Capítulo 9 Hikurashi

Habían pasado tres días desde que Kurama tuviera aquella conversación con Hiei. Al pelirrojo se le notaba triste, sabía que esta vez había actuado mal pero no podía negar sus sentimientos y mucho menos engañar a Hiei o a Killian, pero sabía que de una u otra forma uno de los dos saldría lastimado y él no quería eso.

-no te preocupes mamàtodo está bien, entonces te veré en unos días...hai, te quiero-

Kurama colgó el teléfono mientras Killian lo veía desde la puerta.

-por qué no le has dicho lo que pasa- le preguntó

-porque si le digo suspenderá su viaje enseguida y se que es importante para ella, no quiero arruinarlo-

Kurama se acercó despacio a un sillón y se sentó, Killian lo observó preocupado un momento y se sentó junto a él.

-Kurama...qué pasa? Te he notado deprimido, pensé que estarías más animado porque tus amigos vinieron ayer...o es porque no vino Hiei-

Koenma, Yusuke Kuwabara Yukina, Keiko, Shizuru, Botan y Genkai habían ido a visitar a Kurama el día anterior, todo había ido bien hasta que Koenma dijo que por el momento podía tomarse los días de descanso que quisiera porque Yusuke, Kuwabara y Hiei se encargarían de buscar a los demonios.

Aunque ya lo sabía, Kurama se sintió decepcionado y un poco inútil al no poder acompañarlos, pero lo que más le dolía es que no había tenido noticias del koorime. Pero no podía decirle eso a Killian, sabía que no era correcto que él le hablara de Hiei conociendo lo que él youkai alado sentía.

Killian pudo ver la confusión de Kurama y suspiró...tan bien lo conocía aún.

-Kitsune, no te preocupes, ya te dije que quiero que seas feliz y si eso implica que estés con Hiei pues yo lo acepto...ahora dime, es por él que estas así? Recuerda que antes que nada soy tu amigo y puedes confiar en mí-

-sí gracias-

-entonces-

-pues es por todo, yo me siento mal por estar así, por no poder ayudar a mis amigos en la misión. Aunque sé que Koenma no lo dijo con claridad, es obvio que por mi condición ya quedé fuera del reikai tantei-

Kurama bajó la cabeza y continuó -al principio esto no me hubiera preocupado, no era tan importante, pero con el tiempo me di cuenta de que había encontrado un grupo al que pertenecer, donde podía estar tranquilo sin preocuparme que en cualquier momento pudieran traicionarme...-

Killian entendió que Kurama se refería a la banda de ladrones en el makai cuando hablaba de traición -...y donde podría pasar más tiempo con...con Hiei-

El ojiazul sintió una punzada de dolor en el corazón pero sabía que no podía fallarle a Kurama y eso no iba a pasar, había prometido escucharlo como amigo y así lo haría.

-Kurama yo creí que le pedirías ayuda al idiota de Yomi- le dijo Killian marcando un tono de desprecio en el nombre del que fue uno de los tres reyes del Makai.

kurama sonrió un poco, después de tanto tiempo su amigo aún no podía ni siquiera mencionar a Yomi, sabía que nunca se habían llevado bien.

-no es necesario, yo encontraré la forma- le respondió seguro

Killian sonrió -lo ves? Tu siempre has logrado lo que te propones, por qué debería ser esta la excepción? Además, sabes que yo siempre voy a ayudarte cuando lo necesites-

-Gracias-

-y respecto a Hiei...ya hablaste con él, le explicaste lo que sucedió? Le dijiste quién soy-

-sí pero las cosas no salieron tan bien como esperaba-

-pero le expresaste lo que sientes por él-

-eh...pues sí, pero aunque lo niegue, siente lástima por mí y así no quiero que esté a mi lado-

-cómo? Si te quiere nunca se quedaría a tu lado por eso, o acaso él no siente lo mismo por tí-

-creo que sí-

-entonces no entiendo cuál es el problema, sería algo así como amarlo en la oscuridad, no- Kurama sonrió ante el comentario

-suena extraño-

-lo sé, pero es lo primero que se me ocurrió-

-bueno, pero eso no es todo, el problema es que él es un poco celoso y se enteró de que...-

-qué yo estoy aquí-

el pelirrojo asintió despacio

-entonces el problema soy yo-

Kurama quería explicarle que en realidad en parte era su culpa por no tener aun claro lo que sentía por él y por Hiei.

-no, no es eso-

Killian se levantó.

-Kurama yo te prometí que no te iba a causar problemas con él y estoy haciendo todo lo contrario, en realidad no quisiera hacerlo pero será mejor que me vaya-

-qué? No, ya te dije que no puedes irte, no se trata de eso, Hiei y yo solucionaremos nuestros problemas-

-si, claro- dijo Killian poco convencido y en tono triste

-además yo...te... necesito. Te quedarás-

killian sonrió tiernamente y se volvió a sentar.

-hai-

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Después de comer Killian salió con el pretexto de que necesitaba comprar algo para la escuela.

-Tengo que encontrar la forma de ayudar a Kurama, no me gusta verlo tan triste-

Caminaba lentamente por el parque mirando el cielo y las copas de los árboles cuando escuchó un ruido en una rama y el movimiento de las hojas, al instante vio una sombra.

-ese es... acaso me estará siguiendo-

-oye, baja de ahí, si tienes algo que decirme dímelo ahora y no te escondas- le gritó

Hiei escuchó y lo miró diciendo en voz baja -estúpido ningen- y dio un salto para quedar frente a él.

-yo no me escondo, y no tengo nada que decirte- le dijo con una mirada fría, se iba a dar la vuelta cuando Killian lo detuvo

-espera! Yo sí quiero decirte algo, sobre Kurama-

Hiei se le quedó viendo, Killian comprendió que esperaba que hablara, suspiró mientras pensaba

-esto va a ser realmente difícil- después miró al demonio de fuego con una mirada igual de fría

-deja de hacer sufrir a Kurama- le soltó de repente

-yo, hacer sufrir a Kurama? No digas estupideces y deja de molestarme para ese tipo de idioteces ningen-

-Kurama también es un ningen!...acaso piensas que lo que siente es una idiotez-

Hiei cambió su expresión a una de desinterés, pero en el fondo sabía que sí le importaba lo que le pasara a Kurama.

-me estás provocando para que te mate? Acaso quieres pelear? Ah! me olvidaba que ahora solo eres un ningen insignificante-

-si quieres pelear pelearé contigo y con cualquiera por Kurama, pero este no es el caso, no es eso lo que busco-

-entonces que demonios es lo que quieres-

-quiero que te decidas de una vez, vas a estar con Kurama o vas a dejarlo? No voy a permitir que lo sigas haciendo sufrir-

-eso es algo que a ti no te importa-

-claro que me importa, porque yo quiero a Kurama y si tú lo vas a despreciar yo...-

-tú qué? Te quedarás con él? Qué te hace pensar que te va a preferir- dijo el koorime con una media sonrisa

-yo puedo hacer que te olvide- le respondió Killian seguro de lo que decía

Hiei se acercó con un movimiento rápido y lo aprisionó contra un árbol acercando la katana al cuello de su oponente, estaba furioso. Killian se sorprendió ante la acción del youkai pero no trató de defenderse, simplemente lo miró sin expresión alguna en su rostro, después de todo, él sabía que ahora que no tenía el amor de Kurama ya no tenía nada que perder.

Hiei se daba cuenta de que la persona que tenía frente a él era la única que podría quitarle el cariño del zorro, habría sido tan sencillo deshacerse de él en ese momento y tener a Kurama sólo para él. Pero un pensamiento lo asaltó de pronto.

-No puedo hacerlo, ya bastante le he hecho daño a Kurama como para ahora salirle con que maté a la persona que ama- sin cambiar su expresión fría Hiei observó el colgante que llevaba Killian, con la otra mano lo toco y al instante pudo sentir el youki de Kurama, pero solo fue un instante porque sin pensarlo Killian se lo arrebató rápido de las manos, Hiei sonrió sarcásticamente y lo soltó lentamente mientras le decía

-lo estás haciendo-

-qué-

-Kurama sufre porque quiere, no depende de mí sino de él-

-pero qué quieres decir con eso-

-no te lo ha dicho? Kurama duda de lo que siente por los dos, creí que lo conocías muy bien, pero ya veo que volverte ningen te hizo más idiota-

esta vez el ojiazul se quedó callado tratando de comprender lo que había escuchado.

-Kurama aún siente algo por mí- una sonrisa de felicidad apareció en su rostro mientras Hiei lo observaba.

-de entre todos los youkai, tenías que ser tú, contra el que nunca voy a poder competir- pensaba el koorime mientras se daba la vuelta y desaparecía.

Ninguno de los dos había notado la figura que se escondía detrás de un árbol que los observaba con sumo interés, atento a cada palabra que salía de sus bocas.

-aún me quiere, aún tengo una oportunidad- decía emocionado Killian con ojos soñadores sin darse cuenta que ahora estaba solo, su mente solo la ocupaba el chico con la sonrisa más hermosa que jamás hubiera pensado que existía.

Después de un momento decidió regresar con Kurama y preguntarle lo que sentía por él. No había dado más de diez pasos cuando una voz detrás lo detuvo y lo hizo volverse.

-pero que coincidencia, nos volvemos a ver Kuronue-

frente a él se encontraba un youkai alto de cabello azul cielo y ojos negros vestido completamente de verde que lo miraba con una extraña sonrisa.

-tú, pero que haces aquí-

-nada, solo vine a pasear un poco. Y que tal te fue con el youko? Kurama se llama no? pudiste encontrarlo? Pero que pregunta, ya debes estar feliz junto a él-

killian no le respondió.

-vamos, no me digas que no lo localizaste, pero si te di todas las facilidades, prácticamente te puse frente a él-

-lo encontré, y sí estoy junto a él-

el youkai lo dirigió una mirada que indicaba que sabía que había algo extraño

-en verdad me alegro, pero si algo anda mal sabes que yo puedo ayudarte, conoces mis poderes y puedo hacer cosas casi imposibles, como cambiar el alma de un youkai al cuerpo de un ningen- le dijo lo último con mirada cómplice

-lo sé-

el youkai lo miró como esperando que el ojiazul dijera otra cosa, pero al ver que permanecía callado se resignó.

-entonces, nos veremos en otra ocasión- se dio la vuelta para irse

-espera- lo detuvo Killian.

El youkai de cabello azul sonrió complacido sin que lo notara y se volvió hacia Killian una vez más.

Sin esperar a que el youkai preguntara la razón de su llamada le preguntó

-puedes devolverle la vista a alguien que la ha perdido-

-por supuesto, es algo fácil de hacer para mí, sabes que soy un experto en hacer ese tipo de cosas. Pero...a quién quieres que le devuelva la vista-

-no importa eso-

-claro que sí, de otro modo no podré ayudarte-

-y se puede saber por qué quieres ayudarme- preguntó Killian con desconfianza

-ayudo a los que sé que me van a dar algo valioso a cambio...además tu me agradas- le dijo con una media sonrisa tratando de parecer confiable.

después pensarlo un momento Killian respondió -es Kurama, necesito que hagas que recupere la vista-

-Kurama? El ningen que buscabas, pero cómo ha pasado eso- le preguntó fingiendo una preocupación que no sentía, sino todo lo contrario.

-eso no tiene importancia, puedes ayudarme o no-

el youkai frunció el ceño -puedo, pero sabes que necesito algo valioso a cambio, no hago trabajos gratis-

Killian lo miró desilusionado.

-pero ahora no tengo nada que pueda interesarte-

-que tal eso-

killian siguió la dirección del dedo del youkai que señalaba directamente a...su colgante!

-no, esto no- le respondió tomando el colgante con sus manos de forma posesiva

-pues es lo que quiero, si no me lo das, tendrás que resignarte y tu Kurama se quedará ciego para siempre-

killian dirigió sus ojos azules hacia el colgante y lo miró con cariño -no puedo dárselo, esto es el recuerdo más valioso que tengo de cuando era el youkai más feliz de todo el makai...pero jamás me perdonaré haber tenido la oportunidad de hacer feliz a Kurama y dejarla pasar, además, él me lo dijo una vez: "esto solo es un objeto", no puedo ser egoísta- sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz del youkai

-ya decidiste, no tengo todo el día sabes-

-cómo sabré que no vas a engañarme-

-ya te demostré que cumplo lo que digo, cuando nos vimos antes no desconfiaste tanto de mí-

sin decir nada Killian dejó salir un suspiro, se quitó el colgante despacio, lo miró tristemente un momento y se lo entregó al youkai

Cuando lo tuvo entre sus manos sonrió maliciosamente sin ser notado

-bien- dijo. El youkai cerró los ojos y Killian pudo notar como su cuerpo comenzó a brillar intensamente mientras su ropa y su cabello se agitaban como si fueran movidos por una ráfaga de aire.

Killian no podía sentirlo, pero una sombra negra desde lo alto de un árbol sí, el youki del demonio se había elevado considerablemente.

El youkai dejó de brillar y abrió lentamente los ojos.

-listo-

-quieres decir que Kurama ya puede ver-

-puede ser-

-cómo que puede ser? Hikurashi si te has atrevido a engañarme yo..- le dijo Killian levantando la voz

-no te exaltes Kuronue- lo interrumpió el demonio con voz calmada -el trabajo ya está hecho, solo que el efecto puede tardar un poco en aparecer-

-cuánto tiempo-

-depende de cada persona, no se exactamente, pero te aseguro que no pasa de pasado mañana-

-está bien, pero si eso no sucede te juro que te encontraré y te mataré-

Hikurashi frunció ligeramente el ceño pero luego sonrió

-y cómo se supone que harás eso, ni siquiera puedes sentir algún tipo de poder-

-yo encontraré la forma te lo aseguro-

-bueno, bueno, no quiero que seamos enemigos, yo solo hago mi trabajo, no puede salir mal no te preocupes. Ahora si no te importa tengo asuntos que resolver- y se alejó rápidamente.

Killian suspiró una vez más al ver como el youkai se alejaba con su colgante en la mano. Pero pronto recordó que en ese momento Kurama tal vez ya podría ver y se estaría preguntando la razón. Se dio la vuelta y corrió hacia la casa del pelirrojo.

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Hiei se había alejado dejando a Killian solo. Realmente se sentía enojado, triste, decepcionado y traicionado, todo al mismo tiempo. Saltó entre los árboles hasta detenerse en uno.

-maldito kitsune, mira como me tienes. -dio un suspiro y dirigió su mirada hacia donde había dejado a Killian y recordó la razón por la que lo había estado siguiendo momentos antes de hablar con él -Yo no confío en es ningen, estoy seguro de que está engañando a Kurama, el no puede ser quien dice ser, es imposible que alguien muerto vuelva a la vida, además si ese fuera el caso Koenma lo sabría y nos lo habría dicho. Debe ser un engaño, como la ultima vez, pero..con qué propósito- de pronto una terrible idea lo asaltó -seguro quiere hacerle daño a Kurama-

con este pensamiento volvió sobre sus pasos dispuesto a resolver el asunto de una vez por todas. Cuando se iba a cercando pudo ver a Killian hablando con otra persona, se veía sospechoso, le dio la impresión de que se trataba de un youkai, así que Hiei bajó al mínimo su poder espiritual y se acercó lo más que pudo sin ser notado.

Aunque estaba cerca, no podía escuchar claramente lo que los dos estaban hablando, solo llegaban a sus oídos leves murmullos. Se quedó observando, parecía que los dos se conocían; vio como Killian se quitaba el colgante que le había visto hace un momento y se lo entregaba al youkai de cabello azul.

Después pudo sentir claramente el poder que desprendía el youkai cuando su cuerpo comenzó a brillar. Lo observó detenidamente de pies a cabeza, entonces lo reconoció, era el mismo que Koenma les había ordenado capturar, uno de los demonios!

Cuando escuchó decir a Killian el nombre del demonio no le quedó duda alguna, se trataba de Hikurashi, entonces Killian debía ser...!

-lo sabía, está engañando a Kurama-

los siguió observando hasta que los dos desaparecieron. Hiei decidió seguir al youkai llamado Hikurashi para averiguar lo que tramaba, lo hizo durante un tiempo pero después lo vio entrar en un callejón y cuando trató de buscarlo ya no estaba, ni siquiera podía sentir su youki.

Decidió volver con Kurama lo más rápido posible y advertirle.

Continuará...

N/A: Hola! Aquí estoy molestando otra vez. Es que no terminaba este capítulo, había algunas cosas que no me gustaban y tenía que volver a escribir, pero creo que ya estàaunque sigo pensando que le falta algo. Pero bueno, espero que les haya gustado. Para el próximo capítulo, no se si podré subirlo pronto porque recién entré a un nuevo semestre la semana pasada y apenas tengo tiempo de respirar, los maestros entraron con muchas ganas de hacernos trabajar.

Pero espero no tardar mucho. Ojalá les siga gustando el fic y que no dejen de enviar reviews. nn

Ahora los reviews:

Atemu no Kitsune: Que bueno que te gustó el capítulo; no se con quien se va a quedar Kurama, no puedo decidirme aún, pero no te preocupes, pronto lo sabrás jeje (risa maliciosa). Gracias por tu review.

Hirui no Shadow: Bueno, ya ves que Kurama va a recuperar la vista, soy cruel, pero no tanto ;) Bueno, Hiei ya se está dando cuenta de lo que en verdad siente por Kurama, por eso trata de cambiar un poco y ser más lindo. (más, imposible!) nn Gracias por tu review.

La LoKa KeLLy: que bueno que te haya gustado. Ya no quiero hacer sufrir a ninguno de los tres, pero que puedo hacer, me encanta el drama. Gracias por tu review.

Lythos: ya ves? Me preocupe por la casa de Kurama, no podía dejar que se encontraran ahí, aunque no hicieron gran cosa como para destruir algo, pero mejor que Kurama no se enterara de esa conversación, aunque te diré que Hiei tenía muchas ganas de matar a Kuronue, aunque se contuvo (lo sé, él me lo dijo) nn Gracias por tu review.

Ranma1: T.T es uno honor que no merezco pero mil gracias T.T (chibi kitsune-chan llorando de felicidad). Sí, me gusta que Kurama sea algo así como la manzana de la discordia entre Hiei y Kuronue, ese tipo de fics siempre serán mis favoritos, por eso hice uno así nn Gracias por tu review.

Suisho Haruka: T.T no odies a Kuronue, es muy lindo. jeje yo tampoco podría culpar a Kurama, así fuera el más malo de todos los malos nunca podría culparlo, nn Gracias por tu review.

Usagui: eres la primera que me dice algo de los flash back, arigatou, que bueno que te gustaron. Pues...sí, tiene un papel importante en la historia más adelante (y muy importante, ya lo verás) nn Gracias por tu review.

Hasta el próximo capítulo!