Weee!
Seguimos actualizando… y este capitulo saben… se lo quiero dedicar a todos los fans de Snape, por que en este capitulo que van a leer a continuación no sale Sirius, pero si salen Snape y James.
Y con esto respondo la pregunta que me hicieron sobre "por que Snape puede ver a James?"
Lean!
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Al menos podía sentirse feliz ese día.
Potter tenía detención con el por la tarde, toda una maravillosa tarde para estarle haciendo la vida un infierno en la tierra.
¿Qué mejor regalo de cumpleaños podía pedir?
Bueno, estaban esos anteojos de rayos x, pero no tardarían en llegarle por correo lechuza, el anuncio decía que era de 4 a 8 semanas.
Ya habían pasado 14, así que tenía que llegar de un momento a otro.
Se metió las manos en los bolsillos buscando una goma de mascar mientras se dirigía a su oficina, tenía ganas de algo dulce para que terminara de endulzarle la bellísima tarde que iba a tener.
Y lo mejor del caso…. Aun mejor incluso que tener a Potter en detención…. Lupin.
Si, Lupin… como era el maestro mas buena onda de toda la escuela lo había invitado después del castigo de Harry a su oficina a tomar el té en conmemoración a este hermoso 2 de noviembre en el que hacia 37 años el, Severus Snape, había nacido.
Severus sonrió con toda la malicia de su avinagrado ser.
Lupin Severus Soledad absoluta = un regalo de cumpleaños que nunca olvidaría.
Si, sería una noche en la que la pasión inundaría ambos cuerpos, y después, dada la condición de licántropo de Lupin, sería todo suyo para el resto de la eternidad.
Ya podía imaginarlo.
El fuego ardiendo en la chimenea, mientras Lupin le miraba a el con ojos llenos de ensoñación, "Severus" le diría "hazme completamente tuyo" y el, como el caballero que era, le cumpliría su deseo.
- ¡Oh! Si…. Claro, con gusto – Snape se rodeó así mismo con los brazos.
- ¿Dijiste algo, Severus? – su fantasía fue interrumpida por una vocecilla ronca ya muy conocida.
- ¿Eh?
Snape abrió los ojos un tanto molesto por haber sido interrumpido en medio del éxtasis que le producía su imaginación.
Remus lo miraba con ojos grandes.
- ¡Lupin! – rezongó - ¡No te metas en lo que no te importa!
- Está bien… - Dijo Remus mientras se iba – yo solo quería ser amable.
Esperó hasta que Remus desapareciera detrás de una esquina para volver a respirar con tranquilidad.
Casi le descubría.
Miró su reloj y casi se queda calvo del susto, ya tenia 3 segundos de retraso y no podía perderse ninguno de estos valiosos segundillos tonteando por los pasillos, debería estar fastidiando a Potter de la forma mas fastidiosa que ingeniara su fantástico y súper desarrollado cerebro.
Lamentablemente para Snape, la autora no compartía con el esta opinión acerca de su masa encefálica, así que decidió hacerle ella también a el la vida imposible por un rato.
Por el mismo pasillo, tan solo que a la izquierda por donde se doblaba para ir a la enfermería, flotaba James con tranquilidad maquinando un plan ingenioso.
Se había enterado por buenas fuentes que Remus le había hecho una invitación a Snape esa noche a tomar el té con el en su oficina y no podían permitirlo ni el ni Sirius.
Así que ahora pensaba en que hacer para evitar que se vieran esa noche.
No tenía dudas de que las intenciones de Remus eran bien intencionadas, nadie ni siquiera el sapo roñoso de Snape merecía pasar su cumpleaños en la total soledad.
Pero seguía siendo Snape y era inadmisible que Remus lo viera a el en vez de a Sirius.
Bueno… pero lo que no sabía James, es que Remus estaba un poco molesto con Sirius por hacerle pasar por tantas desgracias y otros tantos ridículos últimamente.
En que poco se fija, molestarse nada más por que Sirius vaporizó su túnica a la mitad de una clase que tenia con los Slytherins de 7mo y por si fuese poco… también lo repitió frente a los de Gryffindor.
Remus nunca había visto a Harry esconderse detrás de las sillas como lo hizo en esa ocasión.
A la fabulosa mente de James comenzaron a llegar cientos y cientos de ideas, cada una más ridícula e imposible que la anterior, pero ninguna se adaptaba a lo que requerían.
No había necesidad de matar a Snape, solo de alejarlo de Remus.
Continuó flotando un rato mas, hasta que se acercó a la esquina del pasillo; ¿Qué hacer?
En eso, Snape pasó frente a el, como le gustaría que lo viera, si fuera así se ahorraría mucho tiempo pensando en algún plan para separarlo de Remus.
Con el simple hecho de habérsele parado enfrente lo haría caer en un coma profundo por el susto y listo, no más Snape al menos por un tiempo.
Suspiró, lastima… las cosas no podían ser tan fantásticas.
Al cruzar el pasillo, Snape oyó un ruido, parecía que suspiraban.
Tal vez era un alumno al cual podría atrapar en un momento justo y ponerle un castigo gigantesco.
Se regresó para mirar con horror lo que venía por ese largo y helado corredor.
James Potter flotaba hacia el, lo hacía de forma distraída como si pensara en algo que requiriera toda su atención para no haberle visto.
Fue cuando Snape recordó que James Potter estaba muerto y que era la segunda vez que se le aparecía.
¡Oh! ¡Maldita su estampa! Aún muerto quería hacerle la vida imposible a el, Severus Snape, el amigo de los menesterosos y de los pobres, la versión mágica, moderna y mejorada de Robin Hood.
Sacó su varita, no permitiría que le arruinara su vida otra vez como cuando estaban en el colegio, lo vaporizaría como el maldito espectro del mal que era y si no podía hacerlo entonces lo encerraría en una botella como el genio malvado que siempre había sido.
Por su culpa Lupin nunca se había fijado en el cuando ambos iban al colegio, por su culpa le habían llenado la cabeza con información tonta acerca de los Ángeles que cursan el colegio en la casa de Slytherin.
Le apuntó con su varita, la mano le temblaba con violencia y habló:
- ¡Potter! – dijo con toda la autoridad que era capaz debido a su miedo - ¡No dejaré que arruines mi vida otra vez!
- ¿Disculpa? – James lo miró – No te oí, ¿podrías repetirlo?
- ….. – Tomó aire y vociferó - ¡Avada Kedabra!
El haz de luz verde atravesó a James, la ventana abierta y viajo lejos… muy muy lejos hasta una tierra extraña al otro lado del mar donde la nieve cubría el suelo y le dio a un niño pequeño, de cabeza redonda que usaba una chaqueta con capucha anaranjada y de aspecto extraño.
- ¡Oh no! ¡Mataron a Kenny! – dijo un niño que iba con el, vistiendo una chaqueta marrón y un gorro para el frío azul con una mota roja.
- ¡Hijos de Puta! – respondió el otro que usaba un gorrito con orejas verde limón.
(N/A: Tributo a South Park, si no le entienden sáltense ese pedacito, no tiene nada que ver con la historia U)
Al ver Snape esto, que el hechizo atravesó a James, palideció aún mas y dejo caer su varita al piso al tiempo que corría lejos de ahí a refugiarse en su oficina debajo del escritorio.
Cuando llegó ahí le dijo a Harry que se largara y que no volviera nunca mas a pasarse por enfrente de sus narices o le lanzaría una maldición que nunca jamás olvidaría.
Harry solo obedeció.
Por otro lado, James aun flotaba en el mismo pasillo donde se había encontrado a Snape.
Estaba un poco confundido, ¿Cómo era que Snape había logrado verle?
Y lo más genial de todo: ¡El también había sobrevivido al Avada Kedabra!
Se desapareció de ahí, necesitaba encontrar algunas respuestas.
Corría por el corredor lleno de estatuas del ángel pelirrojo, por el cual ya había pasado tantas veces, hasta llegar a la puerta la cuál abrió con todas sus fuerzas y entró en la habitación sin importarle si era bien recibido o no.
- ¿QUE DIABLOS ESTA HACIENDO AQUÍ, POTTER? – le gritó el anteriormente conocido ángel pelirrojo medio calvo y canoso - ¿POR QUE NO ESTA EN LA TIERRA CON SU HUMANO?
A James le tomó un rato explicarle lo sucedido, claro que nada mas le contó lo que le convenía.
Osea que le contó casi nada con respecto a los planes fallidos que se le habían ocurrido.
- Ya veo… - le dijo el supervisor – así que otro humano, además de el que le tocó lo puede ver…
- ¡Si! ¡Y es el ser humano más detestable del mundo!
- ¬¬ no, a ese lo tengo enfrente – el ángel suspiró – ¿Cual es el número de su humano?
James lo pensó un momento, al no recordarlo busco en los bolsillos del pantalón, tal vez lo tenia apuntado en algún lugar, al final encontró el papelito y se lo dio al ángel.
Este revisó el numero y saco una carpeta de un archivero cercano, empezó a buscar.
- Sirius Black… - le dijo – ese es tu humano.
- ¬¬ si… pero yo quiero saber por que Severus Snape puede verme…
- ¿Snape? – volvió a buscar en el archivero, sacando otra carpeta – aquí esta… Severus Snape, también es ingles…. ¡Ah! ¡ya veo el problema!
- ¿Cuál es?
- Mira, Potter el número de tu humano es 051185581180-C que se encuentra en la zona H bajo los estatutos I y los O y el de este tal Severus Snape es el 051185581180-C que se encuentra en la zona H bajo los estatutos I y los O.5.
- ¿Me lo puede explicar?
- ¬¬ ¿Y luego te iras para dejarme en paz?
- Si, lo haré.
- Está bien – carraspeó y se sentó derecho en su silla – cuando en sus números de registro un humano llega a tener un punto 5 significa que puede ver y percibir cosas que solo los números enteros cercanos a el pueden.
- ¿En otras palabras?
- Por que su número de registro se parece al de tu humano va a poder verte.
- …. – James se quedó callado un rato - ¿Eso es malo?
- No es bueno ni malo, son errores de administración.
- ¿No le puede cambiar el número?
- ¿Qué tal si mejor te cambio a ti del cielo al infierno?
- UU déjelo así entonces…
- Bueno, Potter – guardó las carpetas en el archivero – ahora largate de aquí.
Volvió a su trabajo y James regresó con Sirius el cual no se dio por enterado de esto hasta que al día siguiente Snape proclamaba haber visto al espíritu maligno de James Potter en los pasillos que venia a destruir su vida tal y como la conocía.
Dumbledore lo mandó de descanso unas semanas a San Mungo en el área Psiquiatrica.
Sirius prefirió no preguntarle a James como era que había pasado eso y para ser franco, no tenía ni ganas de enterarse.
Estaba muy ocupado recordando la linda velada que había pasado con Remus esa noche tomando té en su oficina, como Snape lo dejó plantado Sirius fue a hacerle compañía.
¡No iba a desperdiciar el té!
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Muy bien, acabo de terminar esta cosa y parece que a Sirius le fue bien sin James xD
Así que respondamos sus reviews:
Black lady: me alegro de que te haya dado risa eso significa que he cumplido mi misión.
Marineneko: xD no fue poco tiempo… tarde demasiado, pero espero que te guste este capitulo también, espero verte un día de estos! Se te extraña!
Nani: mmm dicen que con algo calientito deja de doler UUU gracias!
Mido-chan: ya lo continuo!
Fallen fan: me alegro de que te hayas tomado tu tiempo en leerlo, eso habla bien de mi forma de escribir, mil gracias y continúa leyéndome!
Águila fanel: un poco loca? Así como yo!
Hermi16: si, lo sigo publicando, este es el capitulo de advertencia .
Como le decía a Hermi16, este capitulo es de advertencia.
Si no hay reviews no hay continuación, y sin continuación el fic se queda estancado y tendré que quitarlo de aquí.
Les pido de favor que me dejen aunque sea un "me encanto!" para saber que esta siendo leído.
Gracias por su atención.
Lantra
