Bueno creo que este será bastante largo, además no creo que el fic dure muchos capítulos... bueno según lo que queráis vosotros.

Estos personajes no me pertenecen, sino que he J K Rowling y el que por fin todos esperábamos Jonh Ronald Renuel Tolkien o J. R..R Tolkien para los amigos, que largo...

~ ≈ ̃Viaje a la Tierra Media ̃ ≈ ~

~ ≈ ۵ Capítulo 3۵ ≈ ~

*************De cambios y encuentros************

Hermione se levantó, y miro a su alrededor...

-Un bosque.- Se dijo para sí.- Eso es obvio pero, el dónde estoy, no lo es tanto.-

Camino un poco, sin saber muy bien que rumbo seguir, se mareaba un poco y estaba confusa.

-¡¡¡Hoooooola!!!!!- Grito, ninguna respuesta más que el silencio.- ¡¿Hay alguien?!

Esta vez si que escuchó algo, era alguien cantando, con una voz melodiosa y extrañamente familiar, no parecía venir de lejos así que fue en busca del su dueño.

Camino hacia el norte y cada vez la voz se oía más cerca, pero en su cabeza seguía sonando como un susurro, y conforme se acercaba, las palabras se aclaraban y se dio cuenta de que no hablaba en su idioma, ni en ninguno que ella conociera, pero que no sabía como podía llegar a comprender...

Tres anillos para los señores Elfos bajo el cielo.

Siete para los Señores Enanos en casas de piedra.

Siguió caminando, escuchando con atención.

Nueve para los Hombres Mortales condenados a morir.

Uno para el Señor Oscuro, sobre el trono Oscuro

en la Tierra de Mordor donde se extienden las sombras.

Las palabras se oían cada vez más claras y altas en sus oídos. Entró en un claro del bosque y la vio.

Un Anillo para gobernarlos a todos. Un Anillo para encontrarlos,

un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas

en la Tierra de Mordor donde se extienden las Sombras.

1 La voz de la mujer se quebró y calló al suelo de rodillas, Hermione corrió a socorrerla, cuando levantó la cara la reconoció.

¡Era la mujer de su sueño!

-¡No hay tiempo!-Grito.- Debes irte a ayudar al portador...

-Pero... ¿qué portador? ¿Por qué yo? ¿Para que no hay tiempo?- Hermione estaba muy confusa y un millón de preguntas como esa le estallaron en la cabeza.

La mujer señalo detrás suyo con un dedo, Hermione se volvió para ver de que se trataba.

Vio a una mujer rubia vestida con una armadura, parecía malherida, aguantaba a duras penas el equilibrio y se encaraba a algo que nada más verlo sintió que se le helaba la sangre.

-Nazgul... -Susurró sin quererlo. La mujer, a su lado, asintió con la cabeza mientras contemplaba la escena.

Era una enorme bestia halada, encima un hombre cubierto por una túnica negra lo cabalgaba, hablaba con una voz profunda y fría, como si viniera del mismo infierno. Hermione tubo una especie de flash back y una escena del sueño apareció un segundo en su cabeza.

¡El jinete!

Era el mismo de su sueño, el del caballo negro.

Hermione se volvió hacia la mujer confusa.

-¡¿Dónde estamos?!- Preguntó, pero la mujer ya no estaba. Lo que se encontró le hizo proferir un grito de terror y dar un salto hacia atrás.

Una bestia enorme, de por lo menos cinco metros de alto, solo formada, por lo que a Hermione le pareció, fuego y oscuridad. La bestia rugió, un sonido sobrenatural que hizo que Hermione se hiciera un ovillo en el suelo y empezara a llorar mientras se repetía "esto no esta pasando" sendas veces. Cuando por fin tubo el valor suficiente para volver a alzar la vista se dio cuenta de que no estaba sola.

¡Dumbledore!

Al menos eso le pareció a primera vista, pero luego se dio cuenta de que no era él, pues no tenía esa cara risueña que nunca desaparecía, además aquel hombre parecía más viejo, cargado de preocupaciones y experiencias en las que la vida no te trata muy bien.

Entonces el animal volvió a rugir, y de su boca salió un mar de fuego, que ¡iba directa hacia ella! Hermione ya se temía lo inevitable cuando el viejo detuvo el fuego creando a su alrededor un aura de luz brillante.

-Un escudo ¡increíble!- Un alarido de admiración escapo de su boca.

El viejo seguía sin percatarse de su presencia, se irguió recogiendo todas las fuerzas que le quedaban y grito:

-¡No puedes pasar!

El viejo alzo la vara que tenía entre las manos y golpeó el puente con ella, lo demás fue muy rápido para ella, un instante después una luz cegadora inundó la estancia, Hermione se tapó la cara con las manos, cuando volvió a mirar vio que el viejo relajaba los músculos y se giraba hacia ella.

-¡Cuidado!- Grito con todas sus fuerzas, el viejo se giro, pero antes de que se diera cuenta un látigo de fuego tomo al anciano de las rodillas y lo empujo hacia el abismo.

**************************************************

-¡¡¡Noooo!!!- Hermione se incorporó de repente, respirando con dificultad, pero enseguida rió.- Un sueño, a sido todo un sueño.- Suspiró aliviada y se estiro otra vez en el suelo.

Se volvió a levantar alarmada, si había sido un sueño ¡¿Qué hacia en un maldito bosque?! Intento no ponerse nerviosa y mantener la calma. De repente recordó algo.

¡¿Y Voldemort?! ¡¿Y los Mortífagos?!

No había rastro de ellos, Se levantó y dio unas vueltas alrededor, observando.

-Vamos Hermione piensa, si estas en el Bosque prohibido, el castillo esta... hacia el este.- Intento orientarse.- Entonces he de ir por... allí.- Señalo hacia su derecha.

Hermione empezó a caminar, al poco tiempo comenzó a sentir un calor asfixiante, ¡como podía hacer tanto calor si estaban en diciembre! Alzo el brazo para protegerse del sol, que ahora pegaba con fuerza. Oyó el ruido del agua a lo lejos.

¡Agua!

Se dirigió hacia la fuente del sonido, no lo había notado pero se estaba muriendo de sed. Vio a lo lejos una pequeña laguna, corrió hacia ella y cogió un poco de agua en la cuenca de la mano. Bebió. Luego volvió a, meter la mano en el agua y se refresco el cuello. Miro distraída la lisa superficie, y volvió a levantar la cabeza, se detuvo y volvió a mirar el agua, esta vez más atentamente, grito y calló al suelo.

¡Su reflejo!

Miro hacia atrás para ver si había alguien, nadie. Se aproximo otra vez al agua y volvió a mirar, no había ningún error, era ella, pero estaba diferente.

Hermione no se había percatado de que estaba más alta, y llevaba un vestido blanco, con mangas largas y acampanadas de una tela transparente, su figura también había cambiado, parecía el cuerpo de una mujer de unos veintidós años, era delgada y esbelta.(¿Cuerpo Danone?) Sus ojos ahora era de un intenso color azul, y su pelo le caía hasta la cintura, ya no rebelde y desordenado, sino que liso y sedoso, de un color rojo intenso.

-No esta mal...- Susurró ella contenta con su nuevo aspecto.

Escucho un ruido detrás suyo, como el rugir de as ramas secas, se volvió para ver que era, se sorprendió mucho al ver a un niño (o al menos tenia estatura de niño) algo rollizo, de pelo corto y rizado, de un color rojo fuego, de ojos risueños y cara simpática, pero lo que más le llamo la atención fueron sus pies, iba descalzo y estaban cubiertos por algo de pelo, como el de su cabeza. No le inspiro ningún temor, más bien le dieron ganas de abrazarlo como a un osito de peluche.

Lo miró con atención, no parecía ser un niño, su cara no dejaba lugar a dudas, no lo era, parecía tener unos quince años, al fin el pequeño "ser" se percato de la presencia de la chica.

*************************************************

Ron todavía caminaba confuso, y además su hambre iba en aumento, ya pensaba que iba a morirse de hambre y de sed cuando escuchó un sonido familiar.

El del agua.

Casi no cabía en si de gozo, después de todo el cuerpo humano puede sobrevivir días sin comer, pero sin beber...

Corrió esquivando los árboles, y vio una pequeña laguna, se detuvo para observarla mejor, perdió todo sentido de la prudencia y corrió hacia el agua clara. Pero de repente se detuvo, y se quedo mirándola maravillado.

¿Acaso era una veela?

No, era mucho más hermosa que las veelas que había visto, y su belleza no parecía esconder nada malvado, debía venir de otro mundo, pues una mujer así no podía existir en la tierra, se quedo un rato mirándola, contemplando su belleza mientras ella también le miraba a él, con la misma curiosidad.

Ella estaba en el suelo de rodillas, con lo cual, quedaban más o menos a la misma altura, pero él no se dio cuenta de este detalle. La mujer le sonrió.

-Hola.- Le saludo con una voz melodiosa y suave.

-Hola.- Tartamudeo él sin dejar de mirarla, pero luego recordó donde estaba y le hizo la pregunta que rondaba su cabeza desde hace rato-¿Sabe dónde estamos?

-Ojalá lo supiera yo... –Suspiro la joven, Ron la miro extrañado ¿cómo no lo iba a saber?- ¿Cómo te llamas? – Le pregunto ella sacándole de sus pensamientos.

- Ron Weasley.- Respondió él.

La reacción que tuvieron estas palabras en la mujer fueron dignas de verse, abrió los ojos como platos tapándose la boca con la mano, luego lo miró de arriba abajo y más tarde empezó a reír a carcajadas.

-Ron... –Dijo la mujer.- ¿Eres tú?

Ron empezaba a sentirse molesto con la actitud de la chica, pero asintió.

-¿No me reconoces?- Preguntó.- Bueno los dos hemos cambiado "un poquito".

-Yo no he cambiado en nada.- Le dijo Ron algo extrañado.

-¿Ah no?

Acto seguido le cogió de la mano y lo llevo hasta el lago, Ron no sabía que era lo que pretendía la chica, pero la siguió, se inclinó hasta mirar la superficie, hasta mirarse a él.

-¡¡¡¡Qué!!!!- No pudo evitar exclamar, como no podía haberse dado cuenta, si era casi la mitad de bajo, estaba descalzo y vestía diferente.- ¿Qué me ha pasado?

-Querrás decir que nos ha pasado, plural.- Ron la miro sin comprender, hasta que se dio cuenta de algo.

-¡¿Hermione?!- No pudo evitar exclamar.

La joven asintió. Ron sonrió algo más seguro de sí mismo, era su amiga Hermione después de todo.

-Tu no te quejarás con el cambio ¿no?- Le preguntó con una sonrisa.- Yo te prefiero así.

-Muy gracioso.- Dijo Hermione irónicamente.

-¿Crees que estamos en el bosque prohibido?- Preguntó Ron mirando alrededor.

-No lo sé, pero todo esto me parece muy extraño... –Respondió la chica en tono inquietante.- Para empezar este calor no es normal, se supone que estamos en Diciembre...

El chico asintió, no se había dado cuenta, pero parecía pleno verano.

- Pero, ¿cómo hemos llegado hasta aquí? Lo último que recuerdo es que estábamos sujetos por los Mortífagos, y de repente, una luz cegadora, después , me desperté aquí.

Hermione se acordó de algo. ¡El anillo! Se miró la mano y vio que todavía lo llevaba puesto. Prefirió no contarle nada a Ron, así que se quitó el anillo rápidamente y lo guardo en un bolsillo del vestido.

-¿Tú te acuerdas de algo más?- Pregunto Ron, Hermione no respondió.- ¡Hermione!

-¿Qué?- Preguntó la chica volviéndose hacia él.

-¿Qué si tú te acuerdas de algo más?- Volvió a repetir molesto.

-No... –Mintió ella, Ron la miró con suspicacia, pero enseguida cambio de tema.- Mejor será que encontremos una forma de salir de aquí.

Los dos se levantaron y comenzaron a caminar en silencio, sin un rumbo fijo y sin saber como increíblemente encontraron un sendero.

-Parece en buen estado.- Comentó Ron.

-Eso quiere decir que pasa gente.- Apuntó Hermione.- Lo mejor será que lo sigamos, a lo mejor encontramos a alguien.

-O nos lleva a una ciudad, donde podamos comer.- Exclamó Ron esperanzado.

Hermione lo miró divertida y lo cogió de la mano mientras caminaban. Ron no pudo evitar sonrojase, aunque era su amiga de toda la vida, no podía olvidar su cambio y que ahora era una mujer muy hermosa.

-Creo que tu apetito también a cambiado.

**************************************************

Remus Lupin se levantó dolorido, se sujeto la cabeza que le dolía como si le fuera a estallar. Le costo un poco enfocar los objetos que le rodeaban, pero pronto se dio cuenta de que estaba en un bosque.

De repente recordó todo, la emboscada los Mortífagos, Voldemort, Snape...¡Harry!

Ahogó un gritó y se levantó, se palpo la cintura para coger su varita, pero en vez de eso saco...

Una espada

Remus la alzó y la miro, no parecía ser nueva, sin embargo conservaba una gran belleza, un destello la iluminó en la punta y el licántropo movió la espada para que el brillo pasara por todo el filo, al final le dio la vuelta y observó la empuñadura. En ella había unos finos grabados que recorrían la superficie como si fueran ríos de fuego, giro la espada lentamente y observó que los grabados formaban lo que parecía ser un árbol con siete estrellas encima.

-¡Ay!¡Ay!¡Ay!- Escucho un lamento a sus espaldas, Remus asustado se giro y empuño la espada fuertemente, dispuesto a enfrentarse con lo que fuera.

Pero en vez de ver a un terrible enemigo vio como Sirius llegaba tambaleándose y maldiciendo entre dientes.

-¡Sirius!- No pudo evitar exclamar. El aludido levantó la cabeza.

-¡No grites tengo un... terrible dolor de... –Sus palabras se detuvieron ahí y en vez de seguir soltó una sonora carcajada.- No hacía falta que te pusieras eso solo para lucir tus horas de gimnasio Remus.- Dijo sin parar de reir.

-Pero que me...- Remus se miro.- ¡¿Pero quién?!

Su ropa no era la misma, calzaba unas botas de cuero, iba vestido en diferentes tonos de gris, también llevaba un cinturón de cuero, del que colgaba la vaina de la espada que todavía sujetaba fuertemente en la mano. Se aparto el manto negro que le cubría para volver a envainarla. Pero se dio cuenta de que el cambió no solo consistía en su ropa sino también en su físico, que había mejorado considerablemente (N/A: Ups! Se me cae la baba) el pelo le caía rebelde hasta los hombros y al tocarse la barbilla noto algo de barba, como si no se hubiera afeitado en un par de días.

El eco de las risas de Sirius le hizo volver a levantar la cabeza, Remus tubo que aguantar otra carcajada, pues su amigo vestía igual que él, una capa verde oliva cubría su cuerpo, el pelo también llegaba a la altura de los hombros y noto que también tenía una espada.

-Mírate...- Le dijo Lupin, intentando contenerse.- Tú tampoco tienes mucho de lo que reírte.

Sirius lo miro sin comprender, bajo su mirada hacia un charco y saltó del susto, Remus no pudo evitar reír ante la actitud de su amigo.

-Esto ya es demasiado.- Espetó.- Que te lo hagan a ti vale, pero a mi...

Remus paso por alto ese comentario y aparto la capa de la cintura de Sirius, para ver la espada, se podía decir que era idéntica, los mismos signos, los mismos grabados...

-¿Crees qué es un broma de Dumbledore?- Sopeso Sirius.

-¿El qué lo de la ropa o lo de Voldemort y los Mortífagos?- Preguntó el otro.

-Ambas cosas

-¿Y que quiere enseñarnos? "¿Cómo sobrevivir en un bosque sin comida, sin varita, y con una espada?- Preguntó Remus escéptico.

-Peores cosas a hecho... Te acuerdas del año en que acabaste desnudo porque se negó a...- Comenzó a decir Sirius pero Lupin lo detuvo.

-Eso ni me lo menciones.- Dijo él molesto.

-Vale.- En el rostro de Sirius se dibujo una sonrisa.- ¡¡¡¡Dumbledore!!!!

Pronto los dos estuvieron gritando sin obtener otra respuesta que el susurro del viento entre las hojas.

Pero de repente escucharon una voz a lo lejos que también gritaba, pero a ellos la voz les llego como un susurro. Parecía ser una voz femenina, ambos se miraron y se encogieron de hombros mientras seguían el rastro de la voz.

**************************************************

Snape busco algo en lo que poder mirarse desesperado y maldiciendo.

¿Pero quién se creían que eran para hacerle eso? Se imagino a los artífices de la broma riéndose mientras lo observaban y se enfureció todavía más.

Al fin encontró una especie de charco pequeño, pero que a él le bastaba para mirarse, movió la cabeza lentamente hacia abajo y miró su reflejo, aparto la vista se frotó los ojos y volvió a mirar incrédulo... ¿de verdad era él?

Se veía mucho más joven, por lo menos media un metro ochenta y una larga y lisa cabellera rubia le caía por debajo de los hombros, vestía de verde y plata, con un calzado ligero y flexible cuyos materiales no conocía, pero sentía que no le hacía falta, pues parecía flotar en vez de caminar.

-¡¡¡¡Noooooo!!!!- Un gritó de pánico se escucho a lo lejos, levantó la vista del charco y la dirigió hacia la espesura, allí su vista (que parecía mucho más agudizada que antes) vio dos formas que se movían lentamente, se acomodó el arco y disparó

**************************************************

-Por aquí, debemos estar muy cerca- Susurró Sirius mientras caminaban.

Remus caminaba en silencio, preguntándose si la mujer que había gritado seguiría allí. Vio algo brillante en el suelo y se agacho para cogerlo.

¡Zzuuuuum!

Algo paso rozando su cabeza, se levantó para ver que era y en el árbol que había a su lado, halló clavada una flecha. Remus la cogió y suspiro.

¡Se había agachado justo a tiempo!

Sirius, que había observado la escena, había sacado la espada y la sujetaba con maestría, haciendo surcos en el aire. Remus siguió su ejemplo y desenvainó la suya, los dos miraban hacia todos los lados esperando a su atacante , tocándose espalda con espalda.

-Vosotros...- Dijo una voz, y entonces apareció un joven rubio y alto, con la cara tensa de ira, que los taladraba con la mirada.- Habéis... hecho... esto- El joven estaba tan alterado que le costaba respirar.

Sirius miro a Lupin con cara de , "Le damos un golpe y nos piramos o intentamos hablarle". Remus volvió a mirar al hombre y tras ver que tenía un arco sujeto en la mano, se declinó por la segunda opción.

-¿Le conocemos?- Pregunto lo más correctamente que pudo.

-¿Qué si me conocéis?- Repitió con ojos de sádico, pero, esa mirada, en cierta manera Remus sentía que le era familiar.

De repente Sirius se puso completamente rígido y abrió los ojos como platos.

-¡¡¡¡Snape!!!!

Remus lo observó, esa mirada...

Casi se cae del susto al ver que tenía razón, era él, no había duda, esa intensa mirada de odio, la que utilizo cuando lo llamó a su despacho en tercero o la que cruzaba con él cada vez que le traía la poción.

-¡¿Lo habéis hecho vosotros?!- Afirmo más que pregunto el "nuevo" Snape.

Sirius esbozó una sonrisa, el odio que se inspiraban Sirius y Snape era mayor que cualquier otro, mayor incluso que el que a Snape le inspiraba Potter.

-Crees que estaríamos así si tuviéramos algo que ver.- Pregunto Sirius, sin esperar respuesta continuo.- Ninguno sabemos lo que paso, solo que nos despertamos aquí y así...

-¿Algo que ver con Voldemort?- Propuso Remus.

-Puede ser.- Dijo Snape ya con menos ira.

-Y todo por tú culpa.- Replicó Sirius en un susurro que milagrosamente Snape oyó.

-Yo no sabía nada, me siguieron.- Se defendió Snape echándole una mirada de odio.

Remus negó con la cabeza y apartó la vista, se miró la mano y vio lo que había cogido antes, era un medallón de plata, con un broche de un león que tenía los cabellos dorados.

-¿Os suena este colgante?- Preguntó a los dos rivales que ya estaban en el suelo dándose de puñetazos.

-A ver...- Dijo Snape con dificultad pues tenía a Sirius encima.- No

-A mi sí... Creó que era el regalo de Ron y Hermione a Harry por navidad.- Explicó Sirius

-Lo que quiere decir que también están por aquí.- Concluyó Remus.- Tenemos que ir a buscarles, pueden estar en problemas.

-Y ese grito de antes...-Dijo Sirius soltando a Snape y levantándose.

-¿Vosotros también lo escuchasteis?- Preguntó Snape desde el suelo.

Ambos asintieron

-Si no recuerdo mal venía de esa dirección.- Remus apunto a su derecha.

-Pues manos a la obra, tenemos que trabajar juntos.- Y entonces sucedió un momento de estos en los que lamentas no haberte traído una cámara. Sirius le tendió una mano a Snape, al principio este dudo, pero después la cogió y se levanto con su ayuda.

Cuando Snape estaba de pie siguieron sin soltase y movieron las manos arriba y abajo, como si estuvieran cerrando un trato, mandándose amenazas con la mirada. Un momento después Snape lo soltó y se dirigió hacia donde había señalado Lupin, seguido de Sirius, Remus ,sin comprender ya la naturaleza humana, siguió su mismo rumbo.

**************************************************

¡¡¡¡¡¡Taaaaaachaaaaaaaannnn!!!!!! Se que he rebelado poco pero el siguiente capitulo saldrá pronto, lo prometo y siento si algunas de las cosas que puse en el adelanto no salían, supongo que en el próximo saldrán.

Y ahora aunque tengo poquitos... contestaciones a los reviews:

************************************

Nariko: Para empezar. Gracias!!!!! Por su puesto, vuestros reviews siempre me alegran y tranquilos todos que pronto empezara lo emocionante. Y a otra cosa, si tardo mucho en poner review cuelga el capitulo, porque sabes la crueldad que me han echo, un examen el Lunes!!!!!!! Y esta semana no he podido ni respirar, pero por si acaso te digo que el capítulo me ha encantado, si ya lo veía yo venir!!!!!!! *guiño, guiño* Un besazo

Anna Voig: ¿Te gustan las dos? Gracias!!!!!!! Pero a veces pienso que tengo excesiva imaginación, bueno eso no es malo!!!!!! Pero para que se me ocurra una de estas ideas tengo que estar media hora pensando, y cuando le comente a mis hermanas (que me ayudan siempre) lo de "Viaje al pasado se rieron de mi" y por cierto ya he empezado el siguiente capítulo, así que lee!!!!!! Muchas gracias y un besazo!!!!!!!!

Eowyn hija de Eomund: Gracias!!!!!!!! Me anima mucho que la gente me diga esas cosas!!!!!! (Arwen se emociona y empieza a sollozar) si es que os quiero a todos un montón y a ti también wapisima.

Rashah: Muchísimas gracias!!!!!!! Y por supuesto que no me quiero librar de ti, más bien tú querrás librarte de mi!!!!!!! Y hubiera colgado el review antes pero los dichosos fallos en Fan fiction... Bueno un besazo!!!!!!! Y hasta el próximo review ¿no? Wapetona!!!!!

Elmith: Lo siento!!!!!!! La verdad es que no acertaste muchos, pero gracias por tú review!!!!!!!!! Os quiero mucho!!!!!!!! Ahora en lo que si que has acertado a sido en lo del mundial, que putada!!!!!!! Pero ha sido por el arbitro!!!!! Ya me harás otra predicción que me gustan mucho... un besazo!!!!!!!!!

*************************************************

Y no os perdáis el próximo capitulo...

ADELANTO DE

***Más encuentros, Gildor y El Poney Pisador***

-¡Socorro!¡Socorro!¡Socorro!

Las palabras le llegaron lejanas, pero alguien necesitaba ayuda y Harry, ya como un acto reflejo, corrió en dirección a las voces .

Doblo una esquina hasta que encontró un sendero, y entonces encontró a los seres más raros que había visto en su vida.

**************************************************

-Mátalo.- Decía una voz grave y corrupta.- Mátalo, no estas aquí por una casualidad Harry Potter. ¡Mátalo y dame el Anillo Único!

Harry se llevo las manos a la cabeza y grito de nuevo, no quería volver a oír esa voz de nuevo.

-¡No se de que me hablas!. Grito desesperado.- ¡No sé que es el Anillo Único! ¡Déjame en paz!

Uno de los hombrecitos dio un salto hacia atrás, alejándose de él, y miró a los demás con cara de preocupación, los demás le dirigieron miradas de pánico.

-¡Mátalo!- La voz se hacia cada vez más fuerte, y de repente un chillido, como el de su sueño, y después.... solo oscuridad.

**************************************************

Oyó unos hermosos cantos que cada vez se acercaban más a ella, y eran en esa lengua que le había oído a la mujer en el sueño, pensó que también estaba soñando cuando vio a un grupo de ¿Hombres? No... no podían serlo, eran increíblemente hermosos, esa fue la única palabra que e le paso por la cabeza, y brillaban con una luz que salía de su interior, igual que la mujer del sueño. Ella estaba camuflada tras la hierva y le costo un poco comprender que no se trataba de un sueño y que era real.

-No podemos estar en Hogwarts... –Susurró

Uno de los hombres, de repente se volvió, a Hermione se le detuvo la respiración y se enderezo, mientras el hombre solo la miraba y una sonrisa se formo en su boca.

-"¡Gildor!"-Llamo el hombre dándole la espalda.

**************************************************

-Como que no sirven.- Una voz extrañamente conocida para él se dirigía a Mantecona con enfado.

-Le digo que esos...

-Galeones.

-Galeones, o como se llamen, no sirven.- Respondió Mantecona tajante.

¿Galeones?

Esta palabra sonó en la cabeza de Ron como un canto celestial, se giró para ver que los que hablaban eran tres hombres, uno rubio, alto y de buen porte que no reconoció y otros dos que pese a que su peinado y ropas fueran diferentes reconocería en cualquier sitio.

-¡Sirius, Remus!- Gritó y sin cercionarse de si eran ello o no, se les tiró encima dándoles un fuerte abrazo.



Aviso: Habrá flash back porque son tres historias diferentes que ocurren a la vez.