócima que Lupin
le había dado le funciono tan bien, pero a la noche siguiente le costo dormir y al parecer a Neville también.
No había tenido oportunidad de hablar con él, ya que primero la señora Weasley le había preparado un desayuno especial y de ahí salió con su abuela. Harry supuso que a ver a sus padres. Y luego los gemelos prepararon una gran fiesta que termino en la madrugada y hoy día al parecer tocaba otra.
Harry feliz cumpleaños.- le dijo una voz
- Gracias Charlie
- Veo que no estas haciendo mucho, porque mejor no nos vamos a hacer un duelo
- ¿Un duelo?
- Sí... uno de Quidditch. Oliver me dijo que eras un excelente buscador, pero déjame decirte que yo ayude a que Gryffindor ganara muchas copas de las casas
- Enserio... eso lo veremos ahora. Acepto tu reto
En eso los gemelos y Bill llegaron
- Alguien dijo reto.- dijo Bill
- Vamos a hacer un duelo entre buscadores.- dijo Charlie a su Hermano
- Enserio, eso tenemos que verlo.- dijo Fred
- Voy por mi escoba y nos vemos arriba.- les dijo Harry y se fue.
Estaban todos en el mini campo de Quidditch. Bill decidió ser el arbitro y los gemelos se consiguieron una snitch.
Justo cuando iba a empezar, Hermione dijo:
Creo que para ser totalmente imparciales también deberían usar la misma clase de escobas
- Hermione tiene razón.- dijo Bill
- Entonces que usen las nuestras.- dijo George
- OK. Yo no tengo ningún problema.- dijo Harry
- Yo menos.- dijo Charlie
Ambos tomaron las escobas de los gemelos y con en sonido del silbato de Bill comenzó en encuentro.
No lo puedo creer, Harry le ganó por un milímetro.- dijo Neville emocionado
- Si, el encuentro fue increíble.- dijo Ginny
Los chicos iban comentando el encuentro que habían presenciado. Fue uno de los mejores de su vida, la técnica de Charlie se mantenía intacta, mientras que el talento de Harry era algo sobrenatural. Ambos estuvieron jugando por más de dos horas, hasta que el estado físico de Charlie llegó a un limite y Harry pudo atrapar la escurridiza snitch.
Los competidores se habían dirigido para darse una ducha, mientras que el resto bajaba al comedor de la casa, para afinar los últimos detalles de la segunda fiesta que se iba ha llevar a cabo.
Ya se habían cambiado de ropa y los gemelos afinaban los últimos detalles. Querían que la primera fiesta de cumpleaños de Harry fuera una que nunca pudiera olvidar y también querían dar un poco de alegría a los habitantes de Grimmauld place que tanto los necesitaban. Ahora la señora Weasley agradecía a Merlin que sus hijos no hubiesen entrado a trabajar en el ministerio como ella quería.
Los únicos que faltaban eran los chicos, ya que todavía estaba en la habitación. Por primera vez las chicas habían llegado primero. Ahora si que cualquier cosa podía suceder, pensó Tonks.
Harry estaba poniéndose su chaqueta para bajar, mientras que Neville estaba guardando algo en su baúl. Harry se dirigió hacia él:
Vamos, por fin estoy listo y me han dicho que hacer esperar a los gemelos es una mala idea
- Ok. Deja guardar esto.- dijo Neville mientras guardaba un libro en baúl del cual se cayó una foto y Harry la recogió. Era una foto de la Orden. Harry quedó en blanco
- Esta... esta... salen nuestros padres.- Dijo Harry tratando de encontrar palabras
- Sí, es una foto de os miembros más jóvenes de la primera Orden
- Sirius.- Harry susurro
- Salen todos tan jóvenes y alegres... no es justo
- No Neville, nada de esto es justo.
- No me gusta sentir odio por nadie, pero te juro que Bellatrix pagará por dejarme sin padres
- Y yo te ayudaré, Neville... no quedará impune
- Gracias
Neville guardó la foto y cerró su baúl. Ambos dieron una triste mirada a Ron. El tiempo de este se acababa y ya la fe era lo único que quedaba.
Se dirigían a la puerta, cuando Hermione entró.
Pensamos que se habían quedado dormidos que no bajaban. Nosotras estamos listas
- Estuvieron listas antes que nosotros, Harry creo que estamos mal
Justo cuando Harry iba a decir algo, sintieron un sonido del fondo. Harry y Neville que estaban enfrente de Hermione vieron como en un segundo ella palideció. Se dirigió donde había escuchado los ruidos, eran como cuando una persona se quiere aclarar la garganta. Harry y Neville se giraron lentamente y Harry quedó de piedra.
¡ Ron!.- dijo Neville
Después de casi tres semana inconsciente, por fin abría los ojos y volvía a la realidad.
N/A: gracias por seguir leyendo mi fic... cada vez estoy haciendo los capítulos más extensos y espero que no les moleste. Gracias por los reviews y sigan leyendo ya que por fin estamos entrando de lleno a la historia.
Pd: por si no lo recuerdan el primero de noviembre es el día de todos los muertos, como luna siempre a sido un poco excéntrica, pense que esa fecha era casi perfecta para ella. Imagínense, ella nació al día siguiente de que los padres de Harry murieron (todo esto según mi imaginación); cuando salga la versión oficial de rowling lo editare, pero ahora mis ideas la llevan jajjaa
