El infame ser la miró con demasiada burla que ella no pudo evitar sentirse humillada. Apretó los puños de ambas manos fuertemente y lo miró desafiante.

.¿Algún problema?- Preguntó ella.

.Jaja... Kikyo... ¿porqué veo tu cara de derrota?- Respondió Naraku.

.Tus estúpidos polvos no funcionaron.- Le dijo ella con rabia.

.¿Los de Tsubaki¿Cómo que no? – Preguntó él sorprendido.

.Se suponía que harían de Inuyasha alguien completamente violento que harían que esa mujer lo dejara.

.¿Y ella no lo dejó?

.Bien sabes que no... al contrario, aquello los unió más.- Dijo, sin poder evitar recordar aquella escena en que vio a Inuyasha volviendo del pozo aquella mañana. Sabiendo perfectamente qué era lo que había pasado entre ellos, con tan sólo ver la cara de su querido hanyou.

.Pero bueno... eso ya no importa.. – Respondió Naraku mientras comenzaba a caminar lentamente alrededor de la sacerdotisa. No podía evitarlo, el corazón de Onigumo siempre la clamaba como su mujer.-... pero el segundo plan sí que funcionó... Aome esta muerta, ya no hay nada que hacer.

.El que le hayas arrebatado los fragmentos a aquel joven lobo en el preciso instante en que se disponía a correr junto con Aome fue acertado- Dijo ella.- No me lo esperaba... y tampoco me esperaba que yo también corría verdadero peligro, si no fuera por Inuyasha...

.Bueno, querida Kikyo, había que hacer las cosas más realista... además no te quejes, Inuyasha te salvó y no a la tonta de Aome ¿no estas contenta con ello, Kikyo?

La mujer lo miró con todo el odio que albergaba en su corazón.

.Lástima... el único sentimiento que Inuyasha alberga en su corazón para es eso... lástima.- Dijo, mientras trataba de aguantar las lágrimas, pero las retuvo firmemente. Nunca demostraba su debilidad a nadie y menos a tan despreciable ser.

.Ah, no te quejes ahora... ahí tienes a tu demonio, esta acabado... y eso es lo que me importa. No lo tendré ni a él ni a la otra chica siguiéndome. Has sido de gran ayuda... ahora confórmate con lo que queda de ese hanyou.- Le dijo él triunfante, mientras le daba la espalda. Kikyo lo miró sin responder nada. Ella lo sabía... lo había visto esa noche en la cabaña de su hermana, junto al cadáver de Aome... Inuyasha no duraría mucho en este mundo... la muerte de la chica lo había destruido por completo... debía asumirlo... jamás la amaría a ella como alguna vez lo hizo... hoy lo supo cuando le habló de esa manera, la culpaba, y lo sabía... aquella mujer, aunque estuviera muerta, había ganado.

&&&&&&&&&

Escucho la tormenta allá afuera desatándose con furia, como debería estar mi corazón... pero tal vez lo esta mi alma. Estoy a su lado, con mi cabeza en su hombro y pareciera que él finalmente se ha dormido. Lo escucho suspirar y sollozar de vez en cuando. Cierro mis ojos y algunos recuerdos se me vienen a la memoria... El día de mi muerte...

.Aome! Aome!...- Lo escucho mientras siento que ya no estoy en mi cuerpo... quiero estar con él, pero no puedo... algo me lo impide... hay un lapso... escucho llantos... al fin puedo ver y ya no siento dolor... estoy al lado de mis amigos, ellos estan junto a mi cuerpo. Mi cuerpo, que se desangra terriblemente. Inuyasha esta bañado en sangre, de mi sangre... le he manchado su haori..., veo al monje Miroku haciendo una señal en el aire mientras Sango se aferra a él, llorando en su hombro y el pobre de Shippo se agarra a mis piernas y gime dolorosamente. Los minutos pasan... Inuyasha, quien se encontraba en el suelo abrazándome con fuerza, se levanta de un brinco y me lleva entre sus brazos por entre el bosque. Todos les siguen... mis amigos piensan que se ha vuelto loco, pero Inuyasha no esta loco, leo su corazón, quiere salvarme y cree haber encontrado un método para traerme a la vida. Finalmente llega a un claro. Lo estoy viendo todo y no sé como puedo hacerlo... a donde vaya mi cuerpo, también va mi alma. Así que finalmente llegamos a un claro... Esas personas las conozco...es una pequeña niña y un anciano medio deforme... junto a ellos un hombre de rasgos similares al de mi amado Inuyasha.

.Sesshoumaro!- Le grita Inuyasha con desesperación. Su medio hermano lo mira con indiferencia...

.Inuyasha... qué haces aquí... - Le dice apenas.

Inuyasha se acerca lentamente hacia él conmigo aún entre sus brazos. Me deposita en el suelo y veo que se aproximan la niña y el viejo.

.La señorita Aome¿qué fue lo que sucedió?- Dice la niña con su típica ingenuidad. Luego la veo sorprenderse y retroceder. Parece que sabe qué es lo que soy, un cadáver.

.Esta... ¿muerta?- Pregunta Jaken apenas. Me miran sorprendidos.

.Tú puedes salvarla... con Colmillo Sagrado, sé que puedes hacerlo, así como una vez mi padre salvó a mi madre... ayúdame Sesshoumaru... ayúdame... - Le dice casi suplicante. Los segundos pasan y el medio hermano de Inuyasha esta sorprendido. Lo sé, esta sorprendido porque su hermano le ha suplicado.

.¿No me ayudarás?- Pregunta con rabia. Pero su hermano lo mira con una media sonrisa.

.¿Tanto te importa esta a mi propia vida... - Lo dice sin dudar.

.Eres patético...

Mi Inuyasha lo mira con rabia y lo veo apretar sus puños con fuerza.

.Y tú!... también estas con una niña humana... qué derecho tienes al cuestionarme... sé que harías lo mismo¿Acaso ella no te importa?

La chiquilla se acerca al youkai y se aferra a sus piernas asustada. Sesshoumaru la mira y no dice nada. Luego, saca aquella espada salvadora y para alegría de Inuyasha la descarga sobre mí... los minutos pasan y luego lo veo otra vez agitar la espada... todos esperan... nada sucede.

Finalmente Sesshoumaru la envaina nuevamente.

.Aquí ya no puedo hacer nada. Ella no puede volver.

Todos lo miran sorprendidos, pero Inuyasha esta casi con la boca abierta. La pesadilla ha comenzado de nuevo, lo sé.

.Pe..ro... ¿qué ha pasado?... ¿porqué?... ¿porqué no funciona?...- Dice apenas.

.No lo sé- dice él mientras le da la espalda- Hay algo que impide que ella vuelva a la vida. Colmillo sagrado no puede hacer nada.

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Él no lo puede creer... cree que estoy viva porque ha empezado a vendarme todas las heridas. La anciana Kaede lo mira desde lejos, al igual que mis amigos.

.Ella estará bien... estará bien...- Dice mi hanyou repetidamente.

Y así se ha quedado... a mi lado... por dos días... sin que nadie se atreva a abrirle los ojos. Pero él lo sabe, es sólo que no lo quiere admitir. Cuando estamos solos llora y me pide perdón... no lo hagas... no te culpes Inuyasha... luego me susurra palabras tiernas a mi oído, me promete mil cosas para el futuro... quiere darme todo lo que puede... quiere que le responda y no puedo hacerlo... llora nuevamente... también hubo un momento en que lo vi sacar el Colmillo de Acero, extrañamente este no se transforma en una colosal espada... su mirada me aterra, esta mirando el filo de la hoja... ¿quiere acabar con su vida?... horror! lo veo acercarla a su estómago... no lo hagas, Inuyasha... no lo hagas!... le suplico... parece que me escucha... se arrepiente y la lanza lejos, llorando como un niño sobre mi cuerpo...

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Tormentosos recuerdos como la tormentosa lluvia de allá afuera. Ha amanecido y lo veo abrir poco a poco sus ojos. Mira mi cuerpo al tiempo que se levanta... sigue mirándome... los minutos son eternos... luego me toma entre sus brazos y sale conmigo hacia fuera. No hay nadie en la aldea, es demasiado temprano para todos, el sol apenas esta saliendo. Estoy a su lado y conozco el camino... llegamos a ese lugar... al lugar de la promesa... me tiende nuevamente en el suelo mientras me mira tristemente.

.Aome...

Esta arrodillado a mi lado, me habla como si en verdad lo escuchara. - Gracias por ayudarme a ser una mejor... persona... agradezco a los dioses el haberte conocido... - me esta hablando mientras se inclina y me acaricia la mejilla... - tuve los mejores momentos de mi vida a tu lado... me enseñaste a amar... me enseñaste a confiar... me enseñaste a tener amigos... me enseñaste todo... porque yo no era nada... es por eso...- Lo veo desenvainar la espada... oh, no! No, Inuyasha... no! Grita mi alma... - Es por eso... que no puedo dejarte partir sola... sin ti... ya no soy nada aquí... ¿para qué más voy a vivir, si mi vida era sólo para compartirla contigo?- Lo veo nuevamente como se ahoga entre sus lágrimas... no Inuyasha... no lo hagas... quiero que vivas... quiero que cumplas todos tus planes, aunque yo no este contigo... no lo hagas... - No Aome... no puedo vivir sin tí... ya no puedo vivir solo nuevamente...

Me quedo petrificada. Me esta respondiendo... tal vez su alma esta tan cerca de la muerte que supo escucharme.

.Inuyasha... debes vivir... por ti... - Le suplico.

Se inclina y me besa en los fríos labios de mi cuerpo... aquel beso es eterno... eterno... No Inuyasha... no lo hagas.

.Yo no tengo a nadie en este mundo... a nadie... espérame Aome... pronto estaré contigo.

¿Cómo evitar lo que Inuyasha quiere hacer, no puedo, simplemente no puedo. Lo veo tan cerca de la muerte... no quiero que muera, sería egoísta de mi parte, Inuyasha tiene mucho que vivir aún, debe derrotar a Naraku y así liberar al Sengoku de sus males... ¿cómo podría yo querer que muriera también? No puedo, no puedo... Oh... esta acercando nuevamente la espada a su estómago... cierro mis ojos desesperada y clamo por mi amor, por todo el amor que alberga en mi errante alma que mi Inuyasha se detenga, que recapacite y que pueda ser salvado...

.A.. Aome... - Lo escucho decir... no quiero abrir los ojos, no quiero verlo morir... no puedo, no puedo...

.Qué... qué esta... pasando... – Dice él... y luego me pregunto¿qué esta pasando? No quiero abrir los ojos, pero la voz de Inuyasha sonaba asustada... cuando abro los ojos me sorprendo porque no puedo ver nada, sólo oscuridad... ¿porqué?

.Los fragmentos... - Dice él... - qué esta pasando...

Y voy recordando mil cosas, desde que era un bebe hasta los últimos segundos de mi vida, todo tan rápido, todo tan escalofriante... y siento un calor intenso en mi pecho... y una energía revitalizante que recorre mi cuerpo y activa mis sentidos, siento fluir la sangre en mis venas y después de días, escucho al fin, los latidos de mi corazón... ya no esta oscuro aquí, cada vez esta mas claro, más claro, más, claro...

.Ohhhhhh!- Digo, como si estuviera a punto de ahogarme, pero al fin fui capaz de respirar, abro los ojos y pestañeo repetidamente, veo el bosque, los árboles, la brillantez del día, los rayos del sol, y a mi lado, Inuyasha, mirándome con la cara más sorprendida que nunca había visto...

.A.. Aome...

.Inu.. yasha... - Apenas digo estas palabras él se abraza a mí... me cuesta reaccionar... qué demonios sucede!... no... no entiendo... lo escucho llorar y siento sus lágrimas caer sobre mi cuello, son tan cálidas... ¿estoy... estoy... viva, me pregunto, pero no soy capaz de articular palabra.

.Aome... Aome... ¿eres tú?- Me esta mirando intensamente y busca cada detalle de mi cara... me esta hablando...

.Inuyasha... qué fue... lo que sucedió... - Digo, al tiempo que me toco la cara y luego me miro mis manos. No son transparentes, soy yo, estoy en mi cuerpo nuevamente y al bajar la vista veo en mi pecho un haz de luz... introduzco mi mano y lo que encuentro son los tres fragmentos brillando intensamente, como jamás los había visto brillar...

.No lo puedo creer... - Dice él y me abraza nuevamente para luego darme mil besos por toda la cara.

.Pero... estaba muerta... lo sé...

.Y ahora estas viva... - Me rectifica mirándome a los ojos. Su cara se ha compuesto y esta sonriendo. Le devuelvo la sonrisa... extrañaba verlo feliz, al fin veo a mi querido hanyou feliz... nos fundimos en un abrazo y lloramos de felicidad... siento que me acaricia el cabello y luego me hace mil promesas...

.No... no le hagas promesas, Inuyasha...

Ambos nos incorporamos y miramos a la persona que dice aquellas palabras. Es ella... esa luz brillante que antes me habló...

.El espíritu del bosque... - Susurro. Inuyasha voltea a mirarme pero no dice nada.

.Cuando de verdad amas a alguien, no es necesario hacer promesas... uno nunca sabe lo que el destino nos tiene deparado... mil cosas nos puede impedir la felicidad... si existe el amor verdadero, el puro... si existe confianza, entonces no son necesarias las promesas... la espada de tu hermano no funcionó por eso, estaba la promesa rota impidiéndola... una promesa no puede romperse... si existe amor verdadero entre ustedes no es necesario que lo hagan... no se arriesguen a que el destino juegue con sus vidas...

.Ahora entiendo... - Digo apenas... y la veo desaparecer completamente.

Nos miramos y sonreímos. Parece una locura. Inuyasha aún esta manchado con mi sangre y yo estoy vendada por heridas que ya no existen... comienzo a sacar las vendas de mi cuerpo.

.¿No tienes nada¿No estas aún herida?- Me pregunta aún nervioso.

.No... no hay nada... - Le digo, al tiempo que le muestro mi piel sana.- Luego miro los fragmentos de la perla que ya no brillan, los saco del pequeño envase que llevaba atado a una cuerdo en mi cuello y los dejo sobre mi mano... - Los fragmentos... me volvieron a la vida... - Le digo a Inuyasha, mientras él sólo me mira con adoración, veo sus ojos brillantes y dorados... le sonrío dulcemente y luego, no puedo evitar bajar mi mirada, hacia el colmillo de acero, él se da cuenta y veo un leve sonrojo en sus mejillas.

.¿Sabes porqué volví?- Pregunto seria. - Porque vi lo que intentabas hacer... y tu no debías hacerlo... no puedes, Inuyasha.- Lo estoy reprochando. Me mira unos segundos tristemente, luego me sonríe.

.Y ahora que has vuelto... ¿qué mas puedo esperar? Eres maravillosa... ahora sé... que juntos lograremos mil cosas... tú eres para mí... eres la única que podría serlo.- Me dice con convicción.- Es cierto... si tú no estas a mi lado, yo me muero... no te vayas nunca Aome... nunca... - Se acerca a mi cara y comienza a besarme, tiernamente al principio, desesperadamente después... y así estamos, yo apenas incorporada sobre la hierba y el arrodillado a mi lado... y juntos confiamos más que nunca, que lograremos nuestros objetivos... que nada esta definitivamente acabado y que el amor nos unirá por siempre.

The End.

Pd: Gracias por todo el apoyo recibido. Mil gracias a cada una de las que me dejó un review, los leí todos y se los agradezco eternamente. Ahora sólo espero de ustedes la crítica final para este fic. Nos vemos.