Hola a todos volví de nuevo, este capítulo personalmente no sé si me quedo muy bueno aún así espero que les guste, porque tengo para rato escribiendo.
Esta vez el capítulo esta inspirado en el libro "El libro de Merlín" un libro de magia encantamientos y conjuros de la editorial EDAF.
- Rorek- Raven estaba un tanto alarmada- yo soy de completa importancia para los planes de Trigón
-pero ¿Qué dices- Rorek tenía los ojos abiertos de par en par
-Ahora lo recuerdo…yo sabia que en alguna parte lo habia oído
Raven se puso de pie y comenzó a caminar. Rorek la tomó por el brazo y la detuvo.
-Antes de irte podrías explicarme- dijo con firmeza.
-Tienes razón tu me ayudarás con esto, por lo que es justo que sepas. Bueno no recuerdo todo- Raven levantó el libro e indicó la imagen en la que se encontraba con la pelota morada- El día que fue tomada esta imagen, yo tenía 7 años, justo la edad en la que mi madre escribió la carta. Ese día me encontraba aquí mismo jugando a atrapar mariposas. Misen estaba sentada en aquel árbol- Raven indicó un pequeño olmo a la mitad del jardín- nadie nos estaba cuidando, en el pueblo todos eran muy buenos, así que mi madre pensaba que nada nos pasaría, pero de pronto yo me comencé a sentir mal, Misen fue corriendo a pedir ayuda y yo quede tirada en forma fetal en el suelo. De pronto una figura se acercó a mí, era un hombre joven junto con un niño, el dolor se me quitó de inmediato, el niño me ayudó a levantarme…luego las cosas se me tornan un tanto confusas, pero recuerdo la última parte. El hombre me dijo que yo estaba destinada a seguir los pasos de mi padre, en ese minuto pensaba que era Fausto a quien se refería, y que el día en que las estrellas se alinearan yo iba a estar sentada junto a él y le otorgaría mis poderes para que el gobernara todos los mundos, en ese minuto no entendí nada solo tenía 7 años-Raven trataba de justificarse-Al ver mi cara confundida el hombre se acercó a mí y me dio aquella pequeña pelota y me revolvió el cabello. Luego dijo: Trigon hará maravillas contigo, princesa solo espera y verás. En ese minuto llegó corriendo mi madre, dejando a Misen y a Adria atrás al ver al hombre su cara se tornó pálida. El hombre me miró por última vez y nuevamente me revolvió el cabello y antes de irse se dirigió a mi madre y le dijo: el cabello es igual al de su padre. Luego de eso mi madre me cortó el cabello…ahora entiendo el porqué. Es por eso que creo que soy importante para Trigon, el hombre dijo que esperara y creo que el momento llegó.
Rorek miraba a Raven con detenimiento.
¿Y la pelota que te entregó el hombre era normal-dijo con un poco de duda
-supongo…la verdad es que aunque jugué mucho esa tarde con ella, al otro día no la encontré más.
-No creo que haya desaparecido misteriosamente-dijo Rorek especulando- supongo que tu madre no quería que la tuvieras.
-Supongo…y la comprendo- dijo nostálgica Raven.
-bueno vamos a tener que encontrar esa pelota, no creo que la haya botado, puede que haya pensado, al igual que yo, que es algo importante. Raven tendrás que buscar entres sus cosas-
La noche se esta esfumando y las lunas comenzaron a desaparecer de a poco para da lugar al emperador del día Dagda, sol que da vida y da muerte.
-Ya me debo ir- Raven miraba con los ojos entrecerrados el sol- hoy tengo una asamblea junto con el pueblo y además una con los príncipes- Raven desvió su vista y miro a Rorek- confío en que estés allí.
-Pero si yo no soy príncipe- dijo encarnando una ceja Rorek.
-Ya lo sé, pero eres de vital importancia por lo que necesito que oigas todo lo que se dirá en esa reunión.
-Esta bien estaré ahí, pero ahora necesito irme supongo que el príncipe Flash estará extrañando mi presencia- Rorek sacó una pequeña vara de su bolsillo e hizo un circulo alrededor de él. se paró en el centro murmuró unas cuantas palabras y a los segundos se encontraba suspendido sobre el aire- Hasta más tarde princesa.
-Raven te ves realmente divina- Misen terminaba de acomodar la capa a Raven – Aunque no sea de mis colores favoritos ese color de verdad te sienta.
Raven se encontraba de pie junto a un gran espejo. Su reflejo reflejaba su atractiva figura y su cara de ser alguien que habia crecido mucho en conocimientos en muy poco tiempo. Raven llevaba puesto un body azul oscuro ajustado, que era cubierto por una larga capa que le llegaba a los tobillos, de un tono más claro que el body. Como toda princesa llevaba algunas joyas, un cinturón y un prendedor de rubíes. Su cabeza era coronada por ramas florecidas del endrino sagrado del pueblo.
¿Tu crees que este sea la ropa apropiada para una reina?
Raven acomodo con cuidado la corona y miro a Misen restando importancia a lo que ella habia dicho.
-Sabes Misen, todo esto ha sido muy duro para mi. Me he enterado de cosas horribles, cosas que hubiera preferido no saber. ¿Misen que harías si supieras que soy un demonio?
Misen sonrió a Raven.
-Lo he sabido toda mi vida- dijo algo divertida.
-No juegues conmigo Misen no me refiero a tener carácter de un demonio, me refiero a ser un demonio de verdad
El rostro de Misen se ensombreció un tanto, con delicadeza se levantó y tomo una mano de Raven.
-te repito amiga, lo he sabido toda mi vida, bueno no toda mi vida, pero si desde que era muy pequeña.- Misen miraba a Raven con seriedad. Raven parecía sorprendida.
¿y por qué no me lo dijiste- dijo Raven soltándole bruscamente la mano.
-Acabas de decir que hay cosas que hubieras preferido no saber ¿y quien era yo para decírtelas? Si tu madre no te las decía yo no podía llegar y hacerlo.
Raven se sentó un tanto perturbada en la cama.
¿Cómo te enteraste- dijo desconcertada.
-Bueno, fue algo extraño. ¿te acuerdas de aquella pelota que te dio ese hombre, cuando teníamos como 6 años?
Raven abrió los ojos de par en par.
-Sí, teníamos 7 años- dijo sorprendida y ansiosa por lo que Misen iba a decir sobre aquella pelota.
-Aunque suene extraño esa pelota me lo dijo- misen jugaba con sus manos- Luego de que se perdió yo la encontré, a los meses después eso sí. Y la encontré en un lugar extraño, en un macetero. El grande que esta a la entrada de la visitas, en la torre.
¿esta ahí aún- dijo esperanzada Raven
-No, primero déjame terminar la historia- Misen le estaba reprochando- El día que la encontré yo iba un poco distraída corriendo por lo que accidentalmente boté el macetero. Me puse muy nerviosa por que esa planta tu madre la cuidaba mucho y el macetero era muy lindo y por suerte no se habia roto. Así que enderecé el macetero y comencé a colocar en él, la tierra que se habia desparramado. Pero en una de las partes que había quedado sin tierra se encontraba una pequeña caja. La tomé la abrí y ahí se encontraba la pelota, envuelta en un paño de seda. Me alegré de mi descubrimiento, te ibas a poner tan contenta cuando la vieras. Así que dejé la pelota en la caja y seguí echando tierra al macetero. Pero antes de terminar la caja se comenzó a mover y por curiosidad la volví a abrir, la pelota brillaba intensamente y yo la tomé. Al instante se torno carmesí y apareció una figura dentro de ella, era aquel demonio del otro día. Asustada alejé la cara de la pelota y en ese minuto comenzó a hablar.
¿la pelota hablaba- dijo sorprendida Raven.
-Pues sí.
¿Y que te dijo- Raven estaba impaciente.
-Me pregunto si acaso yo era tú. En ese instante la solté por el susto, pero siguió haciéndome aquella pregunta. Al rato cuando no paraba la volví a tomar y respondí que no que yo era Misen, tu dama de compañía. El se rió y me comento que si acaso yo sabía que el era tu padre. Yo le dije que el estaba mintiendo y que eso no podía ser y que era un monstruo, esa vez al igual que la otra noche, me dijo que era una niña muy grosera y que sería una buena adquisición como sirvienta. En ese instante tomé la pelota y la volví a meter en la caja. Asustada corrí hacía donde tu madre y le conté todo. De seguro para ella hubiera sido fácil negármelo… pero no lo hizo me dijo que ahora que yo sabia eso era que yo tenía que cuidarte mucho e informarle cada cosa extraña que te pasara. También me dijo que le hubiera gustado trillones de veces más que el rey fuera tu padre, luego me hizo prometer que no le contaría a nadie y me dejó ir.
Raven cerró los ojos más información se juntaba en su cabeza.
-Es por eso que antes de ir al baile te dije que a ella no podía no creerle, ella me había contado algo muy delicado y personal. Algo que no se le cuenta a una criada y yo debía recompensar su honestidad- dijo Misen con una leve sonrisa.
Raven suspiró y recordó que Rorek le había pedido la pelota.
¿y sabes donde esta la pelota- preguntó Raven
-no, se la entregué ese día a tu madre y ella la guardo en un cajón con llave.
¿Sabes en que cajón?
-Sí- dijo sorprendida Misen.- pero ¿para que la quieres?
-Rorek me la pidió- dijo natural Raven
-Y como sabe él de la pelota
-Es una historia muy larga, ahora vamos a buscar esa pelota.
Misen y Raven se dirigieron al cuarto que había sido de su madre, pero antes de siquiera poder entra fueron interrumpidas por Morrigu la hermana pequeña de Misen.
-Hey, que haces aquí Mori- dijo Misen extrañada.
-Mamá dijo que las dos deben subir rápido a la torre, el pueblo ya esta reunido- dijo alegre la pequeña niña de unos 8 años.
-Esta bien, Misen luego haremos "eso". Ahora subamos todas juntas a la torre.
Raven llegó hasta el balcón desde el que iba a tener que hablar. Estaba muy nerviosa, esta vez no tenía que llegar y sentarse al lado de su madre, esta vez debía cumplir el rol de su madre y hablarle al pueblo. Tomó aire y salió con la cabeza en alto al balcón.
Contempló con miedo unos segundos a todo el pueblo reunido abajo. Y vio como algunos parecían sorprendidos. De seguro era por el vestuario, como habia dicho Misen. Volviendo a restar importancia a esto comenzó a hablar.
-Reino de Azarath, os he pedido que os juntéis este día para celebrar una asamblea extraordinaria a las que estaban fijadas anteriormente. Y es que últimamente han pasado cosas desagradables en nuestro reino.
El ataque de aquel demonio y sus sombras nos han quitado a nuestra reina, mi madre. Por descendencia soy yo quien debe tomar su lugar- hubo algunos murmullos aislados de parte de los oyentes- es por eso que me presento hoy ante ustedes no como la Princesa Raven, sino que como la Reina Raven y espero que todos estén conformes con eso.
Desde que supe que iba a tener que tomar el lugar de mi madre, comencé a pensar en algo que pudiera mantenernos a raya de futuros ataques del demonio y sus sombras. Porque compatriotas os aseguro que los ataques seguirán, ya que el mismo demonio me lo dijo. Aún así no estoy segura de las razones de esos ataques- Raven se sintió incomoda por tener que mentir- Pero si de algo estoy segura es que el demonio va a ser derrotado.
Por años nuestro pueblo ha sido pacífico, reyes anteriores han aceptado que el pacifismo es la mejor forma de vivir y lo hemos comprobado. Lamento decir que mi reinado tendrá que comenzar con una posición bélica ante nuestros enemigos, seres de otras dimensiones que tratan de hacernos la guerra.
Aún así no os preocupéis que ningún habitante de este reino tendrá que ir a la guerra a excepción de mí, que tengo una batalla personal con aquel demonio. Es por eso la extraña vestimenta que uso hoy. Una vestimenta de batalla que refleja la posición de nuestro pueblo en estos días y vengo coronada con ramas del endrino sagrado del pueblo, para recordar la paz que nos caracteriza y que volverá apenas sea derrotado el ruin demonio.
Muchos de ustedes deben sentirse alarmados, y con razón, pero yo trataré de calmarlos diciéndoles que el mago Morrow se ha ofrecido para, desde mañana, emprender un viaje para hallar un hechizo que pueda derrotar por completo al demonio y me ha encargado decirles como pueden mantener a las sombras llamadas súbditos del infierno, lejos de sus casas. Para esto cada uno tendrá que poner frente a la puerta de sus casas, pongan atención a esto, una cruz verde, de ningún otro color más que verde. Además yo he iniciado la labor de preparar una infusión que al ser rociada sobre los súbditos los devuelve al infierno. La distribución de esta infusión será en tres días más.
Además debo decirles que con fondos del reino se han contratado magos de diversas regiones que velaran, por la seguridad del pueblo- esto había sido planeado por el mago Morrow, desde el mismo día en el que el demonio habia aparecido, por lo había escrito a distintos colegas para que vinieran a ayudar al pueblo.
En unos momento más se celebrará una reunión con príncipes y reyes de otras naciones, en esta reunión espero obtener alguna ayuda de ellos. De todas cualquier novedad les será informada.
Por último quiero agregar que espero que se sientan seguros porque les juro que no dejaré que nada les pace.
Raven estaba dispuesta a dejar de hablar en ese momento, pero de pronto se detuvo. Los miró fijamente a todos y nuevamente comenzó a hablar.
-La verdad es que hay otra cosa que quiero decirles y es que, yo…yo tengo poderes –hubo una exclamación de parte del pueblo y Raven les hizo una pequeña demostración levantando unos jarrones que se encontraban abajo entre los aldeanos. Luego miró a la gente, para ver como reaccionaban y para su sorpresa todos estallaron en aplausos y escuchó varios comentarios positivos, aún así también escuchó a gente que se preguntaba de donde los había obtenido en forma perspicaz. Lo último no le importó, así que anunció el principio del banquete que había organizado para el reino y se ocultó nuevamente en el castillo.
Raven se juntó con Misen en silencio, las dos sabían a donde iban y aunque nadie hubiera entrado a la habitación de la reina Arella desde su muerte ellas tenían que hacerlo.
Raven giró despacio el picaporte de la puerta, la puerta se abrió y con un pequeño crujido. La habitación estaba tal cual aquel funesto día. Sobre la gran cama había un ramo de flores seco, que aquel día Misen había dejado sobre ella.
Las dos chicas entraron sigilosamente y con sumo cuidado cerraron la puerta detrás de si.
¿Cual es el cajón en donde guardo mi madre la pelota- preguntó en silencio Raven
Misen se acercó a la mesa de noche del lado izquierdo de la mesa de su madre y le indicó el pequeño cajón. Raven trató de abrirlo, pero estaba con llave, así que con suma delicadeza dirigió sus poderes hasta la cerradura para romperla. El cajón se abrió fácilmente. Raven comenzó a escarbar el cajón, mientras Misen, nerviosa, estaba apoyada en la puerta de la habitación.
Entre las cosas que Raven encontró en el cajón había una Biblia, algunas flores secas y una pequeña caja. Raven levantó la caja y se la mostró a Misen.
¿esta es- dijo esperando una respuesta afirmativa.
Misen la miró por unos momentos y luego de pensarlo un poco asintió. El corazón de Raven se aceleró. Con rapidez abrió la caja, pero para su sorpresa dentro de ella solo se encontraba un pequeño paño.
-No está- sentenció Raven un tanto decaída.
¿Estas segura- dijo sorprendida Misen
-sí ¬¬, acaso crees que soy ciega.
Misen se acercó para examinar la caja.
-pero estoy segura de que era esta caja- Misen miraba detalladamente la caja.
-Bueno a lo mejor la dejó en otro lugar luego que te fuiste…en verdad hubiera sido extraño que la encontráramos. Bueno ya no tenemos nada que hacer vamos nos- Raven se levantó y se dirigió hacía la puerta, pero Misen seguía mirando la caja- Misen ya déjalo vamos.
-Eureka- dijo Misen con felicidad.
¿Eureka qué- preguntó atónita Raven, mientras veía a Misen despegar el papel que recubría la parte interior de la caja.
-Mira- Misen despegó totalmente el papel y de él salieron una serie de papeles. Raven tomó los papeles y comenzó a leerlos.
¿pero qué es esto?
Los papeles no tenían un tema definido. Uno de ellos recitaba con letras escarlata:
Donde las hojas caen.
El más largo decía:
Belth es el nombre del bello faisán de color blanco.
El último papel que era el más doblado, solo tenía escrita una palabra: BOSQUE
Raven leyó una y otra vez los papeles sin comprender .Al rato llegó a una conclusión de la que no estaba cien por ciento segura.
-La pelota esta en el bosque, de eso no cabe duda. Puede que…- Raven mordía su labia tratando de llegar a una respuesta- debe estar por el sector oriente del bosque.
¿Como lo sabes- preguntó intrigada Misen
-por este papel- dijo Raven indicado el que recitaba donde las hojas caen- el lado oriente es el que menos visitado, porque mientras en verano y primavera es muy hermoso en invierno y otoño es seco y desolado lo que hace que se cuenten terroríficas historias acerca de aquellos lugares, esto sucede porque los árboles que ahí están plantados son de hojas caducas. Caen en otoño y en primavera vuelven a florecer. En cambio en el lado poniente solo hay árboles perennes plantados, dan hojas todo el año. Por eso creo que la pelota esta escondida en el lado Oriente.
-Eso suena lóg…- Misen no terminó de completar la frase cuando se sintió el ruido de la escalera que subía hasta la puerta de aquella habitación. Rápidamente Raven escondió en sus zapatos los papeles y junto con Misen salió corriendo de la habitación de su madre.
Era gracioso lo que hacían escondiéndose para que no las pillaran y es que en vida su madre nunca dejaba que alguien entrara en su habitación sin su autorización o sin pagar las consecuencias y aunque ahora estuviera muerta todos seguían acatando esa orden.
Cuando Misen y Raven, ya habían llegando a la habitación de esta última. Dieron un hondo suspiro.
-de la que nos salvamos- dijo Misen pasando una mano sobre su frente- ahora solo falta que deduzcas el otro papel, el del faisán ¿alguna idea?
-La verdad es que no- dijo Raven mientras lo miraba- creo que se lo pasaré a Rorek tal vez el entienda.
-Hablando de Rorek ¿qué pasa entre tú y é han estado demasiado juntos últimamente?
¿a que te refieres- dijo Raven levemente sonrosada.
-Bueno, es el primer chico que recibes en el castillo sin chistar, además de que los vi anoche en el estanque- dijo Misen con un tono perspicaz y una sonrisa en la cara.
-Bue... bue… quiero decir entre él y yo no pasa nada- dijo en un sentenciador Raven- el solo nos ayudará con lo de Trigon porque es un gran mago y porque sin querer le revelé que era hija de ese demonio.
-No te creo- dijo Misen- creo que aquí hay algo más ¿acaso no has visto como te mira?
-No- dijo impresionada Raven. Luego de quedarse un rato pensando añadió. Además no deberías hablar así Misen yo estoy comprometida.
-A mi no me engañas Raven, a ti no te agrada del todo el príncipe Flash. El día del compromiso saliste huyendo y por eso te encontraste con Trigón. Ahora que tu madre ha fallecido de lo más bien puedes anular ese compromiso.
-No es tan fácil Misen. Tú propones que anule mi compromiso con el príncipe Flash y me comprometa con Rorek. Pues bien eso no podría pasar si anulara mi compromiso con el príncipe Flash, no creo que el me permita el casarme con el mago de su reino, ya que es su súbdito. Además yo quiero casarme con el príncipe Flash. Mi madre en vida parecía feliz con ese compromiso y yo la quiero hacer feliz en la vida eterna también.
-Pero Raven, tu madre no querría que fueras infeliz casándote con quien no amas, yo creo que en vida hubiera accedido a la cancelación de ese matrimonio.
-Pero esta muerte- Raven estaba demasiado seria- ya nunca sabré si hubiera accedido. Pero bueno hoy anunciaré en el banquete con los príncipes el compromiso, pero atrasaré la fecha, mi cumpleaños esta a solo unas pocas semanas y con todo lo que está pasando no tendremos suficiente tiempo para arreglarlo todo.
-Esta bien y hablando del compromiso con los príncipes ya esta siendo hora que te cambies de ropa. Los invitados comenzaran a llegar en cualquier momento.
Flores de endrino adornaban toda la larga mesa cubierta con manteles carmesí que iban a tono con el respaldo de las imponentes sillas de roble. Delante de cada silla habia puesto un cáliz de plata y delante de cada cáliz y sentados sobre las majestuosas sillas estaban los invitados al banquete organizado por la Reina Raven de Azarath.
En la cabecera de la mesa se encontraba sentada la reina, majestuosa, llena de bellas joyas y una corona ataviada de piedras preciosas. Todos la miraban sorprendidos por la señorialidad que la rodeaba. Muy delicadamente la reina se levantó de su asiento y comenzó a hablar.
-Princesa Starfire, Príncipe Speedy, Rey Logan, Príncipe Robin, Príncipe Cyborg, Príncipe Flash y Mago Rorek- Raven miraba a cada una de las personas que nombró- los he citado hoy para un banquete, pero más importante que eso los he citado hoy para pedir su ayuda. En el reino de Azarath estamos viviendo críticos momentos, por el ataque de seres de otra dimensión. Estos ataques me han puesto en la obligación de recurrir a ustedes en busca de alguna ayuda que puedan ofrecernos. Nuestro Reino les estaría por siempre agradecido y yo personalmente también.
Todos quedaron un momento en silencio. Hasta que el príncipe Robin se levantó de su asiento y tomó la palabra.
-el reino Gótico, no es un reino pacífico al igual que suyo estimada reina. Si alguien nos busca pelea nosotros peleamos, por eso cuente con una gran cantidad de hombres para tratar de matar a ese demonio.
-Gracias por su colaboración, príncipe Robin, me llena de jubilo el saber que nos ayudan- El príncipe Robin se sonrojó un momento nervioso por la penetrante voz de Raven- pero debo rechazar su oferta, no quiero que su gente muera en vano. Este demonio es muy fuerte como para ser matado por gente común y corriente. Es por eso que solo podemos poner a luchar contra él gente capacitada, como magos o gente con poderes que salgan de los humanos.
-Agradezco la preocupación por mi pueblo, Reina. Lamento decir que no cuento con muchas personas capacitadas mágicamente en mi reino, pero sin duda la que este capacitada la mandaré a la lucha además de a mi mismo. No tengo poderes sobre naturales, pero soy un gran estratega- esto último el príncipe Robin lo dijo con modestia aparte. Raven pareció contenta con el ofrecimiento y antes de que pudiera agradecerlo comenzó a hablar el príncipe Speedy.
- Estimada reina, lamento comunicarle que yo no puedo mandar gente a luchar contra el demonio, hace poco una gran peste azotó a regiones de mi reino, por lo que me veo muy disminuido de gente. Yo mismo no puedo ir, porque he prometido a mi madre no me metería en más conflictos. Pero puede estar segura de que el Reino de Hood, puede albergar a mucha gente que tenga miedo de permanecer aquí y esa gente podrá volver acabado los conflictos. Además que mi reino posee gran cantidad de hierbas mágicas que le pueden ser de utilidad para preparar la poción que he oído va a entregar al pueblo.
Esto es genial- pensó Raven- no creí que fueran a ayudar tanto
-Reina Raven- desde el fondo de la mesa se había levantado la hermosa princesa Starfire- yo misma vendré a la pelea y traeré conmigo un ejercito de tiradores de Star Bloths.
¿Star Bloths- Raven no tenía ni más mínima idea de que era eso.
-Sí- dijo sintiéndose orgullosa Starfire- le haré una demostración- La princesa Starfire se alejó un tanto de la mesa y apuntó su mano hacia un macetero cercano, el que hizo explotar luego de arrojarle un rayo verde que salió de su muñeca. Todos parecieron sorprendidos- esta batalla me la tomó muy enserio querida Reina, ya que por desgracia mi hermana se ha unido a las fuerzas de ese demonio y es mi deber revindicarla a las fuerzas del bien.
Al instante para no ser menos se levantó el Rey Logan y habló muy fuerte para que todos se concentraran en él.
-estimada reina Raven- comenzó a decir de forma aduladora- yo le ofreceré mi ayuda. Un ejército de magos y varias provisiones mágicas, pero todo a cambio de algo.
Raven lo miró sorprendida y todos los demás invitados lo miraron con el entrecejo fruncido, ya que se suponía la ayuda debía ser incondicional.
-Puede decirme lo que desee y si creo que es apropiado puedo dárselo- dijo con le mejor tono que pudo Raven, para no parecer altanera o egoísta.
-La quiero a ella- dijo indicando a Misen que estaba de pie junto a Raven.
Misen se sonrojó completamente y luego miró indignada al rey Logan. Todos hasta Raven quedaron totalmente estupefactos. La cara de sorpresa de los invitados pasó de sorpresa a indignación.
-estimado rey Logan- dijo Raven muy seria- no acostumbró a comerciar gente y menos si es una de más queridas amigas- si las miradas mataran El rey ya estaría 16000 metros bajo tierra.
Antes de que el rey contestara algo malo, el príncipe Cyborg se puso de pie y comenzó a hablar.
-Discúlpelo Reina- dijo en tono benévolo- Conozco a Logan desde hace mucho tiempo y se que esta hablando en broma. ¿CIERTO LOGAN- dijo con un tono amenazante
-Jejeje pues sí, tómenselo con humor para que estar tan serios- dijo este último al notar que a nadie le había parecido gracioso y todos lo seguían mirando con reproche. Para distraer las miradas el príncipe Cyborg siguió hablando.
-Cuente con nuestras fuerzas, mías y del rey Logan, para destruir a ese demonio. Los dos nos presentaremos en batalla.
El único que faltaba por prestar ayuda el era el príncipe Flash.
-estimada reina, yo tengo un especial sentimiento por usted y por su pueblo- Rorek lo miraba con odio- lo que me hace querer ser muy generoso. Es por eso que a petición suya le concedo el derecho a mi mago Rorek- dijo de pie señalando educadamente a Rorek, para que los presentes notaran de quien estaba hablando- de impartirle clases para controlar sus maravillosos poderes. Además de apoyo económico para reparar cosas que puedan dañarse con la batalla de tal magnitud que se efectuará en este lugar. También enviaré a las conocidas sacerdotisas de Gordón apara que velen por sus aldeanos- Flash tomó asiento y Raven se puso de pie
-les agradezco a todos sus generosas ayudas no esperaba menos de gente tan noble. Ahora para dejar de hablar de cosas malas quiero que compartan conmigo la deliciosa comida que Uther, el cocinero ha preparado para todos nosotros.
Misen se fue a la cocina a avisar que ya podían servir los platillos, pero no volvió al parecer no quería ver ni n pintura al rey Logan.
Todos se sirvieron los deliciosos platos que había preparado Uther, un maestro de la cocina. El rey Logan era vegetariano, pero Misen ya le había dicho eso a Raven que mandó a preparar un menú especial para él.
Luego de que todos se hubieran maravillado con las delicias culinarias. Raven volvió a levantarse de su asiento.
-Quiero terminar este banquete con una noticia que espero los alegre. Esto es acerca del príncipe Flash y yo- el aludido miró con curiosidad a Raven, mientras Rorek la miraba como esperando que en ese minuto quedara muda- Mi madre había hecho un contrato de matrimonio con el príncipe Flash, contrato que a pesar de que ella no se encuentre ya en el mundo de los vivos yo no pienso romper. Y es por eso que les quiero comunicar a todos que mi compromiso sigue vigente, eso si la boda podrá recién comenzar a planearse ya derrotado el demonio. Desde hoy y hasta siempre el príncipe Flash puede hacer visitas cuando desee a mi humilde morada.
El príncipe Flash se levantó sonriente y dio la mano a un aturdido Rorek, que miraba a Raven como si acabara de decir que el mundo se iba a acabar.
Sanra y Shira se habían apoderado nuevamente del cielo alumbraban gloriosamente el reino de Azarath.
Raven estaba sentada en el borde del estanque del jardín. Estaba cansada, había echo muchas cosas y además los invitados se habían quedado alojados en el castillos, por lo que había estado hasta tarde atendiendo gente junto con Misen. Pero aún así todavía estaba despierta esperando a Rorek, ya comenzaba a pensar que no venía cuando lo vio aparecer por la salida del castillo.
-Rorek, por fin llegaste ya pensé que no venías ¿acaso Misen te dio muy tarde el mensaje?
-No ¿de que quiere hablar reina- dijo Rorek seriamente.
-Bueno… de nada en especial. Solo quería saber cuando iban a ser las clases y ver si podíamos conversar un rato- dijo impresionada Raven por el tono de Rorek.
-Las clases comienzan mañana y no me parece apropiado charlar con usted a estas horas asó que con su permiso me retiro- Rorek dio la media vuelta y comenzó a caminar
-Un momento ¿Qué rayos te pasa¿Por qué ahora no es apropiado charlar conmigo a estas horas si ayer lo hicimos- preguntó exasperada Raven
-Por que ahora las cosas cambiaron, usted es la prometida de mi amo el príncipe Flash.
-Eso no tiene nada que ver, ayer también lo era.
Rorek miró fijamente a Raven.
-Lo se es solo que…
¿Solo que a ver quiero saber cual es tu explicación- dijo molesta Raven
-solo que ayer no era lo mismo que hoy.
¿por qué no?
-Porque después de todo lo que habías dicho de que no te querías casar con Flash no pensé que el compromiso todavía tuviera validez.
-Pero y eso que tiene que ver no estamos haciendo nada malo, solo quería que charláramos - dijo pasivamente Raven
-Todo es tan fácil para ti, pero para mí no- dijo firmemente Rorek.
-Si es complicado para ti es por que tu complicas las cosas
-No Raven, eres tú quien las complica.
¿YO? Pero que he hecho yo
-reanudaste tu compromiso con Flash
¿y eso qué? deberías alegrarte por él es tu príncipe
-vamos Raven, pensé que eras una persona más perspicaz.
¿a que te refieres?
¡¡¡¡¡¡AL HECHO DE QUE COMO RAYOS ES POSIBLE QUE NO TE DES CUENTA DE QUE TU ME GUSTAS- dijo Rorek con una mirada furiosa.
-….
-Lo siento- dijo con tristeza en su cara Rorek- pero es que yo pensé que como habíamos hablado en el baile y como yo soy el primero al que le contaste que eres mitad demonio, bueno pensé que a lo mejor algo podía haber entre nosotros.
-….- Raven no sabía que decir.
¿solo dime una cosa?
¿Qué?
¿estas segura de que no sientes nada por mi? – Raven dudo unos segundos ¿sentía algo por él? pero luego recordó que eso ya no importaba, ella habia dado su palabra para casarse con el príncipe Flash y una reina nunca niega su palabra.
-Estoy segura- dijo sin vacilar.
Rorek la miró fijamente, despacio comenzó a acercarse a Raven hasta que solo milímetros los separaban. El corazón de Raven latía fuertemente. Rorek tomó la cara de Raven entre sus manos y de apoco fue acortando esos milímetros, hasta que sus labios se juntaron suavemente junto a los de Raven.
Raven sentía que algo se movía en su estomago y eso la inquietaba, se sentía extraña. Rorek separó sus labios de los de Raven, se alejó un poco y la miró a la cara.
-ahora ¿estas segura de que no sientes nada por mi- dijo esperanzado Rorek.
Raven estaba totalmente confusa ¿que era lo que habia sentido en su estomago? esa sensación.
-repito Raven ¿estas segura de que no sientes nada por mi- dijo Rorek paciente.
-Sí, estoy segura- Raven no estaba segura, pero ya no habia nada que hacer era mejor que las cosas se quedaran así.
-Pues bien- Rorek soltó delicadamente la cara de Raven y se comenzó a alejar de ella.
-Rorek, lo siento, pero podemos ser amigos- dijo Raven un tanto triste.
-Amigos…sí, amigos- contestó este triste- bueno yo mejor me voy, las clases serán mañana después del almuerzo- Rorek comenzó a caminar en dirección al bosque.
¿A dónde vas? El castillo no esta en esa dirección- le gritó Raven
-solo voy a dar un paseo dijo levantando una mano y se alejó de Raven.
Cuando la espesura del bosque ya lo había cubierto por completo y estaba seguro de que Raven no lo estaba viendo Rorek se echó al suelo, luego desesperado se levantó y comenzó a patear todo lo que encontró en su camino.
-Raven me esta mintiendo estoy seguro- dijo con firmeza- entre los dos hay algo lo siento…o a lo mejor de mi parte hay algo y solo he visto que he querido ver. Maldición Rorek ¿por qué eres tan estúpido?
Rorek comenzó a correr, quería huir de todo, quería alejarse del castillo, de Raven de Flash y de lo que pensó había sido un romance.
Al rato de correr se sintió cansado, había descargado mucha energía pateando árboles, así que decidió sentarse. Frente a él había un pequeño lago, del que seguramente bebían los animales del bosque. Se sentó en un tronco seco. El paisaje era hermoso, los rayos de las lunas se escabullían entre los árboles y se reflejaban en el agua. Pero Rorek no notaba eso, estaba demasiado enojado como para notar la belleza del paisaje. Recogió un puñado de pequeñas piedras del suelo y comenzó a lanzarlas con ira al lago.
¿Qué te ha hecho el lago para que lo odies tanto- dijo risueña una voz femenina.
Rorek se levantó del tronco y se puso en posición de combate, rayos de luz comenzaron a emanar de sus manos.
-Pero que agresivo, no pensé que mi comentario te fuera a molestar tanto-
De la oscuridad que proporcionaba un árbol emergió la figura de una muchacha. La chica tenia el largo cabello rubio atado en una gran trenza, los ojos castaños miraban a Rorek como analizando a su presa y la blanca piel brillaba al son de los rayos de las lunas. Estaba extrañamente vestida, un vestido corto de color verde, con una camisa rosada y mallas de armadura, que le llegaban a las rodillas, debajo de él.
La apariencia de la chica era tranquila, pero Rorek no bajó la guardia.
-Niño agresivo, puedes bajar la guardia te juro que no te haré nada- dijo divertida la chica
¿Quien eres- espetó Rorek intranquilo
-Relájate, no muerdo…bueno a veces sí y respondiendo a tu pregunta yo soy yo
¿Cuál es tu nombre- corrigió avergonzado Rorek.
-Ginebra, mi nombre es ginebra.
HOLAS SOY YO ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO LA HISTORIA, EL PRÓXIMO CAPITULO AÚN NO LO EMPIEZO, PERO LO TENGO PENSADO ASÍ QUE LUEGO LO SUBIRÉ, SOY RAPIDA ESCRIBIENDO,
Algunos avances del próximo capitulo:
·más acerca de Ginebra
·lo que siente Raven, respecto a Rorek luego del beso
·el hechizo de Lea mariposa.
·El niño y el hombre que vio Raven a sus 7 años
Todo esto y más en el próximo capitulo
¡Ah! Quería agradecer los reviews son poquitos, pero espero que aumenten.
Atte.
Cleo
