Amarga Experiencia

Disclaimer: Los personajes aquí presentados son propiedad del mangaka, el sensei Takehito Inoue.

Advertencia: Este fic contiene shonen ai… pero en este capitulo en especial, habrá lemon


Capitulo 3

Aprendiendo a Olvidar

Pasaba el tiempo, Kaede y Hana se habían vuelto muy buenos amigos…

Ya todos sabían de esto… ya estaban acostumbrados a verlos platicando largos ratos de puras trivialidades…

De repente, si tenían sus peleas… pero no eran cosas que digamos, graves o como las que tenían en el pasado… no… eran por insignificancias como una opinión no aceptada, un mal comentario, comida…

Pero en la mente de Kaede, aun permanecía el dolor que sentía… se estaba consumiendo… y eso lo notó Hana…

Notaba que en ocasiones, el Kitsune se estremecía y cuando quería tocar el hombro para calmarlo, este se apartaba o le apartaba la mano con un golpe…

Por alguna razón, a Hana le comenzó a preocupar más lo que pudiera pasarle al Kitsune… ya no era por el simple hecho de ser buenos amigos… esto ya iba más allá de eso…

De alguna forma, el sólo hecho de verlo sonreír sentía un calorcito en su pecho… se sentía muy feliz… quería pensar que era él el hecho de que lo hiciera… que por sus estupideces sonriera solo para él…

¡Vamos a los recreativos! – sugirió Hana cierto día.

¿Re-recreativos? – pregunto Kaede.

Si. Anda vamos…

no…

Andale

no insistas... no iré

5 minutos más tarde…

No se ni como lograste sacarme del gimnasio…

Cuando un Kitsune es testarudo, lo mejor es tenerlo con cadena al cuello… - rió.

Kaede solo sudo gotita… mientras que en su frente saltaba una vena.

Ven… vamos ahí… -y apunto una arcadía.

No

Hana lo miro feo, y después, jalando de la cadena imaginaria que le había puesto a Kaede, lo llevó a rastras hasta la arcadía.

Bien… ¿y ahora que¿Qué se hace con esto? – pregunto mientras le movía a la palanca.

Con esa manejas al personaje que elijas…

Que perdida de tiempo… yo me voy a mi casa… me gruñe la tripa (ne/a: a mi tbn me gruñe T0T ¡estoy contigo Kaede¡yo te apoyo!)

Está bien, está bien… vamos a comer…

Salieron de aquél lugar, para suerte de Kaede y se dirigieron a comer…

Compremos hamburguesas

Mmnn… ¿Por qué no mejor okonomiyakis¿U odem?

no… ¿Qué tal comida italiana¿O tacos?

¿Por qué no puedes ser más normal y comes algo que no sea extranjero?

¡Hey! Comer lo mismo, una y otra vez, aburre… anda… por favor… compremos hamburguesas…

De acuerdo…

¡ARIGATOU (Gracias)!

Después de comprar las hamburguesas (ne/a: Oigan… no conozco muchos platillos japoneses… comprendan a esta pobre y linda escritora…… sola -.-), se fueron a un parque no muy concurrido a comerlas, a petición de Kaede…

Nunca había comido una de estas – dijo Kaede mientras veía la hamburguesa que traía en su mano– está rica… - le dio otra mordida

Si… - apoyó Hana – hace mucho que no comía una………… Kitsune…

¿Eh?

¿Me das una mordida de tu hamburguesa?

No

¡Buah¿Por qué?

Es mía... tu tienes la tuya…………………… no… no me digas que… ¿ya te la acabaste?

Si…

Por favor…. – rodó los ojos.- Te daré solo UNA mordida de la mía… - le tendió la hamburguesa.

Después de que Kaede se terminó la suya (sin ayuda de Hana), se quedaron un rato más sentados en el banco.

Kitsune… no puedo evitar preguntarme porque te hiciste esas heridas en tus brazos… dime por favor…

Kaede volteo a ver el suelo… es cierto… había olvidado momentáneamente su plagiamiento.

Me las hice al tallarme cuando me bañaba….

¿Y por qué?

Quería quitarme una sensación que desde hace dos meses me ha estado invadiendo…

¿Qué?

…… me… me violaron… - lo dijo casi con un hilo de voz.

¿Cómo¡¿Qué te qué!

Cuando analizó su reacción, se sintió un imbecil… había hecho sentir mal a Kaede.

No te preocupes Kitsune. El culpable pagará por lo que te hizo… eso te lo aseguro…

¿Ha… Hana…?

Este le sonrió tranquilizadoramente, Kaede le devolvió el gesto de una forma bastante cálida y con sus mejillas levemente sonrojadas.

Hana también se sonrojo al ver su sonrisa.

Esto… ya vamonos…

Si…

Se levantaron de la banca y salieron del parque…

¿A dónde vamos ahora?

¿Eh?... ¿Esta vez no me obligarás a ir a los recreativos?

No… esta vez no… - alzó la mirada -… ya se… caminemos por todo Kanagawa hasta encontrar algo divertido que hacer – volteó a verlo y le sonrió.

…………….………….no me acordaba ¿y tu gundam? Esta vez no vinieron con nosotros…

Ah, es que Yohei iba a hacer un trabajo aprobatorio… y los demás, pues deben de andar por ahí…

Oh…

(n/a: me gustaría explicar la pregunta de Ru… ejem… si no se habían dado cuenta, dice que han pasado meses… quiere decir que hace meses que Ru tbn se hizo amigo del gundam de Hana… esto… olviden esta estupidez, eh estado comiendo chocolates últimamente, así que los dejo otra vez con el fic)

Bien… ¿A dónde quieres ir? Son las…- vio su reloj -… bueno, darán las siete…

Que tarde se hizo…

Es que nos tardamos en los recreativos… bien, tu di… ahora iremos a donde tu quieras

De acuerdo… a donde yo quiera… - y comenzó a caminar en dirección opuesta a la que venían.

¡Hey¡Esperame Kitsune!

Kaede… - dijo mientras se detenía.

¿Eh?

Si quieres, puedes llamarme Kaede… - respondió una vez que Sakuragi lo alcanzó.

OK

Llegaron a un parque, en el cual no había nadie… estaba muy tranquilo el lugar… silencioso…

Kaede se sentó en un pequeño borde que había en el pasto… Hana lo acompaño…

Me… me gustaba venir aquí…

¿Ahora ya no?

Es que… tengo miedo… - y agachó la mirada.

¿miedo a que?

A lo de mi violación…

Kaede… olvida eso… no te lastimes más…

Es que no puedo… - levantó la mirada – no puedo olvidar la forma en la que me acariciaba… sus manos tocando mi cuerpo… el dolor que me provocó al penetrarme…

Hana sintió una furia al oír lo que le hizo ese mal nacido a su Kaede… un momento… ¿había dicho suyo?... – si… dije mío ¿y que? Él me gusta mucho… y el saber que ese bastardo lo lastimo me hace querer verlo a la cara y romperle toda su jodida humanidad – pensó para si mismo.

El sol comenzó a ocultarse tras el horizonte… la luna comenzaba a hacer su aparición… el cielo se llenaba de miles de estrellas centellantes y fosforescentes…

El horizonte se tornaba de varias tonalidades de roja, naranjas y azul, mientras que las nubes se teñían de un rosa anaranjado…

Ambos muchachos observaron aquel espectáculo que ofrecía la naturaleza… era tan hermoso…

Se quedaron un rato más observando, hasta que el sol se hubo ocultado por completo, dejando el cielo en penumbras… con un pálido astro plateado que bañaba todo de suaves rayos de plata…

¿Fue todo¿Y los créditos¡Que basura¡Quiero mi dinero! – se quejó Hana mientras tiraba la bolsa de las palomitas.

¡Hana!- le llamó la atención Kaede, mientras se reía para sus adentros.

Levanto la bolsa que había tirado Hana para después salir del parque…

Mañana también habrá entrenamientos… - comenzó a decirle Hana.

De repente, una silueta enfrente de ellos los hizo detenerse… se acercaba lentamente…

Era un hombre de unos 25 años, al parecer… al estar frente a ellos se detuvo, evitándoles el avance, pero al observar a Kaede, su rostro tomo una expresión extraña. Se detuvo y no apartó la mirada del zorruno chico.

Kaede sentía escalofríos… tenía miedo… inconscientemente se aferró del brazo de Hanamichi, quién tenía mala espina acerca de aquel hombre. Instintivamente se hizo un paso para atrás…

Pero, esté se acercó más a ellos, estiró su brazo y tomó a Kaede de la barbilla para verlo a los ojos… Kaede no evitó reconocer aquellas manos, aquel calor…

Se zafó de su agarre, al tiempo que se sujetaba con más fuerza del pelirrojo.

¡Aléjese!- exclamó Hana, apartando su mano con un manotazo.

¡Hey! Yo puedo hacer lo que quiera – se quejó.

¡Claro que no!- volvió a exclamar.

Estúpido – le provocó.

Hijo de…

Hana… vamonos… este hombre me da miedo… - le interrumpió Kaede, y lo comenzó a jalonear.

Hazle caso a tu puta

¿QUUUE! – Hana explotó al fin. No iba a permitir que insultase así a su Kitsune adorado. Apartó a Kaede, mientras enfrentaba al otro.

Si… - se lamió los labios -… se movía como un pez, pero a pesar de eso lo hace bien… Jajajajajajaj

Ud…… - balbuceó Kaede, sorprendido, con los ojos vidriosos.

¡Maldito Kisama! – le gritó Hana, mientras cerraba su puño con rabia en la cara de ese tipo.

Cuando vio que su cuerpo, inconsciente, se precipitaba contra el suelo, se volteo con Kaede, pero solo vio como corría, para alejarse de ahí.

¡KAEDE! – gritó mientras lo seguía.

Desgraciado… - gimió Kaede, con lágrimas en sus ojos, al tiempo que aumentaba la velocidad.

Mientras lo hacía, sentía las lágrimas correr por sus mejillas, mientras que el aire chocaba contra su cara…

Hana volteaba a todas partes para ver si encontraba al Kitsune… no lo halló… mas lo encontró al pasar por la casa de este…

Kaede estaba apoyado en la puerta, sentado en el piso y abrazando sus piernas mientras que lloraba amargamente.

Al pelirrojo se le rompió el corazón al verlo así… se acercó a donde él y se apoyó en la puerta… lentamente se fue deslizando hasta quedar sentado a su lado…

Ahora oía su llanto demasiado cercas… no sabía que decirle para calmarlo, así que hizo lo único que podía hacer… abrazarlo…

Ya no llores – le pidió al oído.

¿…Por qué…? – se preguntó Kaede con voz entrecortada.

Olvida ya… vamos…

No puedo olvidar…

Sabes algo… - sonrío tiernamente - tu me gustas… y no me gusta verte así… - le limpió las lágrimas -… me gustan demasiado tus ojos como para que estén totalmente rojos…

Ha…na…

Kaede vio el rostro de Hana demasiado cercas… sentía su cálido aliento en su rostro… entonces, sintió sus labios aprisionando lo suyos… fue tanta su sorpresa que tardó en reaccionar…

Cuando Hana se separó de él, apoyó su cabeza en la suya.

Olvida todo…

No… no puedo… - logró articular.

Si puedes… anda… aprende a olvidar todo lo malo… - rozó su mejilla contra la del kitsune.

Sintió un rubor recorrer sus mejillas al sentir tan junto al pelirrojo… se sentía tan bien ese contacto…

De nueva cuentas, los labios de Hana atraparon los suyos… aunque esta vez, si le supo responder el gesto… primero fue un beso superficial, en el cual, después, los labios jugaron entre sí y después, dejaron que sus lenguas saborearan todo el húmedo interior…

El pelirrojo estaba feliz de que su kitsune le correspondía el beso… para después profundizarlo… estaba perdido en un mar de sensaciones… los labios de Kaede eran más de lo que se había imaginado… eran perfectos… únicos…

Se separaron muy agitados… les faltaba el aire… sus mejillas estaban rojas… mientras que ambos se perdían en los ojos del otro…

Entremos a la casa… esta haciendo frío… - le dijo Hana, mientras lo abrazaba más fuerte. Se levantaron del suelo, sin separarse él uno del otro.

Kaede sacó de su bolsillo la llave y abrió la puerta de la casa… dejó entrar primero a Hana, pero este se negaba a soltarlo… pues entraron juntos…

¿Ya estas mejor? – le pregunto Hana, mientras le limpiaba las lágrimas con pequeños besos en su rostro.

Si…

Volvió abrazar al muchacho, mientras que sus labios bajaban por su cuello…

Hana… ¿Qué se supone que haces?

No obtuvo respuesta… solo seguía recibiendo dulces y pequeños besos en su cuello... mecánicamente, echo su cabeza para tras, para darle más espacio que besar…

Suaves ronroneos escapaban de sus labios… excitando aún más al pelirrojo.

Lentamente, fue llevando a Kaede a su cuarto, donde con cuidado, lo acostó en su cama…

Cuando Kaede se dio cuenta, Hana estaba encima de él… viéndolo con ojos de deseo…

Hana… ¿Qué… - no terminó la pregunta, puesto que un dedo se lo evitaba.

Déjame enseñarte a olvidar…

Apenas dijo esto, acercó su rostro al del kitsune y lo beso tiernamente. Kaede se dejó llevar… abrió su boca y le permitió la entrada a Hana, quién saboreó todo su interior…

Los brazos de Kaede rodearon el cuerpo de Hana, acariciando su espalda… mientras con un poco más de seguridad, le respondió efusivamente el beso…

El pelirrojo, por su parte, comenzó a despojar a Kaede de sus ropas, al igual que las suyas propias… quitándole primero la chaqueta, la cual fue lanzada al otro lado de la habitación…

Lentamente le fue desabotonando los botones de la camisa… las prendas cayeron una por una, en el piso sin hacer el menor ruido…

Al separarse, Kaede sintió frío, y al darse cuenta, se halló completamente desnudo, al igual que Hana…

Yo… - se sentía totalmente avergonzado… además que aún tenía miedo.

No tengas miedo – le sonrió de una forma cálida y tierna.

Kaede asintió levemente.

Hana se acercó a su pecho y comenzó a lamerle el rosado pezón, provocándole varios suspiros incontenibles… las mejillas del kitsune comenzaban a tornarse de un bonito color rojo carmín, al tiempo que sus labios se entreabrían dejando escapar unos cuantos gemidos…

Primero acarició toda la aureola del pezón, y después, todo, mordiéndolo y succionando suavemente de vez en cuando…

Después le empezó a acariciar los costados, delineando cada curva de su cuerpo, cada músculo… quería asegurase de grabar la sensación de su piel en sus manos…

A pesar de las ganas que tenía de hacerle el amor al kitsune, no quería hacer las cosas muy rápidas, ya que no quería que Kaede se alejase de él, inconscientemente, por miedo…. él estaba dispuesto a hacerle sentir a su kitsune lo hermoso que era esa demostración de amor…

Acercó sus manos a su entrepierna donde tomo su miembro completamente erecto, y comenzó a masturbarlo lenta y suavemente…

Kaede emitía suaves gemidos, parecidos a ronroneos, mientras se aferraba a la almohada…

Pero de repente, abrió los ojos tanto como sus parpados le permitían… una imagen centelleó en su cabeza…

Sangre y semen mezclados, escurriendo en sus piernas… él llorando mientras era embestido cruelmente… su ropa desgarrada… no podía apartar esa imagen de su cabeza… simplemente no podía…

Basta…. – dijo apenas en un hilo de voz.

Hana levantó la mirada y se halló con que su kitsune volvía a estar sollozando…

¿Qué te sucede? – preguntó preocupado, mientras cesaba en su actividad, momentáneamente.

Basta… no quiero…

¿Qué?

No lo hagas – lo vio a los ojos.

Kaede tenía las manos en su rostro, cubriéndose sus hermosas profundidades, inundadas de lágrimas… sus ojos estaban cristalinos…

Por favor – le pidió

El verlo así lo cautivó enormemente, pero aun así denegó su petición… después, con voz firme, pero dulce le dijo:- Esta vez será diferente…

Le abrió las piernas con sumo cuidado y las coloco sobre sus hombros, se lamió dos dedos y los acercó a la entrada de Kaede.

Este, al sentir su primer dedo, tembló… pero Hana se inclinó hacía él y le dijo al oído:- Confía en mí, por favor…

Fue introduciendo, primero un dedo, con lentitud, arrancándole un sonoro gemido, después introdujo el segundo, mientras que Kaede solo atinaba a cerrar sus ojos con fuerza, intentando ignorar el dolor que le provocaban esos miembros bronceados.

Una vez que estuvieron adentro, Hana los comenzó a mover de forma circular y a frotarlos entre sí… Kaede empezó a gemir con algo de alivio, al ya no sentir dolor…

Después de un breve rato, el pelirrojo sacó sus dedos del interior de su Kitsune, al saber que su entrada ya estaba lo suficientemente dilatada para penetrarlo sin mucho dolor… aunque no evitaría que lo sintiera…

Tomó su miembro y lo aproximó, a Kaede… suavemente lo fue penetrando, arrancándole un notorio suspiro al chico, aunque su espalda no evitó arquearse por el dolor en su parte baja…

Cuando por fin estuvo dentro de él, se esperó un momento antes de comenzar a embestirlo suave y lentamente, esperando que se acostumbre a la invasión….

Cuando notó que estaba más calmado, comenzó a embestirlo de forma lenta y suave.

Ahhh ahh… se… se siente bien… - gimió el kitsune, mientras abría los ojos.

Hanamichi se sonrió… comenzó a imprimirle más velocidad a sus movimientos, mientras que el chico de cabellos azabaches le seguía el ritmo…

Aaaaaaaahhhhhhhhh – gimieron ambos muchachos al llegar al límite.

Hana se vació en Rukawa, quién respiraba agitadamente y tenía sus mejillas totalmente rojas…y esté se vació, manchando su vientre… el pelirrojo, sin salir de él, lamió la esencia de su zorrito, mientras que él le acariciaba sus hebras rojas…

Salió con cuidado de su interior, y después se tendió sobre el pecho de Kaede, quién solo lo abrazó con ternura… después se giraron y Hana rodeo al zorruno muchacho y le dio un dulce y delicado beso en sus sienes…

Este lo miró con absoluto cariño, apoyó su cabeza en su pecho bronceado y quedó dormido al poco rato…

¿Ves que si te hice olvidar? – le pregunto el do'ahou, entre jadeos.

Al poco rato, también se quedó profundamente dormido… Durmieron tranquilamente, respirando el aroma de sus cuerpos sudados, y agitados.

Hanamichi se encontraba satisfecho por haber hecho que su amado aprendiera a olvidar todo el dolor que le había sido ocasionado antes…

Se sentía, también, feliz por saber que el kitsune lo amaba tanto como él, y también por que sabía que él solo le pertenecía a él…


OWARI

¡Ta Da! Otro fic más terminado… espero que les haya gustado, déjenme sus comentarios por favor…

Muchas gracias a los que dejaron reviews, me animan a seguir subiendo fics n.n

Este fue mi segundo proyecto de Slam Dunk… dejen reviews para saber si quieren que siga publicando o que si me dedico a esto, me muero hambre… bueno…

Nos vemos a la próxima y gracias por sus reviews n.n

Besos… sayo…