Los tres magos
Nota inicial: Nada trascurre con normalidad cuando Gwendy está involucrada y esta ocasión no será la excepción pues con su afán de hacer renegar a Viktoria habrá mucha magia desastrosa.
Lana está en el comedor aburrida más que una ostra, bosteza como si fuera un león de circo enjaulada a la espera de las órdenes de su domadora. Así que no nota cuando Gwendy y Amanda se le acercan.
—¡Hey qué onda!, no me digas que ya te votaron —. Pregunta Gwendy haciendo saltar del susto a Lana que casi se cae al piso.
—No, esta con tu hermano y me dijo que la esperara aquí.
—¡Vaya calamidad!, no me digas que haces todo lo que dice —. Amanda interviene burlona.
—¿Quién? ¿yo?, no —. Replica molesta Lana poniéndose de pie.
—Pruébalo —. Amanda se acerca a Lana encarándola.
—Bien si eso quieren, en el jardín principal va a haber un evento mágico de fuentes danzarinas así que iré.
—Ok aceptamos la invitación —. Amanda habla rápidamente caminando hacia la salida.
—Yo no las invité.
—Ánimo, levanta esas patas de Thestral o te dejamos —. Gwendy la jala divertida.
Vika y Weldon platican largo y tendido. Primero la pelinegra se disculpa por su forma desalmada de actuar, después, el chico intenta convencerla de que le dé una oportunidad y demostrarle que es digno de ella. Vika se niega una y otra vez, aunque, le pide que sean amigos. Tal vez el tiempo sea sabio y los termine uniendo o tal vez no, aun así, desea su amistad. Lovegood se ciega con esa posibilidad aceptando que sean amigos.
Los dos regresan al Palacio, Vika se extraña de no encontrar a Lana, aunque, no hace nada por buscarla simplemente se queda con Weldon a cenar y después jugar al ajedrez.
En la noche, Lestrange sale a pasear con Anneta, regresando en la madrugada al mismo tiempo que Gwendy, Amanda y Lana. Vika trata de ignorarlas, sin embargo, le da coraje ver a su amiga con su archirrival.
Al otro día por la tarde, Viktoria va a clases de Alquimia, Hektor en persona la inscribió, al entrar al aula se sorprende de ver tantos alumnos interesados en la materia, sin embargo, se llena de ira al encontrarse con Gwendy en primera fila.
El martes por la mañana, Vika y Anneta, quedan de ir al gran salón de la Academia a depositar sus nombres en el Cáliz de fuego, con ellas van sus amigos a excepción de Lana que una vez más se ha fugado con Gwendy y Amanda. Cuestión que Lestrange no deja pasar, por esa razón, hace tremendo entripado que apenas logra calmar Weldon.
Por la tarde, en la clase de Alquimia, Gwendy, nota el enojo de Viktoria, por lo que, hace cualquier cosa para mofarse o llamar la atención con la única finalidad de hacer enrabietar a la pelinegra. Así al terminar la clase Vika encara a la joven Lovegood.
—No sé qué intentas, pero, te calmas o te calmo
—Ja, como si te tuviéramos miedo —. Amanda interviene enseguida acercándose a su amiga.
—Tú no te metas no eres nadie —. Vika voltea a ver a la joven Malfoy sin percatarse que Gwendy ha levantado su varita.
—Mira quien habla —. Replica la pelirroja, escondiendo el objeto mágico tras su espalda.
—Ya lo verán, ganaré este torneo, y tú ¿qué harás? —. Encara Viktoria a Gwendy. —Estarás sentada sin hacer nada, sólo viéndome llevar la gloria eterna.
Aquello hace molestar seriamente a Gwendy, no obstante, no pierde la paciencia sigue concentrada en lo que está haciendo con su varita.
—Aléjate de Lana o lo vas a pagar muy caro —. Vika amenaza a Gwendy dándose la vuelta para irse y al cruzar el umbral de la puerta, un enorme chorro de agua le cae encima, tirándola al suelo y arrastrándola algunos metros.
En tanto, Gwendy y Amanda se mueren de la risa, además de varios alumnos que pasaban por ese lugar.
Los días pasan tortuosos para Gwendy, le carcome lo que Vika le dijo. Desea ponerla en su lugar, demostrarle que sólo es una habladora porque ella es la mejor. Por esa razón, va a buscar al director Wood que se encuentra en su oficina temporal. Cuando la recibe, la chica le pide que la deje colocar su nombre en el cáliz de fuego y que le parece injusto tenerla aquí sólo para pasear.
—Se equivoca Señorita Lovegood, no la traje a pasear, sé de su habilidad y poder —. Oliver Wood habla sereno notando la frustración de Gwendy en sus ojos. —Si desea colocar su nombre en el Cáliz de fuego adelante, está en todo su derecho, todos los alumnos mayores que vinieron lo tienen.
—Gracias, profesor —. La pelirroja se entusiasma demasiado y corre hacia la salida en busca de un papel y una pluma mágica.
Gwendy logra convencer a escondidas a Lana para que también coloque su nombre en el Cáliz de fuego, así que antes de la cena corren al gran salón.
Cuando llegan, saludan a Digalus y el resto de los alumnos de Hogwarts, más adelante notan a Vika sentada junto a Anneta y a Weldon que regresa de haber colocado su nombre en el Cáliz de Fuego. Gwendy es la primera en cruzar el círculo de la edad y depositar su nombre. En tanto, Amanda va aventando a Lana que se ha arrepentido al ver a su amiga enfurecida, aunque, de nada le sirve hacerse del rogar ya que Gwendy la jala hacia el Cáliz.
—Oye Gwen, alguna vez tu abuelo te contó, si a las acromántulas les gusta el agua —. Amanda plática "casualmente" con su amiga en voz alta para que todos se enteren.
—No, pero, el otro día vi a una muy peluda y fea, que hasta gorgoritos hacía tratando de salir de un charquito —. Las dos amigas comienzan a reírse a carcajada suelta contagiando a Lana y al resto de los alumnos de Hogwarts.
—Me las vas a pagar —. Vika se levanta de su lugar enojada buscando venganza, sin embargo, Weldon la detiene.
Gwendy camina junto a Amanda y Lana, sin embargo, la pelirroja se detiene un momento para darse vuelta y sacarle la lengua a Vika. Lestrange trata de zafarse de Weldon, al no conseguirlo comienza a gritarle de cosas a la joven Lovegood.
Sin percatarse de nada, Gwendy, choca con alguien yéndose directo al suelo, cuando nota que está en algo blandito se levanta rápidamente notando a un chico alto, fornido de ojos azules y cabello negro.
—¡Oh! lo siento hermosa damisela, ¿se encuentra bien?, ¿Hay alguna parte de usted que le duela? —. Menciona el chico con su acento francés muy marcado que deja a varias hipnotizadas.
Gwendy mira curiosa aquel chico mientras, asienta con la cabeza, toma la mano del joven para ayudarlo a levantarse del piso y se le queda viendo; le parece casi de ensueño su fina presencia.
—Mi nombre es Antoine Bossard, es todo un placer haber amortiguado su caída —. El chico le besa a Gwendy el dorso de la mano con mucha delicadeza.
—¡Ah! ya se, es una broma —. Es lo único que pronuncia la pelirroja incrédula de que aquel joven exista, así como lo ve.
—¡Oh no! mi dulce señorita, broma, seria no invitarla a cenar después de mi grosero acto.
En las gradas del lugar los alumnos de Hogwarts se ríen por las caras raras que hace Gwendy.
—No lo creo, soy yo la que se disculpa y sale huyendo de esta escena barata del siglo XVI —. Gwendy se zafa caminando apresuradamente junto con Amanda y Lana.
Afuera del gran salón, las chicas se echan a reír incrédulas de lo que vieron, aunque, Amanda no puede evitar suspirar de sólo mencionar el nombre del chico, por esa razón, Gwendy y Lana se burlan de ella.
Adentro Antoine, estudiante destacado de la Academia Mágica Beauxbatons, coloca su nombre dentro del Cáliz de Fuego ante el suspiro de la mayoría de las chicas que hay presentes en el recinto.
El resto de la semana pasa entre divertidas peleas de Vika y Gwendy, que si una le pega los pies para que la otra no pueda caminar, que si una le lanza el maleficio de crecer cuernos a la otra, que si se sabotean las citas de la otra, en fin, una guerra campal sin fin.
El sábado por la noche, se reúnen todos en el gran salón con el fin de que el Cáliz de Fuego seleccione a los tres campeones para el Torneo de los Tres Magos, una vez más asisten los ministros de magia de los países, James Sirius Potter y otros funcionarios públicos del mundo mágico.
Suben al estrado los tres directores, los ministros y la jefa del Departamento de Cooperación Mágica Internacional. Después, la directora anima a James Sirius Potter a dar unas palabras para iniciar con el evento. Así que, el poderoso y heroico mago da un discurso breve y muy emotivo:
—Ánimo ustedes pueden, no mueran y que gane el mejor —. Esas son las palabras de James Sirius Potter para provocar la emoción de los estudiantes que le aplauden con mucha energía.
—Gracias Señor Potter, que elocuencia la suya —. La directora, Madame Angelique, habla entusiasmada para después dirigirse al Cáliz de Fuego. —El momento ha llegado, amárrense bien los zapatos porque estos serán nuestros tres campeones.
Madame Desrosiers se acerca al Cáliz de Fuego que comienza a arder con mucha fuerza, las flamas cambian de azul a rojo para lanzar hacia arriba un papel en forma de pluma. Cuando desciende la directora lo toma y al verlo sonríe feliz.
—Nuestro primer campeón es el Señor Antoine Bossard —. Nombra a su estudiante Madame Desrosiers sonriente y muy orgullosa.
En ese momento, el gran salón se llena de mucha algarabía, la mayor parte de las chicas le aplauden felices, mientras, otras suspiran y Gwendy… bueno, ella sólo se ríe.
—Jajaja, es todo un adonis nalgas sueltas —. Gwen comenta divertida a Amanda y Lana.
Antoine se pone de pie, camina hacia el estrado, lanza miradas coquetas a las chicas que le gritan hasta que llega con Madame Desrosiers, quien, lo felicita y le pide que pase a una sala privada que hay de lado derecho del recinto.
El Cáliz vuelve arder en rojo intenso sacando otro papelito que toma la directora en el aire para poderlo ver.
—Nuestro siguiente campeón es de Hogwarts —. Habla la directora haciendo resonar su voz en todo el recinto con el encantamiento "sonorus"
En las tribunas, Gwendy voltea a ver a su hermano que está a un lado de Vika, el chico también le lanza una mirada a su hermana, la chica ahora mira a su archirrival sosteniéndole la mirada.
—La señorita Viktoria Lestrange —. Anuncia la directora dejando a varios sorprendidos y otros contentos ya que sus planes no se alteraron.
Vika mira triunfante a Gwendy por algunos segundos para después, ponerse de pie y caminar hacia el estrado, donde es felicitada por los directores de las tres escuelas y los ministros.
Madame Desrosiers, le indica que pase a la sala privada que está a la derecha para que acompañe a Antoine.
Gwendy se queda desconsolada en su lugar, sus amigas tratan de animarla, pero sin duda esto ha sido un golpe mortal.
Weldon cruza el gran salón yendo con su hermana para abrazarla en señal de apoyo, además, de decirle algunas palabras de aliento.
—Recibamos a una hija de Durmstrang, la Señorita Anneta Wass, nuestra tercera campeona
El recinto se llena de aplausos y la joven aludida camina al estrado, la felicitan los ahí presentes y pasa a la sala privada donde ya la esperan los otros dos competidores.
Mientras la directora da varias indicaciones, la jefa del Departamento de Cooperación Mágica Internacional, Yue Chang, y los tres ministros de magia van a la sala privada donde están los campeones para hablar con ellos.
—Nuevamente los felicito -. Comienza a decir Madame Chang. —Sepan que es un honor ser parte de este gran torneo, pero vayamos al grano. La primera prueba será un desafío de aire y empezará en un mes, el 27 de noviembre, por eso deben prepararse física y psicológicamente. Ya sea que ganen o pierdan, que sea con honor. ¿Entendido?
Los chicos asientan felices ya que están a cuatro desafíos de alcanzar la gloria eterna, ninguno sabe lo que les espera, pero una cosa es segura, cada prueba les dejará secuelas para siempre.
Nota final: Se dice que, para el Torneo de los tres magos, J.K. Rolling había pensado en hacer cuatro pruebas una por cada elemento natural, sin embargo, le fue muy difícil diseñarlo de esa manera, por esa razón, es por la que me decidí en escribir cuatro pruebas como un homenaje a la idea principal de la escritora.
Siguiendo con la historia, parece que al Ministerio de Magia Británico tiene todo bajo control, pero como ya lo dije al principio, nada transcurre con normalidad cuando Gwendy está involucrada, así que nos vemos la próxima semana para leer otro loco capítulo de Rebel Witch.
No olviden darle un vistazo al spin-off, Aniversario de Muerte del Horror, que es un especial de Día de Brujas.
