Capítulo 4: Fuego súbito

La cena en el elegante sitio transcurrió en paz y tranquilidad, Saori se alegró de que sus caballeros se comportaran normales y no como solían hacerlo cuando se reunían todos en el Santuario. Ya casi finalizada la velada el grupo comienza a hacer planes para su primera noche en Río de Janeiro. La gente del hotel les recomendó varios lugares de moda y muy buenos, sin embargo no parecía haber quórum con respecto al destino del grupo esa noche.
- Entonces, ¿Vamos todos juntos o qué? - preguntó Saga ya cansado de tanto discutir sobre que hacer -. Yo voto por ir a una disco - dijo muy decidido y esperando la reacción del resto.
- ¿Por qué no dejamos eso para mañana? - preguntó Camus - El viaje nos cansó bastante, además había pensado en que podríamos aprovechar para ir a la playa mañana - opinó el francés.
- ¿Vos no dormiste toda la tarde Camus?- lo miró Milo riendo - ¿De qué estás cansado?
- Perdón, pero yo sólo pude dormir un rato Milo - contestó el santo de Acuario -. Aproveché la tarde para hacer algo de ejercicio en el gym y pasar por el spa.
- No es necesario hacer tanto lío, nos separamos y listo - dijo Aldebaran -. Ustedes solo quieren ir a tomar algo a un bar - mirando a Camus, Shiryu y Mu -. ¿El resto decidió? Podríamos ir cada uno por su lado y listo, y mañana organizar algo mejor, ¿Les parece?
Aceptando la sugerencia de Aldebaran el grupo entero se separa. Algunos deciden ir a alguna disco, entre ellos DeathMask, Shura, Aioros, Saga, Seiya y Aioria. Milo quería ir, pero no iba a dejar solo a su Camus en un bar. El resto - salvo Hyoga y Shun que decidieron salir por su cuenta - prefirió ir a tomar algo a un bar. Afrodita estaba indeciso, esperaba a ver que hacía Ikki. Éste optó por ir al bar así que el santo de Piscis lo seguiría, en realidad hubiese preferido una disco pues sería mucho más cómodo para atraparlo. Aun así, quizá con algo de suerte esa noche podría hacer algún intento de acercársele. Ya saliendo del hotel el grupo se separa. Dohko y Shion planeaban ir al bar, pero el patriarca antes de subirse al coche que los llevaría se le acercó al santo de Libra y le propuso otra idea, la cual aceptó. El resto los miró extrañados, pero no les quisieron preguntar porque se separaban de ellos, de seguro tendrían sus propios motivos. Un rato después éstos se encontraban caminando descalzos sobre la playa, a orillas del mar. El agua se sentía fría aunque Dohko se divertía mucho viendo como la espuma del mar cubría sus pies, cualquiera que lo hubiese visto allí diría que se comportaba como un niño. Shion lo observaba con una expresión de nostálgica tristeza, pues le venían a la memoria muchos recuerdos junto al santo de Libra en su juventud. Ese mediodía había almorzado con él pero no se había animado a hablar, tenia tantas cosas para decirle, sólo charlaron sobre cosas banales y nada importantes como dos buenos viejos amigos. El patriarca pensó que esa noche sería propicia para intentar acercarse más a Dohko, el agradable clima y la soledad de la playa le daría un buen ambiente a la situación. Aun así no estaba demasiado seguro. Ya habían hecho un buen trecho por la playa alejándose bastante pues desde donde estaban se podía ver que el alto edificio en donde se encontraba emplazado el hotel se veía pequeño. Dohko decide detenerse y se sienta sobre la arena seca. Shion imitó a su amigo, sentándose a su lado. Ninguno de los dos habló, solo se limitaron a contemplar la belleza del lugar perdiendo sus miradas en aquel punto donde el cielo y el mar se unen; en un momento Dohko sale de su ensimismamiento y comienza a hablar.
- Yo se porque me trajiste aquí Shion - sin quitar su vista de las estrellas.
Shion lo mira pero no se sorprende, ambos se conocen demasiado.
- Yo... - intenta decir algo el patriarca del Santuario pero no sabe como comenzar.
- Yo se que tu quieres que vuelva a ser todo como antes, pero no estoy seguro Shion - bajando la vista hacia el suelo -. Tu sabes como me dolió separarme de ti, y eso fue hace tanto tiempo... - alzando su mirada hacia el cielo de nuevo -. Ambos tuvimos que anteponer la misión que Athena nos confió en vez de nuestra felicidad... - su expresión se volvió triste.
- ¡Pero ahora tenemos una nueva oportunidad! - le dijo Shion poniendo mucha convicción y esperanzas en sus palabras - Dohko, ¡Te amo! Y siempre te amaré.
El santo de Libra lo miró, ahora había algunas lágrimas pujando por salir de sus ojos. El también lo amaba, pero tenia miedo de sufrir de nuevo. No dijo nada, solo se levantó y siguió caminando, solo que ahora con rumbo al hotel.
Shion no quería presionarlo, si bien sentía esperanzas de que aun conservara ese tierno y profundo amor que tiempo atrás le profesó no estaba seguro del todo. Aun así no entendía a Dohko, tenían la oportunidad de comenzar una nueva vida juntos, el camino estaba allí y solo había que seguirlo, pero el corazón del caballero de Libra estaba siendo obstinado. ¿Por qué?, se preguntaba Shion.
- ¿Acaso... acaso ya no me amas? - le preguntó Shion momentos después caminando detrás de Dohko.
Dohko se detiene sorprendiendo a un Shion que se vuelve expectante, quería conocer sus sentimientos.
- No se trata de eso - sin volverse a mirarlo -. Yo aun te amo pero... - siente que las lágrimas ya no pueden ser contenidas.
Shion se abalanza hacia él y lo abraza desde atrás fuertemente, Dohko ni se inmuta, solo deja correr sus lágrimas. No puede hablar, el nudo que se había formado en su garganta se lo impedía.
- ¡Vuelve conmigo entonces! - exclamó un Shion también invadido por la tristeza - ¡No me hagas esto! Dale una oportunidad a tu corazón... Y a mí... Por favor... - con la voz entrecortada por la angustia que sentía en su pecho.
Firme pero gentil quita los brazos de Shion que lo rodeaban para luego continuar con su caminata. Yo te amo Shion, pero aun necesito tiempo. Compréndelo por favor, se dijo el santo de Libra.

Mientras tanto el grupo más grande había entrado a un concurrido bar que está en Ipanema, una de las playas más famosas de la ciudad. El lugar era muy moderno y sofisticado además de exclusivo. Al ingresar Saori se encargó de conseguir una buena mesa, momentos después una bella camarera los conduce al sector vip del bar. Ikki sintió que una vez más tenía a Afrodita demasiado cerca para su gusto, no había duda ya, el pato ruso tenía razón. No quería sentarse a su lado así que entre la confusión que se generó entre ellos para tomar una silla logró dejar atrás al caballero de Piscis, terminando sentándose entre Shaka y Kanon. Afrodita tomó a regañadientes la silla que quedó al lado de Aldebaran, desde allí ni siquiera podía ver a Ikki. ¡Maldición! Ahora no lo tengo a mi alcance y en este lugar no tendré oportunidad. Si al menos hubiese venido DeathMask... ¡Pero no! Siempre tiene que estar pegado a Shura, porqué no dicen que son pareja y ya, de seguro lo son, se decía con una mezcla de bronca y resignación.
El alcohol empezó a dar vueltas en la mesa y la cosa se puso más alegre, en especial Saori quien generalmente no tomaba pero esa noche hizo una excepción. La normalmente histérica amargada mujer ahora reía con ellos y todo por culpa de un margarita que pidió, el cual tenía más tequila de lo normal. Lo más divertido de la noche fue la competencia de "aguante" de tequila entre Kanon y Milo, perdía el que primero empezara a perder la cordura. Ganó Milo pues al sexto vaso de tequila Kanon comienza a hablar más pavadas de lo normal hasta que termina K.O. sobre la mesa, al mejor estilo Seiya, por lo que todos rieron a carcajadas por la escena. El algún momento de la noche ven a Aldebaran levantarse de la mesa y dirigirse hacia la barra, por la seña que le hizo a alguien - al parecer una mujer - de seguro se encontró con alguien conocido. Ya cerca de las cinco de la mañana todos deciden regresar, además ya estaba amaneciendo. A esa hora ven a Aldebaran regresar con el grupo.
- ¡Hey! ¿Con quién te encontraste? - le preguntó con curiosidad Mu, uno de sus mejores amigos.
- Ah, con una vieja amiga, Mareleize. Muchos años sin verla - le comentó -. ¿Qué le pasó a Kanon? - preguntó a su amigo al ver el pésimo estado en que se encontraba.
Un Kanon semi inconsciente era llevado a las rastras por Ikki y Shaka.
- Le pasó eso por tomar más tequila del que podía soportar - se reía Mu -. Debiste verlo, fue muy gracioso. Otra que estaba mareada era Saori, pero trataba que no se le notara. Casi lo logra, pero tropieza con el escalón de la entrada del hotel la muy boba. Menos mal que Shiryu estaba a su lado, sino hubiera pegado su cara contra el piso.
- Gracias Shiryu - completamente sonrojada -. Ay... Mi cabeza... - se quejaba la mujer.
Justo detrás de ellos llegaba el otro grupo, Aldebaran y el resto se sorprenden de verlos tan temprano pues conocían la manía de Shura, DeathMask y Aioros de regresar de las discos ya pasadas las nueve de la mañana.
- Vaya... ¿No es muy temprano para regresar? - le preguntó un sonriente Aldebaran a Saga quien era el que primero entró.
- Atrás mío veras la respuesta - con una expresión de fastidio en el rostro.
Un segundo después ven como entre DeathMask, Shura y Aioros traen a dos absolutamente inconscientes Aioria y Seiya. Nadie preguntó nada, no hacía falta. El alcohol había cobrado dos víctimas más esa noche.
- Y no son los únicos - le dijo Milo a Saga - mira a tu hermanito - señalando al sofá del lobby.
La expresión de enojo y fastidio del caballero de Géminis se intensificó al ver a su gemelo durmiendo. ¿Cuándo va a aprender que no debe tomar tanto? No tiene nada de resistencia, y él lo sabe, ¡Diablos!, pensaba un enojado Saga. Sin muchas ganas Ikki ayuda a Saga a llevar a Kanon a la habitación dado que la compartían, mientras que entre Aldebaran y Aioros llevan a los bellos durmientes Seiya y Aioria a la suya. El santo de Sagitario después de dejar a su hermano en su cama se despide de Aldebaran y se va a dormir. Como me gustaría tomarle una foto y enviársela a Marin, pensaba Aioros sobre el estado de su hermano mientras se reía de ello.

Sólo un pequeño grupo logró despertarse a eso de las nueve; con algo de sueño Shun y Hyoga se levantan y tras darse una ducha van a desayunar. Ellos se acostaron mucho más temprano que los otros, al menos aun era de noche. Shion también se levantó temprano y lo primero que hizo fue intentar despertar a sus compañeros de cuarto: Mu y Shiryu. No hubo caso, Mu le contestó algo ininteligible entre sueños para luego dar la vuelta y seguir durmiendo; Shiryu ni siquiera le hizo caso. El patriarca se encontró a la parejita desayunando y dado que no apareció nadie más se dirigieron a la piscina a tomar algo de sol. Recién pasadas las once y media de la mañana se fueron despertando los demás, se suponía que iban a encontrarse temprano para desayunar pero dada la hora a la que se acostaron, era obvio que nadie haría aparición hasta casi el mediodía. Ikki se despertó gracias a una discusión que los gemelos estaban armando, ninguno de los dos se ponía de acuerdo para usar la ducha.
- ¡Que yo voy primero! - gritó Kanon.
- No señor, yo soy el mayor así que tengo derecho - quitándole la toalla a su hermano.
- ¡Me tienes harto con eso Saga! - tironeando de la toalla que acababa de sacarle su hermano.
- ¿Podrían callarse y dejarse de comportar como niños? - les dijo un Ikki más dormido que despierto mientras bostezaba - Decidan de una maldita vez quien usa el baño primero.
- ¡Yo iré primero! - dijo Saga mientras entraba al baño aunque estaba siendo agarrado por Kanon del brazo - ¡Basta Kanon! Además tu tienes la maldita costumbre de tardar tres horas para ducharte, siempre haces lo mismo - le reprochaba Saga.
La discusión continuó por un buen rato, y dado que Ikki ya se estaba hartando de oír sus gritos - los cuales seguramente estaban siendo escuchados por todo el piso - decidió tomar una toalla y una muda de ropa y salir de la habitación pensando en que quizá su hermano le permitiría usar la ducha. Se cruza a la habitación de enfrente y toca a la puerta, no estaba. Ya resignado estaba por volverse cuando ve que Dohko sale de la habitación continua a la que él ocupaba con los gemelos y se le ocurre una idea.
- Disculpa Dohko - volviéndose hacia el caballero de Libra -. ¿Sería mucha molestia que use tu baño? Como podrás oír Saga y Kanon aun se están peleando por quien va a ducharse primero.
- Cierto - riéndose al escuchar los gritos y los reproches de los gemelos -. Ningún problema - le contesta - puedes entrar, creo que Shaka ya salía del baño.
Ikki entra al cuarto y ve que estaba bastante ordenado, nada que ver al suyo en donde había ropa tirada por todas partes y eso que habían llegado ayer. Las camas si bien no estaban hechas - el servicio de limpieza se encargaría de ello luego - al menos estaban ordenadas, salvo la del medio que estaba hecha un desastre y con las sábanas en el piso. La puerta del baño estaba entreabierta.
- ¿Shaka? - pregunta - Soy Ikki, Dohko me dijo que podía usar el baño.
- ¡Ya salgo! - le contestó mientras cerraba la ducha y salía de la tina - Déjame adivinar, Saga y Kanon discutiendo por quien se baña primero, ¿No? - le preguntó el rubio -. Acostúmbrate Ikki, siempre lo hacen. - Exacto, además sus gritos me estaban taladrando los oídos, de hecho aun gritan - escuchando que la discusión de hermanos continuaba.
- Puedes ir entrando Ikki, me iré ni bien termine de secarme el cabello. Un semidesnudo Shaka abre la puerta y deja pasar a Ikki, solamente una toalla atada en su cintura cubría sus partes íntimas y aun llevaba el cabello mojado y desordenado. El Fénix se desviste y entra a la tina; la situación no estaba muy a su gusto pero si tenia que esperar a que alguno de los gemelos terminara la discusión estaría horas. Tampoco tenia ganas de soportar una estúpida pelea con ellos si lo veían entrar primero a ducharse. Mientras Shaka secaba su cabello e intentaba desenredarlo no podía evitar ver a través del espejo la atractiva figura de Ikki gracias a que la cortina del baño era casi transparente. Nunca se había percatado de que Ikki tenia un cuerpo tan atlético y sexy, era la primera vez que lo veía desnudo. Una extraña curiosidad lo hizo moverse un poco para ver a por el espejo algo más pero no lo logró. En eso el santo de Virgo se percata de que Ikki no cerró del todo la cortina así que mientras desenredaba su cabello movió un poco la cabeza y quedó en la posición justa para ver algo de la piel morena del caballero de bronce. Una pequeña sonrisa se formó en sus labios cuando logró divisar el perfecto trasero del peliazul. Ahora bien, si el rubio pensaba que el Fénix no se había dado cuenta de que lo estaban espiando se equivocó, pues de soslayo vio que Shaka lo miraba a través del espejo. Lo que más le extrañó fue que esa actitud no le molestó para nada, al contrario, le resultó divertida. Vaya... No sabía que Shaka tenía su lado voyeur, se dijo Ikki mientras se ponía a propósito al alcance de la vista del rubio. El santo de Virgo no le caía mal a Ikki, además el también aprovechó para mirar el esbelto cuerpo de Shaka, también era la primera vez que lo veía sin ropa. Minutos después cierra la ducha y se seca para luego abrir la cortina y salir de la tina con la toalla en la cintura. Mientras tanto Shaka aun trataba de desenredar su largo cabello y al parecer - por la expresión de su rostro - estaba bastante molesto. Ikki lo miraba atento, le resultaba divertido ver como Shaka prácticamente se peleaba con su pelo.
- Te parecerá gracioso seguro - le dijo el rubio quien lo miraba a través del espejo - pero tu no tienes que andar cuidando que se te enrede el cabello.
Ikki no pudo contener la risa cuando ve que por el forcejeo con su pelo se le queda atascado el cepillo a Shaka en la maraña de pelo rubio, cuanto más peleaba más lograba que se enredara.
- Encima ayer estuve en un centro comercial y olvidé traer el acondicionador - le comentaba recordando lo sucedido el día anterior -. ¡Ay! - se quejó por haberse tironeado el mismo el pelo.
Un momento después ve que Ikki se le acerca desde atrás y toma el cepillo.
- Pensé que tenías más paciencia Shaka - se reía Ikki mientras desenredaba poco a poco sus finos y rubios cabellos y lograba quitar el cepillo atascado, actitud que provocó que Shaka se sonrojara un poco -. Déjame ayudarte - los ojos zafiro de Ikki se encuentran en el espejo con la mirada turquesa de Shaka.
Ikki comienza a peinar a Shaka tomando recaudo de no tironear demasiado sus cabellos. En ese momento recordó que hace mucho peinaba así Shun, cuando éste era un pequeño niño su cabello siempre se le enredaba y era igual de fino. El santo de Virgo no se esperaba una actitud así por parte del Fénix, pero había algo que le impedía resistirse y decirle que no lo haga. Estaban muy cerca, tanto que Shaka podía sentir el aroma de la piel de Ikki recién limpia. El rubio se quedó completamente callado contemplando como un paciente Ikki lo peinaba, en ese instante se percató que su corazón latía cada vez más rápido. ¿Por qué me siento así?, se preguntaba Shaka. Sin querer - o al menos eso le parecía - el Fénix rozaba la piel de alabastro del rubio mientras separaba por mechones sus largos y finos cabellos dorados para desenredarlo. Ikki en ningún momento se había propuesto hacer eso pero de golpe sintió un hechizante magnetismo hacia el santo de Virgo, era como si tuviera la necesidad de tocarlo y sentir su piel de cerca; sin darse cuenta se estaba dejando llevar por sus instintos. En un momento mientras lo peinaba el peliazul roza el largo cuello de Shaka provocando en éste una electrizante sensación haciéndolo cerrar los ojos. Cuando volvió a abrirlos vio que los ojos azul noche de Ikki lo miraban a través del espejo, ¿Esa mirada... que significa?, se decía Shaka al contemplar una expresión de inusitado deseo. El Fénix se había dado cuenta de la reacción de Shaka al tocarlo sin querer, ahora él lo miraba por el espejo y lo que hizo a continuación fue volver a acariciarlo y comenzar a acercarse de a poco tan solo para comprobar su teoría. Esperó a ver la reacción del rubio, le gustaba, se le notaba en la cara. Ni bien confirmó eso se acercó a su cuello y comenzó a rozar sus labios sobre la suave piel del rubio mientras deslizaba sus dedos por su espalda. Un gemido ahogado se escapó de la garganta de Shaka, aquellas suaves y provocativas caricias que el Fénix le daba lo estaban excitando. El espontáneo juego que se había iniciado entre ellos continuó y el próximo paso de Ikki fue mordisquear y lamer la oreja derecha de Shaka mientras que éste estiró sus brazos hacia atrás para tomar y atraer más hacia sí el trasero de Ikki al tiempo que deslizaba su mano izquierda por debajo de la toalla. En ese momento el rubio se dio cuenta que el Fénix estaba más que excitado al sentir que su miembro viril se abultaba cada vez más presionando contra él. En eso Ikki baja su mano izquierda hasta la cintura de Shaka y deshace el nudo que sostenía la toalla dejándolo completamente desnudo, a continuación la desliza hasta la entrepierna comenzando a acariciar a su ya excitado miembro. Los gemidos del rubio aumentan cada vez más al sentir como el peliazul lo tocaba, además le gustaba muchísimo manosear el trasero de Ikki y como quería un contacto más "cercano" con él de un tirón quita la molesta toalla que llevaba, ahora ambos estaban en igualdad de condiciones. Esa actitud de Shaka hizo que Ikki se animara a más, mientras continuaba lamiendo el blanco y suave cuello y acariciaba la entrepierna del rubio con la mano derecha empieza a tocar el firme trasero del santo de Virgo para luego introducir uno de sus dedos dentro del cuerpo de éste. Esperó a ver la reacción, no quería romper esa magia que se había creado sobrepasando algún límite que no debía. Sin embargo Shaka sorprendió al Fénix abriendo más las piernas para darle mayor libertad y comodidad, era obvio que sabía lo que vendría después. Ikki no veía la hora de hacerlo suyo, ya ni le importaba porque ni como llegó a esa situación, solo deseaba experimentar y disfrutar del momento.
- Hazlo de una vez... - le dijo el rubio con un voz hiperseductora - ya no aguanto más.
Ikki sonrió sin poder creer que Shaka le estuviese pidiendo de esa manera que lo penetrara; y el tampoco lo soportaba, esa actitud y esa voz lo volvieron loco. Acto seguido Ikki da un pasó atrás para que Shaka se acomode y a continuación lo penetra. Al principio escucha un gemido de dolor ahogado, pero el rubio tras acostumbrarse a tener el miembro de Ikki dentro suyo comenzó a sentir un placer inimaginado. El Fénix no solo embestía cada vez más fuerte al caballero dorado sino también lo masturbaba. Ahora eran los dos que, a coro, gritaban del placer. Las estocadas de Ikki fueron más rápidas hasta que logran alcanzar el clímax; Shaka pudo sentir el tibió semen del peliazul dentro suyo el cual se deslizaba ahora hasta sus piernas a la vez que su propio semen se escurría en la mano de Ikki. Los dos caballeros quedaron completamente exhaustos por lo que acababan de hacer, pero no llegan a tener tiempo para recuperar el aliento cuando sienten que la puerta de entrada del cuarto se abre.
- ¿Aun estás ahí Shaka? - preguntó Dohko al entrar al cuarto - Mira que se están yendo todos a la playa, ya casi han terminado de desayunar... - Dohko deja de hablar cuando se da cuenta que Ikki aun continuaba allí.
La puerta no estaba cerrada del todo y Dohko los ve a los dos muy juntitos en el baño, aunque para suerte de estos no alcanza a ver nada demasiado comprometedor. Si bien tratan de ocultar la agitación el santo de Libra - que no es ningún tonto - se acerca y les guiña un ojo.
- Se les pasó muy rápido el tiempo - les sonrió pícaramente a los más que sonrojados Shaka e Ikki -. Si se apuran podrán comer algo.
- Gracias por dejarme usar la ducha - salió Ikki del baño - Nos vemos luego - dijo con un tono nervioso no sin antes voltear hacia Shaka y guiñarle un ojo.
Ikki regresó con sus cosas a su habitación sin importarle si el resto del grupo o algún otro pasajero del hotel lo veía solamente cubierto con una toalla. Recién cuando entra al cuarto se toma unos segundos apoyado sobre la puerta para recuperar el aliento. No se da cuenta que los gemelos lo observaban sentados en una de las camas con una sonrisa pícara en sus labios hasta que Kanon no puede evitar que una risita ahogada se escape de su boca.
- ¿Eh? - percatándose de la presencia de Saga y de Kanon - ¿Qué pasa?
No contestaron, ahora los dos hermanos reían abiertamente.
- Es cierto que nosotros gritamos mucho cuando discutimos - dijo Saga mientras miró a Kanon por un momento - pero ustedes dos nos ganaron - absolutamente tentado de la risa.
- Tuvieron suerte de que ninguno del grupo estaba en el piso - añadió Kanon también riéndose -. La próxima vez bajen el volumen.
Ahí Ikki se dio cuenta de que los gemelos escucharon todo, bueno, después de todo ellos escuchaban tranquilamente la pelea entre ellos así que no les sorprendía aquello. ¡Demonios! ¡Justo lo que me faltaba! ¡Ahora tendré que soportar que este par de idiotas me moleste!, pensaba un enojado Ikki.
Sin decir nada el Fénix entró al baño y cerró la puerta, no tenía ganas de soportar las bromas de esos dos mientras se vestía. Cuando su cabeza estuvo más fría procesó todo lo que había hecho momentos antes con Shaka, no podía creer el hecho de haber terminado teniendo sexo con el caballero de Virgo. No estaba arrepentido, al contrario, pero en ningún momento lo había planeado. Ni bien terminó de vestirse salió corriendo hacia donde estaba reunido el resto del grupo sin dejar de pensar en todo lo ocurrido.

¡Hola! Uffffffff... Al fin termino éste capítulo, estuve varios días para hacerlo y creo que quedó bien (eso espero ' ). No olviden dejarme review comentándome que les pareció, ¿Sí? . Sucedieron muchas cosas y les aseguro que el próximo capítulo sucederán más además de adelantarles de un par de peleas XDDD (me pregunto si se imaginarán algo ya...). Bueno, ahora procedo a contestar los reviews:
Chubi: ¡Amiga! Perdona por no contestar tu review antes, pues me di cuenta de ello luego de que subí el capítulo. Pues te agradezco que pienses eso de mí, aunque no me considero la mejor (Varda se sonroja). ¡Y sí que me pone muy contenta amiga! Espero que te haya gustado este capítulo, muuuuuuchos besos y gracias .
Marina: ¡Hola! ¿Cómo estas? Me alegro que te haya gustado el capítulo, a Ikki no le gusta ni un poco que el pecesito lo persiga. La parte divertida va a venir en el próximo capítulo y espero que te haya gustado este. ¡Besos y gracias por el review!
Shadir: ¡Hola! ¡Gracias por el review! Seiya para mi no tiene muchas neuronas (o directamente no tiene XDDDD), lo que sí tiene es suerte para escaparse de los castigos, bueno, no siempre XDD. Soportar a Saori si que es un castigo. DeathMask si que va a querer usar su Sekishiki Mekai Ha para con Ikki, claro, no quiero jugarme a decir quien gana la pelea, pero Ikki va a querer matar a varios también. En algún momento se va a querer vengar de la "bromita". Espero que te haya gustado éste capítulo, ¡Besos!
Anfitrite: ¡Amiga! Una vez más gracias por tu idea. Ya habrás leído una pequeña introducción de como la aplicaré, en el próximo capítulo verás como se dan las cosas. ¿de quien está enamorado Shura? ¡Pues de Aioros! Aunque el pobre no se anima a decírselo, y te aseguro que no le será nada fácil. ¿Ya tenés una idea para un fic? (Varda salta de la alegría) ¡Ya quiero leer! Espero pronto leer algo tuyo por acá, ¿De que será? ¡Ahhh, no aguanto la espera! Bueno, espero que te haya gustado este capítulo, te mando muchos besos y gracias por el review.
Valsed: ¡Hola! Esa es la gran pregunta... DeathMask bastante problemas tiene para confesarle a Afro lo que siente y encima se corre el rumor que hay alguien detrás del pecesito. No le va a ser nada gracioso, te lo aseguro XDDDDD. ¡Besos y gracias por el review!
Shey de Virgo: ¡Amiga Shey! Pues contestar los reviews es una de las cosas que más me gusta hacer, y te agradezco a ti por dejármelos . Pues me alegro que te este gustando la cosa, en el próximo capítulo verás más a Shun y a Hyoga, no quiero dejarlos atrás, de hecho algo importante va a pasar (aunque no voy a decir nada XDDDDDD). ¿Un fic tuyo? ¡Genial! ¡Ya quiero leer! Espero que te llegue toda la inspiración necesaria. Y te aclaro que no voy a hacer sufrir a Mu (bueno... solo un poquito). Ya tendrá su oportunidad en este fic, yo adoro que Mu haga pareja con... (no lo voy a decir... aunque algunas que han leído mis fics - y tu también si llegaste a leer algún otro mío - saben quien es mi pareja preferida para Mu). ¡Te mando un beso enorme Shey!
Nebyura: ¡Amiga! ¿Cómo estás? espero que bien.Si, quedó algo corto el cap anterior, pero este - para compensar - quedó más largo, espero ue te gste. El próximo capítulo va a estar dedicado a la situación de DeathMask y Shura... Van a haber muuuchas cosas interesantes (aunque aun no escribí nada XD). ¡Te mando muchos besitos!
Dark Lady Iria: ¡Ya te extrañaba! Menos mal que tu pc volvió a funcionar amiga.Y debo decirte algo, la idea base de este fic fue tuya (cuano se te ocurrió la idea de hacer que Shaka diga Ikki estaba detrás de algun caballero), así que esto se debe a ti. Bueno, espero verte más seguido ahora por el msn. ¡Besos!
Bueno, eso es todo por hoy. Ya es bastante tarde por acá (o muy temprano XDDDD) y ya se me hizo de día. Les mando a todos un beso y espero que les haya gustado esta locura que escribí. Bye!